Preguntas Poderosas para Profesionales de RRHH
Preguntas Poderosas para Profesionales de RRHH
Preguntas Poderosas para Profesionales de RRHH
com/2013/02/14/potenciar-el-rol-estrategico-de-rrhh-
una-clave-de-exito-empresarial-en-la-economia-del-conocimiento/
Exploremos las preguntas que un profesional de RRHH de estos tiempos debería plantearse con
abierta honestidad y decidido propósito de enmienda, si decide ser participe de la reinvención
de su área funcional, e iniciar un proceso de deliberada reflexión personal, para asumir su
desarrollo profesional futuro con mínima incertidumbre.
Para tal fin definiremos una serie de preguntas relevantes a distintas áreas que conforman la
función de Recursos Humanos. Colocaremos el acento en la generación de respuestas, que
aparte de provocar tensión creativa y entrañar posibilidades ciertas de aprendizaje, inspiren un
curso de acción suficientemente expresivo, para incrementar la madurez de Recursos Humanos,
y gracias a ello, potenciar la capacidad de la empresa, para afrontar con éxito las nuevas
oportunidades y retos, que nos brindan estos tiempos tan turbulentos y convulsos.
1. Reclutamiento y Selección
Como área esencial del ciclo del talento, el proceso de atracción y conexión de personas, es de
suma importancia para garantizar con solución de continuidad, la competitividad, vigencia en el
mercado y rentabilidad de la empresa.
1-E mi compañia?
Ver: La Atracción y Fidelización del Talento, objetivo esencial de una buena Gestión de Personas
2-A personas, con las que desarrollan las empresas líderes del mercado?
Apalancamiento 3. ¿La organización es receptiva al uso de redes sociales tanto internas como
Tecnológico externas? ¿De ser así, que podríamos hacer para potenciar la Inteligencia
Colectiva de nuestra organización, y promover el desarrollo de una cultura
2-B de aprendizaje?
3. Influencia Estratégica
Sinergia con las 2. ¿Contamos con el aporte de analistas, que sean conocedores de la
2. ¿Cuál es mi percepción acerca del rol que RRHH asume como agente de
transformación empresarial y socio estratégico del negocio?
3. ¿Siento que otras empresas con las que nos comparamos disfrutan de una
Ver: RRHH 2.0: ¿Aliado de la operación, socio del negocio o agente de transformación empresarial?
Las mejores organizaciones para trabajar, y las empresas más rentables en cualquier mercado,
justifican su éxito sostenido, en la solidez de sus valores, en la inspiración a la acción con
sentido de propósito instigadas por su misión y visión, y en la significación para la sociedad y
las personas de sus objetivos estratégicos.
Recursos Humanos tiene algo importante que decir y mucho que hacer, para aprovechar los
fundamentos de la cultura empresarial para los fines de convertir a la empresa tradicional
actual, en la que está llamada a ser la líder del mercado, y un irresistible imán de talento.
4-A y significado?
1. ¿Tenemos a los líderes apropiados para conformar, orientar y motivar a los
equipos que trabajarán coordinadamente con las áreas de negocio,
para lograr nuestros objetivos estratégicos? ¿Si aún no tenemos esos
líderes, cual debería ser su perfil? ¿Los podríamos desarrollar internamente
Los objetivos
o acceder a ellos en el mercado laboral?
estratégicos
2. ¿Cómo contribuye RRHH a la alineación de sus prácticas de gestión de
Perspectiva personal 2. ¿Somos como Recursos Humanos una organización con misión, visión y
valores propios, netamente alineados a los vectores de la cultura
4-E empresarial?
La efectividad de nuestro análisis puede complementarse con la lectura de otras entradas del
blog que versan acerca de como estimar la madurez de la función de Recursos Humanos, y
como justificar desde Recursos Humanos, el desarrollo del proceso de transformación
empresarial.
Hacia un nuevo Modelo de Madurez en la Gestión de Personas
Desarrollo Organizacional, Gestión del Talento 14/03/2016 Comentarios: 2
Las nuevas demandas competitivas impuestas por los escenarios de alta complejidad e
incertidumbre de la Economía del Conocimiento, supone para las empresas actuales, el reto de
desarrollar una capacidad superior para cuestionar sus prácticas, modelos y enfoques,
y generar nuevos productos y servicios, a una velocidad mayor, a la del resto de las empresas.
Los resultados del negocio han mejorado con el incremento del nivel de madurez en la gestión de personas
Para acceder a nuevos y más rentables ciclos de negocios en entornos de cambio muy
acelerado, necesitamos líderes empresariales con la visión y humildad suficientes, para
comprender que el mundo a su alrededor ha cambiado, y preguntarse, si nuestras
organizaciones, nuestros procesos, nuestra cultura y nuestra gente, emergerán o no como
formidables obstáculos para urdir los procesos de transformación que signarán la dinámica
empresarial en el tiempo por venir.
Para este fin, introduciremos un nuevo modelo de madurez de Gestión de Personas, que
es una versión mejorada, ampliada y actualizada del Modelo de Madurez para RRHH,
originalmente publicado en Talento en Expansión, en Noviembre de 2.012
A modo de ejemplo, la madurez de las prácticas de gestión de personas de una empresa puede
evidenciarse en la Gestión de Desempeño y Desarrollo, con un nivel 3 (Capital Humano), y
sin embargo, evidenciar una influencia estratégica equivalente a la de una empresa de nivel
de madurez 1 (Administración de Personal)
La hoja de ruta para sugerir el incremento del nivel de madurez de la influencia
estratégica de la Gestión de Personas desde el nivel 1 (Administración de Personal), donde
actualmente se encuentra, al nivel 3 (Capital Humano) requerirá de la inversión en iniciativas e
intervenciones enmarcadas en uno o más de 5 vectores transformadores:
1. Sistema de Indicadores de Gestión (Un nuevo vector, no incluido en el modelo de 2012)
2. Impacto en la Cultura como Agente de Cambio
3. Uso de aplicaciones tecnológicas
4. Compromiso y Bienestar de personas
5. Influencia Directiva
Constituye la expresión más elemental, básica e incipiente en la gestión de personas de una empresa
moderna.
Conformada por técnicos de escasa calificación, suele reportar a una unidad de Administración o
Finanzas, estrictamente orientada al control de costes.
Su gestión es netamente transaccional y operativa. Agrega muy pobre o nulo valor de negocio
Sus analistas, apremiados por las urgencias de la operación, rara vez tienen la motivación y el tiempo
necesarios, para desplegar alguna capacidad de planificación y análisis.
Las personas suelen ser subestimadas como seres emocionales y sensibles que son. Sus sueños,
proyectos de vida y propósitos personales son irrelevantes en el ámbito laboral.
Influencia Estratégica
1. Es común que la ejecución esté subordinada a la atención de
1–D detalles operativos. Se despliega en un contexto muy cerrado,
donde la estrategia podría ser soslayada o desestimada
Conformada por especialistas talentosos, RRHH implanta las funciones que le son inherentes.
El responsable de gestionar las personas de la empresa, reporta la mayor parte de las veces a un
Director de Finanzas, o a su equivalente funcional..
Aunque de manera desordenada, y quizá con pobre integración, se automatizan paulatinamente, las
diferentes funciones de gestión de personas de la empresa.
2–A selección
Casos de Estudio
Los resultados del análisis de Clima Laboral son preocupantes
Nivel 2
¿qué haremos? – Caso de Estudio # 2
Apostar por el desarrollo de personas, clave para la
Nive
competitividad de la empresa – Caso de Estudio # 6
La creciente inversión en tecnología para las áreas de gestión de personas, y su mayor influencia
estratégica, favorece la progresiva integración de procesos medulares
Nuevos y más estratégicos indicadores de gestión de personas, pueden integrarse a los indicadores de
otras áreas funcionales para conformar un “Balance Scorecard” corporativo
En esta fase se analiza sistemáticamente la evolución y estado del clima laboral, para identificar
problemas puntuales, y potenciales, y aplicar los ajustes necesarios en tiempo real
Se incrementa el interés de comparar las prácticas de gestión de personas, con las de otras empresas,
que ya destacan como referentes en la aplicación de mejores prácticas de Gestión de Personas
y Desarrollo y Desarrollo
Gestión del Cambio ser un Best Workplace ante el Great Place to Work Institute,
para promover una buena marca empleadora y fortalecer su
Lo qué se habla
en el Nivel 3 “Definamos las actividades de capacitación para el líder
y los especialistas asignados al nuevo proyecto Sigma”
La unidad de Talento Humano ha hecho méritos para merecer al apoyo pleno de la Alta Dirección, y el
bien ganado reconocimiento de toda la organización
La construcción de una sólida marca empleadora con fuerte exposición en medios sociales consolida a
la empresa como un genuino imán de talento.
Se aplican modelos de competencias profesionales en los diferentes procesos que conforman el Ciclo
del Talento
Excelentes prácticas de gestión del talento se potencian con la implantación agresiva de tecnologías de
última generación, para construir una cultura de innovación
Aplican modelos predictivos para diseñar prácticas de gestión del talento apropiadas a la gestión
competitiva de la empresa en distintos escenarios de negocio
Analizan data relevante para segmentar sus prácticas de gestión del talento, de acuerdo a las
necesidades, expectativas e intereses de su muy diversa y talentosa plantilla
No hablamos de seguir como borregos una tendencia a ciegas, porque temamos quedar
rezagados en el marasmo competitivo de un mercado en frenética evolución. No se trata de
adoptar con alegre superficialidad la “moda de la temporada”, para sentir que estamos
haciendo algo para remozar nuestras obsoletas prácticas de gestión de personas, y pretender
con ello, que estamos salvando a la empresa de su inexorable extinción. No creamos que por el
hecho de extrapolar las evidencias detalladas en un caso de estudios a la realidad de nuestra
empresa, ya estamos haciendo lo conducente y necesario, para fortalecer el perfil estratégico
de nuestro cuestionado departamento de Recursos Humanos.
Comencemos este proyecto transformador planteando una serie de preguntas, algunas de ellas
inquietantes, otras quizá obvias, pero todas ellas necesarias y relevantes. Esta exploración nos
ayudará a comprender los retos y amenazas que afronta hoy día, una empresa en franca
expansión, y como la función de Recursos Humanos puede dar la cara, para asumir los retos
relevantes a su necesaria e ineludible trasformación.
Para este fin se definen 100 preguntas que han sido agrupadas en 10 áreas o
dimensionesrelevantes a la función de Recursos Humanos.
Plantearse estas interrogantes con mente abierta y sentido crítico debería ayudar
a directivos y profesionales vinculados a las áreas de gestión de personas a
identificar posibles áreas de mejora para la función de Recursos Humanos. Veamos
entonces, cuales son las preguntas planteadas e indaguemos acerca de las distintas
posibilidades que ellas nos sugieren.
I. Ámbito empresarial
Aunque el objetivo de construir una cultura innovadora requiere del compromiso de directivos,
y lideres favorables al proceso de transformación empresarial; debería ser Recursos Humanos la
organización responsable de diseñar, evaluar e implantar aquellas prácticas, metodologías y
enfoques que contribuyan a mejorar la competitividad y rentabilidad de la organización, a partir
del compromiso, implicación y motivación de los mejores talentos al servicio de la innovación
empresarial.
1. Capacidad de RRHH: ¿Tiene RRHH la capacidad de dinamizar procesos de innovación,
cuando realmente está enfocada a la ejecución de actividades administrativas y transaccionales
que evidencian su escaso peso directivo y pobre proyección estratégica?
2. Factor de competitividad: ¿Que estamos haciendo en plena crisis, para promover la innovación
como factor clave de nuestra competitividad?
3. Rol de RRHH: ¿Ha sido la función de RRHH, el dinamo que nos motiva a adoptar una cultura
innovadora, como respuesta a una crisis que merma las oportunidades de mercado para nuestros
productos y afecta la lealtad de nuestros clientes?
4. Inteligencia Colectiva: ¿Cómo aprende nuestra empresa de la Inteligencia Colectiva, y deriva
ventajas, para desarrollar la gestión del conocimiento como diferenciador clave?
5. Actitud de la empresa: ¿Puede una empresa ser referente de una cultura innovadora, cuando
sus directivos apuestan por la estabilidad en la ejecución para mantener el liderazgo en costes en
mercados maduros, en lugar de desplegarse como líder indiscutible en mercados jóvenes y
emergentes?
6. Gestión del conocimiento: ¿Si sabemos que la innovación surge del trabajo colaborativo
de personas talentosas que comparten conocimientos, aprendizajes y experiencias, porque aún se
inhibe la colaboración multidisciplinaria y se gestiona el conocimiento, más como un
atributo del poder y un privilegio al alcance de pocos; que como un activo de la empresa, que
debería ser gestionado bajo criterios amplios de inclusión y transparencia?
7. RRHH como factor de éxito: ¿Puede Recursos Humanos, ser factor clave en la ejecución de
proyectos de corte innovador, cuando desarrolla y aplica un cuerpo de políticas, normas y
procesos, que no hacen más, sino inhibir la expresión de la creatividad y el ingenio personal?
8. Oportunidades de negocios: ¿Cómo identificamos oportunidades de negocio para invertir en el
desarrollo de proyectos de innovación? ¿Que apoyo nos presta RRHH?
9. Normas y políticas: ¿Quien se atreve a desarrollar proyectos potencialmente innovadores,
cuando el error constructivo derivado de la evaluación de opciones y la experimentación con
sentido de propósito son frecuentemente penalizados, e inhibidos por la influencia de normas,
políticas y procesos negadores de la creatividad e iniciativa, personales?
10. Actitud directiva: ¿Que cabe esperar en términos de competitividad empresarial, si líderes y
directivos gozan de pobre credibilidad, cuando se aferran a sus feudos de poder e influencia,
desestiman toda tentativa de transformación, y lucen desconectados de las emociones,
necesidades y expectativas de las personas que tienen a su cargo?
Ver: El desarrollo de una cultura de innovación comienza con la metamorfosis de RRHH
Personas contentas con el aporte de valor que agregan a la empresa; talentos que se
desarrollan en ambientes laborales con significado y sentido de propósito; lideres inspiradores
que sienten a la empresa como propia y propician el desarrollo de su gente;
colaboradores implicados a su rol, comprometidos a su organización, alineados a sus lideres y
motivados a la acción.
Estos son los atributos que caracterizan a las empresas mas competitivas. Son empresas cuyos
resultados exceden de manera consistente las expectativas de sus accionistas, directivos,
colaboradores y clientes.
Estas son las empresas de mejor rendimiento financiero. Son las empresas preferidas por los
mejores talentos del mercado. Trabajar en ellas es un placer, un privilegio, un reto formidable.
Gestionar el bienestar y compromiso de las personas es relevante para construir una cultura
innovadora, y ha de ser un objetivo clave de una función de Recursos Humanos, que logra
alinear las expectativas e iniciativas de desarrollo de las personas, con los objetivos de los
proyectos y las metas de negocios de la empresa.
Este tópico es relevante para el análisis, cuando nos interesa caracterizar a la función de
Recursos Humanos, bien por su capacidad de aportar valor a la estrategia del negocio y fungir
como agente de transformación empresarial; o bien por su anclaje a prácticas transaccionales y
administrativas que afloran como formidable escollo para el desarrollo de una empresa que
en lugar de sobrevivir, debería destacar por su singular capacidad para reinventarse, y gracias a
ello, cautivar mercados y deleitar a sus clientes.
Cualquier intervención en el área de Recursos Humanos comienza con el análisis pragmático de
su nivel de madurez, se complementa con la caracterización de su posible acoplamiento
productivo con instancias relevantes del negocio, y continúa con el estudio del alineamiento de
su gestión a vectores determinantes de la estrategia empresarial.
Recursos Humanos ha de aliarse con la función de Tecnología y hacerse cargo de los ambientes
de colaboración, los ecosistemas de innovación, las comunidades de práctica, y el acceso a la
inteligencia colectiva, que surgirán de la implantación masiva de tecnologías sociales de última
generación.
La visión y confianza que inspiran los mejores lideres empresariales, sumado a la aplicación de
buenas prácticas de gestión del talento, y al desarrollo de una cultura innovadora, juegan un rol
primordial en el excelente rendimiento financiero de una empresa, que además destaca por ser
el lugar donde los mejores talentos desean trabajar, crecer y desarrollarse.
1. Culturas ágiles: ¿Puede ser ágil una cultura empresarial, cuando privilegia la gestión
predecible vinculada a resultados, y desestima por diseño, el desafío de prácticas y
enfoques quizá, obsoletos e irrelevantes?
2. Valores y compromiso: ¿Por qué es tan difícil que nuestros colaboradores asuman los
valores empresariales como propios, y desarrollen un fuerte compromiso hacia su
organización, lo cual es tan necesario en tiempos de crisis?
3. Valores ignorados: ¿Por qué muchos colaboradores trabajan en organizaciones cuyos
valores no son conocidos, o cuando lo son, se consideran como meras entelequias, casi
siempre inútiles e insustanciales?
4. Valores personales y valores empresariales: ¿Por qué resulta tan difícil lograr una
armoniosa correspondencia entre los valores empresariales y los personales? ¿Es que
los valores empresariales y los personales, acaso son testimonios de realidades,
visiones e interpretaciones de la vida y los negocios, mutuamente irreconciliables y
contrastantes?
5. Tradición corporativa: ¿Por qué las organizaciones de hoy son tan reacias a desafiar su
historia y a remozar su cultura corporativa, cuando se niegan a adoptar nuevos valores,
más afines y consustanciales a la dinámica incierta y difícil de tiempos de incesante, y a
veces disruptivo cambio?
6. Desapego a la cultura: ¿Será posible que directivos y líderes todavía ensimismados por
el efecto adormecedor de éxitos pasados, despierten y comprendan, que aquellos
valores que una vez justificaron el éxito de la empresa, pueden ser ahora, irrelevantes,
inoperantes e inútiles?
7. Transformación cultural: ¿Admitimos que una nueva realidad empresarial, de mercado
y de negocios no podrá gestionarse con éxito si antes no reconocemos que las premisas
estratégicas que tan útiles nos resultaron en el pasado, sencillamente han cambiado?
8. Nuevos modelos de negocios: ¿Si está claro que la inversión en tecnología y
su alineamiento a la estrategia empresarial permitirá el acceso a oportunidades para
innovar y desarrollar nuevos modelos de negocio, porque suele ser común que se
desestime su utilidad, se restrinja su uso, y se pervierta su aplicación para perpetuar
dinámicas de obediencia, mando y control?
9. Misión irrelevante: ¿Quien puede aprender y hacer suyo, el enunciado de una
misión cuyo carácter general y excesiva extensión, difícilmente contribuyen a generar
compromiso a la empresa, y a inducir una acción inspirada por un significativo sentido
de propósito?
10. Visión obsoleta: ¿La visión de la empresa? ¿De cual me hablas? ¿La misma que alguien
inventó en 1996 y que hoy día casi nadie conoce?
Ver: Gestión por valores, o el arte de alinear el desarrollo del talento a la estrategia empresarial
Toda iniciativa innovadora ha de ser desarrollada por personas talentosas, que inspiradas por
una visión significativa se arriesgan a retar dogmas establecidos, aportando su creatividad e
inventiva para hacer las cosas de un modo mejor y diferente.
En ocasiones, las iniciativas de cambio son delegadas al criterio del consultor de turno, o
peor aún, son postergadas o canceladas indefinidamente, para preservar feudos de poder, y/o
evitar el efecto de la incertidumbre, sobre el casi siempre frágil clima laboral.
RRHH aporta su conocimiento y experiencia al desarrollo de comunidades orientadas a la innovación
Con indicadores de gestión creados para medir la tasa de enfermedades ocupacionales, los
niveles de absentismo, o la rotación de personas, las intervenciones que sugieren estos
instrumentos, casi siempre están centradas en la reducción de los efectos, antes que en la
comprensión y solución de causas, que pueden justificar intervenciones más profundas que
afecten la cultura corporativa, y las prácticas de gestión de personas
Promueven una cultura donde el respeto reciproco, la aceptación de la diversidad como valor
corporativo, y el reconocimiento por el compromiso a la empresa y el trabajo bien hecho,
facilitan la identificación de los colaboradores con sus líderes; fortalecen el orgullo de
pertenencia; y generan condiciones casi ideales para derivar una máxima productividad, en una
relación de corte profesional, donde ambas partes, el colaborador y la organización a la que
pertenece, derivan ventajas sostenibles en el tiempo, y ganan.
Cada participante elige las 2 dimensiones (2 de 10), más relevantes para el análisis e
identifica las 10 preguntas (10 de 100) más inquietantes.
Cada participante expondrá en una sesión de 10 minutos, sus motivos para haber
seleccionado una de las preguntas como objetivo principal para un posible proyecto
de corte transformador.
Se recaban todas las dimensiones y preguntas identificadas por cada uno de los
participantes, y se establece un análisis de frecuencia para conocer cuales son las
dimensiones y las preguntas más referidas por la audiencia.
7. Gestionar personas como activos contables a los que hay que controlar y
administrar con rígidas políticas y procesos inflexibles, compromete la viabilidad de
cualquier proyecto de innovación empresarial.
10. Aferrarse a estilos directivos de mando y control es negar que el talento de las
personas genera valor de negocios, cuando se gestiona respetando la autonomía
individual, y con apego a las habilidades y competencias que las hacen valiosas y
únicas.
¿Tenemos procesos de rotación interna para garantizar la movilidad de nuestra gente, hacia
posiciones donde puedan ejercer mayor influencia y aportar interesante valor de negocios? ¿Si es así,
estamos midiendo su eficiencia y eficacia?
Ver: Gestión de talentos de alto potencial. Una asignatura pendiente para RRHH
1. El trabajo para toda la vida más que una realidad deseable por quienes apuesten
por la estabilidad en su devenir profesional, será un hecho casi utópico en un entorno
laboral de incesante y brutal transformación.
3. Será cada vez más frecuente la coexistencia armónica entre profesionales con solida
marca personal y empresas con reconocida reputación como excelentes sitios
para trabajar.
4. Los colaboradores tendrán acceso a un paquete flexible de beneficios que podrán
configurar a su gusto, de acuerdo a su edad, intereses, grupo demográfico y perfil de
riesgo.
7. Se establecerá una brecha insalvable entre las empresas que tengan acceso expedito
a robots y autómatas inteligentes, y aquellas otras, que al carecer de esa
posibilidad estarán irremediablemente condenadas a la desaparición.
8. Recursos Humanos afrontará nuevos y más difíciles retos para instigar compromiso y
mantener un clima laboral saludable, al operar la coexistencia asimétrica entre
humanos y maquinas.
10. Los nuevos líderes empresariales afrontarán la difícil tesitura de ceder poder e
influencia, cuando habrán de trabajar en dinámicas de colaboración con computadores
inteligentes y sistemas cognitivos.
3.
9. Una misión clave en la gestión del talento es garantizar el flujo de líderes que la
empresa competitiva requiere, para satisfacer con relación de continuidad, los objetivos
de negocios propuestos en la ejecución de su Plan Estratégico.
¿Aparte de incluir a diversos especialistas para gestionar las distintas áreas de RRHH, ya se
incorporan profesionales versátiles con solida visión de negocios, para posicionar a la función de
RRHH, como genuino “socio estratégico del negocio”?
Ver: RRHH 2.0: ¿Aliado de la operación, socio del negocio o agente de transformación empresarial?
¿Si hay consenso en que los procesos de transformación organizativa los gestionan
personas con conocimientos, experiencias y competencias, para mitigar efectos adversos sobre
colaboradores implicados o afectados por el cambio, por que Recursos Humanos no evidencia su
influencia como agente de transformación, cuando suele delegar estas actividades de crucial importancia
a consultores externos?
Ver: RRHH 2.0: De victima perenne de la reducción de costes a factor clave de
transformación empresarial
¿Como utilizamos las tecnologías de última generación para flexibilizar las condiciones
laborales, y generar pautas que faciliten la conciliación del quehacer profesional, con las demandas de
la vida personal?
Ver: De la satisfacción laboral al compromiso del colaborador a la empresa. No es una sutil diferencia
4. Han sido las empresas con culturas de alto rendimiento las que históricamente
han generado mayor satisfacción a inversionistas, y han permanecido competitivas,
vigentes y relevantes, incluso en tiempos de crisis financiera y profunda recesión en la
Economia.
¿Cómo podemos utilizar tecnologías de última generación, para ayudar a equipos internos y a
proveedores externos, a conformar equipos de trabajo en ambientes de colaboración, que fomenten la
innovación e impulsen el crecimiento de la compañía?
¿Cuán social es nuestra empresa? ¿Quiénes son los colaboradores que ejercen mayor influencia
en otros, cuando aprovechan las prestaciones de los medios de la web social, en distintos ámbitos de la
organización?
Ver: Gestión de talento por competencias en empresas con redes sociales, la nueva ventaja competitiva
¿Cómo utilizamos los diferentes medios de la web social para crear entornos personales de aprendizaje,
que faciliten la creación de una cultura innovadora, basada en la gestión de equipos de alto rendimiento,
que despliegan su buen quehacer en ambientes colaborativos de trabajo?
Ver: Tendencias en Formación y Desarrollo de Personas en tiempos de Redes Sociales y Colaboración
Ver: Cultura Organizacional y Gestión de Personas, los factores esenciales de la Innovación Empresarial
3. Los líderes comprometidos con sus empresas suelen ser excelentes modelos de
ciudadanía corporativa, por su apego a valores empresariales y su observancia a sólidos
principios éticos.
¿Que estamos haciendo como especialistas de Recursos Humanos, para comprender las
necesidades de los líderes de negocio y plasmarlas en proyectos de gestión de personas, que incrementen
el valor de mercado de nuestra empresa?
Ver: Construir la próxima generación de líderes. Un reto estratégico para RRHH 2.0
Cuando la función de Recursos Humanos niega su rol como pivote de la estrategia de negocios
y agente clave de transformación empresarial, se compromete la capacidad que personas
talentosas potencialmente evidencian, para crear, asumir riesgos, retar el orden establecido, y
generar innovación de significativo valor de negocios.
geográficamente dispersos
Ver: Reinvención de la función de RRHH para afrontar los nuevos retos de la Economía del
Conocimiento
Estas preguntas subrayan la importancia de desarrollar una gestión de talento, que estando
orientada al desarrollo y bienestar de las personas, es clave para potenciar la competitividad de
la organización exitosa de la Era del Conocimiento. Veamos:
¿Te gustaría trabajar en una organización donde lo que verdaderamente importa es tu presencia
rutinaria en el sitio de trabajo haciendo lo que te impone tu jefe; o prefieres desarrollar tu talento
haciendo con pasión aquello que más te gusta y mayor valor agrega tanto a tu vida profesional cómo a la
empresa?
¿Prefieres trabajar en solitario reportando a un supervisor a quien le debes obediencia y acatamiento; o
te gustaría ser parte de un equipo multidisciplinario y aprender, inspirado por un significativo sentido de
propósito de líderes emocionalmente inteligentes, y de esclarecido pensamiento estratégico?
¿Te agrada la idea de trabajar de 8 a 12 y de las 14 a las 18, en un cubículo frio, aislado y gris; o más
bien te atrae la perspectiva de trabajar siguiendo una pauta flexible, y con permanente vinculación a tu
entorno, en la oficina, en tu casa, o en cualquier otro lugar?
¿Aceptas que tiene sentido prohibir el acceso a la Internet en la oficina, porque estás de acuerdo en que
es un factor de distracción que afecta tu productividad; o agradeces el hecho de que tus líderes confían
plenamente en ti, al permitirte acceder a las redes sociales y a otros recursos de la inteligencia colectiva
desde la oficina?
¿Prefieres apostar por un futuro laboral predecible, que sólo en algunos casos te garantizará una vida
profesional estable y sin mayores riesgos; o te seduce la idea de ser el artífice de tu propio desarrollo
profesional, cuando eres parte de un equipo de alto desempeño abierto al aprendizaje acelerado y a la
innovación, donde además tendrás la oportunidad de desplegar el talento que te hace único y valioso?
Estas y unas cuantas más, son las preguntas que deberían plantearse aquellos directivos
interesados en mejorar el posicionamiento competitivo de una organización, que ahora afronta
los rigores de un nuevo paradigma empresarial. Las respuestas honestas a estas preguntas
apuntan a la inversión en una función de Recursos Humanos que ahora promueve el desarrollo
integral de las personas, como fundamento básico para alcanzar los objetivos estratégicos, de
mercado y de negocios de la empresa competitiva en la Era del Conocimiento.
Ver: La Gestión de Talento como herramienta clave de competitividad empresarial – Caso de Estudio # 3
No hace falta ser una empresa de la magnitud y prestigio de Google, 3M o IBM para lograr este
propósito. Es posible mejorar el perfil competitivo de una empresa inmersa en la Economía del
Cocimiento, invirtiendo consistentemente en la mejora de la influencia estratégica y directiva de
la función de RRHH. Aplicar esta estrategia requerirá de fuerte apoyo directivo, y del desarrollo
de un plan de acción que implemente muchas de las iniciativas que a continuación se
describen.
Partiendo de los perfiles de competencias que describen los patrones de éxito en roles claves
para la empresa; aplicando entrevistas de eventos conductuales; administrando pruebas
psicométricas para inferir los rasgos de personalidad relevantes a la posición; y recurriendo a
los “assesment centers”, para evaluar a candidatos potenciales en la solución de problemas
inherentes al rol; puede definirse con cierta precisión, las aptitudes y actitudes de los
candidatos a optar por una posición abierta.
Tan importante como evaluar la actitud y aptitud de los candidatos para determinar la
probabilidad de predecir un desempeño exitoso en una posición, es garantizar la compatibilidad
y acoplamiento a la cultura, prácticas y estilo directivo imperantes en la empresa.
Para este propósito, los integrantes del equipo, incluyendo a su líder participan en el proceso de
selección interaccionando con cada uno de los candidatos de la terna seleccionada, para aportar
su opinión calificada con relación a la persona que finalmente se incorporaría como una nueva
pieza del equipo.
Una fuerte presencia empresarial en los medios de la web social, puede aprovecharse para
introducir nuevas prácticas de Atracción y Conexión de personas, basadas en el desarrollo de
un flujo de conversaciones e interacciones entre potenciales candidatos y analistas de RRHH
con vocación 2.0. Así se establece una dinámica de doble vía conveniente para las partes
implicadas, donde profesionales prospectivos adquieren un mayor cocimiento de la empresa y
de sus oportunidades laborales, al tiempo de que los analistas del área de Gestión de Personas,
recaban información sobre las aptitudes, competencias y rasgos de personalidad de estos
potenciales candidatos.
Somos competitivos y líderes en nuestro sector económico por nuestra capacidad para atraer al mejor talento del
mercado
Una empresa puede tener una página corporativa en Linkedin, para propiciar un espacio de
análisis y discusión que favorezca el conveniente acercamiento entre la empresa, y los
profesionales con los perfiles, que ella precisa. El blog corporativo puede ser utilizado como
medio eficaz para difundir la visión de negocios, el impacto de iniciativas estratégicas en curso,
y los alcances de los proyectos en desarrollo, y así atraer a potenciales candidatos, ahora
cautivados por la visión y los retos implícitos en la estrategia empresarial.
Ver: Relevancia de la Marca Personal para captar el interés de las empresas de mejor reputación
Las universidades e institutos tecnológicos son el semillero del talento joven, que la empresa
2.0 necesita para enriquecer su plantilla con nuevas actitudes, visiones y prácticas.
Ver: La gestión de las expectativas como el arte de motivar con sentido de propósito
Estamos felices de trabajar en una organización en la que se reconoce nuestro aporte, tanto individual como en equipo
Un buen salario emocional reduce las tasas de absentismo laboral, minimiza los indices de
enfermedades ocupacionales atribuibles al estrés, mejora en forma ostensible el clima laboral,
incrementa la productividad individual y colectiva, reduce los indices de rotación de personal, e
incrementa los indicadores de satisfacción del personal.
Una retribución competitiva es mucho más eficaz para atraer, motivar y fidelizar talento, cuando
esta se complementa con un atractivo salario emocional.
Ver: El salario emocional, clave para atraer, movilizar y comprometer talento en la empresa 2.0
En la empresa tradicional se recurre en forma reactiva a hacer un análisis del clima laboral o a
contratar un estudio del mercado salarial, cuando las circunstancias tóxicas del ambiente de
trabajo se expresan como angustiantes síntomas que conspiran contra toda posibilidad de
agregar buen valor de negocios, en un ambiente que no es en lo absoluto propicio para lograr
la satisfacción y el desarrollo integral de las personas.
Ver: ¿Por qué es tan difícil aceptar que podemos ser felices en nuestro trabajo?
Una de las acciones que genera mayor motivación, implicación y compromiso en los
colaboradores jóvenes es la interacción sistemática, frecuente y con sentido de propósito, con
líderes empresariales reconocidos por su talento, visión de negocios e influencia.
Nuestros líderes están próximos a nosotros y nos inspiran a ser mejores con su ejemplo e influencia
Ver: Claves para construir equipos de alto rendimiento en empresas con gestión de personas en red
La imagen de la función de RRHH ha de ser en todo momento, congruente con la bien ganada
reputación de la empresa e inspirar respeto y confianza.
A la gestión de RRHH, muchas veces se la asocia con el rol secundario de una unidad tan
ocupada por resolver los imperativos administrativas y transaccionales inherentes a su función,
que desestima la creación de oportunidades a las que un colaborador desearía acceder, para
imprimirle a su andadura profesional un significado importante, un propósito inspirador y un
motivo de realización personal, que guarde congruencia con los proyectos de vida que esta
persona anhela desarrollar en un rico contexto social y familiar.
Ha llegado el momento para aliar a Recursos Humanos con la gente de Marketing y Ventas,
para promover una atractiva oferta de servicios con un lenguaje sugestivo, genuino sentido de
la oportunidad, y neta alineación a la estrategia empresarial.
El aprovechamiento de los MOOC (Massive Open Online Courses), para acceder casi a costo
cero a los impresionantes recursos disponibles para comunidades de aprendizaje colectivo
ofrecerá posibilidades insospechadas para apoyar efectivamente y enriquecer el proceso de
formación y desarrollo en entornos personales de aprendizaje.
Esta iniciativa será tanto más efectiva si es congruente con los valores empresariales, es parte
integral de la cultura corporativa, Recursos Humanos la gestiona, y es desarrollada en forma
entusiasta y decidida por quienes están llamados a ser modelos de buena ciudadanía
corporativa y ejemplos a seguir, los líderes empresariales.
Para las directivos decididos en transformar a sus empresas en referentes de buenas prácticas
en gestión de personas, puede ser una excelente opción aplicar la metodología sugerida por el
Great Place to Work Institute, para facilitar la evolución de sus organizaciones hacia lo que ellos
denominan un Best Workplace.
Aplicando estas herramientas con sentido crítico, se obtiene información de primer orden, para
sugerir un plan de mejoras que permita a la empresa de hoy afrontar con mayores posibilidades
de éxito, los retos de la guerra del talento ahora implícitos en la Economía del conocimiento.
Ver: Psicología Positiva, elemento esencial de la empresa que es excelente lugar para trabajar
Aunque sea cierto que el mercado laboral actual presenta importantes distorsiones entre la
incipiente creación de puestos de trabajo, y la demanda creciente por nuevos empleos, es
innegable que la guerra del talento proseguirá en la tentativa de acceder a los mejores
profesionales en roles, cuya capacidad superlativa de agregar valor diferencial de negocios,
gracias a sus conocimientos, talento y pasión, los hace muy codiciados para introducir
innovación de significativo valor de negocios.
La capacidad de las empresas líderes para atraer y conectar a los mejores profesionales
determinará su diferenciación de aquellas otras, cuyos directivos aún no logran vislumbrar la
importancia de la gestión de personas como dinamo y vector del éxito o fracaso de su
estrategia empresarial.
¿Es tan difícil admitir que son las personas talentosas y motivadas el alma y el corazón de un
nuevo modelo de empresa?
¿Estamos listos para reconocer que Recursos Humanos asumirá su rol de protagonista clave en
este nuevo proceso de transformación organizativa?
Abrirse a nuevas formas de gestión para ganar pleno acceso a los infinitos recursos de la
Inteligencia Colectiva es esencial para justificar la evolución de la empresa actual hacia
una organización centrada en el conocimiento. Incluir en el radar de iniciativas estratégicas,
la inversión en tecnologías sociales para potenciar la satisfacción de los colaboradores,
incrementar su productividad y consolidar su compromiso hacia la empresa debería ser un tema
de prioritaria consideración en directivos conscientes, del valor que aporta el desarrollo del
talento de las personas. Es clave reconocer que el principal vector de la competitividad, es el de
la innovación, en particular, cuando esta se enraíza en la cultura organizativa, se despliega en
ambientes de colaboración, y es sostenible en el tiempo.
La función de RRHH sigue la visión de nuestros líderes para generar valor en la Economía del Conocimiento
Son temas que requieren de la acción efectiva de un liderazgo, dispuesto a cuestionar, revisar y
replantear la Misión y Visión de lo que sería una nueva arquitectura empresarial, que ahora se
orienta al desarrollo integral de las personas, se apalanca con tecnologías sociales de
ultima generación, y construye futuro articulando acciones guiadas por un significativo sentido
de propósito. Todo ello, a favor del propósito de orientar a la empresa y movilizar a quienes
forman parte de ella, para asumir el reto de afrontar con mayores posibilidades de éxito, los
entornos de negocios mas exigentes y competitivos que cabe esperar en la Era del
Conocimiento.
Los mandos directivos, acosados y presionados como están, para generar los resultados
satisfactorios anhelados por los accionistas, prefieren aplicar medidas ortodoxas de ajuste, que
aun cuando se traducen en una rápida sensación de recuperación financiera gracias a la mejora
puntual de la Cuenta de Resultados, pueden tener un impacto sensible y perverso sobre la
gestión de personas, al inducir a un clima laboral toxico, donde el estrés ante la incertidumbre
creciente del entorno, y el temor por perder el trabajo, amén de ser predominantes, generan
desasosiego, desmoralización, y en ocasiones, desesperanza aprendida.
Decidir con semejante sentido de urgencia, y bajo un limitado horizonte de planificación que
parece subestimar el logro de los objetivos de largo plazo, implica correr el riesgo de postergar
las necesarias transformaciones de fondo que las empresas de hoy día demandan, cuando las
practicas, las políticas, los enfoques de gestión y los estilos directivos, que probaron ser
exitosos en el pasado, ahora pueden ser irrelevantes; quizá insuficientes y, en ocasiones,
innecesarios, dadas las nuevas premisas de mercado, operacionales, y de negocios, que impone
la emergencia de una nueva Era.
Si bien es cierto que la función de RRHH está asumiendo un rol cada vez más activo en el
Comité de Dirección de muchas de las empresas del presente, aún no ejerce una influencia
estratégica semejante a la de otras direcciones, como las de Finanzas, Operaciones y
Marketing, que suelen tener un mayor peso específico, sobre la definición, seguimiento y
desarrollo de la estrategia de negocios de una empresa.
RRHH aún no tiene la influencia suficiente para desplegarse como un genuino socio estratégico del negocio
Todavía es común que el área de Recursos Humanos, como reacción a cualquier crisis que
afecte las finanzas corporativas, y comprometa la viabilidad de la empresa; sea la instancia que
justifique medidas de reducción de costes en la gestión de personas, y asuma el congelamiento
de sus inversiones en Formación y Desarrollo, ante las evidencias de eventos críticos
presentadas por las direcciones de Finanzas, Operaciones y/o Marketing. Es el momento
apropiado para plantear las siguientes interrogantes:
¿Que medidas tomaremos para mitigar las perdidas que hemos experimentado en el último trimestre,
cuando la facturación neta ha arrojado cifras negativas por vez primera en 6 años? – Una pregunta
oportuna y relevante de un Director de Finanzas.
Nuestra participación de mercado en los segmentos que definen nuestra posición de líderes ha declinado
en un 5%, respecto a la del año pasado ¿Que decidiremos hacer para detener la continua erosión de
nuestro rol de alta influencia en el mercado? – La pregunta, ahora formulada desde la perspectiva de una
Directora de Marketing.
El coste unitario de producción en la línea 3, ha aumentado sensiblemente, ante la merma de la
demanda. Sugiero fusionar lineas 3 y 4 para alcanzar economías de escala, y despedir a 20 operadores
de planta, que en lo sucesivo, no serán necesarios. – La solución sugerida por un Director de
Operaciones, preocupado por la afectación de la planificación de la producción ante una repentina caída
en la demanda del mercado.
¿Cuales preguntas puede entonces, formular la Directora de RRHH, cuando en forma reactiva
ha de congelar el presupuesto corporativo de Formación y Desarrollo, reducir el tamaño de la
plantilla en un 5%, discontinuar hasta nuevo aviso el programa de Formación de Líderes, y
podar significativamente el plan corporativo de balance de la vida personal con la profesional?
¿Y que sucede con el Clima Laboral ahora viciado por el temor y la incertidumbre? ¿Como podemos
salir de esta crisis, con una plantilla desmotivada, desvinculada emocionalmente de la empresa y
escasamente comprometida con su liderazgo? ¿Cómo comunicaremos la suspensión de los planes de
Formación y Desarrollo de nuestros colaboradores, ahora que hemos abortado toda inversión en esa
materia? – Se pregunta angustiada, una Directora de RRHH, que pese a ocupar una de las instancias
directivas de la empresa, reconoce que aún no tiene la influencia estratégica suficiente, para influir sobre
otros directores, y conferirle así, un rol más constructivo a la gestión de personas en su empresa?
¿Que se está haciendo en plena crisis, para promover la innovación como el factor clave de la
competitividad en la empresa?
¿Cómo aprende la empresa de la Inteligencia Colectiva, y la convierte en un diferenciador clave?
¿Cómo se gestiona el talento y se logra alinear con los objetivos estratégicos de la empresa?
Las respuestas a estas y a otras preguntas las tiene una función de RRHH, con las
competencias necesarias y la influencia estratégica y directiva suficientes, para desplegar un rol
de neta orientación a la ejecución de la estrategia de una empresa, que por diseño ahora estará
centrada a gestionar la innovación y el conocimiento.
Aunque es cada vez más frecuente que el área de RRHH sea parte integral de los Comités de
Dirección de empresas conscientes de la importancia de apostar por el desarrollo del talento,
para afrontar escenarios de negocios de alta complejidad; todavía es común identificar una
cierta relación de subordinación de la gestión de RRHH, respecto a la Dirección de Finanzas o a
la de Marketing, cuya mayor influencia estratégica y directiva, puede sesgar el ámbito de acción
de una función de RRHH, que continua siendo conminada a actuar a contracorriente de su
visión estratégica, para mitigar los efectos, más no las causas de los problemas que pudiendo
afectar a estas instancias directivas, son relevantes y críticos para la empresa.
Ver: Reinvención de la función de RRHH para afrontar los nuevos retos de la Economía del
Conocimiento
Los proyectos de gestión del cambio organizativo, normalmente vinculados a iniciativas de gran
impacto transformacional, como sucede en las fusiones corporativas o en la integración de
procesos a través de SAP; antes de ser del dominio exclusivo de consultores de clase mundial,
deberían ser inherentes a una función de RRHH de corte estratégico, que se hace cargo del
plan de comunicaciones, asume el análisis de impacto, gestiona la matriz de “stakeholders”, y
desarrolla el plan de formación, para introducir nuevas políticas, normas y procesos a la cultura
corporativa.
RRHH es un agente de cambio fundamental para el logro de los objetivos estratégicos de nuestra organización
Cuando se habla de implantar las redes sociales y las aplicaciones de colaboración en el ámbito
corporativo, es crucial que RRHH se apodere del proceso de transformación, y asuma plena
responsabilidad sobre los cambios que habrán de impactar a las personas, a la arquitectura
organizativa, a los procesos, y a la cultura, en una ventana de tiempo que puede ser mucho
más amplia, que la de cualquier proyecto puntual o específico de naturaleza transformacional.
Ver: Autodesarrollo, Redes Sociales y Colaboración, la Trilogía para el éxito de la Empresa 2.0
Una función de RRHH con neta orientación estratégica ha de deslastrarse del desgaste
administrativo y funcional implícito en la gestión de áreas transaccionales de RRHH, como
pueden ser las de Reclutamiento y Selección, Compensación y Beneficios, y Relaciones
Laborales.
Para los fines de minimizar la burocracia, ganar agilidad y ampliar su enfoque estratégico,
RRHH puede transferir ciertas funciones y competencias a otras áreas funcionales, como por
ejemplo, Administración y Finanzas.
La dinámica de una organización que se centra en la gestión del conocimiento y desarrolla una
cultura de innovación como diferenciador competitivo clave, requiere del trabajo integrado de
las áreas de RRHH y de Tecnología, compartiendo un imperativo estratégico que trasciende las
funciones tradicionales de la gestión de personas, y va mucho más allá del rol contralor que la
función de tecnología asume para el buen y productivo uso de sus enfoques, aplicativos y
sistemas.
De esta sinergia cabe esperar que surjan nuevos roles como el de Analista de Big Data, o el de
Gestor de Comunidades de Práctica, con perfiles técnicos y de competencias que pueden ser
perfectamente relevantes a una o a ambas de estas áreas funcionales.
Ver: La inversión en Redes Sociales es imperativa en la empresa innovadora y competitiva del presente
La empresa puede certificarse como un “Best Workplace”, según criterio del Great Place to
Work Institute, para ajustar sus políticas, normas y procedimientos, de conformidad con las
mejores prácticas que diferencian a las organizaciones líderes.
Siendo un profesional conocedor de las mejores prácticas de Gestión de Personas, con visible
interés en la aplicación de los últimos avances de la Psicología Cognitiva y la Neurociencia al
ámbito laboral, destaca por su maestría para generar consensos, inspirar a otros con genuino
sentido de propósito, y provocar sinergias, en grupos multidisciplinarios de profesionales, que
están motivados a aportar su compromiso, tiempo y talento, a favor de hacer realidad una
significativa visión de negocios.
Es fundamental que este líder transformador pueda ganarse la confianza y la aquiescencia del
CEO o Director General, de manera de liderar conjuntamente, un proceso de transformación
organizativa de largo aliento, que además puede enfrentar resistencias con posiciones
refractarias al cambio, de instancias mas conservadoras de la Dirección de la empresa, como las
representadas por la Dirección de Finanzas, la de Operaciones o la de Marketing.
Inmersos como hoy día estamos, en un contexto de negocios volátil y de alta sensibilidad,
signado por grandes transformaciones en la Economía y en la Sociedad, donde confluyen
diversas generaciones de profesionales con distintas actitudes e intereses, y en el que es
innegable el impacto del hecho tecnológico como habilitador de procesos y catalizador de la
innovación, muchos directivos aun dudan en reconocer el potencial disruptivo de este
sustantivo evento de transformación, que no tiene precedente conocido en la historia de la
humanidad.
El desarrollo profesional aparte de propiciarse en entornos personalizados de aprendizaje, se nutre y fortalece del
Y es en este nuevo paradigma, en el que son las personas, no los accionistas, ni la maquinaria,
ni los activos, ni los procesos, el centro de gravedad y la razón de ser, de las organizaciones
que aprenden, cuestionan sus prácticas, se reinventan e innovan.
¿Cabría entonces esperar que muchas de las prácticas de Formación y Desarrollo de Personas
que han probado ser exitosas en el pasado continuarán siendo útiles y relevantes para afrontar
la incertidumbre, volatilidad, y complejidad de los tiempos que corren? Definitivamente no.
Veamos el porque.
Para los fines del análisis, consideremos a algunas de las prácticas tradicionales aplicadas para
la Formación y Desarrollo de Personas; de las cuales muchas, sin embargo, ahora parecen ser
insuficientes y poco relevantes para mejorar la productividad y consolidar la competitividad de
cualquier empresa que pretenda ser un actor de primer orden en la Sociedad del Conocimiento.
Veamos:
5.
Tengo pleno acceso a redes sociales y a tecnologías de colaboración. ¡Me gusta lo que hago!
La empresa 2.0 está abierta al aprendizaje en red y promueve la apertura de sus
profesionales, tanto a lo interno como a lo externo de la organización favoreciendo la
adopción de entornos personalizados de aprendizaje, donde un profesional, ávido de
desarrollarse y crecer por su propia iniciativa, ahora tiene pleno acceso en su ámbito
laboral, a redes sociales y tecnologías de colaboración, para complementar el
aprendizaje adquirido en el ambiente de trabajo. Bajo esta perspectiva, la capacitación
formal pierde relevancia relativa para favorecer entonces, el desarrollo de dinámicas
personalizadas y autónomas de aprendizaje, como es lo usual en organizaciones
líderes, que gestionan el conocimiento como un genuino elemento diferenciador.
7.
competencias digitales
El sueño de todo líder inspirador a los efectos de transformar una organización y realizar su
visión, siempre ha sido el de conformar equipos de alto rendimiento con colaboradores
talentosos, altamente motivados, centrados a la tarea, alineados a la estrategia, dispuestos a
exceder sus metas de productividad, y animados a generar innovación de importante valor de
negocios.
Un ambiente de trabajo cálido, de abierta colaboración, y franca comunicación con mis líderes me permite adquirir el
contexto estratégico que necesito conocer para garantizar el éxito de mis proyectos
Abundan excelentes profesionales que habiendo desarrollado sus carreras en distintas áreas
funcionales, bajo estrictos indicadores de gestión operacional, y criterios probados de eficacia y
eficiencia; ahora asumen roles de liderazgo, desde donde han de motivar a sus equipos;
instigar en sus colaboradores, un significativo sentido de propósito; apoyarles en su desarrollo
profesional; y compartir con generosidad y amplitud, el sueño de hacer realidad una visión que
si bien es trascendente para la organización, es también relevante para la sociedad, y no menos
importante para los integrantes del equipo.
Hablamos de líderes quizá surgidos de áreas operacionales muy especializadas que ahora
conforman equipos de alto desempeño con profesionales de distintas disciplinas y áreas
funcionales, agrupados en varias generaciones, y motivados por intereses disimiles. Todos ellos
agregan valor en actividades cruciales para la supervivencia financiera de la empresa
apuntando a la mejora de sus capacidades operacionales, o son participes de iniciativas de
innovación relevantes para su competitividad en un entorno empresarial muy
incierto, difícil y volátil.
Los proyectos en la empresa 2.0 han de ser liderados por profesionales de talento singular,
dotados de un pensamiento estratégico bien desarrollado, con excelentes habilidades
relacionales, y con las competencias emocionales necesarias, para derivar de sus colaboradores,
la máxima productividad, implicación y compromiso posibles, y sin que ello signifique imponer
condiciones que afecten a la satisfacción de sus expectativas como personas sensibles y
profesionales talentosos que son.
Es oportuno analizar las nuevas prácticas que un líder de estos tiempos puede aplicar para
motivar efectivamente a sus colaboradores, inducirlos a experimentar estados superlativos de
concentración, ofrecerles una plataforma idónea para su desarrollo profesional, comprometerlos
a su organización, e insuflarles una implicación decidida a su rol y a su tarea.
Sin embargo, aún persisten organizaciones cuyos líderes y directivos creen que la mejor y única
manera de motivar a un colaborador para animarlo a desplegar un desempeño superior, es
mediante la aplicación de incentivos económicos que pueden ser parte del componente variable
de la retribución.
Sentido de Propósito (formar parte de algo más grande que nosotros que tiene gran
significado, sentido y trascendencia).
Ejemplos de excelentes visiones inspiradoras las tenemos en Walt Disney (“Hacemos feliz a la
gente“), y en Google (“Organizamos la información del Mundo“)
Ver: El salario emocional, clave para atraer, movilizar y comprometer talento en la empresa 2.0
Al describir sus experiencias, muchos de estos ejecutivos coinciden en señalar que cuando han
vivido estados de flujo, sintieron una gran satisfacción personal, experimentaron una
importante orientación al logro, y disfrutaron de una concentración mental superior. La mayor
parte de ellos afirman haber experimentado estados de flujo en un porcentaje tan bajo como el
10% de la jornada laboral, en contraste con algunos otros quienes solían experimentar estados
de flujo, en un porcentaje tan alto como el del 50% del tiempo.
Nuestro liderazgo inspirador es factor clave del éxito de nuestro equipo, y un modelo a seguir
Veamos entonces, cuales son los 3 componentes que un ambiente laboral requiere desarrollar,
para incentivar la ocurrencia frecuente de estados de flujo, de modo de facilitar las condiciones
necesarias para incrementar la productividad al máximo, y generar en paralelo, la mayor
posibilidad de introducir innovación de gran valor de negocios.
Ver: El salario emocional, clave para atraer, movilizar y comprometer talento en la empresa 2.0
Se expresa favorablemente cuando los objetivos previstos y las metas esperadas para cualquier
rol están clara e inequívocamente definidos; y además existe un fácil, continuo y pleno acceso a
la información y al conocimiento que la persona necesita para garantizar su exitoso desempeño
en el rol.
Son ambientes laborales donde las partes implicadas están conscientes de la naturaleza y
alcance del reto que asumen y se conforman en equipos de alto rendimiento. Son entornos
donde priman relaciones de respeto, camaradería y confianza reciproca, y donde es común
afrontar y resolver “conflictos constructivos” para alcanzar consensos, concretar acuerdos, y
crear una visión compartida.
Cuando un liderazgo creíble y con suficiente influencia estratégica comunica la Misión y Visión
de la empresa en función del significativo sentido de propósito implícito en el imperativo de
salvar vidas humanas, en la premisa de mejorar la calidad de vida en en hogar, o en la
repercusión de introducir un producto revolucionario de gran impacto para la Sociedad, están
dándose condiciones favorables para incrementar este Coeficiente de Significado del
ámbito laboral, y motivar así, un poderoso sentido de propósito en colaboradores con más
implicación a su tarea, mejor identificación con sus líderes, y mayor compromiso con su
empresa.
Puede establecerse una asociación entre estilos de liderazgo que refuerzan en sus
colaboradores el significado de creer y hacer propia una visión trascendente; y la concreción de
hitos innovadores, que históricamente han tenido, sentido, propósito y relevancia para la
empresa, las personas que gravitan en torno a ella, y la Sociedad.
Ver: La gestión de las expectativas como el arte de motivar con sentido de propósito
El estudio de McKinsey afirma que las organizaciones que aplican una, varias, o
preferentemente todas las dimensiones para construir una visión inspiradora de un significativo
sentido de propósito tendrán las mayores posibilidades de incrementar el Coeficiente de
Significado del ambiente laboral, para generar una mayor ocurrencia de estados de flujo
que coadyuve a la máxima expresión de su productividad, y a una superlativa capacidad de
generar valor diferencial por medio de la innovación.
Tengo acceso a las condiciones necesarias para experimentar estados de flujo, y ponerlos al servicio de proyectos de
Muchas organizaciones del presente aún no están preparadas para afrontar con éxito un reto
que exige de su liderazgo, una conciencia crítica en torno al imperativo de orientar su gestión a
las personas; una renuncia voluntaria a sus enormes cuotas de poder e influencia para abrir la
organización al trabajo colaborativo bajo dinámicas de liderazgo descentralizado y distribuido; y
una comprensión honesta y abierta en relación al rol de transformación que una nueva
organización de Recursos Humanos habrá de asumir en un contexto donde ha de gozar de
mayor influencia directiva y estratégica.
Necesitamos líderes inspiradores capaces de retar los paradigmas y dogmas que han sumido a
muchas de las organizaciones actuales en un estado de relativa inercia, que ahora ha de ser
cuestionado y superado, si pretendemos que estas empresas sean las protagonistas de los
casos de éxito de la Era del Conocimiento.