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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013 ENTRE

LAS SUSTENTADAS POR EL SEGUNDO


TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL
DEL TERCER CIRCUITO Y EL PRIMER
TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL
DEL PRIMER CIRCUITO

MINISTRO PONENTE: ARTURO ZALDÍVAR LELO DE LARREA.


SECRETARIO: SAÚL ARMANDO PATIÑO LARA

México, Distrito Federal. Acuerdo de la Primera Sala de la


Suprema Corte de Justicia de la Nación correspondiente al día
quince de abril de dos mil quince.

VO. BO.
MINISTRO:

V I S T O S para resolver los autos de la contradicción de tesis


396/2013 entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado
en Materia Penal del Tercer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado
en Materia Penal del Primer Circuito.

R E S U L T A N D O:

COTEJÓ:

PRIMERO. Los Magistrados integrantes del Segundo Tribunal


Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito, mediante Oficio
número 4908, recibido el treinta de septiembre de dos mil catorce
ante la Oficina de Certificación Judicial y Correspondencia de este
Alto Tribunal, denunciaron la probable contradicción de tesis entre
el criterio sostenido por el Primer Tribunal Colegiado en Materia
penal del Primer Circuito al resolver el amparo en revisión **********,
el cual dio origen a la tesis aislada que lleva por rubro:
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

“CONSENTIMIENTO DEL ACTO RECLAMADO. NO LO HAY SI


EL QUEJOSO DESISTE DE UN JUICIO DE AMPARO Y
PRESENTA NUEVA DEMANDA DENTRO DEL PLAZO LEGAL
PARA EJERCER ESA ACCIÓN” y el criterio de jurisprudencia
empleado por el Tribunal Colegiado denunciante al resolver el
recurso de reclamación ********** de rubro: “DESISTIMIENTO DE
LA DEMANDA EN EL JUICIO DE AMPARO. IMPLICA EL
CONSENTIMIENTO EXPRESO DE LOS ACTOS RECLAMADOS,
RESULTANDO IMPROCEDENTE UN NUEVO JUICIO CONTRA
ELLOS.”

SEGUNDO. El Presidente de la Suprema Corte de Justicia de


la Nación, mediante auto de tres de octubre de dos mil trece,
ordenó la formación y registro de la denuncia de contradicción de
tesis bajo el número 396/2013, la que admitió a trámite. Asimismo,
ordenó girar oficio a la Presidencia del Primer Tribunal Colegiado
en Materia Penal del Primer Circuito, para solicitar copias
certificadas de la ejecutoria pronunciada en el amparo en revisión
**********, a fin de que el asunto quedara debidamente integrado.
Asimismo, solicitó a las Presidencias de ambos Tribunales
Colegiados de Circuito que informaran si los criterios sustentados
en los asuntos con los que se denuncia la presente contradicción
de tesis, seguían vigentes o, en su caso, la causa para tenerlo por
superado o abandonado.

El Presidente de la Primera Sala de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, en proveído de catorce de octubre de dos mil
trece, se avocó al conocimiento del presente asunto y ordenó enviar
los autos a la ponencia correspondiente.

2
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

Una vez que el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal


del Primer Circuito, remitió las copias certificadas de la resolución
solicitada e informó que al resolver el diverso recurso de revisión
**********, sustentó el mismo criterio, del cual adjuntó la copia
certificada correspondiente y, que los Tribunales contendientes
manifestaron que los criterios que participaban se encontraban
vigentes; el Presidente de este Alto Tribunal, mediante auto de dos
de enero de dos mil catorce 1, consideró debidamente integrado el
expediente en que se actúa y ordenó turnar los autos a la Ponencia
del Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea a fin de que formulara el
proyecto de resolución correspondiente.

C O N S I D E R A N D O:

PRIMERO. Esta Primera Sala es competente para conocer y


resolver la presente contradicción de tesis de conformidad con lo
dispuesto por el artículo 107, fracción XIII, de la Constitución
Federal, -aplicado en términos del criterio sustentado por el Pleno
de este Alto Tribunal, en la tesis P. I/2012 (10a.) de rubro:
“CONTRADICCIÓN DE TESIS ENTRE TRIBUNALES
COLEGIADOS DE DIFERENTE CIRCUITO. CORRESPONDE
CONOCER DE ELLAS A LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE
LA NACIÓN (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO 107, FRACCIÓN
XIII, PÁRRAFO SEGUNDO, DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE
LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, REFORMADO MEDIANTE
DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA
FEDERACIÓN EL 6 DE JUNIO DE 2011)” 2- y el artículo 226,
1
Foja 92.
2
P. I/2012 Décima Época; Pleno; Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Libro VI,
Marzo de 2012, Tomo 1, Pág. 9, que dice: “De los fines perseguidos por el Poder Reformador de
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se advierte que se creó a los Plenos
de Circuito para resolver las contradicciones de tesis surgidas entre Tribunales Colegiados
pertenecientes a un mismo Circuito, y si bien en el texto constitucional aprobado no se hace
referencia expresa a la atribución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para conocer de

3
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

fracción II, de la Ley de Amparo vigente a partir del tres de abril de


dos mil trece, en relación con los Puntos Segundo, fracción VII, y
Tercero del Acuerdo General 5/2013. Ello en virtud de que se trata
de una denuncia de contradicción de tesis suscitada entre criterios
de Tribunales Colegiados de diversos Circuitos.

SEGUNDO. La denuncia de contradicción de tesis proviene de


parte legítima, porque fue formulada por un integrante del Segundo
Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito, órgano
que emitió la resolución en la que se sustenta el criterio
contendiente. Por tanto, formalmente se actualizó el supuesto de
legitimación previsto en los artículos 107, fracción XIII, primer
párrafo, de la Constitución Federal y 227, fracción II, de la Ley de
Amparo.
TERCERO. Para poder resolver el presente asunto, en primer
lugar, debe determinarse si en el caso existe contradicción de
las contradicciones suscitadas entre Tribunales Colegiados pertenecientes a diferentes Circuitos,
debe estimarse que se está en presencia de una omisión legislativa que debe colmarse
atendiendo a los fines de la reforma constitucional citada, así como a la naturaleza de las
contradicciones de tesis cuya resolución se confirió a este Alto Tribunal, ya que uno de los fines
de la reforma señalada fue proteger el principio de seguridad jurídica manteniendo a la Suprema
Corte como órgano terminal en materia de interpretación del orden jurídico nacional, por lo que
dada la limitada competencia de los Plenos de Circuito, de sostenerse que a este Máximo
Tribunal no le corresponde resolver las contradicciones de tesis entre Tribunales Colegiados de
diverso Circuito, se afectaría el principio de seguridad jurídica, ya que en tanto no se diera una
divergencia de criterios al seno de un mismo Circuito sobre la interpretación, por ejemplo, de
preceptos constitucionales, de la Ley de Amparo o de diverso ordenamiento federal, podrían
prevalecer indefinidamente en los diferentes Circuitos criterios diversos sobre normas generales
de trascendencia nacional. Incluso, para colmar la omisión en la que se incurrió, debe
considerarse que en el artículo 107, fracción XIII, párrafo segundo, de la Constitución General de
la República, se confirió competencia expresa a este Alto Tribunal para conocer de
contradicciones de tesis entre Tribunales Colegiados de un mismo Circuito, cuando éstos se
encuentren especializados en diversa materia, de donde se deduce, por mayoría de razón, que
también le corresponde resolver las contradicciones de tesis entre Tribunales Colegiados de
diferentes Circuitos, especializados o no en la misma materia, pues de lo contrario el sistema
establecido en la referida reforma constitucional daría lugar a que al seno de un Circuito, sin
participación alguna de los Plenos de Circuito, la Suprema Corte pudiera establecer
jurisprudencia sobre el alcance de una normativa de trascendencia nacional cuando los criterios
contradictorios derivaran de Tribunales Colegiados con diferente especialización, y cuando la
contradicción respectiva proviniera de Tribunales Colegiados de diferente Circuito,
especializados o no, la falta de certeza sobre la definición de la interpretación de normativa de
esa índole permanecería hasta en tanto no se suscitara la contradicción entre los respectivos
Plenos de Circuito. Por tanto, atendiendo a los fines de la indicada reforma constitucional,
especialmente a la tutela del principio de seguridad jurídica que se pretende garantizar mediante
la resolución de las contradicciones de tesis, se concluye que a este Alto Tribunal le corresponde
conocer de las contradicciones de tesis entre Tribunales Colegiados de diferente Circuito.”

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

criterios, para lo cual es necesario analizar las ejecutorias que


participan en la misma.

I. El Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del


Tercer Circuito resolvió el cinco de septiembre de dos mil trece, el
recurso de reclamación **********. Los antecedentes del caso se
resumen en los siguientes puntos:

 Por escrito presentado el veinticuatro de julio de dos mil trece,


en la Oficialía de Partes del Tercer Tribunal Unitario del Tercer
Circuito, **********, entro otros, solicitó la protección
constitucional, contra actos del referido Tribunal de Alzada y
del Juez Cuarto de Distrito de Procesos Penales Federales en
el Estado de Jalisco, a quienes reclamó, respectivamente, la
sentencia de diecisiete de abril de dos mil doce, emitida en el
toca ********** y su ejecución.

 Correspondió conocer del asunto al Segundo Tribunal


Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito, cuyo
Presidente, por auto de siete agosto de dos mil trece,
determinó desechar el ocurso únicamente por lo que hacía a
********** o **********, al estimar actualizada la causa de
improcedencia prevista en el artículo 61, fracción XI, de la Ley
de Amparo vigente a partir del tres de abril de dos mil trece,
ya que el acto reclamado había sido materia del diverso juicio
de amparo **********, resuelto por el mismo Órgano Colegiado
en el que sobreseyó en el juicio en virtud del desistimiento
expreso de la acción constitucional.
 Inconforme con la determinación anterior, el quejoso **********
o **********, interpuso recurso de reclamación.

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

Al resolver dicho recurso de reclamación, el Tribunal


Colegiado de Circuito determinó declararlo infundado, confirmar el
auto recurrido y ordenó llevar a cabo la denuncia de la posible
contradicción de tesis de acuerdo a las siguientes consideraciones:

 Que fue voluntad expresa del quejoso desistirse del juicio de


amparo directo **********, que fue promovido contra las
mismas autoridades y acto reclamado del diverso amparo
directo **********, que dio origen a la reclamación **********.

 Aplicó lo dispuesto en la jurisprudencia por contradicción de


tesis P./J.3/96, emitida por el Pleno de la Suprema corte de
Justicia de la Nación, de rubro: “DESISTIMIENTO DE LA
DEMANDA EN EL JUICIO DE AMPARO. IMPLICA EL
CONSENTIMIENTO EXPRESO DE LOS ACTOS
RECLAMADOS, RESULTANDO IMPROCEDENTE UN
NUEVO JUICIO CONTRA ELLOS.”3
 En el trámite del juicio, el tribunal determinó la improcedencia
de la acción por estimar que el quejoso realizó una
3
Novena Época, Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en el
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo III, febrero de 1996, página: 22, que
dice: “Entre los principios rectores del juicio de amparo se encuentra el de instancia de parte
agraviada, conforme con el cual dicho juicio sólo puede ser promovido por la parte a quien
perjudique el acto reclamado. Por consecuencia, es lógico concluir que quien puede promover el
juicio de amparo, salvo lo dispuesto en el artículo 14 de la ley de la materia, se encuentra
también en condiciones de desistir de él. El desistimiento en el juicio de amparo implica un
desistimiento de la acción y, por ende, supone el consentimiento expreso de los actos
reclamados, pues el efecto de la renuncia del quejoso, el sobreseimiento en el juicio, deja a la
autoridad responsable en aptitud de obrar o de no hacerlo, en el sentido asignado al acto
reclamado. Como ese desistimiento entraña un consentimiento expreso de los actos
reclamados, si el quejoso promueve un diverso juicio en contra de los mismos actos reclamados
en aquel del cual desistió, el segundo juicio resultará improcedente, al actualizarse los supuestos
previstos por la fracción XI del artículo 73 de la Ley de Amparo. En ese sentido, cuando se
satisfacen los requisitos legales, ese desistimiento también puede actualizar los supuestos de la
fracción IV del numeral citado pues si bien, en principio y como regla general, una resolución de
sobreseimiento -que es la consecuencia del desistimiento del quejoso- no constituye cosa
juzgada, existen casos de excepción a ese principio, como lo ha establecido la jurisprudencia de
la Suprema Corte (publicada en la página novecientos veintisiete, de la Segunda Parte, del
Apéndice al Semanario Judicial de la Federación de mil novecientos ochenta y ocho) que
revelan la inejercitabilidad de la acción y dentro de los que se encuentra el relativo al
consentimiento, en ese caso, expreso, de los actos reclamados.”

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

manifestación de voluntad que entrañó su consentimiento con


respecto al acto controvertido, por lo que era indefectible que
ante la firmeza procesal de esa decisión que impidió el curso
de la acción, ello se equiparara y tuviera los alcances de una
ejecutoria, de conformidad con lo previsto en el artículo 61,
fracción XI, de la Ley de Amparo vigente.

 Del contenido de la fracción IV, del artículo 73 de la anterior


Ley de Amparo y de la XI, del diverso 61, de la legislación
vigente, se advierte que siguen contemplando como causal de
improcedencia la circunstancia de que un mismo quejoso
promueva en dos ocasiones un juicio de amparo contra las
mismas autoridades y actos reclamados.

 La interpretación que contiene la referida jurisprudencia, aun


cuando sea con base en la anterior legislación, continúa
vigente al no oponerse con el actual contenido de la Ley de
Amparo, de conformidad con su artículo sexto transitorio.

 De conformidad con lo dispuesto en el artículo 107, fracción I,


Constitucional, para que un juez o tribunal de amparo tengan
certeza y seguridad, tanto en la intensión del promovente
como en la resolución de sobreseimiento que deben dictar al
respecto, resulta indispensable que el escrito de desistimiento
sea ratificado por el quejoso ante la presencia judicial de un
funcionario con fe pública, lo cual no constituye una mera
formalidad para el juzgador, sino que tiene como finalidad
cerciorarse de la identidad de quien desiste y saber si
preserva su propósito de dar por concluido el procedimiento
que inició.

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

 En el caso de que el quejoso en un juicio de amparo


manifieste que desiste en su perjuicio de la demanda que
presentó, pero no ratifica dicha manifestación, debe
continuarse con el procedimiento del juicio, empero, cuando
ratifica ante la presencia judicial su voluntad de no seguir con
la acción constitucional, es indudable que a ese juicio de
amparo debe recaer una resolución de sobreseimiento, pues
la acción de derechos fundamentales solo puede iniciar a
petición de parte agraviada como lo señala la Carta Magna.

 El artículo 17, fracción II, de la Ley de Amparo vigente, señala


que cuando se reclame la sentencia definitiva condenatoria en
un proceso penal que impone pena de prisión, podrá
interponerse en un plazo de hasta ocho años, pero también es
que no hay ningún precepto que señale que un mismo
quejoso podrá promover cuantos juicios de amparo crea
conveniente, contra las mismas autoridades y acto reclamado,
como tampoco dispone que tendrá la posibilidad de desistir
cuando lo desee y después externar su voluntad de poner en
marcha la acción constitucional por segunda ocasión, pues
siendo un medio extraordinario de defensa no puede dejarse
su promoción al capricho de los gobernados.

 Cuando el recurrente desistió de la continuación y resolución


del juicio de amparo directo **********, externó expresamente
su voluntad de abandonar la acción constitucional que instó, y
por ende, aquél asunto fue sobreseído, ya que era la
ejecutoria que correspondía a la manifestación expresa del
inconforme de ya no seguir con el juicio de amparo.

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

 La manifestación de voluntad de desistir de la demanda de


amparo entraña el consentimiento expreso del acto
reclamado, quedando las cosas en el mismo estado en el que
se encontraban antes de promoverse aquélla, por ello, no es
factible acceder a la solicitud del quejoso de que se deje sin
efectos el desistimiento formulado, puesto que desde el
momento en que renunció a la acción constitucional,
ratificando ese proceder, aceptó el acto reclamado y no puede
quedar a su voluntad o capricho la procedencia del juicio de
amparo, en virtud de que el consentimiento del acto
reclamado opera en el juicio con independencia de las
razones que se hayan tenido en cuenta para efectuarlo.

 Tomar en cuenta la sentencia emitida por la Corte


Interamericana de Derechos Humanos (caso trabajadores
cesados del Congreso vs Perú, en el cual se analizó que los
gobernados tienen el derecho de acceder a un recurso
sencillo, rápido y eficaz, que garantice el acceso a la justicia),
sería desconocer la jurisprudencia por contradicción de tesis
P/J.3/96 ya referida, la cual sirvió de base para respaldar la
determinación adoptada en el acuerdo de presidencia
impugnado, criterio que es de observancia obligatoria. Máxime
que de la lectura de la resolución internacional no se advierte
que la Corte interamericana refiera que ese recurso podría ser
hecho valer cuántas veces lo considerara oportuno el
afectado.

 No se estaba en el supuesto de realizar un control de


convencionalidad entre las propias normas de este País y las
convencionales a efecto de ponderar cuál es más benéfica,

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

pues la determinación adoptada se encuentra sustentada en


normas nacionales aplicables.

 Estimar que los gobernados con derecho a promover un juicio


de amparo, puedan desistir de él y posteriormente instar la
acción constitucional cuántas veces se requiera en un plazo
de ocho años, sería crear en los propios justiciables una
inseguridad jurídica que no vería fin, esto es, no es
considerable jurídicamente, que un mismo quejoso pudiera
promover la cantidad de juicios de amparo que creyera
pertinentes contra un mismo acto reclamado y autoridad
responsable, para después expresar que no es su deseo
seguir con la acción constitucional y, posteriormente,
manifestar que sí.

 Todos los juicios constitucionales, si fueren procedentes,


derivarían una suspensión del acto reclamado, que impediría
a la autoridad responsable ejecutarlo, como también que los
procedimientos instaurados contra el amparista por la
comisión de una conducta delictiva, no avanzara en sus
etapas legales, debido precisamente a que cuando fuere
deseo del garantista, se vería suspendido al accionar el juicio
de garantías, afectando con ello, no solo el derecho
fundamental de seguridad jurídica, sino, el derecho sustantivo
de las víctimas u ofendidos de un delito a la reparación del
daño, elevado ya a rango constitucional.

 El artículo 17, párrafo segundo y tercero, alberga diversos


principios que regulan la administración de justicia a favor de
los gobernados, cuyo cumplimiento es inconcuso, ya que
debe garantizarse en todo momento e instancia, que la

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

administración de justicia se ajuste para no permitir que el


juicio de amparo se promueva con el propósito de entorpecer
la pronta solución de los juicios o la ejecución de las
resoluciones respectivas.

 Los agravios torales del recurrente fueron argumentos


similares a los adoptados por el Primer Tribunal Colegiado en
Materia Penal del Primer Circuito, al sustentar la tesis de
rubro: “CONSENTIMIENTO DEL ACTO RECLAMADO. NO
LO HAY SI EL QUEJOSO DESISTE DE UN JUICIO DE
AMPARO Y PRESENTA NUEVA DEMANA DENTRO DEL
PLAZO LEGAL PARA EJERCER ESA ACCIÓN.”, cuyas
consideraciones no comparte el Tribunal denunciante.

II. El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer


Circuito, resolvió el diecisiete de mayo de dos mil doce, el amparo
en revisión **********. Los antecedentes del caso son los siguientes:

 El once de noviembre de dos mil once, el Juez Vigésimo


Quinto de Paz Penal –actualmente Juez Vigésimo Quinto
Penal de Delitos No Graves- dictó un acuerdo dentro de la
causa penal **********, mediante el cual impuso al quejoso
medidas cautelares a favor de las víctimas en el proceso.

 En desacuerdo con la determinación anterior, el quejoso


promovió demanda de amparo de la que conoció la Juez
Octavo de Distrito de Amparo en Materia Penal en el Distrito
Federal, quien dictó sentencia el dieciocho de enero de dos
mil doce, en el sentido de sobreseer en el juicio al considerar
actualizada la causa de improcedencia prevista en el artículo
73, fracción XI, de la Ley de Amparo, relativa a los actos

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

consentidos, tras considerar que como el quejoso


anteriormente había presentado una primera demanda de
amparo en contra de uno de los actos reclamados y desistió
de ella -por lo que en ese amparo se sobreseyó fuera de
audiencia-, ello entraña una evidente manifestación de
voluntad para consentir ese acto, y por vía de consecuencia
también sobreseyó por el precepto legal reclamado por haber
sido aplicado en aquél acto de autoridad.

Al resolver dicho recurso, el Tribunal Colegiado de Circuito


determinó revocar la sentencia recurrida y ordenó reponer el
procedimiento de acuerdo a las siguientes consideraciones:

 De lo dispuesto en el artículo 73, fracción XI, de la Ley de


Amparo vigente, no se advierte que expresamente se prevea
como causal de improcedencia cuando el quejoso desista de
una primera demanda y posteriormente, presente otra en
contra del mismo acto –menos aun cuando agregue un acto
más que depende del originalmente reclamado-.

 El fundamento del criterio contenido en la jurisprudencia


P./J.3/96 de rubro: “DESISTIMIENTO DE LA DEMANDA EN
EL JUICIO DE AMPARO. IMPLICA EL CONSENTIMIENTO
EXPRESO DE LOS ACTOS RECLAMADOS RESULTANDO
IMPROCEDENTE UN NUEVO JUICIO CONTRA ELLOS.”, se
fijó a partir de la interpretación del artículo 73, fracción XI, de
la Ley de Amparo, en un contexto constitucional diferente al
que prevalece, pues a partir de la reforma al artículo 1°
Constitucional de seis de junio de dos mil once, se fijaron
nuevas pautas de interpretación en materia de derechos
humanos y la propia jurisprudencia del Máximo Tribunal del

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

País, da el soporte para determinar que ese criterio dejó de


tener vigencia.

 De lo dispuesto en los artículos 1° y 17 Constitucional, debe


entenderse que ante las posibles interpretaciones del artículo
73 de la Ley de amparo, el juez debe acoger aquella que se
haya acreditado fehacientemente, evitando dejar con base en
presunciones, en estado de indefensión al promovente, como
lo ha sostenido la Segunda Sala del Alto Tribunal del País, en
la tesis 2a. CLVII/2009 de rubro: “IMPROCEDENCIA DEL
JUICIO DE AMPARO. LAS CAUSALES QUE LA PREVÉN
DEBEN INTERPRETARSE DE MANERA ESTRICTA, A FIN
DE EVITAR OBSTACULIZAR INJUSTIFICADAMENTE EL
ACCESO DE LOS INDIVIDUOS A DICHOS MEDIOS DE
DEFENSA.”

 La causa de improcedencia por consentimiento expreso del


acto reclamado o manifestación de voluntad que lo entrañen,
acarrea la consecuencia de que el acto de autoridad surta
efectos en la esfera jurídica del gobernado o, por lo menos,
que no pueda analizarse por la jurisdicción constitucional y por
ello, requiere que el consentimiento sea manifestado a través
de signos inequívocos, para que no pueda considerarse que
existe cuando no es así, por lo que la duda respecto de esa
intensión de consentir, implica necesariamente que deba ser
evidente y clara, de acuerdo con el acto de la autoridad.
 El desistimiento de una demanda de amparo previa promovida
contra el mismo acto, sin que se haya agotado el término
de quince días que señala el artículo 21 de la Ley de
Amparo, no es una manifestación inequívoca y clara de la
voluntad para consentir el acto de la autoridad; ya que la

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

presentación de la nueva demanda dentro de dicho plazo


revela que no fue esa la intensión del gobernado.

 Si una persona presenta una demanda de amparo y desiste


de ella debe sobreseerse en ese juicio porque así lo dispone
expresamente el artículo 74, fracción I, de la Ley de Amparo,
pero no porque se estime que consiente el acto de la
autoridad, pues verlo así, es sólo una posibilidad -ante una
amplia gama de razones para emitir un desistimiento
relacionadas con la estrategia de litigio-, y quizá más remota,
atendiendo a la lógica de que quien resiente los efectos del
acto de autoridad, deseará defenderse de ellos, no
consentirlos.

 Si el legislador habilita al gobernado para ejercer una acción


de amparo en contra de dicho acto en un plazo de quince
días, en principio significa que puede ejercer dicho derecho
procesal desde el primer día hasta el último e incluso mejorar
el ejercicio al inicio con nuevos planteamientos que se hagan
al final de dicho lapso.

 Cuando el legislador cancela la posibilidad de acceder al juicio


de amparo porque el gobernado ha consentido el acto de
autoridad de manera expresa o tácita, debe entenderse que
en una interpretación restrictiva, para privilegiar el derecho
fundamental de acceso a la justicia y potencializar los
derechos del gobernado frente a los actos de autoridad
atendiendo al principio pro persona, ese consentimiento debe
ser unívoco, unilateral e incondicional de parte del gobernado,
de tal manera que revele su interés de no acudir a los

14
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

tribunales para defenderse del acto precisamente dentro del


plazo establecido.

 Si ejercida la acción, el quejoso la abandona pero dentro del


plazo original establecido en la ley, se vuelve a accionar y
más aún, lo hace con pretensiones de mayor calado, ello
demuestra que el abandono de su primera demanda distó
mucho de querer someterse al acto de autoridad, sino que
desde su óptima se trataba de un repliegue para mejorar o
corregir la estrategia de su acción.

 Si el quejoso presentó inicialmente una demanda en contra de


un acuerdo judicial de la cual desistió y dentro del plazo de
quince días que establece el artículo 21 de la Ley de Amparo,
presentó una nueva demanda en contra del mismo acto,
además de la reclamación de la aplicación de un artículo del
Código de Procedimientos Penales para el Distrito Federal, lo
que demuestra no es el consentimiento, sino que deseaba
mejorar su pretensión.

 Ante la falta de prueba plena sobre el consentimiento expreso


del acto reclamado, no se puede tener por actualizada la
causa de improcedencia señalada por el Juez de Distrito.

 Precisó que al resolver el recurso de revisión **********,


sustentó el mismo criterio.

CUARTO. Improcedencia de la contradicción de tesis. En


primer lugar, debe precisarse que el objeto de la resolución de una
contradicción de tesis radica en unificar los criterios contendientes.

15
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

Es decir, para identificar si es existente la contradicción de tesis


deberá tenerse como premisa generar seguridad jurídica.

De diversos criterios de esta Suprema Corte, podemos derivar


las siguientes características que deben analizarse para determinar
la existencia de una contradicción de tesis:

1. No es necesario que los criterios deriven de elementos de hecho


idénticos, pero es esencial que estudien la misma cuestión
jurídica, arribando a decisiones encontradas. Sirve de sustento
la jurisprudencia “CONTRADICCIÓN DE TESIS. EXISTE
CUANDO LAS SALAS DE LA SUPREMA CORTE DE
JUSTICIA DE LA NACIÓN O LOS TRIBUNALES
COLEGIADOS DE CIRCUITO ADOPTAN EN SUS
SENTENCIAS CRITERIOS JURÍDICOS DISCREPANTES
SOBRE UN MISMO PUNTO DE DERECHO,
INDEPENDIENTEMENTE DE QUE LAS CUESTIONES
FÁCTICAS QUE LO RODEAN NO SEAN EXACTAMENTE
IGUALES”4 y la tesis “CONTRADICCIÓN DE TESIS. DEBE
4
Jurisprudencia P./J. 72/2010 de la Novena época, publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, tomo XXXII, agosto de 2010, p. 7 y cuyo texto es el siguiente: “De los
artículos 107, fracción XIII, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 197 y
197-A de la Ley de Amparo, se advierte que la existencia de la contradicción de criterios está
condicionada a que las Salas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación o los Tribunales
Colegiados de Circuito en las sentencias que pronuncien sostengan "tesis contradictorias",
entendiéndose por "tesis" el criterio adoptado por el juzgador a través de argumentaciones
lógico-jurídicas para justificar su decisión en una controversia, lo que determina que la
contradicción de tesis se actualiza cuando dos o más órganos jurisdiccionales terminales
adoptan criterios jurídicos discrepantes sobre un mismo punto de derecho, independientemente
de que las cuestiones fácticas que lo rodean no sean exactamente iguales, pues la práctica
judicial demuestra la dificultad de que existan dos o más asuntos idénticos, tanto en los
problemas de derecho como en los de hecho, de ahí que considerar que la contradicción se
actualiza únicamente cuando los asuntos son exactamente iguales constituye un criterio rigorista
que impide resolver la discrepancia de criterios jurídicos, lo que conlleva a que el esfuerzo
judicial se centre en detectar las diferencias entre los asuntos y no en solucionar la discrepancia.
Además, las cuestiones fácticas que en ocasiones rodean el problema jurídico respecto del cual
se sostienen criterios opuestos y, consecuentemente, se denuncian como contradictorios,
generalmente son cuestiones secundarias o accidentales y, por tanto, no inciden en la
naturaleza de los problemas jurídicos resueltos. Es por ello que este Alto Tribunal interrumpió la
jurisprudencia P./J. 26/2001 de rubro: "CONTRADICCIÓN DE TESIS DE TRIBUNALES
COLEGIADOS DE CIRCUITO. REQUISITOS PARA SU EXISTENCIA.", al resolver la
contradicción de tesis 36/2007-PL, pues al establecer que la contradicción se actualiza siempre
que "al resolver los negocios jurídicos se examinen cuestiones jurídicas esencialmente iguales y

16
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

ESTIMARSE EXISTENTE, AUNQUE SE ADVIERTAN


ELEMENTOS SECUNDARIOS DIFERENTES EN EL ORIGEN
DE LAS EJECUTORIAS”;5

2. Que los Tribunales contendientes hayan resuelto alguna


cuestión litigiosa en la que se vieron en la necesidad de ejercer
el arbitrio judicial a través de un ejercicio interpretativo mediante
la adopción de algún canon o método, cualquiera que fuese;
3. Que entre los ejercicios interpretativos respectivos se encuentre
al menos un tramo de razonamiento en el que la diferente
interpretación ejercida gire en torno a un mismo tipo de

se adopten posiciones o criterios jurídicos discrepantes" se impedía el estudio del tema jurídico
materia de la contradicción con base en "diferencias" fácticas que desde el punto de vista
estrictamente jurídico no deberían obstaculizar el análisis de fondo de la contradicción planteada,
lo que es contrario a la lógica del sistema de jurisprudencia establecido en la Ley de Amparo,
pues al sujetarse su existencia al cumplimiento del indicado requisito disminuye el número de
contradicciones que se resuelven en detrimento de la seguridad jurídica que debe
salvaguardarse ante criterios jurídicos claramente opuestos. De lo anterior se sigue que la
existencia de una contradicción de tesis deriva de la discrepancia de criterios jurídicos, es decir,
de la oposición en la solución de temas jurídicos que se extraen de asuntos que pueden
válidamente ser diferentes en sus cuestiones fácticas, lo cual es congruente con la finalidad
establecida tanto en la Constitución General de la República como en la Ley de Amparo para las
contradicciones de tesis, pues permite que cumplan el propósito para el que fueron creadas y
que no se desvirtúe buscando las diferencias de detalle que impiden su resolución”.
5
Tesis aislada P. XLVII/2009 de la Novena época, publicada en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, tomo XXX, julio de 2009, p. 67 y cuyo texto es el siguiente: “El Tribunal
en Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la jurisprudencia P./J. 26/2001, de
rubro: "CONTRADICCIÓN DE TESIS DE TRIBUNALES COLEGIADOS DE CIRCUITO.
REQUISITOS PARA SU EXISTENCIA.", sostuvo su firme rechazo a resolver las contradicciones
de tesis en las que las sentencias respectivas hubieran partido de distintos elementos, criterio
que se considera indispensable flexibilizar, a fin de dar mayor eficacia a su función unificadora
de la interpretación del orden jurídico nacional, de modo que no solamente se resuelvan las
contradicciones claramente inobjetables desde un punto de vista lógico, sino también aquellas
cuya existencia sobre un problema central se encuentre rodeado de situaciones previas
diversas, ya sea por la complejidad de supuestos legales aplicables o por la profusión de
circunstancias de hecho a las que se hubiera tenido que atender para juzgarlo. En efecto, la
confusión provocada por la coexistencia de posturas disímbolas sobre un mismo problema
jurídico no encuentra justificación en la circunstancia de que, una y otra posiciones, hubieran
tenido un diferenciado origen en los aspectos accesorios o secundarios que les precedan, ya
que las particularidades de cada caso no siempre resultan relevantes, y pueden ser sólo
adyacentes a un problema jurídico central, perfectamente identificable y que amerite resolverse.
Ante este tipo de situaciones, en las que pudiera haber duda acerca del alcance de las
modalidades que adoptó cada ejecutoria, debe preferirse la decisión que conduzca a la
certidumbre en las decisiones judiciales, a través de la unidad interpretativa del orden jurídico.
Por tanto, dejando de lado las características menores que revistan las sentencias en cuestión, y
previa declaración de la existencia de la contradicción sobre el punto jurídico central detectado,
el Alto Tribunal debe pronunciarse sobre el fondo del problema y aprovechar la oportunidad para
hacer toda clase de aclaraciones, en orden a precisar las singularidades de cada una de las
sentencias en conflicto, y en todo caso, los efectos que esas peculiaridades producen y la
variedad de alternativas de solución que correspondan”.

17
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

problema jurídico: ya sea el sentido gramatical de una norma, el


alcance de un principio, la finalidad de una determinada
institución o cualquier otra cuestión jurídica en general;

4. Que lo anterior pueda dar lugar a la formulación de una pregunta


genuina acerca de si la forma de acometer la cuestión jurídica
es preferente con relación a cualquier otra que, como la primera,
también sea legalmente posible;

5. Aun cuando los criterios sustentados por los Tribunales


contendientes no constituyan jurisprudencia debidamente
integrada, ello no es requisito indispensable para proceder a su
análisis y establecer si existe la contradicción planteada y, en su
caso, cuál es el criterio que debe prevalecer. Sirve de apoyo la
tesis de jurisprudencia: “CONTRADICCION DE TESIS. PARA
SU INTEGRACION NO ES NECESARIO QUE SE TRATE DE
JURISPRUDENCIAS.”6

6. Es aceptable apreciar en la contradicción de tesis argumentos


que sin constituir el argumento central de la decisión de un
tribunal, revelen de manera suficiente el criterio jurídico de un
órgano jurisdiccional respecto de un problema jurídico concreto.
Sirve de apoyo la tesis de rubro “CONTRADICCIÓN DE TESIS.
LOS CRITERIOS JURÍDICOS EXPRESADOS ‘A MAYOR
ABUNDAMIENTO’ SON DE TOMARSE EN CUENTA PARA
RESOLVER AQUÉLLA.”7
6
Tesis aislada P. L/94 de la Octava época, publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de la
Federación, tomo 83, noviembre de 1994, p. 35 y cuyo texto es el siguiente: “Para la procedencia
de una denuncia de contradicción de tesis no es presupuesto el que los criterios contendientes
tengan la naturaleza de jurisprudencias, puesto que ni el artículo 107, fracción XIII, de la
Constitución Federal ni el artículo 197-A de la Ley de Amparo, lo establecen así”.
7
Tesis aislada P. XLIX/2006, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Tomo XXIV, Julio de 2006, Tesis P. XLIX/2006, página 12, cuyo texto es el siguiente: El
procedimiento de fijación de jurisprudencia firme vía contradicción de tesis tiene una finalidad
clara y esencial: unificar criterios en aras de la seguridad jurídica. Así, para uniformar la

18
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

Esta Primera Sala considera que pese a la existencia de


criterios antagónicos, la presente contradicción de tesis es
improcedente en virtud de las siguientes consideraciones:

De la lectura de las resoluciones contendientes se desprende


que el punto divergente entre los criterios emitidos por los tribunales
colegiados consiste en si el desistimiento de una demanda de
amparo implica el consentimiento del acto reclamado en dicho
juicio, como se advierte a continuación.

a) El Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer


Circuito señaló que cuando el recurrente manifiesta su
voluntad en el sentido de desistir de la demanda de
amparo promovida en contra de una sentencia
definitiva, ello entraña el consentimiento expreso del
acto reclamado en términos del artículo 61, fracción XI
de la Ley de Amparo, con independencia de las razones
que se hayan tenido en cuenta para efectuarlo, por lo
que no puede quedar a voluntad del quejoso la
procedencia de un nuevo juicio de amparo en contra
del mismo acto reclamado.
interpretación del orden jurídico nacional son de tomarse en cuenta todos los razonamientos
vertidos por los órganos jurisdiccionales contendientes a lo largo de la parte considerativa de sus
sentencias, sean constitutivos de la decisión final -el o los puntos resolutivos- o resulten
añadidos prescindibles, vinculados indirecta o marginalmente con la cuestión concreta que debe
decidirse, pues en ambos casos se está frente a la posición que asume un órgano jurisdiccional
ante determinada cuestión jurídica y de la que cabe presumir que seguirá sosteniendo en el
futuro. En efecto, en el procedimiento de contradicción de tesis no se decide si una sentencia es
congruente con las pretensiones de las partes ni si en la relación entre sus consideraciones y la
decisión final hubo exceso o defecto, pues no es un recurso, sino que su función es unificar la
interpretación jurídica a fin de eliminar la coexistencia de opiniones diferentes respecto de la
forma en la que debe interpretarse o aplicarse una norma legal, y obtener un solo criterio válido,
pues su teleología es garantizar la seguridad jurídica. En congruencia con lo anterior, se
concluye que para satisfacer esa finalidad, en el procedimiento de contradicción de tesis no es
menester que los criterios opuestos sean los que, en los casos concretos, constituyan el sostén
de los puntos resolutivos, pues en las condiciones marginales o añadidos de "a mayor
abundamiento" pueden fijarse criterios de interpretación que resulten contrarios a los emitidos
por diversos órganos jurisdiccionales y sean la posición que un Tribunal Colegiado de Circuito
adopta frente a ciertos problemas jurídicos que, presumiblemente, sostendrá en lo futuro.”

19
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

b) El Primer Tribunal Colegiado en materia penal del Primer


Circuito sustentó un criterio diverso respecto del mismo
problema jurídico ya que esencialmente sostuvo que
atendiendo al principio pro persona, cuando la parte
quejosa desiste de la interposición de una demanda de
amparo y, posteriormente, dentro del término de quince
días que establece el artículo 21 de la Ley de Amparo,
promueve un nuevo juicio de amparo en contra del
mismo acto reclamado, no revela que en su
desistimiento inicial haya consentido el acto de
autoridad, pues lo que pretendió el quejoso fue mejorar
sus pretensiones.

Es de fundamental relevancia resaltar desde un inicio que el


Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer
Circuito apoyó su criterio en la jurisprudencia P/J.3/96 sustentada
por el Pleno de este Alto Tribunal al resolver la contradicción de
tesis 302/91 aprobada en sesión de veintidós de enero de mil
novecientos noventa y seis, de rubro y texto siguientes:

“DESISTIMIENTO DE LA DEMANDA EN EL JUICIO DE


AMPARO. IMPLICA EL CONSENTIMIENTO EXPRESO
DE LOS ACTOS RECLAMADOS, RESULTANDO
IMPROCEDENTE UN NUEVO JUICIO CONTRA ELLOS.
Entre los principios rectores del juicio de amparo se
encuentra el de instancia de parte agraviada,
conforme con el cual dicho juicio sólo puede ser
promovido por la parte a quien perjudique el acto
reclamado. Por consecuencia, es lógico concluir que
quien puede promover el juicio de amparo, salvo lo
dispuesto en el artículo 14 de la ley de la materia, se
encuentra también en condiciones de desistir de él.

20
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

El desistimiento en el juicio de amparo implica un


desistimiento de la acción y, por ende, supone el
consentimiento expreso de los actos reclamados,
pues el efecto de la renuncia del quejoso, el
sobreseimiento en el juicio, deja a la autoridad
responsable en aptitud de obrar o de no hacerlo, en
el sentido asignado al acto reclamado. Como ese
desistimiento entraña un consentimiento expreso de
los actos reclamados, si el quejoso promueve un
diverso juicio en contra de los mismos actos
reclamados en aquel del cual desistió, el segundo
juicio resultará improcedente, al actualizarse los
supuestos previstos por la fracción XI del artículo 73
de la Ley de Amparo. En ese sentido, cuando se
satisfacen los requisitos legales, ese desistimiento
también puede actualizar los supuestos de la fracción
IV del numeral citado pues si bien, en principio y
como regla general, una resolución de
sobreseimiento -que es la consecuencia del
desistimiento del quejoso- no constituye cosa
juzgada, existen casos de excepción a ese principio,
como lo ha establecido la jurisprudencia de la
Suprema Corte (publicada en la página novecientos
veintisiete, de la Segunda Parte, del Apéndice al
Semanario Judicial de la Federación de mil
novecientos ochenta y ocho) que revelan la
inejercitabilidad de la acción y dentro de los que se
encuentra el relativo al consentimiento, en ese caso,
expreso, de los actos reclamados.”8

Criterio que se encuentra vigente a la fecha de la denuncia de


la presente contradicción de tesis.

Ahora bien, no obstante las discrepancias entre los criterios


contendientes, la presente contradicción resulta improcedente

8
Tesis: P./J. 3/96, Novena Época, emitida por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta en febrero de
1996, tomo III, página 22.

21
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

porque de la lectura de la ejecutoria emitida por el Segundo


Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito se
advierte que el criterio precisado en el inciso a) precedente, resultó
de la mera aplicación de la jurisprudencia P./J. 3/96 anteriormente
transcrita. Incluso, el Tribunal Colegiado refiere expresamente que
fue el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el que
estableció el criterio que invoca, al resolver la contradicción de tesis
302/91, inmediatamente después de lo cual cita además la
jurisprudencia antedicha, que emanó de dicha contradicción,
proporcionando el rubro, texto y datos de localización que le
corresponden.

Tampoco se advierte que el Segundo Tribunal Colegiado en


Materia Penal del Tercer Circuito haya agregado razonamientos
adicionales o proporcionado argumentos complementarios con
respecto a lo establecido por la tesis jurisprudencial precitada, lo
cual pudiera llevar a la conclusión de que adoptó un criterio propio,
susceptible así de contradicción con el del Primer Tribunal
Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, pues incluso
precisó que considerar que no era aplicable tal criterio sería
desconocer la jurisprudencia emitida por el Pleno de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación, la cual en términos del artículo 217
de la Ley de Amparo, era de observancia obligatoria para ese
Tribunal. Así se revela, ya que señaló:

“Empero, considerar lo afirmado por el recurrente sería


desconocer la jurisprudencia por contradicción de tesis
P./J.3/96, emitida por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, que puede consultarse en el Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, Novena Época, tomo III, Febrero
de 1996, página 22, de rubro: ‘DESISTIMIENTO DE LA
DEMANDA EN EL JUICIO DE AMPARO. IMPLICA EL

22
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

CONSENTIMIENTO EXPRESO DE LOS ACTOS RECLAMADOS,


RESULTANDO IMPROCEDENTE UN NUEVO JUICIO CONTRA
ELLOS.’ que ya fue transcrita y que fue base para respaldar la
determinación adoptada en el acuerdo de presidencia
impugnado; reiterándose que en términos del artículo 217 de la
actual legislación de amparo, ese criterio es de observancia
obligatoria para este Tribunal; y se repite, adoptar las
consideraciones expresadas por el inconforme, pugnaría con
lo determinado ya por el Alto Tribuna del País.”

En esta tesitura, es evidente que el criterio del Segundo


Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito no
constituye un juicio propio sino que resultó de la aplicación de la
jurisprudencia P./J. 3/96 sustentada por el Pleno de esta Suprema
Corte, transcrita con antelación. Consecuentemente, aun cuando el
mismo estuviere en contra del criterio sostenido por el Primer
Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito, quien
incorpora elementos distintos para arribar a una conclusión
diferente a partir del mismo punto de derecho, en puridad técnica,
no puede afirmarse que existan criterios contradictorios entre ellos,
pues desde una perspectiva material la oposición de criterios se
suscitaría entre el Órgano Colegiado últimamente citado y el Pleno
de este Alto Tribunal, lo cual constitucional y legalmente es
inadmisible, motivos por los cuales debe declararse la
improcedencia de la denuncia de esta contradicción de tesis.

Lo anterior encuentra apoyo en la tesis de rubro:


“CONTRADICCIÓN DE TESIS ENTRE TRIBUNALES
COLEGIADOS DE CIRCUITO. ES IMPROCEDENTE CUANDO
UNO DE LOS CRITERIOS CONSTITUYE ÚNICAMENTE LA
APLICACIÓN DE UNA JURISPRUDENCIA DE LA SUPREMA
CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN.”9
9
Novena Época, Segunda Sala, Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo: XXXI,
febrero de 2010. Tesis: 2a./J. 18/2010. Página: 130, que dice: “Conforme al artículo 197-A de la

23
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

En este orden de ideas, no existe diversidad de criterios


cuando un Tribunal Colegiado de Circuito sustenta claramente su
determinación en una tesis de jurisprudencia del Pleno de este Alto
Tribunal, como ocurre en el presente caso, ya que, de aceptar dicho
análisis, materialmente significaría autorizar la contradicción de
tesis entre un Tribunal Colegiado y esta Suprema Corte de Justicia
de la Nación, lo cual, como se dijo, es jurídicamente inadmisible al
no estar prevista tal hipótesis en la Ley de Amparo, particularmente
en sus artículos 226 y 227, que únicamente contemplan la
posibilidad de contradicción de tesis cuando son Salas de este Alto
Tribunal las que sustentan tesis contradictorias en los juicios de
amparo de su competencia, o cuando son Tribunales Colegiados de
Circuito los que adoptan tesis contradictorias en los juicios de
amparo de su propia competencia.

En todo caso, la imposibilidad de admitir tal contradicción


debe tomar en cuenta que, de conformidad con el artículo 217 de la
Ley de Amparo, la jurisprudencia definida por el Pleno o alguna de
las Salas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es
obligatoria para los Tribunales Colegiados de Circuito, tal como se
desprende de la literalidad de dicho precepto:

“Artículo 217. La jurisprudencia que establezca la


Suprema Corte de Justicia, funcionando en Pleno o
en Salas, es obligatoria para éstas en tratándose de
Ley de Amparo, uno de los requisitos de procedencia de la contradicción de tesis es que los
criterios divergentes sean sustentados por Tribunales Colegiados de Circuito; sin embargo,
cuando uno de esos órganos jurisdiccionales se limita a aplicar una jurisprudencia de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, señalando que con ésta se resuelven los argumentos
esgrimidos por la parte interesada, sin agregar mayores razonamientos, no puede afirmarse que
exista un criterio contradictorio con el del órgano jurisdiccional que sostiene otra opinión. En
tales condiciones, al plantearse en realidad la oposición entre la tesis de un Tribunal Colegiado
de Circuito y una jurisprudencia de la Suprema Corte, debe declararse improcedente la
contradicción denunciada.”

24
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

la que decrete el Pleno, y además para los Plenos de


Circuito, los Tribunales Colegiados y Unitarios de
Circuito, los juzgados de Distrito, tribunales militares
y judiciales del orden común de los Estados y del
Distrito Federal, y tribunales administrativos y del
trabajo, locales o federales…”

Aunado a lo anterior, la denuncia de la contradicción de tesis


en estudio se presentó ante la Oficina de Certificación Judicial y
Correspondencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación con
posterioridad a que el Pleno de este Alto Tribunal ya había definido
el tema jurídico respectivo al resolver la contradicción de tesis P./J.
3/96. Por lo que se concluye que sobre la cuestión que originó la
presente divergencia de criterios, prevalece el criterio fijado en
jurisprudencia por esta Suprema Corte de Justicia de la Nación en
fecha anterior a la presentación de la correspondiente denuncia de
contradicción de criterios.

Sirve de apoyo a lo anterior, en lo conducente, la tesis de


jurisprudencia 1ª/J. 32/2004,10 de rubro: “CONTRADICCIÓN DE
TESIS. SI LA JURISPRUDENCIA QUE RESOLVIÓ EL PUNTO
CONTRADICTORIO DENUNCIADO, SE EMITIÓ ANTES DE LA
PRESENTACIÓN DEL ESCRITO DE DENUNCIA, DEBE
DECLARARSE IMPROCEDENTE Y NO SIN MATERIA”

En las relatadas condiciones, la presente contradicción de


tesis debe declararse improcedente.

10
Tesis de la Novena época, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Tomo XIX, mayo de 2004, página 293, que dice: “En efecto, procede declarar improcedente la
contradicción de tesis, entre otros motivos, cuando la denuncia se realice con posterioridad a la
fecha en que este Alto Tribunal ha resuelto el punto contradictorio sobre el que versa dicha
denuncia; por el contrario, de haberse denunciado con anterioridad a que este Alto Tribunal
resolviera el tema en contradicción propuesto, se debe declarar sin materia.”

25
CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

Por lo expuesto y fundado, se

RESUELVE:

ÚNICO. Es improcedente la contradicción de tesis a que este


expediente se refiere.

Notifíquese; con testimonio de la presente resolución, y en su


oportunidad archívese el expediente como asunto concluido.

Así, lo resolvió la Primera Sala de la Suprema Corte de


Justicia de la Nación, por mayoría de cuatro votos de los señores
Ministros: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea (Ponente), Jorge Mario
Pardo Rebolledo, Olga Sánchez Cordero de García Villegas y
Presidente Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, en contra del emitido por
el Ministro José Ramón Cossío Díaz, por lo que se refiere a la
competencia, y por unanimidad de cinco votos en cuanto al fondo.

Firman el Ministro Presidente de la Primera Sala y el Ministro


Ponente, con el Secretario de Acuerdos, quien autoriza y da fe.

PRESIDENTE DE LA PRIMERA SALA

MINISTRO ALFREDO GUTIÉRREZ ORTIZ MENA

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CONTRADICCIÓN DE TESIS 396/2013

PONENTE

MINISTRO ARTURO ZALDÍVAR LELO DE LARREA

SECRETARIO DE ACUERDOS
DE LA PRIMERA SALA

LIC. HERIBERTO PÉREZ REYES

En términos de lo previsto en el artículo 3°, fracción 11, 13, 14 y 18 de la Ley


Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental,
en esta versión pública se suprime la información considerada legalmente
como reservada o confidencial que encuadra en esos supuestos normativos.

kvsp

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