La Neutralidad Del Dinero
La Neutralidad Del Dinero
La Neutralidad Del Dinero
La importancia del dinero en el corto y en el largo plazo es uno de los ejes que dividen
el pensamiento económico. Hay quienes piensan que el dinero es solo un velo,
totalmente neutral al quehacer económico, y hay quienes aseguran que el dinero cumple
un rol central, a lo menos en el corto plazo. ¿Afecta el dinero la actividad económica
real?
Pese a que este debate se ha mantenido por siglos, no existe un consenso que determine
con rigor el rol del dinero en la economía.
De acuerdo con estas escuelas, los fenómenos monetarios no afectan los fenómenos
reales de la economía y solo tienen un único impacto en el nivel general de precios: es
decir que la inflación es siempre y en todo momento un fenómeno monetario...
Las controversias sobre el papel del dinero en la economía han sido permanentes entre
las distintas escuelas de pensamiento y autores, estando su origen, probablemente, en la
época de desarrollo del pensamiento escolástico. Algunos de los pensadores que
podemos situar en esta corriente medieval ya bosquejaban una primitiva “teoría
cuantitativa del dinero”, al asociar vagamente las variaciones en los precios de las
mercancías con la entrada de oro y plata en Europa procedente de las colonias españolas
de América.
De igual modo, en un sistema capitalista como el actual, donde prevalece el dinero fiat o
fiduciario, cuyo valor se sustenta en una relación de confianza en la institución emisora
(al no tener dicho dinero como contrapartida un determinado montante de metales
preciosos), y donde opera el multiplicador monetario a través del control de reservas por
parte del Banco Central, la exogeneidad vendría determinada en cuanto a que los bancos
actúan como simples agentes pasivos, intermediando entre los depósitos de los
ahorradores y los préstamos a sus clientes, y también en cuanto a que el Banco Central
es capaz de controlar tanto a corto como a largo plazo la base monetaria.
Esta concepción del dinero, como mero agilizador de las transacciones (como “vehículo
para transportar el valor de las cosas”, decía Say), no se aleja en demasía del
denominado “análisis real” de Schumpeter, el cual toma el dinero como un “velo”
adoptado simplemente para facilitar las transacciones de los costes asociados a una
economía de trueque, sin reconocérsele la más mínima capacidad de influencia sobre la
producción y el empleo (Schumpeter, 2012). Esta sería, por tanto, y con matices, la
visión dominante entre finales del siglo XVIII y comienzos del siglo XX, que difiere
sustancialmente de la existente durante el período mercantilista previo
CAGAN
http://www.rcuela.net/docs/Docencia/UNI/Apuntes-02.pdf