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UNIVERSIDAD AUTONOMA DE SANTO DOMINGO

(UASD)
FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS
ADMINISTRACION DE EMPRESAS

EL ESTADO DOMINICANO EN LA ACTUALIDAD

NOMBRE: BRAYLIN ARNÓ ORTIZ

MATRICULA: 100471439

MAESTRO: RAFAEL FERRERAS

SECCION: ADM2310

REPUBLICA DOMINICANA- SANTO DOMINGO


INTRODUCCION

El Estado es un espacio organizado políticamente que organiza y administra el


territorio y los recursos de la población. El Estado Dominicano como ente
regulador debe velar por el cumplimiento de las leyes, que son las que permiten una
coexistencia de todos los habitantes de la República Dominicana.
El Estado está en la obligación de asegurarnos un lugar donde todos vivamos
con reglas claras, respetadas por todas las autoridades y por los ciudadanos,
independientemente de los los intereses personales, para así crear un ambiente
de estabilidad que haga la base de un desarrollo económicos y social sostenido.
De esta misma manera, el Estado como tiene la obligación de ir en auxilio de las clases
más desposeídas, ya que en el sistema democrático, que es el vigente en la mayor
parte del mundo y es el existente en la República Dominicana, a pesar de sus atributos,
está lejos de ser efectivo debido a las desigualdades sociales.
Existiendo esta realidad, el Estado está en la obligación de ir en auxilio de estas clases
más desposeídas, para así garantizar la igualdad y mantener la estabilidad social y
política.
La función esencial del Estado es la protección efectiva de los derechos de la
persona, el respeto de su dignidad y la obtención de los medios que le
permitan perfeccionarse de forma igualitaria, equitativa y progresiva, dentro de un
marco de libertad individual y de justicia social, compatibles con el orden público, el
bienestar general y los derechos de todos y todas.
El Estado dominicano tiene 366 instituciones (contamos los ayuntamientos y distritos
municipales, las bibliotecas, los distritos educativos, las escuelas, los hospitales
públicos, los museos y las procuradurías fiscales como 1 institución respectivamente).
De estas, 282 son centralizadas y 84 descentralizadas. Existen organismos que son
Ministerios o tienen la categoría de Ministerio estos están compuestos, a su vez, de
Vice ministerios y Direcciones Generales, Oficinas Nacionales e instituciones
dependientes de ministerios.
DESARROLLO

La estructura organizativa del Estado dominicano.

República Dominicana es un Estado unitario, cuyo gobierno es esencialmente civil,


republicano, democrático y representativo se divide en Poder Legislativo, Poder
Ejecutivo y Poder Judicial, siendo independientes en el ejercicio de sus funciones.

El sector público dominicano comprende todas las entidades controladas por el Estado,
y está compuesto por dos grandes sectores: el Sector Público No Financiero (SPNF) y
el Sector Público Financiero (SPF). El SPF incluye las Instituciones Públicas
Financieras Monetarias (Banco Central y Junta Monetaria) e Instituciones Públicas
Financieras no Monetarias (Banco Agrícola, Banco Nacional de la Vivienda y
Producción, PROMIPYME, Superintendencia de Bancos, Superintendencia de
Seguros, Superintendencia de Valores, Seguro Nacional de Salud, entre otros).

Por su parte, el SPNF abarca las Empresas Públicas No Financieras y el Gobierno


General. El Gobierno General engloba al Gobierno General Local, es decir, a los
municipios, ayuntamientos y unidades municipales con propósitos especiales como el
cuerpo de bomberos; y al Gobierno General Nacional que incluye las Instituciones del
Gobierno Central, las Instituciones Públicas Descentralizadas y Autónomas No
Financieras y las Instituciones de la Seguridad Social. Esta clasificación permite
agrupar las operaciones presupuestarias y medir la influencia que tiene el Gobierno en
la economía y la forma en que incide en la determinación del ahorro, la formación de
capital fijo y la demanda de recursos al sistema financiero.

La definición de cada instancia gubernamental está plasmada en el Manual de


Clasificadores Presupuestarios para el Sector Público publicado en enero de 2014.
Este manual facilita la comprensión de las funciones de cada órgano y permite
establecer el origen y el uso de los recursos que se perciben según el modelo de caja
única aplicado en el país.

La Racionalidad administrativa del Estado dominicano.


La administración pública es la principal actividad que corresponde desarrollar al Poder
Ejecutivo para la prestación de los servicios públicos. Como es alto conocido, el Poder
Ejecutivo es encabezado por el presidente de la república, el cual es jefe supremo de
la nación.
En la República dominicana, casi en todos, para no decir en todos los gobiernos
llamados democráticos instaurado después de la era de Trujillo, el Poder Ejecutivo, ha
queda depositado generalmente en una persona. Aun cuando debemos advertir que no
siempre se ha dado el caso de que los gobiernos dispongan de un Poder Ejecutivo
unipersonal, por ejemplo, posteriormente al derrocamiento del primer gobierno elegido
democráticamente encabezado por el Profesor Juan Bosch, en Republica Dominica, se
conformo como depositario de la labor ejecutiva a un triunvirato, es decir, a un órgano
colegiado, formado por tres personas, con el propósito de gobernar Republica
Dominicana.
En nuestro país, de conformidad a lo que previene el artículo 128 de la
nueva Constitución, "la o el Presidente de la Republica Dominicana dirige
la política interior y exterior, la administración civil y militar, y es la autoridad suprema
de la Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los demás cuerpos de seguridad del
Estado". Esto le confiere un Supremo Poder Ejecutivo sobre todos los ámbitos de
la nación, incluyendo la administración pública.
El presidente de la república para auxiliarse en el desarrollo de la actividad
administrativa del Estado, cuenta con una serie de entidades administrativas que le
prestan auxilio y que, por razón de jerarquía, dependen de él, bien sea de manera
directa o indirecta.
El artículo 134 la nueva Carta Magna Dominicana dispone que "para el despacho de
los asuntos de gobierno habrá los ministerios que sean creados por ley. Cada
ministerio estará a cargo de un ministro y contara con los viceministros que se
consideren necesarios para el despacho de sus asuntos". Así que la Administración
Pública Dominica será Centralizada conforme a la Ley Orgánica que expida el
Congreso. En esa Ley Orgánica se distribuyen los negocios del orden administrativo de
la nación que están a cargo de los Ministerios de Estado y Departamentos
administrativos.
Además, el artículo 141 crea organismos autónomos y descentralizados del estado que
son cuyas políticas son reguladas por el Poder Ejecutivo. Reza el articulo 141:
"Organismos autónomos y descentralizados. La ley creara organismos autónomos y
descentralizados en el Estado, provistos de personalidad jurídica, con autonomía
administrativa, financiera y técnica. Estos organismos están adscritos al sector de la
administración compatible con su actividad, bajo la vigilancia de la ministra o ministro
titular del sector. La ley y el Poder Ejecutivo regularan las política de desconcentración
de los servicios de la administración pública".
Así pues, en el sistema de administración pública dominicana, es la constitución, la
obra legislativa que consagra las bases para la organización de la Administración
Pública de la nación Federal Centralizada y Paraestatal. Sin embargo, la doctrina
reconoce que las dependencias que auxilian al Poder Ejecutivo para el desempeño de
la actividad administrativa y la prestación del servicio público se organizan de dos
formas diversas: la centralización y los organismos autónomos y descentralizados del
Estado.
La Redundancia del Estado dominicano

El gobierno de la República Dominicana mediante la Oficina Presidencial de


Tecnologías de la Información y Comunicación (OPTIC) ha construido el Data Center
del Estado. Con este Data Center aumenta la capacidad y mejora la calidad de los
servicios computacionales prestados por la OPTIC para las instituciones del Estado
dominicano y a la ciudadanía.

Este Datacenter fue construido para cumplir con las normas y estándares sobre Data
Center TIA 942 y TIER III. El mismo permite resguardar y procesar las informaciones
de las instituciones públicas en un lugar que cuenta con todas las facilidades de
servicios, con un alto nivel de seguridad.

Esta iniciativa responde al interés de la OPTIC de ampliar los niveles de calidad y


servicios ofrecidos a las instituciones gubernamentales y todo lo relacionado con la
recuperación de datos, planes de continuidad de operaciones, casos de emergencias y
seguridad y recuperación de desastres.  También se busca ofrecer una plataforma para
la implementación de la interoperabilidad y la centralización de servicios y aplicaciones
transversales para el Estado.
El Data Center del Estado Dominicano dará servicios de backup, redundancia,
continuidad, contingencia, procesamiento alterno y servirá para fortalecer la plataforma
de servicios de todas las instituciones del Estado.
La OPTIC cuenta con un total de 304 servicios de alojamiento interno y externo.
Contamos con 4,784 cuentas de correos Institucionales, para un total de 91
Instituciones Públicas. Nuestra plataforma en la actualidad soporta más de 10,000
cuentas.

La Duplicidad de sus dependencias

La República Dominicana tiene poco más de 10 millones de habitantes en menos de 50


mil kilómetros cuadrados. Pese a que ocupa el puesto 128 de 192 naciones en cuanto
a territorio, tiene tantas instituciones públicas que algunas realizan funciones similares,
en algunos casos las mismas. El Estado admite el problema y anuncia soluciones, pero
los compromisos políticos e influencias impiden una acción drástica, precisa y
permanente.

En el estudio “Estructuras del Estado dominicano: hacia una renovación pertinente” que
presentó Oxfam en 2017 se reveló que en esta media isla hay 77 instituciones con
duplicidad de funciones. De esas hay 34 que son dependencias sectoriales y el resto
son consejos o comisiones que, por cierto, reciben fondos públicos. Aseguran que si se
controla este problema el Estado pudiera ahorrarse hasta RD$13,000 millones al año.

Lo que se gasta en instituciones con duplicidad de funciones es mayor a lo asignado


para viviendas, servicios hospitalarios y educación superior. Entre la Presidencia y los
ministerios de Turismo y Agricultura se concentran al menos 33 de esas entidades que,
algunas, no presentan rendición de cuentas ni cumplen a totalidad sus funciones.

La estructura organizacional dominicana responde a ministerios y direcciones, pero a


esos hay que adjuntarles los órganos descentralizados y autónomos, las oficinas
nacionales, los consejos, las direcciones generales, algunas comisiones nacionales,
superintendencias y programas sociales. Si no es suficiente, las asesorías y
consultarías completan el pastel.

Para el 2019 hay un presupuesto nacional de RD921,810,546,351.

El año pasado la cifra fue de RD$814,821 millones, por lo que el año entrante tendrá
unos RD$106,989,546,351 más que el actual. De todo ese dinero hay
RD$96,175,563,232 millones que se quedarán en las instituciones descentralizadas y
autónomas no financieras.

El dinero se distribuye entre los ministerios y direcciones, que a su vez lo detallan a sus
dependencias.

El ministro de Administración Pública, Ramón Ventura Camejo, dijo que se elabora un


plan para eliminar la duplicidad de funciones públicas.

Esa propuesta contempla la asesoría de expertos españoles, chilenos, del Banco


Interamericano de Desarrollo (BID), del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico
(OCDE).

Eficiencia en la prestación de servicios públicos


La prestación de servicios públicos es una nota esencial en un Estado social que
pretende preservar un modelo de equidad y garantizar prestaciones a toda la
ciudadanía en régimen de regularidad y continuidad. Y en su prestación ha sido una
constante acudir a fórmulas de colaboración público-privada para hacer efectiva la
garantía de estos servicios esenciales.

La situación de crisis económica y sus efectos socio-laborales y la visión egoísta de


ciertas concesionarias en algunos contratos (con evidentes disfunciones en su
ejecución con ausencia de control sobre el cumplimiento de lo pactado) han sido
detonantes para poner en cuestión cómo se prestan los servicios públicos y, en
especial, sobre la conveniencia de su re internalización para prestación directa por la
Administración enfatizando el valor de la gestión pública –de recuperación de lo
público– frente a las tradicionales fórmulas de colaboración público-privadas.

Son muchos los argumentos y estudios que se invocan para justificar la viabilidad tanto
de la opción de la gestión pública directa como de la gestión mediante empresa
privada. El debate sobre esta cuestión, por su trascendencia, exige alejarse de
posturas apriorísticas maximalistas y de maniqueísmos: ni la gestión indirecta en
colaboración con el sector privado es siempre más económica o eficiente, ni todos los
servicios son más eficientes y sostenibles con gestión directa. Ni la externalización de
servicios es una privatización. Habrá de analizarse supuesto a supuesto.

Por ello, la actual controversia sobre la prestación de los servicios públicos en sentido
estricto debe pivotar sobre la esencia de la propia idea y función del servicio público, es
decir, sobre la regularidad, continuidad y neutralidad en la prestación, garantizando la
mejor calidad del servicio a los ciudadanos. No interesa tanto que sea gestión directa o
indirecta como que constituya la mejor prestación en parámetros de eficiencia y calidad
de la actividad.

Y en ese contexto es donde hay que analizar si es conveniente o no utilizar como


complemento para satisfacer el interés público la colaboración público-privada en la
prestación de servicios públicos, recordando que con estas técnicas ha sido posible
con frecuencia preservar los estándares de calidad y equidad social en numerosas
actividades de interés público muy relevantes y que no habrían sido viables en gestión
directa.

Si lo que se pretende es una nueva moral pública para evitar la precarización de


condiciones laborales en las concesiones y contratas o evitar falta de información de
costes o un indebido lucro, la mejor opción es la reformulación jurídica de la relación
concesional (por ejemplo, forma de pago de las facturas, supuestos de reequilibrio,
exigencias de estabilidad de plantilla o de un mínimo de retribución, prerrogativas de
inspección o inclusión de penalidades, entre otras). Esto permitiría preservar el
necesario equilibrio entre los distintos intereses públicos.

Frente al objetivo primario de una gestión pública directa, lo esencial en este debate,
desde la perspectiva del ciudadano y la protección de sus derechos, ha de ser la mejor
prestación del servicio público, al margen de quién sea el que se encargue de su
gestión (así se ha advertido de forma expresa por la STC 84/2015). Y esta visión
objetiva del servicio público justifica la compatibilidad de participación de la iniciativa
privada como garante del interés público.

En definitiva, el alcance sobre las fórmulas de prestación de servicios públicos y su


función en la consecución del interés público exige una respuesta concreta para cada
supuesto, que concilie de forma adecuada los distintos principios e intereses en juego,
y que preserve, en su decisión final, la esencia del derecho a una buena
administración. Recordando que la clave radica en preservar una prestación regular,
continua, de calidad y sostenible, sin distinción ni privilegios para todos los ciudadanos.
Y, por supuesto, habrá que respetar los pactos de la concesión como exigencia
europea y del principio de seguridad jurídica (que reconduce la opción de rescate a la
potestad expropiatoria).

CONCLUSION

El análisis del gasto social en la República Dominicana refleja que a pesar de que se
ha aumentado la cantidad de recursos destinados a los sectores sociales, la provisión
de servicios sociales se hace aún de manera precaria. Los indicadores de salud,
educación, vivienda y alcantarillado reflejan que en el país se requiere no sólo
incrementar el gasto social, sino reorientar y reasignar el mismo a fin de incrementar el
acceso de los grupos de más bajos ingresos.

BIBLIOGRAFIA

https://pciudadana.org/wp-content/uploads/formidable/51/Estructuras-del-Estado-
Dominicano.pdf
http://www.oas.org/juridico/spanish/dna_res4.pdf

https://dominicana.gob.do/index.php/pais/instituciones/estado-dominicano

https://www.sismap.gob.do/Central/Home/About

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