Resumen - Introducción Al Derecho - Carlos Mouchet
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PARTE PRIMERA
TEORIA DEL DERECHO
CAPÍTULO I
EL DERECHO
1. Origen y significados de la palabra derecho.- 2. Regulación de la actividad humana:
Reglas técnicas y normas éticas.- 3. Las normas Jurídicas.- 4. La religión y el derecho.-
5. La moral y el derecho.- 6. Teorías acerca de la moral y el derecho.- 7. Distinciones entre la
moral y el derecho.- 8. Los usos y convencionalismos sociales.- 9. Definición del derecho.- 10.
El fundamento del derecho.- 11. El derecho natural.- 12. El derecho natural y el positivo.- 13. El
derecho y la vida social.
A partir del siglo IV de la era cristiana comenzó a utilizarse la palabra directum (participio
pasivo de dirigere: guiar. conducir), para indicar el conjunto de normas religiosas que
orientaban la vida humana por el camino recto.
Este enfoque distinto que va de la conducta lícita jus) a la norma que la impone (derecho), hizo
que se abandonara la expresión romana.
Pero también se adoptó otro punto de vista más personal, al designar como derecho a todas las
prerrogativas que tienen los seres humanos para obrar lícitamente frente a los demás. A este
significado se lo llama derecho subjetivo; al primero, Objetivo.
Hay, por lo tanto, dos puntos de vista en la palabra derecho: por un lado es un conjunto de
normas que se imponen al ser humano, por el otro es una serie de facultades que éste puede
utilizar en su provecho.
1º El derecho desde el punto de vista objetivo, constituye un conjunto de normas que rige
obligatoriamente la vida humana en sociedad.
2º El derecho desde el punto de vista subjetivo, consiste en la facultad que tiene cada uno para
obrar en cierto modo frente a los demás.
Estos dos sentidos que podemos distinguir en la palabra derecho son complementarios: la
facultad deriva siempre de la norma que la reconoce o consagra: y, a la inversa, la norma
carece de aplicación efectiva si no hubiera sujetos capaces de ponerla en ejercicio.
Dejaremos de lado por ahora el derecho subjetivo (que será tratado en el Cap. V),para
referimos exclusivamente al derecho objetivo.
Concebido este como un conjunto de normas que rige obligatoriamente la vida humana en
sociedad, preciso es referirse a los demás órdenes o sistemas normativos que regulan la
conducta de los hombres.
Pero en cuanto contemplamos la actividad consciente del hombre, vemos que su actividad está
librada a ellos mismos: pueden decidirse, hacer o no hacer. Pues al estar dotados de voluntad y
de razón, los hombres pueden utilizar estas facultades con entera libertad.
En este reino de la libertad los actos humanos pueden ser considerados, o bien de acuerdo al
resultado que se proponen conseguir (el arte), o bien en sí mismos (la ética), con prescindencia
de su finalidad inmediata y particular.
En el dominio de la ética, los actos humanos pueden ser considerados en sí mismos teniendo en
cuenta la bondad y perfección misma del hombre que actúa, o bien el libre uso que hace de sus
facultades. Su finalidad consiste en establecer las reglas a las cuales debe ajustar el hombre su
conducta; indican lo que debe ser. Las normas éticas indican, como debemos obrar para que
nuestra conducta sea recta.
A veces, un mismo acto es regulado simultáneamente de las dos maneras, pero siempre es
posible distinguirlas.
La normatividad ética puede subdividirse en dos grupos: las normas morales, que persiguen el
bien individual mediante la práctica de las virtudes; y las normas sociales, que ordenan en el
sentido del bien común las relaciones recíprocas de los hombres.
a) Ante todo, existe en el derecho un elemento moral, que fija las bases fundamentales de la
convivencia humana distinguiendo lo bueno de lo malo, lo justo de lo injusto, y es de por si
inmutable y universal. Ejemplos: “los hijos deben respeto y obediencia a sus padres", o que
'todo el que ejecuta un hecho, que por su culpa o negligencia ocasiona un daño a otro, está
obligado a la reparación del perjuicio" (arts. 266 y 1109 - Cód.Civil).
b) Luego un elemento social, que señala los caracteres secundarios del ordenamiento jurídico
determinando lo permitido, lo ordenado y lo prohibido, que es variable al infinito según las
circunstancias de tiempo y lugar, y que deriva tanto de la razón como de la experiencia.
Ejemplo: varían según las necesidades de cada época y de cada país. Las circunstancias
geográficas, históricas, económicas y políticas determinan la sanción de esas nuevas normas
sociales.
c) Por último, el derecho se compone también de reglas técnicas, que señalan los medios de
que deben valerse los hombres para alcanzar los fines permitidos por el derecho.
De este modo, las normas jurídicas constituyen el principio arquitectónico del derecho, lo que le
da su forma y su sentido, el sistema mediante el cual se ordenan los actos humanos a fin de que
estos se ajusten a las exigencias y necesidades de la comunidad.
El ordenamiento por él creado regula en parte la conducta humana, y por lo tanto integra el
reino de la libertad.
Dentro de ese reino de la libertad, el derecho tiene principalmente un contenido ético que lo
convierte en una ciencia normativa. Sus bases fundamentales provienen de la moral (derecho
natural). Pero la mayoría de las normas jurídicas son normas sociales, establecidas para regular
adecuadamente los infinitos problemas que suscita la convivencia humana, por último, hay
también reglas técnicas que convierten al derecho en un arte.
Pero además las normas jurídicas tienen una característica general que hasta ahora no hemos
mencionado: su obligatoriedad.
4. LA RELIGIÓN Y EL DERECHO
5. LA MORAL Y EL DERECHO.
6. TEORÍAS ACERCA DE LA MORAL Y EL DERECHO
El cumplimiento de las normas morales no puede ser coactivamente reclamado, y sí puede serlo
el de las jurídicas.
Teniendo en cuenta las reservas formuladas, podemos llegar a la conclusión de que en términos
generales las normas jurídicas se caracterizan por ser bilaterales, coactivamente exigibles y
heterónomas.
Comprenden los preceptos del decoro, el honor, la moda, la cortesía, los hábitos colectivos y las
costumbres sociales que se practican en una comunidad determinada, y que por imposición del
medio revisten carácter obligatorio y coercitivo para todos los individuos que integran
esa comunidad.
En cambio, todos los preceptos que rigen las relaciones con los demás participan de las
características generales de las otras normas éticas que hemos estudiado: imponen deberes,
son obligatorios, y entrañan sanciones en caso de ser violados.
¿Cómo distinguir, entonces, estos usos colectivos de la moral y el derecho?
Respecto a la primera, es fácil establecer la diferencia. Los usos sociales no tienen ningún
contenido moral, porque no aspiran a la perfección de los individuos, ni a que tengan una
conducta virtuosa. Son exigencias colectivas fundadas en sentimientos, opiniones, modas más o
menos pasajeras, necesarias a veces para la conservación del orden social.
Por el contrario, tienen muchas características análogas a las del derecho. Su origen social, su
carácter obligatorio, su poder coercitivo, ponen en evidencia su íntima semejanza.
No existe en realidad -y lo mismo ocurre entre la moral y el derecho- una diferencia substancial
entre los usos sociales, por un lado, y las normas jurídicas por el otro, en cuanto se refiere a
su contenido.
Establecidas las relaciones y diferencias que existen entre el derecho y los demás sistemas
normativos, resulta posible señalar con mayor precisión las características de aquél.
Y por último, ese ordenamiento tiene una finalidad principal, que es también la que le asigna su
único fundamento legitimo: la realización de la justicia.
Podemos, por lo tanto, definir el derecho como “un ordenamiento social impuesto para realizar
la justicia”. Pero esta definición requiere ciertas explicaciones complementarias.
Esta organización pretende establecer, un orden en la vida social; un orden espiritual, subjetivo,
que se realiza mediante la aceptación de las normas por parte de la comunidad.
Si nos referimos ahora al origen de las normas jurídicas. Podemos advertir que es también la
sociedad quien directa o indirectamente las sanciona.
Impuesto, vale decir, establecido con carácter obligatorio. El sujeto a quien se dirigen está
constreñido a observarlas, y puede ser compelido a hacerlo.
La imposición de la norma, ¿de quién deriva? Es en primer término el Estado, por medio de sus
diferentes organismos, y en especial mediante los tribunales de justicia, el encargado de aplicar
la sanción.
Para realizar la justicia. El derecho tiene por objeto establecer un orden justo. Para que la
norma jurídica tenga fundamento, se requiere, en efecto, que exista una adecuación entre ella y
un principio superior; es necesario que la norma que se dicte se funde en la razón y tienda
a realizar el fin que debe proponerse; ese fin no es otro que la justicia.
¿De dónde deriva el carácter obligatorio de la norma jurídica? en otros términos, ¿cómo se
justifica la existencia de ese ordenamiento?.