EL CINE - Etelvina Adamcik
EL CINE - Etelvina Adamcik
EL CINE - Etelvina Adamcik
En 1978 durante el Primer Congreso Democrático del Cine Español, se concluyó que: “El cine es
un bien cultural, un medio de expresión artística, un hecho de comunicación social, una industria,
un objeto de comercio, enseñanza, estudio e investigación” (Valero Martinez, 2008). Siguiendo esta
definición es que propongo un acercamiento a la relación entre el cine y la enseñanza de la historia.
El cine posee un valor histórico muy importante ya que refleja las mentalidades de los hombres de
una época. Esto quiere decir que un film no sólo es valioso por acercarse más fidedignamente a una
realidad que quiere representar, sino también porque nos da cuenta de las miradas de sus
realizadores sobre un determinado tema, nos habla de una estética puesta en juego en un momento
dado. Las miradas, preguntas y enfoques con los cuales se decide abordar una temática también nos
están hablando de los intereses e inquietudes de la sociedad en un momento determinado.
Tempranamente en la década del 30, el cine trajo controversias con algunos historiadores, quienes
sostenían que si el cine iba a apoyarse en la historia era mejor que tenga en cuenta el rigor de la
ciencia histórica en la investigación, al mismo tiempo se reclamaba la necesidad de que las películas
históricas sean revisadas por historiadores antes de ser exhibidas. Se generaron muchos recelos de
cómo lo escrito era tratado en el cine; el lenguaje, las imágenes, los tiempos, la dramatización
misma podían alejar demasiado a la representación de lo “real”(Amézola, 2007). Con la aparición
de nuevas tendencias historiográficas de la mano de nuevos métodos de análisis y nuevas fuentes
(orales e imágenes), el texto escrito fue perdiendo la categoría de recurso único y máximo del
conocimiento histórico, lo que permitió la revalorización de otras fuentes y abonó el terreno para la
investigación multidisciplinar dentro de la Historia. A su vez esto trajo como consecuencia el
interés de la Historia por sujetos sociales hasta el momento relegados como ser las mujeres, los
niños, los desposeídos; e incluso comenzó a interesarse por una temporalidad distinta a la
tradicional, fue así que el pasado reciente comenzó a ser un terreno cada vez más frecuentado por la
investigación histórica. Es en este contexto en donde el cine adquiere un valor importante no sólo
como documento histórico sino también un valor agregado por su uso didáctico en contribución a la
enseñanza de la historia.
Desde hace un tiempoel cine, la televisión y otros medios masivos de comunicación han introducido
una manera distinta de acercarse a los contenidos históricos. En muchos lugares las personas
acceden cada vez más a los medios masivos de comunicación que a los libros, la dinámica que
presenta esta forma nueva de comunicar es distinta a la que los historiadores estaban
acostumbrados. La información circula con una velocidad no imaginada en tiempos pasados. Los
medios de comunicación tienen un papel cada vez más poderoso en la producción de significados,
imágenes y textos que consumimos y que reconfiguran de alguna manera nuestra vida cotidiana,
nuestra manera de mirar el mundo y nuestra memoria. Es por esto que se hace necesario analizar de
una manera crítica el texto que consumimos, sea una novela, una película, una canción o una
pintura.
La cultura, al igual que otros ámbitos, es un terreno en el que se desarrollan luchas de poder en las
que los medios masivos de comunicación tienen un rol fundamental a la hora de configurar (entre
otras cosas) la memoria colectiva. Entiendo a la memoria como “una reconstrucción actualizada del
pasado que actúa como un conjunto de estrategias que nos ayudan a definirnos ante el mundo”
(Acuña, 2009 pp. 63), y es en esta reconstrucción que los medios de comunicación tienen un papel
significativo “recordando” determinados sujetos y acontecimientos y “olvidando” otros. La
construcción de la memoria no es lineal ni individual, es una acción colectiva, subjetiva y
culturalmente compartida. Por lo tanto, para que la memoria se construya es condición necesaria
que existan sujetos que compartan una cultura y también es necesario que existan agentes que de
alguna manera materialicen esos sentidos del pasado en distintos productos culturales como por
ejemplo las películas, productos que a su vez se convierten en vehículos de la memoria (Acuña,
2009).
En este contexto es necesario analizar como sostiene Henry Giroux, los productos culturales de los
grandes medios de comunicación de una manera crítica; es decir detrás de toda obra, sea esta
literaria, cinematográfica, teatral, etc. existe una intencionalidad; es menester indagar en la política
cultural que hay detrás de productos que muchas veces a la ligera son tomados como “inocentes”.
El autor arriba mencionado, analiza las películas de la Disney Company entre ellasGoodMorning,
Vietnam (1987)y PrettyWoman (1990)las cuales son textos culturales que ofrecen un buen terreno
para la lectura crítica de cómo tras esa “inocencia” se ocultan ideologías que legitiman el racismo,
el imperialismo, el paternalismo, a la vez que imponen unalectura sesgada del pasado y
determinados valores familiares que poco tienen que ver con la cultura estadounidense (Giroux,
1996). El cine aparece como un medio básico de la cultura popular que debe ser abordado de
manera crítica en tanto aparato pedagógico con decisivas influencias en la construcción de la
identidad colectiva. De esto se deduce que analizar la ideología, las intenciones las menciones y
omisiones que se presentan en cada película (especialmente la de las grandes cadenas
cinematográficas), posee un valor fundamental para comprender cuales son las narrativas,
lasrepresentaciones del pasado, los valores, incluso las relaciones pasado-presente, que se ponen en
juego para legitimar una determinada manera de ver el mundo en cada film. Como sostiene Giroux
“La Disney Company no ignora la historia, la reinventa como instrumento pedagógico y político
para consolidar sus propios intereses, autoridad y poder” (Giroux, 1996 pp.55). En esa re-invención,
la memoria aparece reducida a ideas de caballerosidad, aventura e inocencia infantil. Se genera
cierta homologación entre memoria e historia, adquiriendo ambas una categoría estática
independiente del contexto histórico, social y político, desdibujando así la noción de que tanto la
memoria como la historia son procesos de construcción cultural en la que los sujetos sociales tienen
un rol activo.
Si bien no es la idea de este escrito, es importante hacer ciertas aclaraciones al respecto de las
diferencias entre la historia y la memoria. La memoria está centrada en el testimonio y la
credibilidad del testigo, en la experiencia inmediata su meta es la “fidelidad”. La historia se basa en
documentos que se someten a crítica, puede ir más allá de lo inmediato, puede y debe establecer
regularidades y causas que los mismos protagonistas de determinada situación no pudieron
establecer por estar inmersos en esos sucesos, la historia aspira a la verdad (Amézola, Dicroce,
Garriga, 2009). La memoria es la matriz de la historia y ésta última debe problematizar a la primera,
debe indagarla, cuestionarla y ponerla en tensión. La historia debe servir para iluminar sobre las
manipulaciones de la memoria colectiva, evidenciar que intereses hay en juego; de alguna manera la
memoria debe ser reflexionada y pensada mediante la historia.
Es real que quizá la confusión entre historia y memoria se produce mucho más cuando se trata de
analizar períodos y problemáticas cercanos en el tiempo que son experiencias vivas de diversos
grupos sociales que constituyen el pasado reciente. No hay un gran acuerdo entre los historiadores
para establecer ciertos límites temporales a eso que conocemos como pasado reciente, una buena
definición es la que lo delimita sobre todo por los traumas que ese pasado proyecta aún sobre el
presente. Por lo tanto el límite temporal del cual se encargaría la Historia del pasado reciente tendría
algunas variantes dependiendo de los sujetos sociales que en ese pasado sean protagonistas. En
Argentina ese pasado reciente conflictivo lo constituyen los años 70 y en especial la última
dictadura militar (Amézola, 2007). Es de mucho valor para analizar este pasado reciente argentino
la utilización del cine nacional.
Como dice Marc Ferró, todo los films son históricos, más allá del género al que pertenezcan, todos
los films tienen una sustancia histórica; la cámara revela el comportamiento de la gente muchas
veces más de lo que se habían propuesto los realizadores. Siguiendo al mismo autor, desde una
mirada historiográfica el cine puede ser clasificado por su uso como “fuente” y como “agente”
(Ferró, 1980 citado en Amézola, 2007). En su uso como fuente, la película nos puede estar dando
información sobre la realidad que está tratando de reconstruir, pero también nos está brindando
mucha información sobre la sociedad de ese mismo momento, ya que toda película es un reflejo
contemporáneo de las circunstancias históricas de su producción.En este sentido también Carlo
Guinzburg analiza una serie de películas como fuentes para el historiador y sostiene que muchas
veces una película “nos dice más sobre el momento y sobre la sociedad en la que ella ha nacido, que
de la sociedad y el momento de los cuales nos habla” (Guinzburg, 2004 pp.145)
Por otro lado, en su uso como agente el film puede tratar desde perspectivas distintas una temática o
puede dar espacio a una problemática social tratándola desde diferentes enfoques, sin ser
necesariamente la idea central de tal film.
Resulta interesante plantear que nosotros como espectadores observamos un film con diferentes
miradas, constantemente lo hacemos e incluso muchas veces sin tomar consciencia de ello.
Miramos el film en sí, analizamos la trama, pero también analizamos los sonidos, la forma de
estructurar el argumento, las formas de mover la cámara, los planos, la veracidad de lo narrado, etc.
Incluso nuestra recepción de una película continúa en el tiempo, reflexionamos sobre el momento
en que se filma, cuando se decide estrenarla, compartimos con otros nuestra visión sobre el film e
incluso nuestras interpretaciones pueden modificarse. En este sentido Marc Ferró plantea una serie
de miradas con las cuales abordamos un film: cuando vemos una película que habla del pasado le
aplicamos una “mirada positivista” se trata de una mirada común que realizamos todos, lo que
hacemos es una verificación de la autenticidad, ponemos en juego nuestro conocimiento histórico
sobre la representación y podemos afirmar si la misma es correcta o falsa. Como dice Ferró en el
caso de ser falsa nos ponemos contentos, pero a la vez sospechamos del film, por ello los cineastas
prestan mucha atención a ser eruditos, aunque el exceso de erudición es poco atractivo para el cine
(Ferró, 1987).
También podemos realizar una “mirada ideológica”, aquí es donde se ponen en juego no tanto los
conocimientos históricos sino más bien las ideologías del presente, es decir, podemos ver cómo
mira el cineasta lo que está representando y desde ese punto podemos ver la ideología del cineasta.
Tenemos entonces que la “envoltura” ideológica de una película constituye también una fuente, es
decir que aquello que la película dice entre líneas lo podemos trabajar como una fuente. Para esto es
necesaria nuestra participación como docentes, no sólo en el momento en que decidimos trabajar
con una película en la clase, sino que es fundamental dar las herramientas necesarias a los alumnos
para que puedan aplicar esta otra mirada. No vamos a explicar las ideologías de los cineastas
(porque no creo que las conozcamos a todas), pero quizá podemos hacer un rico aporte enseñando a
analizar un film, para ello es importante buscar los datos de los realizadores, analizar el lugar donde
se lleva adelante el film, el momento, conocer las intenciones de los autores, etc. En este sentido me
parece que el trabajar con el cine en el aula debe aportar algo no sólo pensando en la actividad
planteada sino también una enseñanza de cómo leer cine.
Es importante tener presente que el cine conmueve, inquieta, provoca en el espectador algún
sentimiento, esto es algo que podemos explotar para captar el interés de los alumnos (no quiere
decir que suceda, pero existe la posibilidad) . Esa capacidad de conmoción que posee el cine es muy
valiosa en el proceso de aprendizaje ya que no aprendemos porque sí, aprendemos porque algo nos
interesa, nos moviliza algún sentimiento, nos provoca alguna empatía.
La decisión de trabajar con un determinado género de películas es del docente teniendo en cuenta
sus intenciones, las actividades, la temática y la recepción en el grupo. Puede ser útil conocer
algunas sub-categorías de films históricos que existen ya que nos pueden ayudar a realizar una
mejor selección para trabajar en el aula:
En el aula podemos trabajar con películas tanto para introducir a los alumnos en una temática como
para darle cierre a un tema ya tratado. También con distintas películas o películas junto a otros
recursos, podemos presentar diferentes miradas sobre un mismo tema, formas disímiles de
interpretar y tratar un hecho histórico. Debemos evaluar si para la actividad que deseamos
desarrollar es necesario reproducir la película completa o es posible hacer una selección cuidadosa,
esto siempre es un problema debido al factor tiempo; es recomendable tener organizadas de
antemano las actividades que pretendemos que los alumnos desarrollen con el film. Si la idea es
organizar un debate, se debe aclarar con anticipación los puntos sobre los que se quiere discutir para
que los alumnos focalicen la mirada sobre tales puntos, además el docente debe conducir el debate
buscando tensionar el sentido común (Cuesta, 2009).
Es muy provechoso brindar a los alumnos una guía de observación que puede contener algunos de
los siguientes puntos:
Este tipo de guías se pueden analizar oralmente o también se puede pedir a los alumnos que
busquen información sobre la película, director, contexto político-social y elaborar un escrito con la
información y lo conversado luego de la proyección. Siempre es importante otorgar consignas
claras y que el docente guie a los alumnos en el debate hacia los propósitos de la actividad
planteada.Estono quiere decir que si los alumnos se interesan por otra mirada u otro tema que la
película mencione de soslayo, nosotros no le demos espacio a esas interpretaciones.
Otra actividad muy interesante para realizar es la de idear consignas para la reconstrucción del
objeto de estudio, es decir actividades en las que se trata de ejercitar la producción escrita pero que
no fragmentan el objeto como sí sucede con el cuestionario. Luego de proyectada la película se les
puede solicitar a los alumnos que realicen una reseña escrita de lo visto, que elaboren un artículo
periodístico a manera de sinopsis con su opinión, que tomen una escena y desarrollen un devenir
distinto al propuesto por la película (Cuesta, 2009).
El abanico de actividades para trabajar con el cine no se agota en estas propuestas, teniendo en
cuenta la tecnología de la que disponen los alumnos en la actualidad se pueden pensar muchas otras
actividades, pero siempre tienen que estar en diálogo con los propósitos que nos hemos propuesto
para trabajar con determinada película.
La película elegida.
La propuesta de secuencia didáctica que planteo está pensada para 5to año, la temática se ajusta a
los contenidos sugeridos para la tercera unidad “La crisis del petróleo en los `70: el final del estado
de Bienestar, la radicalización política y los estados burocráticos autoritarios”. Procesos como la
dictadura de Onganía, el fracaso de un modelo de modernización económica, el auge de las
organizaciones sociales combativas, son tratados en distintas clases y luego se desarrollaría esta
secuencia didáctica como una manera de analizar la situación que da origen al Cordobazo. La
película que he decidido trabajar con los alumnos muestra muy bien grandes temas de estos tiempos
como ser la vida al interior de las fábricas, los conflictos entre la burocracia sindical y los obreros
de base, la relación entre los empresarios y los sindicalistas, las diferencias entre las tendencias
sindicales, el control obrero por parte de la patronal, la relación entre sindicalistas y gobierno.
La película de Raymundo Gleyzer“Los traidores” (1973) se trata de una ficción, pero que tiene una
riqueza histórica sin igual. En la película se representa críticamente el modo de organización
sindical de la coyuntura histórica al tiempo que el autor pone todo su pensamiento ideológico en
escena. El tema central es la organización sindical y la representatividad de los trabajadores, a la
vez que se ponen en evidencia las condiciones laborales, los conflictos de clase, los manejos
“patoteriles”, las torturas, las formas de organización dentro de los lugares de trabajo, etc.
“Los Traidores” es un texto que está en perfecta concordancia con su contexto, de ahí su riqueza
para trabajarlo en el aula. Obviamente es necesario hacer una introducción donde se explique cuáles
eran las intenciones del autor, qué pretendía mostrar y lograr, a quienes estaba dirigida la película.
Para analizar esto es muy interesante la biografía del autor y su intencionalidad, recordemos que
esta película no estaba destinada al consumidor de cine típico de la época, sino que pretendía llegar
a los trabajadores, a los sectores populares de ahí que se tratara de reproducir en cine-clubes y un
proyecto muy interesante del autor (perteneciente al grupo de Cine de la Base) de difundir su
película y otras “películas sociales” en los barrios, en el interior.
Nosotros hoy no recepcionamos la película cómo lo hicieron los destinatarios en su tiempo, pero al
verla uno no puede negar su vigencia, por eso la película es muy rica también para entablar puentes
con la realidad, no solo para analizar un tipo de sindicalismo que está muy arraigado en la sociedad
argentina del presente sino también para pensar los canales de participación política. El film posee
una dinámica particular, en la que se mezclan la ficción con imágenes documentales (bombardeo
del `55, protestas, etc.), utiliza los primeros planos para acentuar las reacciones y sentimientos de
los protagonistas, planos generales para las escenas colectivas y los planos secuencia para
discusiones o arreglos entre distintos personajes. Asimismo, la trama se desarrolla en una especie
de recuerdo, el diálogo entre el presente del personaje principal y su pasado es constante por lo que
requiere de cierta atención por parte del espectador, es decir capta el interés al establecer las
relaciones que explican los sucesos.
Secuencia didáctica.
Recursos:
Extractos del debate realizado en el programa de televisión “A dos Campanas” de 1973 entre
Agustín Tosco y José Rucci. En: http://www.agustintosco.com.ar/
Propósitos:
Con los recursos que he decidido trabajar es mi intención que los alumnos tengan un panorama
sobre el mundo interior de las fábricas en los años `60: las condiciones de trabajo, las relaciones
entre los obreros, los conflictos con la patronal. Esmi propósito mediante la película trabajar los
conceptos de “burocracia sindical”, “organizaciones de base”, “asambleas” poniéndolos en relación
y tensión con el presente, articulando la relación pasado-presente en la búsqueda de un aprendizaje
significativo.
En un primer momento de no más de 20 minutos realizaré una introducción oral con datos
biográficos de Raymundo Glayzer autor de la película “Los Traidores” que vamos a ver;
contextualizaré el momento histórico en que se produce la película, incentivando el diálogo con los
alumnos refrescando conceptos que ya se trabajaron como “burocracia sindical”, “racionalización
del trabajo”, “organizaciones de base”,“verticalismo en las organizaciones”, explicaré que vamos a
ver una edición (seleccionada por mí) de la película que tiene una duración de 1h 10min.
Repartiré entre los alumnos la biografía del autor junto a una sinopsis de la película y una guía de
análisis con ciertos puntos en los cuales pretendo que focalicen la atención: los distintos actores
sociales que aparecen representados en la película, la relación entre la patronal y los obreros al
interior de la fábrica, el ascenso de un líder sindical, las banderas y consignas que aparecen
mezcladas en las escenas, los cánticos, la relación del sindicalista con los empresarios en los
distintos momentos, las formas para denominar al comunismo, el lenguaje lunfardo, las estrategias
desarrolladas por el líder sindical para hacer del sindicato un negocio, la relación con el capital
extranjero y con el gobierno.
Estos puntos de la guía pretenden solamente enfocar la atención de los estudiantes en temas que
serán tratados con posterioridad a la reproducción de la película.
A modo de cierre de esta primer parte de la secuencia haremos una puesta en común sobre la
película, los temas que se abordan, la estética de las imágenes, las banderas que aparecen, etc.
Luego plantearé la actividad del próximo encuentro
La secuencia continúa en un segundo encuentro, donde se retoma lo planteado en la guía más lo que
pueda surgir de la observación de los alumnos y se desarrolla una conversación sobre cada punto,
ahondando en explicaciones sobre el surgimiento de las organizaciones de base, la corriente
clasista, el contexto social en el que se enmarca el Cordobazo.
Luego pediré a los alumnos que armen grupos tres, distribuiré a cada uno extractos impresos de un
debate llevado adelante en un programa de televisión de canal 11 “A dos Campanas” de 1973, en el
que participaron Agustin Tosco y José Rucci, allí cada cual expresa su posición con respecto al
movimiento obrero argentino.
Tanto Tosco como Rucci expresaron dos tendencias disímiles cuya base de sustentación eran “Las
62 Organizaciones” y el “Movimiento Nacional Intersindical”. Esta selección del debate entre
Tosco y Rucci, será propia y trataré de ponerla en tensión con lo representado en la película, este
debate también se encuentra en el formato de audio por lo que quizá reproduzca algunas partes de
manera que los alumnos puedan conectarse mejor con lo planteado, es un debate claro, limpio en
donde cada uno deja hablar al otro, está perfectamente coordinado por el periodista y creo también
que el escuchar una fuente directa provoca una conmoción interesante para el aprendizaje.
Daré un tiempo para que los lean y los conversen, luego los analizaremos juntos parte por parte
intentando que focalicen la mirada en las distintas formas de pensar al movimiento obrero que
tienen tanto Tosco como Rucci, pediré que busquen esas miradas sobre el movimiento obrero en
escenas de la película. Analizaremos las consecuencias políticas de cada postura, entablando
relaciones con el presente.
La secuencia continúa con un juego de simulación teniendo en cuenta lo afirmado por Cristòfol,
Trepat,el uso de la empatía, la imaginación facilitan “la construcción progresiva de los sistemas de
identificación de las causalidades y consecuencias de los hechos sociales en el tiempo”
(Trepat,1995 en Cuesta, V Ficha de cátedra).
- Un grupo deben representar a los obreros de la fábrica Metalfor ubicada en Córdoba, los
obreros de esta fábrica conforman una organización de base, son alrededor de 130, se
dedican a la fabricación de maquinarias para el agro como ser pulverizadoras y
cosechadoras. El sindicato que los representa es la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) filial
Córdoba, este grupo de obreros al igual que otros tantos en el país están muy desconformes
con los manejos de las dirigencias sindicales de la UOM. Ellos junto a otros grupos de
obreros de distintas fábricas conforman la Unión de Obreros Combativos (UOC), que en
total nuclea alrededor de 1000 trabajadores metalúrgicos en todo el país. Realizan
asambleas al interior de la fábrica, tienen un contacto fluido entre los diferentes grupos
dentro de la UOC, la comisión interna de Metalfor es una de las más organizadas y fuertes
de este movimiento.
- El segundo grupo debe representar a los obreros metalúrgicos que pertenecen a Ghioti, una
fábrica de llantas para maquinaria agrícola cordobesa, son alrededor de 90 obreros, también
están afiliados a la UOM, tienen un delegado que es quién dialoga con los empresarios y
con la dirigencia sindical, muchos no saben quién es el delegado, no se conocen entre ellos,
trabajan muy sectorializados,
- El tercer grupo debe representar a la dirigencia sindical de la UOM. Deben elegir a uno
como líder y resto ser secretarios, tienen relaciones directas con los gobernantes y con los
empresarios que se nuclean en las distintas cámaras. Su forma de actuar es la negociación y
presión. Están muy cuestionados por las bases obreras por su “amiguismo” con el gobierno
de turno y por sus “exorbitantes ingresos”.
Teniendo en cuenta estos grupos la situación en la que deben relacionarse y actuar es la siguiente:
En este contexto la dirigencia sindical debe comunicar esta decisión de los empresarios y
determinar en debate con todos los grupos las medidas a tomar.
Luego de planteadas las consignas se plantea que para el próximo encuentro se llevará adelante el
debate entre los tres grupos en una Asamblea General, se espera que en sus casas los alumnos
busquen material para argumentar e interpretar los roles.
Referencias bibliográficas
Cuesta, Virginia (2009): Historia, Material para la Enseñanza. Ficha de uso interno para la
CátedraPlanificación, Didáctica y Práctica de la Enseñanza en Historia, FAHCE-UNLP.
Ferró Marc (1987). Conferencia pronunciada en francés, bajo el título de "Histoire et non-Histoire,
sousleur forme savante, romanesqueoucinématographique", en las VI Jornades d' Història i Cinema
de la Universidad de Barcelona. Fue publicada por vez primera, traducida al catalán, en
CAPARROS LERA, I. M. (ed.) 6 anysd'Història i Cinema a la Universitat de Barcelona, Memòria.
Barcelona: Facultat de Geografia i Història, 1987, pp. 11-17.
Valero Martínez, Tomás (2008). Cine e historia: más allá de la narración. El cine como materia
auxiliar de la historia. En: http://www.cinehistoria.com/cine_e_historia.pdf (Revisado por última
vez el 07/07/15)