Química Analítica - Libro
Química Analítica - Libro
Química Analítica - Libro
ORURO – BOLIVIA
2020
Título:
QUÍMICA ANALÍTICA La realización, culminación y publicación del libro “Química
Analítica”, tuvo el apoyo activo de:
Autor:
Milton Robert Pérez Lovera Instituto de Desarrollo y Ambiente (IDA - UTO)
Programa de Investigación en Recursos Naturales y Medio
Edición:
Ambiente, FCAN – UTO
Personal técnico del Instituto de Desarrollo y Ambiente IDA
Facultad de Ciencias Agrarias y Naturales - UTO
– UTO
Primera Edición
INSTITUTO DE DESARROLLO Y AMBIENTE, IDA – UTO
Noviembre 2020
Ciudad universitaria (Avenida Dehene)
Teléfono (591 – 2) 5261645 Depósito Legal
Email: ida_fcan_uto@yahoo.com 5-1-197-20P.O.
PROGRAMA DE INVESTIGACIÓN EN RECURSOS NATURALES Permitida la reproducción total o parcial, con propósitos de
Y MEDIO AMBIENTE, FCAN – UTO difusión educativa y sin fines lucrativos
Ciudad universitaria (Avenida Dehene)
Teléfono (591 – 2) 5261645
Email: investiga_rrnn_ma_fcan@yahoo.com
1.1 GENERALIDADES1
Se puede definir a la “Química Analítica” como una ciencia de medición basada en un conjunto
de ideas y métodos útiles en todos los campos de la ciencia. La Química Analítica se ocupa de
separar, identificar y determinar la composición relativa de cualquier muestra de materia. Por
otro lado, se considera al “Análisis Químico” como la parte práctica de la “Química Analítica”,
que aplica los métodos desarrollados por la misma para la resolución de problemas. El Análisis
Químico2 de una muestra de materia puede abordarse desde dos puntos de vista: análisis
cualitativo y análisis cuantitativo. El análisis cualitativo (llamado también química analítica
cualitativa) establece la identidad química de las especies en la muestra. El análisis cuantitativo
(llamado también química analítica cuantitativa) determina en forma numérica la cantidad
relativa de las especies que componen la muestra. El proceso cualitativo, se lo realiza antes del
análisis cuantitativo.
La Química Analítica ha jugado un papel fundamental en el desarrollo de la ciencia. De hecho,
su gran importancia ha propiciado que sea cultivada de forma asidua desde los inicios de la
historia de la Química.
Método analítico; es un concepto más amplio pues no sólo incluye a la o las técnicas analíticas
empleadas en un análisis sino también todas las operaciones implicadas hasta la consecución
del resultado final.
Especies interferentes; rara vez un método de análisis es específico, en el mejor de los casos
será selectivo. Por esta razón es muy común la aparición de especies interferentes durante un
análisis, estas especies químicas influyen en la respuesta del analito, pudiendo disminuir dicha
respuesta (interferencia negativa) o incrementarla (interferencia positiva).
Para llevar a cabo un análisis cuantitativo hay que llevar a cabo dos mediciones:
La primera medida es la masa o volumen de la muestra bajo análisis.
La segunda medida es una cantidad que es proporcional a la cantidad de analito presente en
la muestra.
Los métodos analíticos se clasifican en función de la naturaleza de esta última medida, en este
sentido hablamos de:
a). Métodos Clásicos o Químicos
Un análisis cuantitativo implica una secuencia de etapas que implican desde la definición del
problema planteado hasta la elaboración de un informe y sus conclusiones (Figura 1).
En algunos casos, es posible omitir una o más etapas; por ejemplo, si la muestra se encuentra
en el estado físico y condiciones adecuadas para ser analizada mediante la técnica
seleccionada, es posible que no se requiera ningún tratamiento previo de la misma.
Obtención de la muestra
Tratamiento de la muestra
Proceso de medida
Figura 1. Etapas del proceso analítico. Si bien en el pie de página “2” se realiza una descripción de análisis químico
que envuelve varios pasos tomado de Pérez L. M., 2018, más que el presente. Es importante señalar el propósito
que tiene la figura de seguir una secuencia lógica durante el análisis.
A continuación, pasamos a detallar cada uno de las etapas del proceso analítico:
Son escasos los problemas que se resuelven sin necesidad de tratamiento de la muestra antes
de proceder a la medida; por ejemplo, la medida del pH de una muestra de agua de río puede
llevarse a cabo directamente sin tratamiento alguno de la muestra. Lo habitual, es que la
muestra necesite algún tipo de tratamiento3, con el fin de: preparar la forma y el tamaño de la
3Tomado de seminario “Toma de muestras y pretratamientos”: Los dos métodos más generales de disolución (tratamiento de muestras previo análisis
en laboratorio) son el tratamiento con ácido y la fusión con fundente.
Tratamiento con ácidos. Los ácidos pueden ser clasificados como ácidos no oxidantes, como HCl, H2SO4, y HClO4 diluido, y ácidos oxidantes como
HNO3 y perclórico concentrado caliente. En general, cualquier metal que se encuentre por encima del hidrógeno en la serie electromotriz se disolverá,
aunque algunas reacciones son lentas. Los metales que se encuentran por debajo del hidrógeno, requieren por lo general para su disolución de un ácido
oxidante. Los ácidos fuertes como el clorhídrico, pueden disolver las sales de las que se forman moléculas de ácidos débiles. Ej. El carbonato de calcio
se disuelve en HCl dando ácido carbónico y cloruro de calcio.
Una solución ácida puede servir no solo como ácido sino también como agente de precipitación o de formación de complejos. El ion cloruro, por ejemplo,
puede formar complejos solubles con muchos iones metálicos, con lo cual aumenta la solubilidad de las sales de estos iones metálicos.
~ El HCl disuelve todos los metales comunes con excepción de antimonio, bismuto, arsénico, cobre, mercurio y plata. La reacción de disolución es muy lenta con
plomo, cobalto, níquel, cadmio, y unos cuantos metales más que se encuentran por encima del H en la serie electromotriz. Las sales de los ácidos débiles y la
mayor parte de los óxidos son solubles.
~ El H2SO4 diluido disuelve todos los metales comunes, excepto plomo, antimonio, bismuto, arsénico, cobre, mercurio y plata. El H2SO4 concentrado y caliente
disuelve todos los metales comunes.
~ El HNO3 ataca a la mayor parte de los metales. Ataca también sales insolubles de aniones oxidables como los sulfuros metálicos.
~ El HClO4 concentrado y caliente disuelve todos los metales comunes, pero debe usarse con mucho cuidado, pues las sustancias fácilmente oxidables, incluso
algunas sustancias orgánicas, reaccionan con violencia explosiva.
~ El agua regia, compuesta de tres partes de ácido clorhídrico y una de ácido nítrico, ataca todos los metales
Algunas otras combinaciones de dos ácidos o de un ácido más un agente oxidante, reductor o formador de complejos, son útiles como disolventes en
casos específicos.
Fusión. Cuando no es posible disolver una muestra por un ácido, la fusión de la muestra con fundente puede solubilizar la muestra en agua. Las fusiones
son especialmente útiles con minerales, rocas de silicatos y carbonatos que no son atacables por ácido clorhídrico, pero también son útiles con muchas
otras muestras. En general el fundente es alcalino a fin de reducir al mínimo la pérdida por volatilización de gases ácidos, como H2S y SO2. Uno de los
fundentes más comúnmente usados es el carbonato de sodio que convierte los óxidos en sales de sodio solubles. Ej.:
Al2(SiO3)3 +4 Na2CO3 → 3 Na2SiO3 + 2 NaAlO2 + 4 CO2
Una mezcla de sodio y potasio se funde a temperatura inferior que el carbonato de sodio solo, resultando conveniente con algunas muestras, pero no
con otras. En la práctica se usan unos 5 g de carbonato de sodio por cada gramo de muestra. El fundente se introduce en un crisol de platino
suficientemente grande con el fin de que solo quede medio lleno. La muestra pesada se introduce y agita con el fundente. La mezcla se calienta
gradualmente hasta que la muestra original parece estar totalmente destruida. Basta con media hora. Luego se deja enfriar la muestra y la masa sólida
que se forma se trata con agua caliente. La solución resultante es fuertemente alcalina, pero está a punto para las operaciones de separación y medición
subsiguientes. Para óxidos que son difíciles de disolver se usa comúnmente pirosulfato de potasio como fundente ácido. Al ser calentado el pirosulfato
libera SO3 que a su vez reacciona con el óxido para formar un sulfato soluble. Normalmente se usan 20 g ó más de pirosulfato de potasio por cada
gramo de muestra y la temperatura se mantiene ligeramente por encima del punto de fusión, alrededor de 300ºC. Se utilizan crisoles de platino o sílice.
Se cuentan entre los fundentes útiles el peróxido de sodio y las mezclas de clorato de potasio o de nitrato de potasio con carbonato de sodio.
muestra, así como la concentración del analito o los analitos en la forma química y
concentración, adecuadas para la técnica analítica seleccionada y/o eliminar interferentes de
la matriz de la muestra.
La etapa de tratamiento (Han de evitarse tanto las pérdidas de analito como las posibles
contaminaciones introducidas en la muestra) de la muestra ha de llevarse a cabo teniendo en
cuenta las siguientes consideraciones:
El analito será transformado a la forma química más adecuada para el método analítico
seleccionado. Por ejemplo, la determinación de manganeso mediante espectrofotometría de
absorción molecular en el visible requerirá su transformación al ión poliatómico
permanganato (MnO4-).
Si es necesario, se eliminarán las interferencias de la matriz, con el fin de incrementar la
selectividad del método.
Por supuesto, resulta totalmente inadmisible la introducción de nuevas interferencias.
Debe considerarse la dilución o preconcentración del analito, de manera que éste se
encuentre en el intervalo de linealidad del método seleccionado.
La mayoría de los análisis, aunque por supuesto no todos, se llevan a cabo en disoluciones de
la muestra preparada en un disolvente adecuado. Si la muestra es sólida, lo más habitual es
proceder a su trituración para disminuir el tamaño de partícula, mezclarla de forma efectiva
para garantizar su homogeneidad y almacenarla en condiciones adecuadas, si el análisis no se
va a llevar a cabo de inmediato. En el caso en que la muestra ya se encuentre en estado líquido,
pero no vaya a analizarse tras su recogida, por supuesto las condiciones de almacenamiento
han de tenerse en consideración; por ejemplo, si una muestra líquida se mantiene en un
recipiente abierto, el disolvente podría evaporarse modificando así la concentración del
analito. En el caso de que el analito fuese un gas disuelto, el recipiente de la muestra debe
mantenerse en un segundo recipiente sellado para impedir contaminación por gases
atmosféricos.
La mayoría de los análisis químicos se llevan o deben llevarse a cabo sobre varias réplicas de la
muestra, cuyas masas o volúmenes se determinan con mediciones cuidadosas a través de
balanzas analíticas o material volumétrico de precisión. La realización de réplicas mejora la
calidad de los resultados e informa acerca de la fiabilidad del análisis. Las medidas cuantitativas
de réplicas de muestras se suelen promediar y luego se aplican diversas pruebas estadísticas a
los resultados para establecer la fiabilidad y descartar datos atípicos, si los hubiera.
e). Proceso de medida
Todos los resultados analíticos dependen de la medida final de una propiedad física o química
del analito. Las valoraciones o titulaciones se encuentran entre los métodos analíticos más
precisos. En una valoración, el analito reacciona con un reactivo estandarizado mediante una
reacción de estequiometria conocida. La cantidad de reactivo estandarizado necesario para
alcanzar la condición de equivalencia se relaciona con la cantidad de analito presente. Por
tanto, la valoración es un tipo de comparación química.
En la calibración con un estándar externo, la muestra se prepara por separado del estándar. La
propiedad analítica medida (S) depende de manera conocida y reproducible de la
concentración del analito (CA). En teoría, la medida de la propiedad es directamente
proporcional a la concentración según la siguiente ecuación:
𝑆 = 𝐾 ∗ 𝐶𝐴
Salvo dos excepciones, los métodos analíticos instrumentales requieren la determinación
empírica de “K” con estándares o patrones del analito. La determinación del valor de “K” se
denomina calibración. En una primera aproximación es posible obtener el valor de “K” con el
uso de un único estándar externo y seguidamente calcular el contenido de analito en la
muestra problema.
Los estándares externos se usan para calibrar instrumentos y procedimientos cuando no hay
efectos de interferencias de los componentes de la matriz en la disolución del analito. Se
preparan una serie de estándares externos de distintas concentraciones conocidas del analito.
Idealmente se utilizan tres o más disoluciones en el proceso de calibración. La calibración con
un único patrón, que sería la propuesta en la diapositiva anterior, no es recomendable pues
conlleva un alto riesgo de error.
La calibración se lleva a cabo al obtener la señal de respuesta (altura o área de pico,
absorbancia, voltaje, etc.) como función de la concentración conocida del analito. Al
representar gráficamente los datos y ajustarlos a una ecuación matemática se obtiene la curva
de calibrado. El método de mínimos cuadrados es el método de análisis de regresión más
empleado para datos bidimensionales. La constante de proporcionalidad “K” corresponde a la
pendiente de calibración. Seguidamente la señal analítica obtenida para la muestra analizada
se sustituye en la ecuación de calibración obteniéndose la concentración del analito. Los
factores de dilución o preconcentración a los que hubiese sido sometida la muestra antes del
proceso de medida, habrán de ser considerados para la obtención del resultado final.
Cuando se emplean estándares externos, se supone que cuando en la muestra y el estándar
esté presente la misma concentración de analito, se obtendrá la misma respuesta. Sin
embargo, esto no siempre ocurre así y en esos casos es necesario recurrir a otros métodos de
calibración como el del estándar interno o el de adiciones estándar a las muestras.
En el método del estándar interno se agrega a las muestras, estándares y blancos una cantidad
conocida de una especie de referencia, que será seleccionada de forma que tenga propiedades
físicas y químicas semejantes a las del analito. La señal de respuesta es la relación entre la señal
del analito y la de la especie de referencia (representada en el eje de ordenadas). En el eje de
abcisas se representa la concentración del analito en las disoluciones estándar. Este método
puede compensar cierto tipo de errores si éstos influyen en el analito y la especie de referencia
en la misma proporción.
El método de adiciones estándar a las muestras se usa cuando es difícil o imposible duplicar la
matriz de la muestra. Se adiciona a la muestra una cantidad o cantidades conocidas de una
disolución estándar del analito. En el método de un solo punto, se toman dos porciones de
muestra: una se mide como de costumbre, y a la otra se le agrega una cantidad conocida del
analito. Ambas respuestas se utilizan para calcular la concentración de analito en la muestra.
En el método de adiciones múltiples, a varias alícuotas de muestra se le agregan cantidades
conocidas de la disolución estándar del analito y se obtiene la curva de calibración de adiciones
múltiples.
Los resultados analíticos están incompletos sin una estimación de su fiabilidad (muy
recomendable y casi en la mayoría de los casos “interpretación estadística de los datos
obtenidos”). Por tanto, si pretendemos que los resultados tengan valor, debe proporcionarse
alguna medición de la incertidumbre relacionada con los cálculos obtenidos. Además, el
informe final no sólo debe plasmar los resultados obtenidos sino también las limitaciones
concretas del método de análisis empleado. En cualquier caso, éste puede ir dirigido a un
especialista o para el público en general, de modo que será necesario asegurarse de que es
apropiado para el destinatario previsto.
Una vez escrito el informe, el analista puede o no estar implicado en el uso de su información.
Como mínimo el analista tiene la responsabilidad de asegurar que las conclusiones que se
extraigan de sus datos sean coherentes con los mismos.
CAPÍTULO II
INTERPRETACIÓN ESTADÍSTICA DE LOS DATOS OBTENIDOS
“Conseguimos obtener así la fórmula estadística para conocer aproximadamente la posición de un electrón en
un instante determinado. Pero, personalmente, no creo que Dios juegue con los dados” Albert Einstein
2.1 GENERALIDADES
La Química Analítica tiene en la Estadística una de sus herramientas fundamentales. Esta
imprescindible relación ha dado lugar en los últimos años al desarrollo de la Quimiometría, una
disciplina que aplica las técnicas matemáticas de la estadística a los problemas analíticos de la
identificación y cuantificación de las sustancias químicas, siendo habitual el uso de la
quimiometría en cualquier análisis químico. En la actualidad, esta disciplina ha ganado
importancia debido sobre todo por cantidad de información que obtenemos a través de los
equipos instrumentales (los cuales generan una gran cantidad de datos numéricos) y por el
incremento en la capacidad de cálculo de los ordenadores actuales.
Existe una relación directa entre la exactitud de un resultado analítico y el tiempo requerido
para su obtención. Aumentar la seguridad unas diez veces puede implicar horas, días o quizá
semanas de trabajo adicional. Una de las primeras cuestiones que debe considerarse al
principio de un análisis es el grado de confianza que se requiere; esta consideración
determinará en gran medida la cantidad de tiempo y esfuerzo que se necesitaría para llevar a
cabo el análisis. Nunca se debe perder el tiempo en una búsqueda indiscriminada de mayor
exactitud cuando no es necesario.
Antes de profundizar en técnicas estadísticas, es conveniente aclarar algunos conceptos
básicos de probabilidad, los cuales nos ayudarán a entender mejor los principios matemáticos
usados en este tema:
Fenómeno aleatorio; se define como aquel en que los resultados son inciertos, imprevisibles o
impredecibles (ejemplo: la medición de la concentración de nitratos en agua de un río de cauce
natural).
Fenómeno determinista; caso contrario al “fenómeno aleatorio” sería el en el cual si podemos
saber los resultados al estar descritos por modelos matemáticos (ejemplo: el tiempo que
tardará un coche en llegar a su destino a una velocidad constante).
Población; conjunto global del sistema que queremos estudiar (ejemplo: una encuesta sobre
intención de voto de un país de 40 millones de habitantes). Normalmente es imposible optar
a su totalidad, por lo en estos casos se suele coger una muestra representativa de la misma.
Muestra poblacional; el subconjunto de la población al cual si tenemos acceso para estudiar el
comportamiento de la misma. Esta debe ser representativa de la población y cogida de la
forma más imparcial posible (totalmente al azar), a la cual se le estudia una variable.
Variable; se define como aquella propiedad que es observable y medible (ejemplo: la masa de
una persona después de una cena medida en un peso).
Población
Muestra
población
Ya que cada resultado tiene a ser distinto de los demás, de forma general se considera al valor
central del conjunto como la mejor estimación.
Si los valores varían mucho entre sí, se dice que la medida no es precisa. Son tres los términos
de uso generalizado para describir la precisión de un conjunto de resultados: desviación
estándar (expresada como S ó DS), varianza (S 2) y coeficiente de variación (CV):
∑𝑁
𝑖=1(𝑥𝑖 −𝑥̅ )
2 𝑆
𝑆= √ ; varianza = 𝑆 2 ; %𝐶𝑉 = ∗ 100%
𝑁 𝑥̅
Las tres funciones anteriores informan de cuánto difiere de la media cada medida particular
(xi), lo que se conoce como desviación de la media (di):
𝑑𝑖 = |𝑥𝑖 − 𝑥̅ |
b). Exactitud
La exactitud describe la proximidad del valor medido respecto al valor “verdadero” o
“aceptado”. Si se dispone de un estándar conocido, por ejemplo, un material de referencia
certificado, la medida será exacta si el valor obtenido es próximo al valor certificado. Para
comprender la diferencia entre precisión y exactitud veamos las siguientes situaciones:
Una medida puede ser reproducible pero errónea. Por ejemplo, si se comete un error al
preparar una disolución patrón de Fe, ésta no tendrá la concentración deseada. Al llevar a
cabo la cuantificación de Fe en una muestra repetidas veces, los resultados pueden ser muy
precisos pero inexactos, porque la concentración real de la disolución patrón no es la que
deseábamos preparar. En definitiva: buena precisión, mala exactitud.
Pero también puede ocurrir que las medidas sean poco reproducibles, pero en torno al valor
correcto, porque la disolución patrón fuese preparada sin errores, pero el método analítico
empleado no sea muy reproducible. En definitiva: mala precisión, buena exactitud.
Situación ideal: procedimientos exactos y precisos.
La exactitud es con frecuencia más difícil de determinar que la precisión, pues para la precisión
basta con analizar varias réplicas de la muestra. Pero para determinar la exactitud se requiere
el conocimiento del valor verdadero.
Para obtener el valor verdadero de un parámetro, éste habrá tenido que ser medido
experimentalmente y, como ya sabemos, toda medida experimental lleva asociada un error.
Podríamos definir el valor verdadero como el obtenido por una persona experimentada
empleando un procedimiento bien establecido o, mejor aún sería preferible que ese valor
hubiese sido obtenido a través de diferentes procedimientos analíticos y en distintos
laboratorios. En cualquier caso, el error asociado podría minimizarse, pero nunca anularse, por
ello parece más apropiado hablar de valor aceptado más que verdadero. La exactitud se
expresa en términos del error absoluto o relativo:
Error absoluto:
Error absoluto (E)= Valor verdadero – Valor obtenido
Considerando que el valor verdadero de un parámetro es igual a 0,2 ppm. El error absoluto al
obtener 19,8 ppm sería - 0,2 ppm. El error absoluto del resultado 20,1 ppm es + 0,1 ppm.
Obsérvese que se mantiene el signo al expresar el error, pues nos informa si se produce por
exceso o defecto.
Error relativo: Frecuentemente este parámetro es más útil que el error absoluto. El error
relativo para el caso concreto citado corresponde a - 1%.
c). Tipos de error experimental
Cualquier medida lleva asociada una incertidumbre, que se llama error experimental. Los
resultados pueden expresarse con un mayor o menor grado de confianza, pero nunca con total
certeza. Los análisis químicos se ven afectados al menos por dos tipos de errores: Sistemáticos
y Aleatorios. Existe otro tipo de error denominado Bruto.
Error Sistemático; hace que la media de un conjunto de datos difiera del valor aceptado. El
error sistemático, también llamado error determinado, se origina principalmente por un fallo
del diseño del experimento o por un fallo del equipo. Si se repite el experimento en idénticas
condiciones, vuelve a producirse este error; provocando que todos los resultados se hallen por
encima o por debajo del valor aceptado. Este tipo de error es difícil de descubrir, aunque no
imposible.
Supongamos que para la adición de reactivo valorante en una volumetría directa utilizamos
una bureta de 10 ml, que no hemos calibrado previamente. El volumen liberado hasta alcanzar
el punto final de la valoración es de 8,62 ± 0,02 ml. Si supuestamente se está obteniendo una
concentración de analito por exceso, es probable que el volumen real liberado de valorante
sea superior a los valores de lectura de bureta. La calibración del material volumétrico sería
una buena forma de corregir este error sistemático.
Existen diferentes vías para detectar un error sistemático, algunas de ellas son:
donde S1, S2 y S3 son las desviaciones estándar de los términos de la operación (en este caso concreto tres
términos) y S4 es la desviación estándar del resultado de la operación.
En las operaciones de multiplicación y división, lo primero que hay que hacer es expresar todas
las incertidumbres relativas en porcentaje. Seguidamente el error del producto o cociente se
calcula según la ecuación siguiente:
En los cálculos para expresar el resultado con un número adecuado de cifras significativas se
debe previamente redondear, para ello se procede de la siguiente manera:
1] Cuando el primer dígito ubicado después del que se necesita retener es cuatro (4) o menor,
tal cifra y todas las demás de su derecha se eliminan. La última que se retiene no cambia.
2] Cuando el primer dígito después de la que se conserva es mayor a cinco (5), que esa cifra
y las demás a su derecha, se eliminan, el último dígito que se retiene se aumenta en una
unidad.
3] Cuando el primer dígito después de la que se conserva es cinco (5), que esa cifra y es
número par, se mantiene dicho valor y las demás a su derecha, se eliminan, el último dígito
que se retiene no aumenta en una unidad.
4] Cuando el primer dígito después de la que se conserva es cinco (5), que esa cifra y es
número impar, no se mantiene dicho valor y las demás a su derecha, se eliminan, el último
dígito que se retiene aumenta en una unidad.
Para expresar un número en notación científica, se debe encontrar el valor de “n”, y para ello
se cuenta el número de lugar que se debe mover el punto o coma decimal, para tener un
número comprendido en 1 a 10. Si el punto decimal se mueve hacia la izquierda, entonces “n”
es un entero positivo y si se mueve hacia la derecha “n” es un entero negativo.
Ejemplo:
¿Cuántas cifras significativas tienen las siguientes cantidades?
a) 2,75 m b) 0,020 kg c) 3,505 mm
Solución
Número de cifras
Cantidad Comentario
significativas
2,75 Tres (3) 2 y 7, son dígitos ciertos y el 5 se incluye como establece la definición
0,020 Dos (2) El cero (0) es una cifra significativa, si se encuentra a la derecha del número y los ceros
ubicados a la izquierda no son cifras significativas, porque, solo denotan la posición de la
coma decimal
3,505 Cuatro (4) 3, 5 y 0 son dígitos ciertos y el último, cinco (5) es el dígito aumentando
Cuando un experimento se repite un número elevado de veces y los errores son solamente
aleatorios, los resultados tienden a agruparse simétricamente en torno al valor medio,
asemejándose la representación la agrupación de los resultados a una curva ideal llamada
Distribución de Gauss. Aunque en realidad en un laboratorio no llevamos a cabo un análisis un
número infinito de veces, ni siquiera medimos una misma muestra 100 ó 200 veces, lo más
habitual es repetirlo de 2 a 5 veces, también podemos estimar los parámetros estadísticos que
caracterizan a una serie de un número grande de medidas.
Decimos que la variación de los datos experimentales está distribuida normalmente cuando al
repetir medidas aparece una distribución en forma de campana. Existe la misma probabilidad
de que una medida sea mayor o menor que la media. Además, la probabilidad de observar un
valor disminuye a medida que aumenta la distancia a la media.
La media constituye el centro de la distribución y la desviación estándar (s) mide el ancho de
la distribución. Por tanto, puede definirse la desviación estándar como una medida del grado
de proximidad de los datos en torno al valor de la media. Cuanto menor es s, más
estrechamente se agrupan los datos alrededor de la media y decimos que la precisión es alta.
Para una serie infinita de datos, la media se designa con la letra minúscula griega “μ” y la
desviación estándar con la letra minúscula griega “σ”. Hay que tener claro que nunca medimos
μ y σ, pero los valores de la media y la desviación estándar se acercan a μ ya σ,
respectivamente, a medida que aumenta el número de medidas.
Cuanto mayor es la desviación estándar, más ancha es la curva de Gauss. En toda curva de
Gauss, el área comprendida en el intervalo, desde el resultado de restar s al valor medio y el
resultado de sumar s al valor medio, supone el 68,3% del área total. Es decir, es de esperar que
más de 2/3 de las medidas no disten de la media en más de una desviación estándar. Además,
el 95,5% del área está entre el resultado de restar al valor medio el doble de la desviación
estándar y el resultado de sumar al valor medio el doble de la desviación estándar. El 99,7%
del área se encuentra entre los extremos correspondientes a restar al valor medio 3s y sumar
al valor medio 3s.
Supongamos que se emplean dos métodos analíticos diferentes, A y B para llevar a cabo la
determinación de hierro en una muestra de sangre, y que el método A tiene una RSD de 0,4%
y B de 1,1%. Se puede esperar que aproximadamente 2/3 de las medidas obtenidas mediante
el método A estén dentro del 0,4% de la media, mientras que para el método B, 2/3 de las
medidas estarán dentro del 1,1% de la media.
1 (𝑥− µ)2
−
𝑌= 𝑒 2 𝛿2
𝛿 √2 𝜋
Siendo la ecuación de la curva de Gauss en base a logaritmo es la siguiente:
(𝑙𝑜𝑔 𝑥 − log µ)2
1 −
2 (𝑙𝑜𝑔 𝛿)2
𝑙𝑜𝑔 𝑌 = 𝑒
𝑙𝑜𝑔 𝛿 √2 𝜋
donde “e” es la base de los logaritmos naturales y μ y 𝛿 la media verdadera y su desviación estándar asociada.
Para una serie finita de datos, μ se aproxima al valor medio y 𝛿 a la desviación estándar. Resulta muy útil expresar
las desviaciones respecto de la media como múltiplos de la desviación estándar. Esto se lleva a cabo
transformando el valor de x en otro valor numérico llamado z a través de la siguiente expresión:
𝑥−𝜇 𝑥 − 𝑥̅
𝑧= ≈
𝛿 𝑆
De este modo, la probabilidad de medir z en un cierto intervalo es igual al área de ese intervalo.
Dado que la suma de las probabilidades de todas las medidas es la unidad, el área debajo de
la curva desde − ∞ a + ∞ debe ser la unidad. Los valores de las áreas debajo de cada porción
de la curva de Gauss se encuentran tabulados.
El test “t” se utiliza para comparar dos conjuntos de medidas y poder afirmar si son o no
diferentes. A nivel estadístico se trata de comprobar la “hipótesis nula”, o sea se parte de
afirmar que los valores medios de dos series de medidas no son diferentes. Idénticos no
pueden ser, puesto que los errores aleatorios son inevitables. De manera que la Estadística
predice una probabilidad de que la diferencia entre las dos medidas pueda deberse a dichos
errores aleatorios. Si hay menos de un 5% de probabilidad de que la diferencia se deba a
errores aleatorios, se suele rechazar la hipótesis nula.
Si existe más de un 95% de probabilidad de que la diferencia se deba solo a errores aleatorios,
se acepta la hipótesis nula, concluyendo que los dos grupos de medidas no son
significativamente diferentes, en el caso de que los cálculos se desarrollen al 95% de nivel de
confianza.
En la comparación de dos conjuntos pueden darse tres casos, que se tratan de forma algo
diferente:
Caso 1: Se mide una cantidad varias veces obteniéndose un valor medio y una desviación
estándar. Queremos comparar el resultado con un resultado conocido y aceptado. La media
no coincide exactamente con el resultado aceptado. Será necesario responder a la pregunta:
¿Coincide el resultado medido con el resultado conocido dentro del error experimental?
Caso 2: Se mide una cantidad varias veces usando dos métodos diferentes, obteniéndose dos
resultados distintos, cada uno con su valor medio y su desviación estándar. Será necesario
responder a la pregunta: ¿Concuerdan entre sí los dos resultados dentro del error
experimental?
Caso 3: Se mide una vez la muestra 1 mediante el método A y otra vez con el método B, y no
dan el mismo resultado. Lo mismo se hace con la muestra 2, y de nuevo los resultados no son
iguales. Se repite el proceso con n muestras diferentes. La pregunta es: ¿Concuerdan los dos
métodos dentro del error experimental o son sistemáticamente diferentes?
Para la resolución de los tres casos puede aplicarse un patrón común que consiste en las
siguientes etapas:
Supongamos el caso concreto en el que se compró una muestra de orina sintética que
correspondía a un material estándar de referencia certificado por el NIST (National Institute
Standard Technology) con un contenido en selenio de (30,1 ± 0,9) ng/ml. Se pretende validar
un nuevo método analítico para la determinación de selenio en muestras de orina, para ello
se analiza dicho material de referencia mediante el método a validar. Siendo los valores
obtenidos para 4 alícuotas del material de referencia 27,6; 29,3; 28,1 y 28,9 ng/ml.
Dado que el valor medio de estas cuatro medidas (28,5 ng/ml) no coincide exactamente con
el valor certificado (valor verdadero o aceptado, en este caso 30,1 ng/ml), es necesario aplicar
las fórmulas correspondientes a este caso para calcular el valor de t. Ya que el valor de ttabulada
(3,182) es menor que el de t calculada, podemos afirmar que para este caso concreto existen
diferencias significativas al nivel de confianza del 95% entre los dos resultados (el obtenido y
el certificado), o lo que es lo mismo la probabilidad de que dichos valores sean iguales es
inferior al 5%.
Los test estadísticos no eximen de tener que tomar personalmente la última decisión de
aceptar o rechazar una conclusión. Sólo son una guía en términos de probabilidad. Por
ejemplo, según los resultados obtenidos en el problema informamos de que el valor de los
resultados del análisis de selenio es diferente del valor conocido. Sin embargo, con sólo 4
medidas, sería razonable repetir el análisis varias veces más para tener más seguridad en dicha
afirmación.
Caso 2: Comparación de medidas replicadas5
Se propone ahora el caso en el que se mide el contenido de selenio en una única muestra de
orina, mediante dos métodos analíticos diferentes, por ejemplo, espectrometría de absorción
atómica con atomización electrotérmica (ETAAS) y espectrometría de absorción atómica con
generación de hidruros (HG-AAS). Supongamos que se miden cuatro alícuotas de la muestra
con cada técnica. Una vez calculados el valor medio y la desviación estándar para cada grupo
de medidas, se plantea la pregunta ¿Concuerdan entre sí los dos resultados obtenidos dentro
del error experimental?
Para responder a esta pregunta se calcula S combinada mediante la ecuación correspondiente y
seguidamente el valor de tcalculada, que se comparará con el valor tabulado de t para (n 1 + n2 -
2) grados de libertad. En el caso propuesto el número de medidas llevadas a cabo con cada
método es el mismo, n1 = n2, pero podrían ser diferentes. Si por ejemplo se obtiene que tcalculada
> ttabulada, afirmaremos que existen diferencias significativas al nivel de confianza del 95% entre
los resultados obtenidos mediante los dos métodos.
En este caso se trata de dos métodos analíticos diferentes con los que se hace una única
medida usando muestras diferentes. No se duplica ninguna medida. ¿Son sistemáticamente
diferentes ambos métodos?. Aplicamos el test de las diferencias individuales entre los
resultados de cada muestra, calculando el valor de t y comparándolo con el tabulado. Si tcalculada
> ttabulada (al 95% de nivel de confianza) afirmamos que entre las dos técnicas existen diferencias
significativas al nivel de confianza citado.
d). Comparación de desviaciones estándar con el test F
El test F nos informa si dos desviaciones estándar son significativamente diferentes entre sí “F”
es el cociente de los cuadrados de las desviaciones estándar. Se coloca siempre en el
numerador la desviación estándar mayor, de modo que se cumpla que el valor calculado para
F sea mayor o igual a 1. El valor de “F” se halla tabulado para un nivel de confianza del 95%. Si
Fcalculada > Ftabulada, se concluye que los dos métodos comparados sí presentan desviaciones
estándar significativamente diferentes al nivel de confianza del 95%.
e). Test “Q” de datos sospechosos
Cuando un dato no es coherente con los restantes, es decir, es muy alto o muy bajo respecto
del resto de datos, se puede usar el test “Q” como ayuda para decidir si se mantiene o se
desecha dicho dato sospechoso. Consideremos los 5 resultados siguientes: 130,1; 130,7; 128,8;
137,8 y 131,4. ¿Se rechaza o se mantiene el valor 137,8?.
Para aplicar el test “Q”, se ordenan los datos en orden creciente y se calcula “Q”, según la
ecuación:
Qcalculada = divergencia/recorrido
donde el recorrido es la dispersión máxima entre los datos y la divergencia es la diferencia entre el valor
sospechoso y el valor más próximo.
Los valores de “Q” también se hallan tabulados para el 90% de nivel de confianza, y se
selecciona aquel valor que corresponda al número de medidas llevadas a cabo, no al número
de grados de libertad. Si Qcalculada > Qtabulada, se descarta el punto sospechoso. En el caso
propuesto el dato sospechoso no debe descartarse.
En realidad, la decisión final depende de uno mismo, pues hay quien afirma que no se debe
descartar nunca un dato a no ser que se sepa que existe un error de procedimiento que
condujo a esa medida particular; hay quien repite la medida sospechosa varias veces hasta
asegurarse si está o no realmente fuera de los esperable.
CAPÍTULO III
EQUILIBRIO QUÍMICO
“La vida es una reacción química que sólo requiere equilibrio”
Priyavrat Gupta
2 𝐻2 + 𝑂2 → 2 𝐻2 𝑂
Esta reacción aparentemente queda explicada por la ecuación química, pero no es bien
conocida hasta que no se expliquen cada una de las etapas intermedias necesarias para que se
efectúe la reacción.
Las reacciones pueden ser sencillas (una etapa) o complejas (varias etapas).
Entre estas características esta la velocidad de reacción que se puede definir como la cantidad
de sustancia transformada por unidad de tiempo “t” en segundos se transforman “n” moles
de una sustancia determinada la velocidad de la reacción será:
𝑛
𝑉=
𝑡
Las velocidades de las reacciones químicas (Vrq) pueden variar desde fracciones de segundo
(prácticamente instantáneos) hasta miles de años. Cuando se conoce el mecanismo de una
reacción la determinan las etapas más lentas del proceso.
3.2 FACTORES QUE ALTERAN LA VELOCIDAD DE UNA REACCIÓN
a). Concentración
Cuando existe una mayor concentración se origina un mayor contacto entre las sustancias que
reaccionan, de tal manera que existirá también una mayor velocidad de reacción.
98% puro
Los del grupo IA son más activos que el IIA. De acuerdo al número de fases presentes las
reacciones se pueden clasificar en:
Homogéneas; cuando todas las sustancias se encuentran en una fase.
Heterogéneas; cuando hay más de una fase presente.
Es condición indispensable, para que haya combinación, que las partículas de los reaccionantes
entren en contacto íntimo, que haya choque molecular, por lo tanto, cuanto más divididas se
hallen la sustancia mayor será la posibilidad de realizarse el choque entre sus partículas. En el
estado de máxima probabilidad de que haya choque entre las moléculas reaccionantes, Ej.:
F2 + H2 → 2 HF
Cl2 + H2 → 2 HCl
O2 + 2 H2 → 2 H2O
En los tres casos la reacción es tan rápida y se desprende tal cantidad de calor
instantáneamente que puede haber explosión.
d). Catalizadores
Son sustancias que modifican la velocidad de una reacción (catálisis) sin tomar parte en la
misma. Si el catalizador se encuentra en la misma fase que el sistema se denomina
homogénea. Ej.:
NO2 (g)
2 SO2 (g) + O2 (g) 2 SO3 (g)
Si se encuentra en fase diferente se llama heterogénea
V2O5 (g)
2 SO2 (g) + O2 (g) 2 SO3 (g)
Ni
N2H4 N2H6
Inhibidor (reacción lenta)
Productos
Ea
Avance
Reacciones
Las reacciones químicas que tienen lugar en procesos vitales son catalizadores por sustancias
que se llaman Enzimas o fermentos.
Ea
Ea
R P
Ereacción Ereacción
P R
La energía de activación (Ea) siempre será positivo (+) en tanto que la de reacción puede ser
(+) si es una reacción endotérmica o la reacción puede ser negativa (-) si es una reacción
exotérmica.
Reacciones catalíticas; una de las formas en que un catalizador altera la velocidad de reacción
es por reducción de la llamada barrera de activación (energía requerida para formar el
complejo activado), lo que facilita la producción de la reacción.
Energía
Sin catalizador
CA
Con catalizador
Coordenadas de reacción
En el año 1867 M. Guldberg y Peter Wage postularon su ley de “acción de masas”7 que
expresan la relación entre las concentraciones de los reactivos y productos en el equilibrio en
cualquier reacción. La constante de equilibrio es el valor que caracteriza a un sistema en
equilibrio y solo depende de la temperatura, es decir para cada temperatura existe un valor
determinado de la constante de equilibrio kc, keq. La representación matemática de la ley, se
da a través de la representación de:
aA + bB ↔ cC + dD
[𝐶 ]𝑐 ∗ [𝐷 ]𝑑
𝑘𝑐 =
[𝐴]𝑎 ∗ [𝐵]𝑏
donde: kc = Constante de equilibrio
[ ] = Concentración molar (mol/litro); A, B = Son los reactivos; C, D = Son los productos
a, b, c, d = Coeficientes en la reacción balanceada
7 Vogel Arthur I. 1960. Ley de acción de masas; en 1867 Gulberg y Waage establecieron claramente la ley de acción de masas, denominada también,
ley de equilibrio químico: “la velocidad de una reacción química, es proporcional al producto de las masas activas de las sustancias reaccionantes”.
Actualmente se entiende por “masa activa” a la concentración molar, es decir moléculas gramo, o moles por litro. Aplicando la ley de acción de masa a
sistemas homogéneos, es decir, a sistemas en que todas las moléculas reaccionantes se encuentran en la misma fase, por ejemplo, en solución, se puede
deducir, para una reacción reversible, una expresión matemática que vincula las concentraciones de las sustancias reaccionantes y la de los productos
de la reacción en el equilibrio. Se puede generalizar la expresión para una reacción reversible representada por:
𝑝1𝐴1 + 𝑝2𝐴2 + ⋯ + 𝑝𝑛 𝐴𝑛 ↔ 𝑞1𝐵1 + 𝑞2𝐵2 + ⋯ + 𝑞𝑛 𝐵𝑛
donde: 𝑝1, 𝑝2 , 𝑝𝑛 𝑦 𝑞1 , 𝑞2, 𝑞𝑛 , son los números de moléculas de las sustancias de la reacción, correspondientes a la ecuación que representa dicha reacción. El equilibrio se
tiene:
[𝐵1 ]𝑞1 ∗ [𝐵2 ]𝑞2 ∗ [𝐵𝑛 ]𝑞𝑛
= 𝑘𝑐
[𝐴1]𝑝1 ∗ [𝐴2]𝑝2 ∗ [𝐴𝑛]𝑝𝑛
Esta expresión establece que, cuando una reacción reversible alcanza el equilibrio, para cada temperatura es constante el cociente obtenido entre el
producto de las concentraciones moleculares de los productos de la reacción (las sustancias en la derecha de la ecuación) y el producto de las
concentraciones moleculares de las sustancia reactantes (las de la izquierda de la ecuación), estando cada [ ] elevada a una potencia igual al número de
moléculas con que la sustancia figura en la ecuación. Debe tenerse presente, que la velocidad con que una reacción tiende al equilibrio, no depende de
la constante de equilibrio. La velocidad de una reacción aumenta rápidamente con la temperatura y es modificada por la presencia de ciertas sustancias.
Las sustancias que aumentan la velocidad de la reacción se denominan catalizadores positivos y las que la disminuyen catalizadores negativos
(inhibidores).
𝑘𝑑 [𝐴]𝑎 ∗ [𝐵]𝑏 = 𝑘𝑖 [𝐶 ]𝑐 ∗ [𝐷 ]𝑑
𝑘𝑑 [𝐶 ]𝑐 ∗ [𝐷 ]𝑑
𝑘𝑐 = =
𝑘𝑖 [𝐴]𝑎 ∗ [𝐵]𝑏
𝑘𝑑
Esta proporción tiene un nombre y un símbolo especial, la constante de equilibrio kc; a
𝑘𝑖
esta relación decimos que es la expresión de equilibrio para la reacción.
La kc a la que llamamos constante de equilibrio es el valor numérico que se obtiene cuando se
sustituye las concentraciones reales de equilibrio en esta expresión kc.
De una manera general la kc, se calcula multiplicando la concentración de todos los productos
de la reacción cada una elevada a la potencia de su coeficiente en la ecuación balanceada
divididas entre la concentración de todos los reactivos cada una elevada a la potencia de su
coeficiente en la ecuación balanceada.
c). Expresión de la constante de equilibrio en función de las presiones parciales
Cuando los reactivos y productos de una ecuación química son gases podemos formular la
expresión de equilibrio en términos de presiones parciales en vez de concentraciones molares.
Cuando se usan presiones parciales en la expresión de equilibrio, la constante se denota como
kp, y tiene características similares a la kc.
aA + bB ↔ cC + dD
(𝑃 )𝑐∗(𝑃 )𝑑 [𝐶 ]𝑐 ∗[𝐷]𝑑
𝑘𝑝 = (𝑃 𝐶)𝑎∗(𝑃𝐷 )𝑏 𝑘𝑐 = [𝐴]𝑎 ∗[𝐵]𝑏
𝐴 𝐵
Por el contrario, una constante mucho menor que 1 indica que la mezcla de equilibrio contiene
principalmente reactivos, decimos entonces que el equilibrio esta desplazada a la izquierda:
kc ˃ 1; el equilibrio esta desplazada a la derecha (→), se favorecen los productos
kc ˂ 1; el equilibrio esta desplazada a la izquierda (←), se favorecen los reactivos
La constante de equilibrio también nos permite predecir el sentido en el que se desplazará una
mezcla de reacción.
Cuando sustituimos las concentraciones de los reactivos y productos en la expresión de
equilibrio el resultado se conoce como el cociente de la reacción y se presenta por la letra Q
mayúscula mayor que kc.
Las sustancias del lado derecho de la ecuación química reaccionan para formar las sustancias
de la izquierda al aproximarse al equilibrio por tanto la reacción se desplaza de derecha a
izquierda (Q ˃ kc “←”). Por el contrario, si Q es menor que kc, la reacción solo alcanzará el
equilibrio formando más productos por tanto se desplaza de izquierda a derecha (Q ˂ kc “→”).
f). Sistemas homogéneos
Un sistema es homogéneo cuando todos los componentes se encuentran en una misma fase
ósea todos son líquidos, sólidos o gases. Ej.:
N2 (𝑔) + 3H2 (𝑔) ↔ 2NH3 (𝑔)
h). Catalizadores
Un catalizador no es más que una sustancia química que acelera una reacción y que al final del
proceso se recupera sin que haya sufrido ninguna reacción. Las diversas enzimas que
intervienen en la digestión de los alimentos son catalizadores. Por Ej.; un catalizador es la
clorofila que se utiliza en el proceso de la fotosíntesis para formar glucosa (C 6H12O6), a partir
de CO2, H2O y luz solar:
6CO2 + 6H2 O ↔ C6 H12 O6 + 6O2
- Efecto de la concentración:
A+B ↔ C+D
Cuando se aumenta la concentración de un reactivo o producto al sistema, la tensión se aliviará
desplazando el equilibrio en el sentido en la dirección en que se consuma parte de la sustancia
adicional. Si aumentamos más A o B se produce la reacción hacia la derecha (→) en mayor
grado que la reacción inversa hasta restablecer el equilibrio. Si aumentamos más C o D la
reacción se desplazaría hacia la izquierda (←), hasta restablecer el equilibrio.
- Efecto de los catalizadores; al aumentar un catalizador a un sistema cambia la velocidad de la
reacción, pero esto no puede hacer que el equilibrio se desplace en favor de los reactivos o productos
porque un catalizador favorece tanto la reacción directa (→) como la inversa (←).
CAPÍTULO IV
EQUILIBRIO IÓNICO
“La química, es necesariamente una ciencia experimental: las conclusiones se extraen de datos y sus principios
son apoyados por la evidencia de los hechos”, Michael Faraday
4.1 CARACTERÍSTICAS
El estudio de un equilibrio iónico está referido fundamentalmente a dos tipos de electrolitos:
débiles que son escasamente ionizados y electrolitos fuertes, que se encuentran ionizados
prácticamente en su totalidad. Las sustancias químicas que se disuelven en el agua se dividen
en dos grandes grupos.
a). No electrolitos
No se ionizan y las soluciones que resultan no son conductores de la electricidad.
b). Electrolitos
Se caracterizan por ionizarse o se forman iones en un medio acuoso; la solución resultante es
conductor de la electricidad y esto ocurre con muchas sustancias, por Ej.:
H+ · H2O = H3+O → Hidronio
H2SO4 + H2O → H3+O + HSO4- H2SO4 + H2O → H+ + HSO4- H2SO4 → H+ + HSO4-
8 Aplicación de la ley de acción de masas al equilibrio de electrolitos en solución; electrolitos débiles (o escasamente disociados), tales como el ácido
etanoico (ácido acético) y el hidróxido de amonio, experimentan una disociación reversible cuando se disuelven en agua.
Mediante la ley de acción de masa se puede estudiar el equilibrio entre las moléculas no disociados y los iones de dichos electrolitos.
Pero no se puede aplicar la ley a electrolitos fuertes, tales como las sales, puesto que la disociación es total o prácticamente total. En una solución diluida
de ácido acético el equilibrio es:
𝐶𝐻3 − 𝐶𝑂𝑂𝐻 ↔ 𝐶𝐻3 − 𝐶𝑂𝑂 − + 𝐻 +
Aplicando la ley de acción de masas se tiene:
[𝐶𝐻3 − 𝐶𝑂𝑂 −] [𝐻 + ]
= 𝑘𝑖
[𝐶𝐻3 − 𝐶𝑂𝑂𝐻]
ki es la constante de ionización o constante de disociación, para una cierta temperatura. En el caso de ácidos y bases, se la denomina, también, constante
de afinidad.
Si una molécula gramo de un electrolito se disuelve en agua y se obtienen V litros de solución (V = 1/c, donde c es la concentración molar), y si α es el
grado de disociación, en el equilibrio, había electrolito no disociado de (1 - α) moléculas gramo, y de cada uno de los iones α iones gramo.
La concentración (en moléculas gramo por litro) del ácido acético no disociado será (1 - α)/V, y las concentraciones de cada uno de los iones α/V.
Substituyendo en la expresión anterior se obtiene:
∝2
= 𝑘𝑖
(1− ∝) ∗ 𝑉
Problema 3. Calcule la [CH3 - COO-], [H3O+] y [CH3 - COOH], en una solución acuosa de CH3 -
COOH 0,5 M y que tiene un grado de disociación de α = 40%.
0,5 M → 100% x = 0,2 M
x ← 40%
CH3 - COOH ↔ H+ + CH3 - COO-
[ ] inicial 0,5 0 0
[ ] reacción x x x
[ ] equilibrio 0,5 - x x x
0,5 - 0,2 0,2 0,2
0,3 0,2 0,2
Respuesta:
[CH3 - COOH] = 0,3 M
[CH3 - COO-] = 0,2 M
[H3O+] = 0,2 M
1
Siendo: 𝑉 =
𝑐
∝2 ∗ 𝑐
= 𝑘𝑖
(1− ∝)
Esta expresión se denomina Ley de dilución de Ostwald. El cumplimiento de esta ley se ilustra mediante la concordancia de los valores de ki del ácido
acético a 25 °C, a distintas concentraciones.
El valor promedio clásico de la constante de disociación de Ostwald, del ácido acético a 25 °C es 1,82 * 10-5. Para otros electrólitos débiles se obtienen
resultados similares, aunque entre los valores individuales de las constantes de disociación, en ciertos casos, las diferencias pueden ser mayores.
Si:
H2O(ac) ↔ H+ + OH-
[𝐻 +] ∗ [𝑂𝐻 −]
𝑘𝑖 = = [𝐻 +] ∗ [𝑂𝐻 −]
[𝐻2 𝑂]
kw
9Pérez L. (2018), el agua es un compuesto anfótero, por tal, se autoionizarse y poder a través de este, establecer la escala (pH y pOH) que mide el grado
de acidez y el grado de basicidad, su representación es:
[𝐻 + ] ∗ [𝑂𝐻− ]
𝑘𝑖 = = [𝐻 + ] ∗ [𝑂𝐻− ]
[𝐻2 𝑂]
Pero:
𝑘𝑤 = 𝑘𝑖 = [𝐻 + ] ∗ [𝑂𝐻− ]
La “kw” llamado la constante del producto iónico del agua a 25 °C tiene un valor constante de 1 * 10 -14, generado a través de la multiplicación de los
productos iónicos de (H+) y oxidrilos (OH-):
𝑘𝑤 = [𝐻 + ] ∗ [𝑂𝐻 − ]
1 ∗ 10−14 = 1 ∗ 10−7 ∗ 1 ∗ 10−7
Utilizando logaritmos a la anterior ecuación se tiene:
log[1 ∗ 10−14 ] = log[1 ∗ 10−7 ] ∗ log[1 ∗ 10−7 ]
14 = 7 + 7
De la ecuación se deduce:
14 = 𝑝𝐻 + 𝑝𝑂𝐻
Por tanto:
[] pH pOH []
0 0 14 1 * 10-14
1 * 10-1 1 13 1 * 10-13
1 * 10-2 2 12 1 * 10-12
Ácido
Ácido
1 * 10-3 3 11 1 * 10-11
1 * 10-4 4 10 1 * 10-10
1 * 10-5 5 9 1 * 10-9
1 * 10-6 6 8 1 * 10-8
Neutro 1 * 10-7 7 7 1 * 10-7 Neutro
1 * 10-8 8 6 1 * 10-6
1 * 10-9 9 5 1 * 10-5
1 * 10-10 10 4 1 * 10-4
Básico
Básico
1 * 10-11 11 3 1 * 10-3
1 * 10-12 12 2 1 * 10-2
1 * 10-13 13 1 1 * 10-1
1 * 10-14 14 0 0
kw = [H+] * [OH-]
kw = [1 * 10-7] * [1 * 10-7]
kw = 1 * 10-14 M a 25 °C
4.5 EFECTO DEL IÓN COMÚN
La concentración de un ion determinado, en una reacción iónica, se puede aumentar por el
agregado de un compuesto que da ese ion, por disociación. El ion considerado proviene, así,
del compuesto ya en solución y del reactivo agregado, de aquí la denominación de ion común.
Tratemos el caso en que el compuesto sea un electrolito débil, de manera que se puede aplicar
la ley de acción de masa. El resultado es que hay una concentración mayor de este ion que la
que tendría la solución del electrolito débil y, en consecuencia, se tienen nuevas
concentraciones en el equilibrio.
En general, se puede establecer que, si la concentración total del ion común fuera sólo algo
mayor que la que produciría el compuesto original solo, el efecto sería débil; pero si la
concentración del ion común fuese mucho mayor (por ejemplo, lo que sucede por la adición
de una sal totalmente disociada) el efecto sería muy grande y puede ser de una importancia
práctica considerable. El efecto del ion común proporciona un método valioso para regular la
ionización de un electrolito débil.
CAPITULO V
GRAVIMETRÍA
“El análisis gravimétrico es una clase de técnica de laboratorio utilizada para determinar la masa o la
concentración de una sustancia”
5.1 INTRODUCCIÓN
Este capítulo trata del análisis cuantitativo de las muestras, mediante el método gravimétrico.
Las prácticas se realizan en el laboratorio mediante procedimientos diseñados para cada tipo
de muestra.
La gravimetría se refiere a la medición del peso del analito o componente de la muestra
problema, después de un análisis gravimétrico en laboratorio los datos obtenidos se computan
para determinar el porcentaje del analito en la muestra. La parte teórica comprende la
realización de cálculos, conversiones, transformaciones, en base a los datos obtenidos en
laboratorio.
Se clasifican como métodos gravimétricos todos los métodos de análisis que consisten en
separar una fase pura del resto de los constituyentes de una muestra incluyendo el disolvente
y a partir de la cual se determina el constituyente que se desea analizar mediante una
operación de pesada.
Dicha fase pura puede ser el mismo constituyente buscado o un compuesto derivado de
composición conocida y definida a partir de cuyo peso se halla el del componente analizado.
Por ejemplo, si se quiere encontrar la concentración de cloro (Cl -):
Ag+ + Cl- → AgCl↓
Este producto se pesa después de separado, filtrado, lavado y tratamiento térmico apropiado.
Ej.:
Ca2+ + C2O4 → CaC2O4↓
c. Ventajas y desventajas
Si bien los métodos de análisis gravimétrico pueden igualar y sobrepasar al análisis volumétrico
en exactitud y precisión, habitualmente se objeta que son lentos y tediosos, requieren
cuidados atención y personal experimentado.
El análisis gravimétrico presenta la ventaja de que la sustancia analizada o su derivado
conocido pueden ser directamente pesados, su pureza y calidad posteriormente controlados
permitiendo introducir las correcciones correspondientes si fuera necesario.
4.3 REVISIÓN DE ESTEQUIOMETRÍA
La estequiometria estudia las relaciones de masa de las sustancias en una reacción química.
a. Fórmula empírica; la fórmula empírica conocida como la fórmula más sencilla expresa la
relación de combinación más simple entre los átomos de una sustancia.
c. Mol; es un término que expresa la cantidad de una sustancia química equivalente a 6.023 *
1023 (número de Avogadro). Un submúltiplo utilizado mayormente es el milimol, que es la
milésima parte de un mol y se puede obtener multiplicando por 1000.
Las relaciones estequiométricas muestran una ecuación química balanceada incluyendo las
sustancias reactantes y los productos, el cuál es llamado estequiometría.
2 NaI + Pb(NO3)2 → 2 NaNO3 + PbI2
Solución:
0,025 g CaCO3 * (1 mol CaCO3 / 100 g CaCO3) * (2 mol NaNO3 / 1 mol CaCO3) * (85 g NaNO3 / 1 mol NaNO3) = 0,0425 g NaNO3
Los métodos gravimétricos se han desarrollado para la mayoría sino todos los aniones y
cationes inorgánicos, así como para las sustancias neutras como el H 2O, CO2, SO2, I. Numeroso
compuestos orgánicos también se pueden determinar por gravimetría incluyendo la lactosa en
los productos lácteos, la nicotina en los pesticidas y el colesterol en los cereales.
CAPITULO VI
VOLUMETRÍA
“El análisis volumétrico es una clase de técnica de laboratorio utilizada para determinar el volumen o la
concentración de una sustancia”
6.1 INTRODUCCIÓN
La volumetría es una parte de la química analítica que se basa en los procedimientos
cuantitativos, análisis y consiste en medir la capacidad de reacción de un analito en la solución
con un reactante patrón (estándar primario).
a) Estándar primario; es una sustancia que se utiliza para estandarizar una solución que se
muestra disponible en gama pura o en un estado de pureza conocida que es la
estandarización. Proceso mediante el cual se determina con exactitud la concentración de
una solución.
b) Reactivo patrón; es una solución de concentración conocida capaz de reaccionar más o
menos completamente con la sustancia analizada. En un método volumétrico se utiliza uno
o varias soluciones estándar.
6.2 PRINCIPIOS DE LA TITULACIÓN
La titulación se efectúa añadiendo con exactitud el volumen de una solución estándar que se
necesita para reaccionar con una cantidad desconocida de otra sustancia. Es el procedimiento
que permite determinar la concentración de una solución ácida o básica, se realiza añadiendo
un ácido o base a una base o ácido respectivamente, para indicar el punto final o punto de
neutralidad, se percibe por un viraje de un indicador.
La solución estándar se llama titulante, el volumen del titulante para la titulación se mide
cuidadosamente con una bureta. Si se conoce el volumen y la concentración del titulante se
podrá calcular la cantidad desconocida de la sustancia titulada.
𝐶1∗V1=C2∗V2
𝑎 𝐴 + t T → 𝑃𝑟𝑜𝑑𝑢𝑐𝑡𝑜𝑠
donde: a = moles de analito A
t = moles del reactivo T (titulante)
Ej.:
NaOH + HCl → NaCl + H2O
6.3 REACCIONES QUE SE UTILIZAN
a) Ácido – Base; cientos de compuestos tanto orgánicos como inorgánicos pueden
determinarse por volumetría basándose principalmente en sus propiedades ácidas y
básicas. Si HA representa el ácido que se va a determinar y BOH la base, las reacciones son
las siguientes:
HA + OH- → A- + H2O
Mn7+ → Mn2+
5 Fe2+ + Mn7+ → 5 Fe3+ + Mn2+
6.4 Unidades de concentración
La molaridad y la normalidad son los términos de concentración que se utilizan con más
frecuencias en el análisis volumétrico. El término por ciento en peso se emplea con más
𝑊 (𝑚𝑔)
𝑚𝑖𝑙𝑖 𝑒𝑞𝑢𝑖𝑣𝑎𝑙𝑒𝑛𝑡𝑒 − 𝑔𝑟𝑎𝑚𝑜 (𝑚𝑒𝑞 − 𝑔) = 𝑚𝑔
𝑃𝐸 (𝑚𝑒𝑞 − 𝑔)
𝑁=𝑀∗ 𝜃
donde: N = normalidad (Eq - g/l)
M = molaridad (mol/l)
𝜃 = número de moles de hidrógeno, oxidrilos, electrones o cationes monovalentes combinados o
suministrados con la sustancia reaccionante
d) Peso equivalente
d.1 Ácidos y bases; la unidad de reacción para ácidos y bases es el protón (H +), si la sustancia
reacciona como ácido es necesario determinar el número de protones reactivos que posee una
molécula. Si reacciona como base será necesario determinar el número de protones que
reacciona con ella por molécula.
𝑃𝑀 (𝑔/𝑚𝑜𝑙)
𝑃𝑒𝑠𝑜 𝐸𝑞𝑢𝑖𝑣𝑎𝑙𝑒𝑛𝑡𝑒 (𝑃𝐸) =
𝜃
donde: PE = Peso equivalente (g/eq-g)
PM = Peso molecular (mol/l)
𝜃 = número de protones (hidrógeno = H+), (g/eq-g / mol/l)
𝜃 = número de oxidrilos (oxidrilos = OH-), (g/eq-g / mol/l)
d.2 Oxido reducción; la unidad que reacciona en este caso es el electrón. Un agente reductor
libera electrones y por tanto se oxida. Un agente oxidante gana electrones y se reduce, por
ejemplo:
𝑃𝑀 (𝑔/𝑚𝑜𝑙)
𝑃𝑒𝑠𝑜 𝐸𝑞𝑢𝑖𝑣𝑎𝑙𝑒𝑛𝑡𝑒 (𝑃𝐸) =
𝜃
donde: PE = Peso equivalente (g/eq-g)
PM = Peso molecular (mol/l)
𝜃 = número de electrones (ganados o perdidos = # e-), (g/eq-g / mol/l)
e) Por ciento en peso; este término se refiere al número de gramos de soluto por 100 g de
solución, su representación matemática es:
𝑊 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 (𝑔)
% 𝑃𝑒𝑠𝑜 = ∗ 100%
𝑊 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑐𝑖ó𝑛 (𝑔)
W solución = W soluto + W solvente
V solución = V soluto + V solvente
donde:
% Peso; % Volumen = Por ciento en peso (%); Por ciento en volumen (%)
W soluto; V soluto = Peso de soluto (g); Volumen de soluto (ml)
W solvente; V solvente = Peso de solvente (g); Volumen de solvente (ml)
W solución; V solución = Peso de solución (g); Volumen de solución (ml)
f) Partes por millón (ppm); este término específico el número de partes de un componente en
un millón de partes de la mezcla a la que pertenece, su representación matemática es:
𝑊 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑡𝑜 (𝑔)
𝑝𝑝𝑚 = ∗ 1 ∗ 106
𝑊 𝑠𝑜𝑙𝑢𝑐𝑖ó𝑛 (𝑔)
1 ppm = 1 mg/l ó 1 ppm = 1 mg/kg
donde: ppm = Partes por millón (mg/l ó mg/kg)
W soluto = Peso de soluto (g)
W solvente = Peso de solvente (g)
Mc * Vc = Md * Vd
donde: Mc = Molaridad concentrada (mol/l)
Vc = Volumen concentrado (l)
Md = Molaridad diluida (mol/l)
Vd = Volumen diluido (l)
CAPITULO VII
HIDRÓLISIS
“La hidrólisis es una reacción química que puede darse en moléculas o iones tanto inorgánicos como orgánicos,
y que involucra la participación del agua para el rompimiento de sus enlaces”
7.1 DEFINICIÓN
Es un fenómeno que consiste en la reacción de las sustancias presentes en una solución con
solvente. Ósea, la hidrólisis se refiere a la reacción de las sustancias especialmente iónicas con
el agua (H2O). Una reacción muy común en hidrólisis es la reacción que ocurre entre el anión
de un ácido débil con los iones producidos por el agua. Para formar moléculas no ionizadas.
H2O ↔ H+ + OH-
débil AF BF
H2O ↔ H+ + OH-
débil AF BF
NaOH → Na+ + OH
base fuerte AD BD
Si reacción porque
los dos son débiles
HCl → H+ + Cl-
ácido fuerte AD BD
H2O ↔ H+ + OH-
débil AF BF
No pueden
reaccionar, pH = 7
NaCl → Na+ + Cl-
sal fuerte AD BD
a). Primer grupo: Sales de ácidos fuertes + bases fuertes; este tipo de sales generan soluciones
neutras, no existiendo reacción de hidrólisis:
b). Segundo grupo: Sales de ácidos fuertes + bases débiles; este tipo de sales generan
soluciones ácidas (pH < 7), si existe reacción de hidrólisis:
H2O ↔ H+ + OH-
débil AF BF
Hidrólisis; el amonio (NH4+) puede reaccionar el OH- porque el NH4+ es un ácido fuerte y queda un exceso de H+
y será la solución ácida, pH < 7
H2O ↔ H+ + OH-
NH4+ + H2O ↔ NH3 + H+
[𝑁𝐻3 ] [𝐻 +]
𝐾ℎ = 𝐾𝑎 =
[𝑁𝐻4+]
c). Tercer grupo: Sales de ácidos débiles + bases fuertes; este tipo de sales generan soluciones
básicas (pH > 7), si existe reacción de hidrólisis:
H2O ↔ H+ + OH-
débil AF BF
Hidrólisis; el acetato (CH3 – COO-) puede reaccionar con el H+ porque el CH3 – COO- es un base fuerte y queda un
exceso de OH- y será la solución básica, pH > 7
d). Cuarto grupo: Sales de ácidos débiles + bases débiles; este tipo de sales generan soluciones
ya sean ácidas (pH < 7), soluciones neutras (pH = 7), o soluciones básicas (pH > 7), si existe
reacción de hidrólisis:
CH3 - COOH + NH3 → CH3 – COONH4 + H2O
H2O ↔ H+ + OH-
[𝑁𝐻3 ] [𝐻 +]
𝐾ℎ = 𝐾𝑎 =
[𝑁𝐻4+]
H2O ↔ H+ + OH-
CAPITULO VIII
MÉTODOS DE ANÁLISIS: ÓPTICOS, ELECTROQUÍMICOS Y FOTOMETRÍA
“La hidrólisis es una reacción química que puede darse en moléculas o iones tanto inorgánicos como orgánicos,
y que involucra la participación del agua para el rompimiento de sus enlaces”
En los últimos años se han producido diversos instrumentos sensibles que han incrementado
considerablemente la capacidad del ingeniero para cuantificar y controlar
los materiales contaminantes, cuya complejidad va en aumento. Los métodos instrumentales
de análisis tienen aplicación en el monitoreo de rutina de la calidad del aire, calidad
del agua superficial y subterránea, y la contaminación del suelo, como también durante
el proceso de tratamiento de agua y agua residual.
Estos métodos han permitido que las mediciones analíticas se realicen inmediatamente en la
fuente, y que el registro se practique a una distancia del sitio donde se realiza la medición.
Además, han permitido ampliar considerablemente la variedad de las sustancias químicas
orgánicas e inorgánicas que se pueden controlar, las concentraciones que se pueden detectar
y cuantificar. En la actualidad se usan rutinariamente varios métodos instrumentales para
investigar la magnitud de la contaminación y para controlar la efectividad del tratamiento.
Casi cualquier propiedad física de un elemento o compuesto puede servir como base para un
medición instrumental. La capacidad de una solución coloreada para absorber luz, de una
solución para transmitir corriente o de un gas para conducir calor puede ser la base de un
método analítico para medir la cantidad de un material y para detectar su presencia.
Los métodos ópticos miden las interacciones entre la energía radiante y la materia. Los
primeros instrumentos de esta clase se crearon para su aplicación dentro de la región visible y
por esto se llaman instrumentos ópticos. La energía radiante que se utiliza para estas
mediciones puede variar desde los rayos X, pasando por la luz visible, hasta las ondas de radio.
El parámetro usado más frecuentemente para caracterizar la energía radiante es la longitud
de onda, que es la distancia entre las crestas adyacentes de la onda de un haz de radiación.
Los rayos X, de longitud de onda corta, son relativamente de alta energía y por esta razón
pueden producir cambios marcados en la materia, y que las microondas y las ondas de radio
tienen longitudes de onda larga y son relativamente de baja energía; los cambios que pueden
ocasionar al interactuar con la materia son muy leves y difíciles de detectar.
Los métodos ópticos de análisis se pueden diseñar para medir la capacidad de un material o
de una solución para absorber energía radiante, para emitir radiación cuando son excitados
por una fuente de energía o para dispersar o difundir radiación.
Los métodos ópticos de análisis cubren un amplio campo de aplicación, incluyéndose bajo su
denominación todos aquellos que implican la medida de la Radiación Electromagnética
emitida por la Materia o que interacciona con ella (REM). Actualmente el uso de métodos
espectroscópicos está generalizado, debido a su rapidez, a la gran gama de instrumentación
disponible y sus grandes posibilidades de automatización.
Las Propiedades de onda nos permite seguir su movimiento y Las propiedades de partícula
podemos ver como se transmite, si es reflejada, si cambia de dirección nos indica cuál es su energía
o refractada, si es interferida si se produce una dispersión anómala o con la que puede
“scattering” o si es polarizada. interaccionar con la materia.
- En estos métodos se miden espectros, siendo éstos debidos a transiciones entre distintos
niveles energéticos.
- Se basan en procesos de absorción y emisión, y las transiciones entre distintos niveles
energéticos pueden tener lugar a nivel atómico o molecular.
ESPECTROSCOPICOS
niveles atómicos: absorción
atómica, rayos X
Emisión niveles moleculares:
luminiscencia (fluorescencia,
fosforescencia)
niveles atómicos: espectrometría
de emisión, fotometría de llama,
ICP, fluorescencia de rayos X,
fluorescencia atómica
Dispersión: turbidimetría,
nefelometría
ESPECTROSCOPICOS
Refracción: refractometría,
interferometría
NO
Difracción: rayos X,
electrones
Rotación óptica:
polarimetría, dicroísmo
circular
10 Métodos de absorción; cuando una fuente de energía radiante, como un haz de luz blanca, se pasa a través de una solución, el haz emergente
será de menor intensidad que el haz que entra. Si la solución no tiene partículas en suspensión que dispersen la luz, la reducción en intensidad
se debe principalmente a la absorción por la solución. La medida en que se absorbe la luz blanca es por lo general mayor para
algunos colores que para otros, con el efecto de que el haz emergente tiene color.
Espectrofotometría ultravioleta; cuando una molécula absorbe energía radiante en la región visible o ultravioleta, la valencia o los enlaces
electrónicos en la molécula se elevan a órbitas de más alta energía. Algunos cambios moleculares menores también tienen lugar, pero son
usualmente enmascarados por la excitación electrónica mencionada. El resultado es que por lo general se observan bandas de absorción
moderamente amplias tanto en la región visible como en la ultravioleta. Existen muchos instrumentos para realizar mediciones en ambas
regiones. La región ultravioleta es de aplicación general más limitada, aunque es particularmente apropiada para la medición selectiva de
concentraciones bajas de compuestos orgánicos.
Espectrofotometría infrarroja; casi todos los compuestos químicos orgánicos presentan marcada absorción selectiva en la región infrarroja. Sin
embargo, el espectro infrarrojo es mucho más complejo comparado con el ultravioleta o el visible. La radiación infrarroja es de baja energía y
su absorción por una molécula causa toda clase de cambios sutiles en su energía rotacional o vibracional. La comprensión de estos cambios
requiere un gran conocimiento de mecánica cuántica, ya que sabiendo esto es posible identificar agrupaciones atómicas particulares que estén
presentes en una molécula desconocida. Este método se utiliza, por ejemplo, para medir la concentración de carbono orgánico total cuando
hay solo pequeñas cantidades de carbono en el agua.
Desde hace mucho tiempo se sabe que muchos elementos metálicos, cuando se someten a la excitación adecuada, emiten radiaciones de
longitudes de onda específica. Métodos de emisión; ésta es la base de la conocida prueba de la llama para el sodio (que emite una luz amarilla), y
para otros metales alcalinos y alcalinotérreos. Cuando se utiliza un método de excitación mucho más potente en vez de la llama, la mayoría de
los elementos metálicos y algunos no metálicos emiten radiaciones características. En condiciones controladas apropiadas, la intensidad de la
radiación emitida a una longitud de onda específica se puede correlacionar con la cantidad del elemento presente. Por tanto, se puede hacer un
determinación cuantitativa y cualitativa. Los diferentes procedimientos analíticos que utilizan la emisión de espectros se caracterizan por el
método de excitación usado, la naturaleza de la muestra (si es sólida o líquida) y el método para detectar y registrar el espectro producido.
- Puede considerarse que la REM está constituida por ondas que se propagan en el espacio
a la velocidad v.
- Las ondas están constituidas por componentes eléctricos y magnéticos perpendiculares
entre sí.
–10
1 angstrom (A) = 10 m
–9
1 nanometro (nm) = 10 m
–6
1 micrometro (μm) = 10 m
Longitud de onda, λ
Frecuencia (v); Es el número de ciclos por unidad de tiempo. Veces que pasa por un
determinado punto en 1 s. La unidad de frecuencia es el segundo recíproco, s –1 o hertz (Hz)
Número de onda (ṽ); Se define como la inversa de la longitud de onda. Su unidad más utilizada
es el cm–1.
- La relación entre los parámetros mencionados es:
𝑣 = 𝜆 𝑣̅
- Donde v= velocidad de propagación de la onda.
- En el vacío la velocidad de propagación alcanza su máximo valor, que es de 2.9979x10 10
cm/s
Los distintos métodos electroanáliticos pueden clasificarse según qué es lo que se mide:
Conductimétricos
- Al aplicar un voltaje a una solución y los iones presentes se mueven al electrodo de carga
opuesta contribuyendo al paso de corriente eléctrica.
- La contribución de cada ión depende de su concentración, carga eléctrica y movilidad en
el medio.
- En esta técnica se mide la conductividad eléctrica o conductancia, CE (inversa de la
resistencia)
1 𝑙
𝐶𝐸 = =
𝑅 𝑉
Potenciométricos
- Uno de los electrodos deberá tener un potencial constante, es decir que no debe sufrir
cambios entre uno y otro experimento. El electrodo que cumple esta condición se conoce
como electrodo de referencia.
- Debido a la estabilidad del electrodo de referencia, cualquier cambio en el potencial del
sistema se deberá a la contribución del otro electrodo, llamado electrodo indicador o de
trabajo.
Electrodos de referencia:
- Son aquellos que miden el mismo potencial cualquiera que sea la naturaleza de la
disolución en que se introduzcan y por tanto dan una referencia a la medida del electrodo
indicador.
- En la mayoría de los casos están constituidos por un conductor metálico en contacto con
una sal poco soluble de su metal, y una disolución de composición constante y alta
concentración llamado electrolito de referencia
Las ventajas del método potenciométrico son:
- Es aplicable a sistemas químicos que tienen tan vivos colores que con ellos serían inútiles
los métodos que emplean un indicador visual
- Una valoración potenciométrica es especialmente útil cuando no se dispone de un
indicador
- Es un método valioso para las valoraciones en solventes no acuosos
- Elimina decisiones subjetivas concernientes a los cambios de color del indicador en el
punto final
- Elimina la necesidad de llevar a cabo ensayos en blanco
- Pueden emplearse para valoraciones: ácido - base, complejométricas, de precipitación y
redox
- La exactitud del punto final es mejor que la que se consigue empleando indicadores
visuales
Aplicaciones; determinación de proteínas según Kjldahl, determinación de la acidez total en
varias sustancias
11 Pickering, 1980
- Directas: valoraciones fotométricas en las cuales la absorbancia es debida a que una de las
especies participantes en la reacción absorba a la longitud de onda de medida.12
- Indirectas o con indicador: valoraciones fotométricas en las cuales ninguna de las especies
participantes en la reacción presenta suficiente absorción a la longitud de onda de medida y
por ello se añade una sustancia indicadora cuyo cambio de color en el punto de equivalencia
sea muy acusado, mediante una reacción con alguna de las especies participantes. Esto
permite obtener el punto final a partir de la curva de valoración obtenida 13. Un ejemplo de
este tipo de valoraciones fotométricas es el negro de eriocromo T como indicador en la
determinación Zinc con el ácido etilendiaminotetraacético (EDTA) como reactivo valorante.
Curvas de valoración
Las curvas de valoración son la representación de las absorbancias en función del volumen de
valorante (figura 6). En el caso de las valoraciones fotométricas, son curvas de valoración
lineales, debido a que la absorbancia es directamente proporcional a la concentración de la
especie que se valora o bien al producto de reacción o a la concentración de valorante. La
ventaja de las curvas de valoración lineales frente a las logarítmicas es la precisión en la
localización del punto final.
Si se escogen bien las condiciones experimentales, la curva de valoración consta de dos líneas
rectas con diferentes pendientes, una que se presenta al principio de la valoración y otra que
se presenta después del punto de equivalencia. Como punto final se toma la intersección de
las dos líneas rectas extrapoladas. Para obtener curvas de valoración de tramos lineales como
las que vemos en la figura 4 que se puedan extrapolar, el sistema absorbente debe cumplir la
ley de Beer. Presentan distinta forma según la especie absorbente y el valor relativo del
coeficiente de absortividad. Existen dos tipos generales:
a) Cuando absorbe solo una especie a la longitud de onda de trabajo. En este caso
podría absorber el analito, el valorante o el producto de la reacción.
b) Cuando absorben dos o más participantes de la reacción.
12 Headridge, 1961
13 Pino y Pérez, 1986
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GLOSARIO DE TÉRMINOS