Alberto Parra
Alberto Parra
Alberto Parra
RELACIONES
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y de la Orden en general. Pero las dificul- relación que entre una y otra dimensión
tades de establecer convenientemente las señalan los documentos en juego? Ya he-
relaciones entre uno y otro elemento de la mos advertido que los documentos a los
misión, han hecho de ese decreto objeto cuales hacemos referencia aqu í son: "Jus-
de fraternales controversias y de juiciosos ticia en el Mundo", del Sínodo de 1971;
estudios. "Evangelización del Mundo Contemporá-
neo", del Sínodo de 1974; el decreto
La Exhortación Apostólica "Evangelii "Nuestra Misión Hoy", de la XXXII Con-
Nuntiandi" del 8 de diciembre de 1975, gregación General de la Compañía de Je-
vuelve una vez más sobre esa mutua rela- sús; y la Exhortación Apostólica "Evan-
ción y, a- nuestro juicio, se aparta de las gelii Nuntiandi" del Papa Pablo VI, de di-
que fueron afirmaciones propias del Síno- ciembre de 1975.
do de 1971, no suscribe una fuerte co-
rriente de pensamiento presente en el Sí- Tratemos de hacer luz sobre estas cues-
nodo de 1974, y declara sus propias con- tiones.
vicciones en un nivel de pensamiento que
también había estado presente en el últi-
mo de los Sínodos.
2. CUAL EVANGELlZACION?
Como puede adivinarse, nos hallamos
ante una diversidad grande de ópticas; A. En el Sínodo de 1974
habrá que atender a cada una de ellas. Los El Sínodo delibera, precisamente, sobre
documentos en los cuales se aborda el prcr la Evangelización del Mundo Contempo-
blema son varios, de diversa índole, de de- ráneo.
sigual valor; habrá que jerarquizar su fuer-
za doctrinal. No podríamos, sin menosca- Las relaciones oficiales de las varias
bo de la unidad y de la necesaria concor- Conferencias Episcopales o grupos de ellas
dia en punto tan capital, atenernos unos (por sectores o por lenguas) contienen un
a la interpretación del Sínodo de 1971; material amplísimo sobre problemas de
otros, al Sínodo de 1974; otros a la evangelización, su urgencia, los fines, los
"Evangelii Nuntiandi"; como si uno fuera agentes evangelizadores y los medios, las
de Cefas, otro de Apolo y otro de Pablo. dificultades, la inculturación, los temas de
Por ello nos vemos precisados a decir, de liberación integral.
entrada, que entre los varios documentos
de desigual valor en orden a establecer las Algo de esto, sumamente poco, pasó al
relaciones fe-justicia sobresale uno, la Ex- brevísimo Documento final, debido a las
hortación papal "Evangelii Nuntiandi", conocidas difíciles circunstancias que se
que no creemos pueda ca.talogarse como vivieron durante el Sínodo y sobretodo a
una opinión más al lado de otra, por muy su terminación.
respetable que se la suponga. El material abundante y las ricas deli-
beraciones del Sínodo quedaron a dispo-
La justa intelección de la relación mu- sición del Papa que las iría a aprovechar,
tua entre servicio de la fe y promoción de sistematizadas y enmendadas, precisamen-
la justicia exige una precisión grande en te en su Exhortación sobre la evangeliza-
los términos, so pena de estar usando len- ción.
guajes diferentes que imposibi litan toda
comprensión en orden a la acción. De qué B. En la Congregación General XXXII
"evangelización" se trata? Qué es lo que
los varios documentos entienden por "jus- La Congregación emplea a lo largo y
ticia"? Cuáles son los diversos grados de ancho del Decreto IV las expresiones
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"evangelización", "anunciar el evangelio", 4) Contenido de la evangelización:
"anunciar a Jesucristo". Pero sus expre- - hay elementos secundarios y otros
siones favoritas son "servicio de la fe (di a- esenciales
konía fidei)" y "proclamación de la fe".
"En el mensaje que anuncia la Iglesia
Este servicio o proclamación no es di- hay ciertamente muchos elementos se-
rectamente definido o descrito, bien que cundarios, cuya presentación depende
por todas partes se hallan esparcidos mu- en gran parte de los cambios de circuns-
chos elementos integrantes de la noción tancias (... ) Pero hay un contenido
de evangelización. esencial, una substancia viva que no se
puede modificar ni pasar por alto sin
C. En la Exhortación Apostólica desnaturalizar gravemente la evangeli-
"Evangelii Nuntiandi" zación misma" (n. 25).
El Documento quiere, precisamente, - proclamación del Dios revelado
aclarar qué es lo que la Iglesia entiende por Cristo
hoy por evangelización. He aquí una so- "Evangelizares, ante todo, dar testimo-
mera sistematización: nio sencillo y directo de Dios revelado
por Jesucristo mediante el Espíritu San-
1) Es una realidad compleja: to. Testificar que ha amado al mundo
"Ninguna definición parcial y frag- en su Hijo; que en su Verbo encarnado
mentaria refleja la realidad rica, com- ha dado el ser a todas las cosas y ha lla-
pleja y dinámica que comporta la evan- mado a los hombres a la vida eterna
gelización, si no es con el riesgo de em- - proclamación del misterio de Je-
pobrecerla e incluso mutilarla. ResultD sús
imposible comprenderla si no se tratD
de abarcar en conjunto todos sus ele-
mentos esenciales" (n. 17). "La evangelización debe contener siem-
pre -como base, centro y culmen de su
2) Significación esencial: dinamismo- una clara proclamación
"Evangelizar significa pata la Iglesia de que en Jesucristo, Hijo de Dios he-
llevar la Buena Nueva a todos los am- cho hombre, muerto y resucitDdo, se
bientes de la humanidad y, con su in- ofrece la salvación a todos los hombres,
flujo, transformar desde dentro, reno- como don de gracia y de misericordia
var a la misma humanidad (. .. ) porque de Dios. No una salvación inmanente,
no hay humanidad nueva si primero según las necesidades materiales o in-
no hay hombres nuevos con la nove- cluso espirituales que se agotan en el
dad del bautismo y de la vida según el cuadro de la existencia temporal y se
Evangelio" (n. 18). identifican totalmente con los deseos,
las esperanzas, los asuntos y las luchas
3) Finalidad de la evangelización: temporales, sino una salvación que des-
"Es el cambio interior y, si hubiera borda todos estos límites para realizar-
que resumirlo en unas palabras, habría se en una comunión con el único Abso-
que decir que la Iglesia evanfIJ/iza cuan- luto; salvación trascendente, escatoló-
do, por la sola fuerza divina del mensa- gica, que comienza ciertamente en estD
je que proclama, trata de convertir al vida, pero que tiene su cumplimiento
mismo tiempo la conciencia personal y en la etemidad" (n. 27).
colectiva de los hombres, la actividad
en la que ellos están comprometidos, - proclamación profética de un más
su vida y ambiente concretos" (n. 18j. allá, de la esperanza y del amor
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"La evangelización no puede por me- afrontadoperiódicamente diversos obs-
nos de incluir 'el anuncio profético de táculos a esta misión de universalidad.
un más allá, vocación profunda y defi- Por una parte, por la tentación de los
nitiva del hombre; en continuidad y mismos evangelizadores de estrechar
discontinuidad a la vez con la vida pre- bajo distintos pretextos su campo de
sente" (n. 28). acción misionera. O por la resistencia
"La evangelización comprende además de aquellos a quienes se dirige la evan-
la predicación de la esperanza en las gelización. O por los poderes públicos.
promesas hechas por Dios mediante la No obstante estas advertencias, la Igle-
nueva alianza en Jesucristo. Predicación sia reaviva siempre su inspiración más
del amor de Dios para con nosotros y profunda, la que le viene de su divino
de nuestro amor hacia Dios; la predica- maestro: a todo el mundo! a toda crea-
ción del amor fraterno para con todos tura! hasta los confines de la tierra! Lo
los hombres (. .. ) que por descender del ha hecho nuevamente en el Sínodo, co-
amor de Dios, es el núcleo del Evange- mo una llamada a no encadenar el anun-
lio" (n. 28). cio del evangelio limitándolo a un sec-
- otros elementos esenciales tor de la humanidad o a una clase de
hombres o a un sólo tipo de cultura"
"Predicación del misterio del mal, y de (n. 50).
la búsqueda activa del bien. Predica-
ción, que se hace más urgente, de la
búsqueda del mismo Dios a través de la
oración, sobretodo de adoración y de
acción de gracias, y también a través de 3. CUAL JUSTICIA?
la comunión con este signo visible del
encuentro con Dios que es la Iglesia de Un elemental acercamiento al término
Jesucristo, que a su vez se expresa en "justicia", especialmente en la Escritura,
otros signos vivientes de Cristo que son comprueba la amplia gama de significacio-
los sacramentos" (n. 28). nes posibles:
- en conexión íntima con la vida, el
desaffollo, la liberación Justicia divina.
"La evangelización no sería completa Justicia de Dios: atributo por el que
si no tuviera en cuenta la interpelación El es el sumo perfecto o Santo.
recíproca entre el Evangelio y la vida Justicia salvífica: (sinónimo de mise-
concreta. Precisamente por esto laevan- ricordia) dones concretos de salva-
gelización lleva consigo un mensaje ex- ción que demuestran la generosidad
plícito, adaptado a las diversas situacio- de Dios; esta justicia se revela de
nes y constantemente actualizado, so- una manera especial en Cristo (Rom
bre los derechos y deberes de toda per- 5,25).
sona humana, sobre la vida familiar
(. .. ), sobre la vida de la sociedad, sobre Justicia-recompensa (sinónimo de
la vida internacional, la paz, la justicia, mérito) por la cual Dios cumple sus
el desarrollo, un mensaje especialmente promesas o premia las acciones del
vigoroso en nuestros días, sobre la li- hombre.
beración" (n. 29). Justicia-punitiva (si nónimo de cóle-
ra) por la cual Dios castiga la mal-
5) Destinatarios de la evangelización. dad ("la cólera de Dios se revela des-
"A lo largo de veinte siglos de his- de el cielo contra la impiedad", Rom
toria, las generaciones cristianas han 1, 18).
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Justicia-liberadora: juicio en favor 1) Presencia de injusticias.
de quien tiene derecho, del pueblo, "Hemos podido percatamos de las gra-
del justo, del oprimido, del desvali- ves injusticias que envuelven el mundo
do, del huérfano, del cautivo. humano con una red de dominio, de
Justicia humana. opresiones y abusos que sofocan la li-
bertad e impiden a la mayor parte del
Justicia moral (sinónimo de "piedad género humano participar en la edifica-
legal") cumplimiento pleno de la ción y en el disfrute de un mundo más
ley, de las prescripciones, de los igua! y más fraterno" (Introducción).
mandamientos; de donde deriva la
justicia que viene de la ley y que es 2) Pregunta de base.
propia del Antiguo Testamento.
"Porque si vuestra justicia no fuera "Nos hemos preguntado sobre la mi-
mayor que la de los escribas y fari- sión del pueblo de Dios en la promo-
seos ... ". ción de la justicia en el mundo" (Intro-
ducción).
Justicia judicial: por la que el juez
dicta o hace justicia, haciendo res- 3) Origen del movimiento por la justi-
petar la ley, el derecho, la costum- cia.
bre.
"A ello contribuye la nueva conciencia
Justicia social: regula las relaciones que sacude en contra de la injusticia e
de los hombres entre sí y tiene evi- impulsa a la liberación y responsabilidad
dentemente un marcado tinte reli- en la propia suerte" (Introducción).
gioso.
4) Consecuencias de la injusticia.
* conmutativa: regula las transac-
ciones o el oomercio humano: "La injusticia económica y la falta de
proporción entre lo que se da y participación social impiden al hombre
lo que se recibe conseguir los fundamentales derechos
* distributiva: por la cual se da a humanos y civiles" (Parte 1).
cada cual lo que le es debido, de- 5) Ambitos de la anhelada justicia o
pendiente o independientemente liberación.
de la ley, del derecho o de la cos-
tumbre. "En las naciones "en vía de desarrollo"
y en el llamado mundo socialista, la
Culmen de la Justicia es la caridad recí- voluntad de promoción se va reforzan-
proca entre los hombres; rompe las barre- do especialmente en la lucha por las
ras del derecho y es generosa (Cfr Mt 5, formas de reivindicación y de expre-
33 ss.). sión, a la que abre paso la evolución del
¿Cuál es, pues, la justicia que hoy se de-
mismo sistema económico" (Parte 1).
clara íntimamente relacionada con la evan- "Se expresa también en el derecho al
gelización, y que quisiéramos promover desarrollo" (ibd).
junto con el servicio de la fe? "Si las naciones y regiones "en vía de
desarrollo" no llegan a la liberación de-
A. En el Sínodo de 1971 sarrollándose a sí mismas, existe el pe-
El Sínodo delibera, precisamente, sobre ligro de que las condiciones de vida,
"La Justicia en el Mundo". creadas principalmente por el dominio
colonial, puedan convertirse en una
Tomando para el examen algunos ele- nueva forma de colonialismo, en el que
mentos del documento final, hallamos: las naciones en desarrollo serán víctimas
391
de las fuerzas económicas internaciona- B. En el Sínodo de 1974.
les" (ibd). El Sínodo delibera acerca de 11 La Evan
"La participación entraña un derecho gelización del Mundo Contemporáneo" :
que debe ser aplicado tanto en el cam- afirma que la promoción de la justicia en
po e~onómico como en el social y po- laza con la evangelización.
lítico (ibd.).
El vocabulario que aquí se emplea m
es tanto el de justicia como el de libera
6) Práctica de la justicia. ción. Pareciera que para este Sínodo son
"Nadie debe ser privado de los dere- sinónimo "justicia" y "Iiberación". Anali-
chos comunes" (Parte 111). cemos algunos apartes del corto Documen-
"Todos deben recibir los medios nece- to Final, especialmente del número 12:
sarios para la propia subsistencia" (ibd.). "La Iglesia puede sacar del mismo Evan-
"Las mujeres tengan mmbién su propia gelio razones más profundas y un im-
parte de responsabilidad y de participa- pulso siempre renovado para promnver
ción en la vida comunimria y mmbién la entrega generosa al servicio de todos
en la Iglesia" (ibd.). los hombres, sobretodo de los más dé-
biles y de los oprimidos, y para eliminar
"La Iglesia reconoce a todos el derecho las consecuencias sociales del pecado,
a una conveniente libermd de expre- que se traducen en consecuencias so-
sión y de pensamiento" (ibd). ciales y políticas injustas" (n. 12).
"Los procedimientos judiciales deben "La Iglesia, apoyándose en el Evange-
conceder al imputado el derecho a sa- lio de Cristo y formlecida con su gra-
ber quiénes son sus acusadores, así co- cia, puede evimr desviaciones en los
mo el derecho a una conveniente de- mismos esfuerzos de liberación, de for-
fensa" (ibd). ma que ella misma no se quede dentro
"Se reconozca que el orden internacio- de los límites puramen te políticos, so-
nal está radicado en los derechos y en ciales y económicos, que ciertamente
la dignidad inamisible del hombre. ... debe tener en cuenta, sino que conduz-
La Declaración de los derechos del ca a ia plena libertad" (ibd).
Hombre sea plenamen te observada por " Verdadera y plena liberación de todos
todos" (ibd.). los hombres, grupos y pueblos: libera-
"Sean apoyadas las Naciones Unidas y ción del pecado., del egoísmo colectivo
demás Organismos Internacionales en e individual; trascendencia a la plena
su afán de frenar la carrera de arma- comunión con Dios y con los hom-
mentos, de solucionar los conflictos bres" (ibd.).
por medios pacíficos" (ibd.).
C. En la Congregación General XXXII
"Sea apoyado el 11 Plan de Desaffollo
Decenal en su afán por transferir un El telón de fondo del Decreto IV son
determinado porcentaje de renta anual los dos Sínodos anteriores, como lo decla-
de las naciones más ricas a las naciones ra la misma Congregación (n. 22). Por ello,
"en vía de desaffollo':· la fijación de su esquema descriptivo de la justicia que
precios justos para las materias primas; hay que promover, toma estos sesgos:
la apertura de los mercados in ternacio-
nales... el trato preferencial a produc- 1) Comprobación de la injusticia
tos manufacturados de las naciones "en "Nuestro mundo está invadido por la
vía de desarrollo" (ibd.). injusticia, injusticia no sólo de las per-
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sanas, sino encarnada en las institucio- micos y políticos que se plantean en la
nes y las estructuras socio-económicas ciudad, región opaís, así como también
que dominan la vida de las naciones y a nivel internacional" (n. 43).
de la comunidad internacional" (n. 6).
"La solidaridad con los hombres que
2) Descripción de la justicia evangélica llevan una vida difícil y son colectiva-
mente oprimidos no puede ser asunto
"La existencia según el Evangelio es una solamente de algunos jesuítas: debe ca-
vida purificada de todo egoísmo y de
racterizar la vida de todos" (n. 48).
toda búsqueda de la propia ven taja, así
como de toda forma de explotación del
prójimo. Es una vida en la que resplan· D. En la Exhortación Apostólica
dece la perfecta justicia del Evangelio, "Evangelii Nuntiandi"
que dispone no sólo a reconocer y res·
petar los derechos y la dignidad de too Las consideraciones sobre la "promo-
dos, especialmente de los más pequeños ción de la justicia" (Sínodo 1971) o "li-
y débiles, sino a promoverlos eficaz- beración" (Sínodo 1974) se hacen en este
mente y a abrirse a toda miseria, aún documento a propósito de la Evangeliza-
del extraño y enemigo" (n. 18). ción que es el tema de la Exhortación.
393
los condena a quedar al margen de la "La Iglesia considera ciertamente im-
vida: hambres, enfermedades crónicas, portJJnte y urgente la edificación de es-
analfabetismo, depauperación, injusti- tructuras más humanas, más justas, más
cia en las relaciones internacionales, si- respetuosas de los derechos de la per-
tuaciones de neocolonialismo econó- sona, menos opresivas y menos avasalla-
mico y cultural, a veces tan cruel como doras;
el político, etc. La Iglesia, repitieron pero es conscien te de que aún las me-
los Obispos, tiene el deber de anunciar jores estructuras, los sistemas más idea-
la liberación de millones de seres huma- lizados se convierten pronto en inhu-
nos, entre los cuales hay muchos hijos manos si las inclinaciones inhumanas
suyos; el deber de ayudar a que nazca del hombre no son saneadas, sino hay
esta liberación, de dar testimonio de la una conversión de corazón y de mente
misma, de hacer que sea total. Todo por parte de quienes viven en esas es-
esto no es extraño a la evangelización" tructuras o las rigen" (n. 36).
(n. 30).
"La Iglesia no puede aceptar la violen-
3) Características básicas de la libera- cia, sobre todo la fuerza de las armas,
ción evangélica. ni la muerte de quienquiera que sea co-
mo camino de liberación, porque sabe
"Acerca de la liberación que la evange-
que la violencia engendra inexorable-
lización anuncia y se esfuerza por poner
mente nuevas formas de opresión y de
en práctica, hay que decir:
esclavitud. Os exhortamos, decíamos ya
no puede reducirse a la simple yes- durante nuestro viaje a Colombia, a no
trecha dimensión económica, polí- poner vuestra confianza en la violencia
tica, social o cultural, sino que debe ni en la revolución; esa actitud es con-
abarcar al hombre entero, en toda traria al espíritu cristiano e incluso pue-
sus dimensiones; incluída su apertu- de retardar, en lugar de favorecer, la
ra al Absoluto que es Dios; elevación social a la que legítimamente
va, por tanto, unida a una cierta aspiráis" (n. 37).
concepción del hombre, a una an-
tropología que no puede nunca sa-
crificarse a las exigencias de una es-
trategia cualquiera, de una praxis o 4. CUAL RELACION?
de un éxito a corto plazo" (n. 33).
Establecido ya el concepto de justicia
"Por eso la Iglesia al predicar la libe- o liberación que usan los varios documen-
ración: tos, y habiendo ya indagado por el sentido
no admite el circunscribir su misión cristiano de evangelización, cabe ahora sí
al sólo terreno religioso, desintere- preguntarse en qué grado ya qué nivel se
sándose de los problemas tempora- interrelacionan la evangelización y la pro-
les del hombre; moción de la justicia.
394
mo una dimensión constitutiva de la social, favorecida por el Sínodo de 1971.
predicación del Evangelio, que es la mi- Se observan estos pasos:
sión de la Iglesia para la redención de
la humanidad y su liberación de toda
situación opresiva" (Introducción). 1) Intervenciones sinodales
"Se dan también en América Latina los
"EI amor cristiano al prójimo y la jus- riesgos de una superficial iden tificación
ticia no se pueden separar. Porque el entre evangelización y promoción hu-
amor implica una exigencia absoluta de mana, reduciendo la liberación al ám-
justicia, es decir, el reconocimiento de bito de lo puramente socio-económico
la dignidad y de los derechos del próji- y político o encerrándola en los límites
mo. La justicia, a su vez, sólo alcanza del tiempo" (Relación oficial de Amé-
su plenitud interior en el amor. Siendo rica Latina).
cada hombre realmente imagen visible "La liberación (de la opresión política
de Dios invisible, y hermano de Cristo, y socia/) minime evangelizationis est
el cristiano encuentra en cada hombre pars integralis" (Relación oficial del
a Dios y la exigencia absoluta de justi- Episcopado Alemán).
cia y de amor que es propia de Dios"
(Parte 11). "Es una exageración decir que el pro-
greso humano y la liberación terrestre
pertenece constitutivamente a la evan-
Elemento constitutivo de algo es aque-
gelización;es, más bien, una consecuen-
llo que pertenece a su entrañable esencia;
cia de la salvación" (Relación oficial
es parte esencial de la unidad total. En es-
del Episcopado Españo/).
te caso la evangelización se podría definir
y hacer tanto por la tarea espedfica de "Existe relación real interna entre evan-
implantación del evangelio, como por la gelización y promoción humana, no
promoción de la justicia social. Además, el pueden confundirse o identificarse, bien
anuncio religioso del evangelio se identifi- que tampoco pueden separarse en dos
caría con la evangelización; pero igualmen- actividades totalmente independientes,
te la promoción de la justicia se identifica- pues el ámbito religioso no constituye,
ría con la evangelización como parte cons- en el cristiano, un sector de vida sepa-
titutiva de ella. Así como el cuerpo del rado del resto de la actividad humana"
hombre se identifica con el hombre del (Relación del Circulus Minor Hispano -
que es parte constitutiva, y su espíritu se Portugués).
identifica con el hombre mismo del cual
es también parte constitutiva. 2) Aclaración de quien fue Secretario
del Sínodo de 1971
Se seguiría igualmente que promover la
"Dimensión constitutiva debe enten-
justicia es ya evangelizar, si la promoción
derse en el sentido de parte integrante.
de la justicia es parte constitutiva de la
Con el/o los Padres sinodales (de 1971)
evangelización. Desarrollar el mundo ser ía
evangelizar. no quisieron decir que la promoción de
la justicia sea parte esencial de la evan-
B. En el Sínodo de 1974 gelización" (Mons. Torel/a).
395
C. En la Congregación General XXXII lugar propiamente para la aCl;:ión promo-
cional de la Iglesia, la evangelización no
Puesto que su fuente de inspiración son
sería integral.
los Sínodos (Cfr. n. 221, la Con\Tegación
General afirma:
D. En la Exhortación Apostólica
"La promoción de la justicia aparece Evangelii Nuntiandi
como parte integrante del servicio pres-
En este punto nos parece qu.e es donde
biteral de la fe" (n. 18).
más se aparta el documento papal de la
"No hay promoción propiamente cris- óptica propia de los Sínodos:
tiana de la justicia integral sin un anun-
cio de Jesucristo y del misterio de la 1) Hay fuerte vinculación
reconciliación que él lleva a la consu·
"Entre evangelización y promoción hu-
mación: es, en efecto, Cristo quien abre
mana -desarrollo, liberación- existen
la puerta para esta liberación total y
efectivamente lazos muy fuertes
definitiva a la que el hombre aspira des-
de lo más profundo de sí mismo. Y, a vínculos de orden antropológico por-
la inversa, no hay verdadero anuncio que el hombre que hay que evange-
de Cristo, ni verdadera proclamación lizar no es un ser abstracto, sino un
de su Evangelio, sin un compromiso ser sujeto a losproblemas sociales y
resuelto por la promoción de la justi- económicos;
cia" (n. 27). lazos de orden teológico, ya que no
"La evangelización es proclamación de se puede disociar el plan de la crea-
la fe que actúa en el amor de los hom- ción del plan de la redención que lIe-
bres: no puede realizarse verdadera- ga hasta situaciones muy concretas
mente sin promoción de la justicia" de injusticia que hay que combatir
(n. 28). y de justicia que hay que restaurar;
vínculos de orden eminentemente
"La promoción de la justicia es parte
evangélicos como es el de la caridad:
,ntegrante de la evangelización" (n. 30).
cómo proclamar el mandamiento
"La transformación de las estructuras nuevo sin promover, mediante la
en busca de la liberación tanto espiri- justicia y la paz, el verdadero, el
tual como material del hombre queda, auténtico crecimiento del hombre"
así, ligada estrechamente con la obra (n. 31).
de evangelización" (n. 40).
2) No hay identidad
Como se ve, la Congregación prefiere la "La Iglesia asocia, pero no identifica
formulación del último de los Sínodos y nunca liberación humana y salvación
se declara por la interpretación de que la en Jesucristo:
promoción de la justicia es parte integral
de la evangelización. En tal concepto se - porque sabe por revelación, por ex-
distingue ya netamente la evangelización periencia y por reflexión que no to-
de la promoción social, pero se declara da noción de liberación es necesa-
que la una nunca puede estar sin la otra. riamente coherente y compatible
La evangelización para ser verdadera, ten- con una visión evangélica del hom-
dría siempre y en todo lugar que promo- bre;
ver la justicia de orden social. Pero ello lle- que no es suficien te instaurar la li-
varía a afirmar que en aquellos niveles o beración, crear el bienestar y el de-
conglomerados humanos desarrollados eco- sarrollo para que llegue el Reino de
nómica y socialmente en los que no hay' Dios;
396
- porque toda liberación (por más que moclon de la justicia, por ser bien más
esté basada en tal cual página del universal y más urgente:
Antiguo Testamento, por más que "Para la mayor gloria de Dios y para la
use datos y conclusiones teológicas, salvación de los hombres, Ignacio que-
por más que quiera ser la teología ría que sus compañeros fueran allí don-
de hoy) lleva dentro de sí el gérmen de se puede esperar un bien más uni-
de su negación si su motivación no versal, y allí donde se encuentran quie-
es la de la justicia en la caridad, si nes, abandonados, se hallan en una
no entraña dimerÍt¡ión verdadera- mayor necesidad. Pero nos pregunta-
mente espiritual, si su objetivo final mos a veces: dónde se encuentra la
no es la salvación y la felicidad en mayor necesidad hoy? Dónde se en-
Dios" (n. 35). cuentra la esperanza de un bien más
universal? (n. 39).
"Las estructuras sociales -de día en
día se adquiere de ello más viva con-
5. CON QUE PRIORIDAD? ciencia- contribuyen a modelar el
mundo y al mismo hombre, hasta en
Vistos los lazos íntimos entre servicio sus ideas y sentimientos, en lo más ín-
de la fe y promoción de la justicia, nos timo de sus deseos y aspiraciones. La
preguntamos ahora qué elemento del bino- transformación de las estructuras en
mio debe ser prioritariamente atendido: busca de la liberación tanto espiritual
como material del hombre está, así, pa-
A. En el Sínodo de 1974 ra nosotros estrechamente ligada con la
El documento final del Sínodo parece
obra de evangelización. .. " (n. 40).
no señalar prioridades. Las deliberaciones "En esta perspectiva se concilian la so-
sinodales, en cambio, pusieron de presente licitud por el bien más universal y la
ciertas enfatizaciones: voluntad de servir a las mayores nece-
sidades en vista del anuncio del evan-
"Nosotros repudiamos la teología mo-
gelio" (n. 41).
derna según la cual la Iglesia africana
debe primero asumir y efectuar la pro- Sin embargo más adelante se afirma:
moción terrestre de los pueblos y sólo
"Nuestra vida, la inteligencia teológica
entonces hacer su propia evangeliza- que tenemos de ella y la relación per-
ción. Es errado y falso dividir estos
sonal a Cristo que debe encon trarse en
oficios" (Relación oficial del Episcopa- el corazón de nuestro pensamiento y
do Africano). de nuestra acción, todo ello no consti-
"La cuestión no es: o evangelización o tuye tres "campos" distintos, a los que
promoción; ni cuál de ellos tiene prio- corresponderían tres "sectores apostér
ridad. La Iglesia acepta ambas como licos': La promoción de la justicia, la
partes integrantes de su misión r. .. ) La presen tación de nuestra fe y la marcha
prioridad de una u otra dependerá de hacia el encuentro personal con Cristo
las situaciones o circunstancias concre- constituyen, por el contrario, tres di-
tas" (Relación sobre la elaboración del mensiones constantes de todo nuestro
Documento final). apostolado" (n. 51).
397
Señala, en cambio, que en la evangeli- ca, ofrecer soluciones concretas en el
zación se dan elementos secundarios que campo social, económico y político
dependen de las circunstancias, y un con- para la justicia en el mundo. Pero su
tenido esencial que nunca puede faltar: misión implica la promoción y defensa
"En el mensaje que anuncia la Iglesia de los derechos y dignidad fundamen ta-
hay ciertamente muchos elementos se- les del hombre" (Parte 11).
cundarios, cuya presentación depende "Toca a.los cristianos asumir sus res-
en gran parte de los cambios de cir- ponsabilidades en todo este campo,
cunstancias_ Tales elementos cambian bajo la guía del espíritu evangélico y
también. Pero hay un contenido esen- la doctrina de la Iglesia" (ibd).
cial, una substancia viva, que no se pue-
de modificar ni pasar por alto sin des- B. En la Congregación General XXXII
naturalizar gravemente la evangeliza-
ción" (n. 25). La Congregación señala en su Decreto
IV que en la misión del jesuíta, la promo-
En los discursos de apertura y de clau- ción de la justicia es responsabilidad con-
sura del último Sínodo, el Papa había se- junta con el servicio de la fe:
ñalado:
"Otros con harta frecuencia se ven so- "Dicho brevemente: la misión de la
licitados hoy día a olvidar la prioridad Compañía de Jesús hoyes el servicio
que debe tener el mensaje de salvación, de la fe, del que la promoción de la
reduciendo así la propia acción a pura justicia constituye una exigencia abso-
actividad sociológica o política, y la mi- luta" (n. 2).
sión de la Iglesia a un mensaje antro- "Efectivamente, esta opción (compro-
pocéntrico y temporal" (Discurso de miso por la justicia) viene hoy requeri-
Apertura del Sínodo 1974). da por nuestra misión apostólica" (n.
"No se puede acentuar demasiado, a 28).
nivel temporal, la promoción humana "Una voluntad realista de promoción
y el progreso social en perjuicio del de la justicia no es realizable sin cier-
significado esencial que la Iglesia atri- tos compromisos en el plano social y
buye a la Evangelización" (Discurso de colectivo. Respecto al caso de compro-
Clausura del Sínodo 1974). misos de carácter excepcional se segui-
rá la práctica común de la Iglesia. Si,
en ciertas regiones parece oportuno fi-
jar criterios, normas o directivas, con-
6. BAJO RESPONSABI LI DAD DE cierne a los Provinciales... " (n. 80).
QUIEN?
C. En la Exhortación Apostólica
A quién en la Iglesia compete directa- "Evangelii Nuntiandi"
mente la promoción de la justicia social?
Es esta la última pregunta que nos formu- Son estos los pasos que se dan:
lamos: 1) Evangelizar conciecne a toda la Igle-
sia (n. 59)
A. En el Sínodo de 1971
2) Pero hay tareas diferenciadas.
Tras la distinción de niveles en la Igle-
sia, el Srnodo afirma: 3) Tarea específica de los seglares:
"No pertenece de por sí a la Iglesia, en "Su tarea primera e inmediata no es la
cuanto comunidad religiosa y jerárqui- institución y el desarrollo de la comu-
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nidad eclesial -esa es función específi- el interés de hacer recomendable y urgen·
ca de los Pastores- sino el poner. en te la relación misma. Queda fuera de duo
práctica todas las posibilidades cristia- da que los elementos del binomio están
nas y evangélicas escondidas pero a su íntimamente entrelazados y que cristiana
vez ya presentes y activas en las cosas y teológicamente esa íntima relación se
del mundo. El campo propio de su acti- fundamenta en la antropología bíblico·cris-
vidad evangelizadora, es el mundo vas- tiana, en el sentir cristiano acerca de la
to y complejo de la política, de lo so- indisoluble unidad creación-salvación en
cial, de la economía, de la cultura, de Cristal y en el acuciante precepto del amor
las ciencias y de las artes, de la vida in- al hombre y a todos los hombres.
ternacional, de los medios de comunica-
3) Es posible que subsistan todavía en
ción de masas, así como otras realidades
la conciencia de much os, resabios de se·
abiertas a la evangelización como el
paración radical sacerdotes/laicos, clé-
amor, la familia, la educación de los
rigos/fieles, segregados/mundanos y que
hijos, el trabajo profesional, etc." (n.
70). en esta óptica sitúen las competencias de-
masiadamente urgidas de lo que correspon-
de a los "laicos" y lo que corresponde a
los "sacerdotes". La responsabi lidad de la
evangelización en todas sus partes y con
todos sus elementos es un acto eclesial.
7. CONCLUSION Si la promoción de la justicia se piensa co-
mo prioritaria y más propia de la voca-
1) Las relaciones que se establecen ción del seglar, ello no pretende en modo
acontecen entre la evangelización como alguno eludir la parte de responsabilidad
la entiende y como la quiere actuar la que el ministro de la Iglesia, hoy más que
Iglesia, y la justicia o liberación como ella ayer, tiene en los asuntos de la promoción
misma la entiende, la acepta y la vive. No humana.
se trata, pues, de cualquier noción de
evangelización y menos aún de cualquier 4) Pero puesto que la promoción que
noción filosófica o política de promoción enlaza con la evangelización constituye la
o de liberación. Al respecto no habr ía que obra pastoral de la Iglesia, es evidente que
llamarse a engaños. "Evangelii Nuntiandi" ni lo uno ni lo otro puede hacerse al mar-
no solamente declara autoritativa mente gen de, ni menos contra los pastores legí-
qué entiende la Iglesia hoy por evangeliza· timos de la misma Iglesia. Son ellos los
ción, sino cuál es la liberación evangélica responsables últimos de la coordinada la-
que mucho difiere de otros tipos o con· bor, eclesia 1.
ceptos de liberación, por más que se los 5) Los principios de relación fe-justicia
respalde en talo cual página del Evange· son suficientemente claros hoy debido a la
lio, o por más que se los haga pasar por reflexión eclesial. Pero en base a esos prin-
la teología de hoy (Cfr. n. 35). cipios y por respeto a los mismos continúa
siendo ilegítimo y poco honorable ampa-
2) Los niveles de relación entre la evan· rar las opciones particulares y concretas y
gelización y la promoción de la fe con la las responsabilidades que cada uno libre-
liberación y la justicia no deben situarse mente asume, en la doctrina de la Iglesia y
afanosamente en planos maximalistas con mucho más en el Evangelio.
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