Cómo Vibrar A 432 HZ para Armonizar El Ser
Cómo Vibrar A 432 HZ para Armonizar El Ser
Cómo Vibrar A 432 HZ para Armonizar El Ser
Antes que todo es necesario aclarar que el universo que conocemos está compuesto por
tres formas de sí mismo, superpuestas e indivisibles que interactúan constantemente
produciendo fenómenos que muchas veces no somos capaces de identificar pero que son
perfectamente conocidos a la luz de las ciencias de lo oculto, así pues, este mundo que
conocemos está compuesto por un plano físico, que comprende todo lo que observamos
a simple vista, un plano astral, en el que solo existe la energía en su forma más pura y
en el que se apoyan todos los procesos mágicos, y el plano espiritual donde confluyen
las almas y en el que ocurren los cambios impulsados energéticamente desde el plano
físico a través del astral. Así pues, lo que hacemos en el plano físico tendrá una
respuesta en los otros planos y lo que ocurra en aquellos se manifestará en este.
Lo que vemos en el plano físico no es apariencia, existe, sabemos que es así, sin
embargo, lo que vemos y podemos comprobar es bastante limitado, de modo tal que
tenemos que ampararnos en las leyes herméticas y en las experiencias recogidas de los
grandes metafísicos para poder acceder al poder de controlar lo que ocurre en los
planos astral y espiritual y de esa forma obtener una mejor calidad de vida y otros
beneficios de diversa naturaleza, pero la clave para hacerlo está en vibrar.
Dice el Kybalión: “Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra”, esto define el
principio de vibración, es decir, la ley natural que establece que aun lo que percibimos
como estático está vibrando, se está moviendo, y allí está el mecanismo que usaremos
para lograr nuestro cometido, pero aún necesitamos saber un par de cosas más
principiando por la “paradoja divina”, según la cual es imposible desafiar las leyes que
nos gobiernan pero sí nos es posible emplear sabiamente una ley contra otra,
trasmutando lo que no nos es valioso en algo que sí lo sea.
El autoexamen para determinar nuestro nivel vibratorio es bastante sencillo, basta con
acostarse en el lugar de su preferencia en el mayor silencio posible y preguntarse
cómo se siente, no importa si está mal, aquí no hay aprobado o reprobado, por el
contrario, encontrarse con la realidad de que se siente mal y asumirlo es un primer paso
para transformar eso en algo positivo.
El segundo paso del autoexamen, de resultar aunque sea pequeñamente incomodo o mal
en todos los aspectos, es buscar el origen del esa sensación puesto que ello puede ser
debido a personas, lugares, situaciones, actividades o una mezcla de varias de esas
causas.
FRECUENCIAS INFERIORES O SUPERIORES
De acuerdo a la vibración que tengamos, inferior o superior a 432, estableceremos dos
rituales distintos, el primero para elevar el nivel y armonizar el ser, y el segundo
destinado a mantener el nivel vibratorio y a apreciarlo para generar paz interior, ambos
de suma importancia pues nos permiten trabajar en el plano astral para generar cambios
efectivos en nosotros mismos y en nuestro entorno cercano.
Aunque se crea lo contrario, es mucho más arduo el trabajo mental para mantener
nuestro ser en alta vibración pues lo normal en el mundo convulsionado en que
vivimos es que casi cualquier cosa que nos ocurra en el día a día que nos devuelva de un
solo salto a una frecuencia vibratoria negativa y es algo de lo que no podemos escapar
pues no vivimos aislados.
Lo más recomendable para meditar es el silencio, es por ello que debes procurarte para
ello el momento del día en que puedas hacerlo a solas, que nada ni nadie te moleste,
por lo que es necesario también apagar todos los dispositivos que puedan generar
distracción, sin embargo, en las primeras sesiones te darás cuenta que cuando reina el
silencio la mente hace ruido y tenderás a desviarte del objetivo con pensamientos
triviales o que no vienen el caso, si gustas y si así lo deseas puedes ayudarte poniendo
música de alta vibración, insisto en ese género porque lo que consigues en internet
como música de relajación no te servirá pues esta última es compuesta para generar
sueño y el objetivo no es dormir.
La posición realmente no es de mayor importancia así que lo mismo puede ser en el sofá
o en el piso, de piernas cruzadas o acostado, pero evita la cama, recuerda que no vas a
tomarte una siesta, lo que sí es importante es que cierres los ojos y coloques tus manos
en el esternón o plexo solar y comiences a hacerte consciente de tu respiración, trata de
que sea profunda pero sin exagerar, hasta que sea lenta y fluida
Cuando sientas que tu cuerpo y tu mente están relajados pregúntate cómo te sientes.
Mal, triste, eufórico, ansioso, obsérvate, hazte consciente de ello y dite: Necesito
cambiar esto. Pregúntate: ¿Qué es lo que origina esto? Si tienes la respuesta debes
entonces transmutarlo, esto es, transformar el agente detonante en su perfecto opuesto,
es decir, si sientes rencor por una persona, perdónala, perdónate, respira profundamente
un par de veces e imagínatela en forma distinta, repite la respiración e imagina que ya
ese sentimiento ha pasado, vuelve a inhalar y exhala con más fuerza, sácalo de ti, sigue
respirando y pregúntate cómo te sientes al respecto, si te sigues sintiendo igual repite la
operación ¡Suéltalo!, y si ya te sientes mejor continúa sacando esas cosas que te afectan
desde afuera, cuando ya no tengas más (o no recuerdes) quédate un momento contigo,
siente libre tu pecho, tu paz interna, siente la energía recorrer tu cuerpo y llegar al plexo
solar, escucha lo que hay dentro de ti, eso es la consciencia.
MANTENIMIENTO VIBRATORIO
Para mantener el nivel vibratorio deberás centrar tu pensamiento en la respiración
que estás haciendo, procurando bloquear esos pensamientos triviales que van saliendo
de cuando en cuando y perfeccionando el silencio mental absoluto y sintiendo la energía
concentrada en el plexo solar (Chakra Manipura) y en la frente, donde se ubica el
tercer ojo o (Chakra Ajna) y que es el conector de nuestro cuerpo físico con nuestro
cuerpo astral y espiritual, proyectando tu propio bienestar a través de decretos.
Para concluir el ejercicio de meditación eleva tus manos al cielo y da gracias por lo
que has recibido, abre los ojos y sigue respirando profundamente hasta que te
incorpores.
Mi final consejo con respecto a este tema es que te tomes el tiempo necesario, que no
lleves contigo el lastre del tiempo y que de ahora en adelante te hagas consciente de la
frecuencia en que estás vibrando para que puedas comenzar a generar cambios
significativos en ti.