PROTEINAS
PROTEINAS
PROTEINAS
LOS AMINOÁCIDOS
Para formar las proteínas, los aminoácidos se unen entre sí por enlaces peptídicos, es
decir, la unión del extremo con el grupo funcional amino (-NH 2) de un aminoácido, con
el extremo que contiene el grupo funcional carboxilo (-COOH) de otro aminoácido. Así,
se van enlazando los aminoácidos en distintas combinaciones y tantas veces como sea
necesario, hasta formar cada proteína específica. Un ejemplo de cómo se forma el
enlace peptídico lo podemos ver en la siguiente figura, donde se representa la alanina
en color rosa, la cisteína en color rojo, y el enlace peptídico en color azul:
TIPOS DE PROTEÍNAS
Las proteínas compuestas están formadas por diversas sustancias en sus aminoácidos.
Las proteínas son muy importantes para el organismo, ya que participan en todos
los procesos que realiza. Se pueden clasificar según:
Su composición química:
Proteínas simples. También conocidas como holoproteínas, están
conformadas solo por aminoácidos o sus derivados.
Proteínas conjugadas. También conocidas como heteroproteínas,
su estructura está formada, además de por aminoácidos, por otras
sustancias como metales, iones, entre otras.
Su forma tridimensional (distribución en el espacio de su estructura):
Proteínas fibrosas. Su estructura tiene forma de fibras largas y
son insolubles en agua.
Proteínas globulares. Su estructura es enrollada y compacta, con
casi forma esférica y suelen ser solubles en agua.
Las dos propiedades principales de las proteínas, que permiten su existencia y el correcto
desempeño de sus funciones son la estabilidad y la solubilidad.
La primera hace referencia a que las proteínas deben ser estables en el medio en el que estén
almacenadas o en el que desarrollan su función, de manera que su vida media sea lo más
larga posible y no genere contratiempos en el organismo.
En cuanto a la solubilidad, se refiere a que cada proteína tiene una temperatura y un pH que
se deben mantener para que los enlaces sean estables.
Las proteínas tienen también algunas otras propiedades secundarias, que dependen de las
características químicas que poseen. Es el caso de la especificidad (su estructura hace que
cada proteína desempeñe una función específica y concreta diferente de las demás y de la
función que pueden tener otras moléculas), la amortiguación de pH (pueden comportarse
como ácidos o como básicos, en función de si pierden o ganan electrones, y hacen que el pH
de un tejido o compuesto del organismo se mantenga a los niveles adecuados) o la capacidad
electrolítica que les permite trasladarse de los polos positivos a los negativos y viceversa.
Cuando las proteínas son sometidas a altas temperaturas, a cambios drásticos de pH, a la
acción de algunos solventes orgánicos, entre otros factores, se desnaturalizan. La
desnaturalización es la pérdida de las estructuras secundaria, terciaria y cuaternaria, lo
que hace que quede la cadena polipeptídica sin ninguna estructura tridimensional fija,
podría decirse, queda reducida a su estructura primaria. Si la proteína recupera estas
estructuras (regresa a su forma original) entonces se renaturaliza. En la siguiente imagen
se representan las diferentes estructuras de una proteína:
Cuando las proteínas son sometidas a altas temperaturas, a cambios drásticos el PH, a la
acción de algunos solventes orgánicos, entre otros factores, se desnaturalizan.
Existen dos tipos de alimentos ricos en proteínas, los de origen vegetal y los de origen
animal. Los alimentos de origen animal altamente proteicos son los huevos, el pescado,
los productos lácteos y las carnes rojas y blancas. Los frutos secos, la soja, los cereales
y las legumbres son alimentos altos en proteínas de origen vegetal.