Teoría de La Disonancia Cognitiva
Teoría de La Disonancia Cognitiva
Teoría de La Disonancia Cognitiva
LA MOTIVACIÓN HUMANA
De los factores internos que influyen en la conducta humana, daremos especial
atención a la motivación.
Para comprender la conducta humana es necesario un mínimo conocimiento de la
motivación. Definir exactamente el concepto de motivación es difícil, dado que se
ha utilizado en diversos sentidos. De manera general, motivo es todo aquello que
impulsa a la persona a actuar de determinada manera o que da origen, por lo
menos, a una determinada tendencia, a un determinado comportamiento.7 Ese
impulso a la acción puede estar provocado por un estímulo externo (proveniente
del ambiente) y también puede ser generado internamente
por los procesos mentales del individuo. En ese aspecto, la motivación está
relacionada con el sistema de cognición9 de la persona. Krech, Crutchfi eld y
Ballachey explican que “los actos del ser humano están guiados por su cognición
—por lo que piensa, cree y prevé—. Pero a preguntarse por el motivo por cual
actúa de esa forma, se plantea la cuestión de la motivación. La motivación
funciona en términos de fuerzas activas e impulsoras, que se traducen en palabras
como deseo y recelo (temor, des-confianza y sospecha). La persona desea poder
y estatus, teme la exclusión social y las amenazas a su autoestima.
Además, la motivación busca alcanzar una meta determinada, el ser humano
gasta energía para lograrlo”.
Ciclo motivacional
El ciclo motivacional empieza con el surgimiento de una necesidad. La necesidad
es una fuerza dinámica y persistente que origina el comportamiento. Cada vez que
surge una necesidad, ésta rompe el estado de equilibrio del organismo,
produciendo un estado de tensión, insatisfacción, incomodidad y desequilibrio. Ese
estado lleva al individuo a un comportamiento o acción, capaz de liberar la tensión
o de liberarlo de la incomodidad y del desequilibrio. Si el comportamiento es
eficaz, el individuo encontrará la satisfacción a su necesidad y, por lo tanto, la
descarga de la tensión producida por ella. Satisfecha la necesidad, el organismo
vuelve a su estado de equilibrio anterior, a su forma de adaptación al ambiente. El
ciclo motivacional se esquematiza en la fi gura siguiente. En este ciclo
motivacional, la necesidad es satisfecha. A medida que se repite el ciclo, debido al
aprendizaje y la repetición (refuerzo), los comportamientos se vuelven más
eficaces para la satisfacción de ciertas necesidades. Una vez satisfecha, la
necesidad deja de motivar él comportamiento, ya que no ocasiona tensión ni
incomodidad.
Sin embargo, en el ciclo motivacional, no siempre puede satisfacerse la
necesidad. Ésta también puede frustrarse o puede compensarse (o sea, puede ser
transferida a otro objeto, persona o situación). En el caso de frustración de la
necesidad, en el ciclo motivacional, la tensión ocasionada por el surgimiento de la
necesidad encuentra una barrera o un obstáculo para su liberación. Al no
encontrar una salida normal, la tensión acumulada en el organismo busca un
medio indirecto de salida, ya sea por vía psicológica (agresividad, descontento,
tensión emocional, apatía, indiferencia, etc.), o por vía fisiológica (tensión
nerviosa, insomnio, repercusiones cardiacas o digestivas, etcétera).
Otras veces, la necesidad no es satisfecha ni tampoco frustrada, sino transferida o
compensada. Esto se presenta cuando la satisfacción de otra necesidad reduce o
aplaca la intensidad de una necesidad que no puede ser satisfecha como se indica
en la fi gura 2.7.
Es lo que pasa cuando una promoción a un puesto superior se cambia por un
buen aumento de sueldo o por un lugar nuevo de trabajo.