Seminario 3 Eval
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Morajela: que el burro tocara la flauta no le convertía en músico, por lo tanto, cuando
conseguimos hacer por casualidad, no nos convierte en expertos
La cigarra era feliz disfrutando del verano sin hacer otra cosa que tomar el sol.
Mientras tanto su amiga y vecina, una pequeña hormiga, pasaba el día entero
trabajando, recogiendo alimentos.
- ¿No te cansas de tanto trabajar? Descansa un rato conmigo mientras canto algo para
ti.? Le decía la cigarra a la hormiga.
Hasta que un día, al despertarse, sintió el frío intenso del invierno. Comenzó a sentir
hambre, pero la nieve cubría los campos. Vio a lo lejos la casa de su vecina la hormiga,
y se acercó a pedirle ayuda.
- Amiga hormiga, tengo frío y hambre, ¿no me darías algo de comer? Tú tienes mucha
comida y una casa caliente, mientras que yo no tengo nada.
- Dime amiga cigarra, ¿qué hacías tú mientras yo madrugaba para trabajar? ¿Qué hacías
cuando cargaba con granos de trigo de acá para allá?, respondió la hormiga.
Moraleja: No debemos ser perezosos. Hay que esforzarse y no esperar que los demás
trabajen para nosotros.
Otros subgéneros
Aparte de las fábulas, existen otros temas en la poesía neoclásica del siglo XVIII:
Las anacreónticas. poesías emotivas y sensoriales. Sus temas principales eran los
placeres de la vida más sensuales: amistad, el deleite del amor... Además, utiliza la
naturaleza y la guía de sentimientos gozosos. Su principal autor y creador fue
Anacreonte, que es de origen griego. Este fue conocido por sus sátiras y poemas
breves, que han proporcionado el nombre de "anacreónticas" a los tipos similares de
poesía. Algunos de los poemas más famosos de Anacreonte son: La Lira, De las
mujeres y El amor. Meléndez Valdés es el máximo representante de esta poesía, de
gran éxito durante el dieciocho en España, y no abandonó el género en toda su vida
poética.
Por otro lado, encontramos los epigramas que son composiciones poéticas
generalmente breves que expresan contenidos festivos o satíricos de forma
ingeniosa. Suelen darse en prosa, aunque generalmente se dan en verso y tienen
un contenido satírico, jocoso y ,ordaz . Sin embargo, no suelen ser moralizantes ni
contar con moraleja alguna Para Juan de Iriarte, el epigrama debía ser dulce,
pequeño y punzante.
Aunque anteriormente hemos hablados de poco como Samaniego e Iriarte, también
hubo autores que destacaron por su poesía entre estos:
El madrileño Nicolás Fernández de Moratín (1737-1780) al cual se le puede
considerar como el primer poeta ilustrado. Escribió algunos poemas como Fiesta de
toros en Madrid. En el Arte de las putas donde muestra su preocupación social y su
realismo ante los problemas de la época. Su hijo Leandro Fernández de Moratín
publicó sus obras en 1821.
Sin embargo, su hijo Leandro fue más conocido, ya que este cultivó todos los géneros
literarios y se convirtió en uno de los escritores más significativos. Escribió poesía
satírica en la que censura las malas costumbres de la época; donde destaca su obra
Sátira a Claudio. También cultivó la poesía lírica; en Elegía a las musas, da gracias a
las musas por toda una vida dedicada a la literatura.
Otro de los poetas más relevante es Juan Meléndez Valdés, considerado como uno
de los poetas más importantes del neoclasicismo español.
Sus obras reflejan su profundo conocimiento de la cultura clásica y su compromiso
con los valores de la Ilustración. En 1779 publicó su primer libro de poesía, "Poesías
varias" y gracias a ellas comenzó a relacionarse con los escritores más importantes
de la época, como Gaspar Melchor de Jovellanos o Tomás de Iriarte. Entre sus obras
más destacadas Las bodas de Camacho el rico; y "Oda a la Paz", una reflexión sobre
la paz y la libertad en la Europa del siglo XVIII.
En sus ensayos, defendió la idea de que la literatura debía estar al servicio de la
verdad y la moral, y que los poetas debían buscar la perfección en la forma y en el
contenido de sus obras. Murió en Francia, en 1817, mientras se encontraba en el
exilio por sus ideas liberales.
Sin duda, la figura más representativa del siglo XVIII español es la del asturiano
Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811) del cual hablaremos más adelante. Sin
embargo, cabe destacar que fue socio de las más importantes academias de la época.
La Prosa
La prosa es una de las formas expresivas más cultivadas en la literatura del siglo
XVIII. Aparece unida al afán didáctico de la época. Es sobre todo un medio de
comunicación que servía para la difusión de nuevas ideas. Se escribían con el fin de
que pudieran ser comprendidos por el público sin necesidad de los recursos retóricos,
que fue la gran crítica que los ilustrados hicieron a los autores barrocos. Por lo tanto,
sirve como medio de comunicación, de educación y de propaganda. Sus
características generales son las siguientes: el racionalismo; el protagonismo del ser
humano en su futuro, es decir, su vida ya no estará sólo en manos de Dios, sino
también de su esfuerzo y valía; la educación que es la clave de la cultura y de la
felicidad; y, por último, la utilidad es la finalidad de las ciencias, las letras y el arte.
El género literario más importante de la prosa del siglo XVIII es el ensayo; la novela,
en cambio, se cultivó menos y, salvo algunas excepciones, no produjo obras de gran
calidad. Por lo que se llamó a este periodo “el siglo sin novela”. Por su parte, la prensa
va adquiriendo importancia a lo largo del siglo como vehículo de las nuevas ideas.
La prosa se dividió en dos etapas:
En la primera mitad del siglo, algunos autores utilizaron moldes narrativos para
redactar sus obras, pero con fines diversos y en muchas ocasiones satíricos, y sin
que su objeto primordial fuera novelar. Entre sus autores destaca:
Diego Torres Villarroel (1694-1770): escritor del siglo XVIII, conocido por su
originalidad, complejidad y vitalismo en sus novelas. Su obra reflejaba las luchas y
desafíos históricos de la transición entre la mentalidad barroca y la modernidad
ilustrada. Entre sus obras más importantes se encuentran "Viaje fantástico" y "El
ermitaño", pero su novela más destacada fue "Vida, ascendencia, nacimiento, crianza
y aventuras"
En la prosa narrativa, destacan las obras de autores como José Cadalso y Gaspar
Melchor de Jovellanos, quienes utilizaron la prosa para crear obras que reflejaban la
sociedad y la política de la época. También surgieron nuevas formas narrativas, como
la novela histórica y la novela sentimental, que tuvieron un gran impacto en la literatura
española posterior.
En la segunda etapa de la prosa española, destaca la prosa ensayística de la mano
de Benito Jerónimo Feijoo, quien fue uno de los mayores representantes del
pensamiento ilustrado en España. Y la prosa periodística, donde surgieron nuevos
periódicos y revistas que se trataron en importantes medios de comunicación y
difusión de ideas. Destacan publicaciones como El Censor, dirigida por Gaspar
Melchor de Jovellanos, y El Diario de Madrid.
En resumen, la prosa adquirió una gran relevancia en el siglo XVIII en España, y fue
utilizada como medio de expresión de ideas, reflexión y crítica social.
El Ensayo
El ensayo es el género más importante de la prosa del siglo XVIII. Obtuvo esta fama
gracias a que la prensa fue desarrollándose y propició el avance del ensayo. Pero
antes de continuar, es necesario hacerse una pregunta, ¿Qué es un ensayo?
Los ensayos son textos en los que se interpreta o se analiza una idea y en los que el
autor explica su punto de vista sobre el tema. Es el género que mejor se adapta al
propósito ilustrado, ya que busca transmitir las ideas en prosa. Se caracterizó por su
estructura libre, claro y conciso. Trató diversos temas como: la educación, la religión
y la situación social de las mujeres… Pueden dividirse en varios tipos o subgéneros,
pero aquí vamos a tratar los más importantes: los didácticos y enciclopédicos donde
se exponen problemas sociales, científicos o religiosos con el fin de eliminarlos de la
sociedad: y los humanísticos y pedagógicos donde hablan sobre temas como la
economía, sociología y derecho.
El primer ensayista es el monje benedictino fray Benito Jerónimo Feijoo, catedrático
de la Universidad de Oviedo que luchó por la modernización de la mentalidad
española. Feijoo pensaba que el conocimiento debía estar en forma escrita para que
España pudiera modernizarse, al igual que lo había hecho el resto de Europa. Por lo
tanto, sus obras tienen un tono educativo, con el objetivo de difundir los ideales de las
clases más altas.
Sus obras se reúnen en dos colecciones: Teatro crítico universal (9 volúmenes; 1726-
1740) el cual fue su primer tomo donde pretende desterrar errores cometidos en todos
los campos del saber. Su otra colección es Cartas eruditas y curiosas (5 volúmenes;
1742-1760), donde trata cuestiones filosóficas, científicos y literarios basados en la
razón.
Aunque autores anteriores a él habían sentido la necesidad de derrumbar sistemas y
abrir el camino a la crítica y el racionalismo, ninguno llegó a obtener tanta relevancia
como él. Por lo que, el legado de Feijoo sigue vigente en España a día de hoy, donde
es considerado uno de los pensadores más importantes del periodo de la Ilustración.
Reproducimos un fragmento de sus ideas a favor de la medicina moderna:
Es, por cierto, muy digno de admiración que este punto se haya presentado a la
discusión como un problema difícil de resolver. La lucha de toros no ha sido jamás
una diversión ni cotidiana ni muy frecuentada, ni de todos los pueblos de España,
ni generalmente buscada y aplaudida. En muchas provincias no se conoció
jamás, en otra se circunscribió a las capitales y, donde quieran que fueron
celebrados lo fue solamente a largos periodos, y con concurriendo a verla el
pueblo de las capitales y de tal cual aldea circunvecina. Se puede, por tanto,
calcular que de todo el pueblo de España a penas la centesima parte habrá visto
alguna vez este espectáculo ¿Cómo, pues, se ha pretendido darle el título de
diversión nacional?
La Crítica
La crítica fue muy utilizada en la época para satirizar vicios o costumbres. Uno de los
máximos representantes de la crítica social fue José Cadalso que realizó una de las
obras más importantes del género: Cartas Marruecas, esta es una novela de carácter
epistolar en la que aborda tres grandes temas:
- La política interior del país: crítica la corrupción de los políticos y el favoritismo
en los empleos públicos, se lamenta de las costosas guerras que libró España
en el pasado y que dejaron al país en la ruina
- La evolución de la historia española: critica el atraso que sufre el país
- El carácter de los españoles y la vida cotidiana: la educación de la juventud,
las corridas de toros y la nobleza hereditaria.
El atraso de las ciencias en España en este siglo, ¿quién puede dudar que
procede de la falta de protección que hallan en sus profesores? Hay cochero en
Madrid que gana trescientos pesos duros y cocinero que funda mayorazgos; pero
no hay quien no sepa que se ha de morir de hambre como se entregue a las
ciencias, exceptuadas las de pane lucrando que son las únicas que dan de comer.
https://www.guiainfantil.com/1385/fabulas-para-ninos-la-cigarra-y-la-hormiga.html
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/memoria-para-el-arreglo-de-la-policia-de-los-
espectaculos-y-diversiones-publicas-y-sobre-su-origen-en-espana--0/html/fedbb6e0-82b1-11df-
acc7-002185ce6064_4.html
http://www.rinconcastellano.com/ilustracion/melendezvaldes_obra.html
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/evolucin-de-la-poesa-en-el-siglo-xviii-
0/html/ffcec880-82b1-11df-acc7-002185ce6064_2.html