La Acción de Amparo Constitucional.
La Acción de Amparo Constitucional.
La Acción de Amparo Constitucional.
La acción de amparo
constitucional.
Facilitador: Bachiller:
Abg. Fernando Monsalve Mary Ortega 26.815.923
Glenda Martin 26.684.053
Samara Armas 26.959.440
10mo Semestre
Aquellas que son emitidas por las secciones o subsecciones de alguna sala del
Consejo de Estado, las dictadas por los Tribunales Administrativos en única,
primera o segunda instancia y, las emitidas por los jueces administrativos en
primera o segunda instancia.
El recurso debe interponerse ante la autoridad judicial competente dentro del año
siguiente a la ejecutoria de la sentencia reprochada o de la sentencia penal, en el
caso de que se aleguen las causales tres o cuatro, o dentro del mismo termino al
de la ocurrencia de los hechos que motivan la interposición del recurso.
La Ley del Estatuto de la Función Pública en su artículo 92, establece que los
actos administrativos de carácter particular dictados en ejecución de la ley por los
funcionarios o funcionarias públicas agotarán la vía administrativa, en
consecuencia solo podrá ser ejercido contra ellos el Recurso Contencioso
Administrativo Funcionarial dentro del término previsto en el artículo 94 de la Ley
del Estatuto de la Función Pública, conforme a la Ley Orgánica de Procedimientos
Administrativos, la cual establece un lapso de 90 días para ejercer el recurso,
contados a partir de la notificación del acto administrativo al interesado.
Es por ello que la Ley del Estatuto de la Función Pública establece la garantía al
debido proceso para el funcionaria o funcionario público en caso de ser objeto de
una medida disciplinaria de destitución. Proceso este que se encuentra
subordinado a una serie de reglas procesales de modo, tiempo y lugar; con la
finalidad de darle celeridad y economía procesal a la decisión que se requiera para
el caso en concreto.
Todos los empleados del sector estatal (sean funcionarios o de otro rango), se
rigen por el “derecho administrativo público”. Sin embargo, no les corresponden
las mismas normas a los ministros, secretarios de Estado, integrantes del gabinete
de ministros, o a los empleados administrativos. Cada rango se rige por contratos
especiales con cierto nivel de responsabilidades y beneficios.
El Estado cuenta con mecanismos para contratar funcionarios de manera objetiva
(por mérito o concursos públicos). Además, ofrece mayores que el sector privado
(como jornadas más reducidas o mayor cantidad de días de vacaciones) a modo
de incentivo para que el personal mejor capacitado e idóneo tenga interés en
ocupar este tipo de puestos al servicio del Estado.