Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

La Orientación Educativa en Venezuela.

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 8

La Orientación en Venezuela Desde el

Modelo Educativo Bolivariano


INTRODUCCIÓN

La Orientación en Venezuela, desde su surgimiento, ha estado vinculada a la


educación, por lo que a lo largo de su historicidad ha transitado por distintos
momentos siguiendo pautas marcadas por los cambios signados por la política de
estado. Durante la primera década del siglo XXI, la educación venezolana ha
experimentado cambios con la mirada puesta en una nueva visión de ser humano y
desde una concepción de modelo para la inclusión, tiene su atención centrada en el
continuo humano, desde la gestación hasta la muerte, respetando y reconociendo la
diversidad.

Para esto, el Modelo Educativo Bolivariano está organizado en subsistemas


interrelacionados entre si, mencionados a continuación: Educación Inicial Bolivariana,
atiende niños y niñas entre cero (0) y seis (6) años de edad. Educación Primaria,
atiende niños y niñas desde los seis (6) hasta los doce (12) años o hasta su ingreso al
subsistema siguiente. Educación secundaria, atiende adolescentes y jóvenes entre
doce (12) y diecinueve (19) años aproximadamente, a través de dos alternativas de
estudio: Liceo Bolivariano y Escuela Técnica. Educación Especial, atiende población
desde cero (0) años de edad, con necesidades educativas especiales. Educación
Intercultural, atiende la educación integral de pueblos y comunidades indígenas y
afrodescendientes. Educación de Jóvenes, Adultos y Adultas, atiende a las personas
mayores de dieciocho (18) años aproximadamente, no incorporadas a otro subsistema,
comprende varias opciones de atención: presencial, semipresencial y las Misiones
educativas Robinson y Ribas. (Ministerio del Poder Popular para la Educación, 2007c).
Subsistemas todos dependientes del Ministerio del Poder Popular para la Educación.

Además, está el sistema de Educación Superior dependiente del Ministerio del Poder
Popular para la Educación Superior que abarca universidades, institutos universitarios
pedagógicos, politécnicos, tecnológicos, colegios universitarios y otras instituciones
que tienen como propósito formar profesionales, especialistas y promover su
actualización y mejoramiento, de acuerdo a las necesidades requeridas por el
desarrollo de la nación y el avance de la ciencia (Ley Orgánica de Educación, 1980).

Sin embargo, el proceso transformacional que se ha venido dando en Venezuela


también ha arropado a la educación superior, por lo que se crea la Universidad
Bolivariana de Venezuela con el propósito de incluir a los excluidos del mencionado
nivel de estudios. De igual manera, la Misión educativa Sucre como canal para
fomentar la integración de bachilleres a la educación superior, acercando la
universidad a las diferentes comunidades. Con el objeto de trabajar la transformación
del sujeto social de lo individual a lo colectivo, fomentando la formación de un
profesional mas comprometido con la sociedad (en Clemente, 2006).

Es necesario señalar, que la Orientación en Venezuela se había venido implementando


hasta principios de este año 2008 como servicio a través de planes, programas y
proyectos en los distintos niveles educativos, pero dejando prácticamente
desamparada a la educación inicial y primaria hasta el sexto grado. Con su atención
centrada en el bachillerato y el nivel superior, pero mostrando una permanente
desvinculación entre ambos niveles, denominados en el presente momento
subsistemas. Es a partir de este año cuando se comienza a trabajar en pro de una
integración con la construcción del Sistema Nacional de Orientación (SNO), del cual se
adelanta alguna información al final de este ensayo.

LA ORIENTACIÓN EN VENEZUELA

En Venezuela, la Orientación como profesión es una disciplina joven, su inicio comienza


en la década de los cuarenta del siglo XX, cuando surge por necesidad a propósito de
la transición de una forma de producción precapitalista a una forma de producción
industrial. Ya que para ese momento comienza en el país un proceso transformacional
que arropó los diferentes ámbitos de la nación y no escapó de esto la política
educativa.

Por lo que, en 1945 se abordó la problemática educativa bajo la concepción de una


educación para todos que conllevó a: crecimiento de la matrícula escolar, inicio de
campañas de alfabetización, apertura de escuelas técnicas e industriales y
consolidación del Estado como organismo centralizador de la educación y organizador
del magisterio. Al mismo tiempo surgió la exigencia de tener una Orientación
Profesional con una praxis-teórica integrada al sistema educativo, mirando hacia
ayudar a los alumnos en la elección vocacional y en los confl ictos propios del ajuste
escolar. Esto, en un momento de auge"del modelo liberal de la educación, encuadrado
dentro de un marco de dominación de la oligarquía" (Bronfenmajer, Casanova y
García, 1979. Citado por Calonge, 1988: 14).

Desde entonces, en Venezuela la Orientación ha venido transitando por distintos


momentos históricos marcados por pautas acordes con la política de estado. Con las
demandas de cambios en la estructura ocupacional y profesional han surgido
fenómenos dentro del campo educativo como: la repitencia, la deserción y bajo
rendimiento estudiantil. Todo esto como consecuencias del aumento considerable de la
matrícula escolar, del proceso de diversificación de la enseñanza, de la diversidad
ocupacional y de la especialización en el trabajo. Situación que actualiza con carácter
perentorio, la función de la Orientación Profesional como elemento que vincula las
necesidades individuales de los educandos y las necesidades que demanda la sociedad
emergente.

De tal manera que la Orientación en Venezuela continúa durante largas décadas


centrada en el logro de una mejor adaptación del alumno al ambiente escolar y a
enfrentar los problemas relativos a la Orientación Profesional. Contemplando, dentro
de las actividades para tal fin, la evaluación del individuo y la información de datos
sobre los distintos oficios y ocupaciones existentes en el país, las oportunidades de
estudio y entrenamiento para éstos, además de las ventajas y limitaciones
socioeconómicas derivadas del ejercicio y las aptitudes requeridas para el desempeño
de la carrera.

Mientras tanto, la automatización de la enseñanza, el dogmatismo, el realce de la


objetividad, la departamentización y la excesiva especialización iban conduciendo al
educando a una formación académica desvinculada de su mundo de vida, quienes a la
par eran inducidos por otros medios como la televisión y la radio. Esta situación,
condujo a crisis que aún estamos viviendo y se convirtió en terreno fértil para
proseguir con nuevos impulsos las labores de la Orientación Profesional.

Es para 1962 cuando se comienzan a percibir cambios en la Orientación profesional en


Venezuela. Ésta, pasa de un énfasis que combina las investigaciones de laboratorio con
la selección de carreras a un interés de prestar servicio a jóvenes con necesidades
inmediatas. A partir de ese momento, enmarcado en un enfoque moderno como
respuesta a un nuevo modelo educativo, se da también la apertura para una nueva
visión del servicio de Orientación Profesional.

Este servicio estuvo basado en tres principios fundamentales: atención a todos los
alumnos, a todos los aspectos de su personalidad y un servicio concebido como un
proceso de aprendizaje, que deja a un lado la idea de la asistencia. Concepción que
comienza a expresarse en planes, programas y proyectos tomados del modelo de
Orientación norteamericano y deja a un lado las dificultades causadas por la carencia
de instrumentación de la Orientación.

En la década de los setenta, la Orientación en Venezuela entró en crisis por la


contradicción entre su praxis y preceptos filosóficos que hacen énfasis en el respeto al
individuo y a su dignidad, así como en la creencia, en la capacidad para desarrollarse y
en el derecho a las mismas oportunidades, con una concepción que concibe al hombre
como organismo total y único. Sin embargo, en la práctica socioeducativa hubo escasa
vinculación con tales principios, ya que la realidad social no era tomada en cuenta y el
hombre como organismo total y único se hace disonante con el individuo aislado,
carente de nexos vinculatorios con su entorno sociocultural.

Problemática que ha caracterizado la praxis de la Orientación Profesional a lo largo de


su devenir histórico en Venezuela en los distintos modelos que se han venido
instaurando, con el propósito de modernizar el sistema educativo y lograr mayor
consolidación con nuestra realidad sociocultural. Para lo cual, se han realizado
esfuerzos en la capacitación sistemática de los profesionales de la Orientación y se han
ido definiendo metodologías de trabajo.

Para 1974, ante las exigencias de la política educativa del gobierno denominada
Revolución Educativa, apoyadas en la idea de la UNESCO: Aprender a ser, se incorpora
en la estructura educativa el nivel núcleos de orientación, integrados por equipos
interdisciplinarios de asesoramiento a los planteles. Pero, los objetivos propuestos en
los programas de orientación, coordinados por los centros, resultaban bastante
ambiciosos para abordar la realidad educativa del país, lo que originó una fractura
entre los presupuestos teóricos y la práctica; por la inoperancia de enfoques que no
respondían a las realidades socioculturales de las regiones y comunidades.

Para 1984 se crea junto con otros servicios de Orientación el Centro Nacional de
Asesoramiento Vocacional y Profesional con el propósito de facilitar al individuo la
adquisición de información sobre el mundo ocupacional y las oportunidades de estudio,
asesorarle sobre el conocimiento de si mismo y promover el desarrollo de habilidades y
destrezas necesarias para desempeñar eficientemente los roles del estudiante,
trabajador y ciudadano. Proyecto que fracasó por carecer de servicios que ofrecieran
información y ayuda a la población estudiantil sobre bases reales, a pesar de grandes
esfuerzos realizados por orientadores comprometidos con su tarea.
En 1987, la Orientación como proceso preventivo y de desarrollo es retomada con el
Modelo de Educación Básica y aparece de manera explícita la asesoría y ayuda al
alumno en atención a sus necesidades, intereses, potencialidades y limitaciones, así
como las particularidades de su entorno. En este momento, el Modelo Normativo
señala"Una buena política educativa es la que asume la responsabilidad de la
administración de los llamados servicios para los estudiantes, (…) el más importante es
la orientación." (Ministerio de Educación, 1987: 52-53)

Además, plantea como líneas ejecutoras de la orientación el partir de las necesidades


de la institución y de su comunidad, considerar necesidades y características propias
del desarrollo evolutivo de los alumnos. Además, el uso del tiempo libre, la integración
familia-escuela, el desarrollo del autoconcepto y la incorporación de su dimensión
profesional en el currículo (Ob. Cit.). De aquí en adelante toma auge el reconocer la
importancia y pertinencia de la orientación en los distintos niveles y modalidades el
sistema educativo venezolano.

En la primera década del siglo XXI, ante los cambios socioeducativos que estamos
viviendo, es necesaria la presencia de la Orientación con derecho pleno en las políticas
educativas, para responder a algunos fenómenos propios de este momento.
Considerando además, que se vive una época de incesante flujo de cambios, marcado
por el aumento descomunal de la desigualdad social, donde la explotación ha sido
reemplazada por la exclusión; marcando auge en las desigualdades sociales (R. Lanz,
disertación en clase, noviembre 05, 2005).

Más aún, en las regiones del mundo estigmatizadas por dicha exclusión social y sus
representaciones como es el caso de los países Latinoamericanos, donde la pobreza, el
deterioro ambiental, los estilos de vida y la violencia marcan pauta cotidiana. Situación
ante la cual, Venezuela en este momento

…transita hacia la construcción del modelo de la nueva República, donde el Estado


ejerce la acción de máxima rectoría, garantiza el acceso a los derechos esenciales
como principio ético y político. Refundar la República significa construir ese nuevo
modelo de sociedad plasmada en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela; y un pilar fundamental para lograr tal fin es la educación (Ministerio del
Poder Popular para la Educación, 2007a: 4)

A partir del año 2002, el Sistema Educativo venezolano ha estado signado por políticas
contempladas en el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2001-2007 y el
Plan estratégico Simón Bolívar 2007-2013, con la finalidad de asegurar la inclusión,
permanencia, prosecución y culminación de todos. Para de esta manera ir aumentando
la cobertura y dar apertura a un proceso curricular que implique el transitar hacia una
educación emancipadora y dignificante; enmarcada dentro de los principios
constitucionales (Ob. cit.).

MODELO EDUCATIVO BOLIVARIANO

El Modelo Educativo Bolivariano tiene la tarea de educar a las nuevas generaciones, en


un contexto caracterizado por las ya antes mencionadas contradicciones sociales
complejas que afectan todo proceso formativoeducativo individual y colectivo. Pretende
así la construcción de la nueva conciencia socialista venezolana y la formación de
nuevas generaciones portadoras de ella.

Para así lograr un nuevo modelo de sociedad donde se materialice la toma de


conciencia de los complejos problemas que afectan la existencia humana a
consecuencia del mundo en que se vive y la necesidad de minimizarlos mediante una
sólida identidad nacional, sustentada en una ética enraizada en el pensamiento
bolivariano y en la comprensión de las necesidades individuales y sociales que
garanticen una acción creativa y transformadora.

Esto, mediante una sólida identidad nacional sustentada en una ética enraizada en el
pensamiento bolivariano y en la comprensión de las necesidades individuales y sociales
que garanticen una acción creativa y transformadora. A través de un modelo curricular
que propone el desarrollo máximo de la personalidad, donde los conocimientos,
habilidades, destrezas, actitudes y valores se alcanzan por medio de un adecuado
desarrollo del proceso educativo, centrado en la educación ambiental, para la salud y
en valores.

LA ORIENTACIÓN EN EL MODELO EDUCATIVO BOLIVARIANO

El Modelo Educativo Bolivariano concibe a la escuela como una institución


socializadora, al ser humano como unidad integral y está centrado en principios como:
Reconocimiento y respeto a la diversidad, constante revisión para ajustes a realidades,
participación de todos, equidad, formación de un ser humano social y espiritual y
formación en, por y para el trabajo. Además, la interculturalidad conforma uno de los
ejes para la integración de los saberes y para fomentar valores, actitudes, virtudes y
se fundamenta en cuatro pilares; aprender a crear, aprender a convivir y participar,
aprender a valorar y aprender a reflexionar (Ministerio Popular para la Educación,
2007b).

Todos estos aspectos son pertinentes a la Orientación como ese proceso cíclico de
acción y reflexión, implicativa de una continua definición de acciones y estrategias que
responden a necesidades, expectativas y motivaciones del ser humano; en las
distintitas etapas de su desarrollo. Sin embargo, para el presente momento, la
Orientación en el Modelo Educativo Bolivariano carece de un espacio donde se
establezcan de manera tácita lineamientos para su implementación.

Sin embargo, esta se mantiene presente como un eje transversal en el referido modelo
educativo, ya que la esencia de su fundamentación es inherente a ésta. Además, la
implementación de éste involucra a todos los actores de la comunidad escolar, por lo
que los orientadores en su praxis se han ido compenetrando con la puesta en práctica
de este currículo para la convivencia humana. Lo que ha propiciado el abandono de la
Orientación de oficina, para dar apertura a una acción orientadora concatenada con
todos los actores involucrados en el hecho educativo: estudiantes, padres-
representantes, directivos, otros docentes, administrativos, mantenimiento y
comunidad.

Esto conlleva a una planificación y acción de la Orientación más cercana a las


necesidades del contexto, ya que parte de un diagnóstico participativo donde se
involucra escuela-comunidad. Además, los orientadores en su praxis diaria mantienen
un contacto permanente con los Consejos de Protección de Niños, Niñas y
Adolescentes, organismos de atención a la salud integral y otros. También están
atentos a la constante revisión y respeto de las normas de convivencia establecidas
por cada institución en particular.

Es importante señalar que el Ministerio del Poder Popular para la Educación ha creado
la División de Protección y Bienestar Estudiantil, cuya misión es recuperar y preservar
el bienestar bio-psico-social de la población infanto juvenil con el fin de asegurar su
acceso, permanencia, prosecución y rendimiento satisfactorio en el proceso educativo.
Lo cual es desarrollado a través de los Centros Comunitarios de desarrollo y Protección
Estudiantil. Esto, con la visión de Crear condiciones que promuevan la calidad de vida
en la población estudiantil, su familia y la comunidad de coexistencia a través de
mecanismos de promoción, prevención de las metas educativas en un ambiente de
organización y participación activa (Ministerio del Poder Popular para la Educación.
Zona Educativa Estado Carabobo, s.f.)

Lo cual ha permitido a la Orientación expandirse hacia los centros comunitarios donde


su labor parte del diagnóstico comunitario y está centrada en el área socio-educativa
para el desarrollo de actividades de prevención y promoción, en la búsqueda del
bienestar integral individual y colectivo. Entre las funciones de los orientadores en
estos centros están: el coadyuvar en la implementación del Diagnóstico Integral de
Salud, atender estudiantes con riesgo socioeducativo, fomentar la formación de valores
en las personas que habitan en la comunidad, promover la reflexión y construcción de
un proyecto de vida personal, ofrecer atención individual y colectiva (Camargo, 2008).

Por otra parte, está la creación y ejecución del Programa Nacional La Escuela como
Espacio para la Salud Integral y Calidad de Vida. El cual está enmarcado en los
principios de la Organización Panamericana de la Salud y representa una herramienta
integradora para la promoción de la salud en el ámbito escolar y contribuye al de
desarrollo humano de la población estudiantil a partir de un enfoque integral, orientado
a formar jóvenes con conocimientos, habilidades y destrezas que le permitan cuidar de
su salud, la de su familia y comunidad (Ministerio de Salud y Desarrollo Social y
Ministerio de Educación y Deportes, 2005).

Este programa, conjuntamente con las acciones ejecutadas en los Centros


Comunitarios de Desarrollo Estudiantil y en los Consejos de Protección de Niños, Niñas
y Adolescentes, representa, dentro del Modelo Educativo Bolivariano, espacios para el
ejercicio profesional de la Orientación. Lo cual le ofrece la posibilidad de un
enriquecimiento fortalecedor para el encuentro de su propia identidad, ya que ella
cobra sentido en la medida que trabaja en función del mundo social. Es éste el estado
actual de la Orientación en Venezuela, en el marco del nuevo Modelo Educativo
Bolivariano en construcción y permanente revisión.

Por lo que es importante considerar que, ante la perspectiva de este modelo educativo
en Venezuela, la Orientación está obligada a girar la mirada hacia un ser humano
físico, biológico, psíquico, antropológico, revestido de una personalidad, en constante
interacción con lo sociocultural (Rojas, 2007). Todo esto implica una explosión de la
intersubjetividad, donde la multiculturalidad e interculturalidad marquen pauta, exista
dialogicidad de los entresaberes, es decir, otra manera de mirar la realidad.

 
ALGUNAS CONSIDERACIONES FINALES

Desde la perspectiva de la nueva visión de desarrollo humano, todo lo concerniente a


procesos educativos debe girar la mirada hacia ese paradigma e incorporar el ser y el
convivir a toda acción formativa. A lo largo del año 2008, en Venezuela se ha venido
construyendo el Sistema Nacional de Orientación (SNO) como respuesta a esas
necesidades; demanda de la sociedad contemporánea. De esta manera, la Orientación
asume el reto de la formación del nuevo ciudadano venezolano que se pretende
caracterizado por la solidaridad, participación protagónica, corresponsabilidad, sentido
de pertenencia y visión ecológica.

Esto, partiendo de la concepción de la Orientación como una praxis social dirigida a la


facilitación de procesos propios del desarrollo humano, considerando las dimensiones
del Ser, Conocer, Hacer y Convivir; abarcando lo personal-familiar-social a lo largo del
ciclo de vida. Para así generar y potenciar aspectos como: autodeterminación, libertad
y emancipación en pro del bienestar integral individual y comunitario. Es decir, la
Orientación como una disciplina centrada en la persona y su entorno, sustentada en el
humanismo. (Vera et. al., 2008).

En este sentido, los Ministerios del Poder Popular para la Educación y Educación
Superior han asumido la responsabilidad indeclinable de dar cumplimiento a mandatos
constitucionales, y como garantes de las políticas públicas y lineamientos en materia
de educación están avocados a la construcción del SNO, el cual:

…será un conjunto orgánico integrador de políticas y servicios de orientación


destinados al pleno desarrollo de la persona y de su potencial creador desde las
realidades de una sociedad plural, diversa y pluriétnica, que responde directamente a
las necesidades y requerimientos del Ser y del Convivir, demandadas en la sociedad
bolivariana en construcción (Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior.
2008).

Es importante señalar que dicho sistema está conformado por los siguientes
subsistemas: Instituciones educativas que abarcan desde la educación inicial hasta el
bachillerato, Escuelas Técnicas y las Misiones educativas Robinson y Ribas; las
Instituciones de Educación Superior y la Misión educativa Sucre; las Instituciones
empresariales, producción y servicios, las cuales poseen una orientación laboral y
comunitaria y funcionarían bajo la rectoría interministerial con la participación de las
universidades y el gremio de orientadores. Además, ofrecería tanto a personas como a
comunidades programas y servicios de Orientación Personal, Académica, Laboral,
Comunitaria y Vocacional de Planificación y desarrollo de Carrera (Ob. Cit).

Este SNO se ha venido trabajando conjuntamente con equipos de profesionales de la


Orientación de la Universidad de Carabobo y la Universidad del Zulia como únicas dos
instituciones formadoras de estos profesionales a nivel de pregrado (Licenciados en
Educación Mención Orientación), con la participación conjunta de la Universidad
Central de Venezuela, Universidad Nacional Abierta y Universidad Simón Rodríguez.
Quienes han venido adelantando lineamientos sobre el mismo, desde donde se
pretende contribuir con el logro del desarrollo integral como derecho constitucional
para todos los venezolanos y venezolanas.

Por último, es necesario señalar la relevancia de la tarea que se viene desarrollando


con la construcción del SON, ya que abrió espacios para la discusión sobre la
Orientación como proceso que debe responder a necesidades, expectativas y
motivaciones del ser humano, en las distintas etapas de su desarrollo. Además, ha
permitido la participación de equipos de distintas regiones del país con diferentes
puntos de vista y se está trabajando en pro de un modelo de Orientación que integre
todos los subsistemas de la educación venezolana con la participación del sector
productivo, tanto público como privado.

Lo cual, ya en el año 1982, había sido señalado en la Primera Jornada de Orientación


Vocacional y profesional del Estado Aragua en Venezuela como una urgida necesidad:

Necesitamos orientar a quienes toman las decisiones en las instancias superiores del
Estado, en los Institutos de formación de orientadores, en los Institutos educacionales
de todo nivel, en los sindicatos, en las empresas, en los ministerios, y no sólo los de
Educación y Justicia, en todos los estamentos de la sociedad, porque en todos esos
lugares hay campos para la acción del orientador y todos ellos influyen de alguna
manera en el estado actual de la orientación en Venezuela (Moreno, 2008:69).

También podría gustarte