Género Dramático
Género Dramático
Género Dramático
GÉNERO DRAMÁTICO
INTRODUCCIÓN
El género dramático corresponde a un texto literario hecho para ser representado por actores en un
escenario, y que presenta acciones en un mundo ficticio a partir de las voces de los personajes y del
discurso del acotador. Podemos apreciar, entonces, que la narrativa y la dramática tienen en común
el presentar un mundo ficticio, acciones, personajes y ambientes; pero la diferencia está en el modo
en que lo dramático se vincula con la recepción de la obra. Una obra dramática está escrita para ser
representada en un escenario, sin la necesidad de un narrador que guíe el desarrollo del texto, es
decir, se vincula a otra manifestación artística: el teatro. La potencial representación ante
espectadores, se llama VIRTUALIDAD TEATRAL, es decir, la potencial capacidad de ser representada
sobre un escenario. Por lo tanto, debemos diferenciar entre la “OBRA DRAMÁTICA” y la “OBRA
TEATRAL” o representación en un escenario. Sólo la primera puede ser considerada una obra literaria,
ya que la obra teatral es un arte visual, un espectáculo (specta = atención // oculo = ojo), vinculándose
con otro tipo de discursos estéticos no literarios.
MODERADOR
Una de las diferencias principales entre estos dos géneros, se dará en la presentación de
las acciones, pues la narrativa permite el desorden en el relato de la historia para generar
efectos en el lector; mientras que el drama, para ser representado, debe simplificar la
historia en beneficio de la acción; la otra diferencia está en el número de conflictos, pues
la narrativa permite la presencia de un mayor número de personajes, y por ende, de más
historias subsidiarias que el drama.
1.2 Los personajes
Los personajes en tanto simulaciones de caracteres reales o posibles, son esenciales en
las obras literarias. Nos interesan sus rasgos distintivos, sus deseos, sus conflictos, qué
pasa con ellos, qué los motiva a actuar del modo que lo hacen, y cómo nos representan o
nos identifican. La identificación con un personaje o con lo representado se llama mímesis,
y es común a varias formas artísticas y literarias. Los personajes se pueden clasificar según
distintos aspectos, que nos permiten establecer su importancia dentro de la obra y cómo,
según ello, operan en el conflicto.
1.3 Ambientes
Una de las características esenciales de toda obra dramática, es que posee virtualidad teatral, es decir,
tiene como objetivo ser representada ante un público, sobre un escenario, convirtiéndose en obra de
teatro, en una cosa distinta a aquello que leemos en un texto. La virtualidad teatral en la obra
dramática apunta a la posibilidad de ser representada, y para ello el “hablante dramático” nos entrega
las instrucciones necesarias para representar la obra. Sin embargo, no nos dice todo. El actor que
interpretará al personaje debe decidir gestos y acciones para construir su interpretación. Esto lo hará
a partir de inferencias y de su imaginación desde lo dicho por los personajes. Nosotros, al leer un
drama, debemos llenar los mismos vacíos que el actor, por lo que es fundamental la atención a los
detalles y connotaciones de lo dicho por los personajes.
• El lenguaje de las acotaciones: Es la palabra del emisor ficticio, en el texto se reconoce por estar
escrita entre paréntesis, letra cursiva o negrita, el receptor de ellas suele ser el director que pondrá
en escena la obra, aunque a veces está destinada al actor y hasta al lector, para que imagine mejor la
acción. • La organización de la multiplicidad de voces dramáticas (parlamentos de los personajes), que
son en definitiva las que nos dan a conocer las acciones del mundo dramático.• Toda la información
escrita que estructura la obra (información estructurante), lo que permite saber sobre su división
externa, los personajes que participan, entre otros.
En el lenguaje dramático predomina la función apelativa, o conativa, es decir, tiene una estructura
dialógica. El interlocutor se identifica mediante expresiones calificadas como vocativos, ubicadas en
el texto entre comas. El mundo se “representa” directamente ante el lector, o el espectador (en el
caso de que esté en el teatro), a través de las diversas formas del discurso de los personajes: diálogo,
monólogo, soliloquio y aparte:
2.2.1 Diálogo: Intercambio de mensajes entre dos o más personajes, alternando los papeles de emisor
y receptor. Se presenta a través de los parlamentos de los personajes, o voces dramáticas.
2.2.2 Monólogo: Forma discursiva que permite al personaje, estando solo en el escenario, plantear
dudas acerca de las decisiones o compromisos que va a tomar en su debate interno. Es la expresión
de pensamientos y sentimientos sin esperar respuesta. Rememora acontecimientos y descubre el
mundo interior del personaje.
2.2.3 Soliloquio: forma discursiva en la que el personaje habla en voz alta, estando solo, refiriéndose
no a sí mismo, sino más bien al acontecer, con presencia de un auditorio no necesariamente
identificable. Supone la presencia de un interlocutor.
2.2.4 Aparte: Forma discursiva en donde un personaje habla en voz alta, suponiendo que los otros
personajes presentes en la escena, no lo escuchan, estableciendo, además, una cierta complicidad con
otro personaje o con el público.
Los elementos internos (acción y conflicto) se organizan formalmente a través de unidades claramente
diferenciadas, que constituyen la estructura externa de la obra dramática.
2.3.1 Acto: Se define como cada una de las unidades mayores en que se divide la forma externa de un
drama. La división en actos se relaciona con la disposición que se desea dar a la forma interior. La
división en tres actos proviene de las partes que Aristóteles distingue en la tragedia: principio, medio
y fin, y corresponden a la disposición de la forma interior en exposición, desarrollo y desenlace del
conflicto dramático. La otra división tradicional del drama es en cinco actos, basada en la distinción
de cinco partes inherentes a la acción dramática: exposición, intensificación, culminación, declinación
y desenlace. Al pasar de un acto al otro, aumenta la tensión del conflicto. En lo formal, el cambio de
acto está indicado por la subida y bajada del telón de boca, grueso cortinaje que separa el escenario
del espectador.
2.3.2 Cuadro: División de la obra dramática en su forma externa; se relaciona con la ambientación
física. Los cambios de la escenografía en la puesta en escena, indican los distintos cuadros.
2.3.3 Escena: Fragmento del drama cuyo principio y fin están determinados por la entrada o salida de
personajes. Cuando la escena coincide con la entrada y salida de personajes agentes en el conflicto,
coincide también con unidades de la acción interna.
FACILITADOR
3.1 Tragedia
La tragedia es la representación de una acción extraordinaria en que, a través de la lucha heroica con
el destino o el choque violento de la voluntad contra las propias pasiones o el conflicto del deber
frente a la ley, produce en el público una expresión de asombro, terror y compasión. El final es siempre
trágico. Como veíamos, este subgénero se originó en Grecia, en las fiestas dedicadas a Dionisios, al
terminar la vendimia o cosecha de la uva. Y sus principales exponentes fueron: Tespis, Esquilo,
Sófocles y Eurípides. Siglos más tarde, las naciones modernas que más se destacaron en la tragedia,
fueron Inglaterra, con el autor William Shakespeare y su clásico Hamlet, príncipe de Dinamarca, y
Francia, con Pierre Corneille y Jean Racine.
3.2 Comedia
La comedia muestra, desde el punto de vista humorístico, distintos aspectos de la vida cotidiana del
ser humano, provocando en los espectadores gracia y risa, siendo el desenlace siempre alegre y feliz.
Se cree que el origen de la comedia también viene de las fiestas en honor a Dionisios, donde se
interpretaban canciones burlescas. Al canto se le agregó un bufón (algo así como un payaso) y los
autores ridiculizaban con sátiras las costumbres y actos de los gobernantes, causando una buena
acogida en los espectadores. En Grecia sus más relevantes autores fueron Aristófanes y Menandro.
En Roma cultivaron la comedia Plauto y Terencio.
3.3 Drama
SUBGÉENROS MENORES
Usando símbolos y con un fondo religioso, desarrolla una acción en que intervienen personajes
sobrenaturales o abstractos (irreales) como la fe, la gracia y el pecado, con el fin principal de resaltar
el sacramento de la Eucaristía. Uno de los más conocidos autos sacramentales es el Gran teatro del
mundo, de Pedro Calderón de la Barca.
3.5 El paso
Es una farsa y también una pieza dramática breve. 3.6 El entremés Es un acto cómico corto referido
a un asunto de carácter popular, que se representa en los entreactos de la obra principal. Ejemplo: El
retablo de las maravillas, de Miguel de Cervantes.
3.7 El sainete
Es una corta pieza teatral de carácter burlesco, que refleja tipos y costumbres populares, emparentada
con la zarzuela. También existen otros géneros que combinan las artes de la representación, como los
siguientes:
3.8 La ópera
Es un drama musical cantado por los actores. Puede ser trágica o cómica, e incluir recitativos.
Ejemplos hay muchos. En el siglo XIX, en Italia se escribieron, entre otras, La Traviata y Rigoletto, por
Giuseppe Verdi; y El barbero de Sevilla, de Joaquín Rossini. En Alemania Tristán e Isolda y Parsifal, de
Richard Wagner. En Francia, Carmen, de Georges Bizet.
3.9 La zarzuela
Más breve que la ópera, trata generalmente temas de amor, con más música que recitación,
desarrollados en forma optimista, sentimental y picaresca. Un ejemplo es El murciélago, de Johann
Strauss.
3.11Comedia musical
Pieza teatral procedente de Estados Unidos, compuesta por diálogos, números musicales y danzas.
Es la representación de un argumento por medio de la danza y música. También existen otras formas
de representar una obra, como el teatro de marionetas, el de títeres, el de sombras y el de mimos.
MEDIADOR