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03-Parasha Lej Leja Resumen

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PARASHAT LEJ LEJA (3)


Torah: Breshit 12:117:27

Haftarah: Yesayah 40:2741:16

Hazofen Hamaljutí: Yojanán Meir 3:14:20

Resumen de la Toráh:

A Avram le llegó el llamado Divino para que abandonara Jarán y se


encaminara a otra tierra que HaShem le indicaría. El Patriarca se dirigió a
Canaán (Eretz Israel), llevando consigo a su esposa Sarai, su sobrino Lot,
y todas sus posesiones. También llevó a los mucho seguidores a quienes
él y Sarai habían logrado acercar a los caminos de HaShem y de Su
Torah. Los viajeros llegaron a la tierra de Canaán y continuaron hasta la
ciudad de Shjem, donde Di-s se le apareció a Avram en una visión y
afirmó Su promesa de que algún día la tierra de Canaán pertenecería a
sus descendientes. Avram construyó un mizbéaj (altar) en acción de
gracias a HaShem por esas noticias felices. Una terrible hambruna
desatada en Canaán, impulsó a Avram a permanecer temporalmente en
Egipto. Temiendo que los egipcios se sintieran atraídos por la belleza de
su esposa Sarai y lo asesinaran para apoderarse de ella , al acercarse a la
tierra de Egipto le pidió que les dijera que era su hermana. Cuando
arribaron a ese país la belleza de Sarai despertó gran admiración y fue
llevada al palacio de Paró (faraón). De inmediato, Avram fue colmado de
regalos de rebaños y sirvientes. Sin embargo, cuando Paró y su familia
fueron castigados con misteriosas enfermedades, éste sintió que algo
andaba mal. Supo que Sarai era, en realidad, esposa de Avram, y que su
secuestro había causado este castigo. Paró pidió a Avram que abandonara
Egipto junto con su familia y sus bienes, y Avram así lo hizo.
Con su esposa y las nuevas posesiones que había
obtenido regresó a la ciudad de Bet-El, en Canaán.
Puesto que Avram y Lot se habían hecho muy ricos y
dueños de grandes rebaños, no había suficientes
pasturas para los ganados de ambos y surgieron
disputas entre los pastores. Para evitar el conflicto,
Avram sugirió que él y Lot se separaran y ofreció a su
sobrino que eligiera primero la tierra en la cual quería
asentarse. Lot eligió la planicie del Jordán, fértil y bien
irrigada, y levantó sus tiendas hasta la ciudad de
Sdom, de mala fama por la perversidad de sus
habitantes. Avram se estableció en la llanuras de
Mamre, cerca de Jevrón y nuevamente recibió la
promesa de Di-s de que algún día sus descendientes
poseerían esa tierra.
En esa época, cinco gobernantes del sur de Canaán, incluyendo los reyes
de Sedom y Amorá, se hallaban comprometidos en una revuelta contra
Kedarlaomer, rey de Elam, a quien le habían pagado tributos durante
doce años. Kedarlaomer buscó la ayuda de tres de los gobernantes
vecinos. La revuelta se convirtió en una batalla en la que triunfaron
Kedarlaomer y sus aliados. Estos obtuvieron un botín consistente en
todas las posesiones de Sedom y Amorá. Además sometieron a
cautiverio a gran parte del pueblo. Entre los cautivos se encontraba Lot.
Al conocer la situación de su sobrino, Avram condujo a sus familiares y
servidores, y presentó batalla contra las fuerzas victoriosas, las derrotó y
rescató a Lot y sus posesiones, como así también al resto de los
habitantes de Sedom y todos sus bienes. El rey Malki-Tzedek de esta
ciudad salió a saludar a Avram luego de su victoria y le ofreció todas las
posesiones que había rescatado de Kedarlaomer, como recompensa por
haber liberado a los cautivos. Avram, empero, rehusó cualquier tipo de
retribución por sus esfuerzos, excepto los diezmos que entregó al Cohén
Malki-Tzedek.
A pesar de toda su gran riqueza material, Avram se
sentía triste por el hecho de no tener aún, un hijo y
heredero. Entonces, HaShem, le indicó que mirara el
cielo y contara las estrellas. “Ciertamente, no puedes
contarlas”, dijo Di-s, “pues así de numerosos serán tus
hijos”. Luego le hizo saber que lo había sacado de la
tierra de Ur Casdim para entregarle esta tierra como
posesión que heredarían sus descendientes. Avram
preguntó: “¿Cómo sabré que poseo esta tierra?” Y
HaShem selló, entonces, un pacto con él, conocido
como Brit bein habetarim (pacto en las mitades). Di-s
le informó luego que sus descendientes serían
esclavizados temporalmente en tierra extraña, pero
que saldrían de ella con gran riqueza.
Como no tenía hijos, Sarai sugirió a Avram que tomara a su sierva Hagar
como segunda esposa. Cuando Hagar advirtió que estaba encinta le
perdió el respeto a Sarai. Esta se sintió muy molesta y se quejó a Avram.
el patriarca devolvió a Sarai su autoridad sobre Hagar. Después, Sarai
tuvo que lidiar duramente con la sierva, que terminó huyendo. Un ángel
de HaShem apareció ante Hagar y le dijo que regresara, prometiéndole
que el hijo que tendría, Ishmael, sería el fundador de una nación
caracterizada por la violencia y el salvajismo. Cuando Avram llegó a la
edad de noventa y nueve años HaShem renovó Su pacto con él y cambió
Su nombre por el de Abraham, que significa “padre de una multitud de
naciones”. Luego le ordenó que se circuncidara, junto con todos los
demás varones de su casa. Desde entonces, todo niño varón judío que
nace debe ser circuncidado a los ocho días de edad. Este ha sido el signo
del pacto entre Di-s y Abraham y sus descendientes. HaShem dijo
también a Abraham que a partir de entonces Sarai sería conocida como
Sará, que significa “princesa”. Abraham cumplió prestamente la gran
mitzvá del Brit milá (circuncisión) en Ishmael y todos los varones de su
casa, y luego se circuncidóél mismo. Todo esto fue realizado por
Abraham a la luz del día, sin importarle lo que los demás podrían decir o
hacer, solamente cuidándose que no hubiera mujeres en el acto. Con este
acto de obediencia a los preceptos del Eterno de forma inmediata,
concluye la parashá de la semana.

Resumen de la Haftarah Lej Lejá:


La haftarah o lectura de los Profetas para esta semana contiene en
esencia, una evaluación y reflexión de la peregrinación de Avraham a la
tierra prometida y se conecta con nuestra Parashah semanal a través de la
batalla milagrosa de Avraham contra cuatro reyes sobre los que salió
victorioso con la ayuda del Eterno, salvando a Lot y su familia del
secuestro a que había sido sometido.

El profeta Isaías presenta la queja de Israel: “Mi


camino (el servicio a Dios) ha sido ignorado por YHWH
y he quedado sin paga por mi Dios”.
Ante esa queja,
el profeta nos recuerda la grandeza de nuestro
Creador afirmando que vendrá un tiempo cuando el
dará al cansado fuerzas advirtiendo que aquellos que
ponen su confianza en el Eterno, se renovarán como
las águilas, correrán y no se cansarán”.
El profeta nos recuerda entonces la grandeza de Avraham y cómo
después de llegar a Kenaán, pudo desafiar y vencer a reyes poderosos
anunciándose entonces que “las islas desaparecerán y la tierra será
removida” a pesar de la dureza de corazón de las naciones que ante todas
esas señales de la indignación de Dios, continuarán su camino y no
abandonarán sus ídolos.

No obstante, el Eterno promete a Israel un premio por


su lealtad a Dios: “No temas porque Yo estoy contigo,
no desmayes porque Yo soy tu Dios…”
Israel siempre
debe recordar que nuestro Hacedor, el Creador del
cielo y la tierra está detrás de todos los eventos que
sacudan el mundo guiando la historia hacia un final
feliz y por tanto, Su pueblo nunca será abandonado a
su suerte ni dejado olvidado en el camino.
En esta Haftarah el Eterno hace una extraordinaria declaración: “Todos
los que te vituperen serán avergonzados y los que tu mal buscan, serán
confundidos, los que se levanten contra ti serán como nada y
desaparecerán”.
Así ha sido durante toda la historia. Todo imperio que
se ha levantado contra Israel, ha quedado en el camino. Y los que en
nuestros días lo intenten, sabrán que lo hacen contra el que sostiene a
Israel: HaShem de los ejércitos es Su Nombre.

Resumen del HaTzofen HaMaljutí por Lej Lejá


En relación con nuestro Código Real, la sección para este Shabat nos
presenta al Ríbi estableciendo ciertas reglas de interpretación del Shabat
que son válidas para nosotros, especialmente lo que tiene que ver con el
orden de prioridades en relación con la importancia de la vida de cada ser
humano y las restricciones halájicas para las fiestas bíblicas,
especialmente el Shabat. El hombre tiene prioridad sobre el Shabat, no el
Shabat sobre el hombre, consecuentemente donde quiera que la vida del
hombre esté en peligro, toma precedencia sobre las leyes que rigen el
Shabat. El Ríbi, legislando siempre con el principio de la misericordia, se
vuelve un imán que atrae cada vez más y más hijos de Israel a la Toráh.

La narrativa continua y nos informa también cómo la


sola presencia del Maestro hacía milagros y además
nos introduce a la gran sección de la elección de
aquellos que estarían con él para aprender su doctrina
y luego ser enviados como sus representantes
oficiales. El Maestro también nos enseña acerca del
peligro de blasfemar contra la clara manifestación de la
Divinidad en el ejercicio de aquellos Milagros
proféticos que tenían lugar mientras realizaba su
avodá al Eterno.
En esta sección aprendemos también cómo el Maestro demanda
obediencia total a la Toráh, según aplique a cada uno y concluye con las
enseñanzas magistrales que realiza sobre su tema favorito y único: el
Reino de Dios. Da un ejemplo del mismo tomado del mundo natural y
luego en privado, explica a sus talmidim su significado preciso,
dejándonos así joyas extraordinarias acerca del tema central de su
servicio a su Dios.

SHABAT SHALOM

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