Desarrollo Fetal
Desarrollo Fetal
Desarrollo Fetal
PARVULARIO - INFOCAL
Segundo mes
En esta etapa del embarazo los órganos están más desarrollados. El feto aún no ve bien y no siente,
mide 3 centímetros y pesa alrededor de 3 gramos. El cerebro, el hígado, el estómago y el páncreas se
forman completamente. Las extremidades, la columna vertebral y los primeros músculos comienzan a
estirarse y el corazón comienza a desarrollarse hacia la derecha y hacia la izquierda. La nariz y las orejas
se hacen visibles, y la lengua y el nervio óptico empiezan a definirse.
Tercer mes
Durante el tercer mes el feto triplica su tamaño. Se desarrollan las células nerviosas y el esqueleto
comienza a desarrollarse. Los dedos pueden doblarse para formar un puño, pero el cerebro todavía no
controla ningún movimiento. Los ojos se forman definitivamente, la boca se abre, los labios se delinean
y lentamente las fosas nasales comienzan a abrirse.
Los instintos de succión también comienzan a desarrollarse y al final del mes (decimotercera semana), el
feto pesará unos 65 gramos y medirá 12 centímetros.
Cuarto mes
Se forma el apéndice del intestino y el líquido amniótico entra y sale de los pulmones, aunque aún no
haya desarrollado la función respiratoria.
El aparato auditivo está definido; el feto todavía no ve, pero la retina de los ojos ya es sensible a la luz.
Quinto mes
Este mes la mujer deberá someterse a la ecografía morfológica. Los músculos se fortalecen, una ligera
vellosidad comienza a ser visible en la cabeza y se definen las huellas dactilares. Es el momento de la
segunda ecografía, llamada morfológica, que a menudo permite ver el sexo del bebé. Se definen las
huellas dactilares, un ligero vello comienza a cubrir la cabeza, el iris del ojo se pigmenta. Alrededor de la
semana veintiuno, el feto pesa unos 300 gramos y mide unos 24 centímetros.
Sexto mes
Durante este mes se están formando los órganos sexuales, las yemas dentales y las uñas. Comienza una
de las fases más emocionantes para la madre y el padre, el bebé empieza a sentir y reaccionar al tacto y
a los sonidos.
Séptimo mes
Es la fase en la que se completa la maduración nerviosa y cerebral. El bebé puede abrir los ojos y sentir
la luz. El peso es de unos 1.500 gramos y mide unos 37 centímetros de largo.
Octavo mes
Durante el octavo mes, la audición se refina, el bebé se alimenta del líquido amniótico y se desarrollan el
sentido del gusto, el tracto digestivo, los riñones y las uñas. El bebé comienza a ser sensible al dolor.
Noveno mes
Durante el último mes de embarazo, el bebé se vuelve más regordete debido a la acumulación de grasa
subcutánea. Comienza a colocarse con la cabeza hacia abajo (en el 95% de los casos), preparándose para
el parto. Sin embargo, el cerebro aún no se ha desarrollado del todo, pero continúa haciéndolo
rápidamente.
CABE RECALCAR QUE EL SEXO DEL BEBE SE CONOCE A TRAVES DE ECOGRAFIA, DURANTE EL 4 MES O
SEMANAS DE LA 16 A LA 20.
LA PLACENTA.
Por lo general, se sitúa en la cara anterior o posterior del útero, dejando libre la cérvix, que conforma el
canal del parto. No obstante, en el caso de que la placenta se ubique en la parte inferior de la cavidad
uterina, a lo que se denomina placenta previa, puede tapar total (oclusiva) o parcialmente (no oclusiva)
el cuello del útero.
La placenta crece con el feto hasta las semanas previas al parto, momento en el que llega a pesar
aproximadamente 500 gramos y alcanzar los 20-25 centímetros de diámetro y 2-3 centímetros de
grosor. En el caso de que el embarazo se prolongue más allá de las 41 semanas existe un claro riesgo de
que deje de cumplir con su función; tanto es así que se la denomina placenta envejecida. Además, el
parto no finaliza hasta que la placenta es expulsada totalmente.
También produce la hormona HCG hormona gonadotropina coriónica humana durante la gestación,
unida al feto por el cordon umbilical que ide aproximadamente de 50 a 60 cm. De largo compuesta en su
interior por 2 arterias y una vena.
Existen diversos factores que pueden afectar la salud de la placenta durante el embarazo. Por ejemplo:
Edad de la madre. Algunos problemas de la placenta son más comunes en las mujeres mayores,
especialmente después de los 40.
La ruptura del saco amniótico antes del trabajo de parto. Durante el embarazo, el bebé está
rodeado y protegido por una membrana llena de líquido llamada saco amniótico. Si el saco
gotea o se rompe antes de que comience el trabajo de parto, también llamado ruptura de la
fuente, aumenta el riesgo de ciertos problemas de la placenta.
Cirugía de útero previa. Una cirugía previa de útero, como una cesárea o una cirugía para
extirpar fibromas, aumenta el riesgo de presentar determinados problemas de la placenta.
Placenta previa
Placenta previa. Esta afección ocurre cuando la placenta cubre parcial o totalmente el cuello del
útero (la salida del útero). La placenta previa es más frecuente a comienzos del embarazo y se
puede solucionar a medida que el útero crece.
Este trastorno puede generar un sangrado vaginal abundante durante el embarazo o el parto. El control
de esta afección depende del volumen del sangrado, si el sangrado se detiene, la etapa del embarazo, la
posición de la placenta, y tu salud y la de tu bebé. Si la placenta previa persiste hasta finales del tercer
trimestre, tu proveedor de atención médica te recomendará una cesárea.
unida al útero con firmeza. Esta afección sucede cuando los vasos sanguíneos y otras partes de
la placenta crecen con demasiada profundidad en la pared del útero. Esto puede causar una
abundante pérdida de sangre durante el parto.
En casos graves, la placenta invade los músculos del útero o crece a través de la pared uterina. Es
probable que su proveedor de atención médica le recomiende una cesárea seguida de la extirpación del
útero.
Placenta retenida. Si no se expulsa la placenta en el plazo de 30 minutos después del parto, esto
se conoce como placenta retenida. Una placenta retenida puede ocurrir porque la placenta
queda atrapada detrás de un cuello del útero parcialmente cerrado o porque la placenta está
todavía adherida a la pared uterina. Si no se trata, la placenta retenida puede generar una
infección grave o una pérdida de sangre potencialmente mortal.
Consulta a tu proveedor de atención médica durante el embarazo si presentas los siguientes síntomas:
Sangrado vaginal
Dolor abdominal
Dolor de espalda
Contracciones uterinas
El peso del recién nacido debe oscilar entre 2.500 kg y 4.000 kg. Asi mismo la talla entre 48 y 52 cm.
MECONIO. El meconio corresponde a las primeras heces eliminadas por un recién nacido poco después
del nacimiento, antes de que el bebé empieza a digerir leche materna o leche maternizada en polvo. En
algunos casos, el bebé elimina meconio mientras aún está dentro del útero.
DILATACION. Dilatación significa que el cuello uterino se abre. A medida que se acerca el trabajo de
parto, el cuello uterino puede empezar a afinarse o estirarse (borrarse) y abrirse (dilatarse). Esto prepara
el cuello uterino para que el bebé pase por el canal de parto (vagina).
BORRAMIENTO. Borramiento significa que el cuello uterino se estira y se vuelve más delgado. Dilatación
significa que el cuello uterino se abre. A medida que se acerca el trabajo de parto, el cuello uterino
puede empezar a afinarse o estirarse (borrarse) y abrirse (dilatarse).
TAPON MUCOSO. El flujo vaginal en el embarazo está, generalmente, aumentado. De forma que no es
fácil distinguir si lo que estamos expulsando es flujo o tapón mucoso. Si notamos aumento brusco del
flujo vaginal, con un aspecto gelatinoso y viscoso, probablemente, estemos expulsando parte del tapón
mucoso.
LIQUIDO AMNIOTICO. Líquido claro o amarillento que rodea y protege al feto a medida que crece
durante el embarazo. El líquido amniótico hace de colchón para el bebé y ayuda a mantener constante
la temperatura en el útero.
El líquido amniótico se mueve (circula) constantemente a medida que el bebé lo traga y lo "inhala", y
luego lo libera.
A mantener una temperatura relativamente constante alrededor del bebé, protegiéndolo así de
la pérdida de calor
Una cantidad excesiva de líquido amniótico se denomina polihidramnios. Esto puede ocurrir con
embarazos múltiples (mellizos o trillizos), anomalías congénitas (problemas que existen cuando el bebé
nace) o diabetes gestacional.
Una cantidad muy pequeña de líquido amniótico se denomina oligohidramnios.Esto puede ocurrir con
embarazos tardíos, ruptura de membranas, disfunción placentaria o anomalías fetales.
Las cantidades anormales de líquido amniótico pueden llevar a que el proveedor de atención médica
vigile el embarazo con mayor cuidado. La extracción de una muestra de líquido amniótico, a través de
una amniocentesis, puede proporcionar información con respecto al sexo, estado de salud y desarrollo
del feto.