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Virgen de Los Veranos

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Virgen los veranos

A Marcelo Uribe
u ,.........., al cruzar la huerta,
....

del paraíso.
me acaba de aparecer
llamó a los ejidatarios
sé bien cómo estuvo.
los ...... ...,.....--..v• ..,.,
las verdes /
a gatas. eso era el
su pueblo y entre sus cuates.
Sobre las

se asoma.

88
se
sacristán en Cuerna-

ponía
tanto
Jesús
con sus Sagrados
en la cosecha,

a
cuento.
94
muerto de con
chuchulucos pa su ��·u��VL
-Será co-la-bo-ra-dor.

más se
dice

muy

tan fuertes, qué


de que a ese
bía arroz con ��-��•·0

se de coscorrones y, corno soy


me volví cuate de los demás �v ·��"'�"'""-'
za y y o ,

y nunca saqué uñas.


rorita yo navegaba con uu1.•u'-''' "'
-¿Le contaron la
-Ah no,
blaba.

a casa grande me
agarraron fe;
latines corno que
y los dos estaban º'"'"·"'... '"'"'
avorazarme. nace
encuentra su maceta.
entre nos y

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Quién y se había arreglado
pasaba su corta pus
go, la se volvió cada día
me era ver y retablos. En uno
detenía una locomotora y salvaba al borra-
entre los rieles, el mismo güey luego mandó
otro, ayudaba personalmente en un par­
agarraba a un torazo por los cuer-
a un matancero. veras que
amigo. encantado re-
padrísimo poder mostrarle a
iri.!.1:::ncua. Además, de haber sabido
, ..., ..4.., ,.., me hago rico. Llegaban chorromil
...

cosa estaba mandada a


Virgencita. Muchas iglesias del
"'"''"'"'"' seguían La gente llevaba años tener a
rezarle Todo hecho bolas. Acababan
parcelar y Aurorita se quedaron só-
casco de de don Lorenzo pa-
....."'i"""''"'
.. usté, después tantísimos años de guerra y
reboruje, siglos y siglos en no tuvieron ni en qué caerse
muertos, noche a la mañana los peones se habían vuelto
ejidatarios y eran dueños de las tieriitas que antes trabaj aban
pal patrón. los mandó a la escuela y no sabían pa dónde
agarrar. Y menos lo pensaban que se van encampa-
con una Virgen que se les aparece, los aconseja, los
ayuda en su cabrona vida que sin Revolución o con Revolu­
ha estado siempre del carajo.
cree usted?
-No, es o menos que lúego dijeron los periódicos.
como sea, las cosas nos estaban saliendo tan a toda madre
me pinto solo pa las corazonadas, me decía: "Fí-
ándate con esto no dura mu-
todo enjuague". Ai sí que ni modo.
No hay bien que años y tanto quería el diablo a su
hijo que hasta sacó un ojo.

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-Sí, sí, pero ¿cómo acabó todo el asunto?
-Pérese, pérese. No coma agárrese con
veinte uñas que ora viene lo más emocionante. No creo que
nunca se me olvide pinche tarde en Lorenzo agarró su
fotingo y se un carro nuevo,
menos

le salieron las 11er1dn�s


Lice
Aproveché que

-¿Cómo escapar?
-Toda la noche
nadas que
día pobrecito dio ver que ya siba a
dije: "No creas que es
ley, te debo la vida". Y
no sufriera tirado.
penco veloz que la
mé ndigo s a los estafado
de abajo y hacen que me los

conté, camine
marmaja, es<;oriati3n­
se me atravesara en el camino. día siguiente
cerro pelón está a la de

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...... v.. u••F,V Cuixtlahuaca. Y entonces
'-'"'·"" 'u"'" Virgen y

dejó meterme en un
se robó del botiquín ... ,..,�,,·v•

pues de tanto

llegó feliz en su u �...�..

que yo y Aurorita
su rufo. Seguía
se olió que
Sólo ,,, ..,............ ""'
¡ pobre cuate ! S i no sido él a mí no se me ocurre
nunca el negocio.

que igualito decía


y colgado

Entonces se """"'""'"
van viendo ya no centavos
fierros que ellos mismos con tanto trabaj o y die-
¡jijos ! cuento. Eso fue
estaban y tan encabronadísimos
se pusieron: incendiaron la casa grande y con
todo lo que tenían
Aurorita?
-Enmedio de aquel y unas niñas la
encontraron agazapada entre maizales, temblando como un
perro. El miedo la atarantó. Además muy bruta no era del
campo, no sabía montar a caballo ni esconderse en el monte.
Claro que pa mí una suerte no encontrarla, porque si no
modo de correr como alma que neva el diablo: Aurorita es­
taba empreñada y bien que me hubieran dado matarile. Y si
me salvo, a güevo hubiera tenido que cargar con ella. en­
tonces ¿qué carajos hacía con Aurorita y chamaco? Ni ma­
dres ponerla a putear de nuevo ... PobreciHa Aurorita, qué
lástima, qué dolor, qué pena, cuánto lo siento, cómo me acuer­
do de ella... Sin embargo, mi lema siempre ha sido: primero
yo, después yo y siempre yo.
¿qué le hicieron?
ver que le caían de a montón, creyó que
como antes. Los insultó y dijo: "Indios
. Cuando aventaron la cabeza em-

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pezaron a apedrearla y empuñaron los machetes,
tó, lloró, les pidió perdón de rodillas y prometió
ta el último centavo. Qué a hacer caso. Los mismos
antes creyían mediosanta a la patroncita ser la que
ro vio a la Virgen, ora sólo buscaban desquitarse y le ...,.navc•u
poniendo una piedriza padre y señor mío.
-Qué horror.
mismo hij o de
lados, agarró un cuaco y
de Cuextepec. Contaba periódico si no
entraron los sardos con su caballada, se matan entre
mos. Se calmó la trifulca gracias a que un y sus
nes los dejaron sosiegos a
a Aurorita todavía con vida, pero '"'"'"'ª"•g:.raulaose,
cara, un guiñapo la vieja,
fría. El veterinario cuartel -único
lizo la lucha. Pero Aurorita se les
-Espantoso. ¿Y se enteraron de
todo el dinero?
-¡Hombre!, quién más, ni modo que tantos '"'"'""'"..,-
nes. Don Jesús, su hijo y mis otros cuates juraron
sima Virgen que miban a buscar por cielo y y cu;:mcto
encontraran me machacarían los tompiates con rn<)lc:a1ece
me despellejarían vivo y me pondrían sal y chile
Pero se les cebó. Nací con reteharta suerte,
A don Jesús y a su hijo los condenaron a
doble asesinato con agravantes, motín y
ajena. Los mandaron en la cuerda de las Islas
medio camino, pum pum pum:
Murieron como conejos mis valedores
Como los otros no tuvieron pa los jueces,
quién sabe cuántos años. ¿No le digo,
chingamos al que se dej a pero
que siempre paga los platos rotos.
carcanaai: que me
ver10e1ctor "',.,,...,...... .... ....., y sólo co-
1.aemas, '"''""''"''""'""" la

calidá , "''-"""'-'"'"'
IT\ P't'ic1rrl <'.l

lujo, tacuches caros y


me chupé última y me
vez en la quinta en la más completa prángana.
bárbaro. después?
-Bueno -concluyó Anselmo-, ai sí toca a
un•""'-' cómo la cosa hace unos
a y, si me echa una mano, por
otra vez me hago rico y a ústé le toca una
zacatea a movida chueca, en este mismo
cuate. Porque esto de las apariciones
güevos, y hay andarse con prisas
acabando.

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