Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Participación Ciudadana.

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 11

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE CHIAPAS

FACULTAD DE CONTADURÍA Y
ADMINISTRACIÓN, CAMPUS I
TUXTLA GUTIÉRREZ

LICENCIATURA EN ADMINISTRACIÓN

GRADO: 2 GRUPO: A

MATERIA: Desarrollo sustentable

TEMA: Participación ciudadana

DOCENTE:

INTEGRANTES:
 Solís Verdi maria Belén
 Mancilla López Idunadxhii maricela
 Velasco Ambrosio María Guadalupe
 Calvo espinosa Roberto Octavio
 López Jiménez Mauricio
 Arévalo Suarez Rodrigo Eliseo

LUGAR: Tuxtla Gutiérrez

FECHA DE ENTREGA: 5 de mayo del 2022


CONTENIDO
1. PROBLEMATIZACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN
La participación ciudadana en México se basa en la evolución de la
democracia y el rápido crecimiento tecnológico, entre otros factores de igual
importancia; esto ha causado que la participación ciudadana pueda ser toda
una realidad ya que tiene como objetivo transmitir información al pueblo, esto
con el propósito y que puedan hacer saber sus opiniones a sus representantes.
¿Cuándo se da?
La ciudadanía se adquiere, por norma general, con la mayoría de edad,
momento en el que se considera que un individuo posee la capacidad y los
conocimientos básicos sobre la sociedad como para cumplir debidamente con
sus deberes y derechos.

Pobreza, desigualdad y corrupción, principales problemas de


la democracia en México: INE

El director del INE, consideró que los retos para democracia están en el
contexto y la vida social en la que se realizan las elecciones

Los problemas políticos-electorales ya no son los principales problemas


nacionales para la vida democrática de México, sino los problemas sociales
como la pobreza, la desigualdad, la corrupción, la impunidad y la
inseguridad, declaró Lorenzo Córdova, consejero presidente del Instituto
Nacional Electoral (INE).

El funcionario federal agregó que los retos para democracia están en el contexto


y la vida social en la que se realizan las elecciones; ello en su mensaje inaugural
en el Foro Internacional: Democracia y Elecciones que convocó el Instituto
Electoral del Estado de Querétaro junto con cuatro universidades de la entidad en
el Instituto Tecnológico de Monterrey Campus Querétaro.

“Desde mi perspectiva los retos para nuestra democracia ya no están en el ámbito


electoral, si no en el contexto en que las elecciones y la vida social se recrean; los
grandes problemas nacionales ya no son necesariamente político-electorales, sino
más bien apuntan a esos grandes pendientes ominosos de la democracia, como
la pobreza, la desigualdad, la corrupción, la impunidad y la inseguridad”, precisó el
titular del INE.
Asimismo, señaló que es necesario una reforma a la Ley electoral y el consenso
de los diferentes partidos políticos para que se logre una votación electrónica en
las elecciones a la gubernatura de 2021.

Indicó que se debe buscarse que cada vez se simplifique la Ley y abaratar los
costos de la operación electoral.

“El INE está planteando desde ahora, la posibilidad de avanzar y la pertinencia de


avanzar hacia allá, pero se necesita un cambio a la ley, se necesita un consenso
político porque si vamos a cambiar a la urna electrónica para que luego un partido
diga que hay manipulación de la voluntad de los electores, pues flaco favor nos
haríamos”, advirtió el consejero presidente.

Por último, Lorenzo Córdova enfatizó que no hay algún tipo de conflicto entre el
INE y los tribunales electorales, pues cada organismo es autónomo; además que
destacó que tras la jornada electoral ningún grupo está resolviendo sus diferencias
a pedradas.

“Hoy a menos de dos meses de las elecciones, podemos vivir en paz pública.
Nadie se está matando, nadie está resolviendo sus diferencias políticas a
pedradas y ese es el producto, ese es el resultado de una elección que funcionó y
en la que todos, y debemos de reconocerlo, todos, estuvimos a la altura de la
circunstancias”, agregó.

1.1. PROBLEMA

La participación ciudadana es una situación de suma importancia en la que


debemos estar relacionados todos y mantenernos activos en el ámbito social,
político y económico con el objetivo de dar a conocer las opiniones, pero
realmente los alumnos de la Licenciatura en Administración de la Facultad de
Contaduría y Administración, CAMPUS I, no toman en cuenta que sus opiniones
pueden hacer de un cambio muy notorio para las cosas que se realizan.
Desde siempre se ha notado como los jóvenes estudiantes no tienen total interés
de tomar decisiones respecto al tema puesto que se han presentado diferentes
tipos de desafíos al momento de tomar acuerdos de manera democrática, porque
los cambios son futuros y ellos son quienes sufrirán ciertas consecuencias que
quedan a las malas decisiones de personas de la administración pública o de
quienes hacen los cambios.
El tema merece mayor atención si realmente aspiramos a consolidar la
democracia, sobre todo en estos tiempos, en que las “reformas sociales” parecen
no considerar las bases necesarias para una nueva reforma, sin tomar en cuenta
que lo más importante del país es la reforma política.

1.2 OBJETIVOS
1.2.1. GENERAL
Consultar con los estudiantes la importancia de la participación ciudadana, así
formar personas con un espíritu democrático con la capacidad de que estos
puedan ser capaces de transformar el medio en el que se vive y controlar los
órganos políticos, económicos y administrativos

1.2.2. ESPECIFICO
Promover en el estudiante lo importante que es el desarrollo de un conocimiento
básico y suficiente a cerca del mecanismo de participación y control ciudadano y
que en ellos cause una cierta reflexión y se interesen más.
Promover la claridad del estudiante acerca del proceso que se desarrolla en cada
mecanismo de participación y control ciudadano, de cierta manera en que estos
puedan entenderlos, diferenciarlos y reconocer en los casos en los que se pueden
utilizar.
Lograr que estos identifiquen que es de suma importancia su participación para
así poder hacer y que sea notorio el cambio en la sociedad.

1.3 JUSTIFICACIÓN
La investigación se ha realizado ya que los alumnos de la Licenciatura en
Administración de la Facultad de Contaduría y Administración, CAMPUS I,
responde a una preocupación por la promoción de los principios democráticos, por
construir una vía para el descubrimiento y el compromiso con estos principios,
incluyendo la toma de conciencia de los propios derechos, no desde una óptica
individualista sino desde la perspectiva de compartir pertenencias y
reconocimientos comunes, convivir con las diferencias y las controversias y
participar en forma solidaria en lo social y colectivo.
En base a esto se les nota el desinterés en participar en los cambios que se
presentan en la reforma social, política y económica; estos afectan la cotidianidad
de su comunidad, barrio, pueblo, ciudad o territorio.
Todos y cada una de las personas contamos con derechos y responsabilidades
que afectan nuestra vida y de los demás. La participación ciudadana es uno de los
ejemplos de los cuales nuestras decisiones tienden a mejorar o afectar a la
sociedad.
Poder hacer uso de nuestra voz y voto en nuestras comunidades es una de las
cosas más importantes que debemos aprovechar. Ya que por medio de nuestra
participación podremos crear cambios significativos en nuestra localidad.
Parece lógica la consolidación de estos procesos participativos por varias razones:
 Los programas electorales de los partidos ganadores, elaborados a toda
prisa por un grupo local cuando están próximas las elecciones.
 El presentimiento y conocimiento de los concejales con responsabilidad de
gobierno.
 Las influencias de los poderes locales: grupos de ciudadanos bien
organizados, empresarios, comerciantes, propietarios de terrenos e
inmuebles.
 Las oportunidades generadas por otras instancias de gobierno regional o
nacional.

1.4 DELIMITACIÓN

1.4.1. TEMPORAL
21 de Abril – 5 de Mayo

1.4.2. ESPACIAL
Facultad de contaduría y administración, campus I, Tuxtla Gutiérrez
2. Marco conceptual
En primer lugar, la participación ciudadana como concepto se refiere a la
posibilidad que tiene la sociedad para contribuir e influir en las decisiones
gubernamentales que le afectan, sin necesidad de formar parte de la
administración pública o de los poderes Legislativo y Judicial.
En este sentido, los principales mecanismos de participación ciudadana en
nuestro país son el plebiscito, el referéndum, la consulta y la iniciativa popular
De inicio es fácil observar que existe un marco legal diverso y en algunos casos,
ambiguo, respecto a las legislaciones estatales dentro de esta materia. No
obstante, el problema central reside en que a lo largo de la historia, el nivel de
participación de la sociedad mexicana, tanto en procesos de elección democrática
como en el uso y aplicación de estos mecanismos, no ha sido suficiente para
generar un verdadero cambio en las prácticas políticas de nuestros gobernantes.
Como ejemplo, están los resultados del Latino barómetro 2014, que deja la
evidencia de que sólo el 40 por ciento de la población confía en el gobierno, el 33
en la policía, el 32 en el congreso y el 28 en los sindicatos, mientras que la cifra
más baja corresponde a los partidos políticos con sólo 22 por ciento.
Estos niveles de desconfianza se traducen en una legitimidad precaria, además de
un hartazgo generalizado, en que la sociedad manifiesta que la corrupción, la
pobreza y la violencia son los principales problemas en México, por lo que no
encuentran suficientes incentivos para invertir su tiempo y esfuerzo en la
participación ciudadana, al considerar que de todas formas el Estado carece de la
capacidad para dar soluciones viables a los distintos problemas.
Según Mujica (2010), etimológicamente la palabra participación proviene del
latín“partem capere” que se traduce en “tomar una parte" o “tomar parte" o en
sentido técnico la participación ciudadana es comprendida como un proceso
social, continuo y dinámico, por medio del cual los miembros de una comunidad a
través de mecanismos establecidos y organizaciones legítimas en las cuales se
encuentren representadas todos los miembros de la comunidad
Asimismo, Ibarra (2004) refiere que la participación ciudadana puede definirse en
la actuación de los ciudadanos de las actividades públicas, todo esto para hacer
prevalecer tanto sus intereses sociales, como para defender y garantizar los
derechos colectivos o difusos, a través de mecanismos (estructuras y procesos)
idóneos por medio de los cuales el ciudadano es tomado en cuenta en la toma de
decisiones por parte de la administración pública en materias que de manera
directa le afectan.
Merino (1995) explica que la participación puede distinguirse desde diferentes
puntos de vista. Para él “participar, en principio, significa “tomar parte”: convertirse
uno mismo en parte de una organización que reúne a más de una sola persona.
Pero también significa “compartir” algo con alguien o por lo menos, hacer saber a
otras algunas informaciones.
Los antecedentes más importantes de este tema se pueden encontrar en nuestra
actual Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ya que “en su
artículo 5° estableció por primera vez el concepto de derechos políticos, hizo
referencia por primera vez al derecho de los ciudadanos a votar y ser votados”
(Centro de Estudios Sociales y de Opinión Publica, 2006)
“El articulo 39 estableció que la soberanía nacional reside esencial y
originariamente en el pueblo; que todo poder público del pueblo y se instituye para
beneficio de este” (Centro de Estudios Sociales y de Opinión Publica).
A través del artículo 39 se puede observar la importancia que tiene la participación
ciudadana en la vida de un país, el gobierno en México se estable para que
trabaje en beneficio del pueblo mexicano, es por ello que es tan importante una
comunicación proactiva entre el pueblo y sus representantes.

3. MARCO REFERENCIAL

3.1. UNACH
En el informe que, con el título “Un nuevo sistema regional de enseñanza superior
de la Universidad Autónoma de Chiapas” presentó en 1975 a solicitud del gobierno
mexicano el Sr. P. Furter -especialista de la Organización de las Naciones
Unidas-, se afirma que a principios de 1974 el entonces gobernador de Chiapas,
Dr. Manuel Velasco Suárez había sostenido ya conversaciones formales con un
representante de la UNESCO en México, de apellidos Díaz Lewis, con el propósito
de definir lo relativo a la fundación próxima en la entidad de una nueva institución
de educación superior; específicamente, de una universidad.
Tal conversación, entonces, parece ser el antecedente del que parte una serie de
tareas y actividades que dieron finalmente como resultado la creación efectiva de
la actual Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH).
No se precisa en el documento cuáles fueron las actividades de planeación que,
sin duda, debieron tener lugar durante los 8 meses comprendidos entre esa fecha
y la inauguración oficial de la UNACH ocurrida en abril de 1975; se llevaron a cabo
las actividades preparatorias pertinentes a la creación real de la universidad, tales
como la construcción y adaptación de edificios y el nombramiento de funcionarios
universitarios.
En otro momento, el gobernador Velasco Suárez turnaría al Congreso del Estado
un proyecto de Ley Orgánica que sería luego aprobado por el decreto de fecha 28
de septiembre de 1974, y publicado oficialmente el 23 de octubre del mismo año.
Por fin, el 17 de abril de 1975, contando con la presencia del entonces presidente
de la República, Lic. Luis Echeverría Álvarez, la UNACH entraba formalmente en
funciones. Chiapas contaba ya con Universidad propia.
Al fundarse oficialmente la UNACH existían ya algunas instituciones de educación
superior en el estado, en las cuales ofrecían y cursaban carreras típicamente
universitarias. La Escuela de Derecho, por ejemplo, remonta sus orígenes hasta
1679, cuando el actual estado de Chiapas se encontraba aún integrado política y
administrativamente a la Capitanía General de Guatemala. Además, “aunque en
1926 los estatutos de la primera Universidad de Chiapas hayan sido ya
promulgados, la Universidad desaparece o, más bien, se reduce paulatinamente a
la Escuela de Derecho con sede en San Cristóbal de Las Casas, cuyas vicisitudes
reflejan bastante fielmente los conflictos revolucionarios de principios de siglo, así
como las tensiones entre San Cristóbal -la antigua capital colonial- y Tuxtla
Gutiérrez- el nuevo centro político-administrativo”. No fue sino hasta el año 1962
cuando la Escuela de Derecho, tal como se le conoce en la actualidad, quedó
formalmente estatuida.
Por otra parte, sólo un Patronato Pro-Universidad de Chiapas había mantenido
viva la idea de hacer surgir en la entidad una tal institución de educación superior,
habiendo promovido en 1966 la apertura de la Escuela de Ingeniería Civil y de la
Escuela de Comercio y Administración, ambas ubicadas en la ciudad de Tuxtla
Gutiérrez.

3.2. FCAC-I
Los orígenes de la Facultad de Contaduría y Administración, se remontan al año
1963, cuando en Tuxtla Gutiérrez se funda la Escuela de Técnicos en Contabilidad
y Administración, perteneciente al Instituto de Ciencias y Artes de Chiapas
(ICACH), en donde se impartía la carrera de Técnico en Contabilidad y
Administración; posteriormente, a los tres años de su fundación, en 1966 se
independiza de dicho instituto y constituye la base de la Escuela Superior de
Comercio y Administración de Chiapas (ESCACH), subsidiada en partes iguales
por la federación y el gobierno del estado, impartiendo clases en la antigua
Escuela Normal del ICACH y ofertando la licenciatura en Contaduría Pública. En
esta institución, la ampliación de la oferta educativa ocurre en dos momentos
claves, en 1971, cuando apertura la Licenciatura en Administración de Empresas y
en 1974 que inicia a incorporar estudiantes en la Licenciatura en Turismo.

Al fundarse la Universidad Autónoma de Chiapas, mediante decreto


gubernamental de fecha 17 de Abril de 1975; la ESCACH, pasa a formar parte de
ésta, con el nombre de Escuela de Contaduría y Administración; iniciando
actividades en las instalaciones del Edificio “Maciel”; la oferta educativa inicial
constó de las licenciaturas en Contaduría Pública, Administración de Empresas,
Relaciones Industriales, Turismo y Desarrollo Agropecuario.
Posteriormente las Licenciaturas en Turismo y Desarrollo Agropecuario
modificaron su denominación, al de Administración de Empresas Turísticas y
Administración Agropecuaria, respectivamente. Más adelante, en 1991, por
problemas atribuidos a una baja demanda estudiantil, las licenciaturas en
Administración Agropecuaria y Relaciones Industriales dejan de impartirse, sin
embargo en 1992, en respuesta al creciente auge de las tecnologías se apertura la
Licenciatura en Informática Administrativa, que se imparte hasta el año de 1998,
cuando es sustituida por la Licenciatura en Sistemas Computacionales.
 
Respecto a los planes y programas de estudios de licenciatura, una primera y
profunda revisión, surge en 1994, cuando se modifican los inicialmente ofertados y
se adoptan los planes de estudios recomendados por la Asociación Nacional de
Facultades y Escuelas de Contaduría y Administración, (ANFECA) dando como
resultado que las licenciaturas en Contaduría, Administración de Empresas y
Administración Turística, tuvieran una duración de diez semestres y la de
Sistemas Computacionales de nueve semestres.

Posteriormente, como resultado del trabajo de revisión curricular emprendido en el


marco del Proyecto Académico 2002-2006, a partir del ciclo escolar agosto
diciembre 2005 inicia la operación de los planes de estudio de las cuatro
licenciaturas ofertadas, mismos que incorporan los principales paradigmas que
señalan las políticas de educación superior en el país, orientadas hacia modelos
curriculares flexibles, centrados en el aprendizaje y en el estudiante.

En diciembre de 2015 el H. Consejo Universitario aprueba la creación de la


Licenciatura en Ingeniería en Desarrollo y Tecnologías de Software (LIDTS), que
para tal efecto se llevó a cabo el equipamiento de los laboratorios del área de
Sistemas Computacionales con más de 100 computadoras de tecnologías de
punta y fortalecen así mismo a la Licenciatura en Sistemas Computacionales. El
inicio de LIDTS tuvo lugar durante el ciclo escolar enero-junio de 2016,
matriculando en el primer semestre a 55 estudiantes. De tal forma que la Facultad
de Contaduría y Administración C-I oferta a la sociedad chiapaneca los siguientes
cinco programas educativos de licenciatura: 

 Contaduría
 Administración
 Gestión Turística
 Sistemas Computacionales
 Ingeniería en Desarrollo y Tecnologías de Software 

También podría gustarte