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Fluid Oter Apia

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LABORATORIO DE EMERGENCIA

PRESENTADO POR: GERALDINE SÁNCHEZ


MATRÍCULA 100439633

Fluidoterapia
Diferentes soluciones, uso y componentes

SOLUCIONES CRISTALOIDES

Las soluciones cristaloides son aquellas soluciones que contienen agua,


electrolitos y/o azúcares en diferentes proporciones y que pueden ser
hipotónicas, hipertónicas o isotónicas respecto al plasma .

Su capacidad de expandir volumen va a estar relacionada con la


concentración de sodio de cada solución, y es este sodio el que provoca un
gradiente osmótico entre los compartimentos extravascular e intravascular.
Así las soluciones cristaloides isotónicas respecto al plasma, se van a
distribuir por el fluído extracelular, presentan un alto índice de eliminación y se
puede estimar que a los 60 minutos de la administración permanece sólo el
20 % del volumen infundido en el espacio intravascular. Por otro lado, la
perfusión de grandes volúmenes de estas soluciones puede derivar en la
aparición de edemas periféricos y edema pulmonar.

Por su parte, las soluciones hipotónicas se distribuyen a través del agua


corporal total. No están incluídas entre los fluidos indicados para la
resucitación del paciente crítico.Estas soluciones consisten
fundamentalmente en agua isotonizada con glucosa para evitar fenómenos
de lisis hemática. Sólo el 8 % del volumen perfundido permanece en la
circulación, ya que la glucosa entra a formar parte del metabolismo general
generando CO2 y H2O y su actividad osmótica en el espacio extracelular
dura escaso tiempo. Debido a la mínima o incluso nula presencia de sodio en
estas soluciones, su administración queda prácticamente limitada a
tratamientos de alteraciones electrolíticas ( hipernatremia ), otros estados de
deshidratación hipertónica y cuando sospechamos la presencia de
hipoglucemia.

Estas soluciones están especialmente indicadas en pacientes con


hiperlactacidemia grave en los que se quiere, además, evitar un elevado
aporte de cloro.

Soluciones cristaloides isoosmóticas

Dentro de este grupo las que se emplean habitualmente son las soluciones
salina fisiológica ( ClNa 0.9 % ) y de Ringer Lactato que contienen electrolitos
en concentración similar al suero sanguíneo y lactato como buffer.

Salino 0.9 % ( Suero Fisiológico )


La solución salina al 0.9 % también denominada Suero Fisiológico, es la
sustancia cristaloide estándar, es levemente hipertónica respecto al líquido
extracelular y tiene un pH ácido. La relación de concentración de sodio (Na+)
y de cloro (Cl ) que es 1/1 en el suero fisiológico, es favorable para el sodio
respecto al cloro ( 3/2 ) en el líquido extracelular ( Na+ > Cl ). Contiene 9
gramos de ClNa o 154 mEq de Cl y 154 mEq de Na+ en 1 litro de H2O, con
ina osmolaridad de 308 mOsm/L.

La normalización del déficit de la volemia es posible con la solución salina


normal , aceptando la necesidad de grandes cantidades, debido a la libre
difusión entre el espacio vascular e intersticial de esta solución.después de la
infusión de 1 litro de suero salino sólo un 20-30 % del líquido infundido
permanecerá en el espacio vascular después de 2 horas. Como norma
general es aceptado que se necesitan administrar entre 3 y 4 veces el
volumen perdido para lograr la reposición de los parámetros hemodinámicos
deseados.

Estas soluciones cristaloides no producen una dilución excesiva de factores


de coagulación, plaquetas y proteínas, pero en déficits severos se puede
producir hipoalbuminemia, con el consecuente descenso de la presión
coloidosmótica capilar (pc) y la posibilidad de inducir edema. Este descenso
de la pc, con su repercusión en gradiente transcapilar, atribuído a la
administración excesiva de soluciones cristaloides, ha sido considerada como
favorecedor de la formación de edemas.

Si son perfundidas cantidades no controladas de solución de ClNa , el


excedente de Cl del líquido extracelular desplaza los bicarbonatos dando una
acidosis hiperclorémica. Es, por ello, una solución indicada en la alcalosis
hipoclorémica e hipocloremias en general como las causadas por shock y
quemaduras extensas.También se administra para corregir los volúmenes
extracelulares y provoca la retención de sal y agua en el líquido extracelular.

Ringer Lactato
La mayoría de las soluciones cristaloides son acidóticas y por tanto pueden
empeorar la acidosis tisular que se presenta durante la hipoperfusión de los
tejidos ante cualquier agresión. Sin embargo, la solución de Ringer Lactato
contiene 45 mEq/L de cloro menos que el suero fisiológico, causando sólo
hipercloremia transitoria y menos posibilidad de causar acidosis.Y por ello, es
de preferencia cuando debemos administrar cantidades masivas de
soluciones cristaloides. Diríamos que es una solución electrolítica “
balanceada”, en la que parte del sodio de la solución salina isotónica es
reemplazada por calcio y potasio.

La solución de Ringer Lactato contiene por litro la siguiente proporción iónica:


Na+= 130 mEq, Cl = 109 mEq, Lactato= 28 mEq, Ca2+ = 3 mEq y K+ = 4
mEq.Estas proporciones le supone una osmolaridad de 273 mOsm/L, que si
se combina con glucosa al 5 % asciende a 525 mEq/L. El efecto de volumen
que se consigue es muy similar al de la solución fisiológica normal .

El Ringer Lactato contiene una mezcla de D-lactato y L-lactato. La forma


L-lactato es la más fisiológica, siendo metabolizada por la láctico
deshidrogenasa, mientras que la forma D-lactato se metaboliza por medio de
la D-a-deshidrogenasa. En los seres humanos , el aclaramiento de la
D-lactato es un 30 % más lento que el aclaramiento de la forma L-lactato. La
forma D-lactato se encuentra en el plasma a una concentración usualmente
menor de 0.02 mmO/L, ya que a concentraciones superiores a 3 mmO/L
produciría encefalopatía. Un daño hepatocelular o una menor perfusión
hepática, en combinación con un componente hipóxico disminuiría el
aclaramiento de lactato y por consiguiente riesgo de daño cerebral .

La infusión de Ringer Lactato, contiene 28 mEq de buffer por litro de solución,


que es primeramente transformado en piruvato y posteriormente en
bicarbonato durante su metabolismo como parte del ciclo de Cori .

La vida media del lactato plasmático es de más o menos 20 minutos,


pudiéndose ver incrementado este tiempo a 4 ó 6 horas en pacientes con
shock y a 8 horas si el paciente es poseedor de un by-pass cardiopulmonar.

Solución Salina Hipertónica


Las soluciones hipertónicas e hiperosmolares han comenzado a ser más
utilizados como agentes expansores de volumen en la reanimación de
pacientes en shock hemorrágico. Ciertos trabajos demuestran que el cloruro
sódico es superior al acetato o al bicarbonato de sodio en determinadas
situaciones. Por otro lado, el volumen requerido para conseguir similares
efectos, es menor con salino hipertónico que si se utiliza el fisiológico normal
isotónico .

En lo referente a la duración del efecto hemodinámico, existen distintas


experiencias, desde aquellos que consideraban que mantenían el efecto
durante aproximadamente 24 horas, hasta estudios más recientes que han
ido limitando su duración a períodos comprendidos entre 15 minutos y 1 hora.

Entre sus efectos beneficiosos, además del aumento de la tensión arterial, se


produce una disminución de las resistencias vasculares sistémicas, aumento
del índice cardíaco y del flujo esplénico .

El mecanismo de actuación se debe principal y fundamentalmente, al


incremento de la concentración de sodio y aumento de la osmolaridad que se
produce al infundir el suero hipertónico en el espacio extracelular (
compartimento vascular ). Así pues, el primer efecto de las soluciones
hipertónicas sería el relleno vascular. Habría un movimiento de agua del
espacio intersticial y/o intracelular hacia el compartimento intravascular.
Recientemente se ha demostrado que el paso de agua sería
fundamentalmente desde los glóbulos rojos y células endoteliales (
edematizadas en el shock ) hacia el plasma, lo que mejoraría la perfusión
tisular por disminución de las resistencias capilares.Una vez infundida la
solución hipertónica, el equilibrio hidrosalino entre los distintos
compartimentos se produce de una forma progresiva y el efecto osmótico
también va desapareciendo de manera gradual .
Experimentalmente, se ha demostrado que ocurre una vasodilatación
precapilar en los territorios renal, coronario y esplácnico, que parece estar
relacionada con la hipertonicidad de la solución. Junto a este efecto
vasodilatador sobre los territorios antes señalados, se produce una
vasoconstricción refleja en los territorios músculo-cutáneos en un intento de
compensar la redistribución de los líquidos. Para que esto se produzca, es
necesaria la integridad del arco reflejo vagal; cuyo punto de partida está en el
pulmón, y cuyo agente estimulador encargado de poner en marcha este
reflejo sería el cloruro sódico, que actuaría sobre los osmorreceptores
pulmonares.

Soluciones de comportamiento similar al agua

Se clasifican en glucídicas isotónicas o glucosalinas isotónicas.

Suero glucosado al 5 %

Es una solución isotónica ( entre 275-300 mOsmol/L ) de glucosa, cuya dos


indicaciones principales son la rehidratación en las deshidrataciones
hipertónicas ( por sudación o por falta de ingestión de líquidos ) y como
agente aportador de energía.

La glucosa se metaboliza en el organismo, permitiendo que el agua se


distribuya a través de todos los compartimentos del organismo, diluyendo los
electrolitos y disminuyendo la presión osmótica del compartimento
extracelular. El desequilibrio entre las presiones osmóticas de los
compartimentos extracelular e intracelular, se compensa por el paso de agua
a la célula. En condiciones normales, los osmorrecptores sensibles al
descenso de la presión osmótica, inhiben la secreción de hormona
antidiurética y la sobrecarga de líquido se compensa por un aumento de la
diuresis.

El suero glucosado al 5 % proporciona, además, un aporte calórico nada


despreciable. Cada litro de solución glucosada al 5 % aporta 50 gramos de
glucosa, que equivale a 200 kcal. Este aporte calórico reduce el catabolismo
protéico, y actúa por otra parte como protector hepático y como material de
combustible de los tejidos del organismo más necesitados ( sistema nervioso
central y miocardio ).

Las indicaciones principales de las soluciones isotónicas de glucosa al 5 %


son la nutrición parenteral en enfermos con imposibilidad de aporte oral.
Aquellos estados de deshidratación intracelular y extracelular como los que
se producen en casos de vómitos, diarreas, fístulas intestinales, biliares y
pancreáticas, estenosis pilórica, hemorragias, shock, sudación profusa,
hiperventilación, poliurias, diabetes insípida, etc..., alteraciones del
metabolismo hidrocarbonado que requieren de la administración de agua y
glucosa.

Entre las contraindicaciones principales

tenemos aquellas situaciones que puedan conducir a un cuadro grave de


intoxicación acuosa por una sobrecarga desmesurada de solución glucosada,
y enfermos addisonianos en los cuales se puede provocar una crisis
addisoniana por edema celular e intoxicación acuosa.

Suero glucosado al 10 %, 20 % y 40 %

Las soluciones de glucosa al 10 %, 20 % y 40 % son consideradas soluciones


glucosadas hipertónicas, que al igual que la solución de glucosa isotónica,
una vez metabolizadas desprenden energía y se transforma en agua. A su
vez, y debido a que moviliza sodio desde la célula al espacio extracelular y
potasio en sentido opuesto, se puede considerar a la glucosa como un
proveedor indirecto de potasio a la célula.

La indicación más importante de las soluciones de glucosa hipertónica es el


tratamiento del colapso circulatorio y de los edemas cerebral y pulmonar,
porque la glucosa produciría una deshidratación celular y atraería agua hacia
el espacio vascular, disminuyendo así la presión del líquido cefalorraquídeo y
a nivel pulmonar.
Otro efecto sería una acción protectora de la célula hepática, ya que ofrece
una reserva de glucógeno al hígado y una acción tónico-cardíaca, por su
efecto sobre la nutrición de la fibra miocárdica.

Como aporte energético sería una de las indicaciones principales, ya que


aporta suficientes calorías para reducir la cetosis y el catabolismo proteico en
aquellos pacientes con imposibilidad de tomar alimentación oral.
Las contraindicaciones principales serían el coma addisoniano y la diabetes.

Soluciones glucosalinas isotónicas

Las soluciones glucosalinas ( 314 mOsm/L ) son eficaces como hidratantes y


para cubrir la demanda de agua y electrolitos. Cada litro de infusión de suero
glucosalino aporta 35 gramos de glucosa ( 140 kcal ), 60 mEq de sodio y 60
mEq de cloro.

Soluciones de uso en situaciones especificas

Dentro de dichas soluciones de utilización en situaciones específicas,


citaremos únicamente las de uso más habitual.

Soluciones alcalinizantes
Estas soluciones se utilizan en aquellas situaciones que exista o se produzca
una acidosis metabólica. El bicarbonato sódico fue el primer medicamento
que se utilizó como tampón. El tamponamiento de un mmol de H+ conduce a
la formación de un mmol de CO2, que debe ser eliminado por la vía
respiratoria.

Para el uso clínico disponemos de varias presentaciones según las


concentraciones a que se encuentren. Las de utilización más habitual son la
solución de bicarbonato 1 Molar ( 1 M = 8.4 % ), que sería la forma preferida
para la corrección de la acidosis metabólica aguda, y la solución de
bicarbonato 1/6 Molar ( 1.4 % ) con osmolaridad semejante a la del plasma.
La solución 1/6 Molar es la más empleada y su posología se realiza en
función del déficit de bases y del peso del paciente.

Otra solución isotónica correctora de la acidosis es el Lactato sódico. El


lactato de sodio es transformado en bicarbonato sódico y así actuaría como
tamponador, pero como esta transformación previa implica un metabolismo
hepático, se contraindica su infusión en pacientes con insuficiencia hepática
así como en la situación de hiperlactasemia. Su dosificación también se
realiza en función del déficit de bicarbonato y del peso del paciente.

Soluciones acidificantes
El cloruro amónico 1/6 Molar es una solución isotónica (osmolaridad = 334),
acidificante, de utilidad en el tratamiento de la alcalosis hipoclorémica.

El ión amonio es un dador de protones que se disocia en H+ y NH3+ , y su


constante de disociación es tal que en la gama de pH de la sangre el NH4+
constituye el 99 % del amoníaco total. La acción acidificante depende de la
conversión de los iones amonio en urea por el hígado, con generación de
protones. Por ello, las soluciones de sales de amonio están contraindicadas
en la insuficiencia hepática. Además, el cloruro de amonio posee toxicidad
cuando es administrado de forma rápida, y puede desencadenar bradicardia,
alteraciones respiratorias y contracciones musculares.

Soluciones de reemplazamiento específico

A) Solución de reemplazamiento gástrico de Cooke y Crowlie, rica en cloro y


potasio, que también contiene sodio y NH4+. Por su composición semejante a
la secreción gástrica está indicada en pérdidas por vómitos, fístulas o
aspiraciones gástricas.

B) Solución reemplazante intestinal de lactato de potasio de Darrow (Na+,


Cl-, lactato y K+ ), que está indicada en las diarreas infantiles o expoliaciones
intestinales ( fistulas, enterostomías y colostomías ).
En principio ambos tipos de soluciones se dosifican restituyendo mL a mL la
pérdida gástrica o intestinal, según proceda.

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