La Politica Bajo El Signo de La Crisis
La Politica Bajo El Signo de La Crisis
La Politica Bajo El Signo de La Crisis
Durante el período 1916 – 1930 gobernó el país la Unión Cívica Radical. A pesar del cambio
que significó la llegada de los radicales al gobierno, siguieron persistiendo viejas prácticas que
impedían la consolidación de un verdadero sistema democrático.
El golpe de 1930 permitió que las elites conservadoras recuperaran el poder. Entre 1931 y
1943 controlaron los destinos políticos del país, gracias a la proscripción del radicalismo,
principal fuerza opositora, o a través de la aplicación del fraude electoral.
Luego del Golpe de 1930, el Gral. Uriburu no llegó a gobernar dos años completos. El período
fue difícil, ya que la Argentina sufría las consecuencias de la crisis económica de los Estados
Unidos (1929). Por otra parte, Uriburu pretendía llevar adelante, un proyecto nacionalista que
incluía la reforma de la Constitución Nacional. Sus aspiraciones no tuvieron buena recepción y
Uriburu fue perdiendo apoyos.
Esta situación lo llevó a buscar una salida electoral que le permitiera retirarse de la
presidencia. Los conservadores, los radicales antipersonalistas y los socialistas independientes
se aliaron para sostener la candidatura de Justo.
A esta práctica se la denominó fraude patriótico. De esta forma se garantizaba que los
gobiernos no cayeran en manos de la oposición.
Los recién electos Justo (Presidente) y Julio Argentino Roca (Vicepresidente) representaban los
intereses de los sectores conservadores y permitieron el retorno al poder de los grupos que lo
habían controlado hasta antes de 1916.
Gracias a la práctica sistemática del “fraude patriótico”, en 1938 llega a la presidencia Roberto
Marcelino Ortiz, ex radical antipersonalista, como presidente y Ramón S. Castillo, conservador,
como vicepresidente.
Es importante destacar que Ortiz creía que la solución a la situación crítica e irregular que se
manifestaba en la política, debía realizarse dentro del régimen liberal y la Ley Saénz Peña;
pero, en contraste con Justo, sus moderadas ambiciones políticas le permitían imaginar la
salida al fraude como una drástica apertura electoral.
“La declaración de guerra al fraude se produjo (…) en abril de 1939, cuando decidió la
anulación de los comicios en San Juan, luego de una elección plagada de irregularidades. El
conflicto abierto estalló a partir de febrero de 1940 con la intervención a Catamarca,
particularmente significativa por ser el territorio del vicepresidente Castillo, y sobre todo con la
intervención de la provincia de Buenos Aires.”1
La única garantía de equilibrio político y militar, frente a las medidas de apertura electoral y
finalización del fraude, era la presencia del presidente Ortiz en el gobierno.
Sin embargo su salud se deterioró, sufría de diabetes muy aguda, y debió tomar algunas
licencias hasta que en 1942 murió. La presidencia fue ejercida entonces por Castillo quien dio
marcha atrás con la política de Ortiz respecto del fraude y buscó alentar la política de los
conservadores.
La situación internacional repercute en la Argentina
La Guerra Civil española (1936-1940) y la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) tuvieron gran
repercusión en la política argentina. La política exterior de la Argentina frente a la Guerra, fue
la neutralidad. Esta decisión llevó a que los opositores acusaran al gobierno de apoyar
indirectamente a Hitler (líder del Nazismo en Alemania que dio inicio a la segunda guerra
mundial). La política de los Estados Unidos (a partir de su ingreso al conflicto en 1941) fue de
hostigamiento hacia nuestro país, pues pretendía que la Argentina se uniera a los aliados2 y
analizaba su neutralidad como signo de simpatía por el Eje3. Por lo tanto, la guerra era un
tema preocupante, pero su finalización y quién obtuviera el triunfo definitivo también
generaba ondas preocupaciones.
Castillo retomó las prácticas fraudulentas y se ocupó de preparar el camino para quien sería su
futuro sucesor. Apoyaba la candidatura de Robustiano Patrón Costas, un político conservador
hacendado de la provincia de Salta (considerado seguidor de los aliados) para las próximas
elecciones presidenciales.
Esta candidatura no fue bien recibida por sectores nacionalistas del ejército que observaban
con preocupación las inclinaciones políticas de Patrón Costas. Por otra parte, la situación de
efervescencia social, la creciente actividad sindical y la posible extensión de ideologías de
izquierda, los alentó a preparar un Golpe de Estado.
Fueron los miembros del GOU (grupo de oficiales unidos) una logia que fue creciendo dentro
de las fuerzas militares los que llevaron adelante el Golpe del 4 de junio de 1943. Consideraban
esencial la existencia de un estado fuerte, que condujera la economía y resolviera los
problemas sociales manteniendo el orden y la paz social. Entre los miembros del GOU se
encontraba Juan Domingo Perón.
En las sociedades latinoamericanas, las consecuencias de la crisis económica de los años 30’, se
vieron reflejadas en tensiones políticas muy diversas. Los intentos de respuesta política a la
crisis, variaron desde el establecimiento de gobiernos conservadores y dictaduras militares
hasta experiencias socialistas. En el mismo año que derrocaban a Yrigoyen en la Argentina, un
golpe de estado liderado por el Coronel Luis Miguel Sánchez Cerro, en Perú, culminaba con la
experiencia autoritaria de Augusto Bernardo Leguía. En Brasil terminaba la llamada república
vieja y comenzaba el proceso liderado por Getulio Vargas (que estudiaremos más adelante).
Para la misma época se instalaba la dictadura del General Rafael Leónidas Trujillo en la
República Dominicana y la de Anastasio Somoza en Nicaragua. En 1932, en Chile una
revolución encabezada por el jefe de la Fuerza Aérea, Marmaduke Grove, instauró una efímera
república socialista, que ese mismo año fue reemplazada por el gobierno de Arturo Alessandri.
Desde fines del siglo XIX, los Estados Unidos fue asumiendo una posición económica
hegemónica en todo el continente. Adoptó una política agresiva con los países del Caribe y
Centroamérica para defender sus intereses, que se conoce con el nombre de Big Stik (Gran
garrote). Ocupó militarmente varios países en la región hasta la década del 30’. A partir de ese
momento comenzaría a manejar las relaciones con el resto de los países de América, a través
del diálogo diplomático más que de la fuerza. Impulsó entonces, la conformación de una Unión
Panamericana, ámbito de discusión y consenso de las cuestiones continentales. Sin embargo,
es importante tener en cuenta que los gobiernos dictatoriales, como el de Trujillo en República
Dominicana y el de Anastasio Somoza (padre) en Nicaragua, le ahorraron a los Estados Unidos,
con su obediencia, la necesidad de intervenir militarmente. La última conferencia
panamericana realizada durante la segunda guerra mundial fue la de México en 1945. Allí
comenzó a delinearse la formalización del sistema panamericano de posguerra. Las posteriores
conferencias de Río de Janeiro (Brasil) en 1947 y de Bogotá (Colombia) en 1948 sirvieron para
dar forma definitiva al nuevo organismo panamericano. Nació entonces la Organización de
Estados Americanos (OEA), una institución permanente a través de la cual los Estados
americanos discutirían y acordarían políticas internacionales. En la práctica se vio manejada
por los Estados Unidos, la potencia hegemónica.
¿Quiénes eran los opositores? La Unión Cívica Radical: hacia fines de 1930 surgió un sector
intransigente que se oponía a realizar alianzas con otros partidos opositores y criticaba la
postura conciliadora de Marcelo Torcuato de Alvear con el gobierno.
Partido socialista: sus líderes más destacados fueron Juan B. Justo y Nicolás Repetto. Desde el
Congreso impulsaron la sanción de leyes sociales. Partido Demócrata Progresista: su líder el
senador Lisandro de la Torre, se enfrentó al gobierno conservador de Justo. Hacia fines de los
años treinta fue perdiendo poder frente al UCR. Partido Comunista: fue duramente reprimido.
Sus principales dirigentes fueron Victorio Codovilla y Rodolfo Ghioldi.
LA ALTERNATIVA FRUSTRADA DE ORTIZ
En una elección para gobernador de buenos aires fresco pretendía imponer como sucesor a
Alberto Barcelo, Ortiz envió la intervención federal a la provincia.
Las actitudes de Ortiz y la guerra mundial comenzaron a modificar la política local, en este
punto ya no se trataba de una guerra de partidos sino un conflicto entre la democracia y en
nazifacismo. Esto se debe a los que apoyaron a la causa de los aliados no estaban de acuerdo
de la unión de la república española con el comunismo, alvear se negó a reconocer cualquier
similitud entre españa y argentina El lento alejamiento de Ortiz de la presidencia y su remplazo
por el presidente castillo dio lugar a u nuevo conflicto y la ucr quedaba nuevamente sin salida
posible, radicales y socialistas promovieron la formación de una comisión que investigaba
maniobras nazis en el país se convirtió en un foro de gobierno en oposición a castillo, llegado
el momento castillo eligió a Robustiano patrón Costas como su sucesor y se confirmaron la
inclinaciones nazifacistas del presidente, castillo pudo formar su propio gabinete y en sus
planes tenía pensado un futuro gobierno de justo.
Para el radicalismo el golpe fue cebero toda estrategia de alvear y el comité nacional no tenia
rumbo sin la presencia de Ortiz ,debido a esto a principios d 1942 la UCR perdió varios distritos
y ya no era mayoría indiscutible. Para algunos la política del radicalismo no debería tener
aliados por su totalidad en la nación y porque la alianza era vista como extranjera, la muerte
de Alvear dejo un partido dividido y sin líderes con una crisis que parecía no tener fin.
Castillo tenia a intención de fundar una exclusivismo conservador que claramente podía
sostenerse solamente con el fraude, a demás de contar con la pasividad de la UCR y el apoyo
de ejercito de justo quien sequia teniendo poderosas influencias, castillo elaboro un acuerdo
con el sector nacionalista, a cambio de su apoyo los oficiales nacionalistas se alzaron con el
ministerio de guerra, castillo creía que su alianza con los oficiales era la única carta para
sostenerse en el poder y ya no contaba con el apoyo de los poderes económicos, existía la
posibilidad de3 un acercamiento entre la UCR y justo quien se creía que era única figura capaz
de enfrentar el fraude de castillo.
Con la muerte de justo, castillo parecía no tener rivales pero sin embargo su capacidad de
negociación con los militares era nula. Desde el radicalismo se pedía la disolución con el
ministro de guerra, el general Ramírez, este conflicto llevo a enfrentara a castillo con su
ministro, el presidente pidió su renuncia y la respuesta de Ramírez fue derrocarlo el 4 de junio
de 1943, así se produjo el primer golpe de estado en el que el ejercito participo autónoma e
institucionalmente.
Este golpe puso fin a un periodo político y muchos rasgos de esta crisis estaban inscriptos en
la nueva política electoral de 1912 y a partir de allí se instalaron en la nueva política cultural
argentina esta política democrática de masas tendía a dramatizar las consignas y los valores y
se fue consolidando un sistema político con mayorías indiscutibles pero al momento de crisis
devenían fácilmente en acciones violentas.
La derrota radical en 1942 despertaba escaso entusiasmo y en poco tiempo la política local
solo era incertidumbre.
A partir de estos años la coyuntura política sufrió un cambio a largo plazo y en poco tiempo el
voto volvía a adquirir un poderoso sentido social