Emeli TAREA 4
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PROFESIONAL TECNICA EN
EL ESTADO DE
MICHOACÁN
MODULO: ENFERMERÍA
PEDIÁTRICA
GRUPO: 505
INVESTIGACIÓN
¿QUE SON LAS
ENFERMEDADES VÍAS
RESPIRATORIAS?
Las enfermedades respiratorias afectan a las vías nasales, los bronquios y los
pulmones, principalmente. Incluyen desde infecciones agudas como la neumonía y
la bronquitis a enfermedades crónicas como el asma y la enfermedad pulmonar
obstructiva crónica.
La tos persistente, la falta de aire (disnea) y las secreciones respiratorias son los
síntomas más frecuentes, cuya intensidad varía de una persona a otra, de acuerdo
a la enfermedad en cuestión, su grado de severidad y tiempo de evolución.
Rinitis
Es la inflamación del revestimiento mucoso de la nariz. Sus síntomas
incluyen estornudos, picor nasal, congestión nasal y secreción postnatal.
Según su causa puede ser alérgica, infecciosa (virus o bacterias) o deberse
al mal uso de medicamentos vasoconstrictores nasales (por ejemplo, los
descongestionantes). Un tabique nasal desviado, los tumores y los cuerpos
extraños también causan enfermedades respiratorias.
Rinosinusitis
Es la afectación de las cavidades paranasales. La rinosinusitis es la
complicación de una rinitis y se manifiesta por la emisión abundante de
mucosidad líquida por la nariz y opacidad de los senos en radiografía y
tomografía axial computarizada (TAC).
Faringitis
Es una infección viral o bacteriana de la
garganta. En este último caso, se requiere el
uso de antibióticos. La faringitis puede
causar fiebre, dolor al tragar, tos y malestar
general.
Amigdalitis
Es la inflamación de las amígdalas, un
órgano constituido por numerosos nódulos linfáticos ubicado en la garganta.
Las amígdalas ayudan a eliminar gérmenes y bacterias, pero cuando se
inflaman causan dificultad para deglutir, dolor de oído, fiebre, dolor de
cabeza y de garganta.
Bronquitis
Consiste en una irritación e inflamación de los bronquios, lo cual provoca el
estrechamiento de las vías respiratorias, cierta dificultad para respirar y la
acumulación de moco, además de tos. La principal causa de la bronquitis
es el humo del tabaco, así como la exposición a gases industriales o aire
contaminado.
Enfisema pulmonar
Patología pulmonar que causa la destrucción progresiva de los vasos
sanguíneos en los pulmones y alvéolos. En efecto, los alvéolos son
cavidades muy pequeñas en forma de pequeñas bolsas situadas en el
extremo de un bronquiolo. Son las ramificaciones más finas de los
bronquios. Las personas con enfisema tienen, por lo general, problemas
para respirar durante el ejercicio y el tabaquismo es la causa más
frecuente.
Asma
Enfermedad respiratoria crónica muy
frecuente en los niños, aunque también
afecta a los adultos. El asma provoca la
inflamación de los bronquios y dificulta las
tareas del resto del sistema respiratorio.
Las personas asmáticas experimentan
insomnio, fatiga, dificultad para respirar,
tos, silbidos en el pecho y problemas para
realizar las tareas cotidianas.
Neumonía
Es una de las enfermedades respiratorias más graves que existen. Esta
enfermedad aparece como consecuencia de una infección viral,
bacteriológica o por hongos, y sus síntomas más significativos son la fiebre,
los escalofríos, el dolor en el tórax, la pérdida del apetito, la respiración
rápida y la tos.
Cáncer de pulmón
Es una enfermedad que impide la respiración normal y puede extenderse a
otras partes del cuerpo. El tabaco es la principal causa de cáncer de
pulmón en el mundo, así como la contaminación del aire y los productos
químicos. La OMS lo considera como uno de los 5 tipos de cáncer que más
causa muertes en el mundo.
5. Combatir el sedentarismo
Realizar ejercicio físico de manera habitual es una manera de mantener las vías
respiratorias activas y saludables. Con el esfuerzo, nuestro cuerpo necesitará más
oxígeno, y el sistema respiratorio es el encargado de introducirlo en el organismo
para producir energía a la vez que elimina el dióxido de carbono de la sangre. No
obstante, si tu ritmo de vida es muy sedentario, deberías empezar de manera
gradual. Es preferible hacer sesiones cortas de intensidad media e ir aumentando
a medida que nuestro cuerpo se adapte.
6. Suero para la mucosidad
Uno de los primeros síntomas más frecuentes en las enfermedades respiratorias
es la mucosidad. Si no tenemos ninguna otra molestia es posible que se trate de
un simple resfriado. En esos momentos, podríamos usar suero fisiológico para
limpiar la mucosidad y aliviar la congestión nasal.
7. No automedicarnos nunca
Automedicarnos cuando notemos algunos síntomas es un grave error que puede
comportar riesgos para nuestra salud. Además, en el caso de los antibióticos, solo
son efectivos en caso de ser una infección bacteriana. Por tanto, tomarlos de
manera indebida puede provocar resistencias en nuestro organismo, además de
perjudicar a nuestro intestino.