Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

22 - La Glandula Tiroides

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 8

GUIA VISUAL EXPLICADA DEL CUERPO HUMANO

Glándula Tiroides
Es una glándula neuroendocrina, situada
justo debajo de la nuez de Adán, junto al cartílago tiroides sobre la
tráquea

Pesa entre 15 y 30 gramos en el adulto, y está formada por dos lóbulos en forma de
mariposa a ambos lados de la tráquea, ambos lóbulos unidos por el istmo.
La glándula tiroides regula el metabolismo del cuerpo, es productora de proteínas y regula
la sensibilidad del cuerpo a otras hormonas.

La tiroides tiene una cápsula fibrosa que la cubre totalmente y envía tabiques interiormente
que le dan el aspecto lobuloso a su parénquima. Además la aponeurosis cervical profunda se
divide en dos capas cubriendo a la tiroides en sentido anterior y posterior dándole un
aspecto de pseudocápsula, que es el plano de disección usado por los cirujanos.

Fisiología
La tiroides participa en la producción de hormonas, especialmente tiroxina (T4) y
triyodotironina (T3). También puede producir (T3) inversa. Estas hormonas regulan el
metabolismo basal y afectan el crecimiento y grado de funcionalidad de otros sistemas del
organismo. El yodo es un componente esencial tanto para T3 como para T4. Las glándulas
paratiroides ubicadas en la cara posterior de la tiroides sintetizan la hormona
paratohormona que juega un papel importante en la homeostasis del calcio. La tiroides es
controlada por el hipotálamo y la glándula pituitaria (o hipófisis).

La unidad básica de la tiroides es el folículo, que está constituido por células cuboidales que
producen y rodean el coloide, cuyo componente fundamental es la tiroglobulína, la molécula
precursora de las hormonas. La síntesis hormonal está regulada enzimáticamente y precisa
de un oligoelemento esencial, el yodo, que se obtiene en la dieta en forma de yoduro. El
yodo se almacena en el coloide y se une con fragmentos de tiroglobulina para formar T3 o
T4. Cuando la concentración de yodo es superior a la ingesta requerida se inhibe la
formación tanto T4 como de T3, un fenómeno llamado el Efecto de Wolff-Chaíkoff. La
liberación de hormonas está dada por la concentración de T4 en sangre; cuando es baja en
sangre se libera TSH, que promueve la endocitosis del coloide, su digestión por enzimas
lisosómicas y la liberación de T4 y T3 a la circulación. Las hormonas circulan por la sangre
unidas a proteínas, de la cual la más importante es la globulina transportadora de tiroxina.

Las hormonas tiroideas tienen efectos sobre casi todos los tejidos del organismo. Aumentan
la termogénesis y el consumo de oxígeno, y son necesarias para la síntesis de muchas
proteínas; de ahí que sean esenciales en los periodos de crecimiento y para la organogénesis
del sistema nervioso central. También influyen sobre el metabolismo de los hidratos de
carbono y de los lípidos. La T4 se convierte en T3 en los tejidos periféricos. La T4 constituye
el 93% de las hormonas metabólicamente activas, y la T3 el 7%.

La hormona estimulante de la tiroides (TSH) actúa sobre todos los procesos que controlan
la síntesis y liberación de la hormona tiroidea, también actúa aumentando la celularidad y
vascularización de la glándula. La TSH está regulada por la concentración de hormona
tiroidea libre en sangre periférica por un mecanismo de retroalimentación negativa.
SIGNOS Y SINTOMAS DEL HIPOTIROIDISMO

La secreción de TSH está regulada básicamente por la retroalimentación negativa que


ejercen las hormonas tiroideas sobre la hipófisis, aunque también por factores
hipotalámicos como la TRH.

Tiroxina
La hormona más importante que produce la tiroides contiene yodo y se llama tiroxina. Ésta
tiene dos efectos en el cuerpo:
Control de la producción de energía en el cuerpo: la tiroxina es necesaria para mantener la
tasa metabólica basal a un nivel normal.

Durante los años de crecimiento: mientras la hormona del crecimiento estimula el


aumento de tamaño, la tiroxina hace que los tejidos vayan tomando la forma apropiada a
medida que van creciendo. Es decir, la tiroxina hace que los tejidos se desarrollen en las
formas y proporciones adecuadas.

Cuantificación del metabolismo basal: las hormonas tiroideas (HT) regulan el


metabolismo basal; por ello, la cuantificación de éste fue la primera técnica que se utilizó
para valorar la función tiroidea. Hoy existen otras pruebas debido que el metabolismo basal
puede estar modificado por muchas otras causas no tiroideas.

Cuantificación de captación de yodo radiactivo: es algo inespecífica, y por lo tanto poco


usada. La captación está aumentada en algunos tipos de hipertiroidismo (enfermedad de
Graves Basedow, adenoma tirotoxico, etc.) y en aquellas circunstancias en las que se eleva la
TSH en presencia de un tejido tiroideo funcionante (deficiencia de yodo, deficiencia de las
enzimas para la síntesis de HT). La captación está disminuida en el hipotiroidismo, en las
personas que reciben grandes cantidades de yodo y tiroiditis, antes de administrar yodo
radioactivo se debe descartar un embarazo. Con el yodo radioactivo se puede obtener una
imagen de las zonas de la tiroides (gammagrafía tiroidea). Este método nos revela la
anatomía funcional de la tiroides.

Ecografía tiroidea: aquí podemos medir el tamaño, identificación de nódulos, definir sus
características; es de importancia en niños para poder diferenciar la patología de tiroides de
un quiste tirogloso.

Punción-aspiración: se puede practicar una citología de la lesión existente.

Medición de T4 libre y TSH: una T4 libre alta indica tirotoxicosis y baja hipotiroidismo. La
TSH esta baja en pacientes hipertiroideos y altas en el hipotiroidismo. Si se encuentra una
T4 normal y una TSH suprimida, es necesario medir la T3 libre para descartar una
tirotoxicosis.

Medición de anticuerpos antitiroglobulina y antiperoxidasa: permite valorar los


fenómenos autoinmunitarios de la tiroides (como en la enfermedad de Graves Basedow o en
la tiroiditis de Hashimoto).

Excreción urinaria de yodo (yoduria): es un indicador fiable de la ingestión de yodo.

Anatomía
La tiroides tiene la forma de una mariposa, de color gris rosada y está compuesta por dos
lóbulos que asemejan las alas de una mariposa, un lóbulo derecho y un lóbulo izquierdo
conectados por el istmo. La glándula está situada en la parte frontal del cuello a la altura de
las vértebras C5 y T1, junto al cartílago tiroides, yace sobre la tráquea que rodea hasta
alcanzar posteriormente al esófago y está cubierta por la musculatura pretiroidea, el
músculo platisma (antiguamente llamado músculo cutáneo) del cuello, el tejido subcutáneo
y la piel. Durante el proceso de la deglución, la glándula tiroides se mueve, perdiendo su
relación con las vértebras.

La tiroides está recubierta por una vaina aponeurótica denominada cápsula de la glándula
tiroides que ayuda a mantener la glándula en su posición. La porción más externa de la
cápsula de la tiroides se continúa con la aponeurosis cervical y hacia atrás con la vaina
carotídea. La glándula tiroides es recubierta en su cara anterior por los músculos
infrahioideos y lateralmente por el músculo esternocleidomastoideo. Por su cara posterior,
la glándula está fijada a los cartílagos tiroides y traqueal y el músculo cricofaríngeo por
medio de un engrosamiento de la aponeurosis que forma el ligamento suspensorio de Berry.

Irrigación
La glándula tiroides es irrigada por dos arterias:

Arteria tiroidea superior. Es la primera ramificación de la arteria carótida externa, e irriga


principalmente la parte superior de la glándula.

ASI ES EL SISTEMA LINFÁTICO


Arteria tiroidea inferior. Es la rama principal del tronco tirocervical, que se deriva de la
arteria subclavia.

El flujo sanguíneo de la glándula es muy alto en relación a su tamaño (4 a 6 ml/min/g). En el


10% de las personas existe una tercera arteria denominada Arteria Tiroidea Ima, media o de
Neubauer, proveniente del cayado aórtico o del tronco braquiocefálico.

Hay tres venas principales que drenan la tiroides. Las venas tiroideas superior, media e
inferior que desembocan en la venas yugulares internas. Forman un rico plexo alrededor de
la glándula.

Los linfáticos forman alrededor de la glándula un plexo paratiroideo. Los troncos que
parten de él se dividen en linfáticos descendentes, que terminan en ganglios situados
delante de la tráquea y encima del timo y en linfáticos ascendentes, los medios terminan en
uno o dos ganglios prelaríngeos y los laterales en los ganglios laterales del cuello.

La inervación es de dos tipos:

Simpática. Proviene del simpático cervical.

Parasimpática. Proviene de los nervios laríngeo superior y laríngeo recurrente, ambos


procedentes del nervio vago.

ESTRUCTURA DE LA GLANDULA TIMO


Desarrollo
La tiroides se desarrolla en el embrión entre la semana 3 y 5 del embarazo.

Trastornos del desarrollo


Atireosis: ausencia de tiroides en el nacimiento por fallar la producción el esbozo tiroideo
embrionario, la causa más frecuente de hipotiroidismo congénito (1 en cada 3.000 nacidos
vivos).

Tiroides ectópica: cuando la glándula no está ubicada en su sitio anatómico por fallas en el
descenso del divertículo tiroideo.

Remanentes del conducto tirogloso: Ocurre cuando en el conducto tirogloso permanecen


remanentes embrionarias de la tiroides.

Quiste tirogloso: masa benigna en la cara anterior del cuello.

Hipertiroidismo
El hipertiroidismo, es consecuencia de una hiperplasia de la glándula a causa de una
secreción excesiva de TSH (acrónimo inglés de “hormona estimulante de la tiroides”), o
bien a la estimulación de la tiroides por TSI (inmunoglobulina tireostimulante), que son
anticuerpos que se unen a los mismos receptores que lo haría la TSH, por lo que la glándula
sufre una estimulación muy intensa que causa el hipertiroidismo.

La tirotoxicosis (intoxicación por hormonas tiroideas) es el síndrome debido a una excesiva


acción de las HT sobre el organismo. El exceso de HT circulantes puede deberse a una
hiperfunción del tiroides, a una destrucción del tiroides con una producción ectópica de
hormonas tiroideas o a una ingestión exógena excesiva de HT.

Hipersecreción
La hiposecreción, si el individuo es adulto, se le produce un mixedema, que es un cúmulo de
líquidos en tejido subcutáneo, que hincha la piel como consecuencia de un cúmulo de agua
en ella. Otros problemas pueden ser la reducción del metabolismo, obesidad, ojos hundidos,
depresión nerviosa, descenso de la actividad cardíaca. Se acompaña en ocasiones la
hiposecreción por un aumento de tamaño en la glándula, pero a expensas del tejido
intersticial, que se denomina “bocio típico”.

Hipotiroidismo
La causa más frecuente en la actualidad es la presencia de anticuerpos antitiroídeos, los que
atacan a la tiroides y llevan a la disminución de la producción de hormonas tiroídeas. En
épocas anteriores la causa más frecuente de hipotiroidismo era la deficiencia de yodo, esto
desapareció con la yodación de la sal. El hipotiroidismo producido por la presencia de
anticuerpos antitiroídeos se denomina enfermedad de Hashimoto.

El hipotiroidismo también se llama mixedema, ya que se produce un acúmulo generalizado


de mucopolisacáridos en los tejidos subcutáneos, que provoca un edema especial que no
deja fóvea (no debe confundirse con el mixedema pretibial de la enfermedad de
Graves-Basedow).

Cuadro clínico
Los síntomas del hipotiroidismo se originan por la acción insuficiente de las HT sobre el
organismo: fatigabilidad fácil, cansancio, retención de líquido, lentitud mental, aumento de
peso. En casos avanzados se puede detectar edema generalizado, voz ronca, caída de
cabello, especialmente de la zona externa de las cejas. También el hipotiroidismo se puede
asociar a estados depresivos. En ciertos casos puede determinar deterioro de la función de
otros órganos como el corazón, riñones, hígado, etc.

Tratamiento
El diagnóstico se realiza a través de la evaluación clínica, idealmente efectuada por un
endocrinólogo y la medición de Hormona Tiroestimulante (TSH),T3 y T4, también es
recomendable la determinación de anticuerpos antitiroideos. El tratamiento es la
reposición de hormona tiroidea o levotiroxina, vía oral. El paciente debe controlarse
periódicamente para determinar la necesidad de cambio de la dosificación.

También podría gustarte