Estrategia y Práctica Profesional Contratos. Tercera Edición Tomo III
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SEGUNDO: El arrendamiento comenzará a regir desde esta fecha por períodos de ____ año(s), que
se renovarán por períodos iguales y sucesivos si ninguna de las partes le pusiese término mediante
aviso con a lo menos ______ días (mes, meses, etc.) de anticipación, al domicilio señalado en la
comparecencia, antes del término del plazo de vigencia del contrato o sus respectivas prórrogas.
Queda asimismo prohibido al arrendatario, sin autorización previa y escrita del arrendador: e) hacer
variaciones en parte alguna del bien arrendado, tanto interiormente como en la pintura o estuco de la
fachada; f) ceder el arriendo o subarrendar sea bajo cualquier forma o título; g) pintar letreros en las
murallas, tanto interiores como exteriores; h) colocar letreros luminosos o comerciales; i) modificar
desagües, instalaciones de gas, luz eléctrica o de agua potable.
En todo caso, estos trabajos o cualquiera nueva instalación de servicios deberán hacerse previa
autorización del arrendador y de acuerdo con las instrucciones e inspecciones de la persona asignada
por él.
NOVENO: El arrendador no responderá en manera alguna por robos que puedan incurrir en el bien
arrendado, ni por perjuicios que puedan producirse por incendio, inundación, filtraciones, explosiones,
roturas de cañerías, efectos de humedad, calor, etc., ya sea por obra de terceros o de sus
dependientes.
DUODÉCIMO: El arrendatario declara bajo juramento que las especies que guarnecerán el bien
arrendado son de su exclusivo dominio, que no están sujetos a embargos, prendas, gravámenes y
medidas judiciales de ninguna especie y que con ellas garantiza, asimismo, el total e íntegro
cumplimiento de este contrato.
DECIMOCUARTO: Para todos los efectos legales y judiciales de este contrato las partes fijan
expresamente su domicilio en la comuna de __________.
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Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 4, 7, 15, 20, 23, 52, 62, 82, 149, 156, 173, 176, 186, 197, 198, 206, 215, 222
del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
En ________, a ____ de ________ de ____.
El Arrendatario estará obligado a pagar puntualmente los consumos de luz, agua potable, extracción
de basura, gas, teléfono, internet, televisión por cable y/o satelital, y demás que puedan corresponderle.
El atraso de un mes en cualquiera de los pagos indicados, dará derecho al Arrendador para solicitar la
suspensión de los servicios respectivos. Asimismo, el Arrendatario deberá enviar oportunamente al
domicilio del Arrendador, el aviso de pago del Impuesto Territorial (o Contribuciones) que afecta al
inmueble objeto del contrato.
Sin perjuicio de lo anterior, todas las mejoras hechas en el inmueble, con o sin autorización, que no
puedan separarse de él sin detrimento de la propiedad, quedarán a beneficio del propietario, salvo pacto
escrito en contrario. Por consiguiente, aquellas mejoras que sí puedan ser retiradas serán de propiedad
del Arrendatario.
2. Si dedica la propiedad a un fin distinto del indicado en este contrato, si la ocupa con un mayor
número de personas que el pactado; o si subarrienda o cede en todo o en parte de la propiedad, sin
consentimiento escrito del Arrendador.
5. Si se atrasa en el pago de las cuentas por consumo de agua potable, electricidad, televisión por
cable y/o satelital, gas o servicios comunes, si los hay.
7. _______________________________________.
DUODÉCIMO: El Arrendador no responderá, en manera alguna, por los perjuicios que puedan
producirse al Arrendatario con ocasión de robos, incendios, inundaciones, filtraciones, roturas de
cañerías de agua o gas, efectos de la humedad o del calor, etc.
DECIMOQUINTO: En garantía del fiel y oportuno cumplimiento de todas y de cada una de las
obligaciones que contrae el Arrendatario, y, especialmente, el pago de las rentas de arrendamiento y
consumos de luz, agua, gas, teléfono y otros, éste otorga, como caución, la fianza solidaria de
don/ña ________, de profesión ____, domiciliado/a en ________ Nº _____, departamento/oficina
Nº _____, de la comuna de ________, cédula nacional de identidad Nº _______, quien firma en señal
de plena aceptación. Declara que el compromiso adquirido se hará extensivo por todo el período que
dure el presente contrato, incluyendo las posibles prórrogas y hasta la restitución de la propiedad.
DECIMOSEXTO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las Partes fijan
domicilio en la comuna de _____, ciudad de ____, y se someten a la jurisdicción de sus Tribunales de
Justicia.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
2. Si la casa se arrienda para otro destino, basta sustituir la cláusula segunda por el
destino específico que tendrá la propiedad.
5. En casos que se celebre este contrato, y que se pueda estar frente una situación o
acto de consumo, es pertinente tener en observación las normas contenidas en la
Ley Nº 19.496 sobre Protección de los Derechos de los Consumidores. En
particular, deben observarse aquellas disposiciones relacionadas con las cláusulas
abusivas en el artículo 16, y otras que digan relación con la información veraz y
oportuna que debe entregarse a los consumidores, e incluir aquellas normas que
signifiquen una modificación contractual obligatoria según lo dispuesto en esa ley.
Jurisprudencia Relacionada
Dos. En este acto, el Arrendador autoriza a la Arrendataria para que, dentro de la Propiedad, pueda
cavar, perforar, construir, operar y/o mantener los pozos y obras de captación de aguas subterráneas
que la Arrendataria decida desarrollar y construir en la referida Propiedad.
Tres. Asimismo, el Arrendador autoriza desde ya a la Arrendataria y/o a sus sucesores, para solicitar
y presentar ante la Dirección General de Aguas y cualquier otra autoridad competente en la materia,
todo tipo de declaraciones, formularios, antecedentes y requerimientos necesarios para el traslado del
ejercicio de los derechos de aprovechamiento de aguas de los cuales la Arrendataria sea titular o tenga
algún derecho de usufructo, arrendamiento u otro que lo habilite para gozar de los mismos y para
obtener la constitución a nombre de la Arrendataria de los derechos de aprovechamiento de aguas
cuyas aguas se alumbren en cualquier parte de la Propiedad, así como para obtener las autorizaciones
que se requieran para la construcción, habilitación, explotación, mantenimiento y reparación de los
pozos u otras obras hidráulicas que la Arrendataria construya conforme la autorización aquí otorgada,
otorgando en este acto mandato irrevocable para que en su nombre y representación presente los
planos, solicitudes, presentaciones, formularios, minutas y documentos que sean necesarios frente a la
Dirección General de Aguas y todos aquellos servicios públicos, autoridades judiciales u otros
organismos competentes en la materia. La autorización aquí otorgada a la Arrendataria es facultativa
para ella, y tan amplia como en derecho se requiera, para el traslado del ejercicio de los derechos de
aprovechamiento de aguas de los cuales la Arrendataria sea titular o tenga algún derecho de usufructo,
arrendamiento u otro que lo habilite para gozar de los mismos y/o la definitiva constitución de derechos
de aprovechamiento de aguas a favor de la Arrendataria, sin limitación alguna, incluyendo
expresamente, de modo ejemplar, la facultad de aceptar caudales diferentes a los solicitados. En el
ejercicio de este mandato la Arrendataria podrá asimismo firmar todos los documentos, solicitudes y
peticiones que requiera la Dirección General de Aguas o cualquiera otra autoridad administrativa o
judicial competente en la materia para la tramitación y obtención de la constitución y/o traslado del
ejercicio de estos derechos de aprovechamiento y reducir a escritura pública la resolución
correspondiente.
Cuatro. El Arrendador no podrá por sí, ni autorizar a terceros para que exploren o exploten aguas
subterráneas en la Propiedad.
Por su parte, la Arrendataria podrá poner término anticipado al presente contrato en forma unilateral,
sin necesidad de señalar causa en particular, dando un aviso previo al Arrendador con una anticipación
mínima de ___ días, sin dar lugar al pago de indemnización alguna a favor de la Arrendadora, bajo
ningún concepto, renunciando ésta desde ya a toda acción y/o derecho que le corresponda por tal
concepto.
SÉPTIMO: Mejoras: la Arrendataria podrá efectuar mejoras en la Propiedad, sin autorización previa
del Arrendador, siendo éstas de su exclusivo costo, sin que deba reembolsar suma alguna de dinero por
ellas, pasando dichas mejoras a ser de dominio del Arrendador al final del contrato de arrendamiento,
salvo (i) aquellas que pueda retirar sin detrimento de la Propiedad al término del presente contrato, o
(ii) en caso que se ejerza la Opción señalada en la cláusula Duodécima siguiente.
Sin perjuicio de lo anterior, cualquier transformación mayor de la Propiedad deberá contar con la
aprobación previa y escrita del Arrendador. Sin embargo, no se considerará como transformación mayor
de la Propiedad las obras señaladas en la cláusula Quinta de este instrumento.
NOVENO: Robos y Perjuicios: El Arrendador no responderá en manera alguna por robos que
puedan ocurrir en la Propiedad o por los perjuicios que puedan producirse por incendios, inundaciones,
efectos de humedad o calor, terremotos y otras causas de fuerza mayor o caso fortuito. Sin embargo, si
debido a casos fortuitos o de fuerza mayor la Propiedad queda inadecuada para cumplir los fines para la
cual fue arrendada, se pondrá término a este contrato de arrendamiento, sin dar lugar a indemnización
alguna a favor del Arrendador.
DÉCIMO: Visitas del Arrendador: La Arrendataria se obliga a dar las facilidades necesarias para que
la Arrendadora o quien la represente pueda visitar la Propiedad. Sin embargo, para realizar estas visitas
el Arrendador deberá dar aviso con ___ días de anticipación a la misma.
Cuatro) A fin de que la Opción tenga eficacia, la Oferente constituye prohibición de gravar y enajenar
y de celebrar cualquier contrato respecto de la Propiedad sin consentimiento expreso y escrito de la
Arrendataria. Así, no podrá constituir a favor de terceros derechos de cualquier naturaleza sobre la
Propiedad, en especial sobre aguas superficiales o subterráneas que puedan ser alumbradas en la
Propiedad. Esta prohibición se inscribirá en el registro pertinente del Conservador de Bienes Raíces
de ________, y se alzará y cancelará si la Arrendataria pusiere término al presente contrato de
arrendamiento por cualquier causa.
Cinco) En caso de hacerse efectiva la Opción sobre la Propiedad, ésta se venderá como especie o
cuerpo cierto, con todo lo edificado y plantado en ella, libre de todo gravamen, prohibición, embargo,
litigio o limitación al dominio, quedando el Oferente responsable del saneamiento de la evicción.
Seis) La entrega material de la Propiedad se efectuará con ocasión de la firma del presente contrato
de arrendamiento.
Siete) Para ejercer la Opción, la Arrendataria deberá comunicar su intención al Oferente por carta
certificada despachada al domicilio de aquella. En tal comunicación deberá indicarse con toda precisión
que la Arrendataria desea adquirir la Propiedad. Con el mérito de esta comunicación las partes
acordarán el contrato de compraventa en los mismos términos aquí convenidos, la que deberá firmarse
a más tardar antes de transcurridos ________ días corridos contados desde la recepción del aviso.
Ocho) Si ejercida la Opción en la forma aquí convenida una de las partes no cumple su obligación de
otorgar la escritura pública de compraventa, deberá pagar a la otra, a título de indemnización de
perjuicios, una multa equivalente al ________ por ciento del precio de la compraventa a que deba dar
lugar la Opción, sin perjuicio del derecho de la parte diligente de pedir el cumplimiento forzado de la
obligación o su resolución, a su elección.
DECIMOQUINTO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las partes fijan su
domicilio en la ciudad de ________ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 19, 95, 103, 105, 167 del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
TERCERO: Por la presente, la compareciente otorga la autorización que exige dicha disposición,
para que se entregue en arriendo el inmueble referido, por más de cinco años; de modo que, en la
escritura de arrendamiento del caso, en que comparecerá el marido, por la sociedad conyugal, lo hará
con el consentimiento expreso de la suscrita para la celebración de dicho contrato.
En comprobante, firma ____________________.
Notas:
Jurisprudencia Relacionada
CUARTO: La propiedad se entrega con los bienes que se detallan en anexo, el que debidamente
firmado por las partes se entiende formar parte integrante del presente contrato.
Por el presente acto, para efectos del artículo 4º y siguientes de la Ley Nº 19.628, sobre Protección a
la Vida Privada y para efectos de otros cuerpos legales y/o normas pertinentes que digan relación con
registros de datos, el Subarrendatario autoriza expresamente al subarrendador, para que, en caso de
simple retardo, mora o incumplimiento de las obligaciones contraídas en el presente contrato, sus datos
personales y los demás derivados del presente instrumento, sus modificaciones y/o instrumentos
anexos o accesorios, así como información de carácter económico, financiero, bancario, comercial,
especialmente la referida a incumplimiento de obligaciones asumidas como deudor directo puedan ser
almacenados, ingresados, procesados, tratados y comunicados a terceros sin restricciones en y a
cualquier registro a base de datos.
DÉCIMO: El subarrendador o las personas que designe tendrán la facultad de inspeccionar, dando
aviso con al menos ____ días hábiles de anticipación, la propiedad, obligándose el subarrendatario a
facilitarles el acceso para tal finalidad. Esta facultad deberá ejercerse por el subarrendador de modo de
no afectar el desarrollo de las actividades normales del subarrendatario y dentro de las ____ horas, sólo
de lunes a viernes exceptuándose los días feriados.
UNDÉCIMO: El subarrendador no responderá en manera alguna por los perjuicios que puedan
ocasionarse al subarrendatario con ocasión de incendios, inundaciones, accidentes, filtraciones,
explosiones, rotura de cañerías, efecto de la humedad o del calor, y cualquier caso fortuito o de fuerza
mayor.
Asimismo, las partes dejan constancia que será de la exclusiva responsabilidad del subarrendatario
obtener los permisos o patentes que fueren necesarios para operar en el inmueble de acuerdo al destino
del presente contrato. En la medida que para obtener permisos o patentes el subarrendatario necesite
algún permiso o documento del subarrendador, éste deberá entregárselo en el menor plazo posible.
Serán de cargo del subarrendatario los gastos que pueda ocasionar el cumplimiento de órdenes o
disposiciones que, en cualquier tiempo, pueda impartir la autoridad en razón del uso a que se destinarán
los inmuebles, sean estas exigencias relativas a condiciones sanitarias, higiénicas, ambientales,
municipales o reglamentarias.
El subarrendador no será responsable de las expropiaciones a que pueda estar afecto el inmueble,
cuyo riesgo declara asumir el subarrendatario, declarando asimismo desde ya renunciar a toda acción
civil, administrativa o de cualquier naturaleza que por este concepto pudiere entablar en contra del
subarrendador.
c) Si el subarrendatario subarrienda o cede en todo o parte el inmueble objeto del presente contrato,
o celebra cualquier acto o contrato sobre el inmueble en virtud del cual se permite el uso o tenencia de
los mismos por una persona natural o jurídica diferente del subarrendador. Sin perjuicio de lo
anterior, ____________, autoriza desde ya al subarrendatario a ceder el presente contrato en las
mismas condiciones, a cualquier persona jurídica relacionada con el subarrendatario, sus accionistas,
sus representantes legales o apoderados.
d) Introducir mejoras o alteraciones en el inmueble subarrendado sin la previa autorización escrita del
subarrendador, la que sólo podrá ser rechazada fundadamente y dentro del plazo de ____ días hábiles.
Asimismo, en cualquier caso de expiración del subarrendamiento por culpa exclusiva del
subarrendatario, éste deberá cumplir sus obligaciones legales y contractuales hasta la fecha de
restitución del inmueble.
Al término del presente contrato el subarrendatario deberá restituir a la subarrendadora el inmueble
subarrendado, libre de todo ocupante, en el mismo estado en que los recibió, habida consideración a su
desgaste por el paso del tiempo y por su uso legítimo. El subarrendatario se obliga a pagar al
subarrendador a título de indemnización de perjuicios la cantidad de ____ Unidades de Fomento por
cada día de atraso en la restitución de las propiedades, desde la fecha en que expira el presente
contrato y la fecha en que se efectúe materialmente la restitución de la propiedad, sin perjuicio de las
cantidades que se devenguen a título de renta de subarrendamiento u otras.
DECIMOTERCERO: Para todos los efectos legales, las partes fijan su domicilio en la comuna
de ___ y ciudad de ____ y se someten a la jurisdicción de sus Tribunales.
DECIMOCUARTO: A fin de garantizar el fiel y oportuno cumplimiento de todas las obligaciones que
la ley y el presente contrato imponen al subarrendatario, constituye una garantía en dinero el
equivalente a ____ UF (____ unidades de fomento), la que permanecerá en poder del subarrendador y
que ésta podrá destinar a la reparación de deterioros, pago de rentas o cuentas de insumos insolutos, y
en general, al resarcimiento de cualquier obligación incumplida por el subarrendatario en la medida que
éstos estén debidamente justificados, cuyo saldo se restituirá a éste al término del subarrendamiento.
En ningún caso, el subarrendatario podrá imputar o aplicar esta garantía al pago de rentas de
arrendamiento.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 60, 71, 73, 75, 93, 110, 129, 138 del anexo de jurisprudencia de
Arrendamiento.
Asimismo, se eleva a la calidad de esencial de este contrato, la obligación, del Arrendatario, de pagar
en tiempo oportuno, a su costa y conservar los comprobantes, las patentes siguientes:
1º De ______, Nº ____.
2º De ______, Nº ____.
Sin perjuicio de lo anterior, si el Arrendador pagare las patentes, además, se le deberá devolver la
suma que haya solucionado, con más el máximo del interés permitido por la ley, y reajustada de
acuerdo a la variación que experimente el IPC, entre el mes anterior al pago y el mes anterior a la
devolución del mismo por parte del Arrendatario.
Por su parte, el Arrendatario estará obligado a realizar todo lo necesario para la conservación de las
mismas patentes, estableciéndose, en caso de incumplimiento o negligencia de los reglamentos
municipales, una multa diaria a favor del Arrendador equivalente a ______ hasta su cumplimiento
efectivo; y una indemnización de ____ UF en caso de que, por su propia culpa, se pierda la patente.
SEXTO: El presente contrato de arrendamiento rige a contar del día ____ de ______ de ______ y su
vigencia será de ___ año/s a contar de esa misma fecha, día que además se hará la entrega material de
la propiedad, libre de toda especie y a entera conformidad del Arrendador. Sin embargo, una vez
vencido este plazo resolutorio, el presente contrato se renovará en forma automática y sucesiva por el
mismo período (o por otro que deberá determinarse) y así sucesivamente, si a la fecha de su expiración
ninguna de las partes hubiere notificado a la otra el desahucio o restitución. Esta comunicación deberá
enviarse mediante carta certificada al domicilio señalado por las partes en la comparecencia del
presente contrato, con una anticipación no inferior a ____ meses respecto de la fecha de término
originalmente estipulada o de cada una de sus prórrogas.
Además, el Arrendador tendrá derecho a percibir un ___% del producto neto de las ventas
mensuales que genere el establecimiento. Dicha cantidad se pagará en la misma forma, tiempo y lugar
al Arrendador.
OCTAVO: El Arrendatario estará obligado a pagar puntualmente los gastos comunes, y los
consumos de luz, agua potable, extracción de basura, gas, teléfono y demás que puedan
corresponderle. El atraso de un mes en cualquiera de los pagos indicados, dará derecho, al Arrendador,
para solicitar la suspensión de los servicios respectivos. Asimismo, el Arrendatario deberá enviar
oportunamente al domicilio del Arrendador, el aviso de pago del Impuesto Territorial (o Contribuciones)
que afecta al inmueble objeto del contrato.
Asimismo, queda igualmente prohibido, al Arrendatario, ejecutar obra o trabajo de ninguna especie
en el local o sus instalaciones, sin autorización escrita del Arrendador. En todo caso, las obras que
ejecute quedarán a beneficio del establecimiento, sin cargo alguno para el Arrendador, salvo acuerdo en
contrario.
DUODÉCIMO: El Arrendatario contratará en beneficio del Arrendador una póliza de seguro contra
incendio hasta por la suma de $ ________ (_____________ pesos), para garantizar el valor de los
bienes arrendados. Esta póliza deberá reajustarse de acuerdo con el índice del alza del costo de la vida
y será cargada a la renta de arrendamiento de los meses de ____ y ____ de cada año.
DECIMOCUARTO: El Arrendatario responderá de cualquier daño que su hecho o culpa cause a las
propiedades circundantes, así como de los causados por cualquiera de los ocupantes.
DECIMOQUINTO: El Arrendador no responderá, en manera alguna, por los perjuicios que puedan
producirse al Arrendatario con ocasión de robos, incendios, inundaciones, filtraciones, roturas de
cañerías de agua o gas, efectos de la humedad o del calor, etc.
VIGÉSIMO PRIMERO: Serán motivos plausibles para que el Arrendador desahucie el contrato de
arrendamiento, los generales previstos en la ley, y especialmente los siguientes:
5. Si se atrasa en el pago de las cuentas por consumo de agua potable, electricidad, gas o servicios
comunes, si los hay.
VIGÉSIMO SEGUNDO: En garantía del fiel y oportuno cumplimiento de todas y de cada una de las
obligaciones que contrae el Arrendatario, y, especialmente, el pago de las rentas de arrendamiento y
consumos de luz, agua, gas, teléfono y otros, éste otorga, como caución, la fianza solidaria de
don/ña _______________, de profesión ______, domiciliado/a en ________ Nº _____,
departamento/oficina Nº ____, cédula nacional de identidad Nº ______, quien firma en señal de plena
aceptación. El fiador declara que el compromiso adquirido se hará extensivo por todo el período que
dure el presente contrato, incluyendo las posibles prórrogas y hasta la restitución del inmueble.
VIGÉSIMO TERCERO: Cualquier modificación, ya sea total o parcial de una cualquiera de las
disposiciones contenidas en el presente contrato, y de los derechos y obligaciones que de ellas emanan
para las partes, deberá ser efectuada por convenio escrito, el cual entrará en vigor, sólo una vez que
éste se encuentre debidamente firmado por ambas partes.
VIGÉSIMO CUARTO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las
obligaciones del presente contrato facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato
al mismo, pudiendo solicitar la restitución del inmueble sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin
perjuicio del derecho del Arrendador de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de
demandar los perjuicios respectivos y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula
penal, en el equivalente en pesos chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el
cumplimiento de la respectiva obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la
responsabilidad de indemnizar al Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar.
VIGÉSIMO QUINTO: El presente contrato se rige por las leyes de la República de Chile.
VIGÉSIMO SEXTO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las Partes fijan
domicilio en la comuna de ______, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
VIGÉSIMO SÉPTIMO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor,
valor y fecha, quedando uno en poder de cada parte.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
4. El contrato también puede ser de plazo indefinido, mensual o por un número de años.
En cada caso se aplicarán las siguientes reglas:
En ________, a ____ de ______ de ______.
PRIMERO: El Arrendador es dueño del local comercial Nº ___, del piso ______, del Centro
Comercial "__________", ubicado en calle ______ número ______ La adquirió por tradición que le
hizo ________, sirviendo como título la compraventa (donación, permuta, etc.) contenida en la escritura
pública de fecha ______ de ______ de ______ otorgada en la Notaría de ______ de don/ña ______ El
título de dominio de la propiedad se encuentra inscrito a fojas ______ número ______ del Registro de
Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de ______ correspondiente al año ______ El Rol de
avalúo fiscal de la propiedad otorgado por el Servicio de Impuestos Internos corresponde
al ______ — ______, de la comuna de ______.
El Arrendatario estará obligado a pagar, puntualmente, los gastos comunes (si proceden), y los
consumos de luz, agua potable, extracción de basura, gas, teléfono y demás que puedan
corresponderle. El atraso de un mes en cualquiera de los pagos indicados, dará derecho al Arrendador
para solicitar la suspensión de los servicios respectivos. Asimismo, el Arrendatario deberá enviar
oportunamente al domicilio del Arrendador, el aviso de pago del Impuesto Territorial (o Contribuciones)
que afecta al inmueble objeto del contrato.
Quedan incluidas en el arrendamiento las especies y artefactos de que da cuenta el inventario anexo
que las partes firman en este acto, y que se tiene como parte integrante del presente contrato. El estado
de dichas especies está indicado en el mismo inventario.
Asimismo, se prohíbe, al Arrendatario, ejecutar obra alguna en la propiedad, sin previa autorización
escrita del Arrendador. Sin perjuicio de lo anterior, todas las mejoras hechas en el inmueble, con o sin
autorización, que no puedan separarse de él, sin detrimento de la propiedad, quedarán a beneficio del
propietario, salvo pacto escrito en contrario. (Optativo: El Arrendador no tendrá la obligación de hacer
mejoras en el inmueble).
DÉCIMO: Se deja constancia que el Arrendador exige (no exige), de parte del Arrendatario, pago por
concepto de derecho de llaves, por el arriendo del local. Con todo, si el Arrendatario cede sus derechos
a un tercero y se cumplen los requisitos establecidos en la cláusula anterior; esto es, continuación del
rubro comercial y aceptación por parte del Arrendador o del Árbitro, en subsidio, podrá convenir, con el
futuro Arrendatario del mismo local, el pago de una suma de dinero por concepto de derecho de llaves,
libremente pactada entre ellos.
2. Si dedica la propiedad a un fin distinto del indicado en este contrato; o si subarrienda o cede todo o
parte de la propiedad sin consentimiento escrito del Arrendador.
5. Si se atrasa en el pago de las cuentas de gastos comunes y las por consumo de agua potable,
electricidad, gas o servicios comunes, si los hay.
7. ______________________________.
DECIMOTERCERO: El Arrendador no responderá, en manera alguna, por los perjuicios que puedan
producirse al Arrendatario con ocasión de robos, incendios, inundaciones, filtraciones, roturas de
cañerías de agua o gas, uso de ascensores, si los hay, efectos de la humedad o del calor, etc.
DECIMOSEXTO: En garantía del fiel y oportuno cumplimiento de todas y de cada una de las
obligaciones que contrae el Arrendatario, y, especialmente, el pago de las rentas de arrendamiento y
consumos de luz, agua, gas, teléfono y otros, éste otorga, como caución, la fianza solidaria de
don/ña _____________, de profesión ______, domiciliado/a en _________________ Nº ____,
departamento/oficina Nº ____, de la comuna de ___, ciudad de _________, cédula nacional de
identidad Nº ______, quien firma en señal de plena aceptación. El fiador declara que el compromiso
adquirido se hará extensivo por todo el período que dure el presente contrato, incluyendo las posibles
prórrogas y hasta la restitución del inmueble.
DECIMOCTAVO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las obligaciones
del presente contrato facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato al mismo,
pudiendo solicitar la restitución del inmueble sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin perjuicio del
derecho del Arrendador de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de demandar
los perjuicios respectivos y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula penal, en el
equivalente en pesos chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el
cumplimiento de la respectiva obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la
responsabilidad de indemnizar al Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar, sin
perjuicio de lo estipulado en la cláusula decimoquinta.
VIGÉSIMO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las Partes fijan domicilio
en la comuna de ______, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus Tribunales de
Justicia.
VIGÉSIMO PRIMERO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor,
valor y fecha, quedando uno en poder de cada parte.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
2. El contrato también puede ser de plazo indefinido, mensual o por un número de años.
En cada caso se aplicarán las siguientes reglas:
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 4, 21, 25, 27, 36, 53, 95, 151, 181, 210, 212 del anexo de jurisprudencia de
Arrendamiento.
En ________, a ____ de ______ de ______.
NOVENO: Serán motivos plausibles para que el Arrendador desahucie el contrato de arrendamiento,
los generales previstos en la ley; y especialmente los siguientes:
6. ______________________________.
DÉCIMO: El Arrendador no responderá, en manera alguna, por los perjuicios que puedan producirse,
al Arrendatario, con ocasión de robos, incendios, inundaciones, filtraciones, roturas de cañerías de agua
o gas, efectos de la humedad o del calor, etc.
DUODÉCIMO: Para los efectos de este contrato, las partes fijan su domicilio en la ciudad
de ____________, prorrogando la competencia para ante sus tribunales.
DECIMOQUINTO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las partes fijan
domicilio en la comuna de ________, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
DECIMOSEXTO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor, valor
y fecha, quedando uno en poder de cada parte.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
El contrato también puede ser de plazo indefinido, mensual o por un número años. En
cada caso se aplicarán las siguientes reglas:
Jurisprudencia Relacionada
En ________, a ____ de ______ de ______.
Se prohíbe, al Arrendatario, ejecutar obra alguna, en la propiedad, sin previa autorización escrita del
Arrendador. Sin perjuicio de lo anterior, todas las mejoras hechas en el inmueble, con o sin autorización,
que no puedan separarse de él sin detrimento de la propiedad, quedarán a beneficio del propietario,
salvo pacto escrito en contrario. Por consiguiente, aquellas mejoras que sí puedan ser retiradas serán
de propiedad del Arrendatario.
DÉCIMO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las obligaciones del
presente contrato facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato al mismo,
pudiendo solicitar la restitución del inmueble sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin perjuicio del
derecho del Arrendador de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de demandar
los perjuicios respectivos y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula penal, en el
equivalente en pesos chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el
cumplimiento de la respectiva obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la
responsabilidad de indemnizar al Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar.
DUODÉCIMO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las Partes fijan
domicilio en la comuna de __________, ciudad de ____________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
En casos que se celebre este contrato, y que se pueda estar frente una situación o acto
de consumo, es pertinente tener en observación las normas contenidas en la Ley
Nº 19.496 sobre Protección de los Derechos de los Consumidores. En particular, deben
observarse aquellas disposiciones relacionadas con las cláusulas abusivas en el
artículo 16, y otras que digan relación con la información veraz y oportuna que debe
entregarse a los consumidores, e incluir aquellas normas que signifiquen una
modificación contractual obligatoria según lo dispuesto en esa ley.
Jurisprudencia Relacionada
COMPARECEN:
Uno) __________, sociedad comercial del giro ________, Rol único tributario Nº __________, la que
concurre representada según se acreditará,
por __________, ________ (nacionalidad), __________ (estado civil), ________.(profesión o actividad),
cédula nacional de identidad número __________, ambos domiciliados en ________, comuna
de ________, por una parte en adelante el "arrendatario"; y por la otra parte,
SEXTO: Todos los gastos destinados a la explotación agrícola del predio y derechos de aguas objeto
del presente arrendamiento serán de cargo de ______, salvo el pago de contribuciones, derechos de
asociación de canalistas y otros asociados al aprovechamiento de los derechos de aguas que serán de
cargo del arrendador.
NOVENO: El arrendador declara que está afecto al impuesto de primera categoría sobre la base de
renta efectiva determinada por contabilidad completa.
DÉCIMO: El arrendador podrá visitar el predio arrendado previo aviso a ______ para efectos de
coordinación.
DECIMOQUINTO: Resolución de Conflictos. Cualquier dificultad que pueda producirse entre las
partes en relación con cualquier materia derivada de este contrato será conocida y resuelta por los
Tribunales Ordinarios de Justicia.
DECIMOSEXTO: Las partes fijan para todos los efectos del presente contrato su domicilio en la
ciudad de ________.
Jurisprudencia Relacionada
PRIMERO: El Arrendador es dueño de la parcela llamada "______", que encierra una cabida
de ____ hectáreas, aproximadamente, ubicada en la localidad de ______, de la comuna de ______,
Provincia de_____, de la ____ Región, que es la número ___, del proyecto de parcelación "________", y
cuyo plano se encuentra protocolizado en la Notaría de don/ña _________, de la ciudad de ______, que
fue inscrito a fojas ____ número ____ del Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces
de ____ del año ____, y cuyos deslindes son: NORTE, con ______; SUR, con ______; ORIENTE,
con ______; y al PONIENTE, con ______ en adelante, la "Parcela". La adquirió por tradición que le
hizo ______, sirviendo como título la compraventa (donación, permuta, etc.) contenida en la escritura
pública de fecha ______ de ____ de______ otorgada en la Notaría de ______ de don/ña ______ El
título de dominio de la Parcela se encuentra inscrito a fojas ____ número ______ del Registro de
Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de ___ correspondiente al año ______.
Los derechos de aguas de la Parcela, provenientes del Canal "______", rolan inscritos a
fojas ________ número ________ del Registro de Propiedad de Aguas del Conservador de Bienes
Raíces de ________, en adelante las "Aguas" (don/ña __________ es dueño/a de un ________ por
ciento de los derechos de aprovechamiento de aguas subterráneas, de ejercicio permanente y continuo,
en un pozo de ____ litros por segundo, ubicado en la Parcela que es objeto de este contrato).
El Arrendatario estará obligado a pagar, puntualmente, los consumos de luz, agua potable, extracción
de basura, gas, teléfono y demás que puedan corresponderle. El atraso de un mes, en cualquiera de los
pagos indicados, dará derecho, al Arrendador, para solicitar la suspensión de los servicios respectivos.
Asimismo, el Arrendatario deberá enviar oportunamente al domicilio del Arrendador, el aviso de pago del
Impuesto Territorial (o Contribuciones) que afecta al inmueble objeto del contrato.
La renta se pagará por mensualidades anticipadas, dentro de los primeros ___ días de cada mes, en
el domicilio del Arrendador (o bien: mediante el depósito en la cuenta corriente del Arrendador
Nº _______ del Banco _______, Sucursal ______). En caso de simple atraso en el pago de las cuotas
señaladas, el Arrendatario pagará intereses corrientes sobre la renta de cada período de pago.
CUARTO: Para los efectos de lo dispuesto en los artículos 5º del Decreto Ley Nº 993 y 75 bis del
Código Tributario, el Arrendador declara que es contribuyente del impuesto de primera categoría
determinado sobre la base de renta efectiva determinada por contabilidad completa (o bien: que está
sujeto al régimen de renta presunta), por lo que el presente contrato podrá hacerse valer ante las
autoridades judiciales y administrativas que correspondan (y si es por escritura pública se agrega: "y
tendrá, asimismo, mérito ejecutivo").
QUINTO: El Arrendatario recibe los terrenos arrendados en este acto, en el estado y con las mejoras
que se detallan en el inventario anexo individualizado en la cláusula segunda anterior.
El Arrendatario se obliga a velar por la conservación de los suelos y de las aguas y se compromete a
evitar los cultivos y explotaciones que puedan provocar erosión o dañar la fertilidad natural de la tierra.
Se compromete, también, a cumplir las disposiciones legales y reglamentarias sobre protección y
conservación de los recursos naturales, tanto respecto a los existentes dentro de la Parcela como de
todos aquellos que sirvan para su explotación. Queda, expresamente, prohibido, al Arrendatario,
explotar leñas, madera, cortar árboles y sembrar las siguientes semillas: ________. Además, le queda
prohibido plantar arbustos y árboles de las siguientes especies: _______. Asimismo, el Arrendatario se
obliga a mantener —permanentemente— en buen estado las construcciones, cercos, caminos, acequias
regadoras, canales de acceso y demás mejoras, haciendo las reparaciones que sean necesarias para
restituir la parcela al término del contrato en las condiciones en que las recibió, habida consideración de
su uso legítimo.
El Arrendador no responderá, en manera alguna, por los perjuicios que puedan producirse, al
Arrendatario, con ocasión de robos, incendios, inundaciones, filtraciones, roturas de cañerías de agua o
gas, efectos de la humedad o del calor, etc., y asume el riesgo del caso fortuito y de la fuerza mayor.
SÉPTIMO: El Arrendatario no podrá subarrendar el todo o parte de los terrenos objeto de este
contrato, o ceder su derecho o la tenencia total o parcial de los terrenos. Asimismo, el Arrendatario no
podrá introducir mejoras en la parcela sin autorización, previa y por escrito, del Arrendador, en la que se
expresará de cargo de quién serán. Aquellas que introduzca sin su autorización, quedarán a beneficio
de éste, al término del contrato; sin costo alguno para él.
OCTAVO: El Arrendatario no podrá aceptar, en los terrenos, otros habitantes que los que se
individualizan en el documento anexo y se obliga a restituir el predio sin más ocupantes que aquéllos.
NOVENO: Los derechos y cuotas que deban pagarse para las Aguas y el regadío de los terrenos
arrendados y las contribuciones, serán de cargo del Arrendatario.
DÉCIMO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las obligaciones del
presente contrato facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato al mismo,
pudiendo solicitar la restitución de la Parcela y las Aguas sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin
perjuicio del derecho del Arrendador de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de
demandar los perjuicios respectivos y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula
penal, en el equivalente en pesos chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el
cumplimiento de la respectiva obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la
responsabilidad de indemnizar al Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar.
Asimismo, cuando se invoque el incumplimiento de la cláusula quinta, respecto a la conservación y
preservación de las especies y del medio, deberá acompañar a la demanda un informe técnico
elaborado por un profesional debidamente inscrito en el Colegio respectivo.
UNDÉCIMO: En garantía del fiel y oportuno cumplimiento de todas y de cada una de las obligaciones
que contrae el Arrendatario, y, especialmente, el pago de las rentas de arrendamiento y consumos de
luz, agua, gas, (teléfono) y otros, éste otorga, como caución, la fianza solidaria de don/ña ________, de
profesión ______, domiciliado/a en ________ número ______, departamento/oficina número ______,
cédula nacional de identidad número ______, quien firma en señal de plena aceptación.
Don/ña __________ declara que el compromiso adquirido se hará extensivo por todo el período que
dure el presente contrato, incluyendo las posibles prórrogas y hasta la restitución del inmueble.
DECIMOCUARTO: Para todos los efectos legales derivados del presente contrato, las Partes fijan
domicilio en la comuna de ______, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
DECIMOQUINTO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor, valor
y fecha, quedando uno en poder de cada parte.
Notas:
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 124, 160, 169, 185, 193, 219 del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
PRIMERO: Don/ña ________ es dueño/a del potrero llamado "______", del fundo denominado
"____________", ubicado en la localidad de ______, de la comuna de ______, Provincia de_____, de
la ____ Región, el que encierra una cabida de ____ hectáreas, aproximadamente, y deslinda: NORTE,
en ______ metros con ______; SUR, en ______ metros con ______; ORIENTE, en ______ metros
con ______; y al PONIENTE, en ______ metros con ________ en adelante el "Potrero". Lo adquirió por
tradición que le hizo ________, sirviendo como título la compraventa (donación, permuta, etc.) contenida
en la escritura pública de fecha ______ de ____ de______ otorgada en la Notaría de ______ de
don/ña ______. El título de dominio del Potrero se encuentra inscrito a fojas ______ número ______ del
Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de ______ correspondiente al año ______.
TERCERO: Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, que el plazo del arrendamiento será,
exclusivamente, por la cosecha próxima de los siguientes productos u otros similares:
a) ______.
b) ______.
c) ______.
En consecuencia, el Arrendatario tendrá derecho de labrar, arar, rastrear, abonar, segar, usar de
máquinas o de personas, cosechar, acopiar y limpiar los productos y transportarlos, sólo en el período
que va desde el día ______ de __________ del año ______, y hasta el día ______ de __________ del
año ______, en forma improrrogable, cualesquiera que sean las circunstancias que se produzcan,
incluso la fuerza mayor.
Por lo anterior, el Arrendador podrá tomar, de hecho, con las personas que desee, por sí o por
terceros, el potrero, o darlo en arrendamiento o comodato, o en la forma que desee; y proceder, por sí o
por terceros, a trabajar, o hacer trabajar la tierra.
Si el Arrendatario no pagara cualquiera de las cuotas, no podrá retirar el producto desde el potrero.
QUINTO: El Arrendatario estará obligado, además, a pagar puntualmente, los consumos de luz y
agua potable. El atraso de un mes en cualquiera de los pagos indicados, dará derecho, al Arrendador,
para solicitar la suspensión de los servicios respectivos.
SEXTO: En caso de simple atraso en el pago de las cuotas señaladas, el Arrendatario pagará,
además, el máximo del interés que la ley permite estipular.
Además, el Arrendatario se obliga, en caso de mora o por el simple retardo en la entrega del Potrero,
a pagar el equivalente a ________ por ciento diario de la renta, al valor del producto del día del pago.
SÉPTIMO: Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el que queda prohibido al Arrendatario
subarrendar, ceder o transferir a cualquier título el presente contrato, o destinar el Potrero a un objeto
diferente del convenido en el presente Contrato; hacer variaciones en éste sin previa consulta y
aprobación del Arrendador. Queda, igualmente, prohibido dar el predio en mediería o en aparcería, en
asociación, en sociedad o en cualquiera otra forma.
OCTAVO: Para los efectos de lo dispuesto en el artículo 5º del Decreto Ley Nº 993 y 75 bis del
Código Tributario, el Arrendador declara que es contribuyente del impuesto de primera categoría
determinado sobre la base de renta efectiva determinada por contabilidad completa (o bien: que está
sujeto al régimen de renta presunta), por lo que el presente contrato podrá hacerse valer ante las
autoridades judiciales y administrativas que correspondan (y si es por escritura pública: "y tendrá,
asimismo, mérito ejecutivo").
El Arrendatario podrá hacer las siguientes mejoras, que no le serán reembolsadas quedando de
beneficio del predio: ______________________________ (o queda prohibido al Arrendatario efectuar
todo otro tipo de mejoras o modificaciones, sin permiso escrito del Arrendador).
DÉCIMO: Son condiciones y obligaciones esenciales del presente contrato, cuya infracción será
causal de terminación anticipada del mismo, sin perjuicio de indemnizar los demás daños del caso, las
siguientes:
a) Que el Arrendatario deberá conservar las plantas, los árboles y bosque del Potrero;
c) Que para leña, el Arrendatario sólo podrá usar las ramas secas de los árboles;
DECIMOSÉPTIMO: Dentro del fundo, el Arrendatario no podrá explotar los montes y deberá cuidar
de preservar, debidamente, el medio ambiente y la ecología.
DECIMOCTAVO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las obligaciones
del presente contrato facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato al mismo,
pudiendo solicitar la restitución del Potrero sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin perjuicio del
derecho del Arrendador de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de demandar
los perjuicios respectivos y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula penal, en el
equivalente en pesos chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el
cumplimiento de la respectiva obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la
responsabilidad de indemnizar al Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar.
VIGÉSIMO PRIMERO: Todos los gastos notariales de este contrato se pagarán por mitad entre las
partes (o sólo por el Arrendatario).
VIGÉSIMO SEGUNDO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes
fijan domicilio en la comuna de __________, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
VIGÉSIMO TERCERO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor,
valor y fecha, quedando uno en poder de cada parte.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
3. Este contrato debe celebrarse por escritura pública o privada. En este último caso, se
recomienda que sea ante dos testigos mayores de dieciocho años.
Jurisprudencia Relacionada
b) Sobre ellas ha tenido y tiene dominio exclusivo y excluyente y derechos preferentes o antelados
para haber constituido propiedad minera definitiva; no se superponen a ningún derecho que pudiera
habilitar a un tercero para explorar o explotar cualquier sustancia susceptible de concesión minera en el
mismo terreno;
c) Fueron adquiridas con justo título y de buena fe, conforme a la ley, reglamentos y demás normas
aplicables. Todas sus transferencias de dominio se han efectuado legalmente y nadie puede,
fundadamente, reclamar derechos o denunciar vicios;
f) Las tasas de manifestación y de pedimento, en su caso, y las patentes mineras han sido pagadas
oportunamente en las cantidades que corresponden;
g) No existe juicio pendiente en que la Oferente sea parte o intervenga como tercero y no conoce
acciones judiciales pendientes que pudieren afectar a la propietaria o que estuvieren relacionadas o se
relacionen, de cualquier manera, con la Oferente o las Concesiones Mineras, o que afecten o pudieren
afectar el dominio de la Sociedad Propietaria, y
h) No existen ni conoce otras concesiones de su propiedad y/o de personas relacionadas —
entendiéndose como tales, para todos los efectos de este contrato, las referidas en el artículo 100 de la
Ley número dieciocho mil cuarenta y cinco—, que se encuentren vigentes en la misma área superficial
de las Concesiones Mineras. Las circunstancias y hechos a que se refieren las declaraciones que
acaban de efectuarse, se han considerado determinantes para la celebración de este contrato, en
adelante, también, "Contrato", por lo que se les considerará esenciales. Asimismo, la efectividad de
estas declaraciones será determinante en lo que respecta a la Beneficiaria para la celebración del
contrato de compraventa propuesto.
a) ___.
b) ___.
c) ___.
TERCERO: En el ejercicio del derecho de explotación que se concede por este arrendamiento, al
Arrendatario, éste se entenderá facultado para investigar, reconocer y explotar dichas minas; extraer,
refinar, concentrar, retirar y hacer suyos los minerales que, en ellas, se encuentren; y, en general,
celebrar todos los actos y contratos que sean necesarios, útiles o tendientes a dichos fines.
Se entenderá que la explotación hecha conforme a los términos del presente contrato, constituye uso
y goce legítimo de las Concesiones Mineras; y el Arrendatario no será responsable de la disminución de
sustancias minerales que, a consecuencia de tal explotación, sobrevenga. Todo ello, sin perjuicio de la
observancia de las normas sobre policía y seguridad mineras.
La renta se pagará por mensualidades anticipadas, dentro de los primeros cinco días de cada mes,
en el domicilio del Arrendador (o bien: mediante el depósito en la cuenta corriente del Arrendador,
número __________ del Banco ________). En caso de no pago oportuno de la renta de arrendamiento
constituye al Arrendatario en mora, debiendo pagar al Arrendatario los montos adeudados debidamente
reajustados en la misma proporción en que hubiere variado en Índice de Precios al Consumidor,
determinado por el Instituto Nacional de Estadísticas o por el organismo que haga sus veces, en el mes
anterior a aquel en que el pago se haga efectivo, calculando este reajuste especial por numerales
diarios, aplicándose además del interés máximo legal, por los días efectivamente morosos. Además, si
hubiere gastos de cobranza, sean judiciales o no, el Arrendatario pagará dichos gastos sobre la renta
morosa reajustada.
SEXTO: El incumplimiento por parte del Arrendatario de una cualquiera de las obligaciones del
presente contrato, lo como lo es el no pago oportuno de la renta convenida durante tres períodos,
facultará expresamente al Arrendador para poner término inmediato al mismo, pudiendo solicitar la
restitución del inmueble sin sujeción a plazo alguno. Lo anterior, sin perjuicio del derecho del Arrendador
de solicitar el cumplimiento forzado de la respectiva obligación y de demandar los perjuicios respectivos
y que las partes evalúan de común acuerdo, a modo de cláusula penal, en el equivalente en pesos
chilenos del día de pago de ________ UF por cada día de atraso en el cumplimiento de la respectiva
obligación. Dicha cláusula penal no exime al Arrendatario de la responsabilidad de indemnizar al
Arrendador por los perjuicios mayores que pudiese acreditar.
SÉPTIMO: El Arrendador declara que él es el único y exclusivo dueño de las Concesiones Mineras; y
que éstas no se hallan afectas a otros gravámenes, prohibiciones o limitaciones que las que se
contemplen en el presente convenio.
NOVENO: El Arrendador se obliga a responder del pago de las patentes y demás gravámenes que
afecten las Concesiones Mineras, materia de este contrato. No obstante, el Arrendatario podrá pagar
dichas patentes y gravámenes por cuenta del Arrendador, y descontar los pagos que hiciera, por este
concepto, de cualesquiera cuotas del pago de las rentas.
DÉCIMO: El presente contrato regirá por el término de ____ años, a contar de la fecha de la presente
escritura, mismo que vence el día ___ de ___ dos mil _____ Sin embargo, una vez vencido este plazo
resolutorio, el presente contrato se renovará en forma automática y sucesiva por el mismo período y así
sucesivamente, si a la fecha de su expiración ninguna de las partes hubiere notificado a la otra el
desahucio o restitución. Esta comunicación deberá enviarse mediante carta certificada al domicilio
señalado por las partes en la comparecencia del presente contrato, con una anticipación no inferior
a ____ meses respecto de la fecha de término originalmente estipulada o de cada una de sus prórrogas.
UNDÉCIMO: Las mejoras que el Arrendatario introduzca en las concesiones y que no retire del
terreno superficial que ellas ocupan, dentro del término de seis meses, contados desde la fecha de
terminación del contrato o entrega de la mina, quedarán a beneficio del Arrendador, sin costo alguno
para él.
DUODÉCIMO: Se deja especial constancia que el Arrendador ya ha hecho entrega material de las
Concesiones Mineras objeto de este contrato al Arrendatario quien declara encontrarse en posesión de
ellas.
En comprobante, firman ____________________.
PRIMERO: Descripción de los bienes arrendados. El Arrendador es dueño de los bienes muebles,
cuya descripción se consigna en anexo aparte, el que debidamente firmado por las partes, se entiende
formar parte integrante del presente contrato.
TERCERO: Destino, ubicación e identificación de los bienes arrendados. Los bienes que se dan en
arrendamiento serán destinados exclusivamente a __________ (por ejemplo: con el exclusivo objeto de
destinarlos a la explotación y desarrollo de la actividad comercial que desarrolla el Arrendatario). El
Arrendatario se obliga a mantener los bienes arrendados en calle __________ Nº ______, de la ciudad
de __________; o bien en calle __________ Nº ______, de la ciudad de ________.
El Arrendador, en su calidad de propietario de los bienes, estará facultado para adherir a los bienes,
placas y otras marcas que indiquen que ellos son de su propiedad sin que el Arrendatario pueda
retirarlas bajo ninguna circunstancia.
CUARTO: Vigencia del contrato. El presente contrato tendrá un plazo fijo de vigencia de ____ meses
contados desde el ___ de ________ de 2 ______, venciendo el presente arrendamiento el
día ___ de ___ de 2 mil inclusive.
1. Las partes dejan constancia que la propiedad de los bienes arrendados corresponden al
Arrendador y el uso, en las condiciones establecidas en este contrato, al Arrendatario. Por lo tanto, éste
se compromete a no ejecutar acto alguno que pueda alterar la titularidad del dominio o que tienda a su
enajenación, transferencia o gravamen o que tenga por resultado uno cualquiera de estos actos.
En el supuesto que un tercero, en ejecución llevada en contra del Arrendatario, pretenda practicar
embargo o solicite medidas cautelares sobre las especies, el Arrendatario se obliga a dar noticia de
estas acciones al Arrendador y ejercitará, a su propio cargo, cuantas reclamaciones y acciones fueren
procedentes para acreditar la propiedad del Arrendador sobre los bienes.
1. Las partes convienen en que se entregarán los bienes muebles individualizados en la cláusula
primera directamente, al Arrendatario, en la calle _____________ Nº ______, o en aquel lugar que éste
designe, en la medida que el traslado para este último lugar no signifique un mayor costo para el
Arrendador. En caso que el Arrendador deba incurrir en un gasto extra por el hecho de llevar y entregar
al lugar señalado por el Arrendatario, este último deberá costear y asumir dichos gastos.
3. Dentro de los cinco días siguientes de efectuada la entrega de los bienes, el Arrendatario deberá
dirigir una comunicación, al Arrendador, indicando la fecha en que se efectuó dicha entrega.
Lo anterior regirá también para el desmontaje y traslado de los bienes arrendados, sea durante la
vigencia de este contrato; o a su término.
1. El Arrendatario podrá utilizar los bienes de acuerdo a las aptitudes de los mismos, cumpliendo
estrictamente las disposiciones de las autoridades pertinentes y las reglas generales relativas al uso,
conservación, transporte o destino de ellos impartidas por el fabricante y/o proveedor.
3. Las mejoras de cualquiera naturaleza que el Arrendatario introduzca a los bienes arrendados
pertenecerán al Arrendador desde el momento de su incorporación y sin derecho a reembolso de su
valor al Arrendatario y no podrán ser retirados ni separados al término del arrendamiento, salvo en
cuanto hubieran sido expresamente autorizadas por escrito por el Arrendador y su retiro no causare
detrimento de los bienes arrendados.
Toda mejora o modificación de los bienes arrendados, deberá hacerse con sujeción a las normas y
procedimientos dispuestos por el fabricante y/o proveedor de los bienes, además de la autorización que
más adelante se indica.
4. El Arrendador no tendrá ninguna responsabilidad por los daños y perjuicios, directos o indirectos,
previstos o imprevistos, que, por defectos del uso y goce de los bienes arrendados, de su
funcionamiento o instalación, pudieren causarse en la persona del Arrendatario o de terceros,
responsabilidad que corresponderá íntegra y totalmente al Arrendatario.
NOVENO: Consentimiento previo del Arrendador. Queda expresamente prohibido al Arrendatario, sin
el consentimiento previo y por escrito del Arrendador, ejecutar uno cualquiera de los siguientes actos en
relación con los bienes arrendados:
El Arrendador no será responsable por los daños y perjuicios que pueda experimentar cualquier
tercero, resultante de la tenencia, uso, goce, reparaciones o modificaciones de los bienes arrendados.
El Arrendatario libera, desde luego, al Arrendador, de toda responsabilidad frente a terceros derivada
del uso y goce de los bienes arrendados; se obliga a soportar todas las consecuencias pecuniarias y
otras provenientes de los daños causados a terceros, y a entregar inmediatamente al Arrendador, al
solo requerimiento de éste, acompañando los documentos justificativos, toda cantidad que éste pudiera
verse obligado a pagar a título de indemnización de perjuicios causados por los bienes arrendados.
UNDÉCIMO: Seguro. Durante el tiempo de vigencia de este contrato, los bienes arrendados deberán
ser asegurados por el Arrendatario en beneficio del Arrendador, tanto por pérdida como deterioro, así
como accidentes, incendio, robo, hurto, terremoto y otras catástrofes naturales, y daños a terceros.
El seguro cubrirá, asimismo, la responsabilidad civil que pueda afectar al Arrendatario por daños a
terceros, hasta por un monto de ______ UF.
Los seguros serán contratados por el Arrendatario teniendo como beneficiario al Arrendador a contar
desde la fecha de entrega de los bienes arrendados, debiendo aquélla pagar las primas y otros gastos
incurridos en la conservación de los bienes arrendados. El Arrendatario se compromete a enviar una
fotocopia de la póliza de seguro, al Arrendador, dentro del plazo de ______ días a contar de la referida
fecha de entrega.
DECIMOTERCERO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan
domicilio en la comuna de ______, ciudad de ________, y se someten a la jurisdicción de sus
Tribunales de Justicia.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
a) ___.
b) ___.
c) ___.
CUARTO: Se prohíbe, al Arrendatario, realizar mejoras al bien dado en arrendamiento, salvo que las
haya autorizado previamente y por escrito. Si, de hecho, las realizare, el Arrendador tendrá derecho de
exigir que se vuelvan las cosas al estado anterior, a costa del Arrendatario, pagando, entretanto, las
rentas de arrendamiento (o que queden las mejoras a beneficio de la propiedad y del dueño, sin pago
alguno; o aquellas mejores que sí puedan ser retiradas serán de propiedad del Arrendatario).
QUINTO: Todas las dificultades relacionadas con la interpretación, aplicación, cumplimiento, validez,
vigencia, resolución, alcance, eficacia o vacíos del presente Contrato de opción o de la compraventa
propuesta, que se susciten entre el Arrendador, por una parte, y el Arrendatario, por la otra, serán
resueltas por un árbitro mixto, es decir, arbitrador en cuanto al procedimiento y de derecho en cuanto al
fallo, quien resolverá la materia en única instancia y en contra de cuyas resoluciones no procederá
recurso alguno, salvo el de queja y el de casación en la forma por ultra petita. Las partes designan,
desde ya, para tal cargo a don ______________, y a falta de éste y sucesivamente, a los
señores __________, ________, ______ y ________ En caso de que ninguno de los anteriores
aceptare el cargo por cualquier razón o no pudiere aceptarlo, el árbitro será designado de común
acuerdo entre las partes y, en caso de desacuerdo, éste será designado por un Juez de Letras en lo
Civil.
SEXTO: Para los efectos de este contrato, las partes fijan su domicilio en la ciudad
de ____________, prorrogando la competencia para ante sus tribunales.
NOVENO: El presente contrato se extiende y firma en dos ejemplares de idéntico tenor, valor y fecha,
quedando uno en poder de cada parte.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
SEGUNDO: Por el presente instrumento las partes dejan sin efecto el contrato de arrendamiento ya
indicado de conformidad a lo establecido en las cláusulas siguientes.
Jurisprudencia Relacionada
Ver Fichas: 1, 2, 3, 4, 10, 12, 108, 110, 158, 172 del anexo de jurisprudencia de
Arrendamiento.
SEGUNDO: Por el presente instrumento las partes vienen en poner término anticipado de común
acuerdo al contrato de arrendamiento señalado a contar de esta fecha.
QUINTO: Mediante este instrumento, las partes acuerdan otorgarse recíprocamente el más completo
y total finiquito respecto de todas y cada una de las obligaciones emanadas de los mencionados
contratos de arriendo, declarando que nada se adeudan por este concepto y renunciando en este mismo
acto a cualquier reclamación futura ya sea judicial o extrajudicial.
SEXTO: Para todos los efectos legales derivados del presente término de contrato y finiquito, las
partes fijan su domicilio en la comuna de ________ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales de
justicia.
Jurisprudencia Relacionada
Ver Fichas: 13, 39, 42, 86, 86, 108, 108, 116, 142, 163, 175, 192, 212, 221, 223 del
anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
A. TÉRMINO IPSO FACTO
B. DE CONSUNO
________- Se autoriza, expresamente, al Arrendatario, para cambiar el destino del fundo dado en
arrendamiento. Este podrá y/o deberá efectuar plantaciones de árboles frutales, con un mínimo
de ____ hectáreas y un máximo de ______ hectáreas, en la parte ________ del predio. Tales
plantaciones se deberán realizar en las mejores condiciones técnicas, científicas, de sanidad vegetal y
demás de la ciencia de la Agronomía, de forma tal que, al término del contrato, las arboledas de frutales
estén en perfectas condiciones de producción y de sanidad; y el suelo no haya sufrido otras mermas
que las inherentes a un buen cultivo de dichas plantas. En relación a los árboles que se renuevan sin
nuevas plantaciones o siembras, al término del contrato, pertenecerán al propietario, sin que tenga que
pagar nada por ello.
Jurisprudencia Relacionada
A. CASO GENERAL
________- El Constituyente, en su calidad de dueño del Predio Sirviente, constituye en favor del
Predio Dominante que se ha vendido a don ______, con cargo al Predio Sirviente, una servidumbre de
tránsito o paso de personas y de vehículos, de manera que los propietarios del Predio Dominante, su
familia, sus dependientes, sus empleados, y los vehículos de ellos y de sus visitas, podrán entrar y/o
salir del predio, por los caminos interiores del Predio Sirviente, sin limitación alguna. Dichos caminos son
los señalados en un plano que, firmado por ambas partes, se protocoliza junto a este contrato y se
entiende formar parte de él.
Todos los gastos de mantención y el cuidado de los caminos, serán de cargo de ambas partes por
mitades iguales.
A. CASO DE ARRENDAMIENTO
________- Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el derecho del Arrendatario, de pasar,
por todos los canales, acequias, ductos, obras de arte y otros, del fundo, que sean llevadas, a la parte
del predio tomado en arrendamiento; las aguas necesarias de que, según este mismo contrato, puede
disponer. Al respecto, si se borrasen o se cegasen o se inutilizasen algunos de tales ductos, el
Arrendador deberá proveer a la solución inmediata y si los inconvenientes, además, fueren imputables a
él o a un dependiente suyo, deberá, además, indemnizar, al Arrendatario, de todo perjuicio.
El terreno que será ocupado por el acueducto abarcará una superficie de ______ metros cuadrados y
corresponde a aquel sector individualizado en el plano anexo que, debidamente firmado por las partes,
se entiende formar parte de este contrato y que se protocoliza junto a él.
Nota:
Es pertinente recordar que, muchas veces, es, además, útil el designar un Árbitro
arbitrador, uno de Derecho o mixto.
________- Se conviene que el predio que está aguas arriba, individualizado debidamente, como
sirviente, está obligado a dejar pasar el total de las aguas a que tiene derecho el predio que está aguas
abajo, por los canales actuales o por otros susceptibles de acarrearlas y por todos los pasos naturales o
artificiales del mismo fundo.
________- Las partes acuerdan expresamente que el Arrendador podrá ceder el presente contrato a
don _________________, con quien aquél celebró un contrato de promesa de compraventa del
inmueble arrendado; debiendo, en todo caso, el cesionario respetar y hacer suyo íntegramente los
términos, derechos, obligaciones y consecuencias del presente contrato.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 96, 96, 98, 159 del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
A. CESIÓN
________- Se eleva a la calidad de esencial de esta convención, el derecho del Arrendatario de
ceder este contrato; vale decir, de buscar un nuevo Arrendatario, que tendrá los mismos derechos y las
mismas obligaciones que se pactan por este instrumento. El nuevo Arrendatario deberá ajustar la
garantía a la nueva renta de arrendamiento que, además del reajuste convenido, deberá ser aumentada
en un ___%.
B. SUBARRENDAMIENTO
Nota:
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 60, 71, 73, 75, 93, 96, 110, 129, 138 219 del anexo de jurisprudencia de
Arrendamiento.
________.- Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, la obligación que asume el Arrendador
don ________________________________, por sí, como socio o asociado de cualquiera Arrendadora,
como mandatario de cualquiera persona natural o jurídica o en cualquiera otra forma, de no dedicarse,
en la misma ciudad, ni en la misma provincia, al mismo rubro de ______________________________,
que es aquel que seguirá, exclusivamente, el Arrendatario.
Nota:
Notas:
1. Contratos pactados mes a mes y aquellos de duración indefinida: Según el artículo 3º de la Ley
Nº 18.101, el arrendador sólo puede ponerle término mediante desahucio judicial, o mediante desahucio
notificado personalmente por un notario. Si bien en estos casos, la ley faculta al arrendador para
poner término de forma unilateral, éste no será inmediato, sino que será después de 2 meses desde la
notificación de la demanda o aviso, aumentado en un mes por cada año completo que el arrendatario
hubiere ocupado el inmueble, el que no podrá superar 6 meses.
2. Contratos a plazo fijo que no excedan de un año: De conformidad con el artículo 4º de la Ley
Nº 18.101, en los contratos de plazo fijo que no excedan de un año el arrendador sólo podrá solicitar
judicialmente la restitución del inmueble y, en tal evento, el arrendatario tendrá derecho a un plazo de 2
meses, contado desde la notificación de la demanda. En los casos a que se refiere este artículo el
arrendatario podrá restituir el inmueble antes de expirar el plazo de restitución y sólo estará obligado a
pagar la renta de arrendamiento hasta el día en que aquélla se efectúe. Nos encontramos ante una
limitación a la fuerza obligatoria de los contratos porque el legislador exige que el arrendador realice
otras gestiones aparte de las establecidas en el contrato (que debiera terminar por la sola llegada del
plazo).
3. Pactados a plazo fijo, superior a un año, en inmuebles destinados a la habitación: En virtud del
artículo 5º de la Ley Nº 18.101 se entenderá siempre implícita la facultad del arrendatario de
subarrendar, salvo estipulación en contrario, en cuyo caso éste podrá poner término anticipado al
contrato sin la obligación de pagar la renta por el período que falte.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 17, 30, 32, 35, 39, 49, 49, 53, 64, 76, 116, 119, 163, 164, 175, 182, 188, 200,
213, 217, 218 del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
27. INMUEBLE. MEJORAS A CARGO ARRENDADOR. DOS FORMULARIOS
________- Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el que serán de cargo del Arrendador,
todas las mejoras que sea necesario introducir en el inmueble, para que éste sirva, debidamente, para el
objeto para el cual se ha dado en arrendamiento incluyendo las mejoras locativas.
________- Serán de cargo del Arrendador, todas las mejoras necesarias y las mejoras útiles que se
deban introducir, en el inmueble, para el objeto para el cual se ha dado en arrendamiento. Pero, las
mejoras locativas serán de cargo del Arrendatario, el que deberá devolver el inmueble en las mismas
condiciones que, según inventario, lo recibe.
Nota:
Mejoras locativas son las que, según la costumbre, son de cargo del Arrendatario (por
ejemplo: rotura de vidrios).
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 51, 72, 118, 220 del anexo de jurisprudencia de Arrendamiento.
________- Todas las mejoras, locativas, necesarias y útiles y las que se precisen por causa de caso
fortuito o de fuerza mayor, serán de cargo del Arrendatario, el que deberá entregar, en su tiempo, el
inmueble, en perfectas condiciones de suelos, paredes, cielos, artefactos, pinturas, papeles murales,
instalaciones, llaves, jardines y demás y él deberá pagar las rentas de arrendamiento, en su caso,
durante todo el tiempo necesario para llevar a cabo las reparaciones, arreglos y mejoras referidos.
________- Serán de cargo del Arrendatario las mejoras necesarias y útiles, pero si éstas consisten
en obras permanentes que el Arrendatario no pueda llevarse una vez terminado el contrato, el
Arrendatario tendrá derecho, con el consentimiento del Arrendador, de rebajar su valor de las rentas que
se devenguen, en la siguiente forma __________.
C. MEJORAS VOLUPTUARIAS
________- El Arrendatario, con el acuerdo del Arrendador, podrá introducir en la propiedad objeto del
contrato, mejoras voluptuarias (tales como piscinas, instalación de aparatos de aire acondicionado,
sistemas de alarma y seguridad, etc.), que permanecerán en el inmueble, y cuyo valor será dividido por
mitades entre las partes; rebajando el Arrendador de la renta de arrendamiento, el valor de la cuota que
le corresponda en el gasto. El Arrendatario podrá, asimismo, y con el consentimiento del Arrendador,
realizar mejoras voluptuarias destinadas a ser retiradas por él al término del contrato, obligándose a
dejar la propiedad en perfecto estado. En este caso los gastos en que incurra por dichas mejoras serán
de su cargo, exclusivamente, sin derecho a rebaja alguna de la renta.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 22, 43, 45, 51, 56, 118, 132, 147, 214, 219, 220, 224 del anexo de
jurisprudencia de Arrendamiento.
CONTRATO DE CESIÓN
____.
CUARTO: El cedente hace entrega del título en el que consta el crédito, con anotación del traspaso y
bajo su firma, al cesionario, quien se da por recibido.
SEXTO: El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
OCTAVO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 6, 16, 24, 45, 46, 48, 51, 54, 61, 77, 78 del anexo de jurisprudencia de
Cesión.
2. Fianza de don __________;
3. _____________.
SEGUNDO: El cedente vende, cede y transfiere el crédito mencionado en la cláusula anterior, al
cesionario, quien lo compra y acepta para sí. Esta cesión comprende todas las fianzas, privilegios,
prendas e hipotecas.
CUARTO: Don ______________ hace entrega del título en que consta el crédito, con anotación del
traspaso y bajo su firma, a don _____________, quien declara recibirlo a su entera y total satisfacción.
QUINTO: El cedente se hace responsable de la solvencia presente del deudor, hasta concurrencia
del precio de esta cesión.
SEXTO: Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por ____________.
SÉPTIMO: El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
NOVENO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
DÉCIMO: Se faculta al portador de copia autorizada de esta escritura, para requerir las inscripciones
y anotaciones que procedan en el Conservador de Bienes Raíces respectivo.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
1. El traspaso o cesión debe anotarse en la materialidad del título que da cuenta del
crédito cedido, por ejemplo, de la siguiente manera: "El crédito de que da cuenta
este instrumento, ha sido cedido a don ___________ por el precio de ____ pesos
por escritura (o instrumento privado) de fecha ___ de _______ de dos mil ___, ante
el Notario don ______" (Firma del cedente y firma del Notario, en su caso).
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 6, 9, 11, 13, 18, 25, 28, 30, 33, 34, 36, 42, 43, 44, 45, 46, 48, 53, 56, 57, 61,
63, 65, 67, 72 del anexo de jurisprudencia de Cesión.
SJL EN LO CIVIL
Solicito esta notificación para que la cesión de dicho crédito personal produzca efecto en contra del
deudor y en contra de terceros.
POR TANTO, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 1902 y siguientes del Código Civil.
PRIMER OTROSÍ: Sírvase US. tener por acompañado, con citación (o bajo el apercibimiento que
corresponda), el título que lleva anotado el traspaso del derecho, con la designación del suscrito como
cesionario y bajo la firma del cedente.
SEGUNDO OTROSÍ: Ruego a US. tener presente que designo Abogado patrocinante y confiero
poder a don ____________, habilitado para el ejercicio de la profesión, domiciliado
en __________ Nº ___, oficina Nº ____ de esta ciudad, quien firma junto a mí en señal de aceptación.
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Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 15, 19, 31, 32, 33, 33, 35, 40, 42, 43, 50, 52, 53, 56, 57, 61, 62, 67, 76, 78 del
anexo de jurisprudencia de Cesión.
CUARTO: La presente escritura será título suficiente para que el cesionario pueda actuar, en juicio,
con los mismos derechos del cedente.
QUINTO: El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SÉPTIMO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 2, 17, 21, 38, 41, 47, 69 del anexo de jurisprudencia de Cesión.
33. CRÉDITO HIPOTECARIO. ESCRITURA
SEGUNDO. Por este acto, el cedente vende, cede, y transfiere, el crédito hipotecario mencionado en
la cláusula anterior y sus anexos, y la acción hipotecaria, además de la personal, al cesionario quien lo
compra y acepta para sí.
TERCERO. El precio de la cesión es la suma de ______ pesos que se paga en este acto, en dinero
efectivo y de la que éste se da por recibido a su entera satisfacción (o pagará en ____ cuotas
mensuales y sucesivas de ____).
CUARTO. El cedente hace entrega del título en el que consta el crédito, con anotación del traspaso y
bajo su firma, al cesionario quien se da por recibido.
QUINTO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SÉPTIMO. Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
OCTAVO. Se faculta al portador de copia autorizada de esta escritura, para requerir las inscripciones
y anotaciones que procedan en el Conservador de Bienes Raíces respectivo.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
1. El traspaso o cesión debe anotarse en la materialidad del título que da cuenta del
crédito cedido, por ejemplo, de la siguiente manera: "El crédito de que da cuenta
este instrumento ha sido cedido a don _____________ por el precio de
$ ________ (____________ pesos), por escritura de fecha ___ de ______ de dos
mil ______, ante el Notario don _____________" (Firma del cedente y firma del
Notario, en su caso).
2. La cesión de derechos personales debe ser aceptada por el deudor; o ser notificada, a
éste, conforme lo dispone el artículo 1909 del Código Civil. La aceptación antedicha
puede constar del mismo contrato de cesión, mediante una cláusula, como la
siguiente:
"Presente a este acto, don ______________, deudor del crédito que se cede por este
acto, acepta la cesión y se da por notificado de ella, declarando que pagará el
crédito directamente al cesionario".
Jurisprudencia Relacionada
SEXTO: El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
OCTAVO: Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
NOVENO: Se faculta al portador de copia autorizada del presente contrato para requerir las
anotaciones, inscripciones y subinscripciones que proceda en el Conservador de Bienes Raíces
respectivo.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
1. La tradición del derecho real de herencia no requiere constar por escritura pública,
puesto que se siguen, al respecto, las reglas de la tradición de los bienes muebles.
Sin embargo, por motivos de prueba, seguridad y por la importancia de las
consecuencias que pueden derivarse de esta cesión, puede ser conveniente
hacerlo por instrumento público; como es el caso de este formulario.
2. Asimismo, puede cederse el derecho como un acta o escrito en los autos de posesión
efectiva.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 1, 7, 12, 20, 23, 27, 37, 39 del anexo de jurisprudencia de Cesión.
TERCERO. El precio de la cesión es la suma de______ pesos, que se paga en este acto, en dinero
efectivo y de la que éste se da por recibido a su entera satisfacción (o pagará en ____ cuotas
mensuales y sucesivas de ____, sujetándose el saldo de precio al siguiente reajuste ______).
QUINTO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SÉPTIMO. Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
OCTAVO. Se faculta al portador de copia autorizada de esta escritura para requerir las inscripciones
y anotaciones que procedan en el Registro de Propiedad Intelectual.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
1. Este contrato puede adaptarse para ceder derechos sobre una obra intelectual de
cualquiera naturaleza.
3. Este contrato debe celebrarse por instrumento público o por instrumento privado
autorizado ante notario. Deberá, además, inscribirse en el Registro respectivo
dentro del plazo de sesenta días, contados desde la fecha de celebración del
respectivo acto o contrato. También deberá inscribirse, dentro del mismo plazo, la
resolución del contrato que originó la transferencia (artículo 73 Ley Nº 17.336 de
Propiedad Intelectual).
Jurisprudencia Relacionada
SEGUNDO. El cedente vende, cede y transfiere al cesionario, quien acepta y adquiere para sí, la
marca comercial mencionada en la cláusula precedente.
CUARTO. Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por ____________.
QUINTO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SEXTO. Las partes facultan al portador de copia autorizada de la presente escritura para requerir y
firmar las inscripciones y anotaciones que fueren procedentes.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
Se eleva a la condición de esencial de este contrato, el que el uso de la marca "______", por parte
del cesionario, será por ____ meses, improrrogables. De esta manera, el actual cedente y futuro
propietario podrá, a partir del día _____ de ______ de dos mil ___, recuperar, de inmediato y de hecho,
el dominio pleno y podrá fabricar productos con tal marca; o celebrar los contratos que desee, con ella.
Asimismo, con respecto al cesionario, significará que absolutamente todos los productos con tal marca
que se encuentren en poder del cesionario, si éste ha seguido produciendo con ella pertenecerán, ipso
facto, al dueño de tal marca y deberá, además, pagar una multa diaria de ___________ pesos. El
Registro, con la llegada del plazo, cancelará, ipso facto, y a solicitud del interesado, la cesión.
CUARTO. Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por _________________.
QUINTO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SEXTO. Las partes facultan al portador de copia autorizada de la presente escritura para requerir y
firmar las inscripciones y anotaciones que fueren procedentes y al propio cedente para la cancelación, a
la llegada del plazo.
En comprobante, firman ____________________.
b) el saldo, en ____ cuotas de ______ pesos mensuales cada una, con vencimiento los días ___ de
cada mes, siendo la primera el día ___ de ______ próximo; y la última, el día ___ de ____ del año dos
mil ______. El saldo de precio tendrá el siguiente reajuste: ____________; además, dicho saldo
devengará los siguientes intereses: ________.
QUINTO. Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por ____________.
SEXTO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes contiene el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
SÉPTIMO. Se faculta al portador de copia autorizada de esta escritura para requerir las inscripciones
y anotaciones que procedan, en el Registro de Propiedad Industrial.
En comprobante, firman ____________________.
"... Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el que el propietario de la patente de invención
tendrá derecho de explotar, en la medida de sus posibilidades, la misma, personalmente, en su taller o
en sociedad. Esta facultad se ejercerá en paralelo a la del cesionario, sin embargo, ello no lo habilitará
en forma alguna, para hacer competencia desleal, ni ceder a un tercero, en cualquiera forma, derechos,
en perjuicio del cesionario de este contrato".
QUINTO. Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el que las acciones se venden libres de
todo gravamen, prohibición, embargo, limitación de dominio o derecho de terceros, de cualquiera
especie. El vendedor responderá del saneamiento de la evicción, en conformidad a la ley.
SÉPTIMO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
NOVENO. Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
DÉCIMO. Se faculta al portador de copia autorizada de copia de esta escritura pública, para requerir
las anotaciones e inscripciones que proceden; facultad que permanecerá aun en caso de falta o
incapacidad de cualquiera de las partes.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
2. Si, como consecuencia de la cesión de acciones, todas éstas se reunieran en una sola
persona, deberá dejarse constancia que se extingue la sociedad; que el comprador
o cesionario pasa a ser propietario exclusivo de las pertenencias y, en la parte en
que se faculta al portador, se deberá indicar que éste pedirá la cancelación de la
compañía misma y las inscripciones del caso.
Jurisprudencia Relacionada
QUINTO. Se eleva a la calidad de esencial de este contrato, el que las acciones se venden libres de
todo gravamen, prohibición, embargo, limitación de dominio o derecho de terceros, de cualquiera
especie. El vendedor responderá del saneamiento de la evicción, en conformidad a la ley.
SÉPTIMO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contiene el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
DÉCIMO. Se faculta al portador de copia autorizada de copia de esta escritura pública, para requerir
las anotaciones e inscripciones que proceden; facultad que permanecerá aun en caso de falta o
incapacidad de cualquiera de las partes.
En comprobante, firman ____________________.
Notas:
1. Lógicamente, el vendedor puede enajenar una o más de sus acciones en lugar del
total de las suyas.
2. Si, como consecuencia de la cesión de acciones, todas éstas se reunieran en una sola
persona, deberá dejarse constancia que se extingue la sociedad; que el comprador
o cesionario pasa a ser propietario exclusivo de las pertenencias y, en la parte en
que se faculta al portador, se deberá indicar que éste pedirá la cancelación de la
compañía misma y las inscripciones del caso.
QUINTO. Las partes declaran que la entrega material de las pertenencias materia de este contrato,
se efectúa en este acto a entera satisfacción del cesionario (o se ha efectuado con anterioridad a esta
fecha).
SEXTO. Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por ____________.
SÉPTIMO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contiene el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
NOVENO. Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan domicilio
en la ciudad y comuna de ______ y se someten a la jurisdicción de sus tribunales.
DÉCIMO. Se faculta al portador de copia autorizada de ésta, para requerir del Conservador de Minas
respectivo las inscripciones y anotaciones correspondientes.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
Los referidos trabajos deberán ejecutarse dentro del plazo de ________ meses, a contar desde la
fecha de la presente escritura, y el monto mínimo de la inversión que don ________ deberá efectuar
para llevarlos a cabo, será la suma de ________ pesos, en las siguientes condiciones y
reajustes: ___________________.
Sin embargo, se entenderá cumplida su obligación, aun cuando la inversión fuere inferior a la suma
indicada, si, hechos, a lo menos, ______ piques de reconocimiento de una profundidad no inferior
a ______ metros, se lograre cubicar una cantidad mínima de ________ toneladas de mineral.
CUARTO. Al término del plazo indicado en la cláusula anterior, o antes, si se hubieren efectuado los
trabajos de investigación y reconocimiento indicados en la cláusula anterior, el cesionario tendrá las
siguientes facultades:
a) Optar por adquirir, definitivamente, el ________ por ciento de las acciones y derechos en las
pertenencias mineras ya individualizadas en la cláusula primera, en la suma de ________ pesos, que se
pagará de la siguiente forma: ___________________ En tal caso deberán, además, aportar, a la
sociedad legal minera que se formará por el solo ministerio de la ley, el capital necesario para la
explotación de las pertenencias aludidas, en la proporción de un ________ por ciento, de acuerdo a los
resultados que hayan dado los trabajos de reconocimiento ejecutados. En desacuerdo de las partes, en
cuanto al monto y forma de la inversión, resolverá, en única instancia y sin forma de juicio, el árbitro que
se designa en la cláusula octava;
Si el cesionario optare por prosperar en la Sociedad, en los términos indicados en la letra a) de esta
cláusula, deberá manifestarlo en declaración formulada por escritura pública, que deberá anotarse al
margen de la inscripción de la sociedad en el Registro de Propiedad de Minas, dentro de
los ________ días siguientes al vencimiento del plazo indicado en la cláusula tercera. En la escritura
mencionada, deberá insertarse un certificado extendido por el administrador de la Sociedad Legal
Minera, en que conste haberse ingresado en arcas sociales, a lo menos un ______ por ciento del capital
de explotación que deberá aportar el adquirente.
En caso contrario, deberá suscribir la escritura pública correspondiente, dentro del mismo plazo,
devolviendo el ________ por ciento de las acciones referido, al cedente y reteniendo, en su poder, y en
forma definitiva, el otro __________ por ciento de las acciones cedidas. Si no lo hiciere, el cedente
podrá recurrir al árbitro que se designa en la cláusula octava, quien suscribirá la escritura pública, por el
cesionario, entendiéndose, desde luego, facultado, en forma irrevocable, para tal efecto, en el evento
propuesto.
QUINTO. Las partes están de acuerdo en que la Sociedad Legal Minera que nacerá, al inscribirse la
cesión de los derechos que se conviene por el presente instrumento, será administrada por
don/ña _____________________.
SEXTO. En el caso previsto en la letra b) de la cláusula cuarta, tanto el cedente como el cesionario,
se obligan a desprenderse hasta del cincuenta por ciento de sus respectivas acciones y derechos, para
interesar a otro u otros capitalistas que estén de acuerdo en continuar los trabajos de reconocimiento de
las pertenencias individualizadas en la cláusula primera.
Si dicho Árbitro no quisiere o no pudiere desempeñar el cargo o él faltare, por cualquiera razón,
asumirá, con iguales facultades y procedimiento, don/ña _____________. Si éste faltare, el árbitro será
designado por la Justicia, como árbitro de derecho.
El árbitro queda especialmente facultado para resolver todo asunto relacionado con su competencia
y/o jurisdicción.
NOVENO. Los gastos e impuestos que se devenguen con motivo de la celebración del presente
contrato serán pagados por ____________.
DÉCIMO. El presente Contrato debidamente firmado por las Partes, contienen el completo y total
entendimiento entre las Partes acerca de las materias en él contempladas, y reemplaza y sustituye a
todos los acuerdos previos, orales o escritos, relativos a la misma materia.
DUODÉCIMO. Para todos los efectos legales derivados del presente Contrato, las Partes fijan
domicilio en la ciudad y comuna de ________ y se someten a la jurisdicción del tribunal arbitral
designado previamente.
En comprobante, firman ____________________.
____.
____.
____.
La causa precisa de la cesión de bienes antedicha, es dar cumplimiento a la obligación anterior que
el primero tenía, en favor del segundo, originada por ______. En virtud de la cesión que se efectúa por
el presente instrumento, las partes están de acuerdo en que dicha obligación se encuentra extinguida.
Nota:
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 14, 29, 60, 61, 64, 66, 68, 70, 71, 75, 78 del anexo de jurisprudencia de
Cesión.
______ Ninguna de las Partes podrá ceder total o parcialmente sus derechos bajo este Contrato sin
el consentimiento previo y por escrito de la otra Parte, salvo que se pongan de acuerdo en las nuevas
condiciones del caso, con el interesado.
______ El arrendatario (promitente comprador u otro) podrá ceder este contrato, a un tercero,
siempre que acredite, en forma previa, que se trata de una persona seria y honorable, con intachables
informes comerciales y con antigüedad en una profesión, comercio, industria, agricultura u otra actividad
formal.
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Jurisprudencia Relacionada
CONTRATO DE FIANZA
TERCERO: El acreedor declara aceptar la fianza que por este acto se constituye.
CUARTO: Las partes fijan domicilio en la ciudad de __________ y prorrogan competencia para ante
sus tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
Si la obligación principal es reajustable y/o genera intereses, se dirá si el fiador responde
de tales reajustes e intereses.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 8, 10, 11, 13, 16, 18, 19, 25, 28, 30, 33, 35, 36, 37, 39, 43, 45 del anexo de
jurisprudencia de Fianza.
TERCERO: El acreedor, don/ña ______________, acepta la fianza que por este acto se constituye,
bajo la condición que el fiador acredite la suficiencia de sus bienes para asumir tal obligación, dentro del
plazo de ______, a contar de la fecha del presente instrumento. De no poder acreditarse la suficiencia
de bienes y solvencia del fiador, a satisfacción del acreedor, esta fianza se resolverá, y el deudor deberá
proveer hipoteca de primer grado, sobre el inmueble de su propiedad ubicado en
calle _____________ Nº ______, de la ciudad de ________.
En comprobante, firman ____________________.
PRIMERO: La empresa ha contratado los servicios del trabajador para que éste se desempeñe en el
cargo de ___________________, por contrato de trabajo firmado con
fecha ____ de ________ de ______.
SEGUNDO: Por el presente instrumento, don/ña ______________ se constituye fiador de todas las
obligaciones que pueda contraer el trabajador en el desempeño de su ocupación, sea de carácter
contractual o extracontractual o de cualquier especie, hasta por la suma de $ __________ La empresa y
el trabajador declaran que aceptan la fianza así constituida.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
PRIMERO: Por escritura pública de esta fecha otorgada ante mí, "parte 2" suscribió un Contrato de
Transacción con ___ donde se establecen los términos y condiciones del pago de _____.
TERCERO: De conformidad a lo anterior, por este acto la "parte 1" constituye prohibición de enajenar
sin autorización de "parte 2" representados para estos efectos en forma irrevocable por
don/ña ___________ y don/ña ________ sobre el inmueble ubicado en
calle ______________ número ______, Rol Nº __________ inscrito a fojas ______ número ______ del
Registro de Propiedad del año ________ del Conservador de Bienes Raíces de _____________.
CUARTO: Por el presente instrumento los comparecientes vienen en dejar sin efecto y en resciliar la
Transacción otorgada con fecha ___ de ________ de ____, en la Notaría
de ____________ de ____________, repertorio número ______, declarando que nada se adeudan por
dicho concepto, y otorgándose el más amplio, completo, recíproco, e irrevocable finiquito respecto de la
misma.
QUINTO: Para todos los efectos del presente contrato, las partes fijan su domicilio en la ciudad
de ____________, y se someten a la competencia de sus Tribunales Ordinarios de Justicia de ciudad y
comuna de _____________.
SEXTO: Todos los gastos e impuesto que pudiera devengar el presente instrumento serán de cargo
de ambas partes por mitades.
En comprobante y previa lectura, firman los comparecientes con el Notario que autoriza, quien
certifica que la presente escritura pública de Fianza se ha incorporado al Repertorio de Instrumentos
Públicos del Oficio, bajo el número __________.
INFORMACIÓN RELACIONADA CON ESTE DOCUMENTO
Jurisprudencia Relacionada
SEGUNDO: En el mismo instrumento, dicho fiador otorgó, además, como caución, hipoteca sobre su
propiedad raíz ubicada en calle _____________ número ____, de la ciudad de ______, inscrita a
fojas ________ número ______, del Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces
de ______, correspondiente al año ______, hipoteca que se inscribió en el Registro de Hipotecas y
Gravámenes del mismo Conservador, a fojas ________ número ________ correspondiente al
año ______.
(En el mismo instrumento, las partes acordaron una prohibición voluntaria de gravar y de enajenar el
mismo inmueble, la que se inscribió en el Registro de Prohibiciones e Interdicciones del mismo
Conservador, a fojas ________ número ________ correspondiente al año ______).
CUARTO: Se faculta al portador de copia autorizada de este instrumento, para requerir del
Conservador de Bienes Raíces referido, las cancelaciones y subinscripciones del caso.
En comprobante, firma ____________________.
Nota:
La deuda también pudo ser pagada por el deudor mismo, por lo que se cambiará la
cláusula tercera en tal caso.
Jurisprudencia Relacionada
En ________, a ________ de ________ de ______.
Señor(a)
______.
Ciudad de ____________.
De mi consideración:
Por la presente, otorgo, a Ud., carta de pago de las obligaciones contraídas por instrumento privado
de fecha ____ de __________ de ______, que don/ña _____________ había contraído, en mi favor,
consistente en la obligación de solucionar la cantidad de $ ________ (________ pesos), por causa
de __________.
Habiendo recibido, del deudor principal (o bien: de Ud., como fiador de la obligación), el total de lo
adeudado, otorgo carta de pago y alzo la caución de fianza que Ud. había contraído.
________________________________
Jurisprudencia Relacionada
TERCERO: Para garantizar el pago de las obligaciones referidas, el fiador constituye, además,
hipoteca sobre su propiedad ubicada en calle ____________ número ______, comuna de ______ y que
deslinda: AL NORTE:________; AL SUR: ____________; AL ORIENTE: ______________; y AL
PONIENTE: _____________.
1. _______.
QUINTO: El acreedor, por este acto, acepta la fianza hipotecaria que por este acto se constituye.
Asimismo, el deudor se obliga a no gravar ni enajenar la propiedad raíz dada en garantía sin la
autorización previa y por escrito del acreedor.
SEXTO: Las partes fijan domicilio en la ciudad de ________ y prorrogan competencia para ante sus
tribunales.
SÉPTIMO: Se faculta al portador de copia autorizada de este contrato, para requerir las inscripciones
y subinscripciones correspondientes.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 8, 12, 14, 23, 26, 31, 44 del anexo de jurisprudencia de Fianza.
a) El cumplimiento de toda obligación, ya sea directa o indirecta, como deudor principal, solidario o
subsidiario, como fiador o de cualquier otra manera, que el mencionado don/ña _____________ tenga,
actualmente, o contraiga en el futuro, con el Banco __________;
a) Que la presente fianza solidaria no podrá revocarse o retractarse mientras existan obligaciones
pendientes de don/ña _____________, para con la indicada sociedad;
b) Que la revocación o retractación, para que tenga valor entre las partes, deberá constar por
escritura pública y ser notificada, judicialmente, al gerente o representante del Banco ________;
c) Que, para todo efecto, tal revocación sólo producirá efecto respecto de las obligaciones aún no
contraídas a la fecha de la notificación a que se refiere la letra b).
CUARTO: Para todos los efectos del presente contrato, las partes fijan su domicilio en la ciudad
de ______ y se someten a la jurisdicción de sus Tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 20, 21, 22, 27, 29, 32, 42, 44, 46 del anexo de jurisprudencia de Fianza.
SEGUNDO: El fiador y codeudor solidario por sí, acepta desde ya las prórrogas, renovaciones,
resuscripciones y modificaciones de cualquiera de las condiciones de tasa de interés, reajustabilidad, y
capitalizaciones de intereses que puedan convenirse o concederse respecto de las obligaciones
garantizadas, y de las que las sustituyan total o parcialmente, hasta el pago íntegro y efectivo de lo
adeudado, como también acepta la sustitución o cancelación de cualquier garantía que asegure el pago
de ellas, relevando al BANCO ___________ desde ya de la obligación de protesto si procediere,
quedando siempre vigente la fianza y obligación solidaria que se otorga en este instrumento, y
renunciando a la excepción de subrogación contemplada en el artículo 2355 del Código Civil.
TERCERO: En caso de mora o simple retardo en el pago de una cualquiera de las obligaciones que
se garantizan con la fianza y codeuda solidaria que se constituye mediante la presente escritura, queda
facultado el Banco para hacer exigibles anticipadamente todas y cada una de tales obligaciones como si
fueren de plazo vencido.
CUARTO: El fiador y codeudor solidario da carácter de indivisibles a todas y cada una de las
obligaciones que asume por el presente instrumento, de tal manera que el
BANCO ____________ podrá exigir el cumplimiento de tales obligaciones, en su totalidad de cualquiera
de los herederos del fiador y codeudor solidario, de conformidad con lo prescrito en los artículos 1526
Nº 4 y 1528 del Código Civil.
SEXTO: Los derechos, gastos e impuestos de la presente escritura serán de cargo exclusivo del
deudor, quedando el Banco facultado para debitarlos en la o las cuentas corrientes, de ahorro o en
cualquier otra acreencia que mantenga el Banco en su favor.
SÉPTIMO: Para todos los efectos legales derivados del otorgamiento de este contrato, el fiador y
codeudor solidario fija su domicilio en la Ciudad y Comuna de __________ sin perjuicio del que
corresponda al lugar de su domicilio o residencia, a elección del Banco. El Banco podrá, a su elección,
demandar al fiador y codeudor solidario ante los Tribunales de la comuna de __________ o ante los
competentes según las reglas de procedimiento.
Estas escrituras no se insertan por ser conocidas de los otorgantes y a expresa solicitud de ellos.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 20, 21, 22, 27, 29, 32, 41, 42, 44, 46 del anexo de jurisprudencia de Fianza.
CUARTO: Para todos los efectos legales derivados del otorgamiento de este contrato, el fiador y
codeudor solidario fija su domicilio en la ciudad y comuna de ______________, sin perjuicio del que
corresponda al lugar de su respectivo domicilio o residencia, a elección del ______________. El
acreedor podrá, a su elección, demandar al fiador y codeudor solidario ante los tribunales de la comuna
de ______________ o ante los competentes según las reglas de procedimiento.
Jurisprudencia Relacionada
Ver fichas: 27, 29, 32, 41, 42, 44, 46 del anexo de jurisprudencia de Fianza.
TERCERO: Por este mismo instrumento, el deudor, para garantía de la deuda referida, constituye
hipoteca de sobre su propiedad ubicada en calle ______________ número ______, de la comuna
de ______ y que deslinda: AL NORTE:____________; AL SUR: ____________; AL
ORIENTE:____________; y AL PONIENTE: ____________.
QUINTO: Se faculta al portador de copia autorizada de este contrato, para requerir las inscripciones y
subinscripciones que procedan en el Conservador de Bienes Raíces correspondientes.
En comprobante, firman ____________________.
Nota:
SEGUNDO: El acreedor, por el presente acto, libera total y absolutamente, al fiador primitivo, de la
obligación de responder de las obligaciones referidas en la cláusula anterior.
CUARTO: Para los efectos de este contrato, las partes fijan su domicilio en la ciudad de __________,
prorrogando la competencia para ante sus tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
En ______, a ____ de ______ de ____.
SEGUNDO: Por el presente instrumento, los suscritos acuerdan distribuirse las obligaciones del
caso, limitando su responsabilidad, para el evento que uno o ambos tengan que pagar la o las
obligaciones del deudor mencionado:
a) Don/ña _________________ asumirá, en definitiva, un ____% (____________ por ciento) de tales
obligaciones, y
TERCERO: El acreedor, por este acto, acepta la limitación a la parte de la deuda que asume cada
uno de los fiadores en los mismos términos que los establecidos en la cláusula segunda del presente
instrumento.
CUARTO: En consecuencia, el acreedor no podrá demandar a cada uno de los fiadores sino por el
porcentaje y por cantidad a que, por este instrumento, cada uno se ha obligado.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
TERCERO: Las partes acuerdan que el fiador tendrá, como honorario o precio único de su garantía,
la cantidad de $ __________ (___________________ pesos), que el deudor le pagará apenas reciba el
préstamo de ________ (o un ____% (________ por ciento) mensual, de la obligación que esté
pendiente, que se pagará dentro de los primeros ___ días de cada mes), en el domicilio del fiador.
QUINTO: El deudor se obliga a restituir al fiador dentro de ______ días de requerido, las cantidades
que éste haya debido desembolsar, en razón de esta fianza, debidamente reajustadas de acuerdo a la
variación experimentada por el IPC o por el índice que lo suceda o reemplace, hasta el día del pago
efectivo. Las partes fijan la cantidad de $ ________ como avaluación anticipada de los perjuicios, que
ellas efectúan de consuno para el caso de incumplimiento de la obligación estipulada.
SEXTO: El deudor, independiente si se ha extinguido o no la obligación principal, se obliga a obtener
el relevo de la fianza respecto del fiador, pasados __________ meses contados desde la fecha del
presente instrumento; puesto que justamente ese es el plazo de vigencia del presente convenio.
SÉPTIMO: Para los efectos de esta convención, las partes fijan su domicilio en la ciudad
de ____________, prorrogando la competencia para ante sus tribunales.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
SEGUNDO: Por este acto, las partes del contrato principal, deudor y acreedor, a que se refiere dicha
declaración unilateral de fianza, acuerdan aceptarla, en todas sus partes, tal como ha sido
comprometida por aquél.
En comprobante, firman ____________________.
En comprobante, firman ____________________.
Jurisprudencia Relacionada
En comprobante, firman ____________________.
Terminación de contrato de arrendamiento, acogida. Validez del arrendamiento de cosa ajena. Obligación del
arrendatario de pagar la renta. Cambio en la calidad jurídica de arrendatario a dueño del inmueble. Obligación de
pagar la renta cesa desde la tradición del inmueble mediante su inscripción.
Fecha: 21/10/2014
Rol: 4237-2014
Sumario
Que la demandante arrendara cosa ajena al demandado no priva de validez a la convención de que
se trata, la que, por el contrario, tiene plena eficacia en conformidad con los artículos 1915 y 1916 del
Código Civil, generando las obligaciones y derechos que le son propios, esto es, para el arrendador el
deber de entregar la cosa, mantenerla en estado que sirva para lo que fue arrendada y a librar al
arrendatario de toda turbación o embarazo en el goce de la cosa arrendada; por su parte, nacieron para
el arrendatario las correspondientes obligaciones, entre ellas, la de mayor entidad, pagar el precio del
arriendo que en el caso ha sido la renta pactada mensualmente, según prescribe el artículo 1942 del
código precitado. En este contexto y no habiendo demostrado el arrendatario demandado, como le
correspondía, el pago de las rentas que se le cobran en el presente juicio, no se divisa razón por la que
pudiera eximírsele del cumplimiento de dicha obligación mientras estuvo vigente un contrato
válidamente celebrado entre las partes y que, por tanto, constituye una ley para sus suscriptores, desde
que se permite el arriendo de cosa ajena (Considerandos 6º y 7º de la sentencia de casación). El
cambio de calidad jurídica que se produjo en el arrendatario demandado respecto del inmueble de
autos, mediante la suscripción del contrato de compraventa, el que no fue noticiado a la actora, no
modifica la conclusión expuesta en el acápite anterior sino hasta la fecha en que se produjo la
correspondiente tradición del bien raíz, mediante la respectiva inscripción conservatoria. Sólo desde
esta última data es dable considerar la mutación jurídica que releva al demandado del cumplimiento de
su obligación de pagar las rentas estipuladas en el contrato de arrendamiento y únicamente porque la
demandante ya no estuvo en condiciones de reciprocidad, esto es, de mantener la entrega del goce de
la cosa, pues dicho goce, sumado al uso y a la disposición, se reunieron en la persona del arrendatario
que adquirió el dominio de la propiedad (Considerando 8º de la sentencia de casación).
Restitución de inmueble. I. Pacto comisorio calificado. Contrato que ya está terminado, no puede volver a serlo
por otra causa. Ii. Cláusula contractual: arrendatario es responsable de obtener permisos para funcionar
comercialmente
Fecha: 20/10/2014
Rol: 345-2014
Sumario
Conviene dejar sentado que el pacto comisorio calificado que las partes introdujeron en la cláusula
antes indicada del contrato que rola a fojas 1, de 05 de octubre de 2011, "(...) comparte la naturaleza
jurídica de la condición resolutoria ordinaria y por consiguiente su cumplimiento,—en la especie—, la
falta de pago de las rentas, produce ipso jure la extinción del arrendamiento, sin que sea menester una
declaración judicial (...)", razón por la cual la arrendataria carecía de la facultad de ponerle término
mediante la carta acompañada a fojas 81, de 13 de marzo de 2013, por cuanto a esa fecha el contrato
ya había expirado y sabido es que un contrato que ya estaba terminado, no puede volver a serlo por otra
causa. ("Jurisprudencia Civil Comentada, coordinadores Iñigo de la Maza Gazmuri y Claudia
Bahamondes Oyarzún, Abeledo Perrot, 2003-2010, 1ª edición 2011, p. 290") (Considerando 12). Si la
autorización del servicio de salud no fue obtenida por la arrendataria, ello no es responsabilidad de la
arrendadora, sino producto de su propia negligencia ya que tuvo tiempo más que suficiente para ello. A
este respecto debe tenerse presente que las partes acordaron en la cláusula 9º del contrato —que
conforme a lo estipulado en el artículo 1545 del Código Civil es ley para los contratantes—, que "será
responsabilidad del arrendatario la obtención de los permisos y autorizaciones administrativas que se
requiera para el funcionamiento de la actividad comercial a que se dedicará el inmueble arrendado y
cumplir las exigencias o requisitos que la autoridad determine (___)". Ello demuestra que era de cargo
de la arrendataria la obtención de los permisos municipales, de salud y otros que permitiesen el pleno
desarrollo de la actividad comercial para el cual fue arrendado (Considerando 17).
Fecha: 17/10/2014
Rol: 2728-2014
Sumario
Las circunstancias anotadas precedentemente impiden a esta corte formarse convicción de que el
contrato que el (actor) escrituró actuando por sí como arrendador y a la vez en representación de la
arrendataria, haya tenido ejecución material. Las copias de formularios de hojas de recepción de
productos aparejadas por el tribunal como medida para mejor resolver que mencionan una placa patente
de vehículo coincidente con la consignada en el contrato no constituyen prueba suficiente por tratarse
de copias de instrumentos privados cuyo otorgante se desconoce, y cuyo mérito probatorio resulta
desvirtuado en virtud de las circunstancias anotadas en el motivo anterior. El artículo 1924 del Código
Civil impone al arrendador las obligaciones de entregar al arrendatario la cosa arrendada y mantenerla
en el estado de servir para el fin a que ha sido arrendada, hechos que no han sido debidamente
establecidos en el proceso lo que permite concluir que, no obstante haberse suscrito el contrato que
invoca el demandante en los términos del instrumento privado, éste no se ejecutó materialmente. Como
consecuencia de lo anterior procede acoger la acción de término del contrato, no así la de cobro de
rentas de arrendamiento, por no haberse establecido la prestación correlativa a la obligación de pago,
según se ha expuesto en los considerandos precedentes (Considerandos 10 y 11).
Cobro de rentas de arrendamiento, rechazado. Aceptación por parte del arrendador de la entrega anticipada del
inmueble que efectúa el arrendatario. Apreciación de la prueba conforme a las reglas de la sana crítica en los juicios
de arrendamiento
Fecha: 13/10/2014
Rol: 1821-2014
Sumario
En la especie, los jueces del fondo tuvieron por acreditado el término del contrato de arrendamiento,
mediante la aceptación de la demandante de la entrega del inmueble arrendado efectuada por la
demandada, en vista de lo certificado por el ministro de fe que levantó el acta de ingreso del actor al
local comercial al día siguiente de haberle puesto término al contrato la demandada, para verificar el
estado en que éste se encontraba, consignando que estaba desocupado y sin que la demandante
hubiere hecho gestión alguna para reclamar judicialmente la entrega material de un inmueble
abandonado, conforme al procedimiento establecido en el artículo 6º inciso 2º de la ley sobre
arrendamiento de predios urbanos. La certificación aludida, en armonía con las demás probanzas
ventiladas y ponderadas en la causa, no hace sino ratificar que el actor hizo toma material de la
propiedad y dispuso de ella, procediendo a dar una nueva convención respecto de la misma, razón por
la cual rechazan la demanda en cuanto pide condenar a la demandada al pago de las rentas
correspondientes al período que mediaba entre la entrega del inmueble y el plazo que habían acordado
las partes para la vigencia del arrendamiento (Considerando 3º).
Corte Suprema
Acción de precario, rechazada. Requisitos de la acción de precario. Título que justifica la tenencia del bien por
parte de los demandados. Contrato de arrendamiento de predio rústico. Carácter consensual del contrato antes de la
Ley Nº 18.985. Improcedencia de requerir una solemnidad de existencia que no estaba vigente al tiempo de
celebrarse el contrato
Fecha: 30/09/2014
Rol: 12906-2013
Sumario
Del examen del artículo 5º de la ley sobre arrendamiento de predios rústicos —D.L. Nº 993—, antes
de la modificación introducida por la Ley Nº 18.985, fluye que tales contratos de arrendamiento no se
encontraban sujetos a formalidades para su existencia, validez, prueba u oponibilidad, lo que no obsta a
que las partes puedan dejar constancia del mismo por escritura pública o privada, requiriéndose, en este
último caso, que lo suscriban dos testigos mayores de dieciocho años. El contrato de arrendamiento que
no se otorgare por escritura pública ni instrumento privado suscrito por dos testigos, existe como tal y
produce los efectos que le son propios, sin que le afecte por tal causa vicio alguno de nulidad. Una vez
modificado el aludido artículo 5º, los contratos de arrendamiento de predios rústicos son solemnes y la
voluntad necesaria para el perfeccionamiento de la convención debe necesariamente manifestarse por
escritura pública o por instrumento privado con la presencia de dos testigos mayores de dieciocho años,
quienes lo suscribirán en tal carácter. La solemnidad la requiere la ley para la existencia misma del
contrato (Considerandos 6º y 8º de la sentencia de casación y 5º de la sentencia de reemplazo). Ahora
bien, tratándose de un contrato de arrendamiento de predio rústico celebrado antes que la Ley
Nº 18.985 modificara el artículo 5º del D.L. Nº 993, no corresponde exigir una solemnidad no
contemplada en el antiguo texto de esta disposición. Por tanto, siendo, en ese entonces, el contrato
consensual, el hecho de que no conste por escrito —efecto que cabe atribuir a la falta de dos testigos en
el instrumento privado que suscribieron las partes— no impide que el contrato exista, produzca sus
efectos y pueda ser probado por otros medios. Solo si el contrato hubiese sido solemne la única forma
de probarlo sería la escritura pública o el instrumento privado a través del cual se manifestó la voluntad
de las partes. Considerar aplicable al contrato de arrendamiento de predios rústicos el requisito de una
solemnidad que no existía al tiempo del perfeccionamiento de la convención o, dicho de otro modo,
estimar incorporado a dicho contrato una norma que no se encontraba vigente al tiempo de su
celebración, importa otorgar efecto retroactivo a una disposición que no lo tiene, contrariando los
artículos 9º del Código Civil —que señala que la ley sólo puede disponer para el futuro y no tendrá
jamás efecto retroactivo— y 22 de la ley sobre efecto retroactivo de las leyes —que dispone que en todo
contrato se entienden incorporadas las leyes vigentes al tiempo de su celebración— (Considerandos 9º
a 11 de la sentencia de casación y 6º y 7º de la sentencia de reemplazo). En el caso de autos, el
contrato de arrendamiento de predio rústico en que los demandados justifican la tenencia del inmueble,
suscrito antes que la Ley Nº 18.985 entrara en vigor, pese a constar que las partes lo firmaron ante
notario público, no fue otorgado ante los dos testigos que el artículo 5º del D.L. Nº 993 contempla, por lo
que cabe considerar que dicho contrato no consta por escrito. Tal circunstancia no obsta a su existencia
jurídica y a que produzca los efectos que le son propios, si de acuerdo a las pruebas rendidas, entre
ellas la testimonial, los sentenciadores pueden verificar que efectivamente existió un contrato de
arrendamiento entre quienes comparecen como partes en el citado instrumento y que lo celebraron en la
misma fecha que en éste se indica. En estas condiciones, cabe concluir que los demandados tenían un
título para la tenencia del inmueble derivado del arrendamiento del predio rústico regido por el D.L.
Nº 993, siendo por ende aplicables las disposiciones de éste y, en especial, el artículo 10 del mismo,
que previene que si el arrendador vendiere o transfiriere a cualquier título el predio arrendado, el nuevo
propietario estará obligado a mantener los términos del contrato de arrendamiento, salvo acuerdo de
éste con el arrendatario, en lo que constituye un estatuto especial para el arrendamiento de predios
rústicos que prefiere a la norma general contenida en el artículo 1962 del Código Civil en aplicación de
lo dispuesto en el artículo 4º del mismo cuerpo legal (Considerandos 8º y 9º de la sentencia de
reemplazo).
Corte Suprema
Conflictos por modificación de reglamento de copropiedad es competencia de los juzgados de policía local.
Rechazo recurso de protección
Fecha: 29/09/2014
Rol: 22871-2014
Sumario
Para acoger la presente acción debe constatarse el carácter preexistente e indiscutido de un derecho
afectado, condición que no se verifica en la especie porque el derecho cuya protección se busca por
esta vía no tiene el carácter de indubitado. En efecto, la recurrente sostiene que la recurrida modificó
ilegalmente el reglamento de copropiedad en el sentido de prohibir la venta o arrendamiento de
estacionamientos a terceros ajenos al edificio, circunstancia que ha sido controvertida por la recurrida, la
que sostiene que su actuar se ajustó a lo dispuesto por la Ley Nº 19.537 sobre copropiedad inmobiliaria
y que en todo caso lo discutido no es propio de esta acción constitucional, siendo de competencia de los
juzgados de policía local (Considerando 2º).
Arrendador está obligado a librar al arrendatario de toda turbación o embarazo en el goce de la cosa arrendada
Fecha: 29/09/2014
Rol: 5839-2014
Sumario
La arrendadora se encuentra obligada por mandato del numeral 3º del artículo 1924 del Código Civil
a librar al arrendatario de toda turbación o embarazo en el goce de la cosa arrendada, obligación que la
demandada de autos incumplió pues no impidió el desalojo de que fue objeto la demandante y más aún
el mismo día en que ello se verificó celebró un nuevo contrato de arrendamiento con un tercero sobre el
mismo inmueble. Así, acierta la sentencia de primera instancia en declarar terminado el contrato de
arrendamiento que liga a las partes por incumplimiento de las obligaciones de la arrendadora.
(Considerandos 7º y 8º).
Cuasidelito. Acreditación del daño moral no necesariamente supone la determinación de su cuantía. Daño moral
solo puede ser apreciado en términos relativos, para el caso en concreto. Contrato de leasing. Concepto. Traslación
de los riesgos efectuada en contrato de leasing, no altera norma legal alguna de la responsabilidad extracontractual
del Código Civil y de la ley del tránsito
Fecha: 26/09/2014
Rol: 475-2014
Sumario
Respecto al daño moral, lo solicitado por la actora es la cantidad de $ 10.000.000, sin aportar
mayores antecedentes de cómo compone esa cifra, ni tampoco aportar mayores probanzas que lo
sustenten. Sin embargo, para efectos del presente recurso de apelación, debe tenerse presente, que la
acreditación del daño moral, no necesariamente supone la determinación de su cuantía y, por ello, los
tribunales pueden fijarlo prudencialmente con base en ciertos parámetros, más bien objetivos, tales
como naturaleza y extensión de las lesiones, violencia del accidente, actitud del causante del mismo,
criterios todos que se han venido exponiendo en los basamentos anteriores. Asimismo, para determinar
el alcance monetario del daño moral, tampoco es posible recurrir a situaciones análogas, por cuanto en
la especie, no existe un patrón que determine la cuantía de estos daños, que como se ha dicho, son
únicos, personales y probablemente no aplicables o replicables a dos situaciones. De ahí, que la
determinación del monto del daño moral en estas materias, es sólo respecto del caso particular
(Considerando 16). El daño moral, solamente puede ser apreciado en términos relativos, personales,
para el caso en concreto que se somete a su conocimiento, no extrapolable a otras situaciones, y
respecto del cual, la cifra presentada por la parte demandante, no es sino un referente que no la vincula
de manera alguna. En todo caso, la relatividad señalada dice relación a que cada situación es un caso
único e irrepetible, lo que dista y se aleja de la arbitrariedad y de la discriminación arbitraria, por cuanto
la situación fáctica y la ponderación del daño sufrido, en todo caso deben ser lo suficientemente
fundados o razonados de manera tal que sea del todo comprensible el criterio o sustento jurídico basal
de la sentencia que lo concede y asimismo, aunque no replicables, deben ser el sustento claro de la
única situación jurídica planteada, esto es la del que ha sufrido el daño (Considerando 18). En términos
generales, un contrato de leasing o arriendo con opción de compra, consiste en que una parte adquiere
de un proveedor o vendedor determinado un bien, generalmente mueble, a solicitud de un tercero, que
lo arrendará por un plazo determinado y a la llegada del plazo, podrá ejercer una o más de las opciones
que se dan al término, a saber, pagar una última cuota prefijada en cuanto a su valor, por medio de la
cual se perfecciona un contrato de compraventa y siendo el tenedor del bien arrendado, se hace dueño
del mismo, alternativamente podrá devolver o restituir el bien a su dueño y arrendador o bien seguirlo
arrendando. De todo lo anterior, se da cuenta en el contrato que arrendamiento que se acompaña a
fojas 493, en que HNS Leasing S.A., da en arriendo a Inversiones Colina, bajo dicha modalidad, entre
otros, el bien con el cual se causó el accidente (Considerando 24). El dueño de un bien, tiene la facultad
de uso, goce y disposición, y en virtud del contrato de arriendo, en este caso, leasing, HNS Leasing S.A.
traspasó al arrendatario, solo la facultad de uso de un vehículo motorizado, cuyo destino natural es el
transporte público, por lo tanto el uso en este caso, importa además un cobro de dinero, ello, por cuanto
la facultad de goce, de percibir los frutos, en este caso de subarrendar, fue expresamente limitada en el
contrato. De esa manera, el dueño quedó con la facultad de disposición y de goce; y el arrendatario,
como mero tenedor, con el derecho a usar el bien mueble en los términos señalados previamente. De
ahí que entre ellos, y solo entre ellos, se conviniera la traslación de los riesgos derivados del uso al
arrendatario, más dicha traslación, privada, contractual, no altera norma legal alguna y en particular,
aquellas que derivan de la responsabilidad extracontractual del Código Civil y de las normas especiales
de responsabilidad de la ley del tránsito, en particular la norma del artículo 174 de la Ley Nº 18.290
vigente al momento de los hechos (Considerando 27).
Excepciones de pago y de contrato no cumplido. Cada uno de los que han contraído unidamente una obligación
indivisible, es obligado a satisfacerla en el todo, aunque no se haya estipulado solidaridad
Fecha: 12/09/2014
Rol: 910-2014
Sumario
Si bien es cierto en el contrato de arrendamiento suscrito (...) Las partes pactaron expresamente la
indivisibilidad de todas y cada una de las obligaciones que emanan del contrato lo que implica, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 1527 del Código Civil, que cada uno de los que han
contraído unidamente una obligación indivisible, es obligado a satisfacerla en el todo, aunque no se
haya estipulado solidaridad, y cada uno de los acreedores tiene derecho a exigir el total, sin embargo las
estipulaciones del contrato deben ser aplicadas en forma armónica, de tal manera que el examen del
mismo no puede efectuarse en forma parcial sino vinculando una cláusula con otra. (Considerando 5º).
Corte Suprema
Fecha: 02/09/2014
Rol: 447-2014
Sumario
Corte Suprema
Arrendamiento de predios rústicos. Arrendatario debe probar el hecho positivo de estar al día en el pago de las
rentas de arrendamiento, obligar al demandado a probar la mora en la solución de dicha obligación contractual,
significaría que éste acredite un hecho negativo
Fecha: 01/09/2014
Rol: 14272-2014
Sumario
La lectura de la sentencia permite advertir que los sentenciadores hicieron una correcta aplicación de
la normativa atinente al caso de que se trata, de modo tal que no incurrieron en contravención legal, al
tener por acreditado que la parte demandante no dio cumplimiento a su obligación de pagar la renta
pactada en el contrato de arrendamiento, la que es actualmente exigible, y que no se probó que la parte
demandada opuso la excepción de contrato no cumplido de mala fe. En efecto, no puede entenderse
vulnerada la regla de onus probandi contenida en el artículo 1698 del Código Civil, como se denuncia,
ya que, en un caso como el propuesto, correspondía al demandante probar el hecho positivo de que
estaba al día en el pago de las rentas de arrendamiento; pues obligar al demandado a probar la mora en
la solución de dicha obligación contractual, significaría, en la práctica, imponerle que acredite un hecho
negativo. Además, en lo que concierne a la transgresión del procedimiento especial de reconvención de
pago regulado en el artículo 11 del Decreto Ley Nº 993, de 1975, el recurso no puede prosperar, ya que
tal disposición legal no tiene el carácter de norma decisoria litis cuya contravención puede ser
subsanada por la vía de la nulidad intentada (Considerando 6º).
Carta término del contrato de arrendamiento. Extinción del contrato por expiración del término estipulado para la
duración del mismo. Procede acoger la demanda de restitución al acreditarse que el arrendador tomó conocimiento
oportuno de la decisión de no perseverar en el contrato
Fecha: 29/08/2014
Rol: 111-2014
Sumario
No obstante que la demandada incorporó a fojas 239 un documento que contiene la variación del
índice de precios al consumidor entre el mes de julio de 1997 y junio de 2012, argumentando que el
hecho que su parte hubiese comenzado a pagar en el mes de julio del año 2012 una renta de $ 750.000,
ello no implica una modificación al contrato, sino una "aceptación" del aumento de la renta de acuerdo a
lo estipulado en el contrato, reconociendo de este modo tácitamente haber tomado conocimiento de tal
alza y consecuencialmente de la carta en que a la sociedad demandada se le comunicaba el término del
contrato de arrendamiento que la unía a la actora, pues como se dijo precedentemente, no es posible
que haya tomado conocimiento de solo una de las materias referidas en la misiva que le fue dirigida. En
consecuencia, estos juzgadores estiman que habiendo puesto la actora, en conocimiento de la
demandada su deseo de no perseverar en el contrato de arrendamiento que las unía, en conformidad a
lo estipulado por ellas en la cláusula cuarta del mismo, tal contrato se extinguió el 19 de junio de 2012
por expiración del término estipulado para la duración del mismo, independientemente que la cartas
comunicando tal decisión fuesen dirigidas a una persona, que a esa fecha, no tenía la calidad de socio
ni menos de representante legal de la empresa demandada, la cual aparece expresamente
individualizada en las referidas misivas, de las cuales, como se expresó, la demandada tomó oportuno
conocimiento; razón por la cual la demanda de restitución de la propiedad deberá ser acogida
(Considerandos 7º y 8º).
Cláusula penal es una elemento accidental de los actos jurídico. No constituye cláusula penal encubierta la
pretensión de la actora de exigir el cumplimiento de las obligaciones principales
Fecha: 29/08/2014
Rol: 3751-2014
Sumario
Una cláusula penal es un elemento accidental de los actos jurídicos, esto es, aquellas estipulaciones
que ni esencial ni naturalmente le pertenecen a un contrato, y que se le agregan por medio de cláusulas
especiales. Como sostiene el autor Hernán Corral "(el) pacto de una cláusula penal, sea sustitutiva,
indemnizatoria o moratoria, no implica la renuncia a la acción resolutoria. Por muy enfática que sea la
redacción en el sentido de que en caso de incumplimiento procederá tal o cual pena, no puede
deducirse de ello que el acreedor ha renunciado a la resolución del contrato para sólo quedarse con el
derecho a pedir la pena" (Corral Talciani, Hernán. "La cláusula penal en la resolución de contrato".
Publicado en Estudios Jurídicos en homenaje a Pablo Rodríguez Grez, Enrique Alcalde y Hugo Fábrega
(coord.), Universidad del Desarrollo, Santiago, 2009, pp. 331-360). Con arreglo a los argumentos que se
han expuesto (...), no cabe calificar como cláusula penal encubierta, ni de ningún otro modo análogo, la
pretensión de la actora de exigir el cumplimiento de las obligaciones principales que el contrato de
arrendamiento impone al locatario mediante la reclamación de los perjuicios derivados de la inejecución
imputable al arrendatario por el término anticipado del contrato a plazo fijo, de modo que su libelo
pretensor, en ese extremo, se acogerá. (Considerandos 2º, 3º y 4º).
Terminación del contrato de arrendamiento por falta de pago de la renta. I. Canon de arrendamiento no puede
ser determinado en base "al arbitrio de uno de los contratantes". II. Acción principal rechazada por no existir rentas
impagas. Acciones referidas al pago de consumos dependen o acceden a la acción principal
Fecha: 26/08/2014
Rol: 283-2014
Examinada la misiva a que se refiere la motivación precedente (que indica, el alza unilateral del
arrendador del canon de arrendamiento), bajo la óptica que exige la naturaleza consensual del contrato
de arrendamiento, se llega a la conclusión que tal alza carece de valor, pues, como se consigna en el
fundamento noveno del fallo que se revisa, el canon de arrendamiento o precio, puede ser determinado
de los mismos modos que en el contrato de compraventa, y a propósito de la regulación de este último
contrato, el inciso final del artículo 1809 del Código Civil, proscribe expresamente su determinación en
base "al arbitrio de uno de los contratantes" de esta forma, ante la inexistencia en el contrato (de
arrendamiento) de marras de alguna cláusula que se refiriera al incremento futuro de dicha prestación —
al margen de aquella única contenida en su cláusula cuarta—, era carga del arrendador acreditar que el
nuevo precio establecido no era fruto de su sola voluntad, sino del acuerdo de los contratantes, lo que
no hizo. Es más, sus propios dichos, contenidos en la demanda y en la carta, así como la declaración de
sus testigos, demuestran lo contrario. De este modo, habiéndose además reconocido por el actor que
hasta el momento de presentar su demanda, el último canon o precio determinado por las partes, se
encontraba íntegra y oportunamente pagado, forzoso resulta desestimar la acción deducida en lo
principal, de terminación inmediata del contrato de arrendamiento por falta de pago de la renta,
precisamente por no existir rentas impagas, en cuanto al incumplimiento contractual sustentado en la
falta de pago de los derechos por extracción de basura, cabe tener presente que, si bien el artículo 10
de la Ley Nº 18.101, permite adicionar a la acción de término del contrato de arrendamiento por falta de
pago de la renta —en conformidad a lo dispuesto en el artículo 1977 del Código Civil—, aquellas
acciones referidas al pago de consumos, gastos de servicios comunes y otras prestaciones análogas
que se adeuden, no es menos cierto que las mismas dependen o acceden a la acción principal y en
consecuencia, deben seguir la suerte de aquella, lo anterior sin perjuicio del pago que de tal obligación
ha efectuado el arrendatario, y de los que debe efectuar hasta el término efectivo del contrato y
restitución de la propiedad, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 6º de la Ley Nº 18.101
(Considerando 5º a 8º).
No procede que empresa sanitaria corte el suministro de agua potable, a petición del arrendador, sustentado en
la mora por parte del arrendatario en el pago de la renta de inmueble
Fecha: 22/08/2014
Rol: 190-2014
Sumario
El acto de corte del suministro de agua potable efectuado por (...) A petición del arrendador
sustentado en que el arrendatario está en mora en el pago de la renta del inmueble respectivo, es un
acto ilegal y arbitrario por cuanto el contrato de suministro y la ley establecen con claridad cuáles son las
causales que ameritan el corte del suministro de agua potable, dentro de las cuales no se encuentra la
situación de autos, teniendo el arrendador otros medios para resguardar sus derechos. Este acto ilegal y
arbitrario ha perturbado al recurrente en calidad de arrendatario, y se han conculcado las garantías
constitucionales mencionadas dado que el corte del suministro de agua potable en la propiedad
arrendada produjo una perturbación a la vida de las personas que viven en dicho lugar privándolas de
un vital elemento para el desarrollo y vida normal de una familia, como también se ha conculcado el
derecho de propiedad que protege el derecho del arrendatario de usar y gozar del inmueble arrendado
en forma pacífica y sin perturbaciones, considerando que en ese predio viven personas adultas, niños y
animales para quienes el agua es indispensable, ocasionándoles un daño o perturbación de carácter
físico y psíquico (Considerandos 8º y 9º).
Corte Suprema
Terminación de contrato, acogida. Contrato de prestación de servicios. Cláusula que reviste el carácter de pacto
comisorio simple, cláusula penal y renuncia del prestador del servicio a pedir la resolución
Fecha: 21/08/2014
Rol: 212-2013
Sumario
Habiendo celebrado las partes una cláusula que reza: "En caso de incumplimiento de cualquiera de
las obligaciones que la prestadora del servicio asume por el presente contrato y sus anexos, el otro
contratante podrá poner término anticipado al presente contrato debiendo en este caso la primera
restituir al segundo todos los valores que le hubiere anticipado a cuenta del precio hasta la fecha de
término del contrato, los jueces del fondo concluyen que se trata de un pacto comisorio simple, de una
cláusula penal y de una renuncia por parte de la prestadora del servicio a pedir la resolución del
contrato. Lo primero, porque se trata de una facultad que sólo se otorga al cliente en el caso de
incumplimiento de la prestadora del servicio, consistente en decidir si perseveraba o no en el contrato,
pareciendo razonable colegir que la intención de los contratantes era que se ocurriera ante el juez para
que así se declarara, toda vez que la sanción de restituir todo lo recibido por concepto de precio del
contrato amerita que sea un juez quien establezca el hecho del incumplimiento. Lo segundo lo constatan
en razón de la naturaleza del contrato, de tracto sucesivo y de ejecución diferida, ya que, como tal, su
resolución o, más propiamente, su terminación, opera hacia el futuro y no tiene efecto retroactivo, de
modo que la restitución de los valores anticipados a cuenta del precio corresponde a la avaluación
anticipada de los perjuicios que acarrea el incumplimiento de la obligación de la prestadora del servicio.
De otra manera, tal restitución excedería el efecto propio que produce la declaración de terminación, no
pudiendo atribuírsele el carácter de prestación restitutoria. Y lo tercero, lo infieren del contexto general
del contrato, concluyendo que la circunstancia de establecer una facultad sólo a favor del cliente y la
renuncia a demandar la resolución por parte de la prestadora del servicio es legítima y concordante con
el propósito perseguido por las partes (considerando 17 de la sentencia de la Corte Suprema).
Termino del contrato de arrendamiento por culpa del arrendatario, será este obligado al pago de la indemnización
de los perjuicios
Fecha: 14/08/2014
Rol: 3984-2014
Sumario
El artículo 1945 del Código Civil, dispone que cuando por culpa del arrendatario se pone término al
arrendamiento, será el arrendatario obligado a la indemnización de perjuicios, y especialmente al pago
de la renta por el tiempo que falte hasta el día en que desahuciando hubiera podido hacer cesar el
arriendo, o en que el arriendo hubiera terminado sin desahucio. En consecuencia habiéndose dado lugar
al término del contrato de arrendamiento por culpa del arrendatario, corresponde hacer lugar a la
pretensión de que se condene a la demandada al pago de todas aquellas rentas que se hubieren
devengado hasta el término del contrato sin desahucio (Considerandos 13 y 14).
Indemnización de perjuicios por responsabilidad contractual. Daño emergente y lucro cesante son igualmente
indemnizables. El lucro cesante, para ser indemnizable, debe ser cierto y probable
Fecha: 13/08/2014
Rol: 13-2014
Sumario
Para otorgar un lucro cesante, como el demandado, no es tan fácil, como lo indica el actor (...). Como
señala el profesor Fernando Fueyo L., en su libro Cumplimiento e Incumplimiento de las Obligaciones,
Edit. Jurídica de Chile, p. 465, tercera edición, año 2004, para llegar a la conclusión de ser presumible
una cierta utilidad frustrada que se intenta contrarrestar con una resarcibilidad calculada
estimativamente, se puede amparar en el auxilio de las presunciones, pero, del mérito de los
documentos aportados por el actor —única prueba en la que funda su pretensión—, no se le puede dar
el carácter de graves, precisas y concordantes, por lo que, en definitiva, la sentencia se revocará en
este capítulo. (Considerandos 7º y 8º).
Corte Suprema
La indemnización de perjuicios no solo la puede pedir el que es dueño o poseedor de la cosa que ha sufrido
daño, o su heredero, sino el usufructuario, el habitador o el usuario, lo que al no ser taxativo, se hace extensible al
arrendatario
Fecha: 12/08/2014
Rol: 13390-2014
Cita online: CL/JUR/5469/2014
Sumario
Se observa que los sentenciadores han hecho una correcta interpretación y aplicación de la
normativa atinente al caso de que se trata, pues ello no solo se desprende del análisis del artículo 2315
del Código Civil, sino también porque así se estipuló en el contrato de arrendamiento con opción de
compra acompañado en estos autos. Luego, contrariamente a lo afirmado por el recurrente, la
preceptiva que se denuncia vulnerada, ha sido, en lo pertinente, correctamente acatada, lo que
determina concluir que el recurso de casación en el fondo deducido por la parte demandada no podrá
prosperar, toda vez que adolece de manifiesta falta de fundamento. (Considerando 4º).
Corte Suprema
Mera restitución del inmueble arrendado no tiene la virtud de poner término al contrato si éste había sido
renovado
Fecha: 05/08/2014
Rol: 11820-2014
Sumario
La lectura del libelo que se examina permite advertir que los sentenciadores hicieron una correcta
aplicación de la normativa atinente al caso de que se trata, de modo tal que no incurrieron en infracción
legal que influya, sustancialmente, en lo dispositivo del fallo. En efecto, quedó establecido por los
tribunales del fondo que el arrendatario no dio cumplimiento a las exigencias establecidas en el contrato
de arriendo para evitar un nuevo periodo bajo las mismas condiciones, por lo que, como se renovó, la
mera restitución del inmueble arrendado no tuvo la virtud de poner término al contrato celebrado; todo
conforme lo dispone el artículo 1956 inciso 3º del Código Civil. Por ende, es necesario concluir que la
alegación efectuada por la recurrente carece de sustento jurídico, por lo que el recurso de casación en
el fondo deducido debe ser desestimado por adolecer de manifiesta falta de fundamento
(Considerandos 3º y 4º).
Incumplimiento contrato de opción. Interpretación contractual. Contrato corresponde a una promesa unilateral de
arrendamiento, sujeta a una condición y no a un contrato de opción. Rechazo indemnización de perjuicios. Recurso
de queja. Finalidad. Faltas o abusos que se invoquen e imputen al recurrido no pueden consistir en una mera
discrepancia de lo que se resuelve
Fecha: 05/08/2014
Rol: 5716-2013
Cita online: CL/JUR/5211/2014
Sumario
Fecha: 24/07/2014
Rol: 54-2014
Sumario
Conforme la modalidad de ejecución del contrato de arrendamiento, el mismo se celebró con un pago
adelantado sin condición de retractación o sujeción a condición alguna que impida estimar tal pago
como renta efectivamente percibida. La última renovación del año 2009 negociada entre las partes
condicionó la duración mínima del contrato hasta 2017 a su pago anticipado. De tal suerte, una asumió
en los hechos percibir un pago único anticipado y la otra garantiza su derecho a usar del inmueble y
realizar en el mismo las modificaciones que tal céntrica propiedad en la capital regional pudiera requerir.
No existe duda entonces que las rentas fueron devengadas, sino que además efectivamente
incorporadas al patrimonio de la contribuyente como una renta que exige su correlativa declaración y
pago si procediera. También como efecto correlativo al anticipar al pago y sin haber negociado con la
arrendataria que ésta asumía la carga de las contribuciones, no puede en los ejercicios tributarios
futuros valerse de estos pagos para imputarlos como un gasto para producir la renta pasada. Lo
anterior, dada la extensión del contrato previo y la condición de rentista inmobiliaria de la contribuyente
debió ser objeto de su consideración para los fines de negociar esta modificación del contrato, no
resultado imputable a la administración tributaria tan básico yerro. Las argumentaciones del
contribuyente que asilándose en una regla de excepción a las rentas percibidas, pretende dotar a este
único ingreso y pago por la sola consideración que el contrato del cual proceden es uno de
arrendamiento, no se condicen con la propia justificación de las interpretaciones de la autoridad
tributaria, ni menos con los hechos probados. Por una parte, la circular Nº 17 del SII deja de manifiesto
que las rentas percibidas que provienen de un contrato que dé cuenta de una operación generadora de
rentas a largo plazo, están en posición de excepción. La misma circular ejemplifica como casos de
contratos de larga ejecución aquellos referidos a construcciones cuyos costos o gastos se ajustan
durante la ejecución del mismo. El presente es un contrato de tracto sucesivo, de larga data, pero no
encuadra en los criterios de excepción como aquellos a los que la jurisprudencia administrativa refiere.
Los gastos generales e incluso aquellos que exceden a las reformas locativas han sido asumidos por la
arrendataria (construcciones en patios, habilitaciones de estacionamientos internos, equipos de aire
acondicionado para un local) por lo que malamente se puede asumir que el devenir en la ejecución del
contrato imponga un desembolso superior a la contribuyente arrendataria que supere el pago de las
contribuciones, del todo conocidas y perfectamente posibles de haber sido parte de la negociación de la
renovación del arriendo, lo que no aconteció. El contrato en análisis ha dejado claramente señalado que
el precio de arriendo se pagó por adelantado hasta 2017, sin dejar en él salvedad alguna sobre forma de
término anticipado o restituciones por efecto de obras y mejoras introducidas. Tratándose además lo
arrendado de un inmueble ocupado y transformado por el banco ya desde 2000 (sin contar con el
tiempo previo en el que ya lo ocupaba el banco Concepción), se descarta que la cosa no estuviere en
condición material o jurídica de ser usada, o que las mejoras o arreglos que realizara el arrendatario
desnaturalizara o condicionara tal pago realizado. Incluso en el caso que las partes resolvieren
desconocer el mérito de la condición esencial de duración y pago anticipado, la restitución que de este
pago debiere hacer la señora (contribuyente) sería bajo fórmula contractual o judicial que la habilitaría
para ese año tributario futuro o eventual a los ajustes a su contabilidad conforme los resultados de sus
negocios como rentista inmobiliaria. Lo mismo puede predicarse para el caso que el inmueble se
perdiera material o jurídicamente para su dueña y usufructuaria por un caso fortuito o fuerza mayor
(Considerandos 7º y 8º).
Terminación inmediata de arrendamiento por no pago rentas. Si ambas partes son particulares no es aplicable el
artículo 2º de la Ley Nº 18.101. Corresponde al arrendatario acreditar el pago de las rentas
Fecha: 22/07/2014
Rol: 89-2014
Sumario
Arrendador vulnera derecho de propiedad de su arrendatario al privarlo del suministro eléctrico. No se permite el
uso regular y continuo del bien tomado en arriendo
Fecha: 18/07/2014
Rol: 501-2014
Sumario
Debe acogerse el presente recurso con la finalidad de restablecer el imperio del derecho, en la forma
que se indicará en lo resolutivo, puesto que privar al recurrente de un elemento básico como es el
suministro eléctrico vulnera la garantía del derecho de propiedad al no permitirle el uso regular y
continuo de la cabaña que tomó en arriendo, y asimismo la garantía del Nº 1 del artículo 19 de la
Constitución Política de la República, ya que se vulnera la integridad física y síquica de las personas
que habitan la cabaña, sobre todo si se tiene en consideración la situación que afecta al hijo del
recurrente, quien debe concurrir a las citaciones con la profesional que se menciona en el documento de
fojas 3 y en ello en el marco de la medida de protección de que fue objeto (Considerando 4º).
Corte Suprema
Fecha: 17/07/2014
Rol: 15265-2014
Sumario
Cabe considerar que incluso teniendo por obligaciones incumplidas las señaladas por el recurrente,
los errores de derecho denunciados carecen de influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, desde
que no permiten variar la decisión a la que llegaron los jueces del fondo en orden al rechazo de la
demanda de resolución de contrato de arrendamiento, por haberse determinado que esas obligaciones
no son esenciales (arrendatario no se obligó a usar efectivamente el inmueble, local comercial, a fin de
facilitar o aumentar la plusvalía de los restantes locales comerciales). Por consiguiente, puesta esta
corte en la situación de tener que dictar sentencia de reemplazo, advierte que no quedaría en posición
de confirmar el fallo del a quo acogiendo la demanda, puesto que, como se estableció en el fallo en
alzada, las obligaciones de la esencia son el precio y la cosa entregada; acordándose por las partes que
la cosa se entrega para ser usada según el destino previsto para este tipo de local comercial y que su
estado de conservación debía garantizarse para el evento de su restitución al arrendador. Lo razonado
es suficiente para concluir que el recurso en estudio no podrá prosperar, por adolecer de manifiesta falta
de fundamento (Considerandos 6º y 7º).
No existe falta de resolución del juez del asunto jurídico planteado. Falta de buena fe en la ejecución del contrato
Fecha: 08/07/2014
Rol: 5194-2013
Sumario
El asunto controvertido queda fijado por las acciones promovidas por el actor, por las excepciones
opuestas por el demandado, por la reconvención lo que el fallo aborda y decide pues contiene la
apreciación y pronunciamiento separado de cada uno de ellas, sin que sea necesario que se pronuncie
acerca de las simples defensas invocadas por el demandado al solicitar el rechazo de la demanda,
como parece entenderlo el demandado. En efecto, al acogerse parcialmente la acción de cobro de
rentas y multa se entienden rechazada la falta de legitimidad activa y además la omisión de los
razonamientos que sustenten la decisión —que en concreto reprocha el demandado— no configura esta
causal, desde que por este motivo de nulidad se persigue sancionar la falta de resolución del juez del
asunto jurídico planteado, pero no el mérito (...). (Considerando 5º de la sentencia de casación). El actor
en el juicio seguido con anterioridad contra la misma demandada invocó la causal de término de
contrato de arrendamiento prevista en el artículo 1950 Nº 3 del Código Civil, esto es, extinción del
derecho del arrendador y, por tanto, en calidad de propietario del inmueble el actor accionó para obtener
su restitución y el pago de rentas de ocupación, es decir, no acudió a la "subrogación" pactada en la
compraventa y tampoco consintió en perseverar en el arrendamiento a esa data vigente. En el contexto
analizado, la posición jurídica del demandante en este proceso atenta y contradice la conducta
desplegada en el juicio anterior (...), una vez declarado el abandono de procedimiento en el primer juicio,
desconociendo su propia tesis, ahora esgrime la vigencia del vínculo contractual, precisamente, como
fuente de obligaciones para perseguir el pago no solo de las rentas sino también de las multas pactadas
con el arrendador. La conducta descrita trasgrede la buena fe como principio general del derecho el que
debe ser respetado por los litigantes en sus relaciones jurídico procesales. Por consiguiente, la posición
de los demandantes debe ser rechazada lo que lleva necesariamente el rechazo de la acción intentada.
(Considerando 8º de la sentencia de apelación).
Ficha 27 Antecedentes del fallo
Terminación de contrato de arriendo por no pago de rentas. Notificación efectuada a la arrendataria en el local
comercial arrendado es válida. Presunción establecida en el artículo 8º Nº 2 de la Ley Nº 18.101 es una presunción
de derecho y no admite prueba en contrario
Fecha: 07/07/2014
Rol: 3059-2014
Sumario
Arrendatario está obligado a pagar los gastos comunes hasta que efectúe la restitución del inmueble.
Arrendatario debe probar que cumplió con el pago, monto pagado y fecha en que realizó el mismo
Fecha: 04/07/2014
Rol: 3643-2014
Sumario
El artículo 6º de la Ley Nº 18.101, dispone que cuando el arrendamiento termine por la expiración del
tiempo estipulado para su duración, por la extinción del derecho del arrendador o por cualquier otra
causa, el arrendatario continuará obligado a pagar la renta de arrendamiento y los gastos por servicios
comunes que sean de su cargo, hasta que efectúe la restitución del inmueble. El demandante
reconvencional reclama el pago de los gastos comunes que no fueron cubiertos por su arrendatario, a
partir del mes de agosto de 2013, manifestando que solo pagó los pertinentes a los meses de junio y
julio; el tribunal de la instancia, recibió tal pretensión a prueba, recayendo la carga de probar sobre el
arrendatario, esto es, si cumplió con el pago y, hecho, el monto pagado y fecha en que se realizó. De
modo que corresponde, en este acápite, acceder a la demanda reconvencional, esto es el pago de los
gastos comunes que corren entre el mes de agosto de 2013 a la fecha en que se efectúe la restitución y
su pago; se debe tener como base para su cálculo la suma pagada por tal concepto en el mes de julio
de 2013, esto es la suma de $ 61.136, para cada periodo, más el reajuste previsto en el artículo 21 de la
Ley Nº 18.101 (Considerando 4º).
Fecha: 02/07/2014
Rol: 69-2014
Sumario
No puede estarse al tenor literal de aquélla (cláusula contractual interpretada), en el sentido a que se
refiere el artículo 1545 del Código Civil, esto es, de ser una ley para las partes. En efecto, de los
antecedentes consignados precedentemente, corresponde acudir a la interpretación práctica que las
partes hayan hecho de la cláusula en cuestión, según lo previsto en el artículo 1564 inciso final; ello por
cuanto, según lo sostenido por la Excma. Corte Suprema corresponde "a la manera como ellas han
entendido y ejecutado el contrato (___) puede entonces sostenerse que la aplicación práctica que se
haya dado a las estipulaciones de un contrato, determina y fija el significado y sentido que las partes
han querido otorgarles". (C. Suprema, 28 de noviembre de 1988. R., t. 85, sec. 3ª, p. 183 -c .6ª, p. 185).
Conforme a lo antes razonado, corresponde dar por íntegramente pagados los reajustes
correspondientes a las rentas de arrendamiento que no quedaron cubiertos con la excepción de
prescripción acogida por el tribunal de primer grado. La aplicación práctica que las partes otorgaron a la
cláusula de reajustes, se encuentra en perfecta armonía con lo que establece la presunción iuris tantum
de pago íntegro, esto es, que con el pago de la renta de arrendamiento iba incluido el reajuste pactado.
En efecto, el inciso 2º del artículo 1595 del Código Civil dispone: "si el acreedor otorga carta de pago del
capital sin mencionar los intereses, se presumen éstos pagados". Finalmente, como el arrendatario no
se encontraba en mora, resulta del todo inaplicable la regla supletoria prevista en el artículo 21 de la Ley
Nº 18.101, acerca de los reajustes. (Considerandos 6º, 7º, 8º y 9º).
Corte Suprema
Fecha: 01/07/2014
Rol: 316-2014
Sumario
Los jueces del fondo concluyeron que, habiendo pagado las rentas insolutas el demandado al
momento de hacerse la segunda reconvención de pago en el comparendo de estilo, lo demandado
principalmente fue resuelto a entera satisfacción de las partes; agregando que la tenencia por el
demandado del inmueble continúa justificada por el contrato de promesa de compraventa que celebró
con la actora, el que resulta ser la convención principal celebrada por los litigantes y al que accede el
contrato de arrendamiento, circunstancia de la que deriva la impertinencia de reclamar la restitución del
bien raíz sobre la base del desahucio del contrato de arriendo, pues este último no constituye la
justificación de la tenencia. Esta conclusión ha sido el resultado de la interpretación que se ha dado a
las cláusulas contractuales que ligaron a los contendientes, considerando al contrato de promesa de
compraventa como de índole principal y al contrato de arrendamiento, como accesorio de aquél,
conforme al artículo 1442 del Código Civil, de modo que, encontrándose vigente la convención
promisoria, resulta improcedente pretender la terminación del contrato accesorio por la vía de la
resolución del mismo. Los sentenciadores estuvieron a la voluntad real de las partes fehacientemente
reflejada en el contrato que se hace valer en autos, pues claramente los litigantes tuvieron en vista
ligarse por medio de una promesa de compraventa respecto del inmueble de propiedad de la actora, es
decir, quisieron, la demandante, vender, ceder y transferir su bien raíz y, el demandado, comprar y
aceptar dicho inmueble; luego, como consecuencia de dicha promesa de compraventa, acuerdan que el
objeto de esa promesa le sea entregado al promitente comprador, quien se obliga a pagar una
determinada suma de dinero mientras ostente la tenencia del inmueble sin tener la calidad de dueño del
mismo. Dicho de otro modo, de no haberse prometido la compraventa del bien raíz, el demandado no
ostentaría su tenencia, ya que no cabe duda que la intención primigenia de la actora fue vender su
propiedad y concertó con el demandando la entrega de la cosa anticipadamente, pero generando el
pago de determinada cantidad de dinero, lo que constituye una situación equivalente para ambas partes.
Uno entrega la cosa antes de celebrar el contrato definitivo por lo que recibe una contraprestación en
dinero y, el otro, paga un cierto precio, a cambio de ostentar la tenencia de la que de otra manera
carecería (Considerando 3º a 5º).
Fecha: 01/07/2014
Rol: 7573-2013
Sumario
Fecha: 20/06/2014
Rol: 270-2014
Sumario
Lo procedente dado que el contrato era de plazo fijo debió intentarse la acción de restitución
contemplada en el artículo 4º de la Ley Nº 18.101 la que procede una vez expirado el plazo de vigencia
del mismo. La juez a quo no pudo haber acogido la acción de desahucio interpuesta, debiendo haberse
deducido por la actora la de restitución del artículo 4º de la Ley Nº 18.101 en la fecha correspondiente,
esto es, vencido el plazo de vigencia si no ha ocurrido alguna de las situaciones previstas en el contrato
de arrendamiento que permiten poner término de inmediato al contrato. (Considerandos 4º y 5º).
Terminación del contrato de arrendamiento. Incumplimiento que no se puede atribuir a la culpa de la arrendataria
Fecha: 17/06/2014
Rol: 1737-2013
Sumario
El primer requisito de la responsabilidad civil contractual consiste en que el deudor no ha cumplido
una obligación o ha cumplido ésta imperfecta o tardíamente. En el caso sub judice, no se advierte el
incumplimiento culpable de la arrendadora y que la actora le imputa. No existe discrepancia entre
establecer que la arrendataria nunca pudo explotar comercialmente el local, debido a que tampoco pudo
realizar cabalmente las obras que el contrato le imponía y sostener que, la conducta de la arrendadora
se ha ajustado al amplísimo marco de atribuciones que le confería el contrato, criterio que la corte
comparte; por lo que el fallo en revisión ha de ser confirmado. (Considerandos 4º y 5º).
Fecha: 11/06/2014
Rol: 52-2014
Sumario
Resulta pertinente recordar que el artículo 1568 del Código Civil establece que "el pago efectivo es la
prestación de lo que se debe", y el artículo 1569 señala que "el pago se hará bajo todos respectos en
conformidad al tenor de la obligación; sin perjuicio de lo que en casos especiales dispongan las leyes" y
en estos autos la acción intentada es de terminación de contrato de arrendamiento por no pago de
rentas; así, el contrato celebrado entre las partes establece que el pago de la renta "deberá pagarse por
mensualidades anticipadas dentro de los cinco primeros días de cada mes calendario" y que "el simple
retardo en el pago de la renta de arrendamiento constituirá al arrendatario en mora, debiendo pagar una
multa ascendente al veinte por ciento de la renta mensual. Si el retardo en el pago de la renta excede de
diez días, o si se repite por dos veces, será motivo plausible para poner fin al contrato de
arrendamiento" (Considerando 2º).
Terminación y desahucio del contrato de arrendamiento. Forma en que debe efectuarse el desahucio
Fecha: 05/06/2014
Rol: 1207-2013
Sumario
Sanción adoptada por comunidad. Arrendatarios de locales comerciales ubicados dentro de comunidad están
obligados a respetar y cumplir las normas del reglamento de copropiedad. Actividad económica reconocida por
recurrente infringe el reglamento de copropiedad. Sanciones aplicadas no son arbitrarias ni ilegales desde que se
encuentran establecidas en normativa interna
Fecha: 22/05/2014
Rol: 54-2014
Sumario
Es incuestionable que las recurrentes ejercen una actividad comercial en los locales ya
singularizados, ubicados en el interior del recinto comunidad Feria Lo Valledor, y por lo mismo, en su
condición de titulares de derechos sobre ellos, conforme clara y categóricamente se indica en el
artículo 6º del reglamento de copropiedad y reconoce especialmente en los contratos de arrendamiento
celebrados por ellas respecto de dichos locales, se encuentran expresa y palmariamente obligadas a
respetar y cumplir las normas de dicho estatuto. Entre ellas, el uso y/o actividad a los que pueden ser
destinados tales establecimientos (Considerando 8º). Necesariamente ha de concluirse que la actividad
económica reconocida por las recurrentes, consistente en la mantención, funcionamiento y operación de
dichas máquinas, en locales emplazados en el interior del recinto particular, comunidad Feria Lo
Valledor, ciertamente infringe el artículo 18 del precitado reglamento de copropiedad, infracción que a su
turno se encuentra expresamente sancionada en el artículo 19 del aludido estatuto, cuya aplicación o
imposición se encuentra entregada o es de competencia del consejo de administración, facultad que
éste puede delegar en el administrador, y, en este caso, además, por decisión de la asamblea de
copropietarios, se encuentran aprobadas y ratificadas todas las medidas adoptadas por dichos órganos
a fin de hacer respetar el reglamento, particularmente en lo que al comercio o ejercicio de actividades
relacionadas con máquinas de juego se refiere (Considerando 10).
Fecha: 07/05/2014
Rol: 1676-2013
Fecha: 29/04/2014
Rol: 65-2014
Sumario
El obrar del recurrido, consistente en no permitirle al recurrente el acceso al predio arrendado por la
entrada temporal que se había construido, debe ser calificado como un acto de autotutela no amparado
por el derecho y, por ende, arbitrario e ilegal, que lesiona la garantía que la Constitución Política de la
República reconoce al actor en el Nº 24 del artículo 19 de nuestra carta fundamental. (Considerando 9º).
Fecha: 10/04/2014
Rol: 7209-2013
Sumario
El actor no demanda la restitución del inmueble ni el pago de las rentas a título de ocupación, sino el
cumplimiento por equivalencia de lo pactado. Así las cosas, si el arrendador otorgó efectos jurídicos a la
comunicación de 26 de diciembre de 2012, cual es, entender que el contrato expiró por culpa del
arrendatario, este tribunal debe interpretar la declaración de voluntad de la demandada —también
aceptada por ésta— como manifestación concreta de terminar el contrato en forma anticipada, es decir,
por desahucio extrajudicial del arrendatario. Las partes reglamentaron la forma de ejecución del contrato
e igualmente acordaron que cualquiera de los contratantes podría comunicar su decisión de no
perseverar en el mismo. En esas condiciones, resulta evidente que el arrendatario, vigente el contrato
por haber operado la renovación de un nuevo periodo —septiembre de 2013— al proceder en los
términos que lo hizo, incumplió lo pactado por cuanto el aviso de término al concluir el plazo resulta
extemporáneo. En efecto, la comunicación no satisface lo acordado en la cláusula tercera del contrato,
pues se omiten la formalidades previstas —carta certificada al domicilio de la arrendadora en la ciudad
de Santiago— y al estar vigente el contrato por un año a contar del 1 de septiembre de 2012, se tiene
por acreditado la infracción contractual que se imputa a la demandada. Así las cosas, asiste el actor el
derecho a ser indemnizado por el perjuicio patrimonial que el término anticipado del contrato le
ocasiona, esto es, por el monto de las rentas pactadas hasta el día en que el contrato de arrendamiento
habría concluido por la llegada del plazo (Considerandos 5º y 6º).
Juicio de arrendamiento. Obligaciones del contrato de arrendamiento. Obligación del arrendatario de pagar el
precio por la tenencia de la cosa arrendada, en los términos convenidos. Debe ser el deudor de esa obligación quien
debe acreditarlo en el juicio respectivo, conforme lo dispone el artículo 1698 del Código Civil. Sobre el particular, la
demandada no rindió prueba alguna tendiente a acreditar la extinción de la obligación que pesaba en su contra.
Fecha: 02/04/2014
Rol: 6747-2013
Sumario
Conforme con los artículos 1915, 1917 y 1919 del Código Civil, es obligación del arrendatario, en lo
pertinente, pagar el precio por la tenencia de la cosa arrendada, en los términos convenidos, debiendo
ser el deudor de esa obligación quien debe acreditarlo en el juicio respectivo, conforme lo dispone el
artículo 1698 del Código Civil. Sobre el particular, la demandada no rindió prueba alguna tendiente a
acreditar la extinción de la obligación que pesaba en su contra. Aquel incumplimiento de la demandada
le permite a la arrendadora, según lo faculta la cláusula 8ª. Del contrato primitivo, no modificada, a
ponerle fin al vínculo en cuestión, mediando carta certificada en que se le deben hacer presente sus
incumplimientos, trámite cuyo cumplimiento fue llevado a cabo por la actora. Sobre el monto de las
rentas atrasadas se deberá estar a la fijación que hace el actor, tanto en lo relativo al período anterior a
la demanda, como a las posteriores a esa época, ante la falta de prueba que la demandada no satisfizo
en interés de sus derechos y al que se encontraba obligado, al tenor del artículo 1698 del Código Civil.
El compromiso de pagar los consumos básicos de agua potable y electricidad que detalla en el cuerpo
de la demanda, no se han impuesto en el contrato que liga a las partes, ni tampoco ha resultado
justificado con la prueba rendida en juicio, al tiempo que nada ha resultado probado en relación a las
limitaciones de consumo eléctrico que actualmente se imponen para el uso del bien arrendado (cláusula
sexta). Ante el incumplimiento por parte de la arrendataria de obligaciones esenciales del contrato
que unía a las partes, procede dar por terminado el mismo conforme lo dispone el artículo 1977, en
relación al artículo 1489, ambos del Código Civil, así como ordenar la restitución del local arrendado,
más las rentas impaga reclamadas en la demanda y que alcanzan a cuatro millones ochocientos setenta
y cinco mil ochocientos cuarenta y seis pesos ($ 4.875.846), con los incrementos señalados en el
artículo 21 de la Ley Nº 18.101. (Considerandos 2º a 4º)
Ficha 41 Antecedentes del fallo
Terminación contratos de arrendamiento por no pago de rentas. Incumplimiento de contrato. I. Cláusula penal
enorme. II. Plazo para restitución de bienes arrendados necesarios para proceso productivo de empresa
agroindustrial demandada
Fecha: 02/04/2014
Rol: 9890-2013
Sumario
Fecha: 03/03/2014
Rol: 2826-2012
Sumario
Si, por una parte, el contrato de arrendamiento contiene una cláusula que estipula que en el evento
que la parte arrendataria pusiere término anticipado al contrato dentro de los plazos de vigencias que los
obligan, por causas que le fueren imputables, deberá pagar a la parte arrendadora, a título de
indemnización de perjuicios, todas las rentas que faltasen para terminar el período que estuviere en
vigencia y, por otra, no se acreditó por el arrendatario demandado que el término anticipado del contrato
se debiese a responsabilidad de la arrendadora, ni a un acuerdo entre las partes, ni que se haya pagado
de manera efectiva suma alguna por éste, se concluye que el arrendatario queda obligado a solucionar
las rentas de arrendamiento pactado por todo el período de su vigencia, desde la entrega de la
propiedad. La circunstancia de haber documentado el arrendatario las rentas de manera anticipada con
cheques, no es obstáculo a la indemnización de los perjuicios por la que optó la arrendadora
demandante, considerando que además de resultar éstos protestados, carecían de causa al haberse
puesto término al contrato por quien aparece girándolos (Considerandos 1º, 4º y 5º).
Corte Suprema
Nulidad de contrato. Contrato de arrendamiento. Efectos de la nulidad judicialmente declarada entre las partes.
Partes deben ser restituidas al estado en que se hallarían si no hubiese existido el acto o contrato. Improcedencia
que arrendatario pague las rentas con causa en un contrato nulo, pero sin obtener beneficio del bien
Fecha: 20/01/2014
Rol: 5818-2013
Sumario
Los artículos 1687 y 1689 del Código Civil regulan los efectos de la nulidad judicialmente declarada,
sea entre las partes o bien en relación con los terceros. Entre las partes, la primera disposición aludida
es clara cuando dispone que la nulidad judicialmente declarada da derecho a las partes para ser
restituidas al mismo estado en que se hallarían si no hubiese existido el acto o contrato nulo y sin
perjuicio de lo prevenido sobre objeto o causa ilícita. Agrega la norma que en las restituciones mutuas
que hayan de hacerse los contratantes en virtud de este pronunciamiento, será cada cual responsable
de la pérdida de las especies o de su deterioro, de los intereses y frutos, y del abono de las mejoras
necesarias, útiles o voluptuarias, tomándose en consideración los casos fortuitos y la posesión de buena
o mala fe de las partes, todo ello según las reglas generales. Doctrina y jurisprudencia han entendido
que las reglas generales en esta materia son las contenidas en el párrafo de las prestaciones mutuas,
del Título XII del Libro II del Código Civil —artículos 904 y siguientes—. Esto tiene importancia pues este
derecho restitutorio general que concede el artículo 1687, aplicado conforme a las reglas generales,
lleva a que las partes deben restituirse equilibradamente, la una la propiedad y los frutos, y la otra los
gastos en la conservación de la cosa y los costos para producir los frutos, entre otros aspectos. Es decir,
se trata de que las partes de alguna manera resulten razonablemente restituidas de manera justa como
efecto de sus mutuas prestaciones, sin que se deban producir enriquecimientos injustificados de una a
favor de la otra. En el caso de que lo que deba restituirse sea una propiedad por una parte, y dinero por
la otra —precisamente lo que acontece en el caso de autos, donde se declaró nulo un contrato de
arrendamiento—, es interesante advertir que, estando ambas partes de buena fe, resulta razonable y
sensato compensar el uso que la una hizo de la propiedad, con la renta que la otra pagó por ella. Por
ello, se ajusta al artículo 1687 del Código Civil, que se liquide la situación restitutoria de las partes, si
se ha entregado oportunamente la propiedad, dándose por bien recibido el dinero que como renta
percibió el ex arrendador por el período en que la propiedad estuvo en poder del ex arrendatario. En
cambio, atentaría severamente contra la norma referida, que se admitiera que la parte arrendataria
pagara una renta con causa en un contrato declarado nulo, y sin que se beneficie al mismo tiempo del
inmueble. De permitirse una cosa así, precisamente se habría dado eficacia a un contrato que se ha
declarado nulo y con daño patrimonial para una de las partes (Considerando 8º).
Fecha: 07/12/2013
Rol: 2107-2013
Sumario
El artículo 1572 del Código Civil dispone que "puede pagar por el deudor cualquiera persona a
nombre del deudor, aun sin su conocimiento o contra su voluntad, y aun a pesar del acreedor". Luego,
entonces, la circunstancia que un tercero (codeudor solidario), haya efectuado el pago de determinadas
rentas, de las cuales da cuenta la instrumental que rola a fojas 29 y siguientes, resulta indiferente para
el acreedor y no muta el contrato ni las obligaciones entre las partes del mismo, salvo que, como
pareciere entenderlo la demandada, hubiere operado novación por cambio de deudor, olvidando que
para que ésta opere de acuerdo al artículo 1635 del estatuto civil, debe constar la voluntad del acreedor
de dar por libre al primitivo deudor. Luego, entonces, como ocurre en autos, a falta de expresión de esa
voluntad, se entenderá que el tercero es solamente diputado por el deudor para hacer el pago o que
dicho tercero se obliga con él solidaria o subsidiariamente, solidaridad que por lo demás consta de la
cláusula vigésima del contrato de arriendo (Considerando 4º).
Nulidad de contrato. Contrato de arrendamiento. Efectos de la nulidad judicialmente declarada entre las partes.
Partes deben ser restituidas al estado en que se hallarían si no hubiese existido el acto o contrato. Improcedencia
que arrendatario pague las rentas con causa en un contrato nulo, pero sin obtener beneficio del bien
Fecha: 28/06/2013
Rol: 353-2013
Sumario
Los artículos 1687 y 1689 del Código Civil regulan los efectos de la nulidad judicialmente declarada,
sea entre las partes o bien en relación con los terceros. Entre las partes, la primera disposición aludida
es clara cuando dispone que la nulidad judicialmente declarada da derecho a las partes para ser
restituidas al mismo estado en que se hallarían si no hubiese existido el acto o contrato nulo y sin
perjuicio de lo prevenido sobre objeto o causa ilícita. Agrega la norma que en las restituciones mutuas
que hayan de hacerse los contratantes en virtud de este pronunciamiento, será cada cual responsable
de la pérdida de las especies o de su deterioro, de los intereses y frutos, y del abono de las mejoras
necesarias, útiles o voluptuarias, tomándose en consideración los casos fortuitos y la posesión de buena
o mala fe de las partes, todo ello según las reglas generales. Doctrina y jurisprudencia han entendido
que las reglas generales en esta materia son las contenidas en el párrafo de las prestaciones mutuas,
del Título XII del Libro II del Código Civil —artículos 904 y siguientes—. Esto tiene importancia pues este
derecho restitutorio general que concede el artículo 1687, aplicado conforme a las reglas generales,
lleva a que las partes deben restituirse equilibradamente, la una la propiedad y los frutos, y la otra los
gastos en la conservación de la cosa y los costos para producir los frutos, entre otros aspectos. Es decir,
se trata de que las partes de alguna manera resulten razonablemente restituidas de manera justa como
efecto de sus mutuas prestaciones, sin que se deban producir enriquecimientos injustificados de una a
favor de la otra. En el caso de que lo que deba restituirse sea una propiedad por una parte, y dinero por
la otra "precisamente lo que acontece en el caso de autos, donde se declaró nulo un contrato de
arrendamiento", es interesante advertir que, estando ambas partes de buena fe, resulta razonable y
sensato compensar el uso que la una hizo de la propiedad, con la renta que la otra pagó por ella. Por
ello, se ajusta al artículo 1687 del Código Civil, que se liquide la situación restitutoria de las partes, si
se ha entregado oportunamente la propiedad, dándose por bien recibido el dinero que como renta
percibió el ex arrendador por el período en que la propiedad estuvo en poder del ex arrendatario. En
cambio, atentaría severamente contra la norma referida, que se admitiera que la parte arrendataria
pagara una renta con causa en un contrato declarado nulo, y sin que se beneficie al mismo tiempo del
inmueble. De permitirse una cosa así, precisamente se habría dado eficacia a un contrato que se ha
declarado nulo y con daño patrimonial para una de las partes (Considerando 8º de la sentencia de la
Corte Suprema).
Corte Suprema
Restitución de predio agrícola, acogida. Resolución contractual. Pacto comisorio en el Código Civil. Efectos del
pacto comisario calificado estipulado en un contrato diverso a la compraventa o, en ella, pero respecto de
obligaciones diversas a la de pagar el precio. Necesidad de un acto recepticio del contratante diligente. Pacto
comisorio calificado celebrado en un contrato de arrendamiento de predio rústico
Fecha: 21/01/2013
Rol: 5504-2011
Sumario
El arrendamiento de predios rústicos se rige por el D.L. Nº 993, y en lo no previsto por este cuerpo
legal, de carácter especial, le son aplicables las disposiciones legales comunes que rigen los contratos,
en especial las contenidas en el Título XXVI del Libro IV del Código Civil. Se trata de un contrato
dirigido, donde la voluntad y el espíritu del legislador se ha orientado expresamente a limitar la libertad
contractual, ya que las estipulaciones que las partes acuerdan en el ámbito de su reconocida autonomía
de la voluntad deben reconocer también ciertos aspectos mínimos que se corresponden con aquellas
materias que el constituyente ha decidido restar de la esfera de lo que las partes podrían libremente y
sin restricciones convenir en beneficio o perjuicio recíproco o particular. Corresponde aplicar, en forma
supletoria, el artículo 1949 del Código Civil que dispone que para constituir en mora de restituir la cosa
arrendada al arrendatario, será necesario requerimiento del arrendador, aun cuando haya precedido
desahucio, y si requerido no la restituye, será condenado al pleno resarcimiento de todos los perjuicios
de la mora y a lo demás que contra él competa como injusto detentador (Considerandos 10 a 12 de la
sentencia de reemplazo). En la especie, el pacto comisorio calificado fue válidamente acordado por las
partes en el contrato de arrendamiento de predio agrícola, sin embargo, el actor no ejerció la acción
derivada de dicha cláusula cuando se cumplió por primera vez la condición de dejar de pagar las rentas
de arrendamiento. No obstante, al ser el arrendamiento un contrato de tracto sucesivo, la condición
volvió a cumplirse al no pagar la demandada las rentas correspondientes a los últimos tres años previos
a la notificación de la demanda, mediando requerimiento conforme al artículo 1551 Nº 3 del Código Civil.
De lo antedicho se desprende que la acción de restitución del inmueble no se encontraba prescrita, por
no concurrir el presupuesto consistente en el transcurso del plazo, toda vez que el arrendatario recién se
constituyó en mora a partir de la notificación de la demanda. Así las cosas, constituido en mora el
arrendatario, procedía que restituyera al demandante el predio objeto del contrato de arrendamiento,
considerando que éste terminó al haber operado el pacto comisorio allí acordado y por no constar que
hasta la fecha se haya procedido a tal restitución, la demanda debe ser acogida. Asimismo, corresponde
que los demandados indemnicen los perjuicios que la mora hubiere irrogado a la contraria
(Considerandos 13 a 15 de la sentencia de reemplazo).
Ficha 47 Antecedentes del fallo
Arrendatario debe acreditar que pagó rentas de arrendamiento hasta fecha de término del contrato
Fecha: 16/10/2012
Rol: 3261-2011
Sumario
En cuanto al cobro de las rentas de arrendamiento cobradas por la actora, la demandada ha negado
la existencia de la deuda acompañando para ello la prueba documental que se encuentra agregada a
fojas 39 y siguientes, que corresponde a fotocopias de dos cheques a nombre de la actora, girados los
días 6 y 17 del mes de febrero del año 2009; y que según se expresa en un correo electrónico, el último
de ellos estaría referido a la diferencia de la renta del mes de febrero del año 2009. Correspondía a la
demandada acreditar el cumplimiento íntegro de la obligación, es decir, que pagó las rentas de
arrendamiento hasta la fecha de término del contrato, siendo insuficiente la prueba rendida antes
referida, por lo que se accederá a lo pedido en la demanda por este concepto ascendente a la cantidad
de 103,49 unidades de fomento (Considerandos 5º y 6º).
Corte Suprema
Fecha: 30/08/2012
Rol: 3752-2010
Sumario
Solo hecho de continuar pagándose las rentas no puede ser interpretado como una renovación del contrato.
Desahucio no es necesario en caso de haberse fijado tiempo para la duración del arriendo
Fecha: 14/08/2012
Rol: 681-2012
Sumario
Tampoco se configura en el caso sub judice la hipótesis del artículo 1956 del Código Civil, pues es un
hecho no discutido que se comunicó oportunamente la no renovación del contrato de arrendamiento. El
solo hecho de haberse continuado pagando las rentas no puede ser interpretado como una renovación
del contrato, sino solamente constituye cumplimiento de la obligación de continuar pagando la renta por
parte del arrendatario, mientras no restituya el inmueble arrendado. Menos aun, puede el arrendador
invocar en su favor un plazo de desahucio, pues el artículo 1954 del Código Civil dispone que en el caso
de haberse fijado tiempo para la duración del arriendo, no es necesario el desahucio (Considerandos 11
y 12).
Corte Suprema
Transgresiones que denuncia recurrente buscan desvirtuar hechos asentados por jueces del fono mediante el
establecimiento de nuevos hechos lo que no procede por vía de casación
Fecha: 29/06/2012
Rol: 3921-2012
Cita online: CL/JUR/3968/2012
Sumario
Del libelo aparece que las transgresiones que el recurrente estima han cometido los jueces del fondo,
persiguen desvirtuar, mediante el establecimiento de nuevos hechos, los supuestos fácticos
fundamentales asentados por aquellos, esto es la existencia del contrato y sus condiciones, toda vez
que resultó debidamente probado el arrendamiento del vehículo por parte del actor al demandado, por
un año, por una renta de $ 12.000 diarios y del análisis del recurso interpuesto se advierte claramente
que el propósito final de las argumentaciones que vierte el recurrente en relación a la ponderación de la
prueba instrumental para expresar el error de derecho que atribuye a la sentencia recurrida, consiste en
promover que se lleve a cabo por esta corte una nueva valoración de las probanzas, distinta de la ya
efectuada por los jueces del mérito, actividad que resulta extraña a los fines de la casación en el fondo;
al efecto resulta pertinente recordar que solamente los jueces del fondo se encuentran facultados para
fijar los hechos de la causa y que efectuada correctamente dicha labor al haberse determinado éstos
con sujeción al mérito de los antecedentes, probanzas aportadas por las partes, interpretación y
aplicación de las normas atinentes al caso en estudio, los mismos resultan inamovibles para este
tribunal, conforme a lo previsto en el artículo 785 del Código de Procedimiento Civil, no siendo posible
su revisión por la vía de la nulidad que se revisa, por lo que el recurso de casación en el fondo deducido
por el demandante no podrá prosperar, toda vez que adolece de manifiesta falta de fundamento
(Considerandos 9º y 10).
Para que el arrendatario pueda oponerse al cobro de rentas debe acreditar que arrendador no ha cumplido
obligación de realizar mejoras necesarias aun cuando se ha dado aviso oportuno
Fecha: 29/06/2012
Rol: 42-2012
Sumario
Esta corte estima ajustado a derecho y al mérito de los antecedentes de la causa, los razonamientos
consignados en la sentencia apelada y que han permitido acoger las demandas conjuntas de cobro de
rentas insolutas y consumos domiciliarios básicos y rechazar la demanda indemnizatoria interpuesta por
vía reconvencional.
Al apreciar la prueba conforme a las normas de la sana crítica manifiesta que entre las partes hubo
un convenio expreso con relación a reparaciones de la propiedad arrendada para ser reembolsados los
arreglos efectuados en un monto de hasta $ 200.000, como se consignó en los recibos de arriendo "a
diferencia de lo sostenido por la demandada y que como quiera que fuera de dicho acuerdo prima la ley
del contrato en sus cláusulas décima y undécima, ya que el contrato es ley para las partes y no puede
ser invalidado sino por mutuo consentimiento o por causas legales," concluyendo en el considerando 11,
que la demandada no ha logrado justificar el pago que alega. (Considerando 10)
Para que el arrendatario pueda oponerse al cobro de las rentas no le basta, por tanto, invocar el
incumplimiento de esas obligaciones, en cuanto ellas miran a las reparaciones no locativas que fueran
necesarias para mantener la cosa en estado de servir a los fines a que se destina, sino que le es
menester además acreditar, como circunstancia indefectible, que esas obligaciones no las ha cumplido
el arrendador a pesar de habérsele dado aviso oportuno de su necesidad, lo que no ha ocurrido en la
especie puesto que las pruebas aportadas por la demandada a su respecto no logran este objetivo ni
tampoco acreditan que el arrendador haya consentido en ellas, con la expresa condición de abonarlas.
(Considerando 12).
Demandado no ha acreditado pago de rentas de arrendamiento adeudadas ni dio seguridad que se verificará en
el corto plazo de modo que procede declarar terminado contrato de arrendamiento
Fecha: 12/06/2012
Rol: 640-2012
Sumario
Resultando de los antecedentes esgrimidos en el juicio, que el inmueble a contar de octubre de 2010
se encuentra en poder del arrendador, por haber ingresado rompiendo candados y expulsando a las
personas que estaban ocupándolo, lo que es afirmado por la arrendataria, pero no así por el arrendador
quien señala que la propiedad estaba abandonada y correspondiendo dichos pagos, según la propia
demandante, a cobros desde el mes de mayo y julio de 2010 por consumos de luz y agua, hasta la
fecha de la presentación de la demanda julio de 2011 al igual que los gastos por derechos de
aprovechamiento de agua del caudal (indicado) y las cuotas de contribuciones, también las considera
hasta julio de 2011, por todas las circunstancias anotadas, no corresponderá dar lugar a dicho pago.
Se trajo a la vista, como medida para mejor resolver, la causa Rol Nº 1234-2011 caratulada "(como
se indica)" por terminación de contrato de arrendamiento, solicitando tener a la vista por la demandada y
los documentos agregados por la parte demandante a fojas 57, 58 y 59 las que corresponden a informe
de tasación agrícola e informe de prenda que acompañados con citación no fueron objetados. En
relación a la referida causa no se ha solicitado a su respecto que alguna diligencia de la causa tenida a
la vista fuera considerada en esta causa, de acuerdo a la tramitación debida, por lo que no será
considerada y, en cuanto a los documentos, al acompañarlos no se precisó lo pretendido ni para los
efectos que se acompañaban, por lo que no desvirtúan lo ya aseverado en los considerandos
precedentes.
En estas condiciones, corresponde dar por terminado el contrato de arrendamiento suscrito entre las
partes, por no pago de las rentas adeudadas, ni haber dado la arrendataria la seguridad de que
verificará su pago dentro de plazo razonable, que no bajará de treinta días, y encontrándose el inmueble
en poder de la arrendadora, según lo acreditado en este juicio, no se ordenará su devolución.
(Considerandos 7º a 9º).
Ficha 53 Antecedentes del fallo
Hecho de existir contrato de arrendamiento entre demandado y antiguo dueño de inmueble justifica la tenencia
por lo que no procede acoger acción de precario
Fecha: 04/06/2012
Rol: 117-2012
Sumario
Si bien la propiedad ya individualizada fue vendida siendo adquirida por la (demandante), cabe tener
presente que si el contrato de arrendamiento fue acordado por el demandado con la anterior dueña, se
estima que se está en presencia de un título que justifica la ocupación. (Considerando 13).
No hay disposición alguna que prohíba el pago inmediato de las rentas de arrendamiento. La ley sólo puede
disponer para lo futuro
Fecha: 30/05/2012
Rol: 165-2012
Cita online: CL/JUR/1001/2012
Sumario
Los argumentos con los que la demanda busca justificar sus peticiones de nulidad absoluta y de
inexistencia no pueden ser acogidos. En efecto, no es motivo de nulidad el hecho de fijar la renta que ha
de pagarse por la toda la extensión del arrendamiento y, además, pagarla de una sola vez. Esto, porque
no se divisa disposición alguna que prohíba el pago inmediato de las rentas de arrendamiento. Cuando
mucho, puede aceptarse que la periodicidad es cosa de la naturaleza del contrato, pero no de la esencia
del mismo, atento a la distinción que formula el artículo 1444 del Código Civil. Tampoco resulta ser
efectivo que el arrendamiento ha perdido su condición de contrato de tracto sucesivo por faltar
periodicidad en el pago de la renta, siendo útil recordar en esta materia que un contrato es de tracto
sucesivo en la medida que genere obligaciones de ese carácter. Desde ese punto de vista, el contrato
de arrendamiento genera para el arrendatario la obligación de pagar la renta, obligación que, aun
cuando se cumpla periódicamente, no es de tracto sucesivo. Y origina además la obligación del
arrendador de conceder el goce de la cosa dada en arrendamiento. Esta última sí que es una obligación
de tracto sucesivo, y ello por la simple razón que, resuelto o declarada la terminación del contrato,
resulta imposible restituir el goce que aprovechó el arrendatario, cosa que resulta posible si se tratara de
restituir las rentas pagadas.
La demanda acude ahora a las normas de la Ley Nº 19.253, conocida como "Ley indígena". De ella,
el inciso 2º de su artículo 13 dispone que "igualmente las tierras cuyos titulares sean comunidades
indígenas no podrán ser arrendadas, dadas en comodato, ni cedidas a terceros en uso, goce o
administración" adquiridas por prescripción salvo entre comunidades o personas indígenas de una
misma etnia. Sin embargo, resulta errónea la pretensión de la parte demandante al pedir aplicación
retroactiva de una ley posterior a la celebración de los contratos motivo de su acción. En efecto, la Ley
Nº 19.253 tiene fecha de promulgación 5 de octubre de 1993 y los contratos motivos de la demanda son
de 1987. Para desechar la pretensión que se comenta del demandante basta citar la norma general en
esta materia: "la ley sólo puede disponer para lo futuro y no tendrá jamás efecto retroactivo".
(Considerandos 10 y 11).
Todo inmueble que se arriende con fines habitacionales debe contar con agua en forma ininterrumpida
Fecha: 11/05/2012
Rol: 2139-2011
Sumario
Si bien el contrato de arrendamiento celebrado entre las partes no contempla la obligación del
arrendador de proveer el agua potable, sin embargo, conforme a las reglas de la lógica, el agua es un
elemento vital para la vida de todo ser viviente y en consecuencia, todo inmueble que se arriende con
fines habitacionales, conforme a las reglas de la lógica, debe contar con dicho elemento en forma
ininterrumpida, lo que no ha ocurrido en la especie, como ha quedado claro de la testimonial rendida y la
documental acompañada por la demandante, como el oficio del comité de agua potable rural de las
dichas, que da cuenta que en los últimos años dicho comité ha tenido serias dificultades para
suministrar agua a los usuarios de las dichas, porque el pozo está agotado, por lo que el servicio se
presta en forma interrumpida y se abastece a través de un camión aljibe de la municipalidad.
(Considerando 6º).
Corte Suprema
Existencia de argumentaciones que no se concilian entre sí importa dotar al recurso casación en el fondo un
carácter dubitativo
Fecha: 30/04/2012
Rol: 194-2010
Corte Suprema
Recurrente de casación en el fondo omite denuncia de vulneración de normas con carácter de decisoria litis
como serían los artículos 1915 y 1942 del Código Civil
Fecha: 15/03/2012
Rol: 150-2010
Sumario
Del tenor del arbitrio deducido, queda en evidencia que la fundamentación del mismo es insuficiente,
por cuanto éste se funda en la presunta infracción de normas que tienen el carácter de adjetivas, las que
no deciden el pleito, pues para ello se requiere de la aplicación de las que han decidido la litis, es decir,
aquellas normas analizadas y aplicadas por los aludidos sentenciadores en la decisión del asunto
controvertido al tenor de la acción deducida, esto es, cobro de rentas arrendamiento que no se pagaron
durante la vigencia de la relación contractual, las que fueron omitidas como son los artículos 1915 y
1942 del Código Civil y 6º de la Ley Nº 18.101.
En consecuencia, si el sustento jurídico que demanda la ley en la motivación del arbitrio que se
analiza es de derecho estricto, una omisión de tal dimensión no puede ser suplida o subsidiada por este
tribunal, de modo que éste no puede prosperar. (Considerando 6º).
Fecha: 09/01/2012
Rol: 1403-2011
Sumario
No se logra acreditar causalidad entre actuar de municipalidad y Serviu demandado y ocurrencia del hecho
dañoso cuya total responsabilidad es de empresa constructora
Fecha: 21/12/2011
Rol: 235-2011
Sumario
La sentencia apelada en su consideración trigésima tercera, señala que la causa de los daños
corresponde al accidente producido por las circunstancias directas de la falta de experiencia del chofer y
las deficientes condiciones mecánicas del vehículo, lo que no permite establecer una relación de
causalidad entre ese hecho y la responsabilidad atribuida tanto al municipio (demandado) como al
Serviu (demandado), ya que ninguno de esos demandados puede vincularse a las posibilidades de
actuación o de omisión, toda vez, que esos demandados no poseen ni las competencias, ni las
atribuciones para arrogarse facultades inspectivas relativas a subcontratación o medidas de seguridad,
condiciones mecánicas del vehículo o idoneidad de la empresa (demandada) y por ello, como se dijo, no
se puede establecer una relación de causalidad, por cuanto dicho nexo se produce cuando el hecho
doloso o culposo es la causa directa y necesaria del daño causado. Así la excelentísima Corte Suprema
ha señalado al respecto: "(...) es necesario que se encuentre justificada la relación de causalidad entre
el hecho y el daño y son los actores quienes deben acreditar tal nexo, esto es que haya sido la falta de
servicio que se reprocha al órgano estatal la que generó el daño...". (Rol 363-2009) y en este caso que
nos ocupa, las circunstancias directas del daño, relación alguna tienen con el actuar de los
demandados I. Municipalidad de (demandada) y Serviu (demandado), pues estos no podían ejecutar
alguna acción tendiente a evitar o prever tales circunstancias.
Dilucidar sobre subarrendamiento no es materia de recurso de protección más aun si desalojo ha sido decretado
por tribunal
Fecha: 07/12/2011
Rol: 650-2011
Sumario
Como se aprecia de lo expuesto por la recurrente en su recurso, el fundamento del derecho que dice
le ha sido conculcado, se basa en la circunstancia de sostener que es subarrendataria de la recurrida,
materia que no corresponde sea dilucidada en este recurso, atendida su naturaleza, disponiendo la
recurrente de mecanismos legales para hacerlos valer en el mencionado juicio, en el cual por lo demás
como se consignara en el fundamento anterior, aparece, que justamente se controvirtió, por la parte
recurrida de este recurso y por la demandada de ese juicio, que esta ultima tuviera la calidad de
arrendataria del inmueble materia de autos. Por otra parte, no se divisa de qué manera pueda estar la
recurrida en situación de impedir las acciones tendientes al desalojo que teme la recurrente, puesto que
éste ha sido decretado por resolución de un tribunal, dictada en una causa, en que a mayor
abundamiento el día 18 de octubre de 2011 se accedió a la suspensión del lanzamiento de conformidad
al artículo 13 de la Ley Nº 18.101 a raíz de la petición que hizo la demandada precisamente
argumentando la situación de salud de la recurrente doña Nidia García Muñoz (Considerandos 4º y 5º).
Fecha: 02/11/2011
Rol: 5126-2010
Sumario
Fecha: 19/07/2011
Rol: 1776-2011
Sumario
Del mismo modo que el artículo 1815 del Código Civil permite la venta de cosa ajena, sin perjuicio de
los derechos del dueño, en igual forma el artículo 1916 del mismo código, en su inciso 2º, permite que
pueda arrendarse aun la cosa ajena, que es lo que ha ocurrido en la especie, ya que el titular del
dominio, actor de autos, cuenta con inscripción conservatoria desde el 24 de mayo del año 2044 (sic),
según documento, y el contrato de arrendamiento, que se guardó en custodia es de mayo de 2009, de lo
cual resulta que se arrendó cosa ajena, y que por ende, tal contrato le es inoponible al titular del
dominio, a quien por tanto le resulta lícito el celebrar un avenimiento con su demandado arrendatario.
(Considerando 5º).
Corte Suprema
Fecha: 23/06/2011
Rol: 6866-2009
Sumario
Es necesario señalar que el recurso de casación en análisis adolece de una serie de defectos que
atentan en contra del carácter de derecho estricto de este arbitrio. Es así como se le otorga al
artículo 1945 del Código Civil el carácter de norma reguladora de la prueba, lo que naturalmente no se
configura. En segundo lugar, razona en orden a que debería ser obligado al pago de las rentas de
arrendamiento sólo hasta la restitución del inmueble, en circunstancias que el fallo recurrido no dio por
establecida la fecha en que ello ocurrió, sin haber denunciado al respecto la vulneración de alguna
norma reguladora de la prueba. En tercer término, la petición que se somete a la decisión de esta corte
contraría las argumentaciones en las que se funda el recurso, puesto que pide que se acoja este
arbitrio, se invalide el fallo recurrido y se dicte sentencia de reemplazo en la que se resuelva el rechazo
de la demanda; sin embargo los razonamientos expuestos dicen relación con que sólo estaría obligado
al pago de las rentas hasta la fecha en que restituyó el inmueble. Por último, se denuncia la infracción
del artículo 170 del Código de Procedimiento Civil sin efectuar desarrollo alguno a su respecto, materia
que en todo caso es propia de un recurso de casación en la forma y no del fondo como es el presente
(Considerando 9º).
No haber pagado las rentas de arrendamiento en tiempo y forma genera causal para el desahucio del contrato de
arrendamiento
Fecha: 14/06/2011
Rol: 4900-2009
Sumario
Fecha: 09/06/2011
Rol: 436-2011
Sumario
El artículo 1962 del Código Civil establece que estarán obligados a respetar el arriendo, entre otros,
los acreedores hipotecarios si el arrendamiento ha sido otorgado por escritura pública en el registro del
Conservador de Bienes Raíces antes de la inscripción hipotecaria, lo que es reiterado por el artículo 106
de la ley de bancos al señalar que: los subastadores de propiedades en juicios regidos por el
procedimiento que señala esta ley no estarán obligados a respetar los arrendamientos que las afecten,
salvo que éstos hayan sido otorgados por escritura pública inscrita en el Conservador de Bienes Raíces
respectivo con antelación a la hipoteca del banco o autorizados por éste, por lo que no resulta audible la
oposición de la articulista, sin perjuicio de los derechos de la arrendadora con relación a su arrendador
(Considerando 5º).
Corte Suprema
Artículo 1944 del Código Civil regula la oportunidad en que el arrendador debe pagar la renta
Fecha: 03/06/2011
Rol: 6633-2009
Sumario
De la lectura del artículo antes transcrito (artículo 1944 del Código Civil) aparece que en éste se
regula la oportunidad en que el arrendador debe pagar la renta, distinguiendo si las partes al contratar
convinieron o no un plazo para el pago. En caso en que los contratantes lo hubiesen acordado, la renta
deberá pagarse en el período estipulado; y a falta de convención, el pago deberá hacerse de acuerdo a
las reglas que indica. Respecto de los predios urbanos, como es el caso, dispone que se pagará por
meses, salvo el caso de la renta por suma única, que se pagará luego que termine el arrendamiento. Así
las cosas, del sentido literal de la ley, ante la claridad de la norma en estudio, sólo cabe concluir que
cuando el legislador se refiere a período estipulado, alude al que las partes convinieron para el pago de
la renta. Reafirma lo anterior el hecho que el diccionario de la lengua española define "estipular" como:
"convenir, concertar, acordar o hacer un contrato verbal", acepciones todas relacionadas con la
existencia de un contrato, esto es, de un acuerdo de voluntades. (Considerando 9º).
Restitución de predio agrícola, acogida. Resolución contractual. Pacto comisorio en el Código Civil. Efectos del
pacto comisorio calificado estipulado en un contrato diverso a la compraventa o, en ella, pero respecto de
obligaciones diversas a la de pagar el precio. Necesidad de un acto recepticio del contratante diligente. Pacto
comisorio calificado celebrado en un contrato de arrendamiento de predio rústico
Fecha: 05/05/2011
Rol: 3276-2010
Sumario
Corte Suprema
Término de contrato de arrendamiento, acogido. Multa por concepto de rentas adeudadas. Avaluación anticipada
de perjuicios. Hipótesis de lesión enorme en la cláusula penal. Facultad del juez para moderar la pena en las
obligaciones de valor inapreciable o indeterminado. Cláusula penal pactada en contrato de arrendamiento.
Demandado que no ha solicitado la rebaja de la cláusula penal. Improcedencia que el tribunal haga uso de la
facultad de rebajar la cláusula penal
Fecha: 14/01/2011
Rol: 5025-2009
Sumario
En el caso que las partes avalúen en forma anticipada los perjuicios que puedan producirse ante el
incumplimiento de un contrato, el artículo 1544 del Código Civil prevé que ésta puede resultar enorme o
excesiva, para lo cual establece ciertas reglas, distinguiéndose tres situaciones: la primera, cuando la
cantidad determinada se mira como equivalente a la que debe prestarse, es decir, se está en el caso de
un contrato bilateral con obligaciones recíprocas y conmutativas. La pena debe consistir en el pago de
una suma de dinero. Si es excesiva, entonces puede pedirse que se rebaje al duplo de la primera,
incluyéndose ella en él. La segunda situación, es la del mutuo con intereses y la tercera, se trata de
obligaciones de valor inapreciable o indeterminado, es decir, cuando no es posible medir mediante una
tasa o precio o cuando no lo permite en razón de la naturaleza de las cosas, como ocurre en las
obligaciones de hacer. En este caso, cuando se estime excesiva o enorme, el legislador le otorga
facultades al juez para moderar la pena. En la especie, la cláusula penal pactada por las partes en el
contrato de arrendamiento, corresponde a un contrato bilateral y conmutativo, no correspondiendo a los
jueces del fondo hacer uso de la facultad de moderar la pena establecida en el artículo 1544 inciso final
del Código Civil, toda vez que no se trata de una obligación de valor inapreciable o indeterminado.
Tampoco correspondía que la ejercieran de oficio, pues ninguna petición al respecto fue formulada por
el demandado y arrendatario en la etapa pertinente. En consecuencia, los sentenciadores incurren en
error de derecho respecto de la norma precitada al aplicarla a un caso no previsto por la ley y sin haber
mediado petición de parte interesada, lo que tuvo influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, desde
que se condenó al demandado a pagar una suma menor de aquélla que legalmente le correspondía al
actor (Considerandos 6º a 10 de la sentencia de casación).
Transportista no puede ampararse en convención de Varsovia para eximirse de responsabilidad si actuó con dolo
o culpa
Fecha: 10/12/2010
Rol: 177-2010
Sumario
Corte Suprema
No procede alterar hechos fijados en juicio a través de casación si no se comprueba infracción a normas
reguladoras de prueba
Fecha: 12/10/2010
Rol: 6204-2010
Sumario
Los demandados se limitan a contrariar los hechos e intentan modificarlos, desde que niegan la
existencia de negociaciones iniciadas en el mes de junio de 2008 para los efectos de prorrogar el
contrato o darlo por terminado. Tal planteamiento no se corresponde con los objetivos del recurso
intentado, a través del cual se pretende fijar el recto sentido y alcance de las leyes sustantivas aplicadas
a la solución de la litis, sin que sea admisible por su intermedio la alteración de los presupuestos fijados,
salvo que en ese establecimiento los jueces del grado hayan infringido las leyes reguladoras de la
prueba, lo que, en la especie, no ha sido así denunciado por el recurrente, por cuanto éste no explica la
transgresión de las normas de la lógica o de la experiencia que se habría cometido para establecer los
presupuestos fácticos. (Considerando 11).
Fecha: 10/09/2010
Rol: 146-2010
Sumario
La discusión planteada en estos antecedentes queda reducida, por un lado, al hecho que la
recurrente señala que no se le permite entrar a su local comercial, ubicado en el segundo piso del centro
comercial, identificado con el número (...), lo que sería considerado como una vulneración de los
contratos de subarriendo que se han debido cumplir, siendo esto un acto de "autotutela jurídica
inaceptable". Por ello pide, se ordene a los recurridos reponerla en la plenitud de los derechos que
conforme al contrato de subarrendamiento le corresponden. Por otro lado, y tal cual da cuenta el acta
levantada a propósito de la inspección personal del tribunal, decretada por resolución de 27 de agosto
de 2010 y practicada el día 2 de septiembre en curso: "se puede observar en el espacio que ocupaba el
centro comercial limitada que, al lado izquierdo, en donde en el segundo piso de su construcción se
ubica el local Nº (...), subarrendado a la sociedad (recurrente), sólo existen fierros y derrumbes. La loza
(sic) que soportaba el local se demolió en los primeros días de agosto... Además se demolió la
techumbre... El local (...) Como tal, no existe". La controversia así planteada, nos hace concluir que la
acción de protección no puede prosperar por carecer de oportunidad, de suerte que esta corte no tiene
medida alguna que adoptar, al haberse constatado que el local dado en subarriendo a la recurrente,
ubicado en el centro comercial, segundo piso y signado con el Nº (...), "como tal, no existe", según da
cuenta el acta que rola a fojas (...), levantada con ocasión de la inspección personal decretada en autos,
transcrita —en sus pasajes más relevantes— en el razonamiento anterior (Considerandos 5º y 6º).
Falla ultra petita juez que se basa en meras suposiciones sobre hechos no invocados por las partes
Fecha: 25/08/2010
Rol: 1164-2009
Sumario
El juez árbitro, al fallar, se enmarca en la perspectiva antes descrita, en los aspectos siguientes: al
centrar los antecedentes del arbitraje; al reseñar las pretensiones de las partes y el curso de la
tramitación de la causa; al fijar el marco normativo; al establecer que debe resolverse con arreglo a la
justicia y equidad en relación con el caso particular de que se trata; al fijar los puntos de la controversia;
al dar por acreditada la existencia de las mejoras y tener por probado que ellas fueron realizadas por los
actores, acorde con lo consignado en el documento de 16 de diciembre de 1978; pero se aparta
ostensiblemente del mérito de ello, en los siguientes otros aspectos: al referirse al valor de las mejoras
sosteniendo que el tribunal no está ligado por la valoración que las partes hayan podido efectuar de las
mejoras, su forma de cálculo, reajustabilidad e intereses, toda vez que —según indica— en la tasación
de las partes pueden haber influido elementos tales como la diversa fuerza negociadora de ellas y la
imprevisión; al analizar las circunstancias familiares, históricas, sociales y económicas en que ello
habría ocurrido; al sostener que hubo desproporción en la capacidad negociadora de los contratantes y
que los afectos familiares se vieron resentidos; al afirmar que la tasación de las mejoras practicada por
las partes no obedeció a criterios de equidad, optando por tasarlas con independencia de lo pactado por
ellas, con base en criterios objetivos; y al modo como regula la desvalorización de las mejoras. Lo antes
expuesto permite concluir que la decisión impugnada —que, como se advierte en el motivo anterior,
contiene una serie de meras suposiciones, sobre circunstancias no invocadas por las partes— se aparta
de los puntos sometidos a conocimiento del tribunal y, en base a ello, resuelve la contienda en
desmedro de la demandante, con lo que se configura la causal de casación en la forma contemplada en
el artículo 768 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, siendo procedente, por tanto, acceder a lo
impetrado a través de la presente vía de nulidad (Considerandos 9º y 10).
Fecha: 16/08/2010
Rol: 195-2010
Sumario
Corte Suprema
Si inmueble arrendado queda inhabitable por incendio no procede reclamar renta puesto que contrato expira
Fecha: 12/08/2010
Rol: 5122-2010
Sumario
Tal como ha señalado reiteradamente esta corte, "si la cosa se destruye, entonces falta el objeto de
la obligación del arrendador, cual es proporcionar al arrendatario el goce de una cosa. Y si falta el objeto
para el arrendador, entonces falta la causa de la obligación del arrendatario, porque pagaría una renta a
cambio de nada". En el caso sub judice es un hecho establecido por los jueces del fondo, en uso de las
facultades que les son privativas, que el inmueble que se entregó en arrendamiento a los demandados
quedó inhabitable con ocasión del incendio que afectó el primer y segundo piso del bien raíz, por lo que
sin lugar a dudas el contrato terminó inmediatamente al verificarse el supuesto fáctico de la causal
premencionada, lo que ocurrió el 16 de agosto de 2008, siendo absolutamente improcedente pretender
reclamar una renta de arrendamiento por el período posterior a dicha fecha, toda vez que de tal
prestación carecería de causa y constituiría para el arrendador un enriquecimiento injusto. De
conformidad con lo reseñado en los motivos que preceden, se observa que los sentenciadores han
hecho una correcta aplicación de la normativa atinente al caso de que se trata, por lo que el recurso de
casación en el fondo deducido por la demandante no podrá prosperar, toda vez que adolece de
manifiesta falta de fundamento. (Considerandos 13 y 14).
Fecha: 04/08/2010
Rol: 244-2010
Sumario
Queda en evidencia que lo que se pretende resolver por esta vía constitucional extraordinaria, es una
situación de hecho que se origina en una discusión derivada de un contrato celebrado entre el
arrendador y el subarrendador, que en una de sus cláusulas, incorpora el reglamento interno por el que
se rigen estos y la recurrida en su calidad de arrendataria y dueña del inmueble, con respecto a la
procedencia o improcedencia de determinadas sanciones, preestablecidas y aceptadas por el
recurrente, habiéndose acreditado que esta se encontraba en mora a la data del corte del suministro de
electricidad, lo que se aparta de la finalidad de esta acción cautelar, cual es la de reaccionar contra un
acto anormal que de manera evidente vulnere una garantía constitucional, no encontrándose destinada
a resolver conflictos de intereses o dificultades de interpretación de normas contractuales, cuyo es el
caso de autos. Consta de los antecedentes que efectuado un pago parcial por parte de la recurrente la
recurrida repuso el servicio interrumpido (Considerando 4º).
Corte Suprema
Término de contrato de arrendamiento de pertenencias mineras por expiración del tiempo estipulado. Cláusula
de renovación automática del contrato de arrendamiento. Demanda de desahucio
Fecha: 21/06/2010
Rol: 3287-2010
Sumario
Fecha: 18/06/2010
Rol: 1010-2009
Sumario
Los requisitos de procedencia de la acción pauliana son: la existencia del perjuicio a los acreedores;
que el acto celebrado por el deudor y cuya revocación se reclama haya sido celebrado por aquél en
fraude de los acreedores y que, además, la insolvencia del deudor ha de ser contemporánea con el
ejercicio de la acción. Por tanto, el legislador estima suficiente que el deudor, conociendo el mal estado
de sus negocios, celebre un contrato oneroso o constituya una hipoteca, prenda o anticresis sobre
algunos o todos sus bienes, para que se justifique la rescisión de cualquiera de esos actos jurídicos,
siempre que ese conocimiento se extienda también, al tercero que adquiere el bien o los bienes o
respecto del cual se constituyó algunos de los derechos reales referidos, o los recibe en anticresis
(Considerando 4º).
Certificación del abandono de propiedad arrendada no requiere emplazamiento de quien fue el arrendatario
Fecha: 16/06/2010
Rol: 28-2010
Sumario
Restitución de inmueble arrendado, acogida. Expiración del tiempo estipulado para la duración del contrato.
Aviso de término de contrato. Arrendatario que no entrega el inmueble. Finalidad del recurso de casación en el
fondo. Improcedencia de alterar los presupuestos fácticos fijados
Fecha: 08/06/2010
Rol: 5387-2009
Sumario
De acuerdo al artículo 1950 Nº 2 del Código Civil, el arrendamiento de cosas termina por la
expiración del tiempo estipulado para la duración del arriendo. En la especie, atendiendo a que, por un
lado, las partes acordaron que el contrato se renovaría en forma automática si ninguna de ellas da aviso
de desocupación mediante carta certificada y, por otro, la propia demandada ha sido quien ha fijado la
fecha del término del contrato y la consecuente entrega del inmueble, el que sin embargo no le fue
restituido al actor, desde que no existe prueba alguna que así lo acredite, se concluye que corresponde
acoger la demanda de restitución de propiedad y cobro de multas, conforme a lo estipulado en el
contrato (Considerandos 3º y 6º de la sentencia de 1ª instancia y 3º a 5º de la sentencia Corte de
Apelaciones). El planteamiento del recurrente, quien se limita a contrariar los hechos e intentar
modificarlos, no se corresponde con los objetivos de la casación en el fondo, a través de la cual se
pretende fijar el recto sentido y alcance de las leyes sustantivas aplicadas a la solución de la litis, sin
que sea admisible por su intermedio la alteración de los presupuestos fijados, salvo que en ese
establecimiento los jueces del grado hayan infringido las leyes reguladoras de la prueba
(Considerando 11 de la sentencia Corte Suprema).
Para interpretar contrato puede recurrirse a aplicación práctica que partes dan a convención
Fecha: 25/05/2010
Rol: 528-2009
Sumario
Si bien el referido contrato (de arrendamiento) no contiene mención expresa en cuanto a determinar
que el día 1 de cada mes que allí se señala para el pago del precio del arrendamiento, sea por período
adelantado o por mes vencido, los jueces sentenciadores tuvieron presente para dirimir tal
cuestionamiento, la aplicación práctica que el propio demandado hizo de dicha estipulación, al pagar las
cantidades correspondientes a un mes de garantía y un mes de renta, por adelantado, tal como consta
en la parte final del contrato acompañado a fojas 1, sin que se haya objetado en forma alguna. En mérito
de lo analizado, cabe deducir que las disposiciones legales estimadas quebrantadas por el recurrente
han sido correctamente aplicadas por los jueces del grado, dado que han tenido por válido el
compromiso de que da cuenta el contrato y a la vez, han protegido su interpretación conforme a la
buena fe que ha presidido su celebración, dando aplicación concordante y práctica, a todas y cada una
de sus estipulaciones libremente pactadas por los contratantes (Considerandos 4º y 5º).
No se puede demandar terminación del contrato de arrendamiento por no pago de rentas si previamente se
exigió ejecutivamente la deuda
Fecha: 16/04/2010
Rol: 53-2010
Sumario
Del mérito de autos, consta que el banco ejerció dicha opción (cláusula de aceleración), pues exigió
ejecutivamente a la deudora, la deuda que ésta había reconocido adeudar. Precisamente el equivalente
a 15.263 unidades de fomento, el título ejecutivo fue la copia autorizada de escritura pública de 10 de
noviembre de 2005, por lo que surge con claridad que ejerció la opción que la misma cláusula de ese
instrumento le reconocía. La relación contractual de las partes debe dilucidarse sobre la base del
ejercicio que ellas han hecho de la libertad contractual y según ellos pactaron la opción que ejerce en
esta causa la demandante está amparada por la que efectuó con anterioridad el demandado como se ha
indicado en esta sentencia y siendo así la ley del contrato le impide ahora demandar la terminación del
contrato de arrendamiento por no pago de rentas (Considerandos 6º y 7º).
Ficha 82 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Acción de protección sólo tiene por objeto amparar derechos preexistentes e indubitados
Fecha: 19/01/2010
Rol: 8364-2009
Sumario
De autos puede advertirse la existencia de una discusión en cuanto a la procedencia del derecho que
le asistiría a la recurrente, para exigir la obligación de "librar al arrendatario de toda turbación o
embarazo en el goce de la cosa arrendada", como consecuencia de un contrato de arrendamiento
celebrado entre las partes. A ello se suma la circunstancia establecida que las acciones tildadas de
ilegales y arbitrarias provienen de un tercero ajeno a la referida convención, todo lo que impide
considerar que la actora se encuentre ante un derecho de carácter indubitado. En la especie, la
situación jurídica y de hecho presentada por la recurrente (arrendataria) ha sido contradicha y una
controversia así generada no puede ser dilucidada por medio de esta acción cautelar de derechos
constitucionales, ya que ella no constituye una instancia de declaración de tales derechos sino que de
protección de aquellos que, siendo preexistentes e indubitados, se encuentren afectados por alguna
acción u omisión ilegal o arbitraria, cual no es el caso. (Considerandos 3º y 4º).
Tácita reconducción del contrato de arrendamiento no opera si se estipula un plazo de vencimiento en la misma
convención
Fecha: 13/01/2010
Rol: 8591-2009
Sumario
En la sentencia cuestionada, los jueces del grado han concluido que se encuentra acreditado que el
contrato (de arrendamiento) que vinculaba a las partes de manera originaria terminó por expiración del
tiempo establecido en la propia convención, en el mes de febrero de 2001, por lo que sus estipulaciones
perdieron eficacia y fuerza obligatoria desde dicho momento, no operando al efecto la institución de la
reconducción tácita del arrendamiento; que, sin embargo, pese al término de vigencia de dicho acto
jurídico, las partes siguieron vinculadas en una relación contractual; de manera que atendida la falta de
constancia escrita acerca de la regulación que ambas partes se darían en lo sucesivo, se debe atener a
la forma como ellas se comportaron en la ejecución práctica de la nueva convención; razón por la cual,
constando en autos que, desde el mes de enero del año 2004, a la fecha de interposición de la
demanda, la arrendataria canceló mensualmente una suma de dinero —comportamiento de pago que
no fue reclamado judicial ni extrajudicialmente por la actora— se concluye que dicho canon es el
acordado por las partes en su nuevo vínculo jurídico (Considerando 3º).
Juicio de arrendamiento. Ultra petita. Reconvención de pago. Principio formativo de impulso procesal de parte
Fecha: 08/01/2010
Rol: 1466-2009
Sumario
Cuando sostiene que sólo se ha demandado por el pago de la renta correspondiente al mes de julio,
la recurrente confunde el concepto de rentas impagas con la liquidación que en definitiva se haga de la
deuda. En efecto, durante el proceso puede ocurrir que la demandada deposite dineros que puedan
imputarse al pago de la deuda final, de cumplirse los requisitos legales, pero eso no quiere decir que lo
pedido por el demandante haya sido satisfecho completamente. Aun obviando todo lo anterior, el tenor
de la demanda y la sentencia es claro en torno a que lo que se adeuda es todas aquellas rentas
devengadas hasta la restitución del bien arrendado, y no sólo la de julio. Lo contrario sería admitir que
todos los meses impagos que se sucedan durante un proceso judicial como este son, cada uno, objeto
de un nuevo proceso, cuestión que violenta nociones mínimas de economía procesal y, aun más, de
sentido común. Tomando en cuenta lo señalado, se concluye categóricamente que la sentencia
recurrida no ha incurrido en el vicio de ultra petita, toda vez que la sentenciadora no ha dado al actor
más de lo que este ha solicitado ni ha incorporado en su sentencia puntos no sometidos a su decisión
(Considerandos 4º y 5º). Finalmente, corresponde pronunciarse sobre la causal de haberse faltado a un
trámite o diligencia declarada esencial por la ley. En su libelo, la recurrente señala dos omisiones. En
primer término, la omisión de las reconvenciones de pago. En este caso, se tiene como sustento legal
de lo expuesto lo dispuesto en el artículo 1977 del Código Civil. Si bien ese artículo hace referencia a
dos reconvenciones como requisito para hacer cesar el arrendamiento, es importante hacer notar que se
trata de una disposición que está dentro del título de las "reglas particulares relativas al arrendamiento
de casas, almacenes u otros edificios". Como se observa, no es aplicable al caso de un arriendo con
opción de compra de un sistema ecográfico, que no se trata de un bien inmueble. Tampoco en el
contrato suscrito por las partes se observa norma ninguna referida a las reconvenciones. Por lo tanto, no
siendo una obligación legal, ni tampoco contractual, mal puede esta corte (de apelaciones) tenerla como
parte esencial del procedimiento. La recurrente hace referencia a la omisión de medios probatorios. En
primera instancia, se refiere a la imposibilidad de citar a absolver posiciones al representante legal de la
demandante. Lo cierto es que lo anterior no ocurrió por la negativa a realizarla por parte del tribunal,
sino que por la mera inactividad de la demandada. En efecto, el sentenciador de primera instancia dio
lugar a dicha diligencia. Luego la parte demandada alegó entorpecimiento, y se le dio lugar. En
consecuencia, si la (demandada) no realizó los pasos necesarios para practicar la absolución, ni en el
periodo ordinario ni en el periodo especial, no puede fijar esa responsabilidad en el tribunal. El principio
formativo del procedimiento de impulso procesal de parte que rige en la generalidad de las materias
civiles tiene plena aplicación en este caso. La misma situación descrita ocurrió en los restantes medios
de prueba que se alegan, la exhibición de documentos y el peritaje. En este último caso, la carga
procesal de notificar dentro de plazo la audiencia era de la recurrente, y fue ella quien no lo ejecutó
dentro de los límites legales (Considerando 7º).
Ficha 85 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Fecha: 01/01/2010
Rol: 7762-2008
Sumario
Que en lo que dice relación con el no pago de las rentas de arrendamiento, el propio demandado
reconoce este hecho al contestar la demanda, pero se excusa aduciendo que la demandante se ha
negado a entregar el certificado de recepción final, por lo cual no desea mantener el arriendo atendida la
imposibilidad de usar la propiedad para la actividad que la arrendó. Si bien se acreditó que la propiedad
arrendada no cuenta con permiso de edificación ni de recepción final, no se advierte como este hecho le
impide al arrendatario usar el inmueble para el destino que fue arrendado, el que se encuentra
estipulado en la cláusula segunda del contrato que señala: "la propiedad en galpón y patio se utilizará
exclusivamente a bodegaje y a oficina administrativa y habitacional de cuidador las piezas interiores de
ésta", en especial si se tiene presente que el contrato se celebró el 3 de julio de 2003 y las rentas
impagas se refieren a los arriendos desde junio de 2006, tiempo suficiente para solicitar con anterioridad
la regularización que ahora, luego de tres años, se aduce para terminar el contrato.
Que por tanto, al no haber acreditado el demandado que no pudo usar el inmueble para el fin
arrendado, aparece entonces que incumplió su obligación de pagar las rentas. Al respecto, cabe tener
presente lo que dispone el artículo 10 de la Ley Nº 18.101, que señala que estas prestaciones
comprenderán además, las que se devenguen durante la tramitación del juicio hasta la restitución del
inmueble. (Considerandos 2º y 3º).
Concurriendo supuestos legales arrendatario tiene facultad de terminar anticipadamente contrato sin obligación
de pagar renta por resto de período
Fecha: 20/10/2009
Rol: 5040-2008
Sumario
Prueba testimonial no es apta para acreditar existencia de contrato de arrendamiento si éste debió constar por
escrito
Fecha: 01/10/2009
Rol: 4851-2008
Sumario
Fecha: 01/10/2009
Rol: 581-2009
Sumario
Conforme a los antecedentes examinados en los motivos que preceden es dable concluir que el
establecimiento de la recurrida es una unidad esencialmente comercial, que como es de público
conocimiento, abarca los más diversos rubros propios de esta actividad, que se caracteriza por la
intermediación entre productores e intermediarios, donde la satisfacción de una necesidad o la entrega
de un servicio proporciona un lucro a quien la proporciona, como ocurre con el cobro que hace la
recurrida por los espacios de estacionamiento que proporciona a sus clientes o a personas que ingresan
con sus vehículos a su establecimiento, después de dos horas de permanencia, entre las 06:30 y las
21:00 horas (Considerando 5º). De lo expuesto y razonado fluye que la recurrida explota legítimamente
el giro de arrendamiento de estacionamientos en su establecimiento ubicado en la concesión territorial
que tiene, sin que se aprecie ilegalidad y-o arbitrariedad en dicha actividad, en los términos genéricos y
no muy explícitos expresados por los recurrentes, y mucho menos que el cobro que impugnan
constituya una amenaza a sus derechos como eventuales consumidores, contemplado en la Ley
Nº 19.496 protección de los derechos de los consumidores, toda vez que en su presentación no acusan
haber sido obligados a la prestación pecuniaria objeto del recurso, ausencia fáctica que por sí sola resta
legitimidad al amparo solicitado (Considerando 8º).
Fecha: 30/09/2009
Rol: 5385-2008
Sumario
Casación. Interpretación de los contratos. Cláusula diplomática. Facultad de arrendatario de desahuciar contrato
a plazo
Fecha: 29/09/2009
Rol: 3881-2008
Sumario
Esta corte estima que la cláusula tercera del contrato de arrendamiento (llamada cláusula
diplomática), debe ser interpretada a la luz de sus propios términos y de la ejecución llevada a cabo
sobre el particular por los mismos contratantes, resultando especialmente esclarecedor al efecto que no
haya sido objeto de controversia que la propiedad fue en efecto recibida a conformidad de la
arrendadora, debiendo, por ello, concluirse que la interpretación que se ha hecho del convenio que
vinculaba a las partes lo ha sido conforme a los términos de la ley, a la naturaleza del acuerdo y a la
intención de los contratantes, situación por la que el recurso de nulidad de fondo deberá ser rechazado
(Considerando 12). El artículo 4º de la Ley Nº 18.101, ubicado, como se dijo, en el título de la ley
referido al desahucio y la restitución, destina el inciso 1º a regular los efectos del desahucio del
arrendador y el inciso 2º es bastante claro en permitir al arrendatario restituir el inmueble aun antes de
vencer el plazo fijado primitivamente para la restitución, quedando obligado a pagar la renta hasta el día
en que dicha restitución se materialice. En este punto del razonamiento debe necesariamente
recordarse lo dispuesto en el artículo 19 de la Ley Nº 18.101, conforme al cual, son irrenunciables los
derechos que esta ley confiere a los arrendatarios. El hecho de haberse pactado un contrato de
arrendamiento por el plazo (fijado en sentencia), independientemente de que el recurrente (arrendador)
discuta la real intención de las partes al establecer la cláusula (diplomática), como se ha señalado,
facultaba expresamente al arrendatario para poner término al contrato, en forma unilateral y sin
expresión de causa, siempre que diera aviso al arrendador con anticipación, no puede entenderse que
importa renuncia del arrendatario de su derecho a desahuciarlo, en los términos que prevé el aludido
inciso 2º del artículo 4º (Considerando 13).
Rol: 4331-2008
Sumario
Arrendamiento. Artículo 1945 de Código Civil es decisorio de litis en causa destinada a establecer procedencia
de pago de rentas
Fecha. 08/07/2009
Rol: 3713-2008
Sumario
El recurrente elabora la argumentación destinada a establecer la procedencia del pago de las rentas
hasta el término de los dos años por el cual se pactó el contrato de arriendo, sin embargo, olvidó
extender el error de derecho a la transgresión de las normas legales que tienen el carácter de decisorias
de la litis, únicas que regulan la cuestión controvertida que fuera sometida a la resolución de los
tribunales de justicia. En efecto, omite el actor invocar como vulneradas las normas del Código Civil que
podrían regir la materia, en particular el artículo 1945 de dicho cuerpo legal y que es, precisamente, la
disposición en que sustentó su demanda y recurso de apelación, pero no la casación. La situación
anterior tiene como efecto que el recurrente acepta la forma en que se aplicó o dejó de aplicar la norma
prevista en el Código Civil por parte de los jueces del fondo, en especial en la cuestión debatida en este
recurso, de forma tal que, en estas circunstancias, el recurso interpuesto no puede prosperar, puesto
que lo resuelto, en el punto preciso que ha sido materia del pronunciamiento de los jueces de fondo y
que motivó la limitación en el pago de la renta hasta la restitución del inmueble arrendado, no fue
denunciado como error de derecho (Considerando 5º).
Fecha: 12/06/2009
Rol: 2326-2009
Sumario
Inmobiliaria, dueña del inmueble en cuestión, celebró un nuevo contrato de arrendamiento, habiendo
puesto término al anterior, en circunstancias de que parte de él, concretamente los estacionamientos,
estaban en poder de un tercero, la ya señalada firma subarrendataria. Por lo tanto, en relación con los
estacionamientos, se encontraba en la imposibilidad de entregarlos al nuevo arrendatario, y lo que
legalmente procede es que dicha inmobiliaria accione en contra de la subarrendataria para poner
término al contrato respectivo, y cumpla con su obligación de entregar la cosa arrendada al nuevo
arrendatario. En ningún caso tiene este último acción para obtener la restitución, puesto que carece de
título para ello, ya que no es ni dueña, ni subarrendadora respecto de (tercero) (Considerando 3º).
Reconducción tácita de arrendamiento es inaplicable si no existe renovación expresa del contrato a plazo fijo
Fecha: 08/05/2009
Rol: 417-2008
Sumario
Fecha: 07/05/2009
Rol: 1826-2006
Sumario
Los contratos que dan origen a esta controversia, son contratos de arrendamiento con una opción de
compra para el arrendatario y no con una promesa de compra, lo que lo haría obligatorio para el
arrendatario al concluir el arrendamiento.
La opción, por el contrario, le permite no tomarla y restituir el inmueble a su propietario, en este caso
al demandante, lo que por lo demás se señala como posibilidad expresamente en los contratos
acompañados a los autos.
Adicionalmente, la promesa de compraventa según reza el artículo 1554 del Código Civil, tiene una
serie de requisitos que la hacen ser obligatoria, de tal suerte que el contrato debe estar estructurado de
tal forma que solamente falten para que sea perfecto la tradición de la cosa o las solemnidades que las
leyes prescriban.
Lo anterior se aleja del concepto de opción, que permite a quien deba ejercerla, la posibilidad tanto
de adquirir el inmueble, como la de no hacerlo, encontrándose debidamente reguladas ambas
posibilidades, tal como se hace en los contratos de autos.
Que así las cosas, no es posible sostener, como equivocadamente lo hace la juez de la causa, que
se está en presencia de contratos de arrendamiento con promesa de compraventa, celebrado entre las
partes en los términos de la Ley Nº 19.281. Por el contrario, a estos sentenciadores asiste la convicción
de que se está frente a contratos de arrendamiento de inmuebles de aquellos reglados en los párrafos
1º, 2º, 3º, 4º y 5º del Título XXVI del Libro IV del Código Civil y, específicamente de aquellos a que se
refiere la Ley Nº 18.101 sobre arrendamientos de predios urbanos, con opción de compra a la fecha de
su término.
Que al haber definido la normativa aplicable en la especie y descartado por completo la aplicación de
la Ley Nº 19.281, evidentemente también deberá desecharse totalmente la aplicación del artículo 40 de
la aludida ley, en cuanto establece, como lo hacen los fallos recurridos, que será juez competente para
conocer de cualquier controversia en relación con los contratos por esa ley reglados, un juez árbitro de
aquellos que figuren en el registro de jueces que llevará el Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Que como consecuencia de lo expuesto, es manifiestamente claro que la competencia para conocer
y fallar el fondo de las acciones deducidas y acumuladas en estos autos, es del juez de primera
instancia que, erróneamente, declaró su incompetencia en los fallos apelados. (Considerandos 2º a 5º).
Ficha 96 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Fecha: 28/04/2009
Rol: 6895-2007
Sumario
En efecto, la norma aludida (artículo 1449 del Código Civil) regula la que la doctrina ha denominado
"estipulación a favor de otro" y dispone en su inciso 1º que cualquiera puede estipular a favor de una
tercera persona, aunque no tenga derecho para representarla; pero sólo esta tercera persona podrá
demandar lo estipulado; y mientras no intervenga su aceptación expresa o tácita, es revocable el
contrato por la sola voluntad de las personas que concurrieron a él. Del concepto que otorga la ley se
desprende con claridad que en la estipulación a favor de otro intervienen tres interesados: el estipulante,
que es quien contrata a favor del tercero; el promitente, quien se compromete a favor del tercero en
calidad de deudor de éste; y el beneficiario, que es el acreedor de la estipulación efectuada a su favor.
Esta institución supone la celebración de un contrato entre estipulante y promitente, pero el derecho que
emana de éste, esto es, la calidad de acreedor, nace a favor del beneficiario, quien es ajeno a aquella
relación. Dicho de otro modo, el estipulante contrata directamente con el promitente para que los
aspectos favorables de la convención se radiquen en forma definitiva en el patrimonio del beneficiario,
quien los acepta para sí. (Considerando 3º).
3. La figura de cesión de contrato tiene lugar cuando uno de los contratantes, con el consentimiento
del otro, traspasa los derechos y obligaciones emanados de un contrato bilateral a un tercero, que pasa
a ocupar en la convención la misma situación jurídica del cedente. Por la cesión de contrato, en
consecuencia, se traspasa la calidad íntegra de contratante. Si bien la eficacia o validez de esta
institución fue inicialmente resistida, sobre la base del impedimento de aceptar la cesión de deudas, lo
cierto es que la práctica frecuente, fundada en el principio de la autonomía de la voluntad, reconoce la
posibilidad de que las partes convengan la subsistencia de una obligación con un nuevo deudor y, en
este evento, será el mismo contrato el que subsistirá, con otro contratante. (Considerando 5º).
4. Es evidente que para que la cesión de contrato produzca efectos es necesario, en primer término,
el consentimiento del cedente, pues él es quien se desprende de sus derechos. Asimismo, resulta
indispensable la voluntad del contratante cedido, en razón del aspecto pasivo del contrato, ya que de lo
contrario el cedente se liberaría de sus obligaciones sin intervención del acreedor de ellas, y del
cesionario, toda vez que adquiere los derechos de que se desprende el cesionario y las obligaciones
correspondientes al contrato de que se trate. El cesionario, como se indicó, pasa a ocupar la misma
situación jurídica del cedente, esto es, lo reemplaza en el contrato y, en consecuencia, puede exigir el
cumplimiento de los créditos que a su favor emanen de éste y queda obligado a cumplir las obligaciones
que de éste también derivan. Es por lo anterior que resulta tan crucial exigir el consentimiento del
cesionario, pues no sólo adquiere derechos, sino que también contrae obligaciones. (Considerando 6º)
De este modo, la falta de pago de las facturas extendidas a nombre de Lefersa S.A. correspondientes
a los meses de diciembre de 1998 y enero y febrero de 1999, circunstancia que el fallo impugnado
reconoce —no obstante señalar, equivocadamente como se concluyó, que a esta compañía no le asistía
la obligación de solucionarlas—, constituye el hecho que hace operar la condición resolutoria envuelta
en todo contrato bilateral de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado, prevista en el inciso 1º
del artículo 1489 del Código Civil. Esta norma ha sido denunciada como infringida por la recurrente y,
efectivamente, ha resultado vulnerada, pues no obstante configurarse sus presupuestos de hecho, los
sentenciadores han dejado de aplicarla, incurriendo con ello en error de derecho.
Que en virtud de lo concluido en el fundamento que antecede y teniendo asimismo en consideración
que el yerro advertido ha influido sustancialmente en lo dispositivo de la decisión, el recurso de casación
será acogido. (Considerandos 8º y 9º).
Fecha: 03/03/2009
Rol: 394-2007
Sumario
Cabe consignar que si bien no existe en el ordenamiento jurídico vigente impedimento para que un
establecimiento comercial y de expendio de alcoholes pueda ser arrendado con sus respectivas
patentes, tanto comerciales como de alcoholes, ello no es suficiente frente a la municipalidad ya que el
arrendatario en tal caso debe informar de ello al municipio y efectuar las anotaciones o constancias
correspondientes para determinar el nuevo valor de las patentes y en el caso de las patentes de
alcoholes para acreditar la inexistencia de inhabilidades legales por quien va a desarrollar efectivamente
la correspondiente actividad. (Considerando 9º).
Corte Suprema
Cobro de pesos, acogido. Acto simulado. Acto afecta a terceros. Terceros de buena fe. Imposibilidad de anular
acto simulado ya que afectaría a terceros. Teoría de la apariencia. Cesión de créditos. Requisito de oponibilidad de
cesión. Notificación deudor o aceptación por parte de este
Fecha: 12/01/2009
Rol: 6547-2007
Sumario
En las manifestaciones de la vida jurídica, al igual que en otros dominios, no siempre la realidad
concuerda con las apariencias. Frente a la dualidad de apariencia y realidad surge el deseo de proteger
a los terceros de buena fe, cuando el interés de éstos lo hace necesario, los jueces no deben considerar
totalmente ineficaz un acto ejecutado por quien se ha comportado como titular verdadero del derecho.
(...) por otra parte, y siempre dentro del derecho privado, se encuentran causas de apariencia en
aquellas relaciones en que han intervenido sujetos con titularidad, capacidad o cualidades aparentes,
que le dan legitimidad a sus actuaciones.
II. Para que la cesión de créditos pueda producir efectos respecto del deudor y de terceros, es
necesario la notificación al deudor o la aceptación de éste, condiciones separadas e independientes, de
modo que la cesión produce los efectos dichos siempre que se verifique una sola de ellas, si bien nada
repugna a que puedan concurrir ambos, pero sin que ello sea necesario, porque cada una es suficiente
por sí sola. (Considerandos 5º a 7º de sentencia de reemplazo).
Corte Suprema
Fecha: 09/12/2008
Rol: 5821-2007
Sumario
La doctrina tradicionalmente ha distinguido entre pacto comisorio simple y pacto comisorio calificado
o con cláusula de resolución ipso facto. Por su parte la jurisprudencia ha sostenido, basándose en el
principio de la autonomía de la voluntad, que las partes pueden estipular el pacto comisorio, sea simple
o calificado, en otros contratos distintos de la compraventa o incluso en esta última, pero relativo a la
obligación de entregar la cosa. El hecho de haber estipulado las partes un pacto comisorio no puede ser
obstáculo, como se afirma en el recurso, para el ejercicio de la acción resolutoria que emana de la
condición resolutoria tácita y al haberse verificado el hecho de que pendía tal condición, según se tuvo
por acreditado por los jueces de la instancia, debió la sentencia haber declarado el término del
arrendamiento y, consecuencialmente, condenar al pago de las rentas insolutas. En efecto, si se
convino por las partes un pacto comisorio calificado, esto es, con cláusula de resolución ipso facto, y se
sujetó la producción de su efecto de resolución o término del contrato de pleno derecho, sin necesidad
de declaración judicial, al cumplimiento de alguna otra exigencia suplementaria en la especie, el envío
de una carta certificada o entregada por notario comunicando el término de la convención, la falta de
verificación de esta última condición adicional únicamente puede producir como consecuencia que el
efecto propio del pacto no opere, pero no impide que el acreedor diligente, frente al incumplimiento de
su deudor, ejerza la acción resolutoria que nace del artículo 1489 del Código Civil. (Considerandos 7º y
8º).
Rol: 5834-2007
Sumario
Resulta invariable que en virtud de la carta suscrita, el demandado manifestó al actor su decisión de
poner término al contrato de arrendamiento, cumpliendo con el aviso pactado en el contrato, de suerte
tal que, habiéndose tenido por acreditado que su manifestación de voluntad en tal sentido fue eficaz y
no siendo las conclusiones del fallo que se sustentan en los hechos señalados susceptibles de revisión
por la vía de la casación en el fondo, no ha podido existir la infracción a los artículos 1545 y 1955 del
Código Civil, que pretenden los recurrentes, desde que, por lo mismo, no puede entenderse, de manera
alguna, que el contrato de arrendamiento celebrado entre las partes se haya renovado tácitamente,
razón por la cual los jueces del fondo, al desestimar la demanda en aquella parte, han aplicado
debidamente los preceptos legales que se invocan como transgredidos, y, como consecuencia de ello,
el recurso en estudio deberá ser desestimado. (Considerando 8º).
Fecha: 26/11/2008
Rol: 6583-2007
Sumario
Fecha: 28/10/2008
Rol: 618-2008
Sumario
Se puede constatar que la tenencia material y ocupación (del inmueble) derivan de un contrato de
arrendamiento vigente a la fecha, cuya legalidad no corresponde analizar en esta sede procesal,
materias que deberán ser discutidas en el procedimiento correspondiente, por lo que sin perjuicio de los
derechos de la recurrente y de terceros, no se puede estimar que los recurridos hayan incurrido en una
conducta arbitraria o ilegal destinada a provocar una privación, perturbación o amenaza en el legítimo
ejercicio de las garantías constitucionales mencionadas en el recurso, lo que conduce al rechazo de
esta acción cautelar. (Considerando 5º).
Terminación de contrato. Contrato de leasing. Concepto. Opción de compra. Leasing no puede ser encasillado
como arrendamiento
Fecha: 11/07/2008
Rol: 128-2005
Sumario
El contrato de leasing es aquel en virtud del cual una de las partes vende un bien de su propiedad, de
naturaleza mueble o inmueble, a una empresa de leasing, la que instantáneamente, concede a la
primera el uso del mismo bien contra el pago de una renta periódica, durante un plazo determinado,
otorgándole una opción de compra al final del contrato por un valor residual preestablecido. En su
constitución y ejecución muestra elementos que se encuentran en una serie de figuras contractuales
típicas de arrendamiento, compraventa, opción de compra o pacto de retrocompra, entre otros, pero
diferenciándose claramente de éstos. El leasing tiene una fisonomía jurídica propia que no puede ser
encasillada en un contrato de arrendamiento (Considerando 3º). El pacto comisorio calificado puede
estipularse en cualquier contrato y, por tanto, debe respetarse, de manera que la resolución se producirá
de pleno derecho, tal como las partes lo han querido, por el solo hecho del incumplimiento, limitándose
la sentencia judicial a constatar la resolución ya producida. (Considerando 7º).
Fecha: 03/07/2008
Rol: 1544-2007
Sumario
Fecha: 30/06/2008
Rol: 5857-2006
Sumario
Fecha: 11/06/2008
Rol: 66-2007
Sumario
La pretensión del recurso en orden a que a la materia debatida debía aplicarse el procedimiento del
juicio ordinario y no el procedimiento que se siguió, esto es, el contemplado en los artículos 7º y 8º del
Título III de la Ley Nº 18.101, los que denunció como infringidos, tal alegación también es jurídicamente
inadmisible, de acuerdo con lo que expresamente dispone el inciso final del artículo 2º de la citada ley,
que preceptúa: no obstante, los juicios que se originen en relación con los contratos a que se refieren
los Nºs. 3 y 5 de este artículo, se sustanciarán con arreglo al procedimiento establecido en el Título III de
la presente ley, de lo que se sigue que el fallo impugnado no incurrió en las infracciones de ley
denunciadas (Considerando 5º).
Contrato de fianza. Exigir del deudor principal el relevo. Caución de resultas o consignar medios de pago.
Facultad del fiador. Calidad del fiador que puede ejercer el derecho
Fecha: 09/06/2008
Rol: 142-2004
Sumario
Si bien el contrato de fianza se celebra únicamente entre el fiador y el acreedor sin que intervenga el
deudor principal, el artículo 2369 del Código Civil faculta al fiador para exigir de dicho deudor principal
que le obtenga el relevo, le caucione las resultas de la fianza o le consigne medios de pago, si se dan
algunos de los supuestos taxativamente señalados en esa norma, entre otros, cuando se ha vencido el
plazo o cumplido la condición que hace inmediatamente exigible la obligación principal en todo o en
parte. Según la doctrina, este derecho puede ejercerlo cualquier fiador, sea que se trate de una fianza
civil o mercantil, legal, judicial o convencional, gratuita o remunerada, pudiendo también invocarlo el
fiador solidario y el fiador y codeudor solidario. Este último dice Somarriva porque si bien en sus
relaciones con el acreedor es deudor directo, con respecto a los codeudores es un simple fiador por no
tener interés en la deuda cuya garantía se estipuló en la solidaridad. La única excepción a esta regla es
la consignada en el artículo 2369 inciso final del Código Civil, esto es, cuando el fiador afianzó contra la
voluntad del deudor (Manuel Somarriva: Tratado de las Cauciones, edit. Nascimento, Santiago, 1943,
Nº 165, p. 169) (Considerandos 1º y 2º).
Corte Suprema
Arrendamiento. Predios urbanos. Terminación del contrato a plazo. Anticipado. Formalidades. Cumplimiento.
Terminación tácita
Fecha: 27/05/2008
Rol: 1438-2008
Sumario
La norma contenida en el artículo 4º de la Ley Nº 18.101 tiene el propósito de darle la formalidad que
el artículo señala, para los efectos de que la notificación no sea materia de objeciones por parte del
arrendatario, mediante la cual toma conocimiento de la voluntad del arrendador de poner término
anticipado de un contrato de arrendamiento a plazo fijo que no exceda de un año, finalidad que en la
especie se ha cumplido con el reconocimiento de la demandada de haber recibido la carta referida, sin
que tenga explicación o validez alguna, dado el tenor de la misma, lo expuesto por el demandante, en el
sentido que sólo tenía por propósito cobrar las rentas atrasadas. Es decir, en el presente caso, se
deduce que las partes tácitamente acordaron poner término anticipado al contrato (Considerando 9º de
sentencia de Corte de Apelaciones).
Cobro de rentas por término anticipado de contrato se ajusta a lo acordado por partes
Fecha: 06/05/2008
Rol: 966-2007
En la especie es el término anticipado del contrato de arrendamiento el hecho que explica el cobro de
las rentas que pretende el demandante reconvencional y no la existencia de rentas insolutas el que
justifica la declaración de término del arriendo. Por la misma razón, la regla del artículo 1545 del Código
Civil ha sido correctamente aplicada, pues el término de la convención y los efectos que de ella se
siguen y que dan sustento a las peticiones de la reconviniente, han sido los expresamente previstos por
las partes contratantes (Considerando 4º).
Corte Suprema
Arrendamiento, vigencia efectos. Contrato base del subarrendamiento, vigencia. Desahucio, concurrencia.
Calidad de subarrendatario
Fecha: 14/04/2008
Rol: 1672-2006
Sumario
Las infracciones que el recurrente estima se han cometido por los jueces del fondo, persiguen
desvirtuar el supuesto fáctico fundamental asentado por aquellos, esto es, que el subarriendo
concretado por la actora y por el demandado se extendió únicamente al 31 de enero de 2005; hecho
que resulta inamovible para este tribunal, conforme a lo previsto en el artículo 785 del Código de
Procedimiento Civil, desde que ha sido establecido con sujeción al mérito de los antecedentes,
probanzas aportadas por las partes, interpretación y aplicación de normas atinentes al caso en estudio,
no siendo posible impugnarlo por la vía de la nulidad que se revisa (Considerando 4º).
Rol: 5283-2004
Sumario
Si bien en virtud de la libertad contractual y en atención, además, al carácter de caución que reviste
toda cláusula penal, las partes pueden estipular libremente una pena, no obstante, ésta es susceptible
de moderación cuando la obligación principal ha sido parcialmente ejecutada; atendido entonces lo
razonado por el fallo en alzada, por razones de equidad que consagra el artículo 1539 del Código Civil,
la multa a que se refiere la cláusula del contrato de arrendamiento, establecida en los casos en que el
arrendatario incurra en mora de pagar la renta de arrendamiento del inmueble, se precisa que ella no
será superior nunca a la garantía pactada entre las partes (Considerando 3º).
Fecha: 25/01/2008
Rol: 929-2007
Sumario
Establecida la naturaleza mueble del hecho debido, la cláusula 2ª del contrato acompañado a fojas 5,
en cuanto señala que la administradora tendrá derecho a dejar sin efecto este contrato de
arrendamiento, mediante comunicación escrita despachada por correo certificado, con a lo menos 10
días de anticipación a la fecha de término determinada, no puede interpretarse como una cláusula de
renovación automática para el caso de no darse tal aviso, como parece entenderlo el actor, pues en
estos casos la renovación debe ser expresa. De lo antes señalado, resulta claro que la reconducción
tácita alegada por el actor no resulta procedente en el tipo de contrato en el que la invoca. Por lo demás,
la norma del artículo 1956 inciso 3º del Código Civil requiere cuando el arrendamiento es de una cosa
raíz que el arrendatario con el beneplácito del arrendador hubiere pagado la renta de cualquier espacio
de tiempo subsiguiente a la terminación del contrato o, si ambas partes hubieren manifestado por
cualquier otro hecho igualmente inequívoco su intención de perseverar en el arriendo. En consecuencia,
no se acreditó que el demandado tuviera la obligación de respetar un término de duración del
arrendamiento, más allá de la fecha en la cual recuperó el uso del espacio común referido en el contrato
y, de este modo, no se ha demostrado incumplimiento del arrendador respecto de las obligaciones del
contrato conforme al artículo 1489 del Código Civil, invocado como fundamento de la demanda.
También se demandó por el actor la devolución de la garantía que entregara en el momento de suscribir
el contrato de arrendamiento y, como se encuentra acreditado en autos, con la prueba rendida, que este
arriendo terminó, la garantía carece de razón de ser y corresponde que el arrendatario la devuelva
(Considerandos 5º a 7º).
Ficha 113 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento, alcance de las obligaciones del fiador y codeudor solidario. Alcance de la fianza y
solidaridad. Obligaciones del fiador y codeudor solidario ante renovación tácita. Efecto de la renovación tácita
respecto de fiador y codeudor solidario. Efecto de la renovación tácita respecto de fianza y solidaridad
Fecha: 09/01/2008
Rol: 6714-2006
Sumario
Que si bien en la cláusula decimocuarta del contrato de arriendo se lee que con el objeto de
garantizar su fiel cumplimiento y el de las renovaciones o modificaciones que posteriormente pudieren
pactarse, hasta la restitución del inmueble (el demandado) se constituye en fiador y codeudor solidario
de las obligaciones que contrae el arrendatario; ello no obsta a que resulte aplicable el artículo 1957
antes aludido, pues, como se destaca en la trascripción de la cláusula, el fiador sólo consintió en
caucionar también el cumplimiento de las obligaciones que hubieren devenido como consecuencia de
una renovación o modificación contractualmente convenida y no como efecto de la aplicación de una
regla prevista en la ley, como es la del inciso 3º del artículo 1956 citado.
Cuarto: que, de este modo, puede afirmarse que al momento de vencer el plazo previsto
originalmente en el contrato de arrendamiento se extinguieron las obligaciones que en virtud de ese acto
jurídico había contraído el fiador o codeudor solidario y que, por consiguiente, no resulta procedente que
se pretenda hacer responder a éste del pago de rentas devengadas con posterioridad, originadas en
una renovación del contrato no convenida por las partes y en la que aquél, por lo mismo, no consintió.
Así las cosas, habrá de desestimarse también la demanda en cuanto pretende el pago de esas
rentas de arrendamiento (Considerandos 3º y 4º de sentencia de reemplazo).
Corte Suprema
Fecha: 08/01/2008
Rol: 6714-2006
Sumario
De acuerdo a lo prescrito en el inciso 1º del artículo 1956 del Código Civil, terminado el
arrendamiento por desahucio, o de cualquier otro modo —entre ellos, obviamente, el cumplimiento del
plazo estipulado—, no se entenderá en caso alguno que la aparente aquiescencia del arrendador a la
retención de la cosa por el arrendatario es una renovación del contrato.
Por su parte, el inciso 3º de la misma disposición establece que si la cosa fuere raíz —cuyo es el
caso de autos— y el arrendatario con el beneplácito del arrendador hubiere pagado la renta de cualquier
espacio de tiempo subsiguiente a la terminación, o si ambas partes hubieren manifestado por cualquier
otro hecho igualmente inequívoco su intención de perseverar en el arriendo —como también ha
resultado probado en el proceso—, se entenderá renovado el contrato bajo las mismas condiciones que
antes, pero no por más tiempo que el de tres meses en los predios urbanos y el necesario para utilizar
las labores principiadas y coger los frutos pendientes en los predios rústicos, sin perjuicio de que a la
expiración de este tiempo vuelva a renovarse el arriendo de la misma manera.
Ahora bien, el artículo 1957 del Código Civil establece que renovado el arriendo, las fianzas como las
prendas o hipotecas constituidas por terceros, no se extenderán a las obligaciones resultantes de su
renovación. Este precepto se explica por cuanto quien ha consentido en caucionar una deuda ajena se
obliga en los términos en que con su voluntad concurrió a la constitución de la obligación, pero sólo en
los términos en que originalmente fue convenida, a menos que consienta en sus ampliaciones,
modificaciones o renovaciones. (Considerandos 1º y 2º de sentencia de reemplazo)
Contrato de arrendamiento a plazo fijo. Restitución de las especies. Improcedencia de condenar al pago de
rentas posteriores al término del contrato. Contrato que está terminado no devenga rentas. Enriquecimiento sin
causa. Constitución de aval. Fianza cambiaria. Deudor solidario
Fecha: 02/01/2008
Rol: 1228-2002
Sumario
Pues éstas, como sabemos, se devengan mes a mes durante la vigencia del contrato.
Distinta es la situación del arrendamiento que recae en inmuebles para los cuales existe una regla
especial, como lo hemos dejado dicho.
Es frecuente que se convengan en los contratos de arriendo que la obligación del deudor se
garantice constituyéndose un tercero en fiador y deudor solidario y ello supone como mínimo dos
deudores: uno principal y otro, el subsidiario.
Pero la diferencia radica en que en la fianza hay dos obligaciones, una subordinada a la otra,
mientras en la solidaridad pueden haber varios obligados, pero una obligación tan solo.
La finalidad de exigir que la obligación se garantice en esta forma es que el fiador que se obligó como
deudor solidario no puede alegar el beneficio de excusión y responde por el total de la obligación.
Término de contrato de arrendamiento. Validez de los actos sobre cosa ajena. Arrendador que no es dueño ni
comunero de la cosa. Circunstancia que no obsta para acoger solicitud de desahucio. Arrendador debe garantizar
uso y goce tranquilo y pacífico de la cosa. Contrato de duración indefinida
Fecha: 02/01/2008
Rol: 1783-2007
Sumario
Que la circunstancia de no haber sido la arrendadora única y exclusiva dueña del retazo arrendado,
ni actualmente ser siquiera comunera del mismo, no le priva de efectos al contrato de arrendamiento, ya
que en nuestro sistema los actos sobre cosa ajena son, en principio, válidos, y en el caso del
arrendamiento tal posibilidad está expresamente admitida en el artículo 1916 inciso 2º del Código Civil.
Lo relevante es que el arrendador, en estos casos, garantice el uso y goce tranquilo y pacífico del
arrendatario sobre la especie arrendada.
Que en el evento que un contrato de arriendo se pacte por término indefinido, ello no quiere decir que
el contrato no habrá de tener conclusión, sino que ésta se deberá producir de la manera que prescribe el
artículo 1951 del Código Civil, esto es, por desahucio; y conforme lo señalado en el artículo 3º de la Ley
Nº 18.101, aplicable en la especie, tal desahucio podrá hacerse por notificación personal al arrendatario
practicada por vía judicial o por conducto de notario. (Considerandos 2º y 3º).
Para los efectos de la restitución, y conforme lo prevenido en el citado artículo 3º de la Ley Nº 18.101,
el plazo de que gozaba el arrendatario para restituir el inmueble, que alcanzaba en la especie a seis
meses contados desde la notificación, se encuentra vencido, por lo que éste deberá proceder a la
restitución del inmueble arrendado dentro de tercero día, sin perjuicio de aplicarse lo dispuesto en el
artículo 13 inciso 2º de la Ley Nº 18.101 (Considerando 10).
No procede imponer medida precautoria en bien social por deuda de marido sin autorización de mujer
Fecha: 02/01/2008
Rol: 843-2003
Sumario
Según dispone el artículo 1749 del Código Civil, si el marido se constituye en aval, codeudor
solidario, fiador u otorga cualquiera otra caución respecto de las obligaciones contraídas por terceros,
sólo obligará sus bienes propios. En los casos a que se refiere este inciso, para obligar a los bienes
sociales necesitará la autorización de la mujer. Aparece del contrato de arrendamiento, que el ejecutado
se obligó con aval y codeudor solidario sin obtener autorización de su cónyuge y, en tales condiciones,
sólo obliga sus bienes propios. No procede imponer una medida precautoria a bien social por una deuda
propia del marido que no autorizó su cónyuge (Considerandos 4º, 5º y 7º).
Corte Suprema
Demandado nudo propietario y arrendatario. Mejoras son de cargo del demandado. Infracción de la ley del
contrato
Fecha: 26/12/2007
Rol: 1178-2006
Cita online: CL/JUR/6463/2007
Sumario
Fecha: 08/10/2007
Rol: 189-2006
Sumario
Fecha: 14/08/2007
Rol: 116-2007
Sumario
Lo que concierne a la concurrencia de los presupuestos fácticos del hecho gravado en el artículo 8º
letra g) del Decreto Ley Nº 825, coincide este tribunal con lo establecido en la sentencia de primera
instancia en cuanto a que el acto jurídico celebrado por la contribuyente con un tercero, fue un contrato
de arrendamiento de inmueble con instalaciones, pues no otra cosa son los objetos muebles de que da
cuenta el documento, consistente en un inventario de los bienes que guarnecen el local, tal y como se
expresa en el fallo en alzada; dejando además, constancia que, como se lee en el contrato de arriendo,
el local fue arrendado para la venta de artículos de librería, actividad para la cual bastan los bienes
comprendidos en el referido inventario, siendo cosa distinta que la arrendataria haya procedido a
instalar, —probablemente para mejorar sus ingresos— otros bienes, como fotocopiadoras, una máquina
para laminado y una guillotina, con lo que, en consecuencia, se trata de una convención afecta al
impuesto al valor agregado (Considerando 2º).
Arrendador debe devolver mes de garantía a pesar que contrato termine por culpa de arrendatario si así lo
pactaron
Fecha: 27/07/2007
Rol: 282-2007
Sumario
El artículo 1945 del Código Civil establece que, cuando por culpa del arrendatario se pone término al
contrato, será obligado a la indemnización de perjuicios y, especialmente al pago de la renta por el
tiempo que falte hasta el día en que desahuciando hubiere podido hacer cesar el arriendo o en que el
arriendo hubiera terminado sin desahucio. Por lo tanto, de conformidad además, con lo dispuesto en el
artículo 1545 del mismo texto legal, el demandado debe pagar al actor la suma de dinero equivalente a
sesenta días por las rentas que no se percibieron desde marzo hasta mayo de 2006, ambas fechas
inclusive. El supracitado artículo 1545 reza que todo contrato legalmente celebrado es una ley para los
contratantes, y no puede ser invalidado sino por su consentimiento mutuo o por causas legales. Así
entonces, deberá respetarse por las partes lo estipulado en el contrato de arrendamiento respecto del
mes de garantía cancelado en efectivo al arrendador en la fecha de la celebración del mismo y que éste
debía devolver al arrendatario sesenta días posteriores a la desocupación de la propiedad, descontando
gastos por desperfectos o deterioros de la propiedad (Considerandos 5º y 6º).
Corte Suprema
Nulidad de contrato. Declarada de oficio por tribunal. Contrato de arriendo. Objeto y patente comercial
Fecha: 02/05/2007
Rol: 1747-2007
Sumario
Las cosas susceptibles de arrendamiento, son las corporales e incorporales que pueden usarse sin
consumirse. Las patentes comerciales son una contribución, un impuesto, cuyo cumplimiento constituye
el cumplimiento de una obligación tributaria. De manera que no son susceptibles de ser objeto de
arriendo. Así las cosas, si se han dado en arrendamiento, al haberse omitido el cumplimiento de un
requisito que la ley prescribe para la validez del contrato en consideración a su naturaleza y que
aparece de manifiesto en el contrato celebrado, corresponde que el tribunal declare la nulidad absoluta
de oficio de éste. (Considerando 2º de sentencia de Corte de Apelaciones).
Corte Suprema
Pacto comisorio calificado y contrato de arrendamiento. Efectos pacto, doctrina actual y clásica. Naturaleza
jurídica del pacto
Fecha: 09/04/2007
Rol: 5869-2005
Sumario
Conforme a la doctrina actual, el pacto comisorio con cláusula de resolución, ipso facto o pacto
comisorio calificado tiene plena validez en el contrato de arrendamiento, haciendo que opere de pleno
derecho la terminación del contrato en caso de que el arrendatario no cumpla con sus obligaciones, sin
necesidad de declaración judicial. En consecuencia, cumplida la condición resolutoria deberá restituirse
lo que se hubiere recibido bajo tal condición, ya que como, se señalara, el pacto comisorio calificado no
es sino una condición resolutoria expresamente señalada, lo anterior es totalmente distinto a lo
sostenido años atrás cuando el pacto comisorio ipso facto era asimilado a la condición resolutoria tácita
expresada y por tanto podía pedirse el cumplimiento del contrato o su resolución, con indemnización de
perjuicios. (Considerando 2º de la sentencia Corte de Apelaciones).
Corte Suprema
Fecha: 26/12/2006
Rol: 2275-2005
Sumario
Que la determinación de la calidad de rústico de un predio constituye una cuestión de hecho, dado
que aquello se refiere a aptitudes propias de un inmueble que le permiten ser destinado a actividades
agrícolas, ganaderas o forestales.
En el caso de autos, no existen antecedentes que permitan sostener que el predio en cuestión carece
de dichas aptitudes, más aún si se considera que, al no haber sido alegada tal circunstancia por el
incidentista, no hubo punto de prueba ni menos, medios probatorios que ilustraran al tribunal sobre el
particular.
Que, de acuerdo con el artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil, en relación con los
numerales 5º, 6º y 8º del auto acordado de esta corte de 30 de septiembre de 1920, la sentencia debe
contener los fundamentos de hecho o de derecho que le sirven de sustento, exigencia que no se cumple
si, como se advierte de los fundamentos de la sentencia atacada, ésta no contiene la ponderación de
algún antecedente probatorio concreto que permita a los jueces del fondo concluir que el predio
arrendado no tiene la calidad de rústico, para de esa manera estimar inaplicable la regla de competencia
del artículo 2º del Decreto Ley Nº 993.
Que en tales circunstancias resulta efectivo que la sentencia impugnada contiene el vicio aludido en
el recurso de casación en la forma, de acuerdo con el Nº 5 del artículo 768 del código de procedimiento
civil, por lo que será acogido, invalidándose la sentencia que lo contiene. (Considerandos 5º a 7º).
Fecha: 04/12/2006
Rol: 604-2006
Para que se entienda terminado el contrato de arrendamiento es necesario que se dé él aviso, con la
anticipación mínima de 30 días, por medio de una carta certificada dirigida al arrendador y, además, que
se desocupe la propiedad y se ponga a su disposición, entregándole las llaves. La parte demandada no
ha acreditado legalmente que haya cumplido con las exigencias señaladas, por lo que debe estimarse
que el contrato mantuvo su vigencia hasta la fecha que las partes convinieron en su conclusión
(Considerandos 4º, 5º y 6º).
Límite contractual a responsabilidad legal. Contrato de leasing. Responsabilidad del arrendatario. Oportunidad de
celebración del contrato
Fecha: 26/10/2006
Rol: 3316-2003
Sumario
El contrato contiene en su cláusula décima un pacto respecto a que la parte del arrendatario asume
todos los riesgos por accidentes o daños a terceros que puede provocar el bien dado en arrendamiento,
por cualquier causa, sin limitación alguna y desde ya libera de toda responsabilidad a la arrendadora y
habiéndose producido daños a terceros, la arrendataria tendrá obligación de pagar, a su costo, todas las
indemnizaciones que sean procedentes. Tal convención produce efectos sólo entre las partes que
suscribieron el contrato, es lo que se denomina, el efecto de ley entre los intervinientes, el que se
encuentra sancionado en nuestro sistema legislativo en el artículo 1545 del Código Civil, pero no le es
oponible a terceros que resulten afectados por acciones cometidas con el objeto dado en
arrendamiento, pues a la fecha de ocurrencia del hecho materia de esta investigación se encontraba
vigente el artículo 174 de la Ley Nº 18.290 en el que estipulaba que el propietario del vehículo es
solidariamente responsable de los daños y perjuicios que se ocasionen con motivo del uso del vehículo,
salvo las excepciones que indica, sin que contemple la referida los contratos de arrendamiento de
vehículos por medio de leasing. Es tan claro que dicha disposición debe aplicarse en el sentido
señalado, que fue el propio legislador quien debió dictar una modificación al respecto, la que se contiene
en la Ley Nº 20.068, publicada con fecha 10 de diciembre de 2005 y que agregó como inciso final el
siguiente al artículo 174 de la Ley Nº 18.290: "la responsabilidad civil del propietario del vehículo será de
cargo del arrendatario del mismo cuando el contrato de arrendamiento sea con opción de compra e
irrevocable y cuya inscripción en el registro de vehículos motorizados haya sido solicitada con
anterioridad al accidente. En todo caso el afectado podrá ejercer sus derechos sobre el vehículo
arrendado" (Considerandos 2º a 4º).
Corte Suprema
Prueba testigos. Deber de escriturar contratos. Carácter consensual del arrendamiento. Extinción derecho de
arrendador
Fecha: 21/09/2006
Rol: 3839-2006
Sumario
Que los argumentos del recurrente no son atendibles, toda vez que los jueces del fondo, apreciando
la prueba testimonial rendida de acuerdo a las normas de la sana crítica, han establecido la existencia
del contrato de arriendo, el que es de carácter consensual; por lo que a su respecto no rige la limitación
de los artículos 1708 y 1709 del Código Civil, cuya transgresión denuncia el recurrente; sobre todo si en
la sentencia no se condena al demandado a pagar ninguna suma por concepto de renta insoluta.
Que, en consecuencia los sentenciadores han hecho una correcta aplicación de las disposiciones
legales atinentes al caso de que se trata; razón por la cual, el recurso de casación no puede prosperar,
puesto que adolece de manifiesta falta de fundamento. (Considerandos 2º y 3º).
Contrato de arrendamiento de inmueble no es suficiente para acreditar posesión de muebles. Tercería rechazada
Fecha: 17/07/2006
Rol: 4492-2003
Sumario
Fecha: 14/07/2006
Rol: 3780-2001
Sumario
El artículo 1950 Nº 3 del Código Civil, dispone que el contrato de arrendamiento expira por la
extinción del derecho de arrendador y ello ocurre, entre otras situaciones, cuando el arrendador vende la
cosa arrendada. En ese evento, es la sola pérdida del derecho que facultaba dar la cosa en
arrendamiento la que produce la terminación del contrato y, como es principio contractual el que estos
negocios jurídicos terminan por un solo modo, resulta de toda evidencia que no puede pretenderse que
sea necesario, además, ejercer una acción para demandar esa misma terminación. No altera la
conclusión precedente la circunstancia que el arrendador haya entregado el inmueble en
subarrendamiento, puesto que, conforme al artículo 22 de la Ley Nº 18.101, todo lo que en ella se
dispone respecto de los arrendadores y arrendatarios se aplica, en su caso, a los subarrendadores y
subarrendatarios. Esta regla no hace sino reconocer el carácter dependiente o derivado que tiene el
contrato de subarrendamiento respecto del de arrendamiento. Habiéndose extinguido el contrato de
arrendamiento al venderse el inmueble arrendado, se extinguió no solamente aquel arrendamiento, sino
también el subarrendamiento, sin que fuera preciso deducir en contra de la subarrendataria ninguna
acción judicial de terminación (Considerandos 3º a 5º).
Corte Suprema
Delito de apropiación indebida. Sujeto activo. Ejercicio del derecho legal de retención
Fecha: 07/06/2006
Rol: 3763-2003
Sumario
Que el artículo 470 Nº 1 del código penal tipifica el denominado delito de apropiación indebida
sancionando con las penas del artículo 467 del mismo a los que en perjuicio de otro se apropiaren o
distrajeren dinero, efectos o cualquier cosa mueble que hubieren recibido en depósito, comisión o
administración, o por otro título que produzca obligación de entregarla o devolverla. Pues bien, el
recurso intentado postula la hipótesis que el derecho legal de retención declarado por sentencia civil
ejecutoriada en contra del arrendatario, es suficiente título a modo de depósito, por el cual el
arrendatario dueño o simplemente tenedor de las especies muebles comprendidas en la medida,
adquiere la obligación de entregarla o devolverla al arrendador, y al no hacerlo, por no encontrarse las
especies en poder del primero al momento de hacerse efectivo el pago de las rentas adeudadas, incurre
precisamente en la figura penal del recordado Nº 1 del artículo 470 del código penal por no haberse
cumplido con dicha obligación, constituyendo elementos comprendidos en el tipo penal. Por ello, es
fundamental entonces analizar los elementos que resultan ser de la esencia de este delito en particular.
No cabe dudas que en nuestro derecho penal positivo la apropiación indebida constituye un atentado
en contra de la propiedad; por lo demás nuestro código penal lo ubica precisamente entre los delitos que
la afectan, y consiste en que una persona se queda para sí cosas ajenas sin cumplir algún deber jurídico
que le impone la obligación de entregarlas o devolverlas; es por ello que la mayoría de los autores
consideran que el bien jurídico protegido es el derecho real de dominio y debe importar una merma real
del patrimonio del sujeto pasivo.
De esta suerte, sujeto activo de este delito resulta ser aquella persona no dueña de una cosa que no
cumple su obligación de entregarla o devolverla ejerciendo sobre ella derechos que importan verdaderos
actos de dominio (forma de apropiación) o bien dándole un uso o destino perjudicial diferente al que se
le ha asignado (forma de distracción); será sujeto pasivo del mismo, entonces, quien resulta ser titular
del derecho que autoriza a exigir del obligado el cumplimiento de la obligación de restituir a su debido
tiempo o de hacer un uso determinado de la cosa ajena (según definición de Ernesto Ure recordada por
don Sergio Politoff en El delito de apropiación indebida, Nascimento, 1957, p. 64).
Que, a su vez, el derecho legal de retención que el inciso 2º del artículo 1942 del Código Civil
consagra en favor de todo arrendador para asegurar el pago de lo que le debe el arrendatario por
concepto de rentas o indemnizaciones a que tenga derecho, comprende, en lo que interesa a la materia
de esta sentencia, todos los objetos con que el arrendatario lo haya amoblado, guarnecido o provisto, y
que le pertenecieren; y se entenderá que le pertenecen, a menos de prueba en contrario.
Desde ya destaca esta norma que la retención sólo puede comprender los objetos que sean de
propiedad del arrendatario y la presunción simplemente legal de pertenencia que dispone admite, como
es lógico, prueba en contrario.
De aquí que resulta pertinente recordar ahora que, como se dijera al principio, los jueces del fondo
dieron por acreditado el dominio de la mayoría de las especies comprendidas en el derecho de retención
declarado en favor del arrendador, respecto a personas naturales distintas del imputado y sólo con
respecto a éste su dominio en el minibús Asia motors patente kd-1909 y de 100 basas de pino Oregón,
de las cuales se encontraron 15 de ellas en el predio arrendado, hechos que por falta de
cuestionamiento en esta etapa del juicio a través de causal pertinente de nulidad procesal deben
tenerse por irrevocablemente establecidos.
De esto se desprende que, y con afán de acotar los aspectos que se comprenderán en los
razonamientos siguientes, sólo tendrán validez estrictamente en cuanto se refieran a las especies de
propiedad del encausado. (Considerandos 3º a 4º)
Corte Suprema
Fecha: 22/05/2006
Rol: 2754-2004
Sumario
Que constituyendo un hecho de la causa que el contrato de arrendamiento se extendió hasta el 1º de
junio de 1999, corresponde hasta esa fecha el pago de las rentas, sin que en tal determinación se
incurriera en error de derecho por los sentenciadores de la instancia.
Decimosegundo: que al sostener la demandada que el contrato fue "resciliado" en una fecha distinta
a aquella fijada como término del arrendamiento por los jueces del mérito, resulta fácil concluir que la
recurrente impugna los hechos establecidos en el fallo atacado, específicamente en lo que dice relación
con la duración del contrato de arrendamiento celebrado entre las partes, sin denunciar en tal
determinación el quebrantamiento de las normas reguladoras de la prueba.
A este respecto, como reiteradamente ha sostenido esta corte, el establecimiento de los hechos,
sobre la base de la apreciación de las probanzas allegadas al proceso, mediante las reglas que rigen la
prueba, queda agotada en las instancias respectivas; de modo que no es posible aceptar su alteración
por la vía de este recurso, a menos que se denuncien como infringidas normas reguladoras de la prueba
y ello resultare efectivo, cuyo no es caso de autos.
Que por lo antes razonado se puede concluir que lo decidido en la sentencia recurrida, al resolver la
litis, acogiendo la demanda de autos, no contiene los vicios que se denuncian en el recurso, en cuanto
por su intermedio se pretende impugnar presupuestos fácticos inamovibles, como los ya señalados.
Fecha: 13/04/2006
Rol: 2462-2005
Sumario
Las obras no fueron expresamente autorizadas en el respectivo contrato, tampoco consta que el
arrendador se haya comprometido expresamente a pagarlas, de manera tal que no pueden quedar
incluidas en las simples mejoras a que se refiere la cláusula decimotercera del contrato de arriendo
referido, y que se encontraban prohibidas conforme a la cláusula decimoprimera del mismo, por lo que
no corresponde que el arrendador indemnice al arrendatario por los gastos en que éste incurriera, no
obstante haberse acreditado las obras. A mayor abundamiento, el artículo 1927 del Código Civil, define
que las mejoras necesarias son aquellas sin las cuales la cosa se destruye o desaparece o bien no sirve
para el objeto a que se destina, como los arreglos de cañería, por gotera. Se exceptúan las locativas,
que son un tipo de mejoras necesarias pero corresponden al arrendatario, por ejemplo: daños en vidrios
de un ventanal. En este caso particular, se deja constancia en la cláusula decimocuarta del contrato de
arriendo mencionado que el arrendatario recibe el inmueble en buen estado de conservación,
obligándose a restituirlo en iguales condiciones, de manera tal que no puede conceptuarse las
transformaciones, reestructuraciones y ampliación de local como necesarios por cuanto éstas siempre
van a estar limitadas por el derecho de dominio que tiene el arrendador o propietario sobre la cosa
arrendada (Considerandos 6º y 7º).
Ficha 133 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Reclama contra giro y comprobante de pago de impuesto. Gastos necesarios para producir la renta. Carga de la
prueba. Arrendamiento de vehículo motorizado. Desproporción del gasto frente a ingresos
Fecha: 20/03/2006
Rol: 4546-2005
Sumario
Sólo pueden deducirse de la renta bruta los gastos necesarios para producirla; característica que
lleva ineludiblemente a considerar como tales, atendida la significación gramatical del vocablo
"necesarios", empleado por la norma, aquellos desembolsos en que precisa, forzosa e inevitablemente
ha debido incurrir el contribuyente para generar la renta líquida imponible que se pretende determinar.
Se alude a una condición lógica que deben reunir tales gastos: que se encuentren directamente
relacionados con el giro ordinario del contribuyente con el ejercicio de su profesión. El fallo de primer
grado determinó como hecho una marcada desproporción del gasto anual en que éste sostiene haber
incurrido, a causa de un contrato de arriendo de camioneta equivalente al 36.14% de sus ingresos. La
circunstancia apuntada, que los sentenciadores consideran con base en los elementos de prueba
allegados a la investigación, les permite concluir que los gastos que el contribuyente pretende deducir
para el cálculo de la renta imponible no reúnen las condiciones exigidas para ello por la ley. La
sentencia recurrida estimado como una situación fáctica que los desembolsos de que se trata no eran
necesarios para generar la renta, el recurrente debió plantear que, al arribarse a tal conclusión, se
infringieron normas reguladoras de la prueba (Considerandos 13 a 16).
Terminación del contrato de arrendamiento. Extinción del derecho del arrendador a causa de remate de cosa
arrendada
Fecha: 07/03/2006
Rol: 3053-2005
Es claro que el contrato de arriendo en comento, expiró por extinción del derecho del arrendador,
conforme al artículo 1950 Nº 3 del Código Civil, sin que el banco acreedor hipotecario, haya tenido la
obligación de respetar ese arriendo, de acuerdo a la norma del artículo 1962 Nº 3 del Código Civil, al
aparecer suficientemente demostrado que el arrendamiento en cuestión no se otorgó por escritura
pública y menos pudo haber inscripción con anterioridad a la inscripción hipotecaria, todo lo cual trae
aparejado como innegable consecuencia legal, que el contrato de arriendo terminó por la causal antes
mencionada, por manera que mal podría ordenarse ahora, la restitución de la propiedad a la
demandante (Considerando 6º).
Fecha: 13/12/2005
Rol: 6544-2000
Sumario
Si bien es cierto que la garantía aparece con una amplitud total, no es menos cierto que en derecho
las cosas son lo que por su naturaleza le corresponde, lo que no depende del nombre con que las
partes las denominen. Es así que en la especie el tercero no puede ser avalista del contrato de
arrendamiento, pues, sólo se puede constituir la garantía del aval, en las letras de cambio y pagarés. No
puede por lo tanto jurídicamente el tercero ser avalista de las obligaciones que emanan de un contrato
de arrendamiento. En cuanto a su calidad de codeudor solidario, ésta también es de dudosa
procedencia, ya que la solidaridad, es una modalidad de las obligaciones de sujetos múltiples ergo, si
existen varios acreedores o sea varias personas tienen un deudor, existe la solidaridad activa,
consistente en que cada acreedor pueda cobrar al deudor la totalidad de la obligación, y si por el
contrario, varios deudores deben una misma obligación, si pactan solidaridad cada una de ellas está
obligada a pagar al acreedor la totalidad de la obligación, pudiendo al efecto éste dirigirse contra uno
solo (Considerando 7º).
Corte Suprema
Fecha: 17/11/2005
Rol: 3839-2006
Los argumentos del recurrente no son atendibles, toda vez que los jueces del fondo, apreciando la
prueba testimonial rendida de acuerdo a las normas de la sana crítica, han establecido la existencia del
contrato de arriendo, el que es de carácter consensual; por lo que a su respecto no rige la limitación de
los artículos 1708 y 1709 del Código Civil, cuya transgresión denuncia el recurrente; sobre todo si en la
sentencia no se condena al demandado a pagar ninguna suma por concepto de renta insoluta.
(Considerando 2º).
El artículo 1950 del Código Civil en su Nº 4 establece que el arrendamiento de cosas expira por la
extinción del derecho del arrendador. A su vez, el artículo 1962 del citado código establece los casos en
que, producida la extinción del derecho del arrendador, el sucesor en el derecho del arrendador debe
respetar el arriendo, ninguno de los cuales concurre en la especie, toda vez que al demandante se le
transfirió el derecho a título oneroso, sin que conste en autos que el arrendamiento haya sido celebrado
por escritura pública.
Habiéndose acreditado entonces la extinción del derecho del antiguo arrendador del inmueble de
autos, de acuerdo a los documentos acompañados a los autos y la declaración de los testigos,
forzosamente deberá ser acogida la demanda ordenándose la restitución del mismo a la demandante.
(Considerandos 6º y 7º).
Arrendamiento. Contrato de arrendamiento. Expiración del contrato de arrendamiento. Causales. Derecho del
arrendador sobre la cosa arrendada. Dueño de la cosa arrendada
Fecha: 30/08/2005
Rol: 137-2005
Sumario
Que, también, hay que tener en cuenta lo determinado por los artículos 647 y 648 del Código Civil, en
cuanto a que los frutos civiles, y las rentas de arrendamiento lo son y pertenecen al dueño de la cosa,
en este evento, al banco Bice. (Considerandos 4º a 6º).
Ficha 138 Antecedentes del fallo
Fecha: 12/08/2005
Rol: 353-2005
Sumario
La vigencia o no del contrato de arrendamiento es un asunto de fondo que debe ser sometido a
discusión y decisión en un juicio de lato conocimiento. En esta sede, no puede haber duda respecto del
derecho invocado como perturbado o vulnerado. Que, sin perjuicio de lo anterior, debe existir un libre
acceso al edificio que permita a los ocupantes de las oficinas interiores del mismo, ingresar a ellas en
forma libre y sin perturbación alguna, sin que exista limitación en el día o en la hora en el ejercicio de
ese derecho por parte del arrendador, subarrendador, u otros arrendatarios o subarrendatarios, con
excepción de que exista o se haya tomado un acuerdo entre todos ellos para regular el acceso al edificio
por razones de seguridad. No es aceptable la autotutela por quien se sienta afectado en su derecho,
toda vez que el ordenamiento jurídico ha entregado la competencia a los tribunales de justicia para
solucionar los conflictos que de ello derive, por lo que no resulta lícito que ninguno de los contratantes,
pueda impedir con su actuar el ejercicio del derecho al uso y goce del otro, como se ha dicho
precedentemente (Considerandos 8º a 10).
Corte Suprema
Fecha: 15/11/2004
Rol: 2157-2004
Sumario
La condición de dueña o poseedora del inmueble en donde se embargaron los bienes no constituye
presunción de posesión respecto de las cosas muebles que lo guarnezcan y no habiéndose acreditado
que la tercerista se haya encontrado en la tenencia material y efectiva de las especies muebles
embargadas, con ánimo de señor y dueño, manifestados por hechos positivos, su tercería de posesión
no puede ser acogida; hechos básicos que sustentan la decisión que impugna el recurrente y que al no
haber sido impugnados denunciando infracción a leyes reguladoras de la prueba, que de ser efectiva,
permitan alterarlos, son inamovibles para este tribunal, por ende, el recurso en estudio adolece de
manifiesta falta de fundamento. (Considerando 4º).
Ficha 140 Antecedentes del fallo
Contrato de arrendamiento. Plazo fijo renovable. Pago de renta por término anticipado. Arrendamiento a tercero
vigente anterior contrato
Fecha: 28/09/2004
Rol: 1839-2002
Sumario
Siendo que el contrato de arrendamiento otorgaba a las partes la facultad de no renovarlo, y que no
existió acuerdo del arrendador para ponerle término anticipado, y tratándose de un local comercial,
resulta inaplicable el artículo 5º de la Ley Nº 18.101. Así, al no existir norma legal aplicable, y el contrato
no contiene cláusulas que otorguen la facultad para terminarlo anticipada y unilateralmente, cabe
concluir que, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 1545 del Código Civil, la voluntad del
arrendatario es ineficaz para su término antes de la fecha pactada (Considerando 4º).
Ni el envío de la carta de aviso, ni la devolución de las llaves del local, han podido tener el efecto de
producir la terminación del contrato, debiendo calificarse el acto del arrendador de recibir esas llaves del
local, enviadas por correo, no como una aceptación de dar fin al arriendo, sino como una medida de
conservación y protección de sus intereses. En consecuencia, el contrato subsistía junto con la
obligación de pago de renta. La demandada está obligada a pagar al actor las rentas hasta el término de
la vigencia del contrato, debe compensarse la renta del último mes, impaga, con la garantía constituida
por el arrendatario y, en cuanto a las rentas pactadas para los meses posteriores a la entrega y vigente
el contrato, el actor reconoce haber dado en arriendo el inmueble de que se trata, por lo que de percibir
las rentas pactadas en el contrato durante este período, produciría un enriquecimiento sin causa en su
favor. (Considerandos 6º y 7º).
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Relevancia de incumplimiento ante falta de prueba de lucro cesante, inmueble fiscal,
término respecto de inmueble fiscal, lucro cesante, normas aplicables a contrato renovable. Efecto de omisión de
declaración tributaria, efecto de omisión de movimiento tributario
Fecha: 30/08/2004
Rol: 3163-2003
Sumario
La sentencia recurrida estimó vencido el contrato objeto del litigio por aplicación del artículo 1956 del
Código Civil. Sin embargo, esta disposición regula los efectos de un contrato de arrendamiento a plazo
fijo no renovable, de modo que no resulta aplicable al contrato entre las partes, pues éste incluyó una
cláusula de renovación, que interpretada de conformidad con las reglas de los artículos 1546, 1562 y
1563, produce el efecto de renovación tácita si ninguna de las partes le pone término antes del
vencimiento del plazo pactado o de sus prórrogas, de lo cual se sigue que se incurrió por los
sentenciadores en error de derecho (Considerando 2º).
Sin embargo, el actor no ha probado los perjuicios que reclama por concepto de lucro cesante. El
actor, vigente el arrendamiento, no declaró ingresos ni realizó pagos mensuales de acuerdo con la ley
sobre impuesto a la renta y del libro de compras y ventas, no se infiere movimiento relevante alguno
durante todo el período, incluida la época en que no soportó turbación alguna en el ejercicio de sus
derechos de arrendatario. En consecuencia, de acogerse el recurso de casación en el fondo, la
sentencia de reemplazo no daría lugar a las pretensiones del actor, de modo que el error de derecho en
que han incurrido los sentenciadores no resulta determinante respecto de lo dispositivo del fallo
(Considerandos 4º y 5º).
Corte Suprema
Fecha: 21/07/2004
Rol: 2076-2004
Sumario
Al juez árbitro, especial, designado sólo para tratar materias previamente definidas y cuya resolución
le entregan las partes, no le es posible aplicar los principios de orden público y de irrenunciabilidad de
su intervención, salvo iniciado el juicio de compromiso y resueltas las cuestiones que hubieren retardado
o tratado impedir la constitución del tribunal. Los factores fuero, materia y cuantía no rigen en este caso.
Es así que las partes pueden de común acuerdo renunciar a la constitución del compromiso. Puede
también alguna de las partes, iniciado el juicio por los procedimientos ordinarios, en tribunales de esa
clase, si es demandado, sujetarse a esa forma de resolución del negocio, pero si ello ha ocurrido, no
puede durante el curso del juicio después de haber finalizado el período de discusión, y todavía después
de haberse dictado sentencia definitiva, hacer valer la cláusula compromisoria, porque a su respecto ha
operado una forma de renuncia tácita.
Si bien, la redacción peculiar que el demandante emplea para referirse al monto del daño emergente,
resulta un tanto equívoca, no hay duda que avaluados los daños en a lo menos $ 15.000.000 por parte
del actor, y al acoger el tribunal en la misma forma la determinación de ese valor, si bien no contiene la
precisión que sería de desear, fijándose una cantidad precisa y determinada que no llamara a dudas al
demandado, ni a otros intervinientes en el juicio de cumplimiento de la sentencia que deberá llevarse a
cabo en lo porvenir, estos sentenciadores, atendida la calidad de recurso extraordinario de la casación
interpuesta, y especialmente que el recurrente no ha sufrido un perjuicio reparable sólo mediante la
anulación de la sentencia y porque el defecto anotado no ha influido en lo dispositivo del mismo,
desestimará también esta causal de nulidad de la sentencia. Se tiene presente también, que el defecto
impugnado, puede ser subsanado por este tribunal, haciendo uso de las facultades que el recurso de
apelación le otorga, recurso que también ha sido deducido en autos. Se reproduce la sentencia en
alzada, con la modificación siguiente: en el considerando 6º, en el apartado 6º, se sustituye la frase "a
una suma superior a $ 15.000.000" por "según la demanda de fojas 9, a una suma superior a
$ 15.000.000".
Que, para establecer la cuantía de los perjuicios se consideran la calidad o condición de la vivienda y
las circunstancias reseñadas por los testigos en cuanto se trata de una casa de antigua data; el fin para
el cual estaba destinada, su arriendo a terceros y la extensión de los daños, materia sobre la cual se ha
establecido, que la vivienda requirió de reparaciones importantes para volver a servir de morada; y (...)
(Considerandos 16 a 18 de sentencia de Corte de Apelaciones).
Corte Suprema
Fecha: 06/07/2004
Rol: 5399-2003
Sumario
Que conforme lo dispone el artículo 1545 del Código Civil todo contrato legalmente celebrado es una
ley para los contratantes y consecuentemente, el arrendatario asumió la obligación de restituir el
inmueble a la llegada del plazo, sin que haya establecido la renovación tácita del mismo, por el mero
hecho de seguir siendo ocupado el inmueble por el arrendatario, por lo que habiéndose extinguido el
contrato de arrendamiento por la expiración del tiempo estipulado al tenor de lo previsto en el Nº 2 del
artículo 1950 del Código Civil, ha de procederse a la restitución de la cosa (Considerando 8º de
sentencia de primera instancia).
Que estando la arrendataria obligada legalmente al pago de la renta, al tenor de lo dispuesto en el
artículo 1942 del Código Civil, la demandada sólo ha podido acreditar el abono de $ 100.000 hecho a la
renta correspondiente al mes de febrero de 2003, por lo que no habiéndose pagado la totalidad de las
rentas ni protestado de encontrarse al día en el pago de las mismas, al tiempo de practicarse los
requerimientos legales, ni ofrecido ni rendido prueba alguna para acreditarlos, ni prestado seguridad
competente de que verificará el pago dentro de un término razonable no inferior a treinta días, deberá
tenerse por suficientemente acreditado que adeuda a la actora la suma de $ 500.000 por las rentas
impagas de arrendamiento (Considerando 10 de sentencia de primera instancia).
Corte Suprema
Nulidad de contrato. Alcance de efecto relativo. Alcance de efectos propios de contrato de promesa de
compraventa y mandato para la venta.
Fecha: 27/05/2004
Rol: 2860-2003
Sumario
El efecto de la nulidad, conforme al artículo 1690 del Código Civil, se produce solamente en relación
a las partes, cuestión de orden general conforme a lo ya señalado en el artículo 3º del mismo texto legal.
En autos, no se vislumbra, que la nulidad de un contrato en específico señalado en la demanda,
promesa de compraventa, conlleve la nulidad de otro, mandato, atendiendo a que cada acto jurídico
tiene vida propia e independiente en el ámbito jurídico, por lo que las causales de nulidad de un contrato
no empece las de otros. En consecuencia, no se ha probado que el mandato indicado haya adolecido de
nulidad alguna, o que la demandante no haya concurrido con su voluntad al contrato de compraventa
impugnado (Considerando 5º de la sentencia de primera instancia) al estimar la sentencia recurrida que
al haberse anulado el contrato de arrendamiento y promesa de venta era obvio que el mandato para la
venta, inserto en el mismo, era ineficaz, sin una declaración judicial previa, vulneró el artículo 1683 del
Código Civil, que exige dicha declaración por un juez de oficio o a petición de parte según el caso. En
consecuencia, al haberse celebrado la compraventa antes de la sentencia que declaró nula
absolutamente la promesa de venta, aun en el evento de estimarse nulo dicho mandato, el mandatario
habría actuado aparentemente en representación del actor prestando consentimiento, luego la
compraventa una vez declarada nula la promesa sólo sería inoponible al actor, pero la venta sería
válida, toda vez que de acuerdo al artículo 1815 del Código Civil la venta de cosa ajena es válida, por lo
que la sentencia impugnada infringió esta norma y también el artículo 1445 Nº 2 del aludido código, al
estimar nula la venta por no existir manifestación de voluntad del vendedor (Considerandos 4º y 5º).
Corte Suprema
Pago de las rentas antes del comparendo de reconvención. Término del contrato por llegada del plazo
Fecha: 26/01/2004
Rol: 3275-2003
Sumario
Que la acción de terminación de contrato de arrendamiento por no pago de las rentas está reglada en
el artículo 1977 del Código Civil, el cual exige para ser acogida que se practiquen dos reconvenciones
de pago, una al momento de notificarse la demanda y la otra en el comparendo de estilo, quedando
acreditado en esos momentos que el demandado no ha dado seguridad competente en que se verificará
el pago en un plazo razonable, que no bajará de treinta días.
Que el referido comparendo se realizó, oportunidad en que la parte demandada había pagado todas
las rentas insolutas mediante depósitos en la cuenta corriente del tribunal, de tal manera que la
demandada no se encontraba en mora en la renta correspondiente a un período entero y por
consiguiente, no le es aplicable la condición exigida en el precepto legal transcrito, esto es, de declarar
terminado el arrendamiento. (Considerandos 1º y 2º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Que los documentos (acompañados en el proceso) configuran una presunción con las características
de las señaladas en el inciso 2º del artículo 426 del código de procedimiento civil, para atribuirles en la
comunicación pertinente de la cláusula segunda del contrato de arrendamiento fuerza probatoria de
plena prueba. (Considerando 6º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Imposibilidad de utilización del bien arrendado para la finalidad requerida sin culpa del arrendador. Procedencia
de indemnización de perjuicios ante pago de la renta en el desarrollo del juicio
Fecha: 30/12/2003
Rol: 2142-2003
Sumario
Que habiéndose celebrado entre las partes un contrato de arrendamiento para que el inmueble
sirviera de almacenaje y venta de productos, en definitiva no sirvió para tal fin, no obstante los esfuerzos
hechos por la demandada para obtener de la municipalidad las autorizaciones para funcionar. Que el
artículo 1932 del Código Civil dispone que el arrendatario tiene derecho a la terminación del
arrendamiento si el mal estado o la calidad de la cosa le impide hacer de ella el uso para el que ha sido
arrendada, sea que el arrendador conociese o no el mal estado o calidad de la cosa al tiempo del
contrato y aun cuando el vicio de la cosa se hubiera iniciado después del arrendamiento, pero sin culpa
del arrendatario. (Considerandos 12 y 13 de sentencia de primera instancia)
Que, así, la circunstancia de no haber podido usar el inmueble para el fin previsto en el contrato,
justifica sobradamente que se haya puesto término a él, ya que la ley lo autoriza para tal efecto,
resultando absolutamente ilógico que siga pagando una renta por un inmueble que no puede usar por
causal que no le es imputable, por lo que no procede condenar a la demandada al pago de la
indemnización que se solicita.
Que no procede abocarse a la petición subsidiaria de terminación de contrato por no pago da rentas,
ya que tal aspecto fue superado en el curso del juicio, ni a la acción de desahucio intentada en el que la
demandante manifiesta que no desea perseverar el arriendo. (Considerandos 16 y 17 de sentencia de
primera instancia)
Corte Suprema
Contrato de arriendo. Responsabilidad por daños. Valor probatorio de los documentos acompañados
Fecha: 22/12/2003
Rol: 2040-2003
Sumario
Que analizando el valor probatorio de los documentos acompañados por la demandante, en especial
el material fotográfico, cabe señalar que carecen de mérito probatorio, por cuanto no fueron obtenidos
por un ministro de fe idóneo, como ser un notario público, que avalara su autenticidad; pudiendo,
en consecuencia, dichas imágenes corresponder a cualquier interior y exterior de una propiedad de
similares características al inmueble que nos ocupa, además de haber emanado de la propia parte que
los presenta. (Considerando 9º de sentencia de primera instancia)
Que el artículo 1940 del Código Civil señala que el arrendatario es obligado a las reparaciones
locativas, las que en el artículo 1970 del mismo cuerpo legal se señalan como aquellas a que es
obligado el inquilino o arrendatario de casa, y se reducen a mantener el edificio en el estado en que lo
recibió, pero no es responsable de los deterioros que provengan del tiempo y uso legítimo, o de fuerza
mayor o caso fortuito, o de la mala calidad del edificio, por su vetustez, por la naturaleza del suelo, o por
defectos de construcción.
Que en cuanto a la prueba testimonial rendida por ambas partes, forma convencimiento por ser más
verosímil y de mejor calidad técnica e idoneidad la de la parte demandada; específicamente la de la
testigo que es corredora de propiedades y que participó en todo el proceso de entrega-recepción de la
propiedad, habiendo incluso enviado cartas de conformidad de recepción al señor demandado, y la de la
testigo que prestó servicios en la casa sub-lite efectuando mejoras y arreglos a la misma, ambas
testigos con cabal conocimiento de los detalles y especificaciones de que dan cuenta sus dichos. Que,
así, el mérito de autos no permite establecer los daños reclamados por la actora, atribuidos a la parte
demandada, toda vez que no existen elementos de prueba que acrediten en forma fehaciente que los
hechos atribuidos al demandado hayan ocasionado los daños y perjuicios que demanda la actora en su
libelo, sin perjuicio que no se encuentra demostrado que un hecho atribuible a la actora haya
ocasionado los eventuales perjuicios, como tampoco lo está el monto y naturaleza de los mismos.
(Considerandos 12 a 14 de sentencia de primera instancia)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Lucro cesante. Término anticipado
Fecha: 16/12/2003
Rol: 4911-2003
Sumario
La sentencia en alzada debe ser confirmada, en el extremo que ha dado por establecido que la
destrucción del inmueble arrendado se debió a culpa del demandado. Cabe enfatizar que, de
conformidad con lo que se previene en el artículo 1547 del Código Civil, "la prueba de la diligencia o
cuidado incumbe al que ha debido emplearlo (...)", de donde se sigue que en el ámbito de la
responsabilidad contractual se presume la culpa del deudor en el caso de incumplimiento, presunción
que no ha sido desvirtuada en autos. A la misma conclusión ha de arribarse aplicando el artículo 1671
del mismo código. (Considerando 3º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Demanda de término inmediato por no pago de rentas acogida. Falta de prueba del
arrendatario de existencia de resciliación de contrato
Fecha: 12/11/2003
Rol: 4362-2003
Sumario
De conformidad con lo establecido en el artículo 1545 del Código Civil, todo contrato legalmente
celebrado es una ley para los contratantes y no puede ser invalidado sino por su consentimiento mutuo
o por causas legales, de modo que el contrato de arrendamiento de autos no pudo dejarse sin efecto por
la mera voluntad de una de las partes y de un tercero, por mucho que éste sea el propietario del
inmueble, toda vez que el arrendamiento de cosa ajena vale, de conformidad con lo establecido en el
inciso 2º del artículo 1916 del referido código. (Considerandos 2º y 3º)
Ficha 150 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento declarado resuelto (arrendador no cumple obligación principal derivada del contrato).
Casación de oficio
Fecha: 29/09/2003
Rol: 4312-2003
Sumario
En el caso de autos el inmueble fue arrendado para ser destinado a jardín infantil; así se estipuló por
las partes en la cláusula segunda del contrato, como se dijo.
En consecuencia, si por un hecho imputable al actor, como lo es la falta de recepción municipal del
inmueble de Angol 298, la arrendataria no ha podido entrar en el goce de la cosa, necesario es concluir
que ha fallado la obligación principal que el contrato le impone al arrendador y, por ende, la arrendataria
tiene derecho a ponerle término.
No basta que en el contrato se haya autorizado a la arrendataria para solicitar a la I. Municipalidad el
cambio de destino de la propiedad arrendada. Era necesario, además, que el inmueble estuviese en
condiciones de que, cumplidas las exigencias para el cambio de destino, se otorgara el permiso
municipal.
Fecha: 11/03/2003
Rol: 19267
Sumario
Hubo acuerdo de voluntades entre arrendador y arrendatario sobre la cosa que por uno se entregaba
y por el otro se recibía, tratándose de un específico inmueble, que el mismo en las miras de las dos
partes, de suerte que aunque en la transcripción escrita del acuerdo, por lo demás suscrita por ambos,
se errara en la numeración, el contrato consensual de arrendamiento se perfeccionó. (Considerando 3º)
Que si ese error originó problemas que perjudicaron al arrendatario, al dificultar o impedir la
obtención de patente para su local de alcoholes, como se dijo en estrados, es cuestión que no cabe
analizar aquí, porque no se contestó la demanda, de suerte que no se alegó ni pudo ser, naturalmente,
materia de prueba. Aun si se aceptara que ese error pudiera significar un defecto en la entrega del bien,
para que ello permitiera al demandado dejar de pagar la renta debería haber reclamado la situación;
fuera demandando separadamente a su arrendador por incumplir su obligación de entregar, fuera
demandando reconvencionalmente o fuera siquiera excepcionándose por contrato no cumplido, en esta
causa. Como nada de eso ocurrió, todo lo que se tiene es que el contrato se perfeccionó, el arrendatario
entró a la tenencia material del inmueble y nació, por consiguiente, para él, su obligación de pagar las
rentas, incumpliendo tal obligación desde el mes de diciembre de 2001, de suerte que se dan los
presupuestos legales para acoger la acción de terminación del contrato por falta del pago aludido.
Se ordenará el pago de las rentas adeudadas hasta la fecha en que consta que el inmueble fue
entregado a satisfacción de la actora, según el acta, puesto que la arrendadora no ha objetado su
participación en el acta antes referida, suscrita por ella. Tratándose de un contrato a plazo fijo por un
término no superior a un año, el artículo 4º de la Ley Nº 18.101 mantiene la obligación de pagar renta
sólo hasta el día en que la restitución se efectúe. (Considerandos 5º a 7º sentencia Corte de
Apelaciones)
Corte Suprema
Fecha: 30/01/2003
Rol: 4034-2002
Sumario
Que todas las alegaciones del recurrente se fundan en la existencia de culpa del arrendatario en el
cuidado de la cosa arrendada puesto que, a su entender, ellos se habrían despreocupado en las
condiciones de higiene y salubridad de la casa.
Este hecho básico, en el cual el recurrente desarrolla todos sus errores de derecho no ha sido
establecido por los jueces del fondo quienes, por el contrario, han señalado que el actor no cumplió con
su obligación de mantener la cosa en estado de servir para el fin que fue arrendada.
Corte Suprema
Término de contrato de arriendo. Prueba de la entrega del inmueble a anterior dueño. Cánones adeudados ante
falta de prueba de la entrega del inmueble a anterior dueño
Fecha: 21/01/2003
Rol: 3830-2002
Sumario
Que en lo que se refiere al cobro de las rentas solicitadas y a los gastos correspondientes a servicios
comunes por el actor, será acogida, de conformidad a lo dispuesto al artículo 6º de la Ley Nº 18.101,
disposición legal que expresamente contempla dicha situación, de lo contrario se produciría un
enriquecimiento sin causa en beneficio de la demandada, al no darse cumplimiento a una obligación
impuesta por la ley.
Que la demandada deberá cancelar las rentas de los arriendos más los gastos correspondientes a
servicios comunes en general, que son de su cargo, no así la deuda por concepto de impuesto territorial
por no corresponderle, a contar de la fecha de inscripción del inmueble a favor de su representada, en el
conservador de bienes raíces de Valparaíso, y hasta la fecha de restitución del inmueble.
(Considerandos 7º a 10 de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Arrendamiento. Terminación por no pago de renta. Excepción contrato no cumplido. Relevancia de calidad de
dueño de arrendador
Fecha: 14/11/2002
Rol: 4035-2002
Cita online: CL/JUR/3845/2002
Sumario
Que, por las razones antedichas, este sentenciador estima que la obligación que la arrendadora
asumió en la cláusula duodécima del contrato de arrendamiento, no es exigible, ya sea porque se la
estime nula por falta de objeto, o por ser contraria a la intención de los contratantes, atendida la
aplicación práctica que le han dado al contrato, o por ser contraria a la buena fe y alterar la equidad que
debe regir en una relación contractual bilateral y onerosa, como es la que nos ocupa. En consecuencia,
la excepción de la demandada, de "non adimpleti contractos" será rechazada.
Esta afirmación carece de todo fundamento, pues el arrendatario está obligado a pagar la renta al
arrendador, independiente de quién sea el dueño de la propiedad, pues es con el arrendador con quien
lo une el vínculo contractual, de modo que no puede alegar ignorancia de la persona a la que debe
hacer el pago, sin perjuicio del reconocimiento que la propia demandada ha hecho, en cuanto a la
calidad de comunera de la actora.
A mayor abundamiento, si estimaba dudosa la identidad del acreedor de las rentas que adeudaba por
la propiedad que ocupa, debió haber recurrido al pago por consignación, a nombre de la sucesión dueña
del bien arrendado, o al depósito contemplado en el artículo 23 de la ley del ramo. (Considerandos 18 a
20 de sentencia de primera instancia)
Tercería de posesión. Arrendatario de dueño. Efecto de ocupación de inmueble. Efecto de deudor no presente en
notificación de demanda. Efecto de deudor no presente en diligencia de embargo
Fecha: 11/11/2002
Rol: 8125-2002
Sumario
De los documentos surgen presunciones graves, precisas y concordantes, que resultan suficientes
para tener por establecido que la tercerista, ocupa la casa habitación, en calidad de arrendataria de su
dueña. Por otra parte, es un hecho indiscutido que al momento en que se practicó el embargo, las
especies sobre que éste recayó se encontraban en poder de la tercerista, toda vez que guarnecían el
domicilio indicado, por lo que la favorece tanto la presunción legal establecida en el artículo 700 del
Código Civil, como aquella que contempla el artículo 1942 del mismo cuerpo legal. Con todo debe
advertirse que el ejecutado no estaba presente en el referido domicilio cuando se practicó la notificación
de la demanda, ni tampoco al momento del embargo, a lo que cabe agregar que aparece que en otra
ejecución intentada en su contra por el mismo banco ejecutante, se ha trabado embargo sobre un bien
raíz de su propiedad. (Considerandos 1º a 3º)
Corte Suprema
Arrendamiento. Término contrato por expiración de derecho del arrendador. Efecto escritura pública. Rechazo
término contrato por expiración de derecho de arrendador. Procedencia restitución inmueble a arrendatario por
rechazo demanda de terminación
Fecha: 17/09/2002
Rol: 4213-2001
Sumario
Al margen de que en el fallo impugnado no se precisan cuáles serían las formalidades y medidas de
publicidad supuestamente exigidas por la ley, lo cierto es que de la norma contenida en el artículo 1962
del Código Civil, resulta como de toda evidencia que, con la sola salvedad del acreedor hipotecario,
basta que el contrato de arrendamiento se haya celebrado o contraído por el anterior dueño a través de
escritura pública para que el adquirente del bien arrendado, en cuanto sucesor de aquél, esté obligado a
respetarlo. Al no entenderlo así, los jueces efectivamente cometen el error de derecho denunciado en el
recurso y se apartan del correcto sentido del referido artículo 1962 Nº 2 del Código Civil. De este modo,
aun cuando es efectiva la infracción de ley indicada en el recurso, también lo es que tal infracción
carece de influencia en la parte dispositiva del fallo impugnado, toda vez que, no resulta posible ni
procedente disponer la restitución pretendida por el recurrente, en la medida que ello importaría, a fin de
cuentas, ordenar la devolución al arrendatario de un bien que fue objeto de un contrato de
arrendamiento que ya no está vigente. (Considerandos 4º y 6º)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Restitución del inmueble. Cláusula arbitral. Obligación de conservación del inmueble.
Mejoras efectuadas por el arrendatario
Fecha: 29/08/2002
Rol: 3833-2001
Sumario
La infracción del artículo 1698 inciso 1º del Código Civil se produce al alterarse o al invertirse el peso
de la prueba y, por ende, resulta inadmisible la alegación de la recurrente cuando hace consistir esta
vulneración en la circunstancia de que un determinado hecho no estaría demostrado, toda vez que ese
aspecto atañe a la valoración de las probanzas rendidas, actividad que es ajena al control de la
casación, máxime en un caso en que los jueces están facultados para apreciarla en conciencia.
De otra parte, es también oportuno precisar que la determinación del alcance y sentido de las
cláusulas de un contrato corresponde a una cuestión de hecho y no de derecho, en la medida que los
jueces, como ha ocurrido en la especie, fijan esa interpretación deduciéndola de los términos de la
convención y de los demás antecedentes que arroja el proceso.
De este modo, aparece como de toda evidencia que no puede prosperar el recurso examinado, toda
vez que con sus planteamientos la recurrente pretende en último término la alteración de hechos que
resultan inamovibles, para este tribunal de casación, vale decir, los establecidos en los fundamentos 7º,
8º y 9º de la sentencia impugnada, conforme a los cuales, en síntesis, el demandado infringió su
obligación de retirar las mejoras sin detrimento y que, como consecuencia de ello, provocó daños al
inmueble. (Considerandos 7º y 8º)
Corte Suprema
Fecha: 27/08/2002
Rol: 2465-2002
Sumario
El término del contrato de arrendamiento se produjo por la destrucción total de la cosa arrendada,
acordándose por las partes en el contrato que la restitución de aquélla se verificaría desocupando el
inmueble enteramente, poniéndola a disposición del arrendador y entregando las llaves al arrendador,
todos hechos que se encuentran acreditados en autos, razón por la cual no puede pretenderse —como
se sostiene en el recurso de casación en el fondo— que con posterioridad al término del contrato de que
se trata, por la mencionada causal, se continúen devengando rentas de arrendamiento.
(Considerandos 4º y 5º)
Corte Suprema
Arrendamiento, terminación por extinción del derecho del arrendador. Situación de comuneros. Titular de acción
de terminación de contrato
Fecha: 12/08/2002
Rol: 2767-2001
Sumario
El recurso ha planteado una alegación nueva, como lo es el que una persona es dueña de dos
tercios del derecho de dominio en el inmueble y que habría ratificado el contrato de arrendamiento, por
cuanto ello no fue planteado al contestar la demanda y, por consiguiente, si los jueces del fondo tienen
la obligación de pronunciarse sobre las acciones y excepciones de las partes, mal podrían haber
cometido el error que se denuncia si tal defensa nunca fue alegada en la causa en la oportunidad
procesal correspondiente.
Que, a mayor abundamiento, el demandado, con su recurso, intenta desvirtuar el presupuesto fáctico
fijado por los jueces del fondo y al que se ha hecho mención en el motivo anterior, por cuanto ha
señalado que, además de las personas que el fallo dice ser dueñas del bien, existiría otro comunero,
con dos tercios del derecho de dominio.
Tal alegación es inaceptable desde que en un recurso como el que nos ocupa no pueden modificarse
los hechos establecidos por los jueces del mérito, salvo que se hayan infringido normas reguladoras de
la prueba, lo que en la especie no ha sido ni siquiera denunciado. (Considerandos 3º y 4º)
Especie de propiedad sobre presunción legal de dominio sobre inmueble poseído. Debe acogerse protección
contra acto de arrendatario que pretende hacerse de inmueble arrendado por la fuerza
Fecha: 01/08/2002
Rol: 1595-2002
Sumario
En la especie, según los antecedentes allegados al recurso, las actuaciones de los recurridos al
ocupar la parcela Villa Oriente, la que está en posesión del recurrente por largo tiempo, correspondió a
una acción de autotutela vedada a los particulares y que se ejecutó de hecho, sin conocimiento ni orden
previa judicial o de autoridad alguna. Esas acciones ilícitas alteraron la situación jurídica y de hecho en
que se encontraban el recurrente y las personas en cuyo favor acciona, titulares de los derechos
derivados de la presunción legal del artículo 700 del Código Civil, sobre los cuales poseen una especie
de propiedad cuyo ejercicio está amparado por la garantía establecida en el Nº 24 del artículo 19 de la
constitución, en los términos de la amplia protección que esta norma concede al derecho de propiedad.
Los recurridos han justificado su ocupación exhibiendo un contrato de arrendamiento que no puede
legitimar estas acciones dada su naturaleza fáctica. Nadie puede hacerse justicia por si mismo sino que
debe recurrir al órgano jurisdiccional competente en defensa de sus derechos. De acuerdo a nuestro
ordenamiento jurídico, el arrendador es obligado a entregar al arrendatario la cosa arrendada y a librarlo
de toda turbación o embarazo en el goce de la cosa arrendada (artículo 1924 del Código Civil). De esta
norma legal surge con claridad que quien debe hacer la entrega tanto jurídica como material de un
inmueble arrendado es el arrendador, en consecuencia, ante la oposición del recurrente, los recurridos
tenían una vía para obtener la entrega que pretendían o para librarlos de la perturbación en el goce, la
que no usaron, incurriendo en actos de autotutela, esto es, hacerse justicia por sí mismo
(Considerandos 3º a 5º).
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Terminación. Indemnizaciones que proceden. Pago rentas atrasadas; insolutas
Fecha: 09/07/2002
Rol: 1014-2002
Sumario
El recurrente sostiene en el recurso de casación en el fondo, que el contrato alegado por la actora no
puede hacerse valer ante las autoridades judiciales, ya que no cumple con el requisito señalado en el
artículo 5º del D.L. Nº 993, sin embargo, tal alegación no fue planteada oportunamente por el
demandado, el que se mantuvo en rebeldía durante la tramitación del proceso y su eventual vulneración
carece de influencia en lo dispositivo de la sentencia, por cuanto los jueces del fondo estiman que el
contrato de arriendo y la renta se encuentran probados por otros medios, como es, la prueba
confesional; por ende, el recurso en estudio adolece de manifiesta falta de fundamento.
(Considerando 3º)
Corte Suprema
Terminación contrato de arrendamiento. Normas aplicables en materia de recursos procesales. Pago de renta,
peso de la prueba
Fecha: 08/07/2002
Rol: 1052-2002
Sumario
Que el artículo 1977 del Código Civil, previene que la mora de un período entero en el pago de la
renta, da derecho al arrendador, después de dos reconvenciones, para hacer cesar inmediatamente el
arriendo, si no se presta seguridad competente de que se verificará el pago dentro de un plazo
razonable, situación que se ha configurado en la especie, por lo que deberá necesariamente acogerse la
demanda en los términos precisados en el libelo, esto es, declarar terminado el contrato de
arrendamiento que ligaba a las partes. (Considerando 6º de sentencia de primera instancia)
Ficha 163 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Fecha: 25/06/2002
Rol: 670-2002
Sumario
Que el artículo 15 de la Ley Nº 18.101, faculta al tribunal de oficio o a petición de parte, para decretar
los medios probatorios que estime pertinentes y dispone que la prueba se apreciará en conciencia en
todos los juicios a que se refiere su Título III, entre los cuales se incluyen los de desahucio y terminación
del arrendamiento, de manera que los jueces tienen amplia facultad para apreciar el valor de la prueba
rendida por las partes y especialmente la testimonial.
La conciencia corresponde al juez, luego la norma que señala la valoración de los antecedentes en
conciencia se está refiriendo a la apreciación de la prueba que el juez hace, porque no hay otra
conciencia, sino la del juzgador. Es el reenvío que la ley hace al juez para que sea él quien aprecia las
pruebas de acuerdo a su real saber y entender.
Que analizada la prueba rendida, de la forma que se ha referido, los sentenciadores arriban a la
conclusión que estamos en presencia de un contrato de arrendamiento en los términos que lo establece
el artículo 3º del cuerpo legal citado, esto es de los pactados mes a mes, de manera que, conforme lo
dispone esa disposición legal, el arrendador sólo puede ponerle término mediante desahucio judicial,
asistiéndole a la demandada el plazo de cuatro meses para la restitución del inmueble sub lite.
(Considerandos 5º y 6º)
Corte Suprema
Terminación de contrato de arrendamiento. Juicio sumario especial. No pago de las rentas. Demanda
reconvencional. Perturbación en el goce de la cosa. Pacto sobre reembolso de mejoras
Fecha: 06/06/2002
Rol: 1589-2002
Sumario
Contrato de arrendamiento para confección de obra o servicio material. Normativa aplicable. Derecho de
retención
Fecha: 19/03/2002
Rol: 12-2002
Sumario
Por esta acción constitucional se pretende que la recurrida restituya a su dueño un automóvil que se
le entregó para ser reparado, sin que en el libelo se exprese haber pagado el precio del trabajo
encomendado.
Esa relación contractual entre las partes configura un arrendamiento para la confección de una obra
o servicio material que se rige por las reglas generales del arrendamiento, entre las cuales se contempla
el derecho de retención para garantizar el cumplimiento de las obligaciones recíprocas.
Si bien la ley procesal exige que la procedencia del derecho de retención se declare judicialmente,
ello se requiere "para que sea eficaz", es decir, para que produzca los efectos relativos a la realización
de los bienes retenidos y a la preferencia a favor de los créditos que garantizan.
Por consiguiente, la retención de hecho de las cosas en poder del acreedor produce efecto entre las
partes sin necesidad de una declaración judicial previa, de modo que la omisión de ésta no afecta la
legalidad intrínseca de lo obrado por la recurrida.
Fundamentalmente, la acción constitucional deducida tiene por objeto restablecer el imperio del
derecho, lo que se desvirtuaría si se ordenase a una de las partes cumplir su obligación a pesar de que
la otra no cumpla con la suya ni se allane a cumplirla.
El acto u omisión impugnable por medio del recurso de protección debe afectar el "legítimo ejercicio
de un derecho", calidad que no tiene el invocado por el recurrente en las condiciones expuestas.
(Considerandos 1º a 8º)
Ficha 166 Antecedentes del fallo
Ultra petita. Contrato de arrendamiento. Restitución por extinción del derecho del arrendador
Fecha: 13/03/2002
Rol: 6793-1997
Sumario
Incurre en vicio de ultra petita la sentencia que acogiendo la demanda de restitución de un inmueble
por terminación del contrato de arrendamiento al haberse extinguido el derecho del arrendador, condena
además a la demandada a pagar las rentas por todo el tiempo de ocupación del inmueble, en
circunstancias que esto último no fue solicitado por el actor en su demanda. En materia civil el juez no
puede, sino excepcionalmente de oficio, acoger peticiones distintas de las solicitadas. El referido vicio
de ultra petita irroga perjuicio al condenado puesto que lo obliga al pago de una pretensión que la
gananciosa no ha solicitado y, con ello, extiende la sentencia a puntos no sometidos a su decisión,
influyendo dicho vicio en lo dispositivo del fallo, al condenar a la recurrente a una petición no solicitada
por la actora. (Considerando 5º)
Fecha: 11/01/2002
Rol: 4608-2001
Sumario
Que es efectivo que las rentas a que se alude en el libelo de la demanda no fueron pagados en su
oportunidad por la demandada; pero ello no hace procedente por sí sólo la acción deducida, por cuanto
conforme a la cláusula décimo quinta, letra d) del contrato en referencia era necesario que previamente
la demandante comunicara tal determinación a la demandada, por carta certificada, o bien por carta
entregada por notario público, lo que produciría efectos a contar del tercer día hábil de la fecha de
expedición por correo de esa carta, o en la misma fecha de notificación por notario, según el caso.
Del proceso no consta que la demandante hubiese dado cumplimiento a ese requisito previo, por lo
que no ha podido ejercer la opción de dar por terminado el contrato, no obstante, como se dijo, incurrir la
demandada en mora en el pago de una o más rentas. (Considerando 5º)
Ficha 168 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Recurso de protección; inexistencia de acto u omisión arbitrario o ilegal. Requisitos. Restitución de garantía en
contrato de arrendamiento
Fecha: 12/12/2001
Rol: 4769-2001
Sumario
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Procedimiento de restitución bien arrendado. Legalidad de ocupación por parte de
propietario. Efectos posesorios respecto de arrendatario. Requisito de declaración judicial
Fecha: 10/12/2001
Rol: 4292-2001
Sumario
Si bien el recurrente original ha justificado suficientemente tener un título jurídico sobre el bien en
cuestión, de los mismos elementos allegados a estos autos, no emerge alguno con el carácter suficiente
que le autorice para desconocer el derecho de la Municipalidad de Pelarco para usar dicho inmueble,
según los contratos que suscribió esta entidad con el propietario anterior del predio, sin que conste
fehacientemente o se haya declarado por la vía correspondiente el término a extinción de aquéllos.
Entonces, se sigue que el actuar de recurrente original con oposición de la contraria, constituye vía de
hecho que amaga precisamente los derechos y facultades que el ordenamiento jurídico otorga a la I.
Municipalidad de Pelarco sobre el bien objeto de los mismos. En estas condiciones el actuar que se ha
reprochado a recurrente primitivo es manifiestamente arbitrario e ilegal, y vulnera la garantía contenida
en el Nº 24 del artículo 19 de la carta fundamental. Por todo lo cual se acogerá el recurso de protección
deducido en su contra de la forma que se indicará y, por los mismos fundamentos, se desestimará la
pretensión por él intentada en cuanto impugna la actuación de la municipalidad que es consecuencia
inmediata de su inadecuada actuación. (Considerandos 2º a 3º)
Corte Suprema
Fecha: 04/12/2001
Rol: 4245-2001
Sumario
El inciso 2º del artículo 1942 del Código Civil otorga al arrendador, para la seguridad del pago de las
rentas de arrendamiento, el derecho de retener todos los objetos con que el arrendatario haya
amoblado, guarnecido o provisto el inmueble arrendado y que le pertenecieren. Sin embargo, este
derecho no puede ejercerse en forma arbitraria por el arrendador sino en la forma dispuesta en el
artículo 598 del Código de Procedimiento Civil. Ello se traduce en que el recurrido debió haber
concurrido a la policía para que ésta impidiera el retiro de las especies, la que debió prestarle auxilio
inmediato, pero sólo por el término de dos días, a objeto de que pudiera en ese lapso hacer efectivo
ante la justicia el derecho legal de retención, puesto que el artículo 545 del mismo código es categórico
en cuanto a que "para que sea eficaz el derecho de retención que en ciertos casos conceden las leyes
—en el presente caso, el artículo 1942 inciso 2º del Código Civil— es necesario que su procedencia se
declare judicialmente a petición del que pueda hacer valer". Al no haber actuado recurrido en la forma
establecida en la ley para hacer efectivo el derecho de retención que le confiere el artículo 1942
inciso 2º del Código Civil, sino haber actuado de hecho, poniendo llave a la vivienda, fuerza es concluir
que su conducta ha sido ilegal y arbitraria y ha perturbado la propiedad de los recurrentes sobre los
derechos personales que emanan del contrato de arrendamiento, vulnerándose en eso forma la garantía
contemplada en el artículo 19 Nº 24 de la Constitución Política de la República. (Considerandos 4º a 7º
de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Terminación por no pago de rentas. Excepción de contrato no cumplido, aplicación
Fecha: 25/10/2001
Rol: 4169-2000
Con arreglo a lo previsto en el artículo 1950 Nº 2 del Código Civil, el arrendamiento celebrado entre
las partes expiró, por extinción del derecho del arrendador, el día 31 de agosto de 1998, puesto que en
esa oportunidad un tercero, el Banco Santander Chile, adquirió por tradición el inmueble que era objeto
de ese contrato. Que, consecuentemente, la pretensión de la actora sólo puede ser aceptada en lo que
hace a las rentas devengadas e impagas mientras estuvo vigente el contrato que ligara a los litigantes.
(Considerandos 2º y 3º de sentencia de reemplazo)
Corte Suprema
Fecha: 09/10/2001
Rol: 1735-2001
Sumario
Corte Suprema
Fecha: 04/10/2001
Rol: 1529-2001
Sumario
Conforme lo ordena el artículo 1942 del Código Civil, el arrendatario es obligado al pago del precio o
renta y conforme al artículo 1949, del mismo cuerpo legal para constituirlo en mora, deberá previamente
requerírsele de pago.
Habiéndose fundado la demanda reconvencional, en unos mismos hechos fácticos que los alegados
en la contestación a la demanda principal, deberá ser rechazada, por cuanto no aparece acreditada
suficientemente, su causa de pedir, ni aparece revestida de fundamento plausible, conforme a las
cláusulas del contrato pactado, a lo que cabe agregar, que aparece mal planteada, y resulta
improcedente reclamar una resciliación del contrato, que no resulta el fruto del común acuerdo de los
contratantes. A mayor abundamiento, los conceptos demandados, por daño emergente y lucro cesante
no aparecen debidamente probados en autos, correspondiéndole el peso de la prueba al tenor del
artículo 1698, del Código Civil.
Corte Suprema
Falta de ponderación de pruebas que acreditan el cumplimiento en el pago de rentas. Terminación de contrato de
arrendamiento de bien mueble, no pago de rentas. Cláusula de aceleración del plazo. Mora del deudor. Letra de
cambio, falsificación firma de letra de cambio, informe pericial
Fecha: 10/07/2001
Rol: 1008-2001
Sumario
Corte Suprema
Fecha: 10/07/2001
Rol: 1701-2001
1. Consta de los documentos agregados a la causa, que la demandada ha pagado las rentas de
arrendamiento mediante consignación en tesorería provincial de Arica, desde septiembre de 1998 hasta
junio de 2000, como lo autoriza el artículo 23 de la Ley Nº 18.101, de lo que fluye que el lapso
reclamado como impago por la actora, esto es, entre septiembre de 1999 hasta enero de 2000, se
encuentra cancelado, siendo evidente que la demandante no ha retirado el dinero respectivo desde
tesorería provincial, por lo que la acción de autos de terminación del contrato de arrendamiento por no
pago de las rentas, ha sido enervada y corresponde el rechazo de dicha acción en todas su partes,
como asimismo serán desestimados los rubros accesorios de consumos de agua, energía eléctrica, que
siguen la suerte de la acción principal. En lo concerniente a la acción subsidiaria de desahucio,
corresponde su rechazo, toda vez que el contrato de arrendamiento de autos, es de plazo fijo de tres
años a contar del 1º de agosto de 1998, el que expira por el vencimiento del lapso respectivo o
concurrencia de otra causal, siendo procedente el desahucio sólo respecto de los contratos de
arrendamiento de duración indefinida. (Considerandos 4º a 6º de sentencia de primera instancia)
Corte Suprema
Juicio de arrendamiento, por falta de pago de rentas de inmueble arrendado perteneciente a un tercero.
Arrendamiento, de cosa ajena. Contrato de arriendo, si inmueble pertenece a tercero igual procede término de
contrato por falta de pago de renta
Fecha: 28/05/2001
Rol: 1018-2000
Sumario
En cuanto a la vulneración denunciada al artículo 1683 del Código Civil por no haber declarado el
fallo, de oficio, la nulidad de los contratos de arrendamiento por adolecer de objeto ilícito, por tratarse los
inmuebles arrendados de bienes nacionales de uso público, sin perjuicio de lo antes razonado en orden
a que no se ha establecido como hecho del proceso que dichos inmuebles sean efectivamente fiscales,
se trata de una alegación nueva, no hecha en la contestación de la demanda, por lo que la sentencia
nunca pudo pronunciarse al respecto y, por ende, resulta inaceptable una causal de casación fundada
en infracción de una disposición legal que trata materias distintas de las contempladas en el juicio.
(Considerando 6º)
Corte Suprema
Arrendamiento de predios rústicos. Nulidad por falta de consentimiento, nulidad por incumplimiento de
solemnidades legales. Decreto Ley Nº 993 sobre arrendamiento de predios rústicos, prohibición de
subarrendamiento. Nulidad absoluta, objeto ilícito
Fecha: 17/05/2001
Rol: 1594-2000
Sumario
Que la actora ha hecho concurrir al tribunal a la demandada para que absuelva posiciones y al
respecto al responder a las preguntas primera, segunda y tercera, ha reconocido que el contrato de
arrendamiento, que se le exhibe, contiene su firma; que sin perjuicio de haber firmado el contrato
aludido en el numeral anterior, en los hechos no tuvo intención al firmar de tomar en arriendo el fundo, y
que el objeto de tal contrato fue para exhibirlo a compradores forestales que desearen comprar el predio
a fin de que éstos se percataran que la venta no podía hacerse de inmediato; y que no pagó la renta de
arrendamiento. (Considerando 14 de sentencia de primera instancia)
El contrato de arrendamiento celebrado entre la demandada como arrendadora y (un tercero) como
arrendatario, adolece de objeto ilícito ya que al celebrarse se transgredió lo dispuesto en el artículo 7º
del Decreto Ley Nº 993, disposición ésta que señala que queda prohibido al arrendatario subarrendar el
todo o parte del predio que es objeto del contrato, sin autorización previa y por escrito del propietario.
Que en la especie tal autorización no concurrió, ni la demandada ha probado que la hubo, motivo por el
que corresponderá declarar la nulidad absoluta del mencionado contrato de arrendamiento de fecha 15
de enero de 1997, sobre la base de lo dispuesto por los artículos 10, 1466 y 1682 del Código Civil, esto
es, los actos que prohíbe la ley son nulos y de ningún valor; hay objeto ilícito generalmente en todo
contrato prohibido por las leyes; y la nulidad producida por objeto ilícito es nulidad absoluta.
(Considerando 20 de sentencia de primera instancia)
Corte Suprema
Juicio sumario. Contrato de arrendamiento, acción de indemnización por incumplimiento, abandono anticipado de
inmueble
Fecha: 04/04/2001
Rol: 4509-0
Sumario
En este juicio sumario, la parte demandada recurre de casación en el fondo en contra de la sentencia
dictada por la Corte de Apelaciones de Santiago que confirma la de primer grado, donde se acoge la
acción de indemnización por incumplimiento de un contrato de arrendamiento, ordenándose el pago de
las rentas acordadas hasta el término del plazo fijado en el contrato. Sostiene que se han infringido las
disposiciones legales que indica, por cuanto el tribunal ha desestimado la prueba aportada por su parte,
la que acreditaba que existía un acuerdo entre los contratantes de finiquitar anticipadamente el arriendo.
Los argumentos del recurrente no son atendibles, toda vez que en la sentencia objetada se establece
que el contrato que vinculaba a las partes se renovó por un período de tres años, hecho básico que
sustenta la decisión del fallo atacado y que al no haber sido impugnado denunciando infracción a las
leyes reguladoras de la prueba es inamovible para este tribunal de casación; por ende, el recurso en
estudio adolece de manifiesta falta de fundamento. (Considerandos 1º y 2º)
Ficha 179 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Materia tributaria. Impuesto a la renta, exención. Rentas producidas por viviendas económicas
Fecha: 27/03/2001
Rol: 1822-2000
Sumario
1. El artículo 17 de la ley de renta estatuye que no constituye renta: Nº 29. Los ingresos que no se
consideren rentas o que se reputen capital según texto expreso de una ley. Como se advierte de lo
anteriormente transcrito, el término renta de la ley del ramo, tiene aplicación salvo que la naturaleza del
texto legal implique otro significado. Por lo anterior no se da la posibilidad de conflicto entre el concepto
de renta contenido en el D.F.L. Nº 2 con el de la ley de la renta, pues aquél está ubicado en un contexto
que conlleva limitaciones obvias, derivadas de la calidad y finalidad del señalado D.F.L. Nº 2. Esto es, el
concepto de la ley del ramo, que estima conculcado el reclamante, y que es de gran amplitud,
comprendiendo no sólo las utilidades o beneficios periódicos sino también los esporádicos como son los
incrementos patrimoniales; permite, sin embargo, su convivencia pacífica con el alcance que la norma
especial del Decreto con Fuerza de Ley Nº 2 ha dado a la exención, la que establece restricciones que
atienden a la actividad generadora de la renta que realiza el contribuyente. De lo anterior se colige que
aun cuando se estimara erróneo la interpretación del artículo 2º Nº 1 del Decreto Ley Nº 824 tal error no
incide en lo dispositivo del fallo, ya que la restricción al alcance de la exención se encuentra establecida
en la propia disposición especial del artículo 15 del D.F.L. Nº 2. La disposición citada atiende más, como
se ha dicho, a la actividad generadora de la renta, lo que queda en evidencia en la derogación de los
artículos 9º y 10 del D.F.L. Nº 2 que beneficiaba a las empresas constructoras tanto respecto a la
actividad de la construcción como respecto a la explotación de las viviendas económicas y a su venta. El
espíritu de la derogación no fue otro que excluir de la exención a las empresas cuya actividad califica en
primera categoría en virtud del Nº 3 del artículo 20, y cuyo objeto social es la construcción y venta de
viviendas económicas, cuyo es el caso de autos, las que deben regirse por el sistema general de la ley
de la renta.
El artículo 18 de la ley de la renta dispone que en los casos indicados, entre otros, en el artículo 17
Nº 8, letra b) si tales operaciones representan el resultado de negociaciones o actividades realizadas
habitualmente por el contribuyente, el mayor valor que se obtenga estará afecto a los impuestos de
primera categoría y global complementario, según corresponda, agregando el inciso 2º que cuando el
servicio determine que las operaciones a que se refiere el inciso anterior son habituales, considerando el
conjunto de circunstancias previas o concurrentes a la enajenación o cesión de que se trate,
corresponderá al contribuyente probar lo contrario; y, además, el inciso 3º presume de derecho la
habitualidad en ciertos casos que se detallan para luego precisar que en todos los demás se presumirá
la habitualidad cuando entre la adquisición o construcción del bien raíz y su enajenación transcurra un
plazo inferior a un año.
En la especie se advierte asimismo, del tenor del recurso en esta materia, que éste controvirtió
primero la circunstancia de habitualidad, para sostener que no era requisito para la exención pretendida
para luego, aceptando como hipótesis que dicho requisito fuere exigible, sostener que por ser el giro
habitual de la empresa la enajenación y venta de bienes raíces, sus rentas serían periódicas o
habituales, en circunstancias que la norma del D.F.L. Nº 2 en juego, esto es, su artículo 15, se refiere a
las rentas que produzcan las viviendas económicas y no las que obtenga el contribuyente como
consecuencia de su giro habitual consistente en la enajenación de tales viviendas, y aun cuando éste
comprenda la construcción de viviendas económicas de aquellas a que se refiere el señalado D.F.L.
El artículo 15 del Decreto con Fuerza de Ley Nº 2 establece que las rentas que produzcan las
viviendas económicas no se considerarán para los efectos del impuesto global complementario ni
adicional y estarán además, exentas de cualquier impuesto de categoría de la ley de impuesto a la
renta. Las exenciones establecidas en el inciso anterior se aplicarán también en aquellos casos en que
el inmueble sea ocupado por su dueño dispone el inciso 2º del artículo referido.
Una primera cuestión que debe quedar planteada es que resulta básico precisar que la discusión no
puede quedar limitada a establecer sólo el significado del término renta, como es el planteamiento del
recurso, sino el sentido del precepto completo. Es así como el artículo de que se trata indica que los
beneficios a que se refiere corresponden a las rentas que produzcan las viviendas económicas (...), lo
que lleva a analizar cuál es el significado del término produzcan que parece ser decisivo en la discusión.
Como este es un vocablo de uso común, ha de irse al diccionario de la real academia de la lengua
española. Tratándose de una forma verbal del verbo producir, este último aparece como acepción de
engendrar, procrear, criar, dar, rendir fruto los terrenos o los árboles, rentar, redituar interés, utilidad o
beneficio una cosa, y otras que no tienen importancia para la materia de que se trata. Esto es, todas las
acepciones dan cuenta de un beneficio de orden periódico pues incluso entre ellas aparece el de rentar,
cuyo significado es producir o rendir beneficio o utilidad anualmente una cosa. Por lo tanto, ha de
excluirse de la exención el evento de la venta de las viviendas construidas bajo el amparo del Decreto
con Fuerza Ley Nº 2, cuando se realizan por sociedades cuya actividad es la construcción y/o venta de
esas viviendas.
Así las cosas, la conclusión a que se llega es que los jueces recurridos no han vulnerado la
normativa consignada en el recurso al entender el problema como aparece expuesto en la sentencia
recurrida.
Pero aun para reforzar tal conclusión, puede acudirse al contexto de la norma. Su inciso 2º
(actualmente tercero) prescribe que las exenciones establecidas en el inciso anterior se aplicarán
también en aquellos casos en que el inmueble sea ocupado por su dueño. Esta disposición aclara aún
más el sentido del inciso 1º, pues si se establece que la exención se produce también cuando el
inmueble sea ocupado por el dueño, es porque el legislador se inclina por la exención cuando hay
permanencia y no movilidad en el dominio. Por lo razonado, no han existido las violaciones de ley que
denuncia el recurso, tocantes a la materia antes desarrollada ni en cuanto a la interpretación del
artículo 15 del Decreto con Fuerza de Ley Nº 2, sino que, por el contrario, la interpretación de éste se ha
hecho conforme a la ley; de igual modo, no se han producido las vulneraciones de los artículos 2º Nº 1
en relación con el artículo 17 Nº 29 de la ley de la renta, el primero de los cuales se limita a definir renta,
concepto que precisamente cabe atribuirle al valor obtenido por el recurrente de autos al vender el
inmueble de que se trata. El segundo precepto establece que no constituyen renta los ingresos que la
ley no considere tales, el que por todo lo dicho, es inaplicable en la especie.
La mención del artículo 1917 del Código Civil, estimada infringida, guarda entera concordancia con el
concepto de renta que debe asignarse al contemplado en el artículo 15 del D.F.L. Nº 2, tal suerte que su
invocación por los jueces del fondo no constituye infracción legal alguna, sino sólo una consecuencia
lógica de lo razonado en ella.
En relación con las normas de interpretación que el Código Civil entrega en los artículos 19, 20, y 22,
basta con lo ya dicho precedentemente, en orden a que en la especie se ha hecho por los jueces
recurridos una acertada interpretación de las normas impugnadas, que ha conducido a decidir
correctamente la cuestión debatida, de manera que no se ha producido su denunciada transgresión.
Por todo lo anterior, el recurso de casación en el fondo intentado no puede prosperar y debe ser
desestimado, por cuanto no se ha producido ninguna vulneración de los preceptos denunciados por el
recurso, sino que, por el contrario, se ha hecho precisa y correcta aplicación de los mismos.
(Considerandos 8º y 18)
Corte Suprema
Fecha: 19/03/2001
Rol: 4036-2000
Sumario
Estos son distintos a aquellos que fundamentan el fallo y por los cuales se acogió la demanda. En
efecto, en la sentencia se ordena la restitución del inmueble arrendado en virtud de haberse cumplido
con el plazo estipulado en el contrato, mientras que el recurrente señala que debió demandarse por
expiración de los derechos del arrendador, en consecuencia, los argumentos del recurrente no pueden
constituir error de derecho en el cual se haya incurrido en el fallo atacado, por ende, la casación en
examen adolece de manifiesta falta de fundamento. (Considerandos 1º y 2º)
Corte Suprema
Fecha: 19/03/2001
Rol: 4095-2000
Sumario
Los argumentos del recurrente de casación en el fondo no son atendibles, toda vez que en la
sentencia objetada se establece que el contrato de arriendo suscrito por las partes se refería al local
ubicado en avenida España Nº 1341 de Punta Arenas, mientras que el demandado efectivamente ocupó
el local b del mismo inmueble, hecho básico que sustenta la decisión del fallo atacado y que al no haber
sido impugnado denunciando infracción a las leyes reguladoras de la prueba es inamovible para el
máximo tribunal, toda vez que las mencionadas no revisten dicho carácter; por ende, la casación en
estudio adolece de manifiesta falta de fundamento. (Considerando 2º)
Corte Suprema
Arrendamiento predios urbanos, desahucio. Tácita reconducción, procedencia. Recepción pago rentas
ininterrumpida. Aquiescencia arrendador. Renovación contrato, términos y plazo. Cláusula penal, procedencia
Fecha: 30/01/2001
Rol: 4289-2000
Sumario
El artículo 1956 del Código Civil, aplicable en la especie, y que contempla la denominada tácita
reconducción en la terminación del contrato de arrendamiento, dispone que al existir aquiescencia del
arrendador deberá entenderse renovado por tres meses el contrato en las mismas condiciones que
antes, renovación ésta que se repite de igual manera si a la expiración de aquel tiempo se produce el
aludido beneplácito. En otras palabras, la renovación del contrato por tres meses a que alude dicho
artículo, no tiene un carácter impeditivo respecto de otra renovación del contrato por igual período, en la
medida que se configuren los requisitos antes anotados. Así las cosas, la arrendadora percibió el canon
de arrendamiento en forma ininterrumpida a su entera satisfacción, con lo cual se produjo
indiscutiblemente el beneplácito o aquiescencia a que se refiere la norma antes citada y, por lo tanto,
durante aquel período de tiempo el contrato de arrendamiento estuvo vigente y produciendo todos sus
efectos jurídicos entre las partes. En consecuencia, la cláusula penal pactada en el contrato, que se
contempló para el caso que el arrendatario no desocupare o restituyere la propiedad, no se dio en este
caso, toda vez que el pacto de arrendamiento se mantuvo siempre vigente hasta el momento en que se
notificó el desahucio de que da cuenta este proceso y al cual el demandado se allanó, razón por la cual
la demanda de autos debe ser desechada. (Considerandos 1º a 3º de sentencia de Corte de
Apelaciones)
Corte Suprema
Terminación arrendamiento. Ejercicio excepción ignorada, segunda instancia. Omisión de trámite esencial,
recepción causa a prueba. Ejercicio casación en la forma de oficio, fundamento
Fecha: 25/01/2001
Rol: 2629-2000
Que del mérito de los antecedentes, aparece que tanto en el escrito de apelación como al hacerse
parte, la demandada dedujo la excepción de pago de las rentas, concediendo la corte traslado de la
petición formulada ante ella; y consta también que la demandante no evacuó el referido traslado, por lo
que el tribunal debió estimar que había o podía haber hechos sustanciales y pertinentes controvertidos.
En tales circunstancias procesales, y de conformidad con lo que disponen los artículos 207 y 310 del
código de procedimiento civil, lo procedente era que la corte recibiera el incidente a prueba, trámite
omitido durante la substanciación del recurso.
Que la referida omisión importa que se haya faltado a un trámite que la ley declara esencial, según lo
prescribe el código citado en su artículo 800 Nº 5, en relación al Nº 3 de su artículo 795, omisión
constitutiva de la causal de casación contemplada en el Nº 9 del artículo 768, que esta corte debe
declarar de oficio
Por estas consideraciones, y de conformidad con lo dispuesto en los artículos 764, 767, 768, 786 y
808 del código de procedimiento civil, actuando de oficio este tribunal de casación, se anula la sentencia
de primero de junio de dos mil, que se lee a fojas 91, y se retrotrae la causa al estado que la sala no
inhabilitada de la corte de Santiago se aboque al conocimiento de la excepción de pago opuesta a fojas
84, para fallarla conjuntamente con el fondo del recurso de apelación. (Considerandos 1º a 3º)
Fecha: 18/01/2001
Rol: 8082-1999
Sumario
Que tratándose, como en la especie, de un contrato de plazo fijo superior a un año, la vía idónea
para ponerle término es la acción de restitución del inmueble y no el desahucio judicial, según se infiere
de la relación entre los artículos 3º y 4º de la citada Ley Nº 18.101. (Considerando 3º)
Corte Suprema
Excepción contrato no cumplido, procedencia. Cumplimiento obligación arrendador, no turbar el goce de la cosa
arrendada. Bien nacional de uso público. Turbación, configuración. Nulidad de oficio, requisitos declaración.
Constancia en el propio acto o contrato
Fecha: 16/01/2001
Rol: 3457-2000
Sumario
Que el artículo 1683 del Código Civil dispone que la nulidad absoluta puede y debe ser declarada de
oficio por el juez, aun si petición de parte, cuando aparece de manifiesto en el acto o contrato de que se
trata.
Que la doctrina y jurisprudencia reiterada de los tribunales acerca de lo que debe entenderse por
nulidad que aparece de manifiesto en el acto o contrato, establece que ésta debe constar en el acto o
contrato mismo, sin recurrir a otros antecedentes o probanzas, ya que en el caso contrario, no
aparecerá de manifiesto en el acto o contrato y el juez no podrá declarar de oficio la nulidad.
Que en la especie, no aparece el vicio alegado por la demandada y de las propias presentaciones de
dicha parte consta que para invocar la nulidad, recurre a numerosos oficios y documentos emanados de
la Gobernación Provincial de Los Andes por lo que la petición debe ser rechazada, siendo improcedente
la audiencia al ministerio público. (Considerandos 3º a 5º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Que, por otro lado, la excepción de contrato no cumplido, contemplada en el artículo 1552 del Código
Civil, fundada en las turbaciones que se le habrían producido al demandado en el goce de la cosa
arrendada al verificar que ésta sería un bien nacional de uso público y no pertenecería a su
arrendadora, debe rechazarse, ya que consta que la arrendataria sigue gozando de los terrenos
arrendados, sin que la sociedad demandante haya incurrido en actos que impliquen una turbación de la
parte demandada en este uso y goce. (Considerandos 13 a 15 de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Terminación contrato, arrendamiento predio rústico. Obligaciones del arrendador, cumplimiento. Conservación
del bien, depredación. Pago de contribuciones, obligación. Procedencia recurso de casación en el fondo,
modificación hechos fijados por jueces del fondo
Fecha: 16/01/2001
Rol: 4016-2000
Sumario
El artículo 1915 del Código Civil al conceptualizar el arrendamiento indica que en él las dos partes se
obligan recíprocamente, y que como contrato bilateral que es, impone diversas obligaciones al
arrendatario, que para los efectos que interesan, son el usar de la cosa según los términos o el espíritu
del contrato y cuidar la cosa como un buen padre de familia.
Que en los términos del artículo 1939 del Código Civil el arrendatario empleará en la conservación de
la cosa el cuidado de un buen padre de familia, de manera que con arreglo a los principios generales es
responsable de la culpa leve, y conforme al inciso 2º de tal artículo y texto legal: faltando a esta
obligación, responderá de los perjuicios, y aún tendrá el arrendador para poner fin al arrendamiento en
el caso de un grave y culpable deterioro.
Que conforme a las probanzas que han sido colacionadas cabe sin duda alguna concluir que la
demandada ha infringido con la obligación que antes se menciona, como quiera que ha permitido que
terceros y otros, e incluso ella misma por su omisión que se produzca la tala indiscriminada y sin
permiso de la autoridad pertinente, respecto del predio que ocupa por lo que en 1985 fue objeto de una
sanción por parte del tribunal de policía local de Río Bueno, y sin parar mientras ha seguido en tales
actitudes, que han conllevado a que en dos oportunidades a lo menos haya sido denunciada a la justicia
del crimen como también al tribunal de policía local de Río Bueno, y asimismo, no ha pagado
oportunamente las contribuciones del predio que arrienda a que se hallaba obligado expresamente, de
lo cual se desprende sin duda alguna que por su actuar y obrar negligente y poco acucioso ha causado
un grave y culpable deterioro del predio del que es arrendatario, dándose así los presupuestos que se
comprenden en el inciso 2º del artículo 1939 del Código Civil, y por clara consecuencia de lo indicado,
se pondrá fin al arrendamiento en cuestión. (Considerandos 24 a 26 de sentencia de primera instancia).
Fecha: 24/10/2000
Rol: 16275-2000
Sumario
Tácita reconducción, concepto, alcance. Plazo de renovación del contrato de arrendamiento. Cláusula penal,
improcedente
Fecha: 02/10/2000
Rol: 5521-2000
Sumario
El artículo 1956 del Código Civil, aplicable en la especie, y que contempla la denominada tácita
reconducción en la terminación del contrato de arrendamiento, dispone que al existir aquiescencia del
arrendador deberá entenderse renovado por tres meses el contrato en las mismas condiciones que
antes, renovación ésta que se repite de igual manera si a la expiración de aquel tiempo se produce el
aludido beneplácito. La renovación sucesiva por períodos no superior a tres meses está contemplada en
la parte final del artículo 1956, al expresar "(...) Sin perjuicio de que a la expiración de este tiempo
vuelva a renovarse el arriendo de la misma manera".
La cláusula penal pactada en el contrato se contempló para el caso que "el arrendatario no
desocupare o restituyere la propiedad", situación fáctica que, como se dijo, no se dio en este caso, en
donde el pacto de arrendamiento se mantuvo siempre vigente hasta el momento en que se notificó el
desahucio a que se refiere este proceso y al cual el demandado se allanó, razón por la cual la demanda
de autos debe ser desechada. (Considerandos 1º a 3º)
Corte Suprema
Fecha: 29/06/2000
Rol: 876-1999
Sumario
La terminación anticipada y unilateral del contrato de servicio de transporte celebrado entre las partes
fue injustificada, por cuanto, como se ha expresado ut supra la actora dio cumplimiento a su obligación
principal de trasladar al personal de Forestal Russfin según recorrido establecido en el contrato. Y la
demandada no logró probar lo contrario. Asimismo, aquellas obligaciones adicionales, como tener el bus
equipo de radio comunicaciones y seguro de accidentes para los trabajadores, nunca fueron para las
partes, sus incumplimientos causales suficientes que ameritaran poner término a la relación contractual.
Amén que está probado en autos que efectivamente el bus tenía dicho equipo de radio y seguro
obligatorio de accidentes, y desde 1997 un seguro de asientos de pasajeros. Y por otro lado el servicio a
bordo también fue adecuado. Es decir, en atención al espíritu del contrato y a la buena fe, con que estos
deben ejecutarse resulta desproporcionado e injusto el actuar de la demandada, no habiendo entonces
antecedentes serios y graves que permitieran a la empresa Forestal Russfin poner término anticipado y
unilateral a la relación contractual. El daño emergente, se define como el empobrecimiento real y
efectivo que sufre el patrimonio del deudor. Ahora bien la actora producto del término anticipado del
contrato dejó de percibir un ingreso mensual a su patrimonio, puesto que el bus estaba puesto a
disposición de la demandada, pero sucede y tal como lo señala la contraparte, en el caso que el tribunal
acceda a este rubro, el único daño emergente que pudiera existir sería el equivalente al no pago de los
4,5 viajes mensuales que debía hacerse por Forestal Russfin, según lo estipulado en la cláusula quinta
del contrato, hasta el 31 de julio de 1998, puesto que es la única pérdida, ya que la mora en que haya
incurrido eventualmente en otras obligaciones la actora, no tiene relación de causalidad con el término
anticipado del contrato. Teniendo presente además, que la Sra. Cvitanic como ha quedado demostrado
tiene otras actividades y vehículos y no sólo depende del bus sub lite. Por lo que este tribunal no dará
lugar al daño emergente solicitado. Al decir el artículo 1558 del Código Civil que la indemnización de
perjuicios comprende el daño emergente y el lucro cesante, no excluye de un modo categórico, la
reparación del daño moral, puesto que en dicha disposición no se ha dicho que la indemnización sólo
comprenda los citados rubros. Ni menos aún puede argumentarse que la ley haya prohibido este tipo de
indemnización fuera del ámbito de los delitos o cuasidelitos. La reflexión que debe hacerse es que los
bienes extrapatrimoniales de una persona como el honor y la fama, tienen un valor que de ordinario
sobrepasa el de los bienes materiales, de modo que si con respecto a los perjuicios o daños causados
por un delito o cuasidelito se ha dado cabida por la jurisprudencia desde hace tiempo a la indemnización
del daño exclusivamente moral, no se justifica el motivo que la niegue en el caso de marras. Al respecto,
la excelentísima Corte Suprema, se ha pronunciado favorablemente en tres ocasiones (Fallos del Mes
Nº 431 de octubre de 1994) en este caso, a la actora producto del término injustificado del contrato, se
ha dañado su imagen o fama comercial como transportista, según además se ha acreditado con lo
cavilado precedentemente, por lo que este tribunal dará lugar a la indemnización demandada por este
rubro, en los términos que dirá. (Considerandos 19 a 21 de sentencia de primera instancia)
Corte Suprema
Arrendamiento. Obligación arrendatario. Falta de pago de renta. Terminación de contrato por falta de pago de
renta. Momento en que se realiza segunda reconvención de pago
Fecha: 13/04/2000
Rol: 4141-1999
Sumario
El artículo 1942 del Código Civil señala que el arrendatario es obligado al pago del precio o renta; el
artículo 1944 del código ya citado a su vez, indica que su pago se hará en los períodos estipulados; y el
artículo 10 de la Ley Nº 18.101 prescribe que, cuando la terminación del contrato se pida por falta de
pago de la renta, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 1977 del Código Civil la segunda de las
reconvenciones a que dicho precepto se refiere se practicará en la audiencia de contestación de la
demanda. Finalmente, este artículo 1977 del Código Civil dispone que, "la mora de un período entero en
el pago de la renta dará derecho al arrendador después de dos reconvenciones, entre las cuales medien
a lo menos cuatro días, para hacer cesar inmediatamente el arrendamiento, si no se presta seguridad
competente de que se verificará el pago dentro de un plazo razonable, que no bajará de treinta días".
Cuando el legislador en el artículo 1977 del Código Civil antes transcrito, emplea la expresión "la mora
de un período entero en el pago de la renta", está haciendo referencia al período estipulado para el pago
de la renta y no, como lo entendió el tribunal, a la mora de la totalidad de la renta. Este error de
interpretación lo condujo a aceptar pagos parciales de la renta y a desestimar la demanda de
terminación del contrato de arrendamiento porque "sólo se adeudaban diferencias de rentas". En la
especie, es un hecho de la causa que, el arrendatario demandado y reconvenido adeuda durante más
de un período entero de los estipulados para el pago de las rentas, las diferencias por concepto de
reajustes que se le cobran.
El pago efectivo es la prestación de lo que se debe, el cual debe ser íntegro; por consiguiente, no
puede estimarse que el arrendatario y demandado de autos ha dado cumplimiento a lo dispuesto en el
artículo 1977 del Código Civil para estimar así que ha enervado de alguna de las maneras como allí se
indica, la acción de autos.
Corte Suprema
Artículo 124 Código Tributario, excepción de prescripción de la acción del reclamante. Rentas, definición.
Utilidades gravadas, impuesto de primera categoría. Viviendas económicas, interpretación de la normativa
Fecha: 08/07/1999
Rol: 6-1999
Sumario
El artículo 15 del Decreto con Fuerza de Ley Nº 2 establece que las rentas que produzcan las
viviendas económicas no se considerarán para los efectos del impuesto global complementario ni
adicional y estarán, además, exentas de cualquier impuesto de categoría de la ley de impuesto a la
renta. Las exenciones establecidas en el inciso anterior se aplicarán también en aquellos casos en que
el inmueble sea ocupado por su dueño. Una primera cuestión que debe quedar planteada es que resulta
básico precisar que la discusión no se puede limitar a establecer el significado del término renta, como
parece ser el planteamiento del recurso, sino el significado del precepto completo. Es así como lo que el
artículo de que se trata indica que los beneficios a que se refiere corresponden a las rentas que
produzcan las viviendas económicas, lo que lleva a analizar cuál es el significado del término produzcan
que parece ser decisivo en la discusión. Como éste es un término de uso común, ha de irse al
diccionario de la Real Academia de la Lengua Española. Tratándose de una forma verbal del verbo
producir, este último aparece como acepción de engendrar, procrear, criar, dar, rendir fruto los terrenos
o los árboles, rentar, redituar interés, utilidad o beneficio una cosa, y otras que no tienen importancia
para la materia de que se trata. Esto es, todas las acepciones dan cuenta de un beneficio de orden
periódico pues incluso entre ellas aparece el de rentar, cuyo significado es producir o rendir beneficio o
utilidad anualmente una cosa. Por lo tanto, ha de excluirse de la exención, el evento de la venta de las
viviendas construidas bajo el amparo del Decreto con Fuerza de Ley Nº 2, ya que dicho negocio jurídico
no generó para el recurrente beneficios periódicos, sino sólo el precio que se pagó por ellas.
(Considerandos 6º y 7º)
Procedencia comodato precario, requisito. Ocupación por ignorancia o mera tolerancia dueño, concurrencia.
Título tenencia, existencia. Contrato de arrendamiento, expirado. Conocimiento dueño, existencia contrato
Fecha: 11/01/1999
Rol: 971-1998
Sumario
El demandado acreditó que había recibido el predio, en arrendamiento, de un tercero que antecedió
al demandante en el dominio del inmueble; que, en consecuencia, resulta errónea la conclusión de los
jueces del fondo, cuando de tal circunstancia presumen la mera tolerancia del dueño, sobre todo si se
ha tenido por cierto que el actor conocía la existencia del contrato, pues si bien tal contrato de
arrendamiento es inoponible como fuente de obligación para el actor, no lo es menos que su expiración
ha operado por la extinción del derecho del arrendador, de conformidad a lo preceptuado por los
artículos 1950 Nº 3 y 1961 del Código Civil, de modo que la sola extinción del derecho del arrendador no
priva de título a la tenencia del demandado, ni substituye el contrato por la mera tolerancia,
correspondiendo al actor demandar la restitución del predio afectado por la referida expiración del
arriendo mediante un procedimiento distinto al de autos, en el cual, el demandado podría hacer valer los
derechos que creyera asistirle.
El artículo 2195 del Código Civil exige, para configurar el precario, que la ocupación no tenga otro
título que la ignorancia o mera tolerancia del dueño; en la especie, no se acreditó tal circunstancia, sino
por el contrario, que tal ocupación estaba justificada por un contrato de arrendamiento anterior que
habilitaba al demandado como mero tenedor de la finca; en consecuencia, el acogimiento de la
demanda ha importado un error de derecho, pues se ha tenido por establecida la existencia de un
precario, en circunstancias que no se reunían los requisitos exigidos por el citado artículo 2195. El
referido error resulta bastante para anular la sentencia, ya que ha tenido influencia substancial en lo
decisorio del fallo, pues sólo en su virtud ha sido posible que se acogiera la demanda.
(Considerandos 2º a 4º)
Corte Suprema
Fecha: 15/06/1998
Rol: 1321-1997
Sumario
El recurso se sustenta en los errores de derecho en que habría incurrido el fallo impugnado, al
infringir los artículos 5º y 10 del Decreto Ley Nº 993, por cuanto se ha declarado que la segunda de
estas normas contiene una disposición que no obliga al adquirente de un inmueble rústico arrendado,
sino en cuanto consienta a la continuación del contrato.
Finalmente, en el recurso se dice que estas infracciones de ley han influido en lo dispositivo del fallo,
pues si se hubiese reconocido al artículo 10 del D.L. Nº 993 su carácter de norma especial frente a los
artículos 1950 y 1962 del Código Civil, se habría rechazado la pretensión del actor.
Los antes citados artículos del Código Civil regulan la terminación del contrato de arrendamiento de
cosas, y en consecuencia tienen el carácter de normas generales aun frente a disposiciones especiales
del mismo título, relativas por ejemplo al arrendamiento de casas, almacenes u otros edificios.
Así entonces, debe entenderse que el contrato de arriendo de una cosa corporal terminará, por
ejemplo, por extinción del derecho del arrendador y en el evento de que dicha expiración sea imputable
a hecho o culpa de ese contratante, el arrendatario gozará de derecho a indemnización, según lo
previene el artículo 1961; pero tal regulación no será aplicable a los contratos de arrendamiento que
deban regirse por leyes especiales, por expreso mandato del artículo 4º del código, en cuanto consagra
el principio de la especialidad.
De conformidad a lo que dispone el artículo 1º del D.L. Nº 993, el contrato de autos se rige por las
disposiciones de dicho cuerpo legal, sin perjuicio de la aplicación supletoria del derecho común en lo no
previsto por él, de acuerdo a su artículo 11. La suerte del contrato de arriendo de predios rústicos,
cuando se extingue el derecho del arrendador, está regulada en el artículo 10 del Decreto Ley en
análisis, que expresamente señala que la venta o transferencia del predio arrendado, a cualquier título,
no hace cesar el contrato a menos que así lo acordaren el nuevo propietario con el arrendatario; en
consecuencia, debe entenderse que esta ley especial, ha excluido la terminación del contrato por
expiración del derecho del arrendador como causal de terminación de aquél, pues de su claro tenor
aparece que las mutaciones en el dominio del inmueble no afectan la subsistencia del contrato.
En consecuencia, carecen de vigencia en la especie los artículos 1950 Nº 3 y 1962 del Código Civil; y
al no declararlo así, la sentencia impugnada ha incurrido en un error de derecho que resulta bastante
para anularla, pues ha sido sólo en razón de la falsa aplicación de dichas normas que pudo acogerse la
demanda. (Considerandos 1º a 7º)
Corte Suprema
Fecha: 18/05/1998
Rol: 2037-1997
Sumario
Los hechos establecidos por los jueces del fondo son inamovibles para el tribunal de casación; y de
los antes mencionados se desprende de manera inequívoca cuál fue la intención de las partes al
celebrar el contrato de arrendamiento y el destino establecido para el departamento; y que fue el
arrendador quien se colocó en la imposibilidad de entregar la cosa a la demandante para que pudiera
hacer uso de ella en los términos del contrato, lo que conduce a determinar que los sentenciadores no
infringieron los artículos 1560 y 1925 del Código Civil y, por el contrario, dieron a dichos preceptos una
correcta aplicación.
En lo atingente a la presunta infracción al artículo 1950 del Código Civil, asimismo debe ser
desestimada, comoquiera que dicho precepto, al margen de omitirse en el recurso, la manera en que no
ha recibido aplicación, no constituye un precepto decisorio litis, por referirse a causales de extinción del
contrato de arrendamiento ajenas a la controversia. (Considerandos 2º y 3º)
Corte Suprema
Obligación del arrendador de mantener el bien arrendado en las mismas condiciones. Obligación del arrendador
de conservar el bien arrendado en las mismas condiciones
Fecha: 05/02/1998
Rol: 4240-1997
Sumario
Que, conforme lo previenen los artículos 1927, 1928, 1930 y 1931 del Código Civil, no basta con que
el arrendador entregue la cosa inicialmente apta para servir al arrendatario, sino que también debe
procurarle que el goce se prolongue por el tiempo de duración del arrendamiento, es decir, su obligación
consiste en entregar el bien en estado de servir y mantenerlo y conservarlo en esta calidad. Y todavía
ha de procurarle un goce tranquilo y pacífico, absteniéndose de turbarlo él mismo y protegerlo de los
embarazos de que era víctima por parte de terceros.
Así, se acoge recurso de protección en contra de construcción, hecha al amparo del arrendador,
acera que perturba la aptitud del terreno arrendado para el servicio para el cual se arrendó, por cuanto
dificulta la salida de los vehículos que desde el local que explota comercialmente el recurrente, razón
por la se hace lugar al recurso de protección, disponiendo la demolición de tal franja que entorpece la
salida de los vehículos. (Considerandos 5º y 6º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Artículo 611 Código de Procedimiento Civil. Procedencia de cobro de cláusula penal en procedimiento de término
de arrendamiento, procedencia de cobro de indemnización pactada en procedimiento de término de arrendamiento
Fecha: 12/08/1997
Rol: 7003-1995
Sumario
Que con sujeción a esa misma lógica, ocurre que el artículo 611 del estatuto procesal autoriza al
arrendador que pide la terminación del arrendamiento por falta de pago de la renta, para ejercitar la
acción de cobro de otras prestaciones análogas que se adeuden. La voz análoga está asociada a las
rentas insolutas en que se basa la acción de terminación del contrato, y a los consumos.
Que en concepto de estos jueces, la indemnización pactada, en cuanto íntimamente relacionada con
las rentas pendientes de vencimiento a la fecha del incumplimiento, merece de lleno la calificación de
prestación análoga, lo que quiere decir que también podía y puede perseguirse su cobro al requerirse la
terminación del contrato y el pago de lo insoluto. (Considerandos 4º y 5º de sentencia de Corte de
Apelaciones)
Corte Suprema
Cierre de acceso a inmueble arrendado. Contrato de arrendamiento. Obligaciones que emanan de él. Obligación
de mantener cosa arrendada en estado de servir para finalidad natural del arrendamiento
Fecha: 10/06/1997
Rol: 1215-1997
Sumario
Los hechos referidos demuestran que el arrendador incurrió en un hecho que importa una infracción
a las obligaciones esenciales del contrato de arrendamiento convenido, como lo son la de mantener la
cosa dada en arriendo en estado de servir para la finalidad natural del arrendamiento (artículo 1924 Nº 2
y 1927 del Código Civil) y, especialmente, aquélla consistente en abstenerse de realizar actos de
entorpecimiento o perturbación en el legítimo goce de la propiedad por parte del arrendatario (1924 Nº 3
y 1928 de ese mismo cuerpo legal).
Que, la ilicitud del actuar del arrendador se demuestra claramente si se razona que el contrato
legalmente celebrado, de acuerdo al artículo 1545 del Código Civil, es una ley para los contratantes.
Que, asimismo, el comportamiento del recurrido es arbitrario, por cuanto el acto no es lo que
naturalmente se puede esperar de una persona prudente y juiciosa, al haber alterado sin conocimiento
de la arrendataria, mediante vías de hecho, una situación jurídica establecida, al margen de una acción
jurisdiccional a través del proceso correspondiente.
Que, de tal forma, el recurrido ha perturbado el legítimo ejercicio de por lo menos una de las dos
garantías que en el recurso se invocan, precisamente el derecho de propiedad de índole inmaterial
sobre las facultades, intereses o atributos que la arrendataria tenía incorporados al patrimonio en virtud
del arrendamiento (artículo19 Nº 24 de la Constitución Política de la República). (Considerandos 5º a 8º
de sentencia de Corte Suprema)
Ficha 198 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Causal de nulidad. Sentencia. Carencia de fundamentos de hecho y de derecho. Contrato de arriendo. Prueba
del contrato
Fecha: 19/05/1997
Rol: 2204-1996
Sumario
Conviene tener presente que el demandado ha asumido en el recurso en examen, una posición
diametralmente opuesta a aquella que sirvió de fundamento a las alegaciones y defensas esgrimidas en
el curso de la causa. En efecto, alegó que era dueño del inmueble sub lite, por haberlo adquirido por
prescripción, ya sea ordinaria o extraordinaria y, ahora, afirma que lo detenta en virtud de un contrato de
arrendamiento, que celebró con el antecesor en el dominio del demandante, lo que le conferiría la
calidad de mero tenedor del bien raíz. Lo anterior, a juicio de estos sentenciadores, le resta seriedad a
su posición. (Considerando 10)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Cosa mueble por tiempo determinado. Improcedencia de desahucio. Extinción ipso
iure de contrato a plazo fijo. Indemnización de perjuicios
Fecha: 06/05/1997
Rol: 2555
Sumario
La mora de restituir la cosa, extinguido que sea el arrendamiento por la llegada del plazo por el cual
fuera pactado, se resuelve en pleno resarcimiento de todos los perjuicios de la mora y a lo demás que
contra él competa como injusto detentador. El demandante en estos autos no acreditó los perjuicios que
le ha ocasionado la mora en la restitución de ambas motobombas, limitándose a señalar que pide el
cumplimiento de los contratos que subscribió el arrendatario demandado; y a solicitar las sumas que se
devenguen en el transcurso del juicio, debiendo entenderse, tal vez, que esto último lo solicita a título de
indemnización de perjuicios, lo que en absoluto está claro. Que no puede, en caso alguno, asimilarse a
indemnización de perjuicios el precio de la renta contractualmente pactada, toda vez que el sentenciador
ignora en forma absoluta cuáles fueron realmente los daños que con dicha mora se causó al patrimonio
del arrendador con la injusta detentación que tuvo lugar con posterioridad a la extinción del contrato de
arrendamiento por parte de quien, en su época, tuviera la calidad de arrendatario; injusta detentación a
que hacen referencia las disposiciones civiles que regulan la materia y que es la que debe ser
indemnizada atendido el retardo en la restitución. (Considerandos 7º a 9º)
Fecha: 06/05/1997
Rol: 2555-1995
Sumario
Corte Suprema
Fecha: 27/11/1996
Rol: 6552-1995
Teniendo presente las vicisitudes existentes entre las partes del juicio, que la manifestación de
voluntad expresada por el arrendatario de poner término al contrato no requiere de fórmulas
sacramentales, sino que solamente hacerla saber al arrendador, lo que hizo y, finalmente, la actitud
asumida por éste, es dable concluir que no corresponde decretar que las rentas de arrendamiento se
devenguen, hasta que el juicio esté finiquitado por sentencia ejecutoriada, como lo plantea el actor, pues
adoptar una resolución en ese sentido provocará un empobrecimiento injusto para el demandado y, el
perjuicio que eventualmente sufrirá el acreedor, sólo se generará por no haber sido diligente en
resguardo de sus intereses. (Considerando 4º)
Corte Suprema
Fecha: 16/10/1996
Rol: 32718
Sumario
El artículo 1952 del Código Civil dispone que el que ha dado noticia para la cesación del arriendo, no
podrá revocarla, sin el consentimiento de la otra parte.
Al interpretar las cláusulas del contrato debe tenerse presente las normas que sobre interpretación de
los mismos da el Código Civil, especialmente en sus artículos 1560, 1562, 1563 y 1564. Y conforme a
ellas es posible establecer que la intención clara y conocida de las partes fue establecer contratos de
arrendamiento a plazo fijo cuyas fechas de término se señalaron expresa y específicamente en cada
contrato. El arrendador además, expresó, en la forma convenida y con la anticipación legal, su voluntad
de tener por terminados esos contratos en las fechas de término convenidas y su intención o voluntad
de no persistir en dichos contratos y las partes también lo entendieron así, pues en cada contrato
celebrado, señalan textualmente que, en la fecha de su celebración, el arrendador da y entrega en
arrendamiento (...). Luego, en cada escritura pública que suscribieron, cada vez celebraron un nuevo
contrato de arrendamiento, estableciendo cada vez una renta diferente a la de los contratos anteriores,
y, como sabemos, la renta es un elemento esencial de estos contratos y esta circunstancia, fijación de
una nueva renta, prueba un nuevo contrato.
Es un principio de las convenciones que los contratantes se comporten de acuerdo con la buena fe.
Así lo dispone el artículo 1546 del Código Civil. Esta regla no sólo se aplica a la ejecución del contrato
sino también a la forma como éste debe interpretarse. Para pensar así, basta tener presente que la
disposición en examen establece que la literalidad de las estipulaciones debe entenderse
complementada por la naturaleza de la obligación y por todo aquello que según la ley o las costumbres
pertenecen a ella. Además, este precepto se encuentra íntimamente vinculado con la aplicación práctica
que hayan hecho las partes de las cláusula contractuales o una de ellas con aprobación de la otra.
(Algunas consideraciones sobre la interpretación del contrato. Hugo Rosende Álvarez. Trabajo publicado
en R.T. LXXXIII Nº 3 año 1986, p. 97). Las partes, dando aplicación práctica a los contratos de
arrendamiento que les ligaban, cada vez que venció el contrato que les regía, celebraron, por escritura
pública, un nuevo contrato de arrendamiento, en que estipularon detalladamente las cláusulas que
debían regirse, fijaron una nueva renta, señalaron un plazo de duración del mismo, especificando la
fecha de iniciación y de término de cada contrato de lo que es posible deducir que la voluntad de las
mismas fue celebrar cada vez un nuevo contrato conviniendo en todos sus elementos, tanto más,
cuando el arrendador ya había dado aviso de que el contrato terminaba en la fecha de vencimiento
acordada y de su voluntad de no persistir en el mismo, lo que optaba a que pudiera el anterior renovarse
o prorrogarse. Luego, tratándose en la especie de la existencia de negocios diferentes con fisonomía
propia, cada contrato de arrendamiento celebrado por las escrituras públicas a que se ha hecho
referencia, ha terminado, según se convino en cada uno de ellos, a la llegada del plazo convencional de
duración y, en el caso de que se trata este proceso, no existiendo en la Ley Nº 18.101 disposición
alguna que altere lo libremente convenido por las partes como sabemos, en los contratos de
arrendamiento en que se ha pactado un plazo de duración, opera como causal específica de
terminación, el vencimiento del plazo estipulado. Este es precisamente uno de los efectos de los
términos extintivos. Luego, procede la restitución del inmueble solicitada por el actor y arrendador y a la
que ha dado lugar la sentencia en alzada.
Por último, la palabra renovar que ha sido esgrimida por la parte demandada en apoyo a su tesis de
que entre las partes ha existido un solo contrato de arrendamiento que se ha renovado sucesivamente
según el diccionario de la lengua española significa hacer como de nuevo una cosa o volverla a su
primer estado. Restablecer o reanudar una relación u otra cosa que se había interrumpido. Reanudar,
poner de nuevo o reemplazar una cosa. Trocar una cosa vieja o que ya ha servido por otra nueva.
Reiterar o publicar de nuevo. Consumir el sacerdote las formas antiguas y consagrar otras de nuevo. Y,
de estas definiciones es también posible concluir que las partes, al firmar cada escritura pública
reanudaron o restablecieron una relación o negocio jurídico que se había interrumpido por la llegada del
vencimiento del plazo fijado para su duración, luego, reemplazaron un negocio por otro, celebrando
cada vez un contrato con vida propia e independiente que, en cada caso, se regía por la legislación
vigente a la fecha de su celebración.
Por otra parte, toda legislación nueva es hecha con la convicción de su superioridad sobre la que
está llamada a reemplazar. Para el que la hace, ella regla mejor las relaciones jurídicas que organiza. El
interés social exige, por esto, que se extienda lo más posible su eficacia a fin de agrandar el círculo de
perfeccionamiento que se espera. No es lógico, ni justo entonces, pretender, hoy día, aplicar a un
contrato que estuvo vigente hasta el 30 de junio de 1993, una legislación, como es el D.L. Nº 964
dictado el 12 de abril de 1975. (Considerandos 4º a 8º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Contrato de arrendamiento. Término del contrato. Recurrente debe ser agraviado. Falta de legitimación
Fecha: 03/10/1996
Rol: 3207-1996
Sumario
La petición concreta del actor de la demanda fue que se declarara terminado inmediatamente el
contrato de arriendo por falta de pago de las rentas, y que el demandado pagara las adeudadas a la
fecha de interposición de la demanda y las que se devengaran hasta la restitución del inmueble; y la
sentencia que ahora se impugna tiene por hecho cierto que la propiedad quedó a disposición del actor el
último día de mayo de 1995, razón por la cual declaró terminado el arrendamiento a contar del 1º de
junio de ese año y tuvo por pagadas las rentas devengadas hasta ese día con las sumas consignadas
en autos.
Por consiguiente, la sentencia impugnada ha satisfecho las pretensiones del actor, de modo que esa
decisión jurisdiccional no ha podido causarle agravio; y puesto que la ley sólo concede el recurso de
casación a la parte agraviada, el de autos no puede prosperar por falta de legitimación de quien lo
interpuso. (Considerandos 2º y 3º)
Fecha: 04/07/1996
Rol: 2956-1996
Sumario
Que constituye un hecho de esta causa, pues la propia parte demandante así lo ha señalado en
términos explícitos, que la demandada "desde más de dos años a la fecha (...)" (la demandada dice que
desde hace más de doce), viene pagando la renta de arrendamiento los días diez de cada mes o
después del día diez de cada mes, lo que hace que el pago efectuado en una ocasión diferente a la
pactada en el contrato privado suscrito por las partes, sea un pago oportuno, como quiera que ha
mediado en la especie una modificación contractual tácita, que ha respondido más a la conducta de
ambas partes que a lo expresado por ellas.
Más efectivo que los decires empleados por las partes son sus propias conductas, de modo que si
éstas contradicen a aquellas, resulta forzoso concluir que serán estas las que deberán primar sobre
aquéllas.
Que el artículo 1944 del Código Civil señala como obligación del arrendatario, pagar "el precio o renta
(...) en los períodos estipulados (...)" lo que lleva a entender a este sentenciador, que el término que
tiene el arrendatario para pagar su renta es la del "período" en que ésta se devenga, pues el legislador
citado no ha expresado que la renta debe pagarse en "los plazos estipulados", sino en "los períodos
estipulados".
Concuerda en plenitud esta idea con la contemplada por el artículo 1977 del mismo código, cuando
expresa que "la mora de un período entero en el pago de la renta, dará derecho al arrendador, después
de dos reconvenciones para hacer cesar inmediatamente el arriendo (...)", lo que implica que la mora en
materia de arrendamiento sólo se genera, luego de transcurrido un "período entero", es decir, un mes
completo, sin que al arrendador se le hubiera pagado dicha renta o precio.
Por otra parte, a esta concepción del problema que se ventila en autos, debe agregarse el hecho que
las disposiciones de la Ley Nº 18.101, "que fija normas especiales sobre arrendamiento de predios
urbanos", aplicables al caso sub lite por ser de aquellas calificadas como de orden público, deben
entenderse prevalecer sobre las normas contractuales, como lo demuestra el artículo 19 de dicho texto
legal, al declarar "irrenunciables" los derechos que ella confiere a los arrendatarios. (Considerandos 3º y
4º)
Terminación de contrato de arrendamiento a plazo fijo. Efecto "ipso iure" de la expiración del plazo
Fecha: 06/07/1995
Rol: 1134-1994
Sumario
(...) la Ley Nº 18.101 de 29 de enero de 1982, que fija normas especiales sobre arrendamientos de
predios urbanos, bajo cuyo imperio se pactó el contrato sub judice, no contempla en su texto
disposiciones concernientes a la terminación de los contratos de plazo fijo superior a un año, sobre
inmuebles destinados a fines no habitacionales, por lo que en la materia rige a plenitud el derecho
común, específicamente, el artículo 1950 Nº 2 del Código Civil, de acuerdo con el cual, la expiración del
plazo convenido pone fin ipso iure, al contrato, sin necesidad de aviso previo en tal sentido formulado
por alguna de las partes;
Bajo la actual normativa, sólo se requiere aviso previo de la voluntad del arrendador en orden a no
perseverar en el contrato, denuncia conocida como desahucio respecto de los arrendamientos cuyo
plazo de duración se haya pactado mes a mes y de aquéllos de duración indefinida o indeterminada a
que se refiere el artículo 1951 del Código Civil, casos en que el contrato de arriendo según la Ley
Nº 18.101 señala o "fija" determinadamente el plazo previo en que debe practicarse el aviso en cuestión;
En consonancia con las razones aducidas en las reflexiones precedentes, no es dable deducir de
alguna disposición legal actualmente vigente la exigencia o al menos una pauta de referencia respecto
de un aviso previo expedido dentro de cierto plazo para poner fin a un contrato de duración fija o
determinada, como el que es objeto de la controversia de autos. (Considerandos 8º a 10)
Corte Suprema
Requisitos precario. Requisito de inexistencia de contrato que justifique la ocupación para la procedencia del
precario. Contrato de arriendo de cosa ajena. Procedencia de oposición de contrato de arriendo celebrado con
tercero en juicio precario. Contrato de arriendo de inmueble ajeno
Fecha: 22/05/1995
Rol: 6749
Sumario
Que de acuerdo a lo dispuesto en el inciso 2º del artículo 2195 del Código Civil, para que prospere la
acción de precario es menester acreditar que el demandado detenta un bien ajeno, por ignorancia o
mera tolerancia del dueño y sin que exista un contrato que permita a éste retener dicho bien. Que dicho
supuesto no concurre cuando la demandada ocupa el inmueble en virtud de un contrato de arriendo,
que si bien fue celebrado en la calidad de arrendadora por quien no es la dueña del inmueble es
suficiente para enervar la acción invocada en su contra; ya que conforme lo dispone el artículo 1916
inciso 2º del Código Civil, el contrato de arriendo celebrado sobre cosa ajena es plenamente válido y, en
consecuencia, es oponible al propietario de la cosa. Éste para recuperar las facultades inherentes al
dominio, debe intentar las acciones que le confiere la ley, para obtener que se declare judicialmente la
terminación de dicho contrato de arriendo. (Considerando único)
Corte Suprema
Fecha: 20/10/1994
Rol: 21106
Sumario
Que respecto de la primera causal invocada, esto es, haberse faltado a algún trámite declarado
esencial por la ley, se lo hace consistir en el requerimiento establecido en el artículo 11, inciso 2º, de la
Ley Nº 18.101 en orden al juramento que el demandado debe prestar sobre la existencia o no de
subarrendatarios, lo que en el caso sub-lite no efectuaron ni el ministro de fe ni el tribunal en las
oportunidades correspondientes, de lo que se habría seguido perjuicio al no permitirse, con esta
omisión, la comparecencia en tiempo de los subarrendatarios, quienes conforme a la facultad que les
otorga el artículo 12 de dicha ley pueden enervar la acción de terminación del arrendamiento, pagando.
La otra causal, vale decir, aquella que tiene lugar cuando la sentencia contiene decisiones
contradictorias, se hace depender de la circunstancia que los considerandos 11 y 18 del fallo de primera
instancia —mantenidos por el de segunda— serían antagónicos, pues, mientras en el primer caso la
interpretación de que en la escritura de ratificación de fojas 4, el arrendatario sería Víctor Readi y no la
sociedad demandada se desecha en virtud de que es posible inferir que obra como representante de la
sociedad aunque no lo mencione, fundamento que habría posibilitado el rechazo de la excepción
dilatoria opuesta; en el segundo, la comparecencia a su solo nombre en el contrato de
subarrendamiento acompañado a los autos, se estimó que no comprometía a la demandada,
negándose, en consecuencia, la calidad de subarrendatarios y su derecho de tal a los comparecientes.
Basta para desestimar el recurso por la causal 9ª del artículo 768 ya citado, la consideración de que el
vicio, de haber existido, no constituye la causa invocada, porque el trámite a que se refiere no es
esencial pues no afecta la validez del proceso y su omisión no trae aparejada sanción de nulidad —que
son las hipótesis que prevé el mencionado precepto— sino la inoponibilidad de lo obrado. Que en todo
caso, el recurrente debió haber preparado el recurso para que pudiera ser admitido, por cuanto el
defecto que denuncia no ha tenido lugar en la sentencia que impugna; su origen se remonta a los inicios
del procedimiento y, en tal evento, hubo de reclamarse de la falta ejerciendo oportunamente y en todos
sus grados los recursos establecidos por la ley, lo que evidentemente no hizo. Que, seguidamente y en
relación con la causal séptima del referido artículo 768, es indispensable para que prospere el recurso
que la contradicción se produzca en la parte resolutiva del fallo y excepcionalmente respecto de
considerandos que tengan el carácter de resolutivos, presupuesto que no se cumple en la especie pues
ni el considerando 11 ni el 18 revisten esa naturaleza, ni la sentencia, que en cuanto rechaza la
excepción dilatoria es interlocutoria, puede ser objeto del recurso de casación, porque no pone fin al
juicio ni hace imposible su continuación y por cuanto como sentencia de segunda instancia, tampoco se
ha dictado sin previo emplazamiento del agraviado, o sin señalar día para la vista de la causa.
(Considerandos 2º a 6º)
Nulidad relativa de actos de disposición. Contrato de arrendamiento. Comunidad entre cónyuges. Ausencia de
consentimiento de otros comuneros
Fecha: 23/09/1994
Rol: 134565
Sumario
La existencia de la comunidad limitaba la libre disponibilidad del fundo al demandado, por lo demás,
debe presumirse como un hecho conocido del futuro arrendatario, toda vez que el más mínimo interés y
precaución de quienes tomaban el fundo por un lapso de veinte años, les hacía necesario saber si el
que se decía dueño era realmente su único y libre titular, ya que de continuar su estado civil de casado
en comunidad de bienes, el artículo 1749 del Código Civil prohibía tal arrendamiento por sobre los ocho
años, sin previo consentimiento de la mujer. De otra parte, no existen órganos que representen a la
comunidad de bienes formada a la disolución de la sociedad conyugal, de manera que, salvo pacto
expreso entre las partes, ninguno de los comuneros puede asumir válidamente la representación de los
otros comuneros para actuar ante terceros; por ende, el contrato de arrendamiento, cuya validez se
impugna en autos, constituyó prácticamente un acto de disposición, más allá de lo que hubiera sido un
simple acto de uso de los bienes comunitarios por uno de los comuneros, sin perjuicio que, por el largo
plazo estipulado, debía de suyo obstaculizar la división del activo de la comunidad como lo dispone la
ley.
La celebración del contrato de arrendamiento sin el consentimiento de uno de los condueños y más
allá de lo que razonablemente podía tenerse como el derecho de uso por uno de los comuneros, resulta
inoponible a la otra comunera, es de suyo un acto jurídico al que no ha concurrido la voluntad o
consentimiento de una de las partes. Además, esta situación alcanza al futuro arrendatario, por cuanto,
cualquier contratante que enfrenta una negociación que tendrá una duración de veinte años, no ha
podido, sino a costa de una seria negligencia de su parte, omitir el examen de la evidencia jurídica que
sobre el dominio del predio, resultaba de la mera confrontación del título sobre el inmueble, en que el
vendedor se dijo casado bajo régimen de comunidad de bienes al momento de adquirirlo, y luego se
manifiesta soltero al concurrir al arrendamiento. Una mínima diligencia señala que ha debido solicitarse
a la contraparte de aquella escritura pública, que compruebe su estado civil, que le habilite para celebrar
libre y a plena capacidad el acto de que se trataba. Por lo tanto, el arrendatario demandado está
inhabilitado para alegar la validez del arrendamiento basado en que el arriendo de cosa ajena o que el
otro demandado actuó en la negociación y en el acto del arrendamiento, para sí y para la otra
comunera, e ignorando la realidad existente que impedía al arrendador celebrar el contrato por sí solo.
Consecuente con todo lo anterior, debe reconocerse que para el nacimiento válido del contrato bilateral
de arrendamiento, se requería la concurrencia de la voluntad de todos los comuneros que integraban el
total de los derechos disponibles sobre el inmueble común, por manera que la inconcurrencia de uno de
esos comuneros, con derechos del cincuenta por ciento, en principio hace que la parte arrendadora no
haya manifestado realmente su consentimiento, pues éste no es divisible, como tampoco es dable
presumirlo, por todas las circunstancias ya señaladas. Así, el defecto en el consentimiento del
arrendador debe considerarse como un vicio que atañe a las personas que debieron prestar el
consentimiento, en razón de la relación de ellas con la comunidad, por lo que para la clasificación de las
nulidades que señala el artículo 1682 del Código Civil, el vicio, por su característica y por su exclusión,
debe ser catalogado como causal de nulidad relativa, generando el derecho a la rescisión del contrato
viciado. (Considerandos 1º a 18)
Corte Suprema
Orden de desalojo y lanzamiento. Contrato de arrendamiento. Derechos del arrendatario en caso de enajenación.
Expiración del derecho del arrendador
Fecha: 17/11/1993
Rol: 22005
Sumario
El asunto que motiva el recurso ha tenido su origen en una actuación judicial, solicitada por el
recurrido, encaminada por éste a obtener la entrega de una propiedad que adquirió por adjudicación en
juicio ejecutivo, de la que cabe concluir que dicho asunto se encuentra ya bajo el imperio del derecho,
radicado en un tribunal ante el cual deben los interesados y afectados ocurrir en la forma que sea
pertinente, motivo por el cual no resulta adecuada ni procedente la vía del recurso de protección.
(Considerando único)
Corte Suprema
Contrato de arriendo. Término. Extinción del derecho del arrendador. Arriendo de local comercial. Adjudicación
por el Serviu
Fecha: 04/11/1993
Rol: 1535
Sumario
Los ministros recurridos confirmaron la sentencia de primera instancia que, acogiendo la demanda
declaró que el contrato de arrendamiento celebrado entre las partes debe terminar, debiendo el
demandado restituir al actor la propiedad arrendada dentro de tercero día hábil, a contar de la fecha
indicada, bajo apercibimiento de lanzamiento y pagar las rentas adeudadas hasta la fecha de la
restitución del local comercial, más intereses y reajustes, con costas.
Al informar los ministros recurridos expresan que dictaron la referida resolución teniendo para ello
presente el mérito de los antecedentes y lo dispuesto en los artículos 1950 y 1961 del Código Civil y que
mientras no se prive al demandante de la posesión del inmueble por sentencia ejecutoriada, debe
considerársele como arrendador del mismo.
Se encuentra debidamente acreditada en la causa que el actual dueño del local comercial materia de
la litis, es el Servicio de Vivienda y Urbanización metropolitano, organismo que lo adquirió por
adjudicación en remate público, según consta de la escritura pública, otorgada ante el notario de
Santiago, servicio que, según aparece del documento agregado a estos autos, ejerciendo una de las
facultades propias del dominio, autorizó al demandado para ocupar el local comercial por las razones
que en dicho instrumento se consignan.
El artículo 1950 Nº 3 del Código Civil dispone que el arrendamiento de cosas expira de los mismos
modos que los otros contratos, y especialmente por la extinción del derecho del arrendador y
habiéndose verificado dicha causal, como se dejó establecido, no procede reconocer el demandante la
calidad de arrendador, debiendo rechazarse la demanda por él interpuesta.
Al no entenderlo así los ministros recurridos han cometido falta que debe ser enmendada por la
presente vía. (Considerando único)
Fecha: 17/08/1993
Rol: 2366-1993
Sumario
Que, en consecuencia, la acción interpuesta en autos es improcedente, toda vez que la fecha en que
se trabó la presente litis el demandante ya no era arrendador de la demandada y por ende, no podía
solicitar la terminación inmediata de un contrato que ya había expirado por extinción del derecho del
arrendador. (Considerandos 4º a 6º)
Corte Suprema
Derecho de propiedad. Dueño de inmueble. Desconocimiento de contrato de arriendo por nuevo dueño de
inmueble. Propiedad sobre desarrollo de actividad comercial por arrendatario de inmueble
Fecha: 19/07/1993
Rol: 21181
Sumario
Que siendo este un hecho indesmentible, la sola circunstancia de la recurrida haya adquirido el
dominio del inmueble, no hace caducar de manera automática el título por el cual el arrendatario ocupa
la propiedad, sino que recurriendo a las normas pertinentes del Código Civil, contenidas en los
artículos 1950 y siguientes y las de la Ley Nº 18.101, debió requerir judicialmente que se pusiera término
a dicho arrendamiento, por expiración del derecho del arrendador.
Mientras esa declaración no se produzca, el arrendatario del anterior propietario del inmueble tiene
un título legítimo que lo habilita para usar y gozar de los derechos inherentes a él.
Al tribunal no le asiste duda, que la pandereta levantada por la recurrida impide la visibilidad del
negocio de la recurrente y en consecuencia dificulta gravemente un funcionamiento normal y
satisfactorio de su giro.
Fecha: 21/01/1993
Rol: 8377-1992
Sumario
Se ha demandado la terminación inmediata del contrato de arrendamiento por no pago de las rentas
de febrero y de marzo de 1992, aduciendo el demandante que dicha renta debe adicionarse con
reajustes, intereses y multas por el no pago oportuno de acuerdo a lo dispuesto en la cláusula 5ª del
contrato de arrendamiento.
Si bien es cierto la referida cláusula establece esa sanción en caso de mora, ha de tenerse presente
que lo demandado es la renta establecida en el contrato, en cuyo monto las partes están contestes, y es
la que se ha consignado en la Tesorería General de la República con fecha 12 de mayo de 1992, es
decir, cuatro días antes de presentarse la demanda.
En estas condiciones debe estimarse que con dicho pago se ha enervado la acción deducida por lo
que la demanda no puede prosperar. Para concluir en la forma indicada se tiene presente que los
reajustes y multas no son parte de renta de arrendamiento, es decir, no son parte del precio que se
paga por el uso de la propiedad, tales rubros podrán cobrarse por otra vía, pero no a través de la acción
deducida.
Fecha: 07/05/1992
Rol: 18720
Sumario
La negativa del recurrido de hacerse cargo de reparar los desperfectos existentes en el baño del
departamento que ocupa y que dañan ostensiblemente las dependencias del departamento ubicado en
el piso inferior, negativa que funda en el desconocimiento de la envergadura de las filtraciones de agua
y en su calidad de mero arrendatario del departamento causante de los daños, carece de toda
justificación a la luz del derecho que sanciona a todo el que comete un cuasidelito que infiere daño a
otro, imponiendo la obligación de indemnizar (artículo 2314 del Código Civil) y que obliga al arrendatario
a emplear en la conservación de la cosa arrendada el cuidado de un buen padre de familia y a efectuar
las reparaciones locativas (artículos 1939 y 1940 del Código Civil); y como lo sostiene la recurrente tal
proceder constituye una omisión arbitraria e ilegal, carente de toda humanidad y base racional que
rompe la debida convivencia social que debe existir entre las personas que ocupan distintos
departamentos de un mismo edificio. (Considerando 2º)
Fecha: 05/05/1992
Rol: 731-1991
Sumario
Teniendo presente lo dispuesto por el artículo 1944 del Código Civil, ha de decidirse que el pago de
las rentas mensuales debió efectuarse dentro de los cinco primeros días de cada mes, por
mensualidades anticipadas, ya que, como es público y notorio, por lo que no requiere demostración, el
alquiler de los inmuebles urbanos en nuestro país se paga normalmente en esa forma.
Sin embargo, debe señalarse que la renta del mes de marzo de 1991, que conforme a la conclusión
anterior se hallaba devengada a la fecha de practicarse la segunda reconvención de pago, no fue
comprendida entre aquellas que sirvieron de fundamento preciso a la acción de terminación del contrato
en la demanda, si bien, fue comprendida en la acción de cobro, ejercida conjuntamente con la anterior.
Por tal razón y teniendo presente que las rentas insolutas en que se fundó la referida acción de
terminación del contrato fueron pagadas a la actora aun antes de que se practicara la segunda
reconvención de pago, se concluye que dicha acción ha de ser desechada, sin perjuicio de la
procedencia de la acción de cobro mencionada.
No obsta a lo anterior, la circunstancia de que pudieran adeudarse reajustes e intereses por la mora
en el pago de dichas rentas, por cuanto no es posible precisar lo debido por estos conceptos antes de
que se practique por el secretario del tribunal la liquidación correspondiente y la resolución que la
apruebe quede ejecutoriada.
No debe olvidarse a este respecto, que la mora que autoriza al arrendador para pedir la terminación
del contrato es la de un período entero en el pago de la renta, por lo que no cabe tomar en cuenta las
fracciones de aquéllas.
Corte Suprema
Fecha: 31/12/1991
Rol: 16795
Sumario
De manera que en el caso de autos, en que el actor expresa que no desea perseverar en el contrato,
llegada la expiración de la prórroga del tiempo estipulado para la duración del arriendo, debe iniciar el
juicio de restitución correspondiente conforme al artículo 7º de la ley ya citada. (Considerando 4º de
sentencia de reemplazo)
Corte Suprema
Fecha: 31/12/1991
Rol: 17795
Sumario
Corte Suprema
Validez de la notificación de la demanda si su resolución es errónea. Plazo para restitución en contrato de plazo
fijo mayor a un año
Fecha: 16/09/1991
Rol: 5222
Sumario
Que las disposiciones legales de la Ley Nº 18.101 no contemplan los casos de contratos de plazo fijo
superior a un año de inmuebles no destinados a fines habitacionales, de modo que al vencimiento del
plazo del contrato, el arrendatario deberá restituir la propiedad sin que goce de ningún plazo adicional
de restitución, debiendo entregar la propiedad el demandado dentro de tercero día de ejecutoriada la
sentencia. (Considerando 11 de sentencia de primera instancia)
Corte Suprema
Fecha: 24/12/1990
Rol: 21203
Sumario
De acuerdo a lo dispuesto en el artículo 1º del citado Decreto Ley Nº 993, el arrendamiento de
predios rústicos se someterá a las disposiciones de dicho texto legal; y que según el artículo 2º, las
cuestiones o conflictos que "surjan entre las partes", con motivo de los contratos a que él se refiere
serán sometidos al conocimiento y resolución del juez.
Corte Suprema
Fecha: 02/08/1990
Rol: 1120
Sumario
El derecho del arrendatario para que se le reembolse el costo de las reparaciones necesarias,
requiere: a) que el arrendatario no las haya hecho indispensables por su culpa; b) que el arrendatario
haya dado pronta noticia al arrendador para que las efectúe; c) que el arrendador, informado de la
noticia, no haya tratado de hacer las mejoras oportunamente, y d) que el arrendatario pruebe la
necesidad de las reparaciones. (Considerando 4º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Recibido el inmueble en estado de servir para el fin pactado y obligada la arrendataria a reparar a su
costa cualquier desperfecto, no cabe considerar mejoras necesarias las reparaciones que, hechas por
ella, tienden a ampliar la capacidad locativa de la cosa arrendada, a su iniciativa y en su exclusiva
beneficio. (Considerando 6º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Reconvención de pago. Terminación contrato de arrendamiento. Extinción derecho del arrendador. Adquisición
de tercero de predio arrendado, efectos respecto contrato de arrendamiento
Fecha: 03/05/1990
Rol: 7604
Sumario
La adquisición por un tercero del dominio del predio, si bien puede importar la pérdida del derecho
del arrendador no puede en forma alguna operar de pleno derecho en forma tal que del mismo modo
ponga fin a un contrato de arrendamiento válidamente celebrado. La ley no lo ha autorizado así y
cuando lo ha querido lo ha dicho expresamente como en el caso del Decreto Ley Nº 2.186 de 1978, Ley
orgánica de procedimiento de expropiaciones, que por su artículo 20 ha permitido la extinción de pleno
derecho de, entre otros, los arrendamientos que afectaren al bien expropiado. (Considerando 1º)
Juicio de arrendamiento. Extinción del derecho del arrendador. Existencia de escritura pública
Fecha: 30/11/1989
Rol: 366-1989
Sumario
Que el claro tenor literal de la norma transcrita, como su carácter de excepción obliga a interpretarla
en forma restringida y, por último, la debida correspondencia y armonía con las demás normas que
regulan la terminación del contrato de arrendamiento, permiten concluir que basta que dicho contrato se
pacte por escritura pública para el efecto de que los terceros adquirentes a título oneroso se vean
obligados a respetarlo y que la exigencia de que la aludida escritura se hubiere inscrito en el
conservador de bienes raíces, con anterioridad a la hipoteca, sólo rige para los acreedores hipotecarios.
(Considerando 3º)
Ficha 223 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Oposición entrega material predio arrendado. Contrato de arrendamiento. Subsistencia por extinción de derechos
arrendador. Validez cláusula que estipula subsistencia del contrato en caso de compra. Tenencia material del bien
raíz. Acreedor hipotecario de fecha anterior al contrato de arrendamiento
Fecha: 26/10/1988
Rol: 8342
Sumario
El artículo 1950 del Código Civil, entre las causales de expiración del arrendamiento, establece la
extinción del derecho del arrendador y el artículo 1961 del mismo código expresa que extinguiéndose el
derecho del arrendador por hecho o culpa suyos como cuando pierda la propiedad por no haber pagado
el precio, será obligado a indemnizar al arrendatario en todos los casos en que la persona que le sucede
en el derecho no esté obligada a respetar el arriendo: en la especie el arrendador era el deudor
hipotecario y perdió la propiedad por no haber pagado la deuda que garantizaba el predio arrendado, la
cual fue adjudicada al acreedor hipotecario. Ahora, el Nº 3 del artículo 1962 del mismo texto legal
dispone que los acreedores hipotecarios estarán obligados a respetar el arriendo si el arrendamiento ha
sido otorgado por escritura pública inscrita en el registro del conservador antes de la inscripción
hipotecaria, requisito este último que en la especie no se cumple. No es aplicable al caso sub litis la
norma contenida en el artículo 10 del D.L. Nº 993 (1975), en que funda su derecho a seguir gozando la
cosa el incidentista, por no tratarse de una enajenación que voluntariamente haya realizado el
arrendador en uso de la libertad contractual y libre disponibilidad de sus bienes, sino de una enajenación
llevada a cabo por el Ministerio de Justicia, producto de una resolución judicial en que el juez,
asumiendo la representación del deudor, suscribió el acta de remate, situación no prevista en este
Decreto Ley, consecuencia de lo cual es que deban aplicarse las normas legales comunes que rigen los
contratos, en especial las que se han mencionado precedentemente, por así disponerlo el artículo 11 del
mismo texto legal, decreto que no deroga aquellas normas relativas a la terminación o expiración del
contrato de arrendamiento de cosa por no referirse sus disposiciones ni general ni particularmente a
aquellas materias que sí reglamenta el Código Civil. (Considerandos 7º y 8º)
Juicio de arrendamiento. Responsabilidad del arrendatario por los deterioros del inmueble. Evaluación de los
mismos
Fecha: 13/03/1986
Rol: 2145-1984
Sumario
El arrendatario, por regla general, responde de la ejecución de las reparaciones locativas que se
relacionan con los deterioros que de ordinario se producen por culpa del arrendatario o de sus
dependientes, como ser, descalabro de paredes o cercos, albañales o acequias, rotura de cristales, etc.
(Considerando 6º)
Reivindicación requiere una cuota determinada y que ésta recaiga sobre una cosa singular. En legislación no hay
referencia a la reivindicación de cuota entre comuneros de una herencia, pues ninguno de ellos es dueño sino de un
porcentaje del acervo hereditario
Fecha: 21/10/2014
Rol: 646-2014
Sumario
Ha quedado establecido que, sea por derecho propio o por cesión de derechos hereditarios, tanto
demandante como demandadas no son los únicos comuneros y que entre los bienes que conforman la
herencia se encuentra el predio sub litis, respecto del cual existiría una división de hecho, sin respaldo
contractual o de decisión judicial ejecutoriada. Eso en cuanto a los hechos. En cuanto al derecho es
necesario tener presente que el artículo 892 del Código Civil admite la acción reivindicatoria respecto de
"cuota determinada proindiviso, de una cosa singular.", en la especie el actor tiene una cuota
determinada, o al menos determinable, del acervo hereditario, más no parece ser que aquella recaiga en
una cosa singular, desde que no se ha precisado el contenido de tal acervo —haberes y deudas—,
aunque, indiscutiblemente, forma parte de éste el predio en cuestión. Tal normativa parece estar
encaminada a otro tipo de comunidad, a la que se forma respecto de una cosa determinada, como
puede suceder en la compra de un bien inmueble con espacios comunes. Lo anterior tiene confirmación
en lo dispuesto en el artículo 891 del mismo texto legal que indica "los otros derechos reales pueden
reivindicarse como el dominio; excepto el derecho de herencia. Este derecho produce la acción de
petición de herencia, de que se trata en el Libro III". Por otra parte los artículos 1264 y 1268 del Código
Civil, contemplan la acción de petición de herencia —dirigida contra otros herederos que han preterido al
actor— y la acción reivindicatoria contra terceros poseedores de bienes que formar la herencia. No hay
referencia a la reivindicación de cuota entre comuneros de una herencia, pues ninguno de ellos es
dueño sino de un porcentaje del acervo hereditario, cuya individualización debe hacerse de la forma
legalmente establecida —artículo 1317 y siguientes del Código Civil—, mientras, cada comunero
conserva derechos en todo el haber, sin determinación de cosa en la que recae. Esta situación se ve
refrendada por lo aseverado en los artículos 2304 y siguientes del Código Civil, sobre la administración
de los bienes comunitarios, entre ellos la herencia. (Considerandos 4º y 5º)
Corte Suprema
Fecha: 30/09/2014
Rol: 11099-2014
Sumario
A pesar que el artículo 3º de la Ley Nº 19.983 dispone que se tendrá por irrevocablemente aceptada
la factura si no se reclama en contra de su contenido dentro de los ocho días siguientes a su recepción
o en el plazo que las partes hayan acordado, el que no puede exceder de treinta días, lo cierto es que
luego de haber sido recibida conforme y de no haber sido reclamada o devuelta según el procedimiento
que determina la ley, de acuerdo con el artículo 5º letra d) de la misma ley, en la etapa de notificación de
cobro es factible desconocer la entrega de la mercadería o la prestación del servicio. Es decir, la última
norma aludida permite que, puesta en conocimiento del obligado a su pago mediante notificación
judicial, oponga, en el procedimiento de notificación de cobro, dos incidentes: a) falsificación material de
la factura, de la guía de despacho o del recibo que da cuenta que se recibieron las mercaderías o que
se prestó el servicio acordado; y b) falta de entrega de las mercaderías o de la prestación de los
servicios contratados. De lo anterior se desprende que es posible, por así permitirlo la ley, objetar en
diferentes ocasiones y con diversos alcances la presentación de una factura. La primera, a su
presentación o dentro de los ocho días siguientes o en el plazo fijado por las partes, el cual no podrá
exceder de treinta días. En el evento que no se efectúe observación alguna se tendrá por
irrevocablemente aceptada; en caso contrario, esto es, objetada que sea en los términos que con
precisión ha dispuesto el legislador, no tendrá la virtud de representar un crédito en contra del obligado.
La segunda oportunidad que se tiene para objetar la factura se produce al pretender dotarla de mérito
ejecutivo, ocasión en la que, precisando las alegaciones que pueden deducirse —falsificación material
de la factura o guía o guías de despacho respectivas, o del recibo a que se refiere el artículo 5º letra c)
de la Ley Nº 19.983; o la falta de entrega de la mercadería o de la prestación del servicio—, el deudor
desconoce su contenido. Acreditado el hecho que sustenta la objeción, se priva de la posibilidad que el
instrumento alcance el carácter de título ejecutivo; en caso contrario, si no se deduce el incidente
respectivo o es desestimado, el acreedor podrá iniciar la ejecución fundado en la factura como título. La
factura respecto de la cual el tribunal acoja la incidencia de oposición podrá ser cobrada por la vía
ordinaria correspondiente, justificando el crédito por los medios de prueba legales (Considerandos 4º y
5º de sentencia de casación).
En la etapa preparatoria, como se dijo, las facturas sólo pueden impugnarse en consideración a las
causales previstas en el artículo 5º letra d) de la Ley Nº 19.983, desde que el legislador circunscribió la
posibilidad de debate en este estadio procesal únicamente a dos asuntos: la falsificación material de la
factura —guía o guías de despacho respectivas, o del recibo de ellas— y la falta de entrega de la
mercadería o de la prestación del servicio. Luego, toda otra falencia que no sea alguna de aquellas
descritas en el referido artículo 5º letra d) puede ser denunciada a través de una de las excepciones a la
ejecución que contempla la legislación procesal civil, desde que el procedimiento para el cobro ejecutivo
de una factura contempla una fase preparatoria y otra ejecutiva, siendo la primera un mecanismo de
reconocimiento o verificación de condiciones mínimas habilitantes para actuar ejecutivamente, pudiendo
luego el ejecutante proceder compulsivamente respecto de lo reconocido, lo que no obsta a que el
ejecutado pueda, dentro del contradictorio del juicio ejecutivo, oponer el amplísimo repertorio de las
excepciones contempladas en el artículo 464 del código de procedimiento civil. En la especie, la
objeción formulada por la demandada en caso alguno importa un cuestionamiento específico sobre la
falsedad o falta de integridad de los documentos en cuestión, o la falta de entrega de la mercadería o de
la prestación del servicio, únicas alegaciones que pudo formular en el procedimiento de notificación
judicial de factura. En efecto, el escrito de impugnación se funda únicamente en la circunstancia de
haberse reclamado de las facturas, alegando una falta de entrega de las mismas y la aparente falta de
servicios la hace radicar en la existencia de otras facturas, ya pagadas, que darían cuenta de los
mismos servicios, de lo que fluye que las argumentaciones del opositor más bien dicen relación con una
supuesta falta de causa y la solución de los servicios prestados, lo cual no puede asimilarse a las
circunstancias que prevé la ley. (Considerandos 7º y 8º de sentencia de casación)
Corte Suprema
Fecha: 03/09/2014
Rol: 8205-2013
Sumario
Por otra parte, tanto la jurisprudencia como la doctrina se han preocupado también de hacer hincapié
en la trascendencia del presupuesto procesal en examen, aduciendo para ello diversas razones. Se ha
expresado en esta tesitura que, al estatuirse por el ordenamiento la obligación de fundamentar las
sentencias, se pretende que éstas se expidan con arreglo a los criterios de racionalidad y de sujeción a
la ley, descartándose con ello preventivamente cualquier asomo de arbitrariedad o "despotismo judicial".
Al mismo tiempo, se considera que el señalado deber de los jueces asume una finalidad persuasiva
respecto de las partes, en cuanto, al exponer el fallo las razones de carácter fáctico y jurídico, quedarán
éstas en situación de comprender la exactitud y corrección de tales razonamientos y que la decisión a la
que sirven de asidero constituye expresión genuina de la ley. Por lo demás, en la eventualidad de que
tal convicción no llegue a producirse, cuentan así con los elementos de juicio necesarios para impugnar
lo resuelto, utilizando los medios recursivos idóneos al efecto. Siendo, en fin, las sentencias el
instrumento mediante el cual los jueces desempeñan la función jurisdiccional, que constituye una parte
de la soberanía cuyo ejercicio les es delegado por la nación, tienen los componentes de ésta el derecho
a controlar la racionalidad y justicia de sus decisiones, a través del examen de las razones que se
aducen para fundamentarlas; la omisión a los requerimientos que se les han impuesto a los jueces del
fondo, en orden a indicar las motivaciones que permiten asentar las decisiones de los órganos que
ejercen jurisdicción en el estado, en el caso de marras, es particularmente ostensible, y su
inobservancia corresponde sancionarla, privando de valor a la sentencia; décimo: que, como ya se dijo,
el artículo 775 del Código de Procedimiento Civil dispone que los tribunales, conociendo, entre otros
recursos, por la vía de la casación, pueden invalidar de oficio las sentencias, cuando los antecedentes
manifiesten que ellas adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma, oyendo a los
abogados que concurran a alegar, exigencia que no pudo ser satisfecha por advertirse el defecto en la
etapa de acuerdo. (Considerandos 8º a 10 de la sentencia)
Ficha 4 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Acción de cumplimiento forzado de contrato de cesión de derechos minero con indemnización de perjuicios.
Importancia de la parte considerativa de la sentencia. Nulidad de oficio de la sentencia por carecer de
consideraciones de hecho que le sirven de fundamento
Fecha: 03/09/2014
Rol: 8205-2013
Sumario
Por otra parte, tanto la jurisprudencia como la doctrina se han preocupado también de hacer hincapié
en la trascendencia del presupuesto procesal en examen, aduciendo para ello diversas razones. Se ha
expresado en esta tesitura que, al estatuirse por el ordenamiento la obligación de fundamentar las
sentencias, se pretende que éstas se expidan con arreglo a los criterios de racionalidad y de sujeción a
la ley, descartándose con ello preventivamente cualquier asomo de arbitrariedad o "despotismo judicial".
Al mismo tiempo, se considera que el señalado deber de los jueces asume una finalidad persuasiva
respecto de las partes.
Corte Suprema
Cesión del contrato. Indemnización de perjuicios. Es facultad privativa de jueces del fondo fijar hechos de la
causa. Casación rechazada si no existe infracción de leyes reguladoras de la prueba
Fecha: 25/08/2014
Rol: 15312-2014
Sumario
El carácter de tercero poseedor se caracteriza por haber adquirido un bien raíz sobre el que ya
pesaba la caución hipotecaria —preexistente— o sobre el cual se constituye el gravamen para cautelar
el cumplimiento de obligaciones ajenas. En tal hipótesis, adquiere vigor para el acreedor el derecho de
persecución para dirigirse en contra del tercero por medio de la acción de desposeimiento, en
conformidad a lo dispuesto en el artículo 2428 del Código Civil. De lo anterior se colige que un crédito
garantizado con hipoteca trae por consecuencia que el acreedor tiene derecho, al momento de hacerse
exigible el pago de esa deuda, a perseguir el inmueble hipotecado de manos de aquél en cuyo poder se
encuentre, pudiendo entonces dirigir la acción real hipotecaria contra el tercero en la deuda y actual
propietario, con el objeto de obtener el pago de la obligación con el producto de la enajenación de la
finca gravada.
Cabe volver a recalcar el carácter accesorio que tiene la hipoteca, según el cual, la acción hipotecaria
que de ella se genera no puede extinguirse por prescripción mientras no prescriba la obligación del
deudor personal que garantiza. Es lo que, en plena concordancia con las normas establecidas en los
artículos 46, 1442 e inciso 1º del artículo 2434 del Código Civil, dispone imperativamente el
artículo 2516 del mismo cuerpo legal: "la acción hipotecaria, y las demás que procedan de una
obligación accesoria, prescriben junto con la obligación a que acceden".
Corte Suprema
Prescripción de derechos personales emanados del contrato de cesión. Obligación de efectuar la tradición está
vigente si no se ha extinguido por medio legal alguno. Simulación. Casación es improcedente si recurrente omite
extender infracción legal a normas relativas a la nulidad
Fecha: 21/08/2014
Rol: 14337-2014
Sumario
De conformidad con lo reseñado en el motivo que precede, se observa que los sentenciadores al
rechazar la demanda, referida a la prescripción de derechos personales, han efectuado una correcta
aplicación de la normativa atinente al caso de que se trata, pues los supuestos vicios que se alega,
relativos a la inscripción practicada fuera de la época que lo permitía el título, no constituyen infracción
legal alguna, ya que el cedente efectuó la tradición de los derechos como era de su cargo y, a la fecha
en que se practicó la inscripción, la obligación estaba vigente por no haberse extinguido por medio legal
alguno, tal como fue razonado por los jueces del mérito; respecto a la acción de nulidad absoluta y
simulación del contrato impugnado, conveniente dejar expresado que del tenor del libelo por el que se
interpone el recurso de casación en estudio se puede comprobar que la parte demandante ha omitido
extender la infracción legal que sostiene a los preceptos que han tenido el carácter decisorio litis en el
presente caso, es decir, aquéllos que al ser aplicados sirvieron a los jueces del fondo para resolver la
cuestión controvertida, específicamente, los relativos a la nulidad contenidos en los artículos 1681 y
siguientes del Código Civil; el hecho previamente anotado impide que el recurso de nulidad de fondo
intentado sea acogido a tramitación puesto que, aun en el evento de que esta corte concordara con el
recurrente en orden a haberse producido los errores de derecho denunciados, no podría acoger la
casación y anular una sentencia que rechazó la demanda de nulidad y simulación de contrato. Tales
circunstancias impedirían, en la sentencia de reemplazo que se debiera dictar, resolver de modo diverso
a como se reprocha. (Considerandos 4º a 6º)
Corte Suprema
Negativa de inscripción de cesión de derechos hereditario por el conservador de bienes raíces no infringe la ley
Fecha: 31/07/2014
Rol: 11469-2014
Cita online: CL/JUR/5117/2014
Sumario
Los artículos 52 y 53 del reglamento del registro conservatorio de bienes raíces señalan aquellos
títulos que deben y que pueden inscribirse, dentro de los cuales no se menciona la cesión de derechos
hereditarios, por lo que no hay infracción a la ley en la negativa de inscribir del conservador de bienes
raíces (...), de lo que se concluye que su actuar se ajusta a derecho, más aun si se considera la
existencia de una medida precautoria que afecta a uno de los bienes que componen la masa hereditaria.
(Considerando 4º)
Corte Suprema
Acción de desposeimiento. Hipoteca. Concepto. Se puede perseguir la finca hipotecada de manos de terceros
poseedores. Hipoteca da al acreedor el derecho de perseguir la finca hipotecada, sea quien fuere el que la posea y
a cualquier título que la haya adquirido. La hipoteca no puede extinguirse por prescripción independientemente de la
obligación que garantiza
Fecha: 30/07/2014
Rol: 11861-2014
Sumario
Debe consignarse, primeramente, que el artículo 2407 del Código Civil al referirse a la hipoteca
señala que "es un derecho de prenda, constituido sobre inmuebles, que no dejan por eso de
permanecer en poder del deudor". Tal derecho real de hipoteca se puede adquirir por diversas vías, a
saber, por tradición, por prescripción adquisitiva, por sucesión por causa de muerte, por la cesión del
crédito garantizado con hipoteca o por subrogación en el crédito hipotecario, entendiéndose constituido
desde la inscripción conservatoria en el registro de hipotecas y gravámenes. Si bien la hipoteca
constituye una limitación en el dominio, motivo por el cual el dueño del inmueble hipotecado no podrá
ejercer sus facultades de modo absoluto, no obsta a que aquel mantenga otras atribuciones. De tal
suerte que estando la deuda garantizada con hipoteca y antes que se dirija acción contra la finca
hipotecada, el dueño goza de la facultad de usar, gozar y disponer de ella, lo cual se justifica desde que
en nada perjudica al acreedor la circunstancia que el deudor enajene el bien, pues la hipoteca subsiste y
aquel tiene derecho de persecución. En efecto, el acreedor goza de dos acciones, la personal para
dirigirse contra el deudor de la obligación y la real para perseguir la finca hipotecada, adquiriendo
relevancia esta última en aquellos casos en los cuales el predio pasa a poder de un tercero cuando
quien ha constituido la hipoteca ha sido quien tiene tal calidad. Es decir, se puede perseguir la finca
hipotecada de manos de terceros poseedores, entendiéndose por tal a todo aquel que es dueño del
inmueble gravado y que no se ha obligado personalmente al pago de la deuda. A su vez, esta calidad de
tercero poseedor puede ser obtenida por haber adquirido una finca con un gravamen ya existente o
preexistente otorgándole el legislador al acreedor para dirigirse en su contra y, por ende hacer efectivo
el derecho de persecución, la acción de desposeimiento. (Considerando 5º)
Cuando algún crédito ha sido garantizado con hipoteca, el acreedor tiene derecho, al momento de
hacerse exigible el pago de esa deuda, a perseguir el inmueble hipotecado de manos de aquél en cuyo
poder se encuentre, pudiendo el acreedor dirigir la acción en contra del tercero en la deuda y actual
propietario, con el objeto de obtener el pago de la obligación con el producto de la enajenación de la
finca hipotecada, caso en el cual estamos precisamente en presencia de la acción que ha sido
impetrada en estos autos, esto es, de desposeimiento. En efecto, de la hipoteca nace una acción real,
cual es, la acción hipotecaria. Este hecho implica que si bien el acreedor puede pretender el pago de su
crédito en la realización del bien hipotecado o de otros bienes del deudor personal —en virtud del
derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos—, en el evento de no haberlos o ser éstos
insuficientes, podrá siempre dirigirse contra quien tenga en su poder el inmueble hipotecado, por cuanto
la ley le confiere el derecho a perseguir la realización del mismo para el pago de su acreencia, de
manos de quien se encuentre, que puede ser perfectamente una persona distinta al deudor personal,
según lo prescribe el artículo 2428 del Código Civil que en su inciso 1º señala: "la hipoteca da al
acreedor el derecho de perseguir la finca hipotecada, sea quien fuere el que la posea y a cualquier título
que la haya adquirido". (Considerando 6º)
Corte Suprema
Negativa del conservador a inscribir un título, acogida. Anotación presuntiva en el repertorio. Plazo de dos meses
para subsanar la causa o motivo que impedía la inscripción. Inscripción de un embargo en el tiempo intermedio entre
la anotación en el repertorio y la inscripción. Voto disidente: anotación presuntiva incorporada en forma tan
incompleta que no es subsanada, sino confeccionada en el tiempo intermedio entre la anotación en el repertorio y la
inscripción
Fecha: 30/07/2014
Rol: 918-2014
Sumario
El repertorio es un libro que debe llevar el conservador en el que se deben anotar los títulos que se le
exhiban; acción que se traduce en asentar y dejar constancia tanto de la presentación del título por parte
del interesado para su inscripción, como de su recepción por el empleado encargado del respectivo
oficio y que debe efectuarse por estricto orden de presentación ante el mismo y cumpliendo las
menciones que señala el artículo 24 del reglamento del registro conservatorio de bienes raíces. La
anotación en el repertorio permite que se respete otro de los principios del derecho inmobiliario registral
formal, denominado "de prioridad", que postula que las inscripciones prefieren entre sí por el orden de
sus fechas, pues una vez que la anotación practicada en el repertorio se convierte en inscripción genera
todos los efectos de tal desde la data de la anotación, no obstante cualquier derecho que haya sido
inscrito en el intervalo de la una a la otra y siempre que, en todo caso, se subsane la causa o motivo que
impedía la inscripción dentro del plazo de dos meses, porque en conformidad con los artículos 15 y 16
del reglamento las anotaciones caducan a los dos meses si no se convierten en inscripción y mudan a
tal cuando se hace constar que se enmendó la causa o motivo que la impedía (Considerando 8º de la
sentencia de casación). Como la práctica registral demuestra que la inscripción de los títulos no es
inmediata, retardo que puede originarse porque se verificó alguno de los casos de que tratan los
artículos 13 y 14 del reglamento del registro conservatorio de bienes raíces, lo que requiere de un
tiempo prudente para que el interesado pueda subsanar el motivo que obstaculiza la inscripción,
también por razones no jurídicas —como el atraso originado por el gran número de documentos que
deben registrarse—, se concluye que quien obtiene la anotación presuntiva de su título en el repertorio
adquiere un derecho preferente de inscribir, frente a toda inscripción que se solicite antes de vencer el
plazo de caducidad de dicha anotación y, por lo tanto, subsanada la causa que la impedía, el título debe
inscribirse y la inscripción genera todos sus efectos desde la data de la anotación en el repertorio, no
obstante cualquier derecho inscrito en el intervalo de la una a la otra, como por ejemplo, otra anotación
en el repertorio o la inscripción de un embargo o de una prohibición judicial (Considerando 10 de la
sentencia de casación). Así las cosas, en el caso de autos, subsanado el reparo que el conservador
formuló al título presentado para su inscripción en el registro de propiedad, dentro del plazo de dos
meses contados desde la data de su anotación en el repertorio, no correspondía que dicho auxiliar de la
administración de justicia se negara a practicar la inscripción en el citado registro, porque en el tiempo
intermedio se inscribió en el de interdicciones y prohibiciones de enajenar un embargo que afectaba a
una de las propiedades materia de la cesión de derechos. Esta conclusión no importa privar a los
terceros eventualmente afectados del ejercicio de los derechos que la legislación contempla, ni tampoco
desconocer el valor a las resoluciones judiciales, porque la inscripción que se ordenará practicar deberá
mantener los embargos decretados, debiendo discutirse la eficacia y validez de la citada medida
cautelar en la sede judicial correspondiente y previo emplazamiento de los supuestos afectados
(Considerandos 1º y 2º).
(Voto disidente) la pasividad relativa del conservador no puede estar jamás por encima de la
seguridad jurídica registral, es decir, lo fundamental en esta materia es que los derechos y obligaciones
adquieran la certeza y publicidad necesarias para lograr la estabilidad social y, consecuencialmente,
precaver eventuales litigios de orden patrimonial. Por ende, es imprescindible la continuidad en sus
registros, debiendo éstos representar la real situación que afecta a los bienes o derechos
comprometidos, en conformidad con el principio de la fe pública registral, por el cual se insta por la
protección de los actos jurídicos que se hayan producido confiando en el contenido del registro, con el
objeto de amparar a los terceros adquirentes de derechos, sobre la base de la información contenida en
el libro en que se deja constancia de la debida inscripción de los títulos. Del tenor del artículo 17 del
reglamento del registro conservatorio de bienes raíces se infiere que el requisito indispensable para que
la inscripción definitiva adopte la fecha de su anotación presuntiva es que la referida glosa se convierta
en inscripción legal dentro del plazo de dos meses, esto es, que no existan reparos de legalidad, o los
que pudieron existir fueron rectificados en ese término. Sin embargo, en el caso de autos, la anotación
presuntiva no puede convertirse en inscripción definitiva porque en el período intermedio se decretaron
judicialmente embargos sobre los bienes respecto de los cuales recae la cesión de derechos. La oración
que emplea el citado artículo 17 "convertida la anotación en inscripción" significa que si un título se
anota en el repertorio, pero no se ha inscrito aún, y en el período intermedio se dicta una resolución
judicial que decreta el embargo sobre los bienes respecto de los cuales recaía el título que se pretendía
registrar, no resulta legalmente obligatorio ni prudente que el título se deba inscribir por el conservador,
porque tal impedimento —consagrado en el estatuto conservatorio—, obsta a que esa anotación
presuntiva y precaria al mismo tiempo, se convierta en inscripción definitiva (Considerando 2º de la
disidencia de la sentencia de casación). Por otra parte, si la anotación presuntiva es incorporada al texto
de manera tan incompleta, fragmentaria, carente de la calidad y naturaleza para ser considerada título
idóneo que deba ser inscrito de inmediato, porque le faltan elementos de la esencia o sustantivos, y en
forma simultánea se tramita por terceros un litigio que pone en entredicho los bienes o derechos que se
pretenden inscribir, surge la inquietud de que se pueda estar frente a un abuso del derecho, en cuanto a
que el solicitante por medio de la anotación presuntiva lícita, sólo busque como propósito final que la
futura inscripción asegure en el registro una fecha anterior exenta de impedimentos legales con el objeto
de quedar a resguardo, o a buen recaudo de eventuales futuras limitaciones al dominio que afecten sus
derechos, y que en el plazo de dos meses, contados desde la data de la anotación primigenia
desprovista de contenido sustancial, en realidad no se complete el título, que es lo permitido por el
artículo 15 inciso final del reglamento —ya que a veces únicamente en la anotación presunta se
menciona el negocio jurídico sin fundamentos inherentes al mismo— sino que en ese lapso se lo
confecciona casi íntegramente, cuestión que contraviene el espíritu de la normativa reglamentaria, razón
por la cual la mesura y prudencia resultan ser componentes esenciales al momento de la actuación del
conservador en esta materia (Considerando 4º de la disidencia de la sentencia de casación).
Resolución de contrato e indemnización de perjuicios. Incumplimiento del comprador del pago del saldo de
precio. Condición resolutoria tácita no produce la resolución ipso facto del contrato. Pago efectuado con
posterioridad a notificación de la demanda tiene la aptitud de enervar la acción resolutoria
Fecha: 24/07/2014
Rol: 1455-2013
Sumario
Corresponde poner de relieve que la acción resolutoria impetrada con arreglo a lo prevenido en el
inciso 2º del artículo 1489 del Código de Procedimiento Civil no opera de pleno derecho, sino que
requiere de una sentencia judicial que la declare. Para que ello ocurra es menester que el contratante
cumplidor demande impetrando la resolución, renunciando a la posibilidad de instar por el cumplimiento.
Esto es así, precisamente porque el claro tenor del precepto en referencia lo establece al otorgar al
acreedor el derecho a escoger entre pedir la resolución o el cumplimiento del contrato. Este dilema, al
que queda sujeta la petición que en el caso de la condición resolutoria tácita se concede al contratante
diligente, conduce de modo ineluctable a concluir que la resolución del contrato requiere de una
sentencia judicial que se pronuncie sobre aquella solicitud. De este modo, si para que tenga lugar la
resolución, el acreedor debe solicitarla, para lo cual, a su vez, debe haber optado conforme a la facultad
que le señala la ley, quiere decir que la resolución no opera de pleno derecho sólo por acaecer el evento
cumplirse la condición. En tal sentido, la condición resolutoria tácita que va envuelta en todo contrato
bilateral, no produce la resolución ipso facto del contrato, porque conforme al artículo 1489 del Código
Civil el contratante diligente puede pedir el cumplimiento del contrato o su resolución, mediante la
interposición de una demanda ante el tribunal competente y, mientras no se dicte una sentencia por el
órgano jurisdiccional que declare la resolución peticionada, en el evento que esa sea la acción ejercida
por el vendedor, puede el comprador enervar la acción y hacer subsistir el contrato, pagando el precio
debido, opuesta que sea la excepción anómala de pago hasta antes que se cite a las partes a oír
sentencia en primera instancia, o antes de la vista de la causa en segunda. Por consiguiente, dado que
la resolución no ha tenido lugar mientras no exista una sentencia ejecutoriada que la declare, ha de
entenderse que lo que se encuentra de lado del acreedor que deduzca una demanda impetrándola es
precisamente el derecho a pedirla, empero una vez que haya ejercitado su acción, habrá de estarse al
destino de ella, supeditado a lo que ocurra en el proceso con el proceder de la contraria, quien puede
detenerla o neutralizarla, pagando. Entenderlo de otra manera, sería igual a considerar que la sentencia
tiene el carácter de una mera declaración de certeza y, según ya se ha visto, ello no es así. En lo
concerniente al artículo 1489 del Código Civil, no sólo es posible verificar en estos antecedentes que la
demandada pagó antes de contestar la demanda la suma de $ 9.000.000, sino que además consignó
$ 3.000.000 adicionales, antes de la citación a oír sentencia, sumas que satisfacen el monto total
adeudado, conforme a la liquidación del crédito. (Considerandos 8º y 9º)
Corte Suprema
Fecha: 15/07/2014
Rol: 8422-2014
Sumario
Los jueces del fondo, en la especie, rechazaron la demanda interpuesta por una sociedad en contra
de una asociación de canalistas, solicitando que se declare que, siendo comunero de una comunidad,
ésta tiene derecho de aprovechamiento de aguas y se ordene su entrega, petición que formula a favor
suyo y de la mencionada comunidad. Para arribar a tal conclusión, concluyeron los sentenciadores que
la sociedad demandante carece de legitimación activa por cuanto no logró acreditar que era titular de
una parte alícuota del derecho de aprovechamiento de aguas que es titular la comunidad en la
asociación de canalistas demandada, puesto que no tenía, al momento de quedar trabada la litis, la
posesión inscrita de aquel conforme a los artículos 20 y 21 del Código de Aguas, toda vez que la
documentación con que se pretendió acreditar aquello da cuenta que la inscripción de la cesión de todas
las acciones y derechos que les corresponda o pudieren corresponder a los cedentes en los derechos
de aprovechamiento de aguas que sirven para el regadío de la misma se realizó cuando ya estaba
trabada la litis. Además, el derecho de aprovechamiento de aguas en que incide la acción interpuesta no
figura inscrito en el registro especial de aguas del conservador de bienes raíces a nombre de la
sociedad demandante ni tampoco a nombre de la comunidad, requisito fundamental para acreditar la
posesión de los mismos. También tuvieron en consideración los magistrados que la actora no pudo
acreditar que ella o la comunidad en los últimos treinta años hicieran uso de las aguas que se reclaman,
por actos materiales que así lo evidencien. Y, a mayor abundamiento, la demandante no acreditó que
actualmente persista una comunidad titular del derecho de aprovechamiento de aguas, pues no precisa
en su libelo quiénes son los demás integrantes de aquella, siendo la propia actora la que refiere que el
terreno que pertenecía a la comunidad se le adjudicó en dominio exclusivo a través de un juicio de
partición, desapareciendo con ello la comunidad. (Considerandos 7º y 8º)
Corte Suprema
Cesión de derechos hereditarios es la tradición de los mismos. Tradición de la herencia no requiere inscripción,
aun cuando existan inmuebles. Requisitos de la cesión de derechos hereditarios
Fecha: 14/07/2014
Rol: 4633-2013
Sumario
La cesión de los derechos hereditarios es la tradición de los mismos. El objeto de una cesión del
derecho real de herencia es una universalidad o cuota que al cedente corresponde en el conjunto de
bienes que comprende el haber hereditario. Por consiguiente, los bienes individualmente determinados
no son el objeto de esta cesión y por ello es que se sostiene que se trata de un contrato aleatorio para el
cesionario, puesto que de lo único de que se hace responsable el cedente es de su calidad de heredero.
El instituto de la herencia es una universalidad jurídica distinta de los bienes que la componen,
individualmente considerados, de manera que no es una exigencia para la tradición del derecho real de
herencia proceder a la inscripción del título respectivo, aun cuando involucre bienes raíces, puesto que
el derecho de herencia no lo es, como asimismo, porque el artículo 686 del Código Civil, al señalar los
derechos cuya tradición requiere de inscripción, no contempla el de herencia.
La cesión de derechos hereditarios requiere que concurran las siguientes circunstancias: a) la
tradición del derecho de herencia debe realizarse una vez fallecido el causante, pues con anterioridad
resulta imposible en nuestra legislación, ya que la ley sanciona con objeto ilícito los pactos sobre
sucesión futura y son susceptibles de declararse nulos; b) como tradición de derechos, la cesión de
derechos hereditarios es una convención y supone la existencia de un título traslaticio de dominio; y
c) no deben cederse bienes determinados. En consecuencia, en la especie, si el título que sustenta la
acción de petición de herencia es la calidad de herederos de los demandantes de la cesionaria del
derecho en cuestión —hermana del cedente—, se concluye que al tiempo de efectuarse la cesión de
derechos hereditarios por parte del padre de los demandados, ningún derecho podía transferir a la
madre de los actores, en tanto sobrevivió al causante —hermano, a su vez, del cedente y de la
cesionaria— su madre, quien correspondía que lo sucediera en todos sus bienes. Luego, todo pacto que
a esa fecha celebraron el padre de los demandados y la madre de los demandantes, no ha podido
producir efecto alguno, puesto que no ha existido tradición de esos derechos, en tanto no se había
producido la muerte del causante del primero de los mencionados, esto es, la progenitora del padre de
los demandados y de su hermano que falleció sin descendencia. (Considerandos 32 a 35)
Reclamo por negativa del conservador de bienes raíces de realizar inscripción. Compraventa de inmueble
comunitario en que no han concurrido uno o más comuneros es válida. Comunero no pierde el derecho a su cuota al
no manifestar su voluntad en la operación. Efecto relativo de los contratos. Procede realizar inscripción
Fecha: 27/06/2014
Rol: 5899-2013
Sumario
El hecho que uno o más comuneros no comparezcan en dicha operación (escritura pública de
compraventa), en nada afecta la validez del contrato ni perjudica los derechos o cuotas que a éstos
corresponde, precisamente porque no han concurrido a la celebración del contrato, luego, no contraen
obligación de ningún tipo y, su cuota o derecho en el inmueble de que se trata permanece inalterable,
desde que no han sido parte en su otorgamiento; de igual forma, el hecho que una parte del precio sea
para pagar derechos o cuotas de comuneros que no han concurrido a la celebración del contrato,
tampoco es óbice ni afecta su validez, puesto que el ausente ninguna voluntad ha expresado en dicho
acto, precisamente porque no ha concurrido a su otorgamiento, luego, sigue siendo comunero en dicho
bien raíz por la cuota o derecho que le corresponde, que como se dijo, se mantiene incólume y, bien
podrá, en su tiempo, repudiar ese precio, aceptar esa suma, exigir una distinta o simplemente persistir
en comunidad con el nuevo o actual comunero; por otra parte, la entrega del inmueble al comprador o
cesionario en nada altera lo antes concluido, desde que lo único que se solicita y es factible inscribir es
la cesión de las cuotas o derechos que en el inmueble corresponde a los comuneros que han vendido,
cedido o transferido esas cuotas o derechos, inscripción que no es posible respecto del o los comuneros
que no han intervenido en la celebración del pacto, puesto que nada han vendido, cedido o transferido,
lo que no es más que fiel expresión de los efectos relativos de los contratos, que solo obligan a los
contratantes, calidad que no reviste el o los comuneros que no han comparecido; y, en tal escenario,
razón tiene el apelante para impugnar el fallo, de modo que debe ser enmendado y disponer la
inscripción que se solicita. (Considerandos 4º y 7º)
Corte Suprema
Nulidad absoluta de contrato de compraventa. Bien que ingresa al haber absoluto de la sociedad entra a la
comunidad al disolverse esta con la muerte de la mujer. Venta de cosa parcialmente ajena no genera nulidad sino
inoponibilidad. Casación rechazada
Fecha: 25/06/2014
Rol: 6613-2014
Sumario
Al resolver la controversia, los sentenciadores razonan que si el bien de que se trata hubiera entrado
al haber absoluto de la sociedad conyugal, esa sociedad se disolvió con la muerte de la mujer,
formándose una comunidad. Indica que si esto es así, demandante y vendedor demandado eran
codueños de los bienes comunes y si el inmueble hubiera formado parte de esa indivisión todo lo que
habría sería una cosa de venta parcialmente ajena, lo cual no genera nulidad sino inoponibilidad, que no
ha sido demandada. De haberse tratado de un bien de la sociedad conyugal, la cónyuge habría podido
reclamar la nulidad por faltar el requisito de su asentimiento, exigido por la ley, pero claro, eso supone
que esa cónyuge esté viva y que la sociedad subsista; fallecida ella, la sociedad se disolvió y pasó a
existir una comunidad, de tal manera que ya no tiene sentido aquel requisito de autorización de parte de
la mujer. Lo expuesto se traduce en que las infracciones denunciadas carecen de influencia en lo
dispositivo del fallo, pues de ningún modo acarrearán la nulidad que se pretende. En efecto, los hechos
invocados en la demanda encuadran en la hipótesis de venta de cosa ajena, que acarrea la
inoponibilidad respecto de los terceros que no concurrieron a su celebración y que es válido, sin
perjuicio de los derechos de esos terceros para entablar acción reivindicatoria. Es así como no sólo la
declaración de nulidad de una compraventa puede llegar a afectar los derechos que ese contrato ha
hecho nacer entre los celebrantes, sino también la eventual posibilidad, que no afecta su validez, de que
esa convención resulte inoponible a quien tenía derechos anteriormente constituidos sobre el bien
objeto de la misma. En consecuencia, si el marido vendió la totalidad del predio al otro demandado,
enajenó un bien del que no era dueño único y exclusivo y, por ello, esa compraventa resulta inoponible a
los herederos de la mujer casada en sociedad conyugal. Por consiguiente, en lo que se refiere a las
impugnaciones de carácter sustantivo, el recurso de casación interpuesto adolece de manifiesta falta de
fundamento. (Considerandos 4º y 5º)
Cesión de factura. Factoring. Concepto. Notificación de la cesión del crédito. Plazo para que produzca sus
efectos. Es inoponible a los cesionarios de una factura irrevocablemente aceptada las excepciones personales que
hubieren podido oponerse a los cedentes de la misma
Fecha: 18/06/2014
Rol: 1749-2014
Sumario
Resulta indispensable destacar que tras la modificación introducida por la Ley Nº 20.323, el inciso
final del artículo 3º de la Ley Nº 19.983 establece que: "serán inoponibles a los cesionarios de una
factura irrevocablemente aceptada, las excepciones personales que hubieren podido oponerse a los
cedentes de la misma", afirmación que no vino sino a explicitar una situación jurídica que, como se ha
señalado, igualmente era así considerada, como consecuencia de una interpretación sistemática de las
normas generales y especiales sobre cesión de créditos nominativos. Ahora bien, habiéndose
practicado el envío de la carta certificada mediante la cual se notificó de la cesión del crédito a
(demandado) el 19 de diciembre de 2011, es incuestionable que conforme estatuye el inciso 2º del
artículo 7º de la Ley Nº 19.983, dicha cesión produjo efectos a su respecto a contar del sexto día
siguiente, no resultando oponibles al cesionario a contar de esa fecha las excepciones personales que
el deudor eventualmente hubiere podido oponer al cedente de la factura (Considerandos 5º y 6º)
Fecha: 18/06/2014
Rol: 219-2014
Sumario
El recurrido ha debido respetar los términos del contrato de arrendamiento del predio, circunstancia
que si bien no se consigna en la escritura de promesa de compraventa así como tampoco en la de
compraventa definitiva, no ha podido desconocer, luego de haber concurrido al predio e ingresado a lo
menos en dos oportunidades ejerciendo los atributos que emanan de su derecho de dominio, los que sin
embrago están limitados por los derechos que emanan para el recurrente de un contrato de
arrendamiento vigente sobre parte de la propiedad transferida en la actualidad al recurrido; y en
consecuencia, su actuar es ilegal y arbitrario, pues haciendo caso omiso de dicha circunstancia ha
obrado por y ante sí, decidiendo conforme a su parecer la prevalencia de su derecho de dominio,
cercando la propiedad arrendada y retirando de dicho lugar a los animales vacunos, vulnerando con su
actuar las garantías del recurrente establecidas en el artículo 19 Nº 3 inciso 5º y Nº 24 de la Constitución
Política de la República. (Considerando 10 de la sentencia)
Ficha 17 Antecedentes del fallo
Ejecución sentencia laboral. Cesión de derechos. Efectos. Cesión de crédito respecto de sentencia ejecutoriada
no reviste carácter de derecho litigioso. Deudor no está amparado por lo dispuesto en el artículo 1913 del Código
Civil
Fecha: 18/06/2014
Rol: 4-2014
Sumario
El artículo 1902 del Código Civil señala: "la cesión no produce efecto contra el deudor ni contra
terceros, mientras no ha sido notificada por el cesionario al deudor o aceptada por este". Del tenor de la
norma recién transcrita y de lo actuado por el deudor a fojas 110 de estas compulsas con fecha 17 de
diciembre de 2013, se entiende que la cesión de derechos referida ha sido aceptada expresamente por
el deudor, lo que trae como consecuencia, en primer lugar, que no se requiere notificación judicial para
que el acto jurídico produzca sus efectos y en segundo lugar, que el cedente perdió su calidad de
acreedor y por tanto ya no es parte del juicio (Considerando 4º).
En el caso de autos estamos frente a una cesión de crédito respecto de una sentencia ejecutoriada,
cuyo cumplimiento y ejecución se pretende en sede laboral a través de una acción ejecutiva, la cual no
reviste el carácter de derecho litigioso, toda vez que no se discute respecto de la existencia del derecho
a ser pagado, sino solo sobre la ejecución de los bienes del deudor en caso de no consignar el monto
de la deuda, por esta razón los derechos cedidos no revisten el carácter de litigiosos y el deudor no está
amparado por lo dispuesto en el artículo 1913 del Código Civil, razón por la cual no podrá prosperar el
recurso de apelación. (Considerando 6º)
Inoponibilidad y acción reivindicatoria. Estipulación a favor de otro. Concepto. Partes intervinientes. Efectos. Es
una modalidad del contrato de la cual sólo nacen derechos personales y no procede su inscripción
Fecha: 13/06/2014
Rol: 894-2013
Sumario
La cesión de derechos de que da cuenta el documento público, contiene en su cláusula tercera una
estipulación a favor de otro, que se encuentra establecida en el artículo 1449 del Código Civil, que
señala que cualquiera puede estipular a favor de una tercera persona, aunque no tenga derechos para
representarla; pero solo esta persona podrá demandar lo estipulado, y mientras no intervenga su
aceptación expresa o tácita, es revocable el contrato por la sola voluntad de las partes que concurrieron
a él. Con estos elementos se puede definir la institución diciendo que consiste en que un contrato
celebrado entre dos partes, que reciben el nombre de estipulante y promitente, hace nacer un derecho a
favor de un tercero ajeno a él, llamado beneficiario. De acuerdo a esta definición, el contrato interesa a
tres categorías de personas diferentes: a) el estipulante, que es quien contrata a favor de un tercero;
b) el promitente, quien se compromete a favor de un tercero en la calidad de deudor de éste; y c) el
beneficiario, que es el acreedor de la estipulación efectuada en su favor. Sobre este particular, cabe
tener, además, presente que el contrato de que se trata, se celebra entre estipulante y promitente, pero
el derecho, o sea, la calidad de acreedor, nace a favor del beneficiario, ajeno al contrato. Y si bien éste
debe aceptar la estipulación, su derecho no nace con su aceptación, sino con aquella. El derecho del
beneficiario existe desde la celebración del contrato y la aceptación no tiene otro objeto que poner
término a la facultad del estipulante y promitente de dejar sin efecto la estipulación. La estipulación a
favor de otro es una modalidad de un contrato, del cual sólo nacen derechos personales y no procede
su inscripción en el conservador de bienes raíces, por cuanto falta la voluntad del adquirente. La
jurisprudencia ha establecido una limitación a la aceptación del beneficiario tratándose de un bien raíz,
la que debe otorgarse por escritura pública. "Las obligaciones, René Abeliuk, p. 118". (Considerandos 2º
y 3º)
Corte Suprema
Cobro de factura, acogido. Factura es un documento de naturaleza tributaria y un título de crédito. Finalidad de la
Ley Nº 19.983. Oportunidades en que el deudor puede objetar la presentación de una factura. Objeciones que
puede oponer el deudor. Ejecutado puede oponer excepciones en el juicio ejecutivo de cobro de factura
Fecha: 11/06/2014
Rol: 6483-2014
Sumario
La factura actualmente adquiere una doble calidad: por una parte es un documento de evidente
naturaleza tributaria y, por la otra, el legislador le ha asignado un carácter de verdadero título de crédito
o título-valor. La Ley Nº 19.983 tuvo como objetivos básicos: a) consagrar en forma específica un
sistema de cesión del crédito contenido en la factura; b) facilitar el cobro de la factura al emisor, sea
vendedor o prestador de servicio o al cesionario del crédito respectivo; y c) transformar la copia de la
factura correspondiente en un título ejecutivo y para que este título se perfeccione se crea una gestión
judicial preparatoria de la vía ejecutiva. Para conseguir estas tres finalidades la ley reglamenta la
emisión de una copia adicional de la factura; reglamenta la constancia en la factura del recibo de los
bienes y servicios adquiridos; contempla un procedimiento para reclamar del contenido de la factura;
reglamenta la cesión de los derechos o créditos que contiene la factura; y consagra una gestión
preparatoria de la vía ejecutiva para transformar la copia de la factura en título ejecutivo imperfecto
(Considerando 5º).
Si bien el artículo 3º de la Ley Nº 19.983 dispone que se tendrá por irrevocablemente aceptada la
factura si no se reclama en contra de su contenido dentro de los ocho días siguientes a su recepción o
en el plazo que las partes hayan acordado, el que no puede exceder de treinta días, lo cierto es que
luego de haber sido recibida conforme y de no haber sido reclamada o devuelta según el procedimiento
que determine la ley, de acuerdo con el artículo 5º letra d) del texto legal mencionado, en la etapa de
notificación de cobro es factible desconocer la entrega de la mercadería o la prestación del servicio.
Dicha norma permite que puesta la factura en conocimiento del obligado a su pago, éste oponga ya sea
la falsificación material de la factura o guía de despacho, o del recibo de las mercaderías entregadas o
del servicio prestado, o bien la falta de entrega de la mercadería o de la prestación del servicio. De este
modo, el legislador ha acotado la actividad impugnadora del deudor en esa fase, dejándola circunscrita
a las referidas alegaciones. En síntesis, la ley permite objetar en diferentes ocasiones el cobro de una
factura. La primera, a su presentación o dentro de los ocho días siguientes o en el plazo fijado por las
partes, el cual no podrá superar los treinta días. En el evento de que no se efectúe observación alguna,
se tendrá por irrevocablemente aceptada. La segunda oportunidad se produce al pretender dotarla de
mérito ejecutivo, esto es, en esta fase de gestión preparatoria de notificación de cobro de factura en que
habiéndose precisado las alegaciones que pueden deducirse, el deudor desconoce su contenido y
acreditado el hecho que lo sustenta priva de la posibilidad de que el instrumento alcance el carácter de
título ejecutivo. La factura respecto de la cual el tribunal acoja la incidencia de oposición podrá ser
cobrada por la vía ordinaria, justificando el crédito por los medios de prueba legales. En caso contrario,
si no se deduce el incidente respectivo o éste es desestimado, el acreedor podrá iniciar la ejecución
fundada en la factura como título, lo que no obsta a que el ejecutado pueda, dentro del contradictorio
que supone el juicio ejecutivo, interponer las excepciones a que se refiere el artículo 464 del Código de
Procedimiento Civil. (Considerando 7º)
Cesión de derechos hereditarios. Nulidad del contrato. Doctrina de los actos propios
Fecha: 06/05/2014
Rol: 2056-2013
Sumario
El actor mencionado ha actuado en contra de la doctrina de los actos propios, también denominada
"venire contra factum proprium non valet", esto es, que nadie puede ir válidamente contra sus propios
actos al demandar a su hermano, en circunstancias que ambos participaron de la cesión de sus
derechos hereditarios conjuntamente con la madre de ambos a terceros. (Considerando 4º de la
prevención)
Corte Suprema
Cesión de derechos litigiosos. Juicio ejecutivo de desposeimiento. Abandono del procedimiento. Concepto.
Carga de dar impulso al proceso en la etapa de discusión corresponde al actor
Fecha: 05/05/2014
Rol: 5531-2014
Prescripción de acción hipotecaria. Acción hipotecaria no tiene plazo fijo de prescripción. La acción hipotecaria
prescribe conjuntamente con la obligación principal a que accede
Fecha: 22/04/2014
Rol: 2319-2013
Sumario
Fecha: 31/03/2014
Rol: 146-2013
Sumario
Resta por precisar que si bien la regla general es que la inoponibilidad sea alegada como excepción,
nada impide que también se reclame por la vía de la acción. Luego y, enfrentado tal aserto con el caso
que nos ocupa, es posible concluir que precisamente, a través de este último carril, se ha impetrado el
instituto en examen. En efecto, los demandantes, al ejercitar la acción de petición de herencia han
explicitado, en suma, que no obstante ser herederos legítimos del causante, el demandado les ha
privado de su parte en la legítima rigorosa que les corresponde invocando un contrato de cesión de
derechos al cual ellos no concurrieron con su voluntad. Hacen presente que quien suscribió tal
documento, en calidad de cedente, carecía de facultades para representarlos. A continuación, y con los
mismos argumentos, los demandantes enderezan acción de reivindicación señalando que se han visto
privados del dominio de los derechos hereditarios que les corresponden sobre la propiedad que
individualizan y que adquirieron por sucesión por causa de muerte. De lo expuesto aparece que las
acciones intentadas se dedujeron postulando la ineficacia del acto de cesión de sus derechos
hereditarios, lo que no importa sino una alegación de inoponibilidad de fondo, considerando que
precisamente se ha reclamado la falta de un requisito interno del acto jurídico, cual es, la voluntad;
postulando, en definitiva, que el contrato de 29 de octubre de 1999 no va a producir efectos en cuanto a
ellos respecta y, que, por vía consecuencial, es decir, a partir de esa constatación, procede declarar la
calidad de herederos que les corresponde y la restitución de los bienes que indica. Luego, yerran los
jueces del grado al no entenderlo así. La tesis que plantea la necesidad de deducir la acción de
inoponibilidad, en forma previa a las impetradas en autos, no puede aceptarse, desde que, además de
resultar innecesario bajo la óptica del derecho privado, por comprenderse ciertamente formulada en la
especie según hemos constatado, contraría los principios de celeridad y economía procesal que se
erigen como pilares de nuestro derecho adjetivo, teniendo en consideración que los argumentos y
presupuestos fácticos en que se inspiran unas y otras acciones son exactamente los mismos.
(Considerando 7º)
Del tenor de la primera parte del artículo 1264 del código sustantivo se desprende con claridad que el
sujeto activo de la acción, es aquel que probare su derecho a una herencia ocupada por otra persona.
En consecuencia, la acción no sólo tiene por objeto la adjudicación de la herencia y la restitución de las
cosas hereditarias poseídas por el demandado y que constituyen todo o parte del patrimonio dejado por
el difunto, sino también el reconocimiento de la calidad de heredero, cuestión que la parte demandante
deberá probar en el juicio. La aludida acción tiene un doble propósito, pues por una parte persigue el
reconocimiento judicial de la calidad de heredero y, por otra, que las personas contra las que se dirige,
sean verdaderos o falsos herederos, sean condenados a la entrega o restitución de las cosas de que
componen la herencia y que le corresponden al actor. Respecto de este último punto, esto es, los
sujetos pasivos de la acción, debe indicarse que la ley se limita a exigir que la persona contra quien se
dirige ocupe la herencia en calidad de heredero, sea que revista o no tal calidad. En principio, la acción
de petición de herencia es una acción propia de los asignatarios a título universal, esto es, de los
herederos, pues sólo ellos suceden a este título y sea que los hagan en todos los bienes, derechos y
obligaciones transmisibles del difunto o en una cuota de los mismos. Pues bien, si el que entabla la
acción es heredero universal, puede demandar el reconocimiento de su calidad de heredero del total de
la herencia y pedir la restitución de todas las cosas que la componen y que el o los demandados tengan
en su poder; y si es sólo heredero de cuota, puede únicamente demandar el reconocimiento de su
calidad de heredero de esa cuota y la restitución pro indiviso de los efectos de la sucesión solamente
por la cuota que tiene en ésta. El heredero de cuota tiene el mismo derecho que el heredero universal o
el heredero único para deducir la acción de petición de herencia, por cuanto uno y otro se comprenden
en la expresión de que se sirve la ley: el que probare su derecho a una herencia. (Considerando 11)
Corte Suprema
Competencia. Reglas de radicación y prevención son directrices básicas que sirven al sistema judicial para la
organización de su quehacer. Nulidad contrato de arrendamiento como extensión de la nulidad del contrato que le
sirve de título de dominio al actor respecto del inmueble. Carga de la prueba. Excepción de contrato no cumplido. No
puede entenderse como elemento de la naturaleza del contrato de arrendamiento la mantención en buen estado de
los predios colindantes
Fecha: 17/03/2014
Rol: 10766-2013
Sumario
De la competencia se ha dicho que "es la potestad que tienen los tribunales para resolver, con efecto
de cosa juzgada, los conflictos de intereses de relevancia jurídica que les sean sometidos a proceso;
para conciliarlos en tanto corresponda y para intervenir en los demás asuntos que la ley les
encomiende" (Juan Colombo Campbell; La competencia; Ed. Jurídica de Chile, p. 77). La competencia,
puede ser absoluta o relativa, siendo los elementos que la componen la materia, la cuantía, el fuero y el
territorio. Como es sabido, existen por otra parte, las reglas generales de competencia, entre las que se
cuenta las de la radicación y prevención, no participan del carácter de reglas de competencia absoluta o
relativa. Son, en realidad, directrices básicas que sirven al sistema judicial para la organización de su
quehacer. De aquí, entonces, que su desacato no queda supeditado a las sanciones propias de la
incompetencia absoluta o relativa. (Considerando 3º)
Entrando al análisis del arbitrio en estudio, cabe consignar que la defensa del recurrente gira en torno
a la nulidad del contrato de arrendamiento cuya terminación pretende la actora. Indica que la nulidad del
mencionado contrato derivaría o sería consecuencia de la nulidad del contrato de cesión de derechos y
compraventa el cual no cumpliría con un requisito previsto en la Ley Nº 18.046 contemplado para la
validez del acto. Por lo tanto, encontrándose acreditado el vicio de este contrato, consecuencialmente
sería nulo el contrato de arrendamiento. Sin embargo, no debe perderse de vista que lo alegado y
materia de discusión de este juicio es la nulidad del contrato de arrendamiento, y, por lo tanto, es la
existencia de un vicio en dicho acto el que debe ser acreditado, tal como se fijó en la interlocutoria de
prueba, estableciéndose finalmente en la sentencia que la prueba rendida al efecto no fue suficiente
para ello. Cabe considerar que si la nulidad del contrato de arrendamiento es una extensión de la
nulidad del contrato que le sirve de título de dominio a la actora respecto del inmueble, como lo indica el
impugnante, para ello era necesario, tal como lo entendieron los sentenciadores, demostrar que el
referido título había sido declarado nulo pues, como es sabido, todo acto o contrato es válido mientras
no se declare su nulidad, y lo cierto es que el demandado no demostró la pérdida de validez del contrato
de cesión de derechos y compraventa, sin que resulte pertinente comprobar en este proceso la
efectividad de tal afirmación, pues dicho contrato no es materia del presente juicio. (Considerando 15)
Sobre las infracciones relativas a la excepción de contrato no cumplido, es menester señalar que en
lo atinente al arrendador, el autor Juan Andrés Orrego Acuña ("El contrato de arrendamiento", Editorial
Metropolitana, año 2003, p. 38), citando a don Arturo Alessandri, dice que, en verdad, el arrendador
contrae una sola obligación, la de hacer gozar de la cosa al arrendatario, la de proporcionar el goce
tranquilo de la cosa durante el tiempo del contrato; a ello convergen todas las obligaciones que la ley
impone al arrendador. Esta obligación, acorde con el artículo 1924 del código sustantivo, se
descompone en tres: entregar al arrendatario la cosa arrendada; mantenerla en el estado de servir para
el fin a que ha sido arrendada; y librar al arrendatario de toda turbación o embarazo en el goce de la
cosa arrendada. Las dos últimas se encuentran reguladas en los artículos 1927 a 1930 del Código Civil.
Revisadas dichas normas es posible constatar que el hecho en que el recurrente hace consistir el
incumplimiento —desmantelar, abandonar y permitir el deterioro de los inmuebles colindantes a la
propiedad arrendada— , no configura ninguna de las hipótesis que ellas contemplan, de tal manera que
resulta imposible entender como un elemento de la naturaleza del contrato de arrendamiento la
mantención en buen estado de los predios colindantes. De los artículos recién citados, además, puede
apreciarse que necesariamente las obligaciones del arrendador están vinculadas con la cosa arrendada,
cual es en la especie, el inmueble ubicado en avenida (...), sin que pueda extenderse a otras cosas que
no han sido parte del contrato, aun cuando se traten de bienes vecinos y que pertenezcan al mismo
dueño, a menos que expresamente se haya así pactado, lo que tampoco ha ocurrido. (Considerando 16)
Corte Suprema
Fecha: 29/01/2014
Rol: 3721-2013
Sumario
Cabe tener presente, que a la fecha de enajenación de los derechos sociales se produjo también la
transformación de la sociedad de responsabilidad limitada en sociedad anónima, oportunidad en la que
necesariamente debió determinarse el resultado tributario. Además, al quedar asentado que los ingresos
percibidos no fueron objeto de tributación por la empresa, ni contabilizados en los libros que a dicho
efecto deben llevarse en forma cronológica y fidedigna por el contribuyente, dichos ingresos deben
considerarse retirados por los socios, ya que, como se dijo, fueron recibidos y no contabilizados ni
declarados en los libros de contabilidad de la sociedad, vigentes hasta un día antes de la fecha de
enajenación de los derechos sociales, esto es, hasta el 6 de noviembre de 2005.
No resulta posible trasladar la responsabilidad tributaria de un socio a otro, una vez ocurrida la
enajenación de los derechos sociales, respecto de los retiros efectivos que le afectan en el período en
que fue partícipe de la sociedad. Además, dada la naturaleza del impuesto global complementario, esto
es, que atañe a las personas naturales con domicilio y/o residencia en el país, no es conducente ni
admisible eludir la responsabilidad tributaria del contribuyente de declarar y pagar el impuesto global
complementario respectivo, pretendiendo trasladar o extender dicha obligación al socio adquirente. Que,
acotando el raciocinio al caso que nos ocupa, en cuanto a los retiros efectivos, imputados a utilidades
netas tributables, determinados en el fondo de utilidades tributables de la sociedad, a la fecha de la
enajenación de los derechos sociales y transformación de la sociedad de responsabilidad limitada en
sociedad anónima, la obligación de declaración y pago del impuesto global complementario debe recaer
en quien se benefició de dicho retiro, es decir, el recurrente, de conformidad a su porcentaje de
participación social a la fecha de la citada enajenación, que era de 75% de derechos en la sociedad de
responsabilidad limitada, no siendo posible su traslado a través de cláusulas particulares que afectan
sólo al enajenante y adquirente.
El propio artículo 21 de la ley de impuesto a la renta en su inciso final dispone: "en el caso de cesión
o venta de derechos o cuotas que se tengan en sociedades de personas, sociedades de hecho o
comunidades, las utilidades comprendidas en dicha cesión o venta se gravarán cuando sean retiradas
sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 41, inciso final", por lo que el fiscalizador tomó como fecha
para efectuar el cálculo del impuesto global complementario del contribuyente la de realización de la
cesión de derechos, sin que ello implique modificar la base del cálculo del tributo, ya que como señala el
artículo 54 Nº 1 de la ley de impuesto a la renta las cantidades retiradas o percibidas lo son en
proporción a su participación en las utilidades de la empresa, que en este caso y como lo reconoce el
propio recurrente a la fecha de la cesión era de un 75%, por lo que no ha existido el error denunciado.
(Considerandos 6º a 8º)
Corte Suprema
Hipoteca. Características. Derecho real del que nace la acción hipotecaria. Derecho de persecución. Causa de
preferencia. La preferencia pasa contra terceros como efecto de la naturaleza y calidad del crédito
Fecha: 20/01/2014
Rol: 572-2013
Sumario
El artículo 2407 del Código Civil define la hipoteca como un derecho de prenda, constituido sobre
inmuebles que no dejan por eso de permanecer en poder del deudor. Por su parte, el artículo 2384
inciso 1º del mismo cuerpo legal dispone que por el contrato de empeño o prenda se entrega una cosa
mueble a un acreedor para la seguridad de su crédito y el artículo 2385 señala que este contrato supone
siempre una obligación principal a que accede. Por consiguiente, las características principales del
contrato de hipoteca son constituir una caución, es decir, una obligación que se contrae para la
seguridad de otra obligación que puede ser de acuerdo al artículo 46 del Código Civil, propia o ajena —
evento este último del presente caso—, y tratarse de un contrato accesorio que necesita de otra
obligación principal a la cual acceder para subsistir, por lo que se extingue junto con la obligación
principal (artículos 1442 y 2434 del Código Civil).
La hipoteca, además de constituir un contrato del que emanan derechos personales, constituye un
derecho real, —artículo 577 del Código Civil—, del que nace la acción hipotecaria, lo que implica que el
acreedor hipotecario tiene el derecho a perseguir la realización del inmueble dado en hipoteca para el
pago de sus acreencias, de manos de quien se encuentre, que puede ser una persona distinta del
deudor personal. Como expone Meza Barros: "el acreedor hipotecario, pues, dispone del derecho de
persecución, que no es otra cosa que la hipoteca misma, en cuanto afecta a terceros poseedores".
(Manual de Derecho Civil, De las Fuentes de las Obligaciones, p. 196). El referido derecho de
persecución se contempla en el artículo 2428 del Código Civil, sea quien fuere el que posea la finca
hipotecada a cualquier título que la haya adquirido, a lo que cabe agregar que cuando el referido
derecho se ejercita respecto de un inmueble hipotecado que está en posesión de un tercero, habilita
para el ejercicio de la acción de desposeimiento contemplada en los artículos 758 a 763 del Código de
Procedimiento Civil. (Considerandos 4º a 6º).
El artículo 2470 del Código Civil refiere la hipoteca como causa de preferencia inherente "a los
créditos para cuya seguridad se han establecido, y pasan con ello a todas las personas que los
adquieran por cesión, subrogación o de otra manera", que en el caso sub lite es el aporte en dominio a
una sociedad —(...)—, un inmueble con hipoteca vigente a favor del (tercerista). Es decir, la preferencia
pasa contra terceros como efecto de la naturaleza y calidad del crédito, y el artículo 2477 dispone que la
tercera clase de crédito comprende los hipotecarios. Se trata de una preferencia de pago a los demás
créditos que se apoya en el carácter excepcional de la hipoteca como limitación al derecho de dominio
protegido constitucionalmente, por lo que si no se le reconociera no se respetarían las reglas de
preferencia de los créditos establecidos por las leyes sustantivas. (Considerando 9º).
Corte Suprema
Inscripción conservatoria corresponde a un acto jurídico formal. Cesión del derecho de herencia. Contrato
aleatorio para el cesionario. Tradición del derecho de herencia. No requiere inscripción del título respectivo aun
cuando involucre bienes raíces
Fecha: 29/10/2013
Rol: 8920-2012
Sumario
La inscripción conservatoria corresponde a un acto jurídico formal, documental, que en el caso de los
bienes raíces, devela su historia, tanto para lo que incumbe a las partes interesadas como a lo que
pudiera importar a terceros. El artículo 686 del Código Civil dispone que la tradición del dominio de los
bienes raíces se efectúa por la inscripción del título en el registro del conservador y que de la misma
forma se lleva a efecto la tradición de los derechos de usufructo o de uso constituidos en bienes raíces,
de los derechos de habitación o de censo, y del derecho de hipoteca. A su vez, el artículo 687 del
mismo cuerpo normativo, al indicar la manera en que debe hacerse la inscripción, reproduce la noción
apuntada en el párrafo anterior, pues se refiere expresamente a la tradición de los bienes raíces y de los
derechos reales que menciona el referido artículo 686. Ya en el ámbito de las transmisiones
hereditarias, el artículo 688 del código de Bello no exige la inscripción de las mismas, sino en el caso de
que los herederos pretendan disponer de los inmuebles de la herencia. De esto se deduce que esta
inscripción, aunque facultativa y útil para otros efectos legales, sólo sería necesaria —siguiendo la regla
general del citado artículo 686— en caso que se dispusiera de inmuebles determinados, pero no cuando
la herencia se trasmite como universalidad jurídica, o los asignatarios transfieren sus cuotas en la
universalidad. (Considerando 5º)
De conformidad con lo dispuesto en el artículo 1909 del Código Civil, el objeto de una cesión del
derecho de herencia se constituye por la universalidad o la cuota que al cedente corresponde en el
conjunto de bienes, derechos y obligaciones que comprende el haber hereditario. Por consiguiente, los
bienes individualmente determinados no son el objeto de esta cesión y, por ello es que se ha sostenido
que se trata de un contrato aleatorio para el cesionario, puesto que de lo único que se hace responsable
el cedente es de su calidad de heredero. El coasignatario que vende o cede su derecho en la herencia
no transfiere propiedad alguna en particular, sino su cuota en dicha universalidad, especialmente para
que el cesionario pueda pedir, con arreglo al artículo 1320 del Código Civil, la partición e intervenir en
ella, con la finalidad de liquidar esa porción y se la entere con bienes singulares o con los valores que
podrían haber correspondido a su cedente y vendedor. Dicho con otras palabras, esta cesión recae en
la calidad de heredero, no sobre bienes determinados. Es más, si la cesión fuera a título gratuito, el
cedente no responde ni siquiera de su calidad de heredero o legatario, interpretado el artículo 1909 del
Código Civil en sentido contrario. (Considerando 7º sentencia de la Corte Suprema) 3.- Aun cuando se
ha prestado a discusión la manera en que se perfecciona la tradición del derecho de herencia, lo cierto
es que la doctrina mayoritaria y, también, la jurisprudencia de los tribunales superiores, entiende el
instituto de la herencia como una universalidad jurídica distinta de los bienes que la componen,
individualmente considerados. De allí, entonces, que no sea una exigencia para la tradición del derecho
real de herencia proceder a la inscripción del título respectivo, aun cuando involucre bienes raíces. Al
respecto, se ha dicho: "basta cualquier medio que revele la intención del tradente de transferirlo y la del
adquirente de aceptarlo" (A. Alessandri, M. Somarriva, A. Vodanovic; Tratado de los derechos reales;
Ed. Jurídica de Chile, p. 289). (Considerando 9º)
Corte Suprema
Cumplimiento de contrato, acogida. Carga de la prueba corresponde a quien sostiene una proposición contraria
al estado normal de las cosas. Excepción de contrato no cumplido. Carga de la prueba del hecho impeditivo que
funda la excepción es del deudor
Fecha: 23/10/2013
Rol: 7991-2012
Sumario
La necesidad de probar no es una obligación, sino una carga, toda vez que la primera implica
subordinación de un interés del obligado al interés de otra persona, so pena de sanción si la
subordinación no se efectúa; mientras la carga supone la subordinación de uno o más intereses del
titular de ellos a otro interés de él mismo. El litigante no está obligado a probar, la ley no lo compele a
ello, pero si no proporciona la prueba de su derecho, sus pretensiones no serán acogidas por el juez. La
carga de la prueba corresponde a quien sostiene una proposición contraria al estado normal u ordinario
de las cosas, al que pretende destruir una situación adquirida. Así surgió la antigua regla de que el
demandante es quien debe tener sobre su responsabilidad presentar las pruebas del hecho que alega a
su favor. De esta forma, el demandado que simplemente niega los hechos que han sido sostenidos por
el actor, no es necesario que presente prueba alguna en apoyo de ésta. Empero, si el demandante
acredita los presupuestos fácticos en que funda su pretensión, la situación anterior se invierte y,
entonces, el actor deberá justificar los hechos constitutivos, que son aquellos que producen el
nacimiento de un derecho o de una situación jurídica que antes no existía y que son el apoyo de su
demanda, encontrándose el demandado, por su parte, en la necesidad de probar los hechos extintivos,
impeditivos o modificativos capaces de justificar el rechazo de la demanda del actor.
Tratándose de un contrato bilateral, la conexidad de las obligaciones no se comunica a las acciones
que uno y otro tienen para hacer efectivos sus respectivos créditos, pues son acciones independientes.
De ello sigue que tanto el derecho del acreedor, formulado por vía de acción, como el derecho del
deudor, ejercitado a través de una demanda reconvencional o por vía de excepción —excepción de
contrato no cumplido—, se sustentan en elementos de hecho que son constitutivos específicos en los
dos primeros casos e impeditivos en el último, hechos cuya prueba corresponde a quien los invoca en
su propio interés. Esto explica por qué la carga probatoria del acreedor, en su primera fase, está referida
al contenido del contrato que invoca contra el deudor y a las circunstancias de hecho que configuran la
mora de este último, pero no le incumbe probar hechos impeditivos ni extintivos de ninguna de las
obligaciones que origina el contrato, o sea, relativos al cumplimiento o incumplimiento de su obligación
ni de la del deudor, ya que tales hechos no sustentan la acción en esta etapa de la relación procesal.
Distinta es la situación en la etapa siguiente, cuando el deudor haya opuesto la excepción del
artículo 1552 del Código Civil y con base en ésta haya probado el hecho impeditivo que sustenta su
excepción, esto es, el incumplimiento por parte del acreedor de la contraprestación que tiene o la
negativa de este último a cumplir. Sólo entonces surge para el acreedor la carga probatoria opuesta,
que consiste en el hecho extintivo: haber cumplido por su parte la contraprestación o estar dispuesto a
cumplirla.
Corte Suprema
Tercería de prelación, rechazada. Acción pauliana civil, concepto y finalidad. Acreedor no debe esperar
declaratoria de quiebra para deducir acción pauliana civil. Diferencia entre las acciones revocatorias concursales y la
pauliana civil. Acción pauliana civil sólo beneficia a quien la interpuso
Fecha: 16/09/2013
Rol: 6882-2012
Sumario
La acción pauliana civil es aquella que la ley otorga a los acreedores para dejar sin efecto los actos
del deudor ejecutados fraudulentamente y en perjuicio de sus derechos, y siempre que concurran los
demás requisitos legales. Tiene por objeto cautelar el patrimonio del deudor y de esta manera el crédito
que del mismo se le confiere o atribuye, puesto que de ello depende la seguridad de pago del crédito
que se le otorgue. En cuanto al ejercicio de la acción pauliana, la doctrina está conteste en que el
acreedor individual no se encuentra excluido en interponerla y que no es necesario que deba esperar la
declaratoria de quiebra de su deudor. (Considerandos 6º y 7º)
No son iguales las acciones revocatorias concursales y la revocatoria ordinaria o acción pauliana.
Las primeras tienen por fin revocar, en beneficio de la masa, los actos perjudiciales a los intereses de
ella; su efecto propio es hacer inoponible el acto respecto de la masa e ingresar al activo de ella los
bienes que se hubieren sustraído por causa del acto revocado. Sin embargo, los efectos de la acción
pauliana civil se reducen a hacer inoponible el acto impugnado respecto del acreedor, a dejarlo sin
efecto frente a éste, pero sólo en la medida del perjuicio por él sufrido. Dicho acto subsiste entre el
deudor y el tercero con el cual fue celebrado. Entonces, los efectos de la acción pauliana civil son
doblemente relativos, esto porque, por un lado, el acto declarado judicialmente fraudulento y perjudicial
para el acreedor, sólo queda sin efecto respecto al que interpuso la acción y no beneficia a los demás
acreedores, a menos que hayan intervenido en el juicio respectivo como coadyuvantes y, por otro lado,
los acreedores que hubieren participado en el juicio sólo pueden beneficiarse hasta el monto del
perjuicio sufrido y no más. La revocación es el resultado de un fallo judicial y los efectos de éste se
circunscriben a las partes del juicio. En otros términos, la acción pauliana o revocatoria civil está
establecida en beneficio del o los acreedores que la entablen. Así las cosas, el tercerista de prelación
que no participó en el juicio ordinario en que se ejerció la acción revocatoria civil, no está legalmente
habilitado para hacer valer la preferencia que invoca, sobre el ejecutante —quien accionó de pauliana—,
para que su crédito sea pagado con anterioridad al de éste. (Considerandos 8º a 10)
Corte Suprema
Contrato de cesión del contrato de arrendamiento; normas reguladoras de la prueba. Alteración del onus
probandi. Demandante debe acreditar que contrato de arrendamiento terminó por causa imputable al arrendador.
Responsabilidad de motivar o fundar sus decisiones de manera racional y razonada. Contrato de arrendamiento
termina anticipadamente con conocimiento y aceptación del demandante. Futuro comprador del inmueble lo ocupa
antes de que se materialice la compra
Fecha: 19/08/2013
Rol: 9222-2012
Sumario
La impugnación se encamina a modificar los hechos y su apreciación, del modo como los han
establecido los jueces de la instancia, lo que exige, en primer término, pronunciarse respecto a la
infracción de las leyes relacionadas con la prueba. Debe consignarse, desde luego, como lo ha
reconocido reiteradamente esta corte, que se entienden vulneradas las normas reguladoras de la
prueba, fundamentalmente, cuando los sentenciadores invierten el onus probandi, rechazan las pruebas
que la ley admite, aceptan las que la ley rechaza, desconocen el valor probatorio de las que se
produjeron en el proceso cuando la ley les asigna uno determinado de carácter obligatorio o alteran el
orden de precedencia que la ley les diere. Se ha repetido que ellas constituyen normas básicas de
juzgamiento, que contienen deberes, limitaciones o prohibiciones a que deben sujetarse los
sentenciadores. Luego, los jueces del fondo son soberanos para apreciar las probanzas, dentro del
marco establecido por las normas pertinentes. Por ello, no son susceptibles de ser revisadas por la vía
de la casación las decisiones de los sentenciadores basadas en disposiciones que les otorgan libertad
en la justipreciación de los diversos elementos probatorios, tanto más si en el presente caso el
artículo 8º Nº 7 de la Ley Nº 18.101 dispone que en esta clase de juicios las pruebas se aprecian
conforme a las reglas de la sana crítica. (Considerando 5º)
Debe desestimarse desde ya el recurso en cuanto está fundado en la infracción del artículo 1698 del
Código Civil, toda vez que esta norma se vulnera cuando la sentencia obliga a una de las partes a
probar un hecho que corresponde acreditar a su contraparte, esto es, altera el onus probandi, lo que a
luz de los antecedentes se observa no ha ocurrido, pues correspondía a la parte demandante acreditar
que el contrato de arrendamiento terminó por una causa imputable al arrendador, desde que éste es uno
de los supuestos imprescindibles de establecer para el acogimiento de la acción por él ejercida.
(Considerando 7º)
La sana crítica constituye un sistema probatorio integrado por reglas destinadas a apreciar la prueba
rendida en el proceso que deben ser observadas por los magistrados. En tal sentido sobre estos pesa la
responsabilidad de motivar o fundar sus decisiones de manera racional y razonada, debiendo
exteriorizar las argumentaciones que les ha provocado la convicción en el establecimiento de los
hechos, tanto para admitir o desestimar los medios probatorios, precisar su validez a la luz del
ordenamiento jurídico, como en cuanto al mérito mismo que se desprende de ellos. La valoración de la
prueba exige entonces que observen y ponderen de manera integral todos los medios de prueba
rendidos en el proceso y expliciten aquellos mediante los cuales darán por acreditados cada uno de los
hechos necesarios para la resolución de la litis o serán estos descartados. (Considerando 9º)
Corte Suprema
No se configura error de derecho si asunto impugnado no formó parte de la discusión del proceso. Cesión de
créditos no requiere el consentimiento del deudor. Presunción legal. Acreedor no tiene obligación de probar
perjuicios sufridos a raíz de la mora del deudor
Fecha: 30/04/2013
Rol: 6716-2012
Sumario
Resulta manifiesto que el planteamiento referente a una deficiente notificación de la cesión de crédito
materia de la causa, por no haber sido practicada a la persona del representante legal de la universidad
(demandado), constituye una alegación nueva y, como tal, inadmisible en sede de casación. En efecto,
la revisión de los antecedentes demuestra patente que la demandada no hizo valer los argumentos con
los que ahora ataca el fallo de la Corte de Apelaciones en la fase de discusión del pleito. Esa dicotomía
conlleva que, con ocasión del recurso de casación en el fondo, la impugnante intenta persuadir sobre la
ineficacia de la cesión de crédito invocada por el actor que, empero, no formó parte de la discusión
propuesta a la decisión del tribunal y, por lo mismo, no puede configurar un error de derecho en que
haya incurrido el fallo, deviniendo en ajena e inaceptable a los contornos de un recurso de esta índole.
(Considerando 7º)
Es pertinente recordar que la ley avalúa los perjuicios que presume sufre el acreedor por el solo
hecho de que el deudor se constituya en mora; presunción que, a su vez, justifica que el acreedor no
tenga la obligación de probarlos por otro medio. En el caso de marras, encontrándose establecida e
indiscutida la procedencia del pago de reajustes e intereses sobre la suma debida y ordenada pagar, lo
relevante en esta sede procesal, a propósito del recurso de la demandante, es definir la oportunidad a
partir de la cual corresponde aplicar tales conceptos. (Considerandos 13 y 14)
Ficha 32 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Cesión de créditos no requiere el consentimiento del deudor. Prescripción mercantil. Plazo legal. Ley avalúa
perjuicios que presume sufre el acreedor por el solo hecho de que el deudor se constituya en mora. Medios de
prueba. Cómputo de reajustes e intereses. Deudor se constituye en mora desde reconvención judicial
Fecha: 30/04/2013
Rol: 6717-2012
Sumario
La acción incoada, es útil tener presente que la cesión de créditos es la convención por la cual el
acreedor transfiere su crédito a otra persona, llamada cesionario. No es necesario el consentimiento del
deudor, atendido que ésta se perfecciona entre el cedente y el cesionario por la entrega del título, pero
es inoponible al deudor y terceros mientras no sea notificada o aceptada por el primero.
(Considerando 10)
No existe controversia en autos en cuanto a que el crédito que se cobra es de naturaleza mercantil y
que el acreedor era la sociedad (...), quien lo cedió a la actora en virtud de un contrato de cesión,
precedido de uno de factoring. De esta manera, para la determinación del estatuto de prescripción
aplicable al caso de autos, era imprescindible tener en cuenta que el fundamento de la acción
declarativa de cobro deducida en autos radica en un crédito de índole comercial, razón por la cual la
prescripción a considerar en el marco del presente litigio dirigido a declarar la obligación de pagar ese
valor era aquella estatuida en el artículo 822 del código mercantil. (Considerando 12)
La ley avalúa los perjuicios que presume sufre el acreedor por el solo hecho de que el deudor se
constituya en mora; presunción que, a su vez, justifica que el acreedor no tenga la obligación de
probarlos por otro medio. En el caso de marras, encontrándose establecida e indiscutida la procedencia
del pago de reajustes e intereses sobre la suma debida y ordenada pagar, lo relevante en esta sede
procesal, a propósito del recurso de la demandante, es definir la oportunidad a partir de la cual
corresponde aplicar tales conceptos. (Considerando 14).
Este tribunal de casación estima que existe un error jurídico en la misma sentencia al haber ordenado
computar reajustes e intereses desde la fecha del fallo de primer grado, toda vez que aun cuando no
asiste la razón a la demandante al sostener en su recurso que tales intereses y reajustes se devengan
a contar desde la fecha de la factura, pues el deudor legalmente se constituyó en mora una vez que fue
judicialmente reconvenido por el acreedor, los sentenciadores debieron haber tenido lo anterior en
consideración para una adecuada interpretación y aplicación de la ley, lo que determina que el recurso
debe ser acogido sólo en esta parte. (Considerando 16)
Corte Suprema
Cobro de pesos, rechazada. Cesión de créditos. Notificación debe efectuarse al deudor en forma personal.
Actuación que debe llevarse a cabo por un ministro de fe. Notificación a una persona jurídica debe efectuarse a su
representante. Notificación de la cesión de créditos no verificada de acuerdo a la ley no es oponible al deudor
Fecha: 14/11/2012
Rol: 2899-2010
Sumario
Sea que el crédito de que se trata corresponda a uno de naturaleza civil o mercantil, la notificación de
su cesión a un tercero ha de efectuarse al deudor de manera formal y exhibiendo el título respectivo,
actuación que sin duda ha de verificarse por una persona que no sólo lleve a cabo la indicada
presentación del título sino, además, otorgue certeza de la realización de la diligencia, tanto respecto a
su fecha y lugar como a las circunstancias en que se lleve a cabo, de modo que forzoso resulta concluir
que el encargado de su realización ha de ser un ministro de fe. Ello se colige no sólo de la naturaleza
misma del trámite en cuestión, sino también lo exige el artículo 162 del Código de Comercio, sin que se
divise razón alguna que impida aplicar tal predicamento al ámbito civil, pues se trata de la misma
diligencia referida a títulos que sólo por su naturaleza difieren. En suma, la mentada notificación debe
ser efectuada en forma personal al deudor, ya que su objeto radica precisamente en que éste tome
debido conocimiento de la cesión del crédito, resultando evidente que si la notificación se practica a una
persona jurídica la comunicación habrá de efectuarse a su representante.
Corte Suprema
Contrato de cesión de derechos de dominio y usufructo vitalicio solicitud de inscripción de título, rechazada.
Estipulación a favor de otro. Teoría de la creación directa del derecho. Aceptación del beneficio como requisito de
exigibilidad. Terceros beneficiarios deben comparecer para que el conservador inscriba la resciliación
Fecha: 31/10/2012
Rol: 2317-2011
Sumario
Para los jueces de la instancia la teoría que mejor explica la naturaleza jurídica de la estipulación a
favor de otro es la creación directa del derecho a favor del beneficiario, en virtud de la cual el derecho
nacido de la estipulación se radica directamente en el patrimonio de éste. Esto trae como consecuencia
que la aceptación es un requisito de exigibilidad, esto es, mientras no se presta, el derecho no es
exigible por el beneficiario, pero de todos modos ha nacido y se ha radicado en su patrimonio desde que
se realiza la estipulación, lo que se traduce en la posibilidad de exigir a los promitentes la inscripción en
el respectivo conservador de bienes raíces. De lo expuesto se desprende que, para que el conservador
inscriba la resciliación, efectivamente deben comparecer los terceros beneficiarios y, al no haber
acontecido así, la solicitud de inscripción de título efectuada por la interesada no puede prosperar y
debe ser rechazada. A mayor abundamiento, incluso adhiriendo a la teoría de la aceptación, esta es,
que el derecho no se radica en el patrimonio del beneficiario sino hasta que lo acepta, la prueba
acompañada por la interesada no demuestra que los terceros beneficiarios no aceptaron, expresa o
tácitamente el derecho que se les concedió (Considerandos 3º y 4º).
Corte Suprema
Cobro de pesos, rechazado. Elementos del acto jurídico. Requisitos de existencia y de validez del acto jurídico.
Error esencial. Crédito que no ha sido suficientemente determinado. Contratos que no produjeron efectos jurídicos.
Inexistencia de contradicción entre la voluntad real y la voluntad declarada.
Fecha: 24/09/2012
Rol: 9135-2009
Sumario
El acto jurídico tiene elementos de tres especies: los elementos de la esencia, los de la naturaleza y
los accidentales. Los primeros son aquellos sin los cuales el acto no produce efecto alguno o cuya
omisión hace que el acto sea diverso del previsto o del que las partes dicen celebrar. Por otro lado, en
doctrina se distinguen en el acto jurídico los requisitos de existencia y de validez: los primeros son la
voluntad, el objeto, la causa y las solemnidades del acto; y los segundos son la voluntad sin vicios, la
capacidad y el objeto y causa lícitos.
El artículo 1453 del Código Civil establece el denominado error esencial, que vicia el consentimiento
y se manifiesta cuando el error de hecho recae sobre la especie del acto o contrato que se ejecuta o
celebra, o sobre la identidad de la cosa específica de que se trata. Por consiguiente, si los negocios
jurídicos en virtud de los cuales el actor pretende apoyar la titularidad de sus derechos al cobro de los
créditos objeto del juicio no fueron debidamente determinados, ello importa la configuración de un error
esencial y no de un mero error de expresión. En estas condiciones, los contratos de cesiones de
créditos que pretende hacer valer el demandante carecen de toda eficacia, si lo que intenta es cobrar
créditos que no fueron traspasados en virtud de tales actos jurídicos. De esta forma, manifestados de un
modo inequívoco los hechos concluyentes en los actos jurídicos respecto al objeto en que recayeron, no
pueden ser cambiados sin sustento por medio de reglas de interpretación de los contratos como el
artículo 1560 del Código Civil, que ordena estar más a la intención de los contratantes, cuando ésta es
conocida claramente, que a lo literal de las palabras, desde que no existió contradicción entre la
voluntad real y la voluntad declarada en los referidos contratos de cesión de créditos (Considerandos 8º
a 11).
Corte Suprema
Es presupuesto del cobro la existencia efectiva del crédito al tiempo de la cesión
Fecha: 26/07/2012
Rol: 575-2010
Sumario
En el marco jurídico de la cesión de créditos, especialmente las reglas del párrafo 1º, Título XXV del
Libro IV del Código Civil sobre créditos nominativos del artículo 1907 del Código Civil, se colige que los
jueces del fondo aplican correctamente el derecho al examinar el negocio causal del cobro de dinero
pretendido en autos referido a la efectividad del estado de pago que en la respectiva factura se detalla y
no sólo —como lo pretende el recurrente— considerar la existencia de dicho documento, su cesión y
notificación, toda vez que es presupuesto del cobro la existencia efectiva del crédito al tiempo de la
cesión. (Considerando 5º)
Corte Suprema
Objeto de cesión del derecho real de herencia es una universalidad o cuota que al cedente corresponde en el
conjunto de bienes que comprende el haber hereditario. No es exigencia para tradición del derecho real de herencia
proceder a la inscripción del título respectivo aun cuando involucre bienes raíces
Fecha: 09/04/2012
Rol: 11312-2011
Sumario
Sobre la base de lo dispuesto en el artículo 1909 del Código Civil, el objeto de una cesión del
derecho real de herencia es una universalidad o cuota que al cedente corresponde en el conjunto de
bienes que comprende el haber hereditario. Por consiguiente, los bienes individualmente determinados
no son el objeto de esta cesión y, por ello es que se ha sostenido que se trata de un contrato aleatorio
para el cesionario, puesto que de lo único de que se hace responsable el cedente es de su calidad de
heredero.
Cesión de derechos litigiosos no sigue mismas reglas que cesión de crédito y debieron cesionario y cedente
presentarse en juicio para que juez reconozca tal operación
Fecha: 29/03/2012
Rol: 34-2012
Sumario
La jurisprudencia ha señalado: "el artículo 1902 está en el párrafo que se ocupa de los créditos
personales y no tiene aplicación al párrafo que trata de los derechos litigiosos"; "la resolución recaída en
la solicitud con que el cesionario se apersona en el juicio, sustituyéndose al acreedor, se notifica
válidamente al deudor en la persona de su apoderado"; "lo cedido es el evento incierto de la litis de que
el cedente no se hace responsable, y es de rigor que sea dentro de esa litis donde se le dé a conocer la
cesión al deudor y se la haga por intermedio de su procurador" (sentencias citadas en el Repertorio de
legislación y jurisprudencia chilenas, Código Civil y leyes complementarias, tomo VIII, Editorial Jurídica
de Chile, pp. 57 y siguientes).
Entonces, lo que procedía, una vez que se ha transmitido el derecho litigioso, es que el cedente o el
cesionario, indistintamente, deberán presentarse en el juicio respectivo, con el fin de que el juez le
reconozca el derecho al cesionario de sustituir al cedente en el juicio.
La resolución del juez en que le reconoce tal derecho, se debe notificar al deudor por medio del
mandatario constituido en el juicio, conforme a las reglas generales de notificación de resoluciones
judiciales.
Tal providencia no ha causado ningún efecto jurídico porque el tribunal no se pronunció sobre la
aceptación o no de la cesión de los derechos litigiosos. (Considerandos 6º a 8º)
Cesión de derechos hereditarios. Tradición como modo de adquirir el dominio. Obligación que afecta al tradente
y al adquirente de concurrir al acto de la tradición del derecho real de dominio. Inscripción de la escritura de cesión
de derechos hereditarios. Portador del título habilitado solamente para requerir y firmar las inscripciones y
subinscripciones, no pudiendo entenderse dotado de potestad alguna para hacer rectificación o complementación
del contrato
Fecha: 22/03/2012
Rol: 2-2012
Sumario
A este respecto constituye un error el afirmar, como el reclamante lo hace en su recurso, que la
inscripción no debe ser firmada por el requirente, porque eso lo hace el conservador, y que por lo tanto,
la voz "firmar", debe entenderse referida a cualquier otro documento que se exija para practicar la
inscripción, como lo sería la "minuta". Por el contrario y como está visto, según lo dispone el penúltimo
inciso del artículo 78 del reglamento, sí debe serlo, a menos que en el título aparezca facultado uno de
los otorgantes o un tercero para hacer por sí solo el registro. Por si ello no bastare, cabe señalar que la
tesis del reclamante se encuentra en frontal colisión con lo que al respecto determina el artículo 83 del
reglamento, el que señala: "a continuación de la última palabra del texto de la inscripción, seguirán las
firmas de las partes, en los casos que fueren necesarias, debiendo cerrar la inscripción la firma del
conservador" (Considerando 9º de la sentencia de Corte de Apelaciones) entonces, y en perfecta
sintonía con lo que precedentemente se ha explicado, nítidamente se observa que los contratantes,
entendiendo correctamente las disposiciones legales que rigen la materia, en la primera parte de la
estipulación extendieron una oferta abierta de mandato, autorizando a cualquier persona que portara el
título para requerir y firmar la inscripción cumpliendo así, ya que no lo hicieron personalmente, con la
obligación que afecta al tradente y al adquirente de concurrir al acto de la tradición del derecho real de
dominio, debidamente representados, conforme se exige en las disposiciones que se han citado.
Enseguida, otorgaron un mandato específico, exclusivo y excluyente a favor de una persona
determinada, poder que le fue dado con el propósito que sólo él pudiera comparecer en nombre y
representación de los contratantes para el caso que fuere indispensable suscribir las escrituras públicas
rectificatorias, complementarias o aclaratorias que fueren necesarias para perfeccionar el contrato,
habilitación que precisamente se le confirió para ser utilizada para el caso que hubiere errores de cita, o
para el evento que, entre otros, el conservador de bienes raíces —cuyo es el caso de autos— objetare
el título.
Corte Suprema
Recurrente en ningún momento adujo carácter de cheque en garantía y la omisión de ritualidad prevista por ley
para cesión de créditos que intenta hacer valer en casación
Fecha: 14/03/2012
Rol: 916-2012
Sumario
Requisitos procedencia cesión de derechos litigiosos. Resolución que reconoce derecho al cesionario de sustituir
al cedente en el juicio debe ser notificada al deudor
Fecha: 13/01/2012
Rol: 1840-2011
Sumario
Para que la cesión de derechos se produzca es necesario, por lo tanto, que exista juicio pendiente,
esto es, que se haya notificado la demanda y que no exista sentencia ejecutoriada en la causa.
(Considerando 3º)
Cesión de créditos es inoponible a la parte ejecutada mientras no se haya notificado conforme a la ley lo que no
ocurre en caso sub lite
Fecha: 02/12/2011
Rol: 697-2011
Sumario
En el caso de autos, se encuentra acreditado que el tomador o beneficiario, de los cuatro cheques
que se cobran en autos (referido), fueron objeto de cesiones de crédito realizadas por aquél al
cesionario la sociedad (referida), como se lee de los documentos de fojas 19 a 30, sin que haya
concurrido la deudora-giradora a dichos instrumentos.
Corte Suprema
Cobro de cheque. Cesión de créditos. Concepto y partes que intervienen. Cesión de créditos nominativos.
Exigencias para que la cesión produzca efectos respecto de terceros
Fecha: 07/07/2011
Rol: 2328-2010
Sumario
La cesión de créditos es la convención por la cual un acreedor cede voluntariamente sus derechos
contra el deudor a un tercero que llega a ser acreedor en lugar de aquél. El enajenante toma el nombre
de cedente, el adquirente del crédito es el cesionario, y el deudor contra el cual existe el crédito que
constituye el objeto del traspaso, se llama deudor cedido. Entonces, intervienen en la cesión tres
personas: el cedente, que es el acreedor, titular del derecho personal y que lo transfiere a otro; el
cesionario, que es la persona que adquiere el derecho cedido y pasa a ocupar el lugar del acreedor; y el
deudor, que es el sujeto pasivo del derecho cedido y que queda obligado a favor del cesionario
(Considerandos 9º de sentencia de casación).
Al efectuar las exigencias consagradas en los artículos 1902, 1903 del Código Civil y 162 del Código
de Comercio, lo que ha pretendido cautelar el legislador es la adecuada y transparente transferencia de
los títulos que ha indicado, aspecto que evidentemente sólo se satisface mediante la adopción de los
mecanismos de que, al efecto, dota a las partes el sistema procesal, con miras a asegurar el
conocimiento del deudor del alcance de las referidas gestiones.
Conforme al razonamiento antes expuesto y atentos a lo que dispone el artículo 47 del Código de
Procedimiento Civil, resulta indiscutible que la única forma en que, conforme lo comprendía el legislador
procesal de la época, podía entenderse que se lograba acreditar el conocimiento de la cesión por parte
del deudor, era mediante su notificación personal, gestión de carácter trascendental por cuanto sólo
desde ese momento el cesionario se transforma en su legítimo acreedor.
En este último sentido y tal como sostiene el recurrente, ya ha sido señalado por este tribunal que, si
bien la exigencia en orden a que la notificación de la cesión del crédito deba ser personal no está
expresamente contemplada en el Código de Comercio ni en el Código Civil, es aplicable a la materia de
que se trata, por cuanto el artículo 47 del Código de Procedimiento Civil dispone que esta forma de
notificación se empleará siempre que la ley disponga que se notifique a una persona para la validez de
ciertos actos (sentencias Rol Nº 3.895 2000, de 27 de agosto de 2001 y Rol Nº 2.342 2003, de 23 de
diciembre de 2004), lo que a contrario sensu, no será necesario en los casos en que la ley dispone
expresamente otra forma de notificación, como es el caso de la Ley Nº 19.983, que vino a regular, entre
otras materias, la transferencia o cesión del crédito contenido en una factura.
Que en el caso sub lite, las exigencias previstas por el legislador en garantía de una adecuada y
transparente transferencia de los títulos, no fueron observadas, puesto que no fue controvertido ni
menos acreditado por aquél a quien correspondía el onus probandi sobre este asunto, el hecho de no
habérsele notificado al deudor el respectivo contrato de cesión de créditos, exigencia jurídica que al
haber sido ignorada por el cesionario, conlleva indudablemente a concluir que, en este proceso, los
títulos en que se sustenta la ejecución carecen del requisito de exigibilidad establecido por la ley para
dotarlos de fuerza ejecutiva, con relación al demandado, toda vez que, como se sabe, una obligación es
actualmente exigible cuando no está sujeta en su nacimiento o cumplimiento a alguna modalidad, sea
una condición, plazo o modo y, en la especie, constituía una diligencia fundamental previa a cualquier
gestión destinada a intentar dotar a los documentos de marras de la facultad de iniciar un proceso
compulsivo en contra de su girador, el poner en conocimiento de dicha persona el contrato de cesión de
créditos que substituyó el sujeto del acreedor, comunicación que como se ha señalado latamente en los
motivos anteriores, debió practicarse a iniciativa del cesionario; por un ministro de fe; mediante
notificación personal; y con exhibición de los títulos respectivos, cometido que en caso alguno puede ser
sustituido o asimilado a la mera notificación de la gestión previa de notificación del protesto de cheques.
(Considerandos 11 y 12 de sentencia de casación)
Corte Suprema
Cobro ejecutivo de facturas. Cesión de créditos. Cesión de créditos documentados en facturas. Requisitos de la
notificación de la cesión al deudor. Notificación personal del deudor. Envío de carta certificada expedida por un
notario público no es suficiente para notificar al deudor. Excepción de pago puede oponerse tanto al cedente como
al cesionario. Excepción de pago, acogida
Fecha: 10/05/2011
Rol: 26-2010
Sumario
I. El artículo 1903 del Código Civil prescribe como requisito de la notificación de la cesión al deudor,
que se haga con exhibición del título que llevará anotado el traspaso del derecho con la designación del
cesionario y bajo la firma del cedente. La finalidad de la norma es que el deudor se imponga
personalmente de la existencia en poder del cesionario del documento justificativo del derecho
transferido, en el cual aparece con la firma de su acreedor la designación del sustituto que por su
voluntad le ha reemplazado. Por su parte, si bien la Ley Nº 19.983 privilegia la agilidad del tráfico de
créditos mercantiles, para cuyo efecto facilita los trámites para la notificación de la cesión por parte del
cesionario al obligado al pago de la factura, permitiendo llevarla a cabo mediante el despacho por un
notario público de una carta certificada, adjuntando copias del respectivo título, certificados por el
ministro de fe, lo que contrasta con el derecho común, en que la exigencia de exhibir el título al deudor
que contempla el artículo 1903 del Código Civil no puede llevarse a cabo mediante la notificación
personal subsidiaria, es menester concluir que los requisitos establecidos en el artículo 7º de la Ley
Nº 19.983 para la notificación de la cesión al deudor, deben cumplirse en forma estricta, en atención a la
delicada materia que reglamenta, máxime que con ella se pueda estar dando paso a la ejecución
forzada de los créditos contenidos en las facturas.
Resulta evidente, entonces, que la única forma en que, conforme lo comprendía el legislador
procesal de la época, podía entenderse que se lograba acreditar el conocimiento de la cesión por parte
del deudor, era mediante su notificación personal. Refuerza esta conclusión, la circunstancia que el
artículo 47 del Código de Procedimiento Civil señale que la notificación personal en persona se
empleará siempre que la ley disponga que se notifique a una persona para la validez de ciertos actos.
Por tanto, la notificación practicada a través de una carta certificada emitida por un notario público no es
suficiente para entender que el deudor fue válidamente notificado de la cesión de créditos contenidos en
las facturas. (Considerandos 8º y 9º)
La excepción de pago es una excepción que afecta al título cedido, puesto que se trata de una
excepción real, que puede ser opuesta tanto al acreedor del crédito, como también al cesionario.
(Considerando 11)
Corte Suprema
Notificación de conformidad al inciso 2º del artículo 7º de la Ley Nº 19.983 sólo resulta aplicable a partir de su
publicación en el Diario Oficial
Fecha: 21/03/2011
Rol: 4560-2009
Sumario
Fecha: 23/12/2010
Rol: 4988-2009
Sumario
A fin de que el juez pueda tomar las providencias correspondientes a aquella relación entre un hecho
específico concreto y la norma jurídica, acerca de la cual venimos discurriendo, no basta que tal relación
exista objetivamente, sino que es necesario además que la demanda le sea presentada por quien se
encuentre frente a aquel hecho específico en la posición subjetiva que se llama precisamente
legitimación para obrar (o legitimación activa); y que, de otra parte, la demanda sea propuesta por el
actor contra un adversario que se encuentre, en cuanto a aquel mismo hecho específico, en la posición
subjetiva recíproca que se llama legitimación para contradecir (o legitimación pasiva).
Se ha dicho, en general, que los órganos jurisdiccionales no proveen sí no son estimulados por un
sujeto agente...; pero aquí, al hablar de los requisitos de la acción entendida como derecho a obtener
una providencia jurisdiccional favorable, se dice algo más: esto es, que a fin de que el juez provea en
sentido favorable al solicitante, no basta que la demanda le sea propuesta por una persona cualquiera,
sino que es necesario que le sea presentada precisamente por aquella persona que la ley considera
como particularmente idónea para estimular en aquel caso concreto la función jurisdiccional. (Piero
Calamandrei, Instituciones de Derecho Procesal Civil, volumen I, Ediciones Jurídicas Europa América,
1962, pp. 261 y 262).
Sobre el particular, el artículo 1901 del Código Civil señala la cesión de un crédito personal, a
cualquier título que se haga, no tendrá efecto entre el cedente y el cesionario sino en virtud de la
entrega del título. A continuación, el artículo 1902 expresa que la cesión no produce efecto contra el
deudor ni contra terceros mientras no ha sido notificada por el cesionario al deudor o aceptada por éste
y, el artículo 1903 señala la notificación debe hacerse con exhibición del título que llevará anotado el
traspaso del derecho con la designación del cesionario y bajo la firma del cedente.
También, ha de tenerse presente el artículo 699 del Código Civil cuando ordena que la tradición de
los derechos personales que un individuo cede a otro se verifica por la entrega del título hecha por el
cedente al cesionario y el artículo 162 del Código de Comercio que expresa la cesión de un crédito no
endosable se sujetará a las reglas establecidas en el título de la cesión de derechos del Código Civil.
La notificación de la cesión se hará por un ministro de fe, con exhibición del respectivo título. Para
que se haga bastará el simple requerimiento del cesionario.
Finalmente el artículo 163 del mismo cuerpo legal establece que el deudor a quien se notifique la
cesión y que tenga que oponer excepciones que no resulten del título cedido, deberá hacerlas presentes
en el acto de la notificación, o dentro de tercero día a más tardar, so pena de que más adelante no
serán admitidas.
Las excepciones que aparezcan a la vista del documento o que nazcan del contrato, podrán
oponerse contra el cesionario en la misma forma que habrían podido oponerse contra el cedente. De las
disposiciones legales antedichas se concluye que la cesión de créditos es la convención por la cual el
acreedor transfiere su crédito a otra persona, llamada cesionario. No es necesario el consentimiento del
deudor, ya que ésta se perfecciona entre el cedente y el cesionario por la entrega del título, pero es
inoponible al deudor y terceros, mientras no sea notificada o aceptada por el primero. Que ahora bien,
en relación a la formalidad de la notificación, tal como lo ha declarado este tribunal, para que aquella
que se efectúa por el cesionario al deudor sea válida, debe cumplir con los siguientes presupuestos que
señala la ley: a) Se realiza a iniciativa del cesionario, ya que el artículo 1902 del Código Civil señala
"expresamente notificada por el cesionario al deudor..." b) Debe ser hecha con exhibición del título de
acuerdo con lo que dispone el artículo 1903; y c) La notificación debe ser realizada por un ministro de fe,
puesto que al no aludir el legislador a una forma especial de notificación, rigen las reglas generales a
este respecto; octavo: que en el caso sub lite las exigencias previstas por el legislador en garantía de
una adecuada y transparente transferencia de los títulos, no fueron observadas, puesto que el
ejecutante, al evacuar el traslado respectivo a la excepción en comento, ni siquiera refutó la afirmación
del ejecutado de no habérsele notificado los respectivos contratos de cesión de créditos, exigencia
jurídica que al haber sido ignorada por el cesionario, conlleva indudablemente a concluir que, en el caso
sub lite, dicho litigante carecía del poder jurídico para activar la función jurisdiccional, por no
encontrándose, en definitiva, en posesión de la legitimatio ad caussam, situación que,
consecuentemente, restó a sus mandatarios judiciales de toda capacidad para obrar en este juicio. A
nuestro juicio, la notificación de la cesión es siempre una condición precisa del ejercicio del derecho por
el cesionario y sirve en todo caso para la adquisición del derecho, y es, en fin, una formalidad preventiva
y extrínseca de la acción de cobro interpuesta por el cesionario, de modo que su objeto no es la prueba
de la acción sino la preparación de la personería para entablarla. (Alejandro Silva Bascuñán, De la
cesión de derechos, Soc. Imp. y Lit. Universo, 1933, p. 164).
Decíamos que la jurisprudencia no es uniforme en esta materia, porque ella ha declarado también
que un cesionario no puede ejecutar al deudor del crédito que se le ha cedido sin notificarle previamente
la cesión y que la notificación del requerimiento de pago efectuado por el cesionario no es bastante para
darle personería.
Se destruiría la ley si se admitiera que, antes del cumplimiento del trámite ordenado por ella, puede el
cesionario portarse como acreedor del obligado y exigir el beneficio cedido.
Corte Suprema
Fecha: 23/12/2010
Rol: 5410-2009
Sumario
El emplazamiento constituye el efecto que produce la presentación de una demanda y que requiere
la notificación al demandado y la fijación de un plazo para que éste comparezca al tribunal y oponga sus
excepciones, defensas o pueda reconvenir. Para que el demandado se encuentre obligado a intervenir
en el juicio es necesario que la notificación se haya hecho en forma legal y que transcurra el término que
la ley contempla para que se comparezca al proceso. Entre los efectos principales que conlleva el
emplazamiento está el hecho de entablarse válidamente la relación procesal entre demandante y
demandado, que éste conozca el contenido de las pretensiones que se ejercen en su contra, y
determina, por su parte, el tribunal que debe conocer de la controversia. El objetivo del emplazamiento,
por lo tanto, no es otro que el demandado tenga la razonable posibilidad de hacerse escuchar,
comparecer y exponer lo pertinente en relación con sus derechos. (Considerando 10)
El legislador ha percibido con recelo la cesión de derechos litigiosos, razón por la que ha regulado el
llamado retracto litigioso —artículo 1913 del Código Civil— según el cual el demandado se puede liberar
de los efectos de la sentencia condenatoria dictada en el juicio respectivo pagando al cesionario lo que
éste le hubiera a su vez pagado al cedente como precio de la cesión, más los intereses corrientes.
(Considerando 14)
Corte Suprema
Fecha: 23/12/2010
Rol: 7584-2009
Sumario
Que el juicio ejecutivo, independientemente del texto legal que lo recoja, de aplicación general o
especial, consiste en un procedimiento de carácter compulsivo o de apremio, donde todas las
actuaciones se orientan a la realización de bienes para los efectos de cumplir con la obligación
contenida en el título ejecutivo.
Su fundamento es, sin lugar a dudas, la existencia de una obligación indubitada que consta en un
título ejecutivo.
El legislador parte de la base de que existe una presunción de verdad acerca de la existencia de una
obligación, en el hecho de constar ésta precisamente en un título ejecutivo.
El título ejecutivo presenta una naturaleza análoga a la de una prueba privilegiada en términos tales
que el acreedor dotado de él goza de la garantía jurisdiccional de solicitar el embargo de bienes
suficientes del deudor y todo el peso de la prueba recae sobre el último.
Este debe desvanecer la presunción de autenticidad y de veracidad que el título supone. Conclúyese
de aquí que si el ejecutado no rinde probanza alguna en apoyo de sus pretensiones, sus excepciones
no pueden prosperar y ellas deben ser rechazadas. (C. Concepción, 14 de julio de 1967. R., t. 64, sec.
2ª, p. 33).
Para que los derechos y las obligaciones que les son correlativas sean una realidad, es menester,
que existan medios compulsivos para obtener su cumplimiento, que, de otro modo, quedaría entregado
por entero a la voluntad de los deudores.
Cuando esos derechos son obscuros o disputados, se hace necesario seguir un procedimiento
ordinario que los declare o establezca precisamente.
Pero cuando ellos se encuentran ya declarados en una sentencia o en otro documento auténtico,
corresponde exigir su realización por medio de un procedimiento más breve y de carácter coercitivo.
Este último procedimiento no es otro que el juicio ejecutivo, que, de acuerdo con las ideas anteriores,
puede definirse en esta forma: juicio ejecutivo es un procedimiento contencioso especial que tiene por
objeto obtener, por vía de apremio, el cumplimiento de una obligación convenida o declarada
fehacientemente, que el deudor no cumplió en su oportunidad.
(Raúl Espinosa Fuentes, Manual de procedimiento civil, el juicio ejecutivo, actualizado por Cristián
Maturana Miquel, Editorial Jurídica, 2003, p. 7). (Considerando 7º)
Corte Suprema
Nulidad de la transferencia del registro de la marca, rechazada. Exigencia que los actos jurídicos sobre derechos
de propiedad industrial consten en escritura pública. Exigencia aplicable sólo a los actos voluntarios verificados por
sus titulares. Exigencia no aplicable a los actos forzados y regulados singularmente por la ley. Aplicación de la
normativa sobre enajenaciones forzadas. Idoneidad de la copia protocolizada ante notario de lo obrado en el juicio
para transferir el registro de marca. Factura de venta extendida por el martillero público.
Fecha: 15/12/2010
Rol: 7341-2008
Sumario
Que sobre el tema es útil tener en cuenta que, si bien el artículo 14 de la Ley Nº 19.039, en su
redacción en vigor a la época de la petición de la transferencia criticada, esto es, al quince de febrero de
dos mil cinco, preceptuaba que los derechos de propiedad industrial pueden ser materia de toda clase
de actos jurídicos, los que deberán constar por escritura pública y se anotarán al margen del registro
respectivo, tal exigencia resulta aplicable exclusivamente a los actos voluntarios verificados por sus
titulares, mas no a aquellos de carácter forzado y singularmente regulados por la ley, como ocurre con la
venta en remate a través de un martillero público practicada en el marco de un juicio ejecutivo laboral.
En efecto, el fin de dicha disposición el referido artículo 14, fue el de suministrar la mayor certeza
posible al comercio de los registros marcarios, regulando en su inciso 2º, incluso las cesiones de los
requerimientos de inscripción de los privilegios industriales, afirmación que guarda estrecha relación con
los datos que surgen de la historia legislativa del actual artículo 14, relativos, en particular, a los
contenidos en el segundo informe de la comisión de economía del senado, donde consta que el
requisito formal de la escritura pública se estimó excesivo en razón que una empresa completa puede
transferirse mediante traspasos de acciones firmadas ante dos testigos, se acordó sustituirla por al
menos un instrumento privado firmado ante notario.
Ello explicita con seguridad que la norma en examen sólo se pensó para controlar los traslados
voluntarios de los privilegios industriales, en cuya virtud justamente se materializa el comercio de los
registros y solicitudes marcarias.
Que, por lo demás, aun cuando la Ley Nº 19.039 contiene la normativa singular vigente en materia de
propiedad industrial, ésta no gobierna las transferencias forzadas de los derechos de esta clase y, por lo
tanto, resultan plenamente aplicables a la situación sub judice, los cánones generales sobre enajenación
obligada de especies embargadas en un juicio ejecutivo, que en la hipótesis de los bienes incorporales
de naturaleza mueble, como acontece con los distintivos mercantiles, se rigen por el artículo 482 del
Código de Procedimiento Civil, que dispone que: los bienes muebles embargados se venderán en
martillo, siempre que sea posible, sin necesidad de tasación.
La venta se hará por el martillero designado por el tribunal que corresponda, precepto que encuentra
su símil en el artículo 122 de la ley de quiebras, actualmente incorporado al Código de Comercio,
respecto de los bienes muebles comprendidos en la litis concursal.
Entonces no cabe duda que la factura de venta extendida por el competente martillero público, cuya
copia autorizada integra la protocolización de lo obrado en el juicio ejecutivo laboral en el que se decretó
el remate de la etiqueta, configura un título apto para amparar el desplazamiento forzado del dominio del
registro del signo comercial de marras, más aún si el artículo 21 de la Ley Nº 18.118 que dirige el
ejercicio de la actividad de martillero público, señala que este funcionario, junto con la cuenta que debe
rendir a continuación de la subasta está obligado a adjuntar una fotocopia de las boletas o facturas
entregadas al subastador. (Considerandos 4º y 5º)
Corte Suprema
Fecha: 27/09/2010
Rol: 2098-2009
Sumario
Aunque la ley no fija un plazo para dar a conocer al deudor la cesión del crédito, tampoco resulta
acertado entender que la notificación judicial del protesto de cheques al deudor, en el marco de una
gestión preparatoria de la vía ejecutiva, además de servir a los fines previstos en la normativa especial
que rige la materia, pueda confundirse u operar, también, como la notificación ordenada para
perfeccionar una cesión de créditos, máxime si esa notificación ha sido efectuada de conformidad con lo
dispuesto en el artículo 41 de la ley sobre cuentas corrientes bancarias y cheques, como sucedió en la
especie. (Considerando 15)
Corte Suprema
Cesión de créditos, forma de notificación al deudor, requisito para que le sea oponible notificación de cesión de
créditos contenidos en facturas. Notificación personal al deudor en el contexto de cesión de créditos
Fecha: 20/04/2010
Rol: 6457-2008
Sumario
Que, a raíz de la promulgación, el 12 de noviembre de 2004, de la Ley Nº 19.983, que vino a regular,
entre diversas materias, la transferencia o cesión del crédito contenido en una factura, advirtiendo este
tribunal la trascendencia de la controversia fundamental sobre la que discurre este asunto y atendida su
labor orientadora e inspiradora de la jurisprudencia que debe motivar el contenido de las decisiones de
este máximo tribunal, se estima pertinente hacer en la especie las siguientes precisiones previas.
El inciso 2º del artículo 7º de la Ley Nº 19.983, establece que la cesión producirá efecto respecto del
obligado al pago de una factura cuando sea puesta en conocimiento del obligado al pago por un notario
público o por el oficial del registro civil en las comunas donde no tenga su asiento un notario, sea
personalmente, con exhibición de copia del respectivo título, o mediante el envío de carta certificada, por
cuenta del cesionario de la factura, adjuntando copias del mismo autorizadas por el ministro de fe.
En este último caso, la cesión producirá efectos respecto del deudor, a contar del sexto día siguiente
a la fecha del envío de la carta certificada dirigida al domicilio del deudor registrado en la factura.
Es evidente que dicha carta deberá cumplir con los requisitos que la norma legal señala, esto es,
adjuntar copias del título, vale decir, de las copias de las facturas, certificadas por el ministro de fe.
Con anterioridad a dicha data, las exigencias que han de requerirse respecto de la notificación de la
cesión de créditos contenidos en este tipo de documentos deberán ajustarse estrictamente al tenor de
los artículos 1901 y siguientes del Código Civil y/o 162 y 163 del Código de Comercio, según
corresponda.
Que sobre el particular, cabe, además, reflexionar que en materia de cesión de créditos el derecho
común ha sido muy riguroso al establecer sus requisitos, especialmente en resguardo de los derechos
del deudor, que pudieran llegar a verse afectados por convenios celebrados por su acreedor con
terceros respecto de su deuda.
Así se advierte en los artículos 1902 a 1905 del Código Civil, que han sido interpretados tanto por la
doctrina como por la jurisprudencia en forma estricta.
Dice, por ejemplo, don Alejandro Silva Bascuñán en su memoria de prueba para optar al grado de
licenciado en ciencias jurídicas y sociales de la Universidad de Chile, 1933, titulada la cesión de
derechos.
(1º) de los créditos personales (civiles y comerciales): el artículo 1903 del Código Civil prescribe
como requisito de este trámite (notificación de la cesión al deudor), que se haga con exhibición del título
que llevará anotado el traspaso del derecho con la designación del cesionario y bajo la firma del
cedente.
Comentando los mismos artículos del Código Civil, dice don Raúl Diez Duarte (Cesión de derechos ,
Editorial Jurídica ConoSur, 1995): al deudor cedido no puede serle indiferente la persona del acreedor,
porque puede tener créditos que oponer al cedente, por vía de compensación, derecho que no
procedería contra el cesionario en el caso que el deudor aceptase la cesión sin reservas, además, la
notificación judicial sirve para fijar una fecha a la cesión, que tiene importancia tanto respecto del deudor
como respecto de terceros.
En efecto, desde el momento de la notificación, queda fijado públicamente el hecho que el cesionario
es el verdadero dueño del crédito. Los terceros interesados no podrán alegar ignorancia de este hecho,
tanto es así que si producida la notificación judicial pagare con posterioridad al cedente, ese pago sería
nulo. Quien paga mal, paga dos veces (págs. 58 y 59). En materia comercial, el código del ramo se
remite a las normas del Código Civil, poniendo énfasis en el artículo 165, en la exhibición del respectivo
título, que deberá cumplir el ministro de fe al momento de notificar la cesión al deudor.
La Ley Nº 19.983, por su parte, dada su especial naturaleza, inserta en la legislación comercial,
dentro de una economía dinámica basada en el crédito, pareciera a primera vista suavizar las
exigencias de la legislación común.
Ahora bien, si se revisa la historia fidedigna del establecimiento de la ley, encontramos en el primer
informe de la comisión de economía durante el segundo trámite constitucional del proyecto, en que se
señala como objetivos fundamentales del mismo, establecer un sistema general de cesión de créditos
contenidos en facturas y allanar el cobro de los mismos mediante el otorgamiento de mérito ejecutivo a
una copia de la factura.
Explica como antecedentes de hecho que el tráfico comercial y su ingente desarrollo han impulsado a
empresarios y comerciantes a realizar actos y contratos para vender, ceder y transferir toda clase de
créditos.
Es así como, con el fin de obtener liquidez, el acreedor puede ceder sus cuentas por cobrar, a
cambio de un precio determinado, presumiblemente menor que el señalado en el título. Se trata pues,
con esta ley, de facilitar el tráfico de créditos que consten de una factura, pero más adelante el mismo
informe precisa que la factura, en cuanto documento que da cuenta de un crédito nominativo personal,
se rige por lo dispuesto en el artículo 1901 del Código Civil, en virtud del cual la cesión de créditos no
produce efecto contra el deudor ni contra terceros, mientras no sea notificada por el cesionario al deudor
o aceptada por éste. En consecuencia, se debe comunicar la cesión formalmente al deudor de esta
manera, resulta evidente que si bien el espíritu de la Ley Nº 19.983 privilegia la agilidad del tráfico de
créditos mercantiles, para cuyo efecto facilita los trámites para la notificación de la cesión por parte del
cesionario al obligado al pago de la factura, permitiendo llevarla a cabo mediante el despacho por un
notario público de una carta certificada, adjuntando copias del respectivo título, certificadas por el
ministro de fe, lo que contrasta con el derecho común, en que la exigencia de exhibir el título al deudor
que contempla el artículo 1903 del Código Civil, al momento de notificarle la cesión, ha llevado a la
doctrina y jurisprudencia a afirmar que para el trámite en cuestión no se puede emplear la notificación
subsidiaria del artículo 44 del Código de Procedimiento Civil, es menester concluir que los requisitos
establecidos en el inciso 2º del artículo 7º de la Ley Nº 19.983, para la notificación de la cesión al
deudor, deben cumplirse en forma estricta, en atención a la delicada materia que reglamenta, máxime
que con ella se puede estar dando paso a la ejecución forzada de los créditos contenidos en las
facturas, con la trascendencia que esto reviste para el patrimonio del demandado.
Que esclarecido, entonces, el contexto legal o marco jurídico que debe ser consultado en relación a
la factura en que se sustenta la pretensión del demandante de autos, cabe por cierto señalar que del
análisis de las normas aplicables al caso, resulta evidente que al instituir los mecanismos consagrados
en los artículos 1902, 1903 del Código Civil y 162 del Código de Comercio, lo que ha pretendido cautelar
el legislador es la adecuada y transparente transferencia de los títulos que ha indicado, aspecto que
evidentemente sólo se satisface mediante la adopción de los mecanismos que, al efecto, dota a las
partes el sistema procesal, con miras a asegurar el conocimiento del deudor del alcance de las referidas
gestiones.
Para que cesión de un crédito sea oponible al deudor debe ser notificada a éste o aceptada por el mismo
Fecha: 12/03/2010
Rol: 311-2005
Sumario
Tal como ha tenido ocasión de precisarlo la jurisprudencia de la Excma. Corte Suprema, para que la
cesión de un crédito sea oponible al deudor debe ser notificada a éste, o bien aceptada por el mismo,
observándose, entre otras, la exigencia que la notificación se efectúe en forma personal, puesto que si
bien tal requisito no está expresamente consagrado en las normas de los artículos 1901, 1902 y 1903
del Código Civil, se desprende claramente de lo dispuesto por el artículo 47 del Código de
Procedimiento Civil que señala que la notificación personal se empleará siempre que la ley disponga
que se notifique a alguna persona para la validez de ciertos actos. (Considerando 6º)
Corte Suprema
Fecha: 04/01/2010
Rol: 8389-2009
Sumario
Como el artículo 465 del Código de Procedimiento Civil exige que en el escrito en que se oponen
excepciones a la ejecución se exprese con claridad y precisión los hechos en que se fundan, lo que
implica necesariamente que exista coherencia entre la excepción opuesta y sus fundamentos fácticos, lo
que en la especie no ocurre, se debe desestimar la excepción prevista en el artículo 464 Nº 14 del
Código de Procedimiento Civil. (Considerando 7º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Cesión de créditos, forma de notificación. Cesión de crédito, requisitos legales. Carta certificada por suplente de
notario no cumple con los requisitos legales para hacer oponible la cesión del crédito
Fecha: 01/09/2009
Rol: 2563-2008
Sumario
A raíz de la promulgación el 12 de noviembre de 2004 de la Ley Nº 19.983, que vino a regular, entre
otras materias, la transferencia o cesión del crédito contenido en una factura, advirtiendo esta corte la
trascendencia de la controversia fundamental sobre la que discurre este asunto y, atendida la labor
orientadora e inspiradora de la jurisprudencia que debe motivar el contenido de las decisiones de este
máximo tribunal, se estima pertinente hacer en la especie las siguientes precisiones previas.
El inciso 2º del artículo 7º de la Ley Nº 19.983, establece que la cesión producirá efecto respecto del
obligado al pago de una factura cuando sea puesta en conocimiento del obligado al pago por un notario
público o por el oficial del registro civil en las comunas donde no tenga su asiento un notario, sea
personalmente, con exhibición de copia del respectivo título, o mediante el envío de carta certificada, por
cuenta del cesionario de la factura, adjuntando copias del mismo autorizadas por el ministro de fe.
En este último caso, la cesión producirá efectos respecto del deudor, a contar del sexto día siguiente
a la fecha del envío de la carta certificada dirigida al domicilio del deudor registrado en la factura.
Es evidente que dicha carta deberá cumplir con los requisitos que la norma legal señala, esto es,
adjuntar copias del título, vale decir, de las cuartas copias de las facturas, certificadas por el ministro de
fe.
Cabe, además, reflexionar que en materia de cesión de créditos el derecho común ha sido muy
riguroso al establecer sus requisitos, especialmente en resguardo de los derechos del deudor, que
pudieran llegar a verse afectados por convenios celebrados por su acreedor con terceros respecto de su
deuda.
Así se advierte en los artículos 1902 a 1905 del Código Civil, que han sido interpretados tanto por la
doctrina como por la jurisprudencia en forma estricta.
Dice, por ejemplo, don Alejandro Silva Bascuñán en su memoria de prueba para optar al grado de
licenciado en ciencias jurídicas y sociales de la Universidad de Chile, 1933, titulada la cesión de
derechos. (1º) de los créditos personales (civiles y comerciales): el artículo 1903 del Código Civil
prescribe como requisito de este trámite (notificación de la cesión al deudor), que se haga con exhibición
del título que llevará anotado el traspaso del derecho con la designación del cesionario y bajo la firma
del cedente. El espíritu de la ley es que el deudor se imponga personalmente de la existencia en poder
del cesionario del documento justificativo del derecho transferido, en el cual aparece con la firma de su
acreedor la designación del sustituto que por su voluntad le ha reemplazado. De este modo está en
condiciones de imponerse de la veracidad de la transferencia.
Comentando los mismos artículos del Código Civil, dice don Raúl Diez Duarte, en su obra Cesión de
derechos (Editorial Jurídica ConoSur, 1995): al deudor cedido no puede serle indiferente la persona del
acreedor, porque puede tener créditos que oponer al cedente, por vía de compensación, derecho que no
procedería contra el cesionario en el caso que el deudor aceptase la cesión sin reservas, además, la
notificación judicial sirve para fijar una fecha a la cesión, que tiene importancia tanto respecto del deudor
como respecto de terceros.
En efecto, desde el momento de la notificación, queda fijado públicamente el hecho que el cesionario
es el verdadero dueño del crédito. Los terceros interesados no podrán alegar ignorancia de este hecho,
tanto es así que si producida la notificación judicial pagare con posterioridad al cedente, ese pago sería
nulo. Quien paga mal, paga dos veces (págs. 58 y 59).
En materia comercial, el código del ramo se remite a las normas del Código Civil, poniendo énfasis
en su artículo 165, en la exhibición del respectivo título, que deberá cumplir el ministro de fe al momento
de notificar la cesión al deudor.
La Ley Nº 19.983, por su parte, dada su especial naturaleza, inserta en la legislación comercial,
dentro de una economía dinámica basada en el crédito, pareciera a primera vista suavizar las
exigencias de la legislación común.
Ahora bien, si se revisa la historia fidedigna del establecimiento de la ley, encontramos el primer
informe de la comisión de economía durante el segundo trámite constitucional del proyecto, en que se
señala como objetivos fundamentales del mismo, establecer un sistema general de cesión de créditos
contenidos en facturas y allanar el cobro de los mismos mediante el otorgamiento de mérito ejecutivo a
una copia de la factura.
Explica como antecedentes de hecho que el tráfico comercial y su ingente desarrollo han impulsado a
empresarios y comerciantes a realizar actos y contratos para vender, ceder y transferir toda clase de
créditos.
Es así como, con el fin de obtener liquidez, el acreedor puede ceder sus cuentas por cobrar, a
cambio de un precio determinado, presumiblemente menor que el señalado en el título.
Se trata pues, con esta ley, de facilitar el tráfico de créditos que consten de una factura, pero más
adelante el aludido informe precisa que la factura, en cuanto documento que da cuenta de un crédito
nominativo personal, se rige por lo dispuesto en el artículo 1901 del Código Civil, en virtud del cual la
cesión de créditos no produce efecto contra el deudor ni contra terceros, mientras no sea notificada por
el cesionario al deudor o aceptada por éste. En consecuencia, se debe comunicar la cesión formalmente
al deudor.
De esta manera, resulta evidente que si bien el espíritu de la Ley Nº 19.983 privilegia la agilidad del
tráfico de créditos mercantiles, para cuyo efecto facilita los trámites para la notificación de la cesión por
parte del cesionario al obligado al pago de la factura, permitiendo llevarla a cabo mediante el despacho
por un notario público de una carta certificada, adjuntando copias del respectivo título, certificadas por el
ministro de fe, lo que contrasta con el derecho común, en que la exigencia de exhibir el título al deudor
que contempla el artículo 1903 del Código Civil, al momento de notificarle la cesión, ha llevado a la
doctrina y jurisprudencia a afirmar que para el trámite en cuestión no se puede emplear la notificación
subsidiaria del artículo 44 del Código de Procedimiento Civil, es menester concluir que los requisitos
establecidos en el inciso 2º del artículo 7º de la Ley Nº 19.983, para la notificación de la cesión al
deudor, deben cumplirse en forma estricta, en atención a la delicada materia que reglamenta, máxime
que con ella se puede estar dando paso a la ejecución forzada de los créditos contenidos en las
facturas, con la trascendencia que esto reviste para el patrimonio del ejecutado. (Considerandos 7º y 8º
de sentencia de casación)
Fecha: 08/01/2009
Rol: 976-2007
Sumario
La venta de derechos hereditarios, por tanto, tiene un carácter aleatorio, ya que es un contrato de
incierta contingencia de ganancia o pérdida para los contratantes, ya sea por el valor que, en definitiva,
se les otorgue a los bienes una vez efectuada la partición y su adjudicación, o bien porque el cesionario
está obligado a pagar las deudas contraídas por el causante, toda vez que a él pasan todos los bienes,
la universalidad de la herencia y, al mismo tiempo, el pasivo de la herencia, ya que el cesionario ocupa
la situación jurídica del cedente en ella.
Por lo antedicho, la rescisión por lesión enorme no resulta aplicable a la cesión de acciones y
derechos, como tampoco puede considerarse la existencia de error en la sustancia, porque la cesión de
derechos hereditarios tiene por objeto una universalidad jurídica, esto es, la herencia o más,
precisamente, una cuota indivisa que correspondía al cedente y no el derecho que pretendía tener sobre
bienes determinados de la herencia y tratándose, de un derecho de carácter mueble, no resulta posible
el error sustancial sobre los bienes específicos que componían dicha universalidad. (Considerandos 1º y
2º)
Fecha: 09/07/2008
Rol: 8530-2004
Sumario
La cesión de créditos, en nuestra legislación, en que no basta el contrato para transferir el dominio,
es una convención a través de la cual se verifica la tradición de los derechos personales y debe ir
precedida de un título translaticio de dominio. Esto significa que en virtud del título translaticio de
dominio, el cesionario adquiere el derecho a exigir que se le haga la tradición del crédito, lo que
conforme a lo dispuesto en el artículo 1901 del Código Civil, debe hacerse mediante la entrega del título.
A eso apunta la disposición citada cuando establece que la cesión de un crédito personal, a cualquier
título que se haga, no tendrá efecto entre cedente y cesionario, sino en virtud de la entrega del título. La
doctrina y la jurisprudencia están contestes en que cuando la norma expresa a cualquier título que se
haga, se está refiriendo al antecedente jurídico de la cesión (el contrato de compraventa, permuta,
donación u otro) y cuando dice que se perfecciona por la entrega del título, se refiere al documento
mismo en que consta la obligación o el crédito que es objeto de la cesión. (Considerando 6º)
Corte Suprema
Cobro de pesos. Cesión de créditos. Notificación de la cesión de créditos, requisitos. Forma de notificar al deudor
Fecha: 02/07/2008
Rol: 1955-2007
La cesión de créditos es una convención por la cual el acreedor transfiere su crédito a otra persona,
llamada cesionario.
Para que dicha notificación sea válida y por ende oponible al deudor se deben cumplir con los
presupuestos que señala la ley, que son:
I. Debe ser hecha a iniciativa del cesionario, ya que el artículo 1902 del Código Civil señala
expresamente notificada por el cesionario al deudor; II. Debe exhibirse el título al deudor, tal como lo
indica el artículo 1903 del Código Civil; III. La notificación debe ser realizada por un ministro de fe.
Que en atención a lo antes expuesto y considerando que los sentenciadores recurridos no han
atribuido mérito suficiente a la gestión practicada por el notario público, consistente en el envío de carta
certificada comunicando la cesión de crédito efectuada, para dar cumplimiento a las formalidades
ordenadas por la ley para que el deudor tome conocimiento de la misma, corresponde determinar si la
notificación que exige el artículo la ley debe ser personal.
Que del análisis de las normas aplicables al caso, resulta evidente que al instituir los mecanismos
consagrados en los artículos 1902, 1903 del Código Civil y 162 del Código de Comercio, lo que ha
pretendido cautelar el legislador es la adecuada y transparente transferencia de los títulos que ha
indicado, aspecto que evidentemente sólo se satisface mediante la adopción de los mecanismos que, al
efecto, dota a las partes el sistema procesal, con miras a asegurar el conocimiento del deudor del
alcance de las referidas gestiones.
Conforme al razonamiento antes expuesto, si bien esta exigencia no está expresamente contemplada
en el Código de Comercio ni en el Código Civil, sí lo expresa el artículo 47 del Código de Procedimiento
Civil, que señala que la notificación personal se empleará siempre que la ley disponga que se notifique a
alguna persona para la validez de ciertos actos, por lo que resulta indiscutible que la única forma en que
podía entenderse que se lograba acreditar el conocimiento de la cesión por parte del deudor, era
mediante su notificación personal, gestión de carácter trascendental por cuanto sólo desde ese
momento el cesionario se transforma en su legítimo acreedor. (Considerandos 4º a 7º)
Corte Suprema
Fecha: 24/01/2008
Rol: 6329-2006
En la cesión del derecho de herencia se cede las consecuencias patrimoniales que resultan de la
calidad de heredero. Por eso, la cesión del derecho real de herencia propiamente tal puede definirse
como la cesión o transferencia a título oneroso que el heredero hace del todo o parte de su derecho de
herencia a otra persona. El cesionario debe tomar o adquirir el derecho de herencia en toda su amplitud
y cargar también con la participación que le quepa en el pasivo, vale decir, con las obligaciones y
gravámenes que a su cuota hereditaria le corresponda. (Considerando 5º)
En un contrato deben ser considerados como partes los contratantes, ya hayan actuado por sí o por
medio de mandatarios o representantes legales. Asimismo, deben incluirse como partes los sucesores a
título universal. Estos últimos confunden su personalidad patrimonial con la del causante, son entonces
acreedores y deudores de todo lo que era de aquél, al ser continuadores de la persona del difunto.
(Considerando 8º)
Cesión de derechos hereditarios. Valor probatorio de escritura pública respecto del precio. Diferencia entre
simulación absoluta y nulidad
Fecha: 29/12/2006
Rol: 3846-2003
Sumario
La cesión de derechos hereditarios conforme al artículo 1801 inciso 2º del Código Civil es una
compraventa y para este contrato, el artículo 1876 inciso 2º ordena que "si en la escritura de venta se
expresa haberse pagado el precio, no se admitirá prueba alguna en contrario sino la de nulidad o
falsificación de la escritura, y sólo en virtud de esta prueba habrá acción contra terceros poseedores",
regla que la jurisprudencia actual de la Excma. Corte entiende absoluta, es decir aplicable incluso en
controversia entre las partes del contrato. No es posible admitir que el contrato de cesión de derechos
hereditarios sea absolutamente simulado puesto que produjo efectos. Así entonces, por una parte se
convino y percibió un precio y por la otra se adquirieron y se produjo la tradición de los derechos
enajenados, es decir, el acto impugnado produjo los efectos que le son naturales según el artículo 1793
del Código Civil, lo que es impropio de un acto simulado absolutamente, según ya se dijo. El hecho que
el cedente hubiere sido engañado no determina una simulación, sino, si fuere efectivo, una nulidad por
dolo o error en la declaración, cuestión diversa a la de no haber realmente querido la declaración.
(Considerandos 9º y 10)
Demanda de nulidad de inscripción conservatoria de dominio. Nulidad de inscripción por falta de causa. Cesión
de derechos hereditarios
Fecha: 29/12/2006
Rol: 926-2004
Sumario
Que, siendo la inscripción conservatoria un acto jurídico, como tal debe ser celebrado por quien es
legalmente capaz; debe existir además consentimiento en dicho acto y éste no debe adolecer de vicios;
debe tener un objeto y una causa, debiendo ser estos dos último lícitos, y atendida la naturaleza
especial de este acto jurídico debe agregarse como requisito, que debe hacer historia continuada
respecto del inmueble sobre el cual versa. (Considerando 34)
Corte Suprema
Compraventa. Precio insoluto. Obligación del comprador. Acción ordinaria de cobro de pesos
Fecha: 10/08/2005
Rol: 2528-2003
Sumario
El artículo 1901 del Código Civil señala "la cesión de un crédito personal, a cualquier título que se
haga, no tendrá efecto entre el cedente y el cesionario sino en virtud de la entrega del título". A
continuación, el artículo 1902 expresa que "la cesión no produce efecto contra el deudor ni contra
terceros mientras no ha sido notificada por el cesionario al deudor o aceptada por éste" y, el
artículo 1903 señala "la notificación debe hacerse con exhibición del título que llevará anotado el
traspaso del derecho con la designación del cesionario y bajo la firma del cedente".
También, ha de tenerse presente el artículo 699 del Código Civil cuando señala que "la tradición de
los derechos personales que un individuo cede a otro se verifica por la entrega del título hecha por el
cedente al cesionario" y el artículo 162 del Código de Comercio que expresa "la cesión de un crédito no
endosable se sujetará a las reglas establecidas en el título de la cesión de derechos del Código Civil".
La notificación de la cesión se hará por un ministro de fe, con exhibición del respectivo título.
De las disposiciones legales antedichas se concluye que la cesión de créditos es la convención por la
cual el acreedor transfiere su crédito a otra persona, llamada cesionario. No es necesario el
consentimiento del deudor, ya que ésta se perfecciona entre el cedente y el cesionario por la entrega del
título, pero es inoponible al deudor y terceros, mientras no sea notificada o aceptada por el primero.
(Considerando 11).
Ficha 62 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Demanda cobro de pesos. Contrato de ejecución de obras. Término de contrato. Contrato de factoring. Cesión de
crédito. Notificación y aceptación del crédito. Facturas. Actos de comercio. Actos mixtos
Fecha: 19/07/2005
Rol: 3696-2004
Sumario
La cesión de créditos es una convención por la cual el acreedor transfiere su crédito a otra persona,
llamada cesionario.
La cesión supone la presencia de un título translaticio de dominio, que será el contrato entre cedente
y cesionario y la tradición misma del crédito que se efectúa por la entrega del título, de conformidad a lo
dispuesto por el artículo 1901, con relación al artículo 699, ambos del Código Civil.
Dado que la cesión se efectúa al margen del deudor, el deudor no puede oponerse a ella ya que
carece de interés jurídico para hacerlo, especialmente si se considera que su situación jurídica no varía
con la cesión, le es indiferente cumplir la obligación frente al acreedor original o frente al cesionario o
nuevo acreedor.
Por ello, por considerar que el demandado carece de acción para alegar la nulidad que se pretende,
se procederá al rechazo de la misma.
Doctrinariamente a las operaciones de factoring se las considera como un contrato autónomo, como
negocio jurídico indirecto y como un contrato atípico.
El mecanismo jurídico esencial que hace posible la operación de factoring es la cesión de créditos
que el cliente hace al factor, la que se perfecciona una vez que hay acuerdo de hacer la operación.
Una vez aprobado por el factor la oferta presentada por su cliente, se efectúa la cesión de crédito,
asumiendo el riesgo de la insolvencia del deudor, por haberse convertido en el nuevo titular del crédito.
La cesión de crédito es, entonces, el contrato esencial para que se realice la operación de factoring,
permite el traspaso de crédito al actor.
Teniendo presente, que la oferta del cliente (Constructora Victoria) puede referirse tanto a créditos ya
nacidos con pago diferido como a operaciones cuyos créditos no han surgido a la vida jurídica, la cesión
sólo puede efectuarse en el primer caso.
Que, en caso el sublite, estamos ante un crédito ya nacido a la vida jurídica como contrato de
ejecución de obra, con pago diferido, a través de los estados de pago por avance de obra y el anticipo
acordado.
Sin embargo, es necesario considerar que la cesión de créditos acordada por el demandante y la
constructora no sólo produce efectos entre las partes, cedente y cesionario, sino también, respecto del
deudor cedido, para lo cual es necesario notificarlo o que ella sea aceptada por éste, de acuerdo a lo
dispuesto por los artículos 1901, 1902 y siguientes del Código Civil.
Como ya se ha dicho, tratándose de un acto mixto, corresponde aplicar la ley del obligado, en este
caso, la ley civil, específicamente el artículo 1902 del Código Civil que establece que la cesión no
produce efecto en contra del deudor, mientras no haya sido notificado o aceptado por éste.
Por lo expuesto, la notificación practicada por el cesionario, agregada a fojas 9 del cuaderno de
medida prejudicial precautoria, de acuerdo al artículo 162 del Código de Comercio, no es válida, por lo
que la cesión no ha producido efecto respecto del deudor cedido, dado que debió practicarse una
notificación judicial, o sea, ordenada por un juez, de conformidad a lo dispuesto por el artículo 47 del
Código de Procedimiento Civil, debe hacerla el cesionario y debe exhibirse el título al deudor.
La falta de notificación al deudor cedido en los términos señalados, impide que produzca efecto entre
acreedor y deudor.
No interviniendo la notificación o aceptación, el artículo 1905 del Código Civil considera que el crédito
existe en manos del cedente respecto del deudor o terceros. (Considerandos 4º y 5º de sentencia de
primera instancia)
Corte Suprema
Fecha: 23/12/2004
Rol: 2342-2003
Sumario
El requisito básico para que una cesión de crédito sea oponible al deudor o, dicho en otras palabras,
el momento en que el cesionario se transforma en legítimo acreedor del deudor, que no es otro que el
de la notificación de dicha cesión al deudor (...). Para que dicha notificación sea válida, debe cumplir con
los presupuestos que señala la ley, que son: a) debe ser hecha a iniciativa del cesionario, ya que el
artículo 1902 del Código Civil señala expresamente "(...) notificada por el cesionario al deudor (...)
b) debe exhibirse el título al deudor, tal como lo indica el artículo 162 del Código de Comercio y 1903 del
Código Civil, exigencia que no aparece satisfecha por el solo hecho de individualizar o copiar el título en
la cédula que se entrega al deudor como notificación; c) la notificación debe ser realizada por un
ministro de fe, y d) la notificación debe ser personal. Si bien, esta exigencia no está expresamente
contemplada en el Código de Comercio ni en el Código Civil, es aplicable a la materia de que se trata,
por cuanto el artículo 47 del Código de Procedimiento Civil dispone que esta forma de notificación se
empleará "siempre que la ley disponga que se notifique a una persona para la validez de ciertos actos".
(Considerando 2º)
Ficha 64 Antecedentes del fallo
Fecha: 18/11/2004
Rol: 21404-2004
Sumario
Corte Suprema
Quiebra. Cesión de crédito personal, contrato de leasing. Quiebra de deudor. Efectos entre partes. Efectos
respecto deudor. Oponibilidad por notificación
Fecha: 02/11/2004
Rol: 93-2004
Sumario
La solicitante de la quiebra, cesionaria de los créditos que han sido materia de la demanda, cumplió
con la obligación impuesta por la ley de notificar de la cesión de créditos al deudor, acto jurídico
procesal válidamente practicado y por consiguiente al fallido no le era inoponible tal obligación, con lo
cual sólo cabe desestimar su pretensión de alzamiento de la quiebra. En efecto, de la cesión de créditos
personales, nacen ciertas relaciones entre el cedente y el cesionario y este último con el deudor del
crédito o terceros. En lo primero, legitimar el acto jurídico de la tradición que reside en la entrega
material o simbólica del título, que se constituye en la única formalidad necesaria para que produzca los
efectos jurídicos entre el cedente y el cesionario, lo cual es de incumbencia propia de las partes. El
artículo 1902 del Código Civil exige además que ese acto sea notificado por el cesionario al deudor o
aceptada por éste. Los actos de notificación o de aceptación no tienen el carácter de hacer válida la
cesión, ni modificar el carácter natural que ostentan los que concurren a esa convención, sino que se
constituyen en condiciones de oponibilidad o de mera publicidad. (Considerando 6º sentencia de
casación)
Ficha 66 Antecedentes del fallo
Cesión de derechos hereditarios. Cesión de calidad de heredero. Rescisión por lesión enorme
Fecha: 29/09/2004
Rol: 3308-2002
Sumario
Que, este tribunal no comparte el criterio del apelante, pues claramente lo que se vende, cede o
transfiere por el contrato que motiva este juicio es la condición de heredera que tenía la cedente
respecto a la herencia dejada por el causante, y lo que vendió es su condición de heredera
respondiendo al adquiriente demandado de autos, sólo de su condición de heredera y no respecto de
los bienes que pudieren conformar la herencia del causante, esa es la interpretación que tiene el
contrato de cesión de derechos hereditarios y estos derechos son los únicos que vendió la cedente al
demandado, y éste adquirió dicha calidad de heredero del causante Peñaloza Pérez, más no tales o
cuales bienes, pues no se determinó en que parte de algún bien mueble o inmueble recaería el derecho
hereditario que se transfería aún antes de obtener la posesión efectiva, de modo que lo transferido sin
duda era la calidad de heredero y por consiguiente la universalidad que ello represente, sin que a tal
contrato pueda aplicársele la resolución por lesión enorme invocada, por el actor, pues la vendedora sin
duda conservó en su patrimonio propio todos los bienes que no eran parte de aquella herencia.
(Considerando 2º)
Corte Suprema
Recurso de amparo rechazado (delito de giro fraudulento de cheque). Cesión de cheques nominativos
Fecha: 06/01/2003
Rol: 22-2003
Sumario
Si bien los cheques fueron girados nominativamente a favor de una empresa, ellos aparecen cedidos
a una empresa de factoring y en todo caso por un mandato general para su cobro, motivo por el cual ha
tenido la titularidad y legitimidad suficiente para deducir las gestiones de notificación y posteriores
trámites judiciales, tanto civiles como penales de los cheques referidos. (Considerando 7º de sentencia
de Corte de Apelaciones)
Ficha 68 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Finalidad del recurso. Concepto de arbitrariedad. Artículo 19 Nº 24 de la constitución política. Autotutela. Efectos
de la cesión de derechos hereditarios
Fecha: 13/12/2001
Rol: 4552-2001
Sumario
Queda demostrado que los recurridos, como adquirientes de derechos hereditarios cedidos por el
anterior propietario sólo adquirieron éstos, esto es, la porción o cuota alícuota sobre el haber hereditario
pero no un cuerpo cierto o una extensión o una ubicación determinada, toda vez que el bien raíz en
cuestión y que pertenece a la herencia, no ha sido objeto de partición o división alguna, debiendo
reclamarse, litigarse y adjudicarse los pretendidos derechos hereditarios en la sede civil que
corresponda y mediante el procedimiento señalado por la ley al efecto, que no lo es, evidentemente el
adoptado por los recurridos, puesto que han incurrido en actos de autotutela que significan un
desconocimiento del estado de derecho vigente en el país y de la jurisdicción y atribuciones de los
tribunales de justicia siendo intolerable en un estado jurídicamente organizado la ocurrencia de
situaciones como las descritas, ya que como se ha dicho precedentemente es indubitable y un hecho de
la causa el que los recurridos ingresaron al predio del recurrente de manera subrepticia y realizaron
dentro de él obras de loteo y de cercados que nadie les había autorizado y que jurídicamente no habían
sido ordenadas.
Que arbitrariedad necesariamente desde el punto de vista conceptual debe vincularse y relacionarse
con la noción de actuares u omisiones que pugnan con la lógica y la recta razón contradiciendo el
normal comportamiento, sea de la autoridad o de los seres humanos en particular, que se rige por
principio de racionalidad, mesura y meditación previa a la toma de decisiones y no por el mero capricho
o veleidad, que constituiría la primera.
Por su parte la existencia de ilegalidad conjuga tanto un concepto amplio o definición "marco"
consistente en la idea de toda conducta contraria a derecho, o más técnicamente, necesariamente
antijurídica, como también una interpretación exegética de no respetarse o infringirse el tenor literal de la
norma jurídica en particular.
Que los presupuestos procesales para determinar la admisibilidad del recurso de protección,
necesariamente deben consistir; al tenor de las disposiciones del artículo 20 de la Constitución Política
del Estado y auto acordado de 4 de mayo de 1998 de la excelentísima Corte Suprema de justicia sobre
tramitación y fallo del recurso de garantías constitucionales; en la acción u omisión de un tercero, quien
quiera que sea éste, si particular o autoridad; ilegalidad o privación en el legítimo ejercicio de un derecho
constitucional garantizado por medio del recurso de protección
Que teniendo por objeto el recurso de protección de garantías constitucionales amparar a personas
naturales o jurídicas que por actos u omisiones arbitrarios o ilegales sufran privación, perturbación o
amenaza en el ejercicio de las garantías señaladas en el artículo 20 de la Constitución Política de la
República con la finalidad de restablecer el imperio del derecho y dándose y concurriendo en la especie
los presupuestos procesales copulativos para determinar su admisibilidad, será menester que estos
sentenciadores acojan el recurso en cuestión. (Considerandos 5º a 8º de sentencia de Corte de
Apelaciones)
Ficha 69 Antecedentes del fallo
Acción reivindicatoria. Rechazada por acogerse reconvención que declara prescripción adquisitiva. Apelación no
solicita dejar sin efecto demanda reconvencional. Importancia de las peticiones concretas de apelación
Fecha: 12/06/2001
Rol: 154-1998
Sumario
Que de conformidad con lo dispuesto por los artículos 160, 170 Nº 6, 189 y 201 del Código de
Procedimiento Civil el tribunal de segunda instancia sólo puede pronunciarse acerca de las cuestiones
de hecho y de derecho que, habiendo sido sometidas a juicio por las partes se hubieren discutido y
resuelto en la sentencia de primera instancia, y, respecto de las cuales se hubieren formulado peticiones
concretas por el apelante al deducir el recurso respectivo.
Desde la supresión del trámite de expresión de agravios en segunda instancia con la dictación de la
Ley Nº 18.705 de 24 de marzo de 1988, el requisito de las peticiones concretas, ahora, junto con el de la
fundamentación adecuada del recurso, debe contenerse en el escrito mismo de apelación.
Que, una cosa es la adecuada fundamentación del recurso, que requiere apoyar con razones
eficaces una postura y determinar en forma concreta cada parte, y/o, aspecto del fallo recurrido que se
critica razonadamente para hacer comprensivos los motivos del agravio, otra muy diferente es que se
cumpla con el requisito habilitante básico para fijar la competencia del tribunal ad quem, esto es, con el
presupuesto de contener las peticiones concretas a que se refieren los artículos 189 y 201, en sus
actuales textos del Código de Procedimiento Civil, lo que debió satisfacer el recurso en examen, que fue
deducido el 9 de septiembre de 1997.
Que la ley procesal civil, fiel al principio dispositivo que rige esta área del derecho, ha concedido a las
partes la determinación de las materias que entregan a la decisión del tribunal superior, y tal delimitación
de competencia queda precisamente fijada en las peticiones concretas que debe formular el apelante.
De esta manera, así como en la fundamentación del recurso, el apelante debe señalar que el fallo le
agravia, es en las peticiones concretas que debe especificar, si pide que se revoque la sentencia en un
determinado sentido, sin vaguedades, y luego precisar la consecuencia que deduce de esa revocación,
lo que se traduce en indicar la decisión que pide se adopte en reemplazo de aquélla. (Considerandos 12
a 15)
Fecha: 25/04/2001
Rol: 288-2000
Cita online: CL/JUR/5139/2001
Sumario
Se desprende de los razonamientos que preceden, que el demandado ocupa la propiedad a que se
refiere la demanda no "sin derecho alguno y por ignorancia de la heredera anterior", sino a título de
dueño, por haberla adquirido por compraventa en 1979.
Corte Suprema
Cesión de derechos hereditarios, improcedencia de nulidad por lesión enorme, venta de universalidad jurídica
tiene carácter mueble. Nulidad relativa, improcedencia de nulidad por lesión enorme en cesión de derechos
hereditarios
Fecha: 09/04/2001
Rol: 607-2000
Sumario
"(La demandada) cedió a los demandados el derecho real de herencia sin perjuicio de la mitad de
gananciales a que hubiera tenido derecho en los bienes quedados a su fallecimiento, razón por la cual,
enajenándose por aquella una universalidad jurídica que es independiente de las cosas que la
componen, la tradición de esta cesión se verifica por el estatuto jurídico que regula los bienes muebles,
o sea, por cualquier medio que importe el ejercicio del derecho de dominio por el cesionario, como la
provocación del juicio de partición o la intervención en él, la petición de la posesión efectiva, etc., de
modo que no puede solicitarse su nulidad alegando lesión enorme, desde que tal vicio del
consentimiento se encuentra regulado en los artículos 1888 y siguientes del mencionado código sólo a
propósito del contrato de compraventa de bienes raíces, por lo que la sentencia que se revisa, al
rechazar la demanda, ha dado una correcta aplicación a las disposiciones que los recurrentes dicen
infringidas". (Considerando 3º)
Cesión de derechos. Nulidad. Declaración de los otorgantes en instrumento público. Alcance a terceros de buena
fe
Fecha: 24/01/2001
Rol: 1854-1997
Sumario
Atendido lo anterior, no puede sostenerse que el contrato cuya invalidación se solicita sea una
donación, la que sería nula por haberse omitido el trámite de la insinuación. (Considerandos 3º y 4º)
Corte Suprema
Cesión derechos hereditarios, alcance. Transferencia derecho real de herencia, procedencia. Nulidad escritura
pública, resciliación cesión derechos hereditarios. Procedencia recurso de casación en el fondo, hechos fijados por
jueces del fondo
Fecha: 04/01/2001
Rol: 1377-1999
Sumario
Que establecido que lo cedido son derechos en bienes determinados, y no el derecho real de
herencia, mientras no se practique la inscripción del título en el registro conservatorio correspondiente,
no podrá la actora invocar dominio exclusivo en el bien raíz ubicado en Los Carrera 1459. Que Osvaldo
Burgos Hurtado ha intervenido en esta causa como tercero coadyuvante de la actora manifestando tener
interés en los resultados del juicio, en especial en la declaración de nulidad de la escritura pública de
resciliación de 29 de mayo de 1989 que aparece autorizada por el notario público de Santiago don Iván
Santibáñez Soto y en la que se contiene la disolución del contrato de compraventa celebrado el 24 de
marzo de 1981 por él y María Luisa Madrid Herrera. Su pretensión es obtener se declare nula la
escritura de resciliación porque es falso que la haya suscrito y también falso que haya sido autorizada
por el notario Santibáñez. Pide se acoja la demanda y el recurso de apelación deducido contra la
sentencia de primera instancia.
Que la escritura de resciliación, de 29 de mayo de 1989, cuya fotocopia autorizada rola a fojas 12
aparecen suscribiéndola Osvaldo Burgos Hurtado y María Luisa Madrid Herrera por la sucesión Campos
y su objeto fue dejar sin efecto la escritura pública de compraventa de fecha 24 de marzo de 1981 por la
cual ésta vendió a aquél los inmuebles que se indican en la citada escritura, indicando como
fundamento no haber podido tomar posesión material de ellos y ejercer las acciones y derechos
adquiridos.
Que doctrinariamente se define a los terceros coadyuvantes como aquellas personas que intervienen
en un juicio con posterioridad a su iniciación a sostener las mismas pretensiones o derechos armónicos
al de alguna de las partes.
De acuerdo a lo establecido en el artículo 23 del Código de Procedimiento Civil, los terceros podrán
intervenir en cualquier estado de la causa y como no se señala ninguna limitación pueden hacerlo tanto
en primera como en segunda instancia.
Ninguna duda cabe que Burgos tiene un interés en los resultados del juicio en la sentencia toda vez
que la relación jurídica que existe entre el coadyuvante y la parte coadyuvada está relacionada con el
objeto del juicio. Si no se declara la nulidad de la resciliación ésta debe producir la disolución del
contrato de venta entre éste y María Luisa Madrid y como consecuencia la nulidad de la venta que el
tercero coadyuvante hizo a la actora. (Considerandos 6º a 9º)
Corte Suprema
Propiedad intelectual. Inexistencia de acto alguno que implique la cesión del derecho de propiedad. Uso sin
autorización. Uso más allá del tiempo estipulado. Uso indebido de programa de computación. Indemnización de
perjuicios
Fecha: 16/09/1999
Rol: 2240-1997
Sumario
Corte Suprema
Nulidad absoluta de cesión de derechos hereditarios por objeto ilícito. Lesión enorme. Universalidad jurídica.
Cesión de derechos hereditarios. Estatuto jurídico aplicable. Improcedencia de nulidad por lesión enorme
Fecha: 14/09/1999
Rol: 2871-1998
Sumario
El objeto de la tradición o cesión de los derechos hereditarios no son bienes determinados, sino que
la universalidad de la herencia o una cuota de ella.
De allí que al cederse derechos hereditarios no se transfiere propiedad particular alguna en los
bienes de la herencia.
Por ello es que el artículo 1909 del Código Civil dispone que cediéndose a título oneroso un derecho
de herencia el heredero no responde sino de su calidad de tal, lo que viene a confirmar que se transfiere
la universalidad de la herencia y no bienes determinados.
Esta universalidad, que es la herencia, representa una abstracción jurídica, un continente distinto de
su contenido, porque el objeto del derecho de herencia es la universalidad del patrimonio hereditario en
conjunto y no los bienes que lo forman prácticamente.
Por tanto, se ha reconocido que el derecho de herencia o los derechos hereditarios se rigen por el
estatuto de los bienes muebles.
Que, precisado lo que antecede, debe tenerse presente que el objeto de la cesión de derechos
hereditarios convenida por los litigantes fue transferir los derechos que les correspondía sobre las
universalidades jurídicas que constituían las herencias de sus padres, es decir, sobre el patrimonio de
las mismas y no sobre bienes determinados.
No es posible, entonces, que la prohibición judicial de celebrar actos y contratos que haya afectado a
un determinado bien raíz parte de cuyos derechos podrían estar comprendidos en las universalidades
jurídicas que constituyen las herencias en materia de la cesión afecte a esta última.
La sentencia recurrida, al decidir lo contrario, infringió las normas legales recién anotadas, con
influencia en lo dispositivo de la misma, pues de no ser así debería haber desechado la demanda de
autos. (Considerandos 8º y 9º)
Corte Suprema
Derecho personal, transferencia. Cesión de crédito, requisitos. Perfeccionamiento de la cesión respecto del
deudor y terceros. Escritura pública. Medida precautoria, retención del crédito. Tercería de posesión, tercerista
Fecha: 04/08/1999
Rol: 1746-1999
Sumario
Que la tercerista invoca en su demanda su carácter de dueña y poseedora del crédito cuya posesión
reclama se le reconozca. Sin embargo de tratarse su demanda de una tercería de posesión, su actividad
probatoria la enmarca en el ámbito del dominio y no de la posesión sin recordar tal vez, que no es lo
mismo; que se puede ser dueño sin ser poseedor y ser poseedor sin ser dueño; que el dominio es un
derecho y la posesión es un hecho.
La sociedad tercerista no demostró su vínculo posesorio con el bien incorporal cuya tenencia
reclama. La vía procesal escogida (tercería de posesión) no es la que corresponde a su condición de
dueña de la cual hace derivar la posesión que invoca.
Corte Suprema
Fecha: 20/10/1997
Rol: 3270-1997
Sumario
Cualquiera que sea el efecto que haya producido el contrato de cesión de derechos en que se funda
la acción deducida, no se ha extinguido el derecho del arrendador que se hace valer para producir la
terminación del contrato de arrendamiento de que se trata.
No consta en parte alguna que el cedente haya transmitido o transferido algún derecho que recaiga
en la propiedad objeto de la litis.
Desde luego, el contrato de cesión que hizo al actor no se refiere para nada al arrendamiento y por lo
tanto la calidad de arrendador derivada de este contrato no ha sido transferida ni perdida por esta
circunstancia y el arrendamiento entre el cedente y el demandado de autos se encuentra plenamente
vigente. Ello no puede ser de otro modo puesto que la cesión de derechos personales como son los
derivados de los contratos, debe realizarse conforme a las reglas establecidas en los artículos 1901 y
siguientes del Código Civil, lo que ha sucedido en este caso.
Por otra parte, no se divisa que el cedente haya tenido derechos reales o personales en el predio en
litigio y que haya podido ceder al actor o que produzcan el efecto de extinguir su derecho de arrendar
del demandado, por lo que resulta forzoso concluir que su calidad de arrendador se encuentra aún
vigente y no se ha extinguido su derecho como tal. En consecuencia, el contrato de arrendamiento no
puede ser declarado terminado.
Finalmente, debe tenerse presente que no siendo el actor cesionario del cedente en cuanto al
arrendamiento se refiere, no tiene el derecho para ejercer la acción deducida en estos autos; es decir,
no es legitimado activo en este juicio. (Considerandos 3º a 5º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Excepción de cosa juzgada. Identidad legal de persona, improcedencia por socio y sociedad. Obligación de pago
del estado, inexistente
Fecha: 04/04/1995
Rol: 24515-1995
Sumario
En cuanto a la excepción de cosa juzgada opuesta, no obstante que en ambos recursos la cosa
pedida es idéntica, que se paguen por el fisco de Chile las sumas equivalentes a los mismos valores
hipotecarios, individualizados en el otro recurso de protección y constitutivos del aporte de la entonces
recurrente a la sociedad ahora recurrente, y la causa de pedir, exactamente la misma, que el artículo 5º
de la Ley Nº 18.900 es ilegal e inconstitucional, resulta incuestionable que no existe en la especie la
identidad legal de personas, pues en el primero es recurrente es una socia y en éste lo es la sociedad,
por aplicación de la norma de derecho común de que las sociedades forman una persona jurídica
distinta de sus socios individualmente considerados, sin que resulte procedente desconocer la exigencia
de la mencionada triple identidad a pretexto de analizar las consecuencias de una declaración de
ilegalidad o legalidad, arbitrariedad o racionalidad del acto u omisión, como lo pretende el recurrido.
Con respecto a la extemporaneidad del recurso planteada, debe considerarse que la acción aparece
deducida el 5 de diciembre, de 1994, y en el recurso se señala que desde que se publicó el extracto de
la escritura de constitución de la sociedad recurrente, 18 de noviembre de 1994, se ha solicitado a los
recurridos la restitución de los dineros, de modo que debe concluirse que la acción de protección fue
deducida en el plazo exigido en el auto acordado de la Excma. Corte Suprema sobre tramitación del
recurso de garantías constitucionales.
En el recurso se sostiene como argumento de fondo, que el artículo 7º de la Ley Nº 18.900 derogó el
Decreto Ley Nº 1.069 de 1975, eliminándose la limitación para efectuar el cobro y retiro de los dineros
invertidos en "valores hipotecarios reajustables" y "valores hipotecarios reajustables en cuenta especial",
los que fueron descongelados, quedando en consecuencia su actual depositario, el fisco de Chile, y los
restantes recurridos, obligados a pagar esas inversiones al primer requerimiento de su propietario, de
acuerdo a los contratos de depósito e inversiones celebrados.
Sin embargo, ninguna de estas convenciones expresa que el fisco, el ministerio de hacienda o la
tesorería general de la república sean continuadores de las asociaciones de ahorro y préstamo o de la
caja central de ahorros y préstamos. En efecto, la Ley Nº 18.900, publicada en el diario oficial de 16 de
enero de 1990, puso término a la existencia de dicha caja central y a la autorización de existencia de la
asociación nacional de ahorro y préstamo, sucesora de las denominadas "Casas Chile" y "Bernardo
O'Higgins", agregándose que la caja central subsiste para los efectos de liquidar los respectivos
patrimonios por el término de tres meses, señalándosele, en el artículo 2º, facultades para tal cometido.
Añade el artículo 3º que la caja en liquidación pondrá término a sus funciones dando cuenta de su
cometido, haya o no finiquitado las liquidaciones encomendadas por la ley, en las que incluirá un
inventario de todos los derechos, obligaciones y patrimonio de ésta y de la asociación. "esta cuenta,
precisa, será sometida a la consideración del presidente de la república, por intermedio del ministerio de
hacienda. Si la cuenta no fuere aprobada, la caja deberá continuar funcionando para el solo efecto de
subsanar totalmente las observaciones y reparos formulados a aquélla, dentro del plazo que le fije el
presidente de la república", concluyendo que la aprobación de la cuenta será efectuada por el
presidente de la república mediante decreto supremo y que, según estipula el artículo 5º, a contar de la
fecha de la publicación del decreto supremo aprobatorio de la cuenta, "serán de cargo fiscal las
obligaciones de la caja y de la asociación que no alcanzaren a quedar cubiertas con el producido de las
liquidaciones, debiendo consultarse los fondos necesarios en el presupuesto de la nación, en
conformidad a lo dispuesto en el artículo 21 del Decreto Ley Nº 1.263, de 1975", aludiendo a la ley
orgánica de la administración financiera del estado procede considerar lo que prescribe en su inciso 1º
el artículo 4º de la ley en cuanto a que "el producto neto de la liquidación de la caja y de la asociación
será ingresado a rentas generales de la nación". Como resulta de los antecedentes analizados que ese
proceso se encuentra pendiente, debe concluirse que los recurridos no detentan la condición de sujetos
pasivos de la acción, pues en caso alguno podrían efectuar válidamente el pago que la acción pretende,
en cuanto ninguno de ellos se confunde con el fisco de Chile, ente que aquí no ha sido requerido y único
legitimado para disponer de las "rentas generales de la nación".
Por otra parte, del análisis de las normas citadas resulta que la sociedad recurrente carece de
legitimación activa para impetrar el recurso puesto que invoca la protección de un derecho de propiedad
sobre sumas de dinero que aún no son exigibles, en tanto no se apruebe la cuenta de la caja en
liquidación y no ingresen a las arcas fiscales los valores netos de la liquidación.
En la aplicación del citado precepto no puede estimarse que existe retroactividad, como lo estima la
sociedad recurrente respecto de su derecho de propiedad sobre los contratos de cesión de créditos
hipotecarios. En efecto, en su oportunidad las obligaciones emanadas de dichos contratos no fueron
exigidas por sus titulares a la respectiva asociación de ahorro y préstamo o a la caja central; la sociedad
al recibir en aporte, tales contratos, lo hizo en el estado en que se encontraban, o sea, en la
imposibilidad de cobrarse las sumas correspondientes a cada uno de ellos, por haberse extinguido las
asociaciones de ahorro y préstamo. No obstante, subsiste para la recurrente el derecho de obtener el
pago relativo al aporte de su accionista, cumplida que sea la condición prevista en el citado artículo 5º,
de modo que procede concluir que no existe retroactividad alguna en la norma en estudio, pues está
disponiendo para el futuro, agregando a la legislación pertinente el beneficio de que el fisco de Chile
pagará las obligaciones aprobada que sea la cuenta de la liquidación de los organismos deudores.
Por lo demás y como quedó dicho, lo que aquí se viene pidiendo es que se disponga el hecho del
pago, y no que ordene la aprobación de la cuenta a que se refiere el citado artículo 5º, pues la causa de
pedir de la cautela no es la omisión en aprobar sino la renuencia en pagar.
Y no es ocioso hacer constar que la propia actora reconoce la vigencia e imperio de ese precepto,
puesto que así no fuere carecería de razón de ser el recurso de inaplicabilidad que ha intentado a su
respecto ante el supremo tribunal.
Finalmente, resulta procedente concordar con lo expuesto en el informe de los recurridos, en cuanto
a que los pagos de obligaciones del estado deben cumplir con una rigurosa normativa. Es así como el
artículo 89 de la carta fundamental prescribe que las tesorerías del estado no podrán efectuar ningún
pago sino en virtud de un decreto o resolución expedido por autoridad competente, en que se exprese la
ley o la parte del presupuesto que autorice aquel gasto, añadiendo el artículo 56 de la ley orgánica de la
contraloría general de la república que los decretos o resoluciones de pagos de fondos públicos
"deberán precisamente indicar el ítem del presupuesto o la ley especial". Por su parte, la ley orgánica de
la administración financiera del estado establece en el inciso 2º del artículo 4º que todos los gastos del
estado deberán estar contemplados en el presupuesto del sector público y en el artículo 21 se precisa:
"por decreto se determinará la ubicación que dentro de la clasificación presupuestaria corresponderá a
dichos gastos", agregando el artículo 28 los casos en que el ejecutivo puede ordenar pagos, excediendo
las sumas consultadas en los rubros correspondientes.
Corte Suprema
Derecho real de dominio. Restitución de inmueble. Derechos hereditarios sobre inmueble, cesión. Derecho a
accionar contra cedente
Fecha: 09/10/1990
Rol: 9839
Sumario
De los antecedentes que rolan en el expediente en que incide este recurso, aparece que el
demandante posee título inscrito y vigente sobre el retazo de terreno discutido por las partes, mientras
que la demandada es titular de las acciones y derechos que a su cedente correspondían en la herencia
del padre de éste, en toda clase de bienes, siendo los demandados quienes tienen la posesión material
del predio.
Corte Suprema
Fecha: 10/09/2014
Rol: 8190-2014
Sumario
En todos aquellos casos en que la acción personal —sea ejecutiva u ordinaria— no se encuentre
prescrita por haber sido interrumpido civilmente el plazo en que debe ejercerse a consecuencia de la
interposición y notificación de la demanda formulada por el acreedor en contra del deudor personal,
dicho efecto se proyecta también respecto del tercer poseedor de la finca hipotecada, pues si se
mantiene plenamente vigente la obligación principal a que accede la hipoteca ha de subsistir la acción
hipotecaria como el medio para realizarla. En otras palabras, mientras conserve su vigor la obligación
principal, esto es, en tanto prosiga el juicio seguido en contra del deudor personal en señal de que el
acreedor manifiesta actividad para cobrar el crédito que se le adeuda, la hipoteca que lo garantiza y la
acción hipotecaria que de ella emana no puede verse menoscabada en su perjuicio, o lo que es lo
mismo, la acción hipotecaria no prescribe independientemente, sino como consecuencia de la
prescripción extintiva del crédito que se tiene contra el deudor principal. De lo expuesto procede colegir,
indefectiblemente, que si la prescripción extintiva de la acción personal emanada de la obligación
principal se ha interrumpido en perjuicio del deudor personal, ello surte plenos efectos jurídicos en
detrimento también del tercer poseedor o garante hipotecario sin que pueda éste reclamar que el plazo
de prescripción de la acción hipotecaria de desposeimiento incoada en su contra no se ha interrumpido.
(Considerando 5º)
La acción hipotecaria contra el tercer poseedor es inseparable de la acción contra el deudor directo o
personal y, por ende, prescribe conjuntamente con ella. De lo anterior se sigue que, mientras esté
vigente la acción del acreedor para perseguir el crédito de parte del deudor personal, no puede estar
prescrita la acción hipotecaria referida a la hipoteca que garantiza el pago de la deuda. En relación con
lo afirmado, no se puede soslayar que en el pleito seguido en contra del deudor personal se desestimó
en definitiva declarar abandonado el procedimiento, por lo que al notificarse la demanda y requerirse al
demandado en su calidad de tercer poseedor de la finca hipotecada el 18 de mayo de 2012 y 2 de enero
de 2013, respectivamente, el juicio seguido en contra del deudor personal estaba vigente, sin que entre
sus diversas actuaciones haya transcurrido el lapso de tres años que autoriza decretar el abandono, y
por tanto, sus efectos no pueden restringirse hasta el 25 de enero de 2008 y de esa manera acceder a
la excepción de prescripción (Considerando 8º).
Juicio de cuentas. No procede alzamiento de medidas precautorias si no se acredita que circunstancias por las
que se aplicaron no han variado. I. Retención de dineros. II. Prohibición de celebrar actos o contratos
Fecha: 27/08/2014
Rol: 2702-2013
Sumario
Es relevante para la resolución de la presente apelación, tener presente las normas previstas en el
Título V del Libro II del Código de Procedimiento Civil, referido a las medidas precautorias, y
especialmente lo previsto en el artículo 295 del citado texto legal que señala "la retención de dineros u
otras cosas muebles, podrán hacerse en poder del mismo demandante, del demandado o de un tercero,
con relación a los bienes que son materia del juico, y también respecto de otros bienes determinados del
demandado, cuando sus facultades no ofrecen suficientes garantías, o hayan motivo racional para creer
que procurará ocultar sus bienes y en los demás casos determinados por la ley". Asimismo el
artículo 301 del mismo texto legal, señala "todas estas medidas son esencialmente provisionales, en
consecuencia, deberán hacerse cesar siempre que desaparezca el peligro que se ha procurado evitar o
se otorguen cauciones suficientes", del tenor del escrito mediante el cual se solicita el alzamiento de la
medida precautoria, queda en evidencia la precaria situación financiera de la sociedad, que por otra
parte no existen antecedentes que acrediten que han variado las circunstancias que se tuvo en
consideración al momento que se decretó la citada medida, y en consecuencia no concurren los
presupuestos del artículo 301 del Código de Procedimiento Civil, de esta forma se deberá acoger el
recurso de apelación interpuesto, en representación de la parte demandante (Considerandos 4º y 5º de
la sentencia) II. Para la resolución de la presente apelación, en necesario tener presente las normas
previstas en el Título V del Libro II del Código de Procedimiento Civil, referido a las medidas
precautorias, y especialmente lo previsto en el artículo 296 del citado texto legal que señala "la
prohibición de celebrar actos o contratos podrá decretarse con relación a los bienes que son materia del
juicio, y también respecto de otros bienes determinados del demandado, cuando sus facultades no
ofrezcan suficientes garantías para asegurar el resultado del juicio (...)" asimismo el artículo 301 del
mismo texto legal, señala "todas estas medidas son esencialmente provisionales, en consecuencia,
deberán hacerse cesar siempre que desaparezca el peligro que se ha procurado evitar o se otorguen
cauciones suficientes". Del análisis de la solicitud de alzamiento de la medida precautoria, no aparecen
antecedentes suficientes para estimar que han variado las circunstancias que permiten en conformidad
del artículo 301 del Código de Procedimiento Civil, para dejar sin efecto las medidas precautorias, en
consecuencia se acogerá en esta materia dicha apelación (Considerando 4º y 5º).
Cumplimiento de contrato. Cumplimiento íntegro y oportuno a la obligación contraída se satisface pagando los
intereses convenidos. Daño emergente o daño material. No procede se impute responsabilidad por gastos en que se
incurrió en la gestión preparatoria de la vía ejecutiva si hubo desistimiento de la misma
Fecha: 10/07/2014
Rol: 4018-2013
Sumario
La demanda de cumplimiento de contrato interpuesta por el actor en contra de (...), será acogida,
toda vez que se ha establecido en forma fehaciente que la demandada no dio cumplimiento íntegro y
oportuno a la obligación contraída, motivo por el cual, ésta se satisface pagando los intereses
convenidos en las cláusulas sexta y undécima del contrato, desde la fecha en que venció cada una de
las cuotas no pagadas —una de la factura Nº 71 y dos de la factura Nº 72— hasta la fecha en que
efectivamente se efectúe el pago; obligación a la que también queda condenado don (...), por haberse
constituido en fiador y codeudor solidario de las obligaciones presentes y futuras de las que debe
responder la demandada (Considerando 14).
El daño emergente o daño material ha sido definido como aquel menoscabo o detrimento que se
produce en el patrimonio de una persona; situación que esta corte estima que no concurre en autos,
pues si bien el actor probó los gastos y costas en que incurrió en la gestión preparatoria de la vía
ejecutiva deducida en contra de Televisión Nacional de Chile, consta también que se desistió de la
gestión, no siendo procedente que se le impute responsabilidad por tales gastos a la demandada si, por
propia voluntad el demandante se desistió, máxime si no había recibido en su totalidad el monto que en
dicha gestión cobraba. Tampoco consta que haya convenido en el contrato de factoring que
correspondía al demandado hacerse cargo de los gastos y costos que se produjeren con motivo del
ejercicio de las acciones de cobro (Considerando 16).
Terminación inmediata del contrato de arrendamiento por no pago rentas. Codeudor solidario. Prórroga expresa
de la competencia de tribunales. Prórroga de competencia surte efecto si codeudor solidario concurrió al acto en el
cual se pacta la prórroga
Fecha: 09/07/2014
Rol: 3210-2014
Sumario
La incompetencia alegada por el codeudor solidario ha sido correctamente desestimada por el juez a
quo. En efecto (el recurrente) compareció a la celebración del contrato de arrendamiento como
representante legal de la sociedad arrendataria y como codeudor solidario todo en un mismo
instrumento. En dicho acto, la arrendadora y la arrendataria prorrogaron expresamente la competencia a
los tribunales de la ciudad de Santiago, el (recurrente) firmó dicho instrumento que contiene la prórroga,
aceptando incluso todas las modificaciones que las partes puedan introducir al contrato, sin necesidad
de notificación, de manera que presente a dicho acto, tanto como representante de la demandada y
como codeudor, su voluntad necesariamente fue la de prorrogar la competencia, sin que pueda
aceptarse que la misma persona natural por una calidad acepte la prórroga pactada y por la otra no. El
artículo 185 del Código Orgánico de Tribunales en el que se asila el recurrente, resguarda a aquel
codeudor que se constituye como tal en un instrumento distinto al que contiene la obligación que
pretende garantizar, mas no así a quien comparece al mismo acto en el cual se pacta la prórroga y sin
que aparezca de algún modo una intención en disentir de aquella (Considerandos 2º y 3º).
Prohibición de celebrar actos y contratos. No se acreditan motivos graves y calificados para aplicar medida
prejudicial
Fecha: 13/06/2014
Rol: 3289-2013
Sumario
La corte, analizados los antecedentes, es de opinión que resulta excesiva la medida prejudicial
precautoria que se impuso sobre nueve vehículos motorizados de propiedad del demandado, ya que no
se acreditan los motivos graves y calificados que lo justifiquen respecto de tales bienes, ni respecto de
la situación patrimonial del demandado, que sin embargo, estima, asimismo, que lo expuesto amerita
que se otorguen al actor seguridades respecto del cumplimiento efectivo de lo que en definitiva se
resuelva, por lo que se hará lugar a su planteamiento subsidiario. (Considerando 7º).
Corte Suprema
Fecha: 19/05/2014
Rol: 6775-2013
Sumario
La cláusula de aceleración puede extenderse valiéndose de formas verbales imperativas o
facultativas, de manera que en el primer caso, verificado el hecho del retardo o la mora, la obligación se
hará íntegramente exigible, independientemente que el acreedor manifieste su voluntad en orden a
ejercer el derecho que le confiere la estipulación, mientras que en el segundo, esa total exigibilidad
dependerá del hecho que el titular de la acreencia exprese su intención de acelerar el derecho al cobro
de la obligación. La diferencia en el carácter o naturaleza de la cláusula no está en el hecho que origina
la exigibilidad, ni tampoco en la facultad de cobrar el crédito adeudado, pues éste es un elemento
consustancial a la titularidad del derecho, sino lo determinante son los términos en que se describe la
exigibilidad. En la especie, la cláusula de aceleración redactada en los siguientes términos "el no pago
oportuno de cualquier de las cuotas de capital y/o de interés comprendidos en esta obligación, dará
derecho al acreedor a hacer exigible de inmediato y anticipadamente el monto total del saldo insoluto
adeudado a esa fecha, el que desde esa misma fecha se considerará de plazo vencido y devengará a
favor del acreedor o de quien sus derechos represente, el interés máximo convencional que rija durante
la mora o simple retardo", envuelve una facultad para el acreedor, de modo tal que la anticipación que
ella contiene ha de desplegarse desde la fecha en que aquél manifiesta inequívocamente su voluntad en
orden a caducar en forma antelada el plazo convenido para saldar las cuotas de la obligación y que aún
no se han devengado, intención que se materializa con la presentación de la demanda, fecha a partir de
la cual la deuda se concentra en una cuota única y comienza a correr el plazo de prescripción
(Considerandos 4º a 6º de la sentencia de casación).
En definitiva, en el caso del deudor principal, la demanda se notificó válidamente antes que venciera
el plazo de un año de prescripción de la acción cambiaria, que establece el artículo 98 de la Ley
Nº 18.092, por lo que a su respecto corresponde rechazar dicha excepción y seguir adelante con la
ejecución; no ocurre igual con el avalista y codeudor solidario, a quien la demanda se le notificó cuando
ya había transcurrido el término de prescripción aludido, sin que tampoco opere en su perjuicio la
interrupción natural de la obligación, en razón de lo cual la prescripción extintiva de la obligación será
aceptada a su favor (Considerandos 2º y 3º de sentencia de reemplazo).
Juicio ejecutivo. Pagaré. Pagaré en que no consta quien suscribió. Solidaridad. Avalista, fiador y codeudor
solidario
Fecha: 02/05/2014
Rol: 139-2014
Sumario
El artículo 1514 del Código Civil señala que el acreedor podrá dirigirse contra todos los deudores
solidarios conjuntamente, o contra cualquiera de ellos a su arbitrio, sin que por éste pueda oponérsele el
beneficio de división. Por consiguiente, no existe impedimento legal para dar curso a la acción ejecutiva
deducida en contra patricio del tránsito arriagada Martínez, en su calidad de avalista, fiador y codeudor
solidario, al tenor de lo dispuesto en el artículo 441 del citado código adjetivo, sin perjuicio de las
alegaciones o excepciones que éste pueda hacer valer en el curso de la ejecución. (Considerandos 5º y
6º).
Corte Suprema
Prescripción extintiva. Efecto relativo de la interrupción de la prescripción en las obligaciones solidarias. Ley
sobre letra de cambio y pagaré. El efecto de la interrupción de la prescripción opera únicamente en contra de aquel
demandado a quien se ha notificado la demanda judicial de cobro del pagaré
Fecha: 29/04/2014
Rol: 6296-2013
Sumario
El título ejecutivo esgrimido en esto autos consiste en un pagaré, luego toca precisar que es lo que la
Ley Nº 18.092 sobre letra de cambio y pagaré, establece en relación con esta materia. En efecto, los
artículos 4º y 13 del Código Civil, consagran el principio de la especialidad de la ley, otorgando primacía
en aquellas normas relativas a cosas o negocios particulares, sobre las disposiciones generales; y
conforme al primero de esos preceptos, las disposiciones contenidas en el código de comercio, y demás
especiales, se aplicarán con preferencia a las del Código Civil. A su turno, el artículo 3º del Código de
Comercio señala que son actos de comercio las operaciones sobre letras de cambio, pagarés y cheques
sobre documentos a la orden, cualquiera que sea su causa y objeto y las personas que en ellas
intervengan. De lo dicho no cabe duda que la Ley Nº 18.092, que contiene normas sobre letra de cambio
y pagaré, constituye una ley de carácter especial, cuyas disposiciones deben aplicarse con preferencia a
las del Código Civil. El artículo 100 de la citada ley, en lo pertinente, dispone que: "la prescripción se
interrumpe sólo respecto del obligado a quien se notifique la demanda judicial de cobro de la letra (...)".
Similar regulación se reitera en los incisos siguientes, en el sentido de que la interrupción es acotada,
siempre, "respecto del obligado" a quien se notifica o que observa una conducta que importe el
reconocimiento de su calidad de tal. Cabe recordar que por expresa disposición del artículo 107 de la
Ley Nº 18.092, la referida norma relativa a la letra de cambio resulta del todo aplicable al pagaré y en lo
que importa a este recurso, al título materia de la ejecución de autos. Con estricto apego al texto legal
transcrito, resulta de toda evidencia que el efecto de la interrupción de la prescripción es, en todo caso,
personal y relativo, vale decir, en lo que interesa, que opera únicamente en contra de aquel demandado
a quien se ha notificado la demanda judicial de cobro del pagaré. Luego, de ese mismo texto se infiere
que cuando se regula tal efecto del modo señalado, la ley no hace distingo alguno, en términos que no
cabe al intérprete distinguir (Considerandos 6º a 8º).
Fecha: 02/04/2014
Rol: 428-2013
Sumario
Agencia oficiosa. Presupuestos procedencia. Es facultad del tribunal autorizar la comparecencia de una persona
en calidad de agente oficioso. Aquella parte que ha concurrido a materialización de la nulidad está impedida de
solicitarla. Apreciación de la prueba. Sana crítica. Hechos de la causa. Carga probatoria
Fecha: 11/02/2014
Rol: 402-2013
Sumario
El legislador contempló la agencia oficiosa para la situación que se produce cuando una persona
comparece ante un tribunal, asumiendo la representación de otra sin patrocinio ni mandato constituido
en su favor, pero ofreciendo la ratificación posterior de todo lo obrado por parte de quien ha debido ser
el mandante. Los supuestos para que concurra esta representación especial son los siguientes: a.- el
agente oficioso debe ser habilitado para comparecer en juicio o en caso contrario debe actuar
representado por alguien que lo sea; b.- deben invocarse causales calificadas que hayan impedido al
representado comparecer; c.- ofrecer una garantía de que lo obrado será ratificado. El tribunal califica
las circunstancias y puede o no aceptarlas. Si el tribunal las acepta, se debe constituir la garantía, que
normalmente es una fianza (fianza de rato): si lo obrado no es ratificado posteriormente, se produce la
nulidad de lo obrado (efecto procesal), y el fiador deberá responder de los perjuicios causados (efecto
civil) (Considerandos 4º y 5º).
Ficha 11 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Sólo resultan obligados bienes propios para el caso en que el marido se constituya en aval. Se requiere
autorización de la mujer cuando se obliguen bienes sociales
Fecha: 16/01/2014
Rol: 14246-2013
Sumario
Se observa que los sentenciadores, al rechazar la demanda, han hecho una correcta interpretación y
aplicación de la normativa atinente al caso de que se trata, toda vez que del tenor literal del inciso 5º del
artículo 1749 del Código Civil estableció un efecto propio para el caso que el marido se constituya en
aval, fiador o codeudor solidario, y que debe primar sobre la sanción de nulidad establecida en el
artículo 1757, cual es, que sólo resultarán obligados sus bienes propios. Por el contrario, y tal como se
establece en el inciso siguiente, se requerirá autorización de la mujer cuando se obliguen los bienes
sociales, lo que, tal como ha quedado establecido en la sentencia que se revisa, no se manifestó en
forma alguna en el pagaré acompañado en autos. De esta manera, al no ser necesaria la autorización
de la mujer, no resulta posible declarar la nulidad del aval constituido. (Considerando 4º).
Corte Suprema
Fecha: 12/11/2013
Rol: 2779-2013
Sumario
Cobro de prestaciones laborales. Agencia oficiosa, concepto y requisitos. Procedimiento monitorio exige que el
mandatario tenga poder para transigir. Procedencia de la representación especial mediante agente oficioso en el
procedimiento monitorio. Causal de nulidad de infracción de derechos o garantías constitucionales. Voto disidente:
agencia oficiosa no procede tratándose del procedimiento monitorio
Fecha: 30/08/2013
Rol: 263-2013
Sumario
La agencia oficiosa se produce cuando una persona comparece ante un tribunal, asumiendo la
representación de otra sin patrocinio ni mandato constituido en su favor, pero ofreciendo la ratificación
posterior de todo lo obrado por parte de quien ha debido ser el mandante. Esta institución procesal tiene
como supuestos: a) que el agente oficioso esté habilitado para comparecer en juicio o en caso contrario
debe actuar representado por alguien que lo sea; b) que se invoquen causales calificadas que hayan
impedido al representado comparecer; c) que se ofrezca una garantía de que lo obrado será ratificado.
Corresponde al tribunal calificar las circunstancias y puede o no aceptarlas. Si el tribunal las acepta, se
debe constituir la garantía, que normalmente es una fianza. Si lo obrado no es ratificado posteriormente,
se produce la nulidad de lo obrado y el fiador deberá responder de los perjuicios causados
(Considerandos 7º y 8º de la sentencia de la Corte de Apelaciones). Por otro lado, que el mandatario en
el procedimiento monitorio esté revestido de poder para transigir, tiene como finalidad hacer efectiva, en
forma inmediata y sin dilaciones, la alternativa de una eventual conciliación, a la luz de aquel
procedimiento. En él se prevé una audiencia única y concentrada de contestación, conciliación y prueba,
en la cual se habrá de zanjar la controversia, sea a través de un acuerdo o, en su defecto, por decisión
jurisdiccional, luego de haber escuchado al juez, a las partes y recibida y ponderada la prueba aportada
por éstas (Considerando 9º).
Corte Suprema
Hipoteca. En nada perjudica al acreedor que el deudor enajene el bien hipotecado. Derecho de persecución del
inmueble hipotecado. Acción se puede dirigir contra tercero en la deuda y actual propietario. Presupuestos
procedencia prescripción. Hipoteca no puede extinguirse por prescripción independientemente de la obligación que
garantiza
Fecha: 02/07/2013
Rol: 3210-2013
Sumario
Si bien la hipoteca constituye una limitación en el dominio, motivo por el cual el dueño del inmueble
hipotecado no podrá ejercer sus facultades de modo absoluto, no obsta a que aquel mantenga otras
atribuciones. De tal suerte que estando la deuda garantizada con hipoteca y antes que se dirija acción
contra la finca hipotecada, el dueño goza de la facultad de usar, gozar y disponer de ella, lo cual se
justifica desde que en nada perjudica al acreedor la circunstancia que el deudor enajene el bien, pues la
hipoteca subsiste y aquel tiene derecho de persecución. En efecto, el acreedor goza de dos acciones, la
personal para dirigirse contra el deudor de la obligación y la real para perseguir la finca hipotecada,
adquiriendo relevancia esta última en aquellos casos en los cuales el predio pasa a poder de un tercero
cuando quien ha constituido la hipoteca ha sido quien tiene tal calidad. Es decir, se puede perseguir la
finca hipotecada de manos de terceros poseedores, entendiéndose por tal a todo aquel que es dueño
del inmueble gravado y que no se ha obligado personalmente al pago de la deuda.
Cuando algún crédito ha sido garantizado con hipoteca, el acreedor tiene derecho, al momento de
hacerse exigible el pago de esa deuda, a perseguir el inmueble hipotecado de manos de aquél en cuyo
poder se encuentre, pudiendo el acreedor dirigir la acción en contra del tercero en la deuda y actual
propietario, con el objeto de obtener el pago de la obligación con el producto de la enajenación de la
finca hipotecada, caso en el cual estamos precisamente en presencia de la acción que ha sido
impetrada en estos autos, esto es, de desposeimiento. En efecto, de la hipoteca nace una acción real,
cual es, la acción hipotecaria. Este hecho implica que si bien el acreedor puede pretender el pago de su
crédito en la realización del bien hipotecado o de otros bienes del deudor personal —en virtud del
derecho de prenda general que tiene sobre todos ellos—, en el evento de no haberlos o ser éstos
insuficientes, podrá siempre dirigirse contra quien tenga en su poder el inmueble hipotecado, por cuanto
la ley le confiere el derecho a perseguir la realización del mismo para el pago de su acreencia, de
manos de quien se encuentre, que puede ser perfectamente una persona distinta al deudor personal,
según lo prescribe el artículo 2428 del Código Civil que en su inciso 1º señala: "la hipoteca da al
acreedor el derecho de perseguir la finca hipotecada, sea quien fuere el que la posea y a cualquier título
que la haya adquirido" (Considerandos 7º y 8º).
Para que la prescripción opere son exigencias, primero, la inactividad del acreedor, el cual deja de
ejercer un derecho del cual es titular y, segundo, que dicha inactividad se mantenga por el tiempo que la
ley prescribe. De lo dicho resulta que la prescripción es una sanción para el acreedor que deja
transcurrir el tiempo sin ejercer el derecho del cual era titular y, a su vez, constituye un beneficio para el
deudor desde que al acogerse a tal institución le permite eximirse del cumplimiento de la obligación que
le correspondía. A los requisitos mencionados deben agregarse los siguientes: que la acción sea
prescriptible, esto es, que legalmente sea posible que se extinga por su no ejercicio; que el deudor que
desee aprovecharse de la prescripción la alegue, por cuanto no puede ser declarada de oficio, y que la
prescripción no se encuentre interrumpida, suspendida ni renunciada.
Corte Suprema
Crédito garantizado con hipoteca faculta al acreedor a perseguir el inmueble hipotecado de manos de aquél en
cuyo poder se encuentre. Acción hipotecaria prescribe junto con la obligación a que accede
Fecha: 07/11/2012
Rol: 3270-2011
Sumario
El carácter de tercero poseedor se caracteriza por haber adquirido un bien raíz sobre el que ya
pesaba la caución hipotecaria —preexistente— o sobre el cual se constituye el gravamen para cautelar
el cumplimiento de obligaciones ajenas. En tal hipótesis, adquiere vigor para el acreedor el derecho de
persecución para dirigirse en contra del tercero por medio de la acción de desposeimiento, en
conformidad a lo dispuesto en el artículo 2428 del Código Civil. De lo anterior se colige que un crédito
garantizado con hipoteca trae por consecuencia que el acreedor tiene derecho, al momento de hacerse
exigible el pago de esa deuda, a perseguir el inmueble hipotecado de manos de aquél en cuyo poder se
encuentre, pudiendo entonces dirigir la acción real hipotecaria contra el tercero en la deuda y actual
propietario, con el objeto de obtener el pago de la obligación con el producto de la enajenación de la
finca gravada.
Cabe volver a recalcar el carácter accesorio que tiene la hipoteca, según el cual, la acción hipotecaria
que de ella se genera no puede extinguirse por prescripción mientras no prescriba la obligación del
deudor personal que garantiza. Es lo que, en plena concordancia con las normas establecidas en los
artículos 46, 1442 e inciso 1º del artículo 2434 del Código Civil, dispone imperativamente el
artículo 2516 del mismo cuerpo legal: "la acción hipotecaria, y las demás que procedan de una
obligación accesoria, prescriben junto con la obligación a que acceden". (Considerandos 6º y 7º).
Ficha 16 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Cobro de pesos, acogido. Responsabilidad del propietario del vehículo involucrado en un accidente de tránsito.
Pago efectuado por deudor solidario no interesado. Codeudor solidario no interesado debe ser considerado fiador.
Acción de reembolso y acción de subrogación. Plazo de prescripción de la acción de reembolso se computa desde
el pago efectuado por el codeudor solidario
Fecha: 24/09/2012
Rol: 1962-2010
Sumario
De acuerdo al artículo 1522 del Código Civil, el obligado solidario no interesado debe ser considerado
como fiador de la obligación pagada, disponiendo para reembolsarse precisamente de la acción de
reembolso que la ley concede a aquél en el artículo 2370 del mismo código, acción esta de carácter
ordinario, ya que la ley no ha fijado un plazo especial de prescripción de la misma, por lo que prescribe
en cinco años contados desde que se ha hecho exigible la obligación. Sin perjuicio de lo anterior,
conforme al artículo 1610 Nº 3, el codeudor solidario dispone además de la acción subrogatoria.
Corte Suprema
Cuando avalista concurre a firmar letra de cambio sin restricciones se genera situación de solidaridad pasiva
especial de índole cambiaria que es distinta de la solidaridad regulada en el derecho común
Fecha: 10/11/2011
Rol. 319-2011
Sumario
Refiriéndose a esta materia, don Edinson Lara Aguayo, en su obra "El aval cambiario", señala: "por
otra parte, se ha de tener en cuenta que todos los que firmen una letra de cambio, conforme al
artículo 79 de la ley cambiaria y del pagaré, sea como "libradores, aceptantes o endosantes", responden
solidariamente frente al tenedor del pago de la letra.
Se observa que el legislador excluyó u olvidó al avalista, al igual que lo hizo el derogado artículo 703
del Código de Comercio, que contemplaba la acción directa y de regreso, indistintamente y otorgaba el
derecho a exigir el reembolso del importe de la letra y gastos del librador, aceptante endosatario, a su
elección. Todos eran responsables solidarios del valor de la letra y gastos causados; pero, como se dijo,
con precedencia, tampoco se incluyó al avalista.
No obstante, puede decirse que la apuntada omisión queda reparada o integrada por otro precepto.
El párrafo 2º del artículo 47 de la ley cambiaria y del pagaré establece que, concedido el aval sin
limitaciones, el avalista de la letra responde del pago de ella en los mismos términos que la ley impone
al aceptante. Por consiguiente, el avalista también respondería en forma solidaria cuando se otorga el
aval sin limitaciones, dado que responde de igual manera que el aceptante; esto es, "como si fuera el
autor de (o a él fuera imputable) la declaración del avalado". De otro modo, se afectaría la seguridad y la
celeridad del tráfico jurídico y económico.
En suma, el avalista cuyo aval se ha contraído sin limitaciones responde en las relaciones externas,
es decir, frente a terceros, como si fuera el obligado directo y principal ante los tenedores del título frente
a los cuales responde formalmente el avalado. El portador de la letra podrá reclamar el pago de la
misma si la letra no es atendida, ad libitum, directamente al avalista que asumió la posición cambiaria
del avalado (del aceptante), sin perjuicio de demandar sólo al aceptante o sólo al avalista y, en fin, en
forma conjunta a los dos" (El aval cambiario. Aspectos fundamentales de su problemática jurídica
(doctrina, jurisprudencia y derecho comparado)". LexisNexis. Santiago de Chile, 2005, pp. 102-103).
Corte Suprema
Indemnización de perjuicios, acogida. Conflicto entre los socios de una sociedad. Disolución de la sociedad.
Causal de renuncia de uno de los socios. Desavenencias entre socios. Renuncia fundada en un motivo grave. Socio
que paga una deuda social. Falta de recursos de la sociedad. Demás socios deben resarcir a aquel que paga una
deuda social. Improcedencia del beneficio de excusión
Fecha: 04/03/2011
Rol: 7755-2010
Sumario
II. No siendo discutido que el actor pagó una deuda social, se da el caso que a falta de recursos de la
sociedad para restituir esa suma de dinero, el artículo 2089 del Código Civil ha previsto que habrá lugar
a que cada uno de los socios indemnice los perjuicios que dicho desembolso le ha provocado al socio, a
prorrata de los derechos que les corresponden en el interés social. La falta de recursos de la sociedad
queda de manifiesto del solo hecho que el demandante hubo de efectuar el pago, más si se considera
que la sociedad no tuvo cómo responder, por lo que resulta procedente reclamar la indemnización para
que pueda, el socio que efectuó el pago, resarcirse del perjuicio que le ha significado haber tenido que
pagar personalmente una deuda social sin que los otros socios hayan contribuido a solventar la deuda
social. No resulta aplicable el beneficio de excusión, previsto en el artículo 2357 del Código Civil para el
caso que se haga exigible la deuda del fiador, puesto que el artículo 2089 estatuye una regla especial y
de equidad, al prever la indemnización que pesa sobre los demás socios para resarcir a aquel que en
interés de los propios socios debió subvenir a cubrir una deuda societaria. (Considerando 46).
Corte Suprema
Carácter contractual de la fianza. Fianza simple y fianza hipotecaria o prendaria. El consentimiento del fiador no
se presume. Triple derecho que la hipoteca concede al acreedor. El derecho de persecución. Concepto
Fecha: 03/01/2011
Rol: 6100-2009
Sumario
De conformidad con lo prevenido en el artículo 2335 del Código Civil, la fianza es una obligación
accesoria, contraída para la seguridad de otra ajena, que será cumplida por el fiador, en todo o parte, si
el deudor principal no la cumple y puede emanar, ya del contrato, de la ley o de la declaración
jurisdiccional (de entre las varias clasificaciones que admite la fianza, se cuenta aquella que distingue
diversos tipos de fianza, según sea la caución que de ésta se siga. Así, la fianza simple o desprovista de
otro tipo de vínculo de garantía, constitutiva de la típica caución personal, es con ocasión de la cual el
acreedor puede perseguir su crédito en el patrimonio del fiador, además del patrimonio del deudor,
teniendo presente los alcances del beneficio de excusión que acompaña el carácter subsidiario de la
obligación en comento. Pero, también la fianza puede ser hipotecaria o prendaria, atendiendo a la
constitución de alguno de estos derechos reales para la seguridad en el cumplimiento de la obligación
principal; confluyen aquí las peculiaridades de la caución personal y real, resultando ser una de sus
consecuencias el que el acreedor contará, tanto con la acción personal emanada de la fianza, como de
la acción real derivada del contrato de prenda o hipoteca, midiendo ejercer la acción adscrita a esta
última, incluso, en contra del tercero a cuyas manos haya pasado el bien hipotecado. (Considerandos 5º
y 6º).
Para revisar hechos del juicio es necesario denunciar infracción a leyes reguladoras de la prueba
Fecha: 26/08/2010
Rol: 2760-2010
Sumario
Que sin perjuicio de lo expresado y sólo a mayor abundamiento, el artículo 43 Nº 1 de la ley de
quiebras, prescribe que cualquiera de los acreedores podrá solicitar la declaración de quiebra, aun
cuando su crédito no sea exigible, en los siguientes casos: 1º cuando el deudor ejerza una actividad
comercial, industrial, agrícola o minera y; 2º cuando haya cesado en el pago de una obligación mercantil
con el solicitante, cuyo título sea ejecutivo. Que esta corte ha sostenido (por ejemplo en fallo Rol
Nº 6315-07) que la actividad comercial que se exige al deudor para configurar la referida causal debe
ser habitual, y que si bien los deudores al constituirse en aval de la sociedad obligada al pagaré
ejecutaron un acto de comercio, ello no basta por sí sólo para otorgarles la calidad de comerciantes,
puesto que el artículo 43 Nº 1 de la citada ley exige que el deudor ejerza una actividad comercial.
Acerca de lo que se manifiesta don Álvaro Puelma Accorsi, en la obra Curso de derecho de quiebras,
Editorial Jurídica de Chile, 1985, p. 36, afirma: "que el ejercicio de la actividad económica determinada
que exige la ley para los efectos de la quiebra debe ser permanente, no ocasional, ya que no
consideramos ejercicio de una actividad la realización ocasional de actos que no expliciten un efectivo y
permanente ejercicio de la actividad requerida por la ley. Como la ley no requiere en la actualidad para
los efectos analizados la calidad de 'comerciante', 'industrial', 'agricultor' o 'minero' sino el ejercicio de
dichas actividades, habrá que probar el efectivo ejercicio de ellas, aún tratándose de sociedades cuyo
objeto social de mercantil, agrícola o minero".
Que, en vista de esta premisa normativa, la falta de plausibilidad de lo planteado por el solicitante
resulta manifiesta, al haber quedado fijado como hecho de la causa que no se justificó que los
demandados ejercen habitualmente actos de comercio y que hagan de él su profesión habitual.
(Considerandos 6º y 7º).
Efecto de cosa juzgada se produce siempre que exista la triple identidad a que se refiere el artículo 170 del
Código de Procedimiento Civil
Fecha: 25/05/2010
Rol: 2850-2008
Sumario
Que de la cláusula transcrita se desprende que el causante se obligó como fiador y codeudor
solidario a todo a cuanto asciende la obligación de que daban cuenta los pagarés, es decir, la garantía
otorgada no se extendió sólo a la obligación cambiaria, sino al negocio causal mismo, en este caso, a
los dos contratos de mutuo. No se opone a la interpretación anterior el hecho de que en las solicitudes
de crédito, se consigne que Rolando Ward, sería aval de los préstamos, por cuanto lo importante no es
lo ofrecido sino lo declarado y en definitiva expresamente pactado por el obligado.
En la fianza solidaria se combinan dos cauciones personales, como son la fianza y la solidaridad
pasiva, pero al declarar que el garante se obliga como fiador y codeudor solidario, tal manifestación de
voluntad demuestra sin lugar a dudas que la intención es asegurar la obligación asumida por la deudora,
configurándose un prueba expresa de que no tiene interés en la deuda por ser un tercero que otorga
caución personal y, en esos términos, en su relación con el acreedor es la de un deudor directo y no
subsidiario, tal como lo autoriza el artículo 1522 del Código Civil. Se rige por los principios de la
solidaridad y uno de estos es el consignado en el artículo 1514 del citado texto legal, que da derecho al
acreedor para perseguir a cualquiera de los deudores solidarios y por tanto, no goza del beneficio de
excusión.
Decimotercero: que, en estas condiciones y como ya se dijo, siendo el fiador y codeudor solidario
respecto al acreedor un deudor directo, para efectos del cobro de la obligación tiene aplicación la norma
del artículo 1523 del Código Civil, que dispone: "los herederos de cada uno de los deudores solidarios
son entre todos ellos obligados al total de la deuda, pero cada heredero será solamente responsable de
aquella cuota de la deuda que corresponda a su porción hereditaria". En la especie, el actor dirige su
acción de cobro contra todos los obligados, es decir, la sociedad y los herederos de causante
conjuntamente, y estos últimos, representan a la persona del garante. Por otro lado, sin la firma de los
pagarés y su garantía no se otorgaba el mutuo, como lo reconocen los herederos, quienes afirman que
efectivamente los dineros fueron recibidos por el causante una vez suscritos los instrumentos. Además,
la declaración contenida en ellos, en la de pagar las obligaciones que allí se indican y de que la deuda
es indivisible. (Considerandos 12 y 13).
Fianza solidaria con cláusula de garantía general. Título ejecutivo. Prescripción extintiva
Fecha: 18/01/2010
Rol: 3627-2008
Sumario
No existe impedimento jurídico alguno para aceptar que, en un mismo procedimiento, concurra más
de un título dotado de fuerza o mérito ejecutivo. En efecto, el título ejecutivo no necesariamente debe
constar en un solo documento, sino que puede estar integrado por varios, siempre que entre ellos
existan conexiones jurídicas concurrentes e incluso posteriores a la formación del título documental, sin
que con ello se desvirtúe la exigencia de que el título ejecutivo debe bastarse a sí mismo.
(Considerando 5º).
La prescripción supone que se contabilice el término necesario para que el derecho se extinga y en
tal sentido cobra importancia la señalada "interrupción de la prescripción" por cuanto aquélla produce el
efecto de detener el cómputo del tiempo, con lo cual por una parte la prescripción no sigue corriendo y,
a su vez, hace que se pierda el término anterior que alcanzó a transcurrir para el evento que la
prescripción comenzara nuevamente a correr. (Considerando 11)
Alzamiento de hipoteca. Acogido. Cláusula de garantía general. Tercer poseedor de la finca hipotecada.
Alzamiento en caso que no existan deudas pendientes. Libertad bienes hipotecados si no existe obligación actual
Fecha: 22/01/2009
Rol: 1962-2007
Sumario
El tercer poseedor de la finca hipotecada, que ha otorgado hipoteca a favor del deudor con cláusula
de garantía general, puede pedir su alzamiento si no existe deuda actual pendiente.
Cuando la propiedad del bien hipotecado pertenece al dominio de un tercero, distinto del deudor,
nacen dos relaciones jurídicas separadas, una crediticia o principal entre deudor y acreedor y otra entre
el tercer poseedor y el acreedor, cuya única participación es de caucionar la obligación contraída por el
deudor. Cuando deudor principal y deudor hipotecario se confunden en la misma persona, cuando se
paga lo debido o no existe deuda, le está permitido pedir la liberación del predio hipotecado, por lo que,
teniendo este derecho la parte principal, que es el deudor, no tiene sentido negárselo al tercer poseedor
de la finca hipotecada. Pese a que la legislación no considera expresamente esta situación, mediante la
interpretación analógica se aplica el estatuto e la fianza, que en el artículo 2339 del Código Civil
establece que cuando se afianza una obligación futura, el fiador podrá retractarse mientras la obligación
principal no exista, criterio que también puede seguirse para el tercer poseedor y estimar que puede
libertar sus bienes hipotecados cuando no exista obligación actual.
La solución antedicha se sustenta en los principios generales del derecho de la lealtad y buena fe
que debe existir entre los contratantes, los que pugnan con las facultades dominantes que tendría el
acreedor si se le permitiera mantener una garantía hipotecaria eternamente o dejada a su extinción a su
solo arbitrio, aunque no existan obligaciones que caucionar al momento de pedir su alzamiento.
(Considerandos 4º a 6º)
Contrato de fianza. Exigir del deudor principal el relevo. Caución de resultas o consignar medios de pago.
Facultad del fiador. Calidad del fiador que puede ejercer el derecho
Fecha: 09/06/2008
Rol: 142-2004
Sumario
Aun cuando el contrato de fianza se celebre únicamente entre el fiador y el acreedor, sin la
intervención del deudor principal, el fiador tiene la facultad para exigir de dicho deudor principal que le
obtenga el relevo, le caucione las resultas de la fianza o le consigne medios de pago, en alguna de las
hipótesis del artículo 2369 del Código Civil, pudiendo ejercer este derecho cualquier fiador, sea que se
trate de una fianza civil o mercantil, judicial o convencional, gratuita o remunerada, incluso el fiador
solidario y el fiador y codeudor solidario, este último, pese a que en su relación con el acreedor es
deudor directo, por cuanto respecto de los codeudores es un simple fiador por no tener interés en la
deuda cuya garantía se estipuló en la solidaridad. (Considerandos 1º y 2º)
Corte Suprema
Acción subrogatoria. Extinción de la obligación por el codeudor solidario. Contribución a la deuda. Extinción de la
obligación por tercero civilmente responsable.
Fecha: 07/05/2007
Rol: 5340-2005
Sumario
En las obligaciones solidarias se diferencian los efectos entre los acreedores y los deudores, como
las relaciones entre ambos.
Es así como en las relaciones entre acreedores y deudores, los primeros pueden dirigirse contra
todos los deudores solidarios conjuntamente, o en contra de cualquiera de ellos a su arbitrio, sin que por
éste (deudor) pueda oponérsele el beneficio de división, artículo 1514 del Código Civil ,
circunstancia esta última que originó, se persiguiera del fisco de Chile el pago de la obligación solidaria
por el acreedor.
Es así como la deuda fue extinguida respecto del acreedor y se originan diversos efectos entre los
deudores que se encontraban en la necesidad jurídica de satisfacerla, dando inicio al tema de la
contribución a la deuda.
En las relaciones entre los deudores en la contribución a la deuda, nuestro legislador diferencia
distintas consecuencias conforme a quien sea el que extinguió la obligación.
En efecto, se distingue si se efectuó por quien debe realmente solventarla y la forma como lo hizo, es
por ello que corresponde tener en consideración que la extinción en el caso de autos fue mediante un
sacrificio económico del fisco.
El segundo aspecto a determinar es si la solidaridad interesa a todos o alguno de los deudores, pues
los jueces de la instancia han entendido que por establecer el legislador la solidaridad pasiva entre el
conductor del vehículo y el propietario del móvil en el artículo 174 de la Ley Nº 18.290, la extinción de la
obligación interesa a ambos, por lo que carece el fisco de acción de reembolso.
Sin embargo, se ha confundido por los jueces lo que es el interés y más que eso, el deber o
necesidad jurídica en que el fisco se encontraba de satisfacer la deuda, por ser obligado a su pago, pero
distinto es si se encontraba obligado a sufrir en su patrimonio las consecuencias.
Es así que para ello debe atenderse a quien desarrolló la acción ilícita, quien perpetró el cuasidelito,
única persona que se encuentra llamada a sufrir en su patrimonio los efectos de su acción, pues es
quien ha desarrollado la conducta imprudente y negligente, sin que en este caso se observe una
conducta propia del fisco que determine su responsabilidad, que no sea a título de tercero civilmente
responsable como propietario del vehículo conducido de manera imprudente y en contra de los
reglamentos del tránsito por el demandado.
En los hechos establecidos, no se ha fijado ningún elemento que permita reprochar la conducta del
fisco, de forma tal que debe ser considerado como una parte no interesada, y a la luz del inciso 2º del
artículo 1522 del Código Civil, debe ser tratado como fiador lo que trae como consecuencia que no
obtiene beneficios con la extinción, de modo que el sacrificio económico del fisco será momentáneo,
pues podrá dirigirse en contra del responsable, tanto por la acción de reembolso del artículo 2370 del
Código Civil y la acción subrogatoria en los derechos del acreedor previstos en el artículo 1610 Nº 3 del
mismo código, acción esta última que se ha ejercido por el fisco al interponer la demanda.
Al examinar los requisitos de la acción subrogatoria ellos concurren en la especie, desde el momento
que ha existido el pago de la obligación; que este pago lo efectuó quien no es llamado a soportar el
gravamen que importa a su patrimonio; que ha sido útil al extinguir la obligación; que no se encuentra en
ninguno de los casos en que se priva de la acción, ya que en el primer juicio fueron demandadas ambas
partes y la prescripción en las obligaciones solidarias se interrumpe en tal evento para entrar a la luz de
lo dispuesto en el artículo 2519 del Código Civil. (Considerando 4º)
Fecha: 16/12/2003
Rol: 248-2003
Sumario
El artículo 771 del Código de Procedimiento Civil dispone que el recurso de casación debe
interponerse por la parte agraviada ante el tribunal que haya pronunciado la sentencia que se trata de
invalidar, esto es, es necesario que la parte recurrente objetivamente sufra una insatisfacción respecto
de la pretensión discutida, lo que no ocurre en la especie pues la sentencia impugnada rechazó la
demanda. (Considerando 2º)
En cuanto al segundo grupo de errores de derecho tampoco se configura, toda vez que la situación
del actor que paga una deuda hipotecaria anterior a la compra de los derechos en los inmuebles
hipotecados, como se deja establecido en el fallo, está regida por el artículo 2429 en relación al
artículo 2370 ambos del Código Civil, ya que estos hechos, no se compadecen con un supuesto
incumplimiento de obligaciones del contrato de cesión de derechos.
Por último, no se infringieron los artículos 1712 y 1713 del Código Civil, respecto de la prueba de
presunciones y confesional, ya que lo que denuncia el demandado en su recurso es la falta de
razonamientos en relación a esta prueba, lo que de ser efectivo configuraría un vicio que daría lugar a la
casación en la forma y no una infracción que dé lugar al recurso en estudio. (Considerandos 6º a 9º)
Corte Suprema
Rol: 248-2003
Sumario
El artículo 771 del Código de Procedimiento Civil dispone que el recurso de casación debe
interponerse por la parte agraviada ante el tribunal que haya pronunciado la sentencia que se trata de
invalidar, esto es, es necesario que la parte recurrente objetivamente sufra una insatisfacción respecto
de la pretensión discutida, lo que no ocurre en la especie pues la sentencia impugnada rechazó la
demanda. La sentencia recurrida, ponderando especialmente la prueba documental constituida por
escrituras públicas a las cuales otorga el valor que señala el artículo 1700 del Código Civil, para concluir
interpretando las cláusulas del respectivo contrato, que el demandante al adquirir el 50% de los
derechos de las oficinas, tuvo conocimiento que en dicho inmueble se constituyó hipoteca para
garantizar un crédito otorgado a sus propietarios con motivo de la reprogramación de una deuda anterior
la que se inscribió en el conservador de bienes raíces en atención a que la publicidad de los libros de
éste, constituye una presunción legal de conocimiento por parte de la comunidad de acuerdo a lo
establecido en el artículo 924 del Código Civil, lo que lleva al rechazo de la acción indemnizatoria
porque no se probó la ignorancia del hecho fundamental invocado para justificar el incumplimiento por
parte del demandado.
En cuanto al segundo grupo de errores de derecho tampoco se configura, toda vez que la situación
del actor que paga una deuda hipotecaria anterior a la compra de los derechos en los inmuebles
hipotecados, como se deja establecido en el fallo, está regida por el artículo 2429 en relación al
artículo 2370 ambos del Código Civil, ya que estos hechos, no se compadecen con un supuesto
incumplimiento de obligaciones del contrato de cesión de derechos.
Por último, no se infringieron los artículos 1712 y 1713 del Código Civil, respecto de la prueba de
presunciones y confesional, ya que lo que denuncia el demandado en su recurso es la falta de
razonamientos en relación a esta prueba, lo que de ser efectivo configuraría un vicio que daría lugar a la
casación en la forma y no una infracción que dé lugar al recurso en estudio. (Considerandos 2º a 9º)
Corte Suprema
Plazo para interponer reposición del auto de prueba. Plazo para presentar lista de testigos. Presentación
conjunta de lista de testigos y reposición
Fecha: 13/11/2003
Rol: 2334-2003
En una interpretación armónica de la norma del artículo 2335 del Código Civil y la del artículo 64 del
Código del Trabajo, es dable concluir que, los efectos de una y otra son los mismos, pues en el caso del
fiador el beneficio de excusión es la facultad que éste tiene para exigir que antes de proceder contra él
se persiga la deuda en los bienes del deudor principal y en las hipotecas o prendas prestadas por éste
para la seguridad de la misma deuda, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 2357 del Código Civil.
En idéntica posición que el fiador se encuentra el dueño de la obra, empresa o faena, pues es
subsidiariamente responsable de las obligaciones laborales y previsionales que afecten al contratista en
favor de los trabajadores de éste. De este modo, la responsabilidad subsidiaria que se establece
respecto del dueño de la obra, empresa o faena, le permite gozar del beneficio de excusión, en virtud
del cual, una vez reconvenidos, pueden exigir que antes de proceder en su contra se persiga la deuda
en el patrimonio del deudor principal. Con todo, cabe hacer presente que para gozar de este beneficio
es necesario, entre otros requisitos, que efectivamente hayan sido requeridos antes que el deudor
principal, cuestión que no acontece en la hipótesis de autos, pues del tenor de la demanda los
demandados que oponen este beneficio, han sido demandados en forma subsidiaria, lo que implica que
sólo podrán ser perseguidos en su patrimonio, en el evento que fracase el cobro respecto de la
contratista y demandada principal, de manera que la excepción de beneficio de excusión promovida
carece de fundamento y será rechazada en definitiva. (Considerando 23 de sentencia de primera
instancia)
Fecha: 02/06/2003
Rol: 4747-1998
Sumario
La solidaridad supone, necesariamente, que la cosa debida sea divisible por naturaleza, pudiendo
asignarse, a cada sujeto que interviene, una parte o cuota de la obligación, sin embargo de lo cual la
solidaridad hace posible que se exija a cada uno de los deudores, indistintamente, la totalidad de la cosa
debida.
No concurre prohibición alguna que impida a un deudor solidario acceder a una obligación limitando
su responsabilidad a una parte de la misma, sin que se quebrante tampoco la unidad de la prestación,
ya que ésta subsiste entre todos los deudores hasta el monto de lo acordado.
Cobro de pagaré. Procedencia de beneficio de excusión respecto de avalista solidario. Falta de requisito para
fuerza ejecutiva por no pago de impuesto de timbres y estampillas. Falta de impugnación de resolución
Fecha: 26/03/2003
Rol: 4689-2002
Sumario
Que opuso la excepción del Nº 7 del mencionado artículo 464, que la funda en las siguientes
circunstancias: a) no haber enterado o pagado los impuestos fiscales exigidos por la ley de timbres y
estampillas. Esta excepción así fundada debe ser desechada ya que dicho impuesto se paga por
ingreso de dinero en tesorería, como lo señala el propio documento en leyenda existente en su margen
superior, de acuerdo con el Decreto Ley Nº 3.475, de 1980, artículo 15 Nºs. 2 y 3; b) la misma excepción
ahora fundada en que el documento no ha indicado el lugar y fecha de expedición. Debe rechazarse
esta excepción así planteada porque las circunstancias que alega el ejecutado están, al contrario de su
alegación, claramente señaladas en la parte superior del pagaré; c) funda ahora la excepción planteada
en la circunstancia que el notario que autoriza el pagaré no se ha individualizado y no se ha dejado
testimonio de la fecha en que fue suscrito por el deudor, por lo que le restaría toda eficacia al
documento y produciría nulidad absoluta del acto o contrato. Así opuesta, debe ser rechazada la
excepción bastando al efecto en señalar que tiene mérito ejecutivo, sin necesidad de reconocimiento
previo, entre otros documentos, el pagaré respecto del obligado cuya firma aparezca autorizada por
notario, sin otras exigencias, como lo señala en forma expresa el inciso final del artículo 434 Nº 4 del
Código de Procedimiento Civil. (Considerando 14 de sentencia de primera instancia)
Fecha: 18/11/2002
Rol: 1529-2001
Sumario
La cláusula de estilo en que se renuncia a la acción resolutoria no tiene por finalidad privar a los
contratantes de las acciones personales que puedan derivar del cumplimiento parcial o incumplimiento
de sus estipulaciones.
Corte Suprema
Pago del pagaré. Obligación de devolución del documento. Obligación de dar recibo de pago. Acción cambiaria
de reembolso. Compatibilidad con la acción subrogatoria del artículo 1610 del Código Civil
Fecha: 18/06/2002
Rol: 2478-2001
Sumario
Es evidente que la sola circunstancia de que se desestime una determinada excepción o alegación
del demandado no trae consigo, como necesaria e ineludible consecuencia, la aceptación de la
demanda. En efecto, tal situación no libera a los jueces de su deber de emitir un pronunciamiento,
debidamente razonado, acerca de la acción ejercida. Que, ahora bien, en la especie, tal acción se ha
sustentado precisamente en la obligación que tendría el demandado de otorgar a la actora recibos de
pago y de hacerle entrega de los correspondientes instrumentos de crédito. De otra parte, en su
contestación, además de oponer la excepción aludida por el recurrente, el demandado solicitó el
rechazo de la demanda, expresando que no le corresponde ir a dejar los pagarés al domicilio del
deudor; que es el interesado quien debe ser diligente en obtener su devolución y que, en todo caso,
subsisten otras acciones para obtener el reembolso de lo pagado. Por lo tanto, no es efectivo que se
haya verificado el vicio que se aduce, toda vez que en su sentencia los jueces se circunscribieron a los
aspectos que fueron materia del debate y, por sobre todo, a los puntos que fueron sometidos a su
decisión e inclusive por la misma demandante. (Considerandos 2º y 3º)
Fecha: 25/09/2001
Rol: 7056-1997
El aval es una institución mercantil regulada por la Ley Nº 18.092, que dicta nuevas normas sobre
letra de cambio y pagaré y deroga disposiciones del Código de Comercio, por lo que no es posible
asimilarla a la fianza, institución civil a que se refieren los artículos 2335 y siguientes del Código Civil,
entre los cuales el artículo 2357 reconoce al fiador el beneficio de excusión, el que no se puede
extender al aval que, como se ha dicho, tiene una naturaleza y características del todo diferentes. Así,
debe necesariamente concluirse que el beneficio de excusión, propio de la fianza, no es aplicable al
aval, el que se rige en esta materia por el inciso final del artículo 47 de la citada Ley Nº 18.092, que
dispone que "concebido al aval sin limitaciones el avalista de la letra de cambio responde del pago de
ella en los mismos términos que la ley impone al aceptante". (Considerandos 4º y 5º de sentencia de
Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Juicio ejecutivo, excepción de falta de requisitos del título ejecutivo para su fuerza ejecutiva rechazada,
excepción basada en incumplimiento de otorgamiento de crédito del banco para pagar pagaré. Excepción del
artículo 464 Nº 7 del Código de Procedimiento Civil, excepción del artículo 464 Nº 8 del Código de Procedimiento
Civil. Aval, importancia de términos contractuales en la avalía de un pagaré
Fecha: 28/05/2001
Rol: 141-2001
Sumario
Corte Suprema
Despido injustificado, necesidades de la empresa, artículo 161 Código del Trabajo. Naturaleza de las
indemnizaciones adeudadas. Responsabilidad subsidiaria, artículo 64 Código del Trabajo. Excepción dilatoria de
beneficio de excusión
Fecha: 15/05/2001
Rol: 1465-2001
Sumario
Frente a la excepción dilatoria de beneficio de excusión opuesta por la demandada como una forma
de defensa, en un juicio entre partes, no cabe hacer pronunciamiento sobre el fondo que en la demanda
se plantea en relación a la demandada subsidiaria si se acoge aquella excepción dilatoria, ya que ella
tiene por objeto preciso postergar u obstaculizar momentáneamente el acceso al juicio y por ende que
se produzca la relación de fondo de la litis. En cuanto al fondo del asunto, al desahuciarse el contrato de
trabajo por la causal del artículo 161 inciso 1º del Código del Trabajo, esto es por necesidades de la
empresa, debe estarse a las consecuencias reglamentadas específicamente en la ley laboral, es decir,
procede el pago de las indemnizaciones sustitutivas del aviso previo y por años de servicios, pero no se
obliga en ellos al empleador al pago de los meses que faltan para cumplir el tiempo del contrato, toda
vez que no existe norma expresa que prevenga esta circunstancia como en otros eventos, a saber: en el
desahucio de un trabajador que goza de fuero o en el caso de no haberse enterado las cotizaciones
previsionales situación en que deberá seguir cancelando las remuneraciones hasta que se cancelen
totalmente tales cotizaciones. (Considerandos 1º y 2º de sentencia de Corte de Apelaciones)
Corte Suprema
Fecha: 15/05/2001
Rol: 1509-2001
Sumario
Que conforme a las disposiciones legales citadas, el trabajador tiene derecho a recurrir al tribunal
para que éste declare improcedente la causal relativa a necesidades de la empresa; pero si recibe
parcial o totalmente el pago de la indemnización que le correspondería por aplicación de dicha causal, o
bien, recurre al tribunal para que ordene dicho pago , se entiende que acepta la causal de terminación
del contrato por necesidades de la empresa y, por consiguiente ya no podrá reclamar su
improcedencia...
Que de lo expresado fluye que el recurrente impugna los hechos establecidos en el fallo atacado,
desde que, en definitiva, alega que el actor no habría aceptado la causal de despido, e insta por la
alteración de tales conclusiones, sin denunciar quebrantamiento alguno a las normas reguladoras de la
prueba modificación aquella que no es posible por esta vía, pues como reiteradamente lo ha decidido
esta corte, el establecimiento de los hechos, sobre la base de la apreciación de las probanzas allegadas
al proceso, mediante las reglas de la sana crítica, queda agotada en las instancias respectivas. Que en
lo atinente a la excepción dilatoria del beneficio de excusión, ha de tenerse presente que el recurso de
casación en el fondo procede contra sentencias definitivas o interlocutorias que ponen término al juicio o
hacen imposible su continuación, naturaleza que no reviste la decisión que, aunque contenida en el fallo
atacado, resuelve la citada excepción dilatoria. (Considerandos 3º a 5º)
Corte Suprema
Finalidad del artículo 64 Código del Trabajo. Responsabilidad subsidiaria de la empresa con los trabajadores de
su contratista. Interpretación artículo 420 letra a) Código del Trabajo. Empleador aparente, carácter de norma de
protección a las remuneraciones
Fecha: 30/01/1998
Rol: 4762-1996
Sumario
Los artículos 1º, 3º, 4º inciso 2º, y 64 del Código del Trabajo, tienen por objeto dejar establecida la
responsabilidad de la organización empresarial, cualquiera sea la división de faenas o funciones que
estime conveniente efectuar, evitando, de este modo, se puedan eludir las obligaciones que se tienen
por los empleadores para con los trabajadores.
En el sentido indicado debe entenderse la referencia que hace el legislador en la letra a) del
artículo 420 del estatuto del ramo, a las cuestiones suscitadas por la aplicación de las normas laborales
entre empleadores y trabajadores, en que se está haciendo referencia a la organización empresarial en
su conjunto, en forma amplia, por cuanto no podrían quedar comprendidas sólo algunas materias dentro
de la competencia especial de los tribunales laborales, como de la que corresponde a esta sala
especializada del tribunal supremo de la nación, y excluir otras, aun cuando deriven de la aplicación de
normas del Código del Trabajo y por lo mismo de naturaleza laboral. (Considerandos 3º a 5º)
Ficha 38 Antecedentes del fallo
Corte Suprema
Recursos de casación forma y fondo rechazados. Juicio ejecutivo. Inexistencia de "ultra petita". Validez de fianza
sobre obligaciones futuras
Fecha: 25/09/1996
Rol: 33716
Sumario
La ultra petita, como la define la ley, consiste en otorgar más de lo pedido por las partes o
extendiéndola a puntos no sometidos a la decisión del tribunal, por lo que la existencia del vicio debe
buscarse, generalmente, en la parte resolutiva de la sentencia. (Considerando 3º)
Que, como se ha dicho, la fianza de obligaciones futuras tiene valor y mientras no exista una
obligación no puede correr plazo alguno de prescripción, pudiendo sí el fiador retractarse como
expresamente lo contempla el artículo 2339 del Código Civil.
La fianza, como obligación accesoria, sigue la suerte de lo principal y en materia de prescripción este
principio está contemplado en el artículo 2616 del Código Civil al establecer que: "la acción hipotecaria,
y demás que proceden de una obligación accesoria prescriben junto con la obligación a que acceden" y
en el caso de autos las obligaciones caucionadas por la recurrente estarían vigentes a la fecha de la
interposición de la demanda, puesto que los plazos establecidos en la escritura de 19 de diciembre de
1986, si se considera únicamente la amortización del capital, se llegarían a febrero de 1992, los que se
extenderían más si al capital se agregan los intereses pactados.
Así, aun en el supuesto de aplicarse el artículo 822 del Código de Comercio no estaría infringido y
consecuencialmente tampoco los artículos 2343 y 2344 del Código Civil. (Considerando 24)
Fecha: 02/08/1996
Rol: 5843-1994
Sumario
Por lo tanto, el título en el cual se funda la demanda tiene la misma fuerza ejecutiva en relación con
el deudor principal y respecto del fiador y codeudor solidario.
En efecto, de diversas normas del derecho común aparece de manifiesto que las obligaciones que
contrae el fiador y codeudor solidario se hallan forzosamente subordinadas a la naturaleza y
características de aquellas de que debe responder el deudor principal.
Es así como por ejemplo, los artículos 1520 y 2354 del Código Civil establecen que el codeudor
solidario puede defenderse en el juicio seguido en su contra, oponiendo a la demanda del acreedor,
todas las excepciones que resultan de la naturaleza de la obligación principal, así como las personales
que le favorezcan.
A su vez, el artículo 1513 del mismo código, dispone que extinguida la obligación por uno de los
codeudores solidarios, se extingue igualmente respecto de los demás obligados.
El artículo 2519 de este cuerpo de leyes señala también que la interrupción de la prescripción que
opera respecto de un codeudor, perjudica a los otros.
En este mismo orden de ideas, cabe recordar que el artículo 1521 del Código Civil establece que,
perdida la cosa debida por culpa de uno de los deudores, todos son solidariamente obligados al pago de
su precio. (Considerandos 2º y 3º)
Corte Suprema
Fecha: 09/05/1996
Rol: 14217-1989
Sumario
Si bien es cierto que el documento privado (contrato de marras) al cual se refiere la sentencia
recurrida en su motivo 4º como "el medio mediante el cual Carmona entregó el vehículo a Molina", se
refiere literalmente a una compraventa de un automóvil, este puro antecedente no ha bastado para
asignarle tal calificación jurídica, por cuanto los demás antecedentes ponderados y los hechos
inamovibles establecidos por la sentencia, acreditan que el actor Carmona ante la imposibilidad de
pagar la deuda contraída con Inversiones Pilmaiquén Limitada, con ocasión de la compra del respectivo
automóvil, mediante nueva renegociación y para solucionar su obligación, hizo entrega del vehículo al
demandado Molina, de que éste habiendo sido su aval, en virtud de esta renegociación pagó y se
responsabilizó en forma directa de esa deuda, por los montos que se dejaron especificados, todo lo cual
deja de manifiesto, como acertadamente concluye la sentencia, que la intención de las partes fue la
efectuar una dación en pago para extinguir una obligación preexistente del actor y no un contrato de
compraventa. (Considerando 19)
La dación en pago consiste en una convención acerca de un pago por equivalencia, acordada entre
el acreedor y el deudor y en razón del cual éste extingue su obligación o deuda entregando una cosa
distinta a la debida, como aconteció en el caso de autos, conclusión conceptual que guarda
correspondencia con lo que al respecto ha sostenido la doctrina jurídica nacional. (Considerando 23)
Ficha 41 Antecedentes del fallo
Juicio ejecutivo. Cobro de letra de cambio. Excepción de prescripción. Acción contra codeudor solidario.
Obligados al pago
Fecha: 05/12/1991
Rol: 2767-1991
Sumario
No obstante la amplitud de la garantía otorgada por la demandada, no puede sostenerse que por ella
se constituyó en aval del pagaré ya que para que ello ocurra es necesario que el tercero firme como tal
la letra de cambio, una hoja de prolongación adherida a ésta o en un documento separado, caso en el
cual se debe además de la firma del avalista, expresar que el acto es un aval e identificar claramente la
letra a la cual concierne (artículo 44 Ley Nº 18.092).
En el caso de autos tal requisito no ha podido cumplirse por cuanto la demandada, por el documento
antes transcrito, se obligó como fiador y codeudor solidario respecto de deudas futuras, compromiso
válido de acuerdo con lo que dispone el artículo 2339 del Código Civil, por lo que no se refirió
concretamente al pagaré caso en que la garantía otorgada en un documento aparte pueda constituirlo
en aval.
Que las acciones que emanan del pagaré, para ser consideradas acciones cambiarias, deben
dirigirse contra los obligados por el documento, los que, de acuerdo con lo que dispone el artículo 79 de
la Ley Nº 18.096, son todos los que firman una letra de cambio y las normas sobre prescripción
contempladas en dicha ley se aplican contra los obligados al pago según su artículo 98.
Siendo la fianza una obligación accesoria ésta prescribe cuando prescribe la obligación que
garantiza, según lo dispone la regla general del artículo 2516 del Código Civil. (Considerando 21).
Ficha 42 Antecedentes del fallo
Procedimiento ejecutivo. Excepción infundada. Pronunciamiento sobre aspectos no alegados. Alegación del
ejecutado
Fecha: 15/07/1991
Rol: 45037-1990
Sumario
Acorde con lo dispuesto en el artículo 465 del Código de Procedimiento Civil, no basta que el
ejecutado se oponga a la ejecución alegando en términos genéricos alguna de las excepciones que la
ley le permite aducir para contrarrestar la acción ejecutiva; el texto legal referido impone al ejecutado la
necesidad de concretar la excepción opuesta, en cuanto a expresar, con precisión, los hechos que le
sirven de fundamento inmediato.
En otras palabras, es imprescindible que dentro del respectivo motivo legal de oposición, el ejecutado
individualice la excepción cuya aceptación solicita, precisando la causa de pedir. (Considerando 1º)
De la simple lectura de la demanda ejecutiva interpuesta en los autos, aparece que el actor basa su
demanda únicamente en esa sentencia, en lo que respecta a la ejecutada Lizárraga, pero en lo relativo
a Roncagliolo la fundamenta en dicho fallo y en la escritura pública que acompaña, en la que éste se
obliga como fiador y codeudor solidario de todas y cada una de las obligaciones presentes y futuras que
su cónyuge, la ejecutada antes nombrada, tuviere o contrajere en favor del banco, como asimismo de
todas las obligaciones que las sustituyan total o parcialmente.
Si se entrara a realizar cualquier otra consideración, como por ejemplo determinar si la ley permite o
no la yuxtaposición de títulos para conferirles carácter ejecutivo o, para el caso de que se considerara
que el título ejecutivo, base de la ejecución en contra del mencionado Roncagliolo, fuere sólo la escritura
pública anteriormente indicada, analizar la inexistencia de determinación alguna en ella, por sí misma,
en cuanto a su monto o a una deuda específica que lo vincule con el banco, con lo que no se daría en
ella la exigencia del artículo 438 Nº 3, inciso 2º, del Código de Procedimiento Civil, acogiendo por alguna
de las razones expuestas la excepción, sería fallar "ultra petita", pues se daría lugar a ella en atención a
aspectos que no fueron propuestos por el ejecutado, cambiando de tal manera el basamento de hecho
de la excepción, o sea, la causa de pedir, lo que al tribunal le está vedado.
A mayor abundamiento, no está de más acotar que la doctrina nacional, en forma unánime, acepta
que las sentencias dictadas en contra de un codeudor solidario afectan en la misma manera a los
restantes codeudores solidarios, aunque no hubieren concurrido al pleito ni hubieren sido considerados
como partes en él, de conformidad, con lo prevenido en los artículos 1514, 1515 y 2354 del Código Civil.
Lo que se dice es un efecto específico de la solidaridad, excepcional en el campo del derecho de las
obligaciones, pues considera que todo lo que realiza un codeudor solidario en relación a la obligación
que lo liga, afecta a los otros codeudores, sea que se acepte la teoría de la representación, o la del
mandato, o la de la convención. (Considerandos 3º a 5º)
Excepción de cosa juzgada, titularidad. Excepción. Triple identidad. Cesión de bienes, alcance. Novación. Juicio
ejecutivo, excepción de caducidad de la fianza. Alcance. Fianza, naturaleza jurídica. Cesión de bienes, efectos
respecto codeudores solidarios o subsidiarios
Fecha: 17/10/1990
Rol: 13272
Sumario
En cuanto al recurso de casación en el fondo, la acertada resolución del recurso en estudio hace
necesario recordar el tenor literal de las normas contenidas en los artículos 1614, 1619 y 1623 del
Código Civil. Según el primero, la cesión de bienes es el abandono voluntario que el deudor hace de
todos los suyos a su acreedor o acreedores, cuando, a consecuencia de accidentes inevitables, no se
halla en estado de pagar sus deudas. De acuerdo al segundo, la cesión de bienes produce los
siguientes efectos: 1º el deudor queda libre de todo apremio personal; 2º las deudas se extinguen hasta
la cantidad en que sean satisfechas con los bienes cedidos; 3º si los bienes cedidos no hubieren
bastado para la completa solución de las deudas, y el deudor adquiere después otros bienes, es
obligado a completar el pago con éstos. La cesión no transfiere la propiedad de los bienes del deudor a
los acreedores, sino sólo la facultad de disponer de ellos y de sus frutos hasta pagarse de sus créditos.
Finalmente, y por virtud del tercero, la cesión de bienes no aprovecha a los codeudores solidarios o
subsidiarios, ni al que aceptó la herencia del deudor sin beneficio de inventario.
De acuerdo al artículo 1628 del Código Civil, la novación es la sustitución de una nueva obligación a
otra anterior, la cual queda por tanto extinguida, y según el artículo 1630 del mismo código, para que
sea válida la novación es necesario que tanto la obligación primitiva como el contrato de novación sean
válidos, a lo menos naturalmente. Para destacar en la novación la existencia o separación necesaria de
dos obligaciones, conviene tener presente que además de los citados artículos 1628 y 1630, el Código
Civil contiene además otros preceptos que no admiten duda alguna posible respecto de la existencia
infaltable e ineludible de dos obligaciones sucedidas en el tiempo: una obligación original o primitiva y
otra nueva o posterior que la sustituye, por lo que, reemplazada por la segunda, la primera queda
extinguida. Así, el artículo 1631 trata de la sustitución de una nueva obligación a otra, de una nueva
obligación, de la obligación primitiva, del primer acreedor, del reemplazo de un nuevo deudor al antiguo,
y del primer deudor y del segundo deudor. Y así como el código expresa que en la novación la primitiva
obligación queda extinguida, también expresa que el deudor antiguo queda libre.
En cuanto a la infracción del artículo 464 Nº 5 del Código de Procedimiento Civil, que establece la
excepción de caducidad de la fianza en el juicio ejecutivo, el recurrente expresa se ha cometido por
cuanto según el artículo 1649 del Código Civil al haberse concedido plazo al deudor principal se habría
extinguido la responsabilidad de los fiadores, y que en conformidad a lo dispuesto en el artículo 2382 de
este mismo código, se habría extinguido la fianza por haber existido novación. Sobre este punto ha de
tenerse presente que no se ha establecido como hecho de la causa que se haya concedido ampliación
de plazo a los deudores para el pago de sus obligaciones, por lo que tal argumentación del recurrente
no puede conciliarse o concordarse con un hecho no establecido en el fallo.
Es cierto que según el artículo 2382 del Código Civil si hay novación se extingue la fianza, pero ya se
ha concluido anteriormente, y de modo categórico, que en el caso de autos no la hubo, no resultando
aplicable entonces una regla sobre la extinción de la fianza si no existe para ella su necesario
antecedente y presupuesto.
Al ejecutado no le afectan los términos del convenio, y, aún más, al haber quedado establecido en la
sentencia que no aparece que hasta el momento el ejecutante haya recibido alguna suma resultante del
cumplimiento de los convenios, de manera que, no cumplida parte alguna de la obligación por los
deudores principales, no se advierte cómo pudiera el avalista y codeudor solidario relevarse de su
cumplimiento.
De acuerdo al artículo 2335 del Código Civil, la fianza es una obligación accesoria en virtud de la cual
una o más personas responden de una obligación ajena, comprometiéndose para con el acreedor a
cumplirla en todo o parte si el deudor principal no la cumple. De otro lado, y si bien el artículo 2354 del
Código Civil admite que el fiador pueda oponer al acreedor cualesquiera excepciones reales, no le
otorga el derecho de oponerle las excepciones personales del deudor, entre las que se halla
precisamente la cesión de bienes, y aunque como sostiene el recurrente la fianza queda
irrevocablemente extinguida si el deudor acepta voluntariamente del deudor principal en descargo de la
deuda un objeto distinto del que este deudor estaba obligado a darle en pago, la cesión de bienes
aludida en los convenios no ha implicado descargo alguno de la deuda, como también antes se dijo, al
no constar en autos que haya recibido alguna suma el ejecutante como resultado del cumplimiento de
los convenios, de manera que tampoco se dan aquí los presupuestos de la norma cuya infracción
censura el recurrente.
El recurrente, también en un propósito de atribuir ineficacia a los títulos que han sido materia de la
ejecución, y sosteniendo se han infringido por la sentencia objeto del recurso los artículos 464 Nº 7 y
437 del Código de Procedimiento Civil, ha confundido la eventual exigibilidad e iliquidez de la deuda
principal mirada en relación a las sociedades obligadas principalmente para con el banco acreedor con
la clara determinación del monto de los documentos que en su contra sirvieron de título a la ejecución
de que se trata, de manera que no puede admitirse, en virtud de una hipótesis errónea como la
propuesta, que haya habido infracción a las normas que establecen presupuestos cumplidos sin reparo
por los instrumentos continentes del cobro formulado en esta causa.
En cuanto hace a la infracción que a las disposiciones de la ley de quiebras atribuye el recurrente,
cabe tener presente que éste basa tal impugnación en el hecho de ser deudores comerciales las
empresas obligadas principalmente, circunstancia no consignada expresamente como hecho de la
sentencia y cuyo establecimiento previo habría sido indispensable para determinar sobre tal base el
principio jurídico que entonces correspondería aplicar. Por otra parte, y aun cuando en la sentencia
recurrida se hubiera establecido como premisa o hipótesis de reflexión la existencia de un convenio
preventivo regido exclusivamente por la ley de quiebras, aun en tal caso habrían sido inaplicables los
institutos de la novación y la extinción de la fianza esgrimidos por el recurrente en apoyo de la
absolución del demandado, comoquiera que, como ya antes se dijo, no existiendo los presupuestos
esenciales de la novación, no admiten aplicación tampoco los preceptos sobre la extinción de la fianza
derivados de un instituto inexistente.
Como se ha demostrado adecuadamente entonces a lo largo de este fallo, de los hechos sentados
en el que es objeto del presente estudio se desprende que en los convenios invocados por el
demandado no hubo novación y sí cesión de bienes. Por ello no tiene aplicación en cuanto a aquélla el
artículo 1645 del Código Civil, según el cual la novación liberta a los codeudores solidarios o
subsidiarios que no han accedido a ella, y sí tiene aplicación en cambio en cuanto a ésta el artículo 1623
del mismo código, en conformidad al cual la cesión de bienes no aprovecha a los codeudores solidarios
o subsidiarios... En consecuencia, no se han infringido en el fallo recurrido las disposiciones legales
representadas en el recurso, comoquiera que el convenio celebrado entre el deudor y sus acreedores
constituye o tuvo por objeto una cesión de bienes y no otra institución como pretende el demandado;
que tal cesión ha sido sin transferencia del dominio; que las deudas han quedado extinguidas hasta la
cantidad en que sean satisfechas con los bienes cedidos; que el deudor quedó obligado por el saldo
insoluto; que la sola cesión no ha traspasado el dominio de bienes a los acreedores sino sólo la facultad
de disponer de ellos y de sus frutos hasta el pago de sus créditos; que en consecuencia no ha habido
novación de obligaciones como ha pretendido el ejecutado; que no aprovechando a los codeudores
solidarios o subsidiarios la cesión de bienes, éstos no se han librado de tales obligaciones; que
habiéndose obligado el ejecutado como avalista y codeudor solidario resulta inadmisible la alegación de
éste en el sentido de que por serlo de una deuda ajena debe ser considerado como fiador y que la
fianza ha quedado irrevocablemente extinguida por haberse concedido ampliación de plazos y haberse
cambiado el objeto de la obligación; que tratándose en la especie de una cesión de bienes, y no
aprovechando ella al codeudor solidario o subsidiario, carece de valor la alegación del mismo ejecutado
en cuanto a no empecerle el convenio por no haber concurrido a subscribirlo; y que en relación a la
indeterminación del monto de lo adeudado postulada por el ejecutado debe concluirse que, por no
alcanzarle los términos del convenio, la deuda a su respecto es determinada.
Como consecuencia de todo lo dicho, y habiendo hecho los jueces del fondo aplicación correcta de
las disposiciones legales que se representan como infringidas en el recurso de casación en el fondo
deducido en estos autos, éste debe ser desestimado. (Considerandos 7º a 15)
Corte Suprema
Deuda, concurrencia como codeudora solidaria. Efectos en el pago de la obligación. Acción de subrogación
procedente cuando no es deudora interesada. Réplica, facultad de ampliar la demanda. Ampliar la demanda,
alcance. Improcedencia de modificación del hecho material que constituye la litis
Fecha: 19/06/1990
Rol: 2104
Sumario
La norma del artículo 312 del Código de Procedimiento Civil permite en la réplica a la actora ampliar
su acción, vale decir, extenderla, o sea, formular nuevas razones o argumentos para reforzarla o
cimentarla mejor, sin salirse de lo ya expuesto en su demanda; también concede facultades para
adicionar su acción, esto es, añadir nuevos argumentos no expresados anteriormente respecto de la
misma acción que haya deducido en el juicio y, por último, puede modificar su acción, esto es, limitar,
determinar, restringir o reducir las cosas a los términos justos, templando el exceso o exorbitación, y
todo ello —en definitiva— sin que pueda alterar o cambiar la esencia o forma de la acción entablada. En
resumen, la disposición citada es de carácter restrictivo, al conceder a las partes las facultades que
taxativa y limitativamente pueden usar, ya sea en la réplica o dúplica, pero no las autoriza para que
formulen en dichas estaciones procesales nuevas acciones o excepciones de las que contienen la
demanda y la contestación y, precisamente, en el caso sub lite la actora se atuvo estrictamente a estas
pautas en su escrito de réplica.
Asimismo, carecen de justificación jurídico-procesal los alcances que formulan algunos de los
demandados en esta causa en el sentido que la actora habría modificado la naturaleza de la acción
impetrada en su demanda al invocar otras argumentaciones y fundamentos legales en su escrito de
réplica, distintos a aquellos que fundan la demanda, toda vez que dicha pretensión no resiste un análisis
serio y a fondo, puesto que al examinarse las pruebas y los elementos de juicio producidos se
desprende nítidamente que la actora siempre mantuvo la causa de pedir, en ningún instante alteró la
acción por subrogación por la circunstancia que en la demanda se refirió a la situación del Nº 5 del
artículo 1610 del Código Civil y posteriormente en la réplica adujo la concurrencia del Nº 3 del
artículo 1610 de dicho texto legal, ya que todo ello inexorablemente conduce al mismo hecho jurídico
que da nacimiento a la relación de derecho (Considerandos 6º y 7º de sentencia de Corte de
Apelaciones)
Fecha: 31/08/1988
Rol: 1902-1987
Sumario
No puede aceptarse la procedencia de las excepciones opuestas por el ejecutado basado en que le
favorece el beneficio de excusión y que el título esgrimido en su contra, carece de alguno de los
requisitos o condiciones establecidos por las leyes para que tenga fuerza ejecutiva, sea absolutamente,
sea con relación al demandado.
Y respecto de la otra excepción, cabe igual rechazo, porque se ha cumplido por la ejecutante, con los
requisitos legales que lo habilitan para deducir la acción ejecutiva sub lite, siendo los pagarés en que se
funda, títulos suficientes para ello, en los términos señalados en el artículo 434 Nº 4 del Código de
Procedimiento Civil
Lo que en realidad se estipuló entre las partes, no es, como se ha dicho, señalar un orden para
deducir la demanda ejecutiva misma por el incumplimiento en el pago de la obligación contenida en los
referidos pagarés, sino que se acordó que la realización de las garantías reales, en el procedimiento de
apremio, debía iniciarse primero, con las hipotecas constituidas por el deudor principal y si ellas no
fueren suficientes, en aquellas que constituyó el aval y codeudor solidario. (Considerandos 3º y 4º)
Corte Suprema
Juicio ejecutivo, excepciones. Fiador. Codeudor. Codeudor solidario. Fianza, cláusula limitación de
responsabilidad.
Fecha: 06/01/1988
Rol: 10966
Sumario
Las partes acordaron que la responsabilidad asumida por la fiadora y codeudora del pagaré quedaba
limitada a menos de la mitad de su monto. Siendo así, el fallo debió reconocerle a dicho acuerdo la
fuerza de ley que le correspondía, sin perjuicio de la calificación jurídica que cabe dar a la codeuda
limitada. La diferencia entre fianza solidaria, fianza y codeuda solidaria radica en que son instituciones
distintas, en el caso de la primera, se trata de un fiador, o sea, de un obligado subsidiario, que carece
del beneficio de excusión y sin son varios los fiadores, tampoco tienen el beneficio de división, pero en
el caso de la fianza y codeuda solidaria, se trata de un fiador y de un deudor directo, solidario.
(Considerando 9º)