Lavocacinmainstream 2018 MinervaCampos
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Minerva Campos
University of Castilla-La Mancha
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Artículos / Articles 11
Minerva Camposa
Universidad Autónoma de Madrid
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/secuencias2018.47
Presentación 7
las dinámicas que, recientemente y en relación con estos nuevos fenómenos, se
han establecido entre las obras y los públicos.
En la medida en que atienden a realidades de este tipo, los enfoques y re-
sultados de los cuatro artículos que conforman este monográfico de Secuencias
permiten cartografiar algunas problemáticas derivadas de lo señalado hasta
aquí, así como ampliar los márgenes de los estudios cinematográficos y au-
diovisuales en su dimensión más canónica. En esta ocasión, el número se ha
confeccionado con la tradicional invitación a autores, como en monográficos
publicados anteriormente, y con un llamado a contribuciones que la revista di-
fundió, por primera vez en su historia, con el propósito de conocer problemas
y debates que estarían teniendo lugar en otros espacios y que podrían aportar
nuevas perspectivas y objetos, tal y como ha ocurrido. Ya en estos primeros
momentos asumí la coordinación de La vocación mainstream, una tarea que
agradezco que me confiara el equipo de la revista.
Los trabajos incluidos en este número estudian prácticas contemporáneas
que, en el mercado audiovisual, persiguen alcanzar a la mayor cantidad posible
de espectadores. Los casos analizados a veces construyen un ecosistema parti-
cular para un tipo de exhibición que, en última instancia, podría considerarse
convencional y, en otras ocasiones, transforman de manera radical la expe-
riencia cinematográfica clásica en su conexión con otras artes (escénicas) o con
otras interfaces (digitales). Puede decirse, entonces, y como será expuesto en
lo que sigue, que cada artículo aborda una estrategia particular que persigue
llegar hasta un público numeroso al tiempo que dinamizar los circuitos en que
se inscribe y sus respectivos mercados.
En primer lugar, aparecen en este monográfico las múltiples formas de
distribución y consumo televisivo cuyo reclamo principal consiste en una ofer-
ta audiovisual abundante, diversa y orientada al gusto de los espectadores a
partir de una serie de algoritmos diseñados con tal propósito. En «Ficciones
convergentes. Las plataformas y la creación de contenidos mainstream», Lau-
ra Pousa analiza las nuevas dinámicas televisivas del contexto español, ponien-
do el foco en las plataformas Movistar+ y Netflix, al tiempo que cartografía
las posibilidades de acceso y consumo en este marco. Identifica en su trabajo
relaciones entre narrativas, estéticas y modos de producción que estarían ge-
nerando tendencias reconocibles en este mercado. Con ello y en su atención
a las formas televisivas, este artículo pone en cuestión la idea de «género» ci-
nematográfico o audiovisual, una categoría que estaría siendo sustituida por
una suerte de tesauro que, en la práctica, consiste en etiquetas y descriptores
dinámicos asociados a los contenidos.
Las experiencias que analiza el segundo artículo son aquellas que hacen al
público interactuar con las películas y, de este modo, vivir la sala de cine de una
manera distinta al visionado colectivo (y estático) convencional. El trabajo de
Rosana Vivar, que lleva por título «Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad
y ocasión en el cine-evento en España», tiene como centro las pantallas, que
se convierten en el eje de ceremonias cinematográficas festivas de diferente
Presentación 9
y a alimentar con su aporte la obra-web. A partir de este complejo y dinámico
caso, Kuntzelman estudia las operaciones múltiples y sucesivas que tienen lu-
gar alrededor de piezas audiovisuales inscritas en circuitos diferentes, pero,
como se verá, muy próximos como son la danza contemporánea, la música pop
e Internet.
Como viene siendo habitual en los monográficos de Secuencias, la sección
de reseñas recoge una serie de publicaciones recientes que pretende ampliar el
espectro de asuntos abordados en el número y que, en buena medida, comple-
mentan las problemáticas analizadas en los artículos. En este caso, se trata de
publicaciones vinculadas a temas más tradicionalmente asociados al mains-
tream: las películas de adolescentes (Rethinking the Hollywood Teen Movie.
Gender, Genre and Identity), el indie americano (A Companion to American
Indie Film) o la experiencia colectiva de la sala de cine (The Audience Effect. On
the Collective Cinema Experience). También hemos incluido en esta sección tí-
tulos que revisan o dialogan en algún punto con géneros cinematográficos (The
Latin American [Counter-] Road Movie and Ambivalent Modernity) y con
estrategias habituales del cine comercial, como el doblaje (Ingmar Bergman y
la censura cinematográfica franquista. Reescrituras ideológicas [1960-1967]
y Estados de gracia. Billy Wilder y la censura franquista [1946-1975]).
En consonancia con la aparición de nuevas fórmulas de distribución y con-
sumo de películas, surgió la idea de ampliar la sección de reseñas de DVD hacia
otras vías de acceso contemporáneas. Sabemos que las plataformas de strea-
ming y de descarga presentan modelos de acceso y comercialización diversos
que van desde los repositorios propiedad de asociaciones profesionales hasta
los catálogos de VOD de distinto carácter o a las iniciativas que ofrecen en
abierto trabajos y ciclos comisariados: en Secuencias asumimos que lo voluble
de este ecosistema y lo efímero de algunas plataformas dificultarán en algún
punto nuestro propósito de reseñarlas. En cualquier caso, arrancamos la ope-
ración con dos propuestas que atienden, respectivamente, a los varios espacios
en los que se encuentra diseminado el archivo accesible online de Filmoteca
Española y a Cinechile. La enciclopedia del cine chileno.
Me permito una nota final. Muchas gracias a los autores que participan en
este número: por la generosidad con sus textos, la paciencia con los tiempos de
evaluación y edición y por las cordiales comunicaciones durante todo el traba-
jo. Por los mismos motivos, gracias a los reseñistas y a los revisores externos y,
por supuesto, a todos los investigadores que enviaron sus trabajos respondien-
do al llamado de Secuencias. Por último, Pablo (Cepero), María Luisa (Ortega),
gracias por la ayuda extra.
Laura Pousaa
TAI - Universidad Rey Juan Carlos
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/secuencias2018.47.004
RESUMEN
Audiovisual content platforms have become the main players of today’s international (and in
some cases local) industry changing consumption habits not only through the purchase and di-
fussion of their products, but also through the production of their own content. The main goal of
this article is to understand how these audiovisual and structural changes propagated by the In-
ternet and a wider use of streaming could have determined the narrative, aesthetic and ideology
of current television and cinematic products. However, I do not intend to present an exhaustive
analysis of the audiovisual sector nor of the contemporary consumer’s behauviour. Even though
these works do not belong to a specific typology, they have similar features that allow us to clas-
sify them according to the parameters of mainstream products and close the gap with a new
category and definition, the ‘convergent fictions’.
[a] Laura Pousa es Doctora en Historia del Cine por la Universidad Autónoma de Madrid, Licenciada en
Comunicación Audiovisual y Periodismo por la Universidad San Pablo-CEU y Máster en Distribución Audiovi-
sual por la ECAM. Ha sido guionista de la serie televisiva Cuéntame cómo pasó, de programas para Televisión
Española como Un país para comérselo y, durante años, ha trabajado en departamentos de desarrollo de
ficciones, combinando la creación de contenidos con su trabajo en el ámbito académico. Su carrera docente se
ha desarrollado en la Facultad de Bellas Artes de Aranjuez (CES Felipe Segundo-Universidad Complutense de
Madrid), en la Facultad de Comunicación de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC-Barcelona), como
Jefa de Estudios del Grado en Comunicación Audiovisual y, en la actualidad, desarrolla su actividad docente
e investigadora en la Facultad de Cine y Nuevos Medios de TAI. Su primer ensayo se titula La memoria tele-
visada: Cuéntame cómo pasó (Comunicación Social, 2015) y, como directora, ha estrenado los cortometrajes
Meine Liebe y Un país extraño, consiguiendo una Nominación al Goya al Mejor Cortometraje de Ficción 2012
y el Premio The Abbas Kiarostami Film Seminar en IBAFF 2012, entre otros reconocimientos. E-mail: laura.
pousa@taiarts.com
En el actual ecosistema audiovisual marcado por la convergencia de me- [1] Medios combinados. (La
dios, la consolidación del mercado en streaming, la existencia de contenidos traducción es nuestra).
creativas —que diría Frédéric Martel6— y, específicamente, la evolución y con- [4] En oposición al prime time,
vergencia de los medios. En el caso de la televisión, las etapas de la paleo/neo- momento elegido por el espe-
ctador para ver sus conteni-
televisión7 y las de escasez, disponibilidad y abundancia8 fueron superadas dos favoritos al margen de la
por una nueva que se acerca más a un concepto de televisión mutante en la emisión de las parrillas de las
cadenas.
que los cambios tecnológicos, regulatorios y sociológicos arrasaron el modelo
tradicional configurando alianzas y competencias9. En este contexto aparecen [5] Nicholas Negroponte, Be-
ing digital (Nueva York, Knopf,
sugerentes conceptos, que ayudan a definir la realidad de una industria más
1995), p. 72.
interconectada que nunca, como el de Martini Media10 —donde anytime, any
place, anywhere11 cobran especial relevancia12— o como Matrix Media. En [6] Frédéric Martel, Cultura
mainstream. Cómo nacen los
este último caso, según Jenner, Matrix Media pertenece a una cuarta fase del fenómenos de masas (Madrid,
desarrollo de la historia de la televisión13, una etapa en la que «estableciendo Taurus, 2011).
patrones, creando estrategias, estructuras industriales, el diferente modo en [7] Umberto Eco, La estrategia
que los formatos interactúan unos con otros y con los distintos contenidos de la ilusión (Barcelona, Lu-
men, 1986).
está absolutamente disponible fuera del set de televisión»14.
Nos encontramos, por tanto, ante lo que Carlos Scolari define como hi- [8] John Ellis, Seeing things:
television in the age of uncer-
pertelevisión15, una nueva etapa donde las plataformas OTT (Over the Top) o
tainty (London, I.B. Tauris,
de transmisión libre a través de Internet, así como los servicios ofrecidos por 2000).
[9] J. M. Zafra, «La televisión mutante», en Evoca Comunicación e Imagen. La televisión que viene (I), p. 5-9. <http://evocaimagen.com/wp-
content/uploads/flipbook/8/book.html#p=1> (01/07/2017).
[10] Mark Thompson, «BBC Creative Future: Mark Thompson’s speech in full» (The Guardian, 25 de abril de 2006), <https://www.theguard-
ian.com/media/2006/apr/25/bbc.broadcasting> (01/07/2017).
[11] Cualquier momento, cualquier lugar, dónde sea. (La traducción es nuestra).
[12] Mary Debrett, Reinventing Public Service Television for the Digital Future (Chicago, Gutenberg Pres, 2010), p. 24.
[13] Es Roberta Pearson quien establece las tres primeras etapas en «Cult television as digital television’s cutting Edge» en James Bennett y
Niki Strange (eds), Television as Digital Media (Console-ing Passions) (Durham, NC and London, Duke University Press, 2011) y que Jenner
toma para reflexionar sobre un cuarto período.
[14] Mareike Jenner, «Is this TVIV? On Netflix, TVIII and binge-watching» (New Media & Society, Vol 18 [2], 2016), pp. 260. (La traducción
es nuestra).
[15] La definición que Scolari hace de «hipertelevisión» es la siguiente: «es una televisión más compleja, con muchas tramas narrativas, pantal-
las fragmentadas y ritmo acelerado. Una televisión que, en definitiva, imita la dinámica de los medios digitales interactivos». Carlos Scolari «La
tv después del broadcasting: hipertelevisión, redes y nuevas audiencias» (Hipermediaciones, 15 de junio de 2013) <https://hipermediaciones.
com/2013/06/15/la-tv-despues-del-broadcasting-hipertelevision-redes-y-nuevas-audiencias/>, (01/07/2017).
Como comentábamos en la introducción, esto ha posibilitado que el bin- [25] Mareike Jenner, «Is this
ge-watching funcione como uno de los reclamos del nuevo tipo de consumo TVIV? On Netflix, TVIII and
binge-watching» (New Media
que condiciona la forma de concebir determinados productos. Como señala
& Society, Vol 18 [2], 2016), p.
Jenner, «otro factor en el binge-watching es el texto en sí mismo»25. El con- 266. (La traducción es nuestra).
y siete mil.
[39] José María Álvarez Mon-
En el texto «How Netflix Reverse Engineered Hollywood», el periodista zoncillo (coord), La televisión
de The Atlantic Alexis C. Madrigal recogía los datos de una investigación en la etiquetada: nuevas audiencias,
nuevos negocios (Madrid, Ariel,
que hacía referencia al new-genre generator40. En su texto explicaba cómo la Fundación Telefónica, 2011), p.
compañía analiza y etiqueta meticulosamente cada uno de las producciones 187.
llevándola a crear una base de datos de contenidos hollywoodenses sin prece- [40] Alexis C. Madrigal, «How
dentes. La fórmula básica utilizada era: «Region + Adjectives + Noun Genre Netflix Reverse Engineered
Hollywood» (The Atlantic, 2 de
+ Based On... + Set In... + From the... + About... + For Age X to Y»41. Aunque enero de 2014) <https://www.
después, las combinaciones/permutaciones se podían llegar a complicar hasta theatlantic.com/technology/
archive/2014/01/how-netflix-
llegar a encontrar estas definiciones: «Prison Ghost-Story Documentaries»,
reverse-engineered-holly-
«Zombie Cop Scary Slashers About Reunited Lovers», «Post-Apocalyptic wood/282679/> (01/07/2017).
otras que, habiendo sido canceladas en otras cadenas por no ser considera-
das audiencias mainstream —como es el caso de Arrested Development (Fox:
2003-2006 y Netflix: 2013)—, decide retomar y producir nuevas temporadas
con el objetivo de darle prestigio a su marca. A la vez y mientras desarrolla su
escalada por diferentes territorios en una expansión mundial iniciada en 2012,
Netflix comienza a establecer acuerdos y alianzas con empresas productoras
de los nuevos países donde funciona su servicio. Las producciones Netflix co-
mienzan así a tener un carácter local, y surgen series como Atelier (Netflix:
2015-), en Japón, Between (Netflix: 2015), en Canadá, Club de cuervos (Net-
flix: 2015-), en México, Marseille (Netflix: 2016), en Francia, 3% (2016-), en
Brasil, The Crown (Netflix: 2016-), en Inglaterra o Las chicas del cable (Net-
flix: 2017-), en España, por poner solo algunos ejemplos.
En la actualidad, Netflix tiene más de cien millones de usuarios en el
mundo y, según la CNMC, en España, a día de hoy, ya hay 540.000 hogares
abonados a Netflix. Como dato adicional: la empresa ha invertido 1.750 mi-
llones de dólares en la creación de contenidos europeos y según su CEO, Red
Hastings, están trabajando en más de noventa producciones, de las cuales, al-
gunas son con empresas locales como BBC, Channel 4 o Canal Plus48. Netflix
se posiciona así como una compañía que ejemplifica a la perfección la conver-
gencia entre televisión y servicios distribuidos a través de Internet compitien-
do, además de con las televisiones y plataformas locales, con otras empresas
que ofrecen características similares como Sky, Amazon o HBO, que también
producen contenido propio. En el caso de Amazon, algunas de sus series son
Alpha House (Amazon: 2013-), Transparent (Amazon: 2014-), Mozart in the
Jungle (Amazon: 2014-) o Betas (Amazon: 2013-2014); mientras que HBO
cuenta con un mayor número de producciones entre las que podemos desta- [47] Todd Spangler, «Net-
flix the ‘New HBO’? Get
car True Blood (HBO: 2008-2014), Juego de tronos (Game of Thrones, HBO: Real», (Variety, July 19, 2013)
2011-), Boardwalk Empire (HBO: 2010-2014), The Newsroom (HBO: 2012- <http://variety.com/2013/
digital/news/netflix-the-new-
2014), Enlightened (HBO: 2011-2013), Hello Ladies (HBO: 2013-), Getting On hbo-get-real-1200565593/>
(HBO: 2013-2015), Girls (HBO: 2012-), Carnivale (HBO: 2003-2005) o Veep (01/07/2017).
(HBO: 2012-), entre muchas otras. Todas ellas buscan el reconocimiento en [48] Información ofrecida por
los Emmys otorgados por la Academia de Televisión americana, compitiendo Red Hastings, CEO de Netflix,
en la presentación de los nue-
con las producciones de otras cadenas de cable, networks estadounidenses y vos contenidos en Berlín, en
productoras extranjeras, además de empezar a interesarse por su selección o marzo de 2017.
[59] Manuel Palacio, Historia de la televisión en España (Gedisa, Barcelona, 2008), pp. 141-142.
[60] Iván Bort también habla de la relación entre cine y televisión en S(c)inergias televisivas: una aproximación historiografica al actual auge
del serial dramático televisivo norteamericano. Los años cincuenta, Alfred Hitchcock, Twin Peaks y la HBO (trabajo realizado con la ayuda
del Proyecto de Investigación «Nuevas Tendencias e hibridaciones de los discursos audiovisuales contemporáneos» de la Universidad Jaume I)
para hablar de una nueva generación de la televisión que forma parte del panorama de la industria audiovisual. Disponible en: <http://www.
bocc.ubi.pt/pag/gual-scinergias-televisivas.pdf>
Velilla, 2015), Cuerpo de élite (Joaquín Mazón, 2016), Es por tu bien (Carlos
Therón, 2017), Villaviciosa de al lado (Nacho G. Velilla, 2016) o incluso la exito-
sa Ocho apellidos vascos (Emilio Martínez Lázaro, 2014) son ejemplo de ello y
responden a lo planteado por Smith como «Sitcom cinema»63. En cambio, otras
producciones como No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas (María
Ripoll, 2016), El guardián invisible (Fernándo González Molina, 2017), Regres-
sion (Alejandro Aménabar, 2015), La isla mínima (Alberto Rodríguez, 2014) o
Un monstruo viene a verme (J. Bayona, 2016) forman parte de otro grupo de
películas con diferente etiqueta, que se diferencian del contenido cinematográfi-
co-televisivo por su carácter autoral y una apuesta narrativa que se aleja de la es-
tructura y estética de la comedia de situación buscando un estilo propio reflejado
obviamente en sus presupuestos. Aunque a priori pueda parecer que estamos
llevando a cabo una excesiva simplificación al agrupar películas de índole diver-
[63] Paul Julian Smith, Span-
sa, convirtiéndolas en productos consumidos indistintamente64, lo cierto es que
ish Screen Fiction. Between todas ellas forman parte de catálogos mainstream que las igualan y, detrás de
Cinema and Television, p. 175.
las cuales, prevalece una constante homogeneización genérica. Para plataformas
[64] Es cierto que temática- como Netflix o Movistar+ resulta fundamental y beneficioso tener los derechos
mente podríamos agrupar junto de este tipo de obras producidas por las cadenas, ya que les permite ofrecer a
a La isla mínima, series como
Mar de plástico, El Príncipe sus suscriptores en un mismo pack —y bajo el marketing de la sofisticación—
o incluso Fariña, pero aquí se narraciones de estreno, populares y, al mismo tiempo, con categoría autoral.
trata de entender el papel de
las plataformas en el nuevo eco-
Por tanto, podemos decir que, hoy en día, las cadenas de televisión españolas
sistema audiovisual. intervienen en los procesos de creación de las ficciones de los autores españoles
contemporáneos —de Alejandro Amenábar a J.
Bayona— imponiendo unos criterios que están
subordinados a los requerimientos de un mode-
lo de éxito local, que sea exportable internacio-
nalmente y donde las reventas en los mercados
puedan jugar un papel importante que, a su vez,
responde a los ya comentados tags.
En sentido inverso y como expansión de
esta convergencia ficcional, esto es lo que podría
Fotograma de Cuerpo de élite (Joaquín Mazón, 2016). ocurrir con las producciones televisivas que las
5. Conclusiones
RESUMEN
En los últimos años, junto a las películas de estreno que habitualmente se mantienen en
cartel durante semanas, se han ido haciendo hueco toda una serie de proyecciones que
ofrecen sesiones únicas fuera de la programación comercial. Estos pases, que se pre-
sentan en discontinuidad con la oferta de cine en salas, buscan mejorar y amplificar la
experiencia del espectador poniendo énfasis en la fase más comunitaria y participativa
de la asistencia al cine: sesiones dobles de cine de reestreno, sesiones de sing-a-long o de
quote-a-long son algunas de las fórmulas que algunas salas están ensayando para atraer
a más espectadores. El presente artículo se interesa por el fenómeno emergente del cine-
evento en España y analiza las formas en las que sus promotores están construyendo al
público sobre una doble retórica: por un lado, discursos que remiten a un inconformismo
profundo hacia las «pequeñas pantallas» y hacia la cultura masiva representada; y, por
otro, discursos que conectan con gustos más mainstream y que identificamos con las
propias cintas comerciales que estos eventos programan.
ABSTRACT
In the last few years, along with the standard features in cinemas, a series of screenings
that offer unique sessions outside the commercial programme have carved themselves
a niche in commercial theatres. These film screenings try to improve and to amplify the
spectator experience by placing the emphasis on the community and participative di-
mensions of cinema-going. Double features and sing-a-longs or quote-a-longs are some
of the formulas that some theatres are trying out in order to attract more spectators. This
article examines the emergent phenomena of event-led cinema in Spain, and analyzes
the double rhetoric with which its promoters are building the potential audience: on the
one hand, discourses that refer to a profound discomfort towards online film consump-
tion and towards mass culture. On the other hand, discourses that connect with rather
mainstream tastes and that are identified by the commercial films that are part of these
events programmes.
[a] Rosana Vivar Navas es profesora adjunta en Saint Louis University, Madrid. Es Doctora en Comunica-
ción Audiovisual por la Universidad de Granada con una tesis sobre festivales de cine y culturas lúdicas en
España. Su línea de investigación se centra en el estudio de audiencias cinematográficas y festivales de cine,
con un énfasis en las prácticas digitales y los usos que el público hace de los nuevos media en los eventos
cinematográficos. Su trabajo se ha publicado en Participations, Journal of Audience and Reception Studies
y Bloomsbury Academic. E-mail: rvivarnavas@gmail.com.
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 33
Nos hemos habituado a escuchar en círculos académicos y profesionales que [1] «Vigésimo Censo de Salas
de Cine (mayo de 2017)», Aso-
internet acabará con la experiencia tradicional de ir al cine. No podemos ne-
ciación para la Investigación
gar que el proceso de digitalización y la migración del cine a internet estén te- de los Medios de Comunica-
niendo efectos colaterales que han trastornado de forma, quizás irreversible, ción. Disponible en: <http://
movierecord.com/new/archi-
la distribución de películas en salas comerciales grandes y —especialmente— vos/CensoCines2017.pdf >
pequeñas en todo el mundo. El cierre de salas por toda España es hoy una (12/5/2018).
realidad que llena las páginas de cultura de periódicos de tirada local y nacio- [2] El cine pop-up es la mane-
nal y que confirman las estadísticas: en 2017, había ciento cuarenta y nueve ra en la que comercialmente se
llama a sesiones de reestreno
locales de exhibición menos que en 2007, según datos de la Asociación para
en espacios emblemáticos, in-
la Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC)1. Sin embargo, en los usuales u ocultos de la ciudad
últimos años esta tendencia muestra una doble cara. A la vez que se cierran que funcionan por un periodo
limitado de tiempo.
tanto salas clásicas como multicines en ciudades de toda España, proliferan
proyectos que apuestan por otras fórmulas de visionado en salas: el pase úni- [3] Mamma Mia (Phyllida
LLoyd, 2008), Dirty Dancing
co, el cine de reestreno o las películas acompañadas de eventos. Proyecciones (Emile Ardolino, 1987), Grease
con música en vivo, encuentros con el director, servicio de bar, cine improvi- (Randal Kleiser, 1978) o Sonri-
sado o pop-up2 o proyecciones en las que se fomentan formas catárticas de vi- sas y lágrimas (The Sound of
Music, Robert Wise, 1965) son
sionado, como el quote-a-long, el shout-a-long y el sing-a-long3, no solo han algunos de los filmes musicales
empezado a ser habituales en salas privadas, como los Cines Renoir en Madrid que suelen motivar sesiones
de sing-a-long, a menudo aso-
y Barcelona, Kinépolis o los Cines Príncipe en San Sebastián —por poner tan ciadas a un público mayorita-
solo algunos ejemplos—, sino que están motivando la apertura de nuevos lo- riamente femenino (Richard
McCulloch y Virginia Crisp.
cales de exhibición gracias a iniciativas de aficionados y profesionales —como
«‘Watch like a grown up… en-
Artistic Metropol en Madrid o la sala Phenomena en Barcelona—. Desde las joy like a child’: Exhibition,
sesiones dobles de clásicos hasta los drive-ins y las proyecciones orquestadas Authenticity, and Film Audien-
ces at the Prince Charles Cine-
en vivo, estas iniciativas buscan llevar más allá la experiencia «ordinaria» de ma». Participations. Journal of
ir al cine invitando al espectador a atravesar las barreras físicas de la sala y los Audience and Reception Stud-
ies 13, n.o 1 [mayo de 2016]: pp.
protocolos que a menudo la acompañan. 188-217). En estas sesiones, que
El interés central de este artículo es explorar algunas de las manifesta- típicamente son amenizadas
con dramatizaciones en directo,
ciones del incipiente fenómeno del «cine evento» en España. Para ello, esta
se invita al público a cantar du-
investigación recoge cuestiones relativas a las temáticas, aspectos técnicos y rante la proyección y a asistir
protocolos de visionado que rodean a estas sesiones, así como declaraciones con disfraces que emulan la
temática del filme. Por su parte,
de los organizadores de algunos de los eventos que más están despuntando el quote-a-long está asociado
en el panorama de sesiones cinematográficas festivas en nuestro país. A partir a sesiones de culto —también
conocidas como Midnight Mov-
del análisis de los discursos que sus promotores usan para promocionar estas
ies— en las que el público, buen
sesiones, se pretende demostrar que el auge de las proyecciones-evento en Es- conocedor del filme, se hace eco
paña es un fenómeno que debe entenderse en el marco de una modalidad de de los diálogos citando en voz
alta las frases más emblemáti-
consumo en la que se pretende generar y potenciar relaciones de exclusividad cas. El gran Lebowski (The Big
entre el cine y los espectadores. En nuestro recorrido, veremos que estos dis- Lebowski, Ethan Cohen y Joel
Cohen, 1998), The Room (Tom-
cursos de exclusividad y distinción a menudo recurren a incitar una conciencia my Wiseau, 2003) o The Rocky
de minoría que bebe del desencanto por el actual panorama audiovisual y la Horror Picture Show (Jim
Sharman, 1975) son algunas de
dispersión del espectador en prácticas online.
las películas más programadas
en este tipo de sesiones. Final-
mente, el shout-a-long está asociado a proyecciones colectivas de culto, especialmente de cine de terror y fantástico, en las que las audiencias se
involucran de forma irónica con el visionado del filme desarrollando un repertorio de frases, bromas y ocurrencias que gritan durante la película
a modo de intervención cómica. En España, la Semana de Cine de Fantástico y de Terror de San Sebastián es bien conocida por sus rutinas de
visionado festivas que bien podrían definirse como un shout-a-long.
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 35
Tub Cinema) pone de manifiesto la relevancia que este modelo industrial tiene
en el panorama de la exhibición nacional. Uno de los objetivos del proyecto
liderado por Helen Kennedy y Sarah Atkinson, en colaboración con Live Cine-
ma UK y financiado por el Arts Council of England, ha sido precisamente el de
definir y organizar de manera sistemática algunas de las cuestiones relativas a
la economía, la distribución, la estética y la retórica de estos eventos, que ellas
mismas sitúan como parte de toda una serie de cambios que se están produ-
ciendo en el marco de una economía creativa cada vez más participativa7. Con
[7] Sarah Atkinson y Helen
este propósito, se publica en 2017 Live Cinema. Cultures, Economies, Aesthe- Kennedy, «Inside-the-scenes:
tics, un volumen colectivo que asienta toda una terminología en torno al auge The Rise of Experiential Cine-
ma» (Participations. Journal of
del llamado «cine en vivo» o «cine evento» y que documenta algunos de los Audience and Reception Stud-
casos en torno a este fenómeno en países como Reino Unido, Estados Unidos, ies, vol. 13, n.º 1, mayo de 2016),
p. 139. Disponible en: <http://
Francia y España8. Helen Kennedy y Sarah Atkinson, editoras del volumen, www.part icipations.org/Vol-
definen este fenómeno como sigue: ume%20 13/Issue%201/S1/1.
pdf> (8/8/2017).
[Se trata de] la tendencia creciente hacia la creación de un cine que escapa
[8] Sarah Atkinson y Helen
a las barreras del auditorio, donde las proyecciones son aumentadas de ma-
Kennedy (eds.), Live Cinema:
nera sincrónica con actuaciones en directo, localizaciones específicas, inter- Cultures, Economics, Aesthe
venciones tecnológicas, participación a través de redes sociales y todo tipo de tics (Londres, Bloomsbury,
momentos interactivos simultáneos que incluyen cantar, bailar, comer, beber 2017).
directo en torno a la proyección de un filme10. Si bien en lo que sigue dedicare- [11] Martin Barker, Live to
mos atención a algunas de las sesiones experiencia que acontecen en España, Your Local Cinema: The Re-
markable Rise of Livecasting
es el fenómeno más amplio del cine-evento al que dedicamos este artículo. De (Basingstoke, Palgrave Macmil-
ahí que sea necesario diferenciar el fenómeno del cine-evento (event-led cine- lan, 2013).
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 37
dose las licencias exigidas. Pese a que
desde su primera sesión (Paranoid
Park), en una sala improvisada bajo
el Puente de Londres, Secret Cinema
estableció su preferencia por los espa-
cios remotos y pintorescos, la empresa
siempre se ha movido dentro de la le-
galidad y en sintonía con el mercado
de exhibición, distinguiéndose por el
alto coste de sus entradas.
Esta ambición de ofrecerse si-
multáneamente como proyecciones
autogestionadas, que brotan en algún Secret Cinema. Momento de la proyección de 28 días después (28 Days Later,
rincón de la ciudad al margen de la Danny Boyle 2002) en abril de 2016.
Sunset Cinema: el cine participativo como «alternativa» [19] Sarah Atkinson y Helen
Kennedy, «Inside-the-Scenes:
The Rise of Experiential Cine
En España, el cine-evento ha adoptado diferentes modelos y versiones que en ma», pp. 139-151.
ningún caso alcanzan la espectacularidad ni el presupuesto de las sesiones de
[20] Richard McCulloch y
Secret Cinema. El colectivo Sunset Cinema, con base en Madrid, es probable- Virginia Crisp, «‘Watch like a
mente la empresa que, con menos recursos y de manera simplificada, mejor ha grown up … enjoy like a child’:
Exhibition, Authenticity, and
trasladado el concepto del cine-experiencia y de las sesiones participativas al
Film Audiences at the Prince
mercado español. Tras unos años formando parte del equipo de producción de Charles Cinema», pp. 188-217.
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 39
fundador de Secret Cinema, Fabien Riggall, contextualizaba la emergencia del
cine evento en términos muy similares:
Cuanto más desconectados [físicamente] estamos con internet y las redes so-
ciales, más queremos compartir experiencias. El multiplex no ha muerto, es un
gran modelo de negocio; sin embargo, algunas personas buscan una experien-
cia cinematográfica diferente. Quieren que les reten, les inspiren; quieren una
razón para conectar24.
Las palabras de Riggall y Mateos no solo nos ofrecen pistas sobre las máxi-
mas que perfilan el discurso oficial en torno al cine-evento, sino que presentan
una serie de presunciones en torno a la experiencia del consumidor de cine que,
en nuestra opinión, resultan problemáticas. En primer lugar, Riggall plantea
que el cine-evento y, en extensión, el proyecto Secret Cinema surgen como una
experiencia necesaria que pretende paliar una grave situación de pérdida en el
marco de la vivencia del espectador. Su referencia a la creciente desconexión
física del público no solo apunta a la idea de que internet y el uso de las tecno-
logías en el hogar están acabando con los lazos que garantizan la salud de la
vida colectiva, sino que confirma la extendida creencia de que la especificidad
del cine habita exclusivamente en el espacio (compartido y comunitario) de
la sala. Este espacio representa para ambos organizadores un modelo que ha
dejado de ser cauce de satisfacción para las nuevas audiencias. Tanto Riggall
como Mateos concluyen que ver cine en la oscuridad no solo es algo de lo que
el público se ha cansado, sino que se ha convertido en una forma obsoleta de
ver películas. Es decir, deducen que las audiencias que se involucran en formas
más festivas de visionado lo hacen porque han perdido el interés por el cine
en la sala oscura, pero también por otras formas de visionado en las que se
encuentran implicadas las nuevas tecnologías de la comunicación.
Estas afirmaciones, sin embargo, contrastan con averiguaciones recientes
sobre la valoración que diferentes audiencias hacen de su experiencia en las
salas y del placer que obtienen viendo una película en silencio. En un estudio
etnográfico en torno a las audiencias de los cines Prince Charles de Londres,
salas que se han especializado precisamente en el tipo de producto que ofrece
Secret Cinema, Richard McCulloch y Virgina Crisp llaman la atención sobre
el hecho de que un número sustancial de espectadores, a pesar de valorar el
carácter único y participativo de estas sesiones, expresan su preferencia por un
visionado más convencional e introspectivo, que ellos mismos percibían como
una forma de ver películas más «apropiada» e, incluso, estéticamente superior [24] Charles Gant, «Sharing
a las vivencias que este tipo de eventos ofrecen25. the Secret», (Sight & Sound 20,
n.o 9, septiembre de 2010), p.9.
Otra de las afirmaciones que resultan problemáticas es la manera en la que (La traducción es nuestra).
el creador de Secret Cinema se refiere a las audiencias. Riggall no solo estable-
[25] Richard McCulloch y
ce una relación jerárquica entre el cine-experiencia y las formas más «conven- Virginia Crisp, «‘Watch like a
cionales» de ver cine en salas (que él asocia con el múltiplex), sino que da por grown up … enjoy like a child’:
Exhibition, Authenticity, and
sentado que, en estas últimas, los espectadores asumen una posición pasiva. Film Audiences at the Prince
Además, al confirmar que «algunas personas» aventajadas buscan experien- Charles Cinema», p. 207.
Nuestro público por lo general es joven, entre los 25 y los 45 años, moderno,
cosmopolita...» y de ahí que [los organizadores de Cibeles de Cine] se permitan
la licencia de ofrecer títulos más de autor, como la española Magical Girl, que
«no es la típica película que esperarías en un cine de verano; nosotros tenemos
propuestas que son bastante arriesgadas26.
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 41
Phenomena: el cine como acontecimiento
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 43
en torno al estatus de las actuaciones en directo en la sociedad de masas, Philip
Auslander explica la relevancia que el directo y la experiencia de primera mano
tienen para el asistente a la hora de conseguir una reputación dentro de un
grupo cultural dado:
en un evento (él estudia la subcultura de la música rock y sus derivaciones) no [34] Matt Hills, «Attending
solo confirmaría la posición privilegiada dentro de la estructura social, sino que Horror Film Festivals and Con
ventions: Liveness, Subcultural
contribuye a legitimar esta misma estructura social. Veremos a continuación Capital and “flesh-and-blood”
que, en la mayoría de los casos, el cine-evento replantea la relación entre el cine Genre Communities», en Ian
Conrich (ed.), Horror Zone:
y el público en base a dos distinciones que, siguiendo los términos planteados The Cultural Experience of
por Pierre Bourdieu, le permitirían acumular al público capital simbólico: por Contemporary Horror Cinema
(London; New York, Tauris,
un lado, una sensibilidad espectatorial que podríamos llamar «purista» y que se 2010), pp. 90-1.
expresa en una preferencia anacrónica por el celuloide; y, por otro, la mitifica-
[35] Que un gran número de
ción de la gran pantalla como reducto de una añorada experiencia comunitaria35. autores haya optado por elabo-
rar la cinefilia como una cate-
goría social que descansa sobre
Bigger that life o el culto a la gran pantalla discursos de clase, ha termi-
nado por atar la cuestión de la
cinefilia a los debates surgidos
Si el éxito de la fórmula «Phenomena» se sostiene sobre la expectación que la sobre la baja/alta cultura en los
empresa crea en torno a los pases especiales, lo que verdaderamente permite que el concepto de distinción
de Pierre Bourdieu (1979) ha
vivir al espectador la sesión de cine como una oportunidad limitada es la sofis- desempeñado un papel crucial.
ticación del contexto de visionado: la amplitud del patio de butacas, los asien- Véase Pierre Bordieu, La dis-
tinción. Criterio y bases socia-
tos ergonómicos, la moqueta roja, el telón, el sistema de sonido multidimen-
les del gusto (Madrid, Taurus,
sional Dolby Atmos y la pantalla panorámica de quince metros de largo forman 1998).
Revive, o descubre por primera vez, ese magnetismo energético y único que se
siente en una sala con más de mil espectadores disfrutando, todos al mismo
tiempo, de los diálogos, silencios, miradas y, en definitiva, de la verdadera ma-
gia del cine más absoluto (…). Ir al cine era todo un acontecimiento social, una
experiencia común y compartida, lejos del individualismo con el que operamos
[36] «Inauguración de la Sala hoy en día37.
Phenomena, hablamos con
Nacho Cerdà» (El Séptimo
En este caso, la sala uno de los Cines Capitol, donde Sunset Cinema cele-
Arte, 24 de diciembre, 2014).
Disponible en: <http://www. bra desde 2017 sus sesiones especiales Sunset Cinema Gold, se convierte en un
elseptimoarte.net/noticias/
espacio conmemorativo en el que celebrar la experiencia «auténtica» del cine.
entrevistas/inauguracion-de-
la-sala-phenomena-hablamos- Este multicine, uno de los más emblemáticos de la capital y activo desde el año
con-nacho-cerda-22623.html> 1933, funcionaría como una suerte de objeto de culto cuya historia conecta a
(3/10/2017).
los espectadores con la perfección original de la proyección: ese momento de
[37] «Cines Capitol» (Sun- descubrimiento de la imagen como momento de revelación cinéfila por exce-
set Cinema), <http://sun-
setcinema.es/cine-capitol/> lencia. Ahora bien, resulta llamativo que, en el discurso de Sunset Cinema, lo
(3/10/2017). que se enfatiza no es la experiencia inmersiva (potenciada, se entiende, por las
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 45
cualidades tecnológicas de la sala), sino lo excepcional de participar en una
experiencia comunitaria. La sala aparece aquí como garantía de un aconteci-
miento social único en el que es posible sentir el «magnetismo» de los otros.
Esta presentación de la sala de cine como espacio en el que se satisface una
determinada demanda por vivir experiencias vicarias y afectivas conecta con
algunas consideraciones que han estudiado la asistencia al cine como una ac-
tividad fundamentalmente social38. Así, por ejemplo, frente a los estudios que
han dado por sentado que asistir al cine es una experiencia silenciosa e intros-
pectiva, Garth Jowett y James M. Linton describen el acto de estar dentro de
una sala como una experiencia esencialmente colectiva en la medida en la que
«el mensaje no solo va de la pantalla al individuo, sino que este mensaje es
reinterpretado, realzado, amplificado, disminuido o incluso malinterpretado
por la interacción con otros miembros de la audiencia»39. Esta relación que
tanto Sunset Cinema como Phenomena establecen entre el celuloide y la sala,
como antídotos al exceso de individualismo que sufre nuestra sociedad, reapa-
rece en la siguiente reflexión de Rubén Lardín, cocreador de las sesiones itine-
rantes de cine de serie B y de culto Trash entre amigos:
Yo creo que estas sesiones-evento funcionan ahora mejor que nunca, porque la
gente quiere recuperar la sensación de comunión de ir al cine. Estar ahí en una
sala llena de gente. Lo que me interesa de las películas que ves con gente en una
sala es que se fijan en la memoria40.
De acuerdo con Lardín, «ver una película en una sala llena de gente» con-
tribuye a asentar experiencias memorables frente a otras formas de ver cine, se
entiende, solitarias, que no dejarían un residuo. Desde este punto de vista, el
cine evento vendría a solucionar una deficiencia antropológica que, supuesta-
mente, afecta a nuestras prácticas de visionado y a nuestra relación misma con
el cine en la actualidad. Enfatizando la importancia que la memoria tiene en la [38] Véase Graeme Turner,
Film as Social Practice (Lon-
experiencia fílmica, Lardín construye el discurso del cine-evento como contra- don, New York, Routledge,
partida a internet y a las formas de visionado que él y los demás organizado- 1999); Garth Jowett y James M.
Linton, Movies as Mass Com-
res de este tipo de sesiones consideran «perecederas». Esta oposición esencial munication (London, Sage,
entre «la gran pantalla» e internet, como medio que priva al espectador de la 1989).
dimensión social del cine, se expresa de manera explícita en una columna que [39] Garth A. Jowett y James
la cineasta Isabel Coixet dedicaba a la sala Phenomena en El Periódico: M. Linton, Movies as Mass
Communication, p. 103. (La
Ver cualquier película en este cine es volver a sentir esa sensación de ‘Bigger traducción es nuestra).
than life’ (Más grande que la vida) del cine de verdad: el cine que no se ve a
[40] Rubén Lardín, (entrevis-
trompicones en móviles, iPads, aviones. El cine en el que uno presta atención a ta personal, 3 de noviembre de
la pantalla y a la película, sin que haya irrupciones de la vida cotidiana, llama- 2016).
das, ruidos, wasaps, consultas a Facebook41.
[41] Isabel Coixet, «Phenome-
na» (El Periódico, 3 de junio de
Como demuestran estas declaraciones, la percepción de que la cibercul- 2015). Disponible en: <http://
tura está suplantando nuestra experiencia real y locativa de la esfera pública www.elperiodico.com/es/opi-
nion/20150603/phenomena-
es una preocupación que todavía permanece latente cuando toca hablar de la por-isabel-coixet-4244374>
experiencia social de ir a cine. Aquí, internet y, en particular, las redes sociales (4/10/2017).
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 47
podido observar hasta hora, el cine-evento se ha apropiado. Finalmente, con-
viene prestar atención a aquellos elementos que, en el discurso de los organi-
zadores, construyen al público del cine-evento como un público sensible a lo
especial y privilegiado, que merece un espacio distinguido respecto al común
de los espectadores.
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 49
sentido que «tanto las ferias como las fiestas operan en la zona de la nostalgia,
ya que son recordatorios de una vida en una economía y una tecnología más
simples, cuando los individuos se valían por sí mismos»51. Esta identificación,
que en el cine-evento se produce entre el cine y las formas rituales de rememo-
ración cultural, justificaría buena parte de la ceremonia que se reproduce en
estas sesiones. Pero, ante todo, el ceremonial que el público dramatiza en los
eventos citados dibujaría al público como «poseedor de un secreto» (pensemos
en las sesiones de Secret Cinema) que solo los miembros de la audiencia cono-
cen y que usan para demarcarse de otras audiencias.
Podemos argumentar, por tanto, que esta caracterización festiva de la
sesión de cine que promueve el cine-evento va encaminada a dramatizar un
sentido de exclusividad entre los miembros del público, una exclusividad que
nace de una relación especial entre los espectadores y el tipo de películas que
se proyectan. Esta diferencia esencial entre espectadores que el evento preten-
de enfatizar viene establecida ya por el conjunto de títulos que configuran el
programa habitual de estas sesiones-experiencia. Bitelchús (Beatlejuice, Tim
Burton, 1988), Aterriza como puedas (Airplane! David Zucker, Jerry Zucker y
Jim Abrahams, 1980), Amor a quemarropa (True Romance, Tony Scott, 1993),
Atrapado en el tiempo (Groundhog Day, Harond Ramis, 1993), Pulp Fiction [51] Roger D. Abrahams, «An
(Quentin Tarantino, 1994), Dirty Dancing o El club de la lucha (The Fight Club, American Vocabulary of Cel-
ebrations», en Alessandro
David Fincher,1999) conjugan una lista de filmes que mezcla sin complejos tí- Falassi (ed.), Time Out of Time:
tulos «cinéfilos» con otros más comerciales y próximos al cine mainstream que Essays On the Festival, (Al-
buquerque, University of New
se distancian de lo que, desde una perspectiva canónica, podría considerarse Mexico Press, 1987), p. 181. (La
«buen» cine. Esta actitud desprejuiciada hacia un gusto cinematográfico en el traducción es nuestra).
que cabe todo se confirma en las palabras con las que Nacho Cerdà hace refe-
[52] David Morán, «Phenome-
rencia al criterio que define la marca de la casa: «no le hacemos ascos a nada: na. El cine como experiencia
cualquier película puede formar parte de Phenomena»52. y ritual» (ABC, 19 de diciem-
bre de 2014). Disponible en:
Aunque, atendiendo a las palabras de Cerdà, Phenomena parece definirse <http://www.abc.es/catalun-
por ser un producto abierto y atractivo al total de espectadores, su programa se ya/barcelona/20141219/abci-
phenomena-cine-como-expe-
basa en un rechazo hacia los productos y las formas de recepción canónicas que riencia-201412191039.html>
se consideran «legítimas» y, en especial, hacia la cinefilia, entendida como la (8/10/2017).
forma de consumo erudita preferida entre las élites culturales53. La preferencia [53] Cristina Pujol, Fans, ciné-
de estas sesiones por una lista de «clásicos», que quedan fuera del canon ciné- filos y cinéfagos: Una aproxi-
mación a las culturas y los gus-
filo, sitúa al público de estos eventos en las antípodas del gusto de las audien-
tos cinematográficos (Barcelo-
cias «normales»54 y los acerca a una sensibilidad subcultural que, en España, na, Editorial UOC, 2011), p.118.
algunos han descrito como «cinéfaga». En los trabajos de Cristina Pujol (2011)
[54] John Fiske, «The Cultural
y Jesús Palacios (2006), la «cinefagia» se describe como la forma de consumo Economy of Fandom», en Er-
«depredadora» de aquellos espectadores que se ubican culturalmente en opo- nest Mathijs y Xavier Mendik
(eds.), The Cult Film Reader
sición a la erudición y las formas más «selectas» y aburguesadas de consumo (Maidenhead, Open University
cinéfilo55. Es decir, son consumidores ávidos de películas que practican un con- Press, 2007), p. 446.
sumo acrítico, viendo todo lo que se les pone por delante sin aplicar criterios [55] Cristina Pujol, Fans, ci-
de distinción o calidad. Esta categoría, no obstante, resulta problemática en el néfilos y cinéfagos; Jesús Pa-
lacios, ¿Qué debes saber para
momento en el que la contraponemos a una cinefilia que, además de en salas,
parecer un cinéfilo? (Madrid,
consume cine en televisión, en plataformas de vídeo a demanda, en cinetecas Espasa, 2006).
Conclusión
Si el cine ha poseído siempre las cualidades propias del acontecimiento, las ex-
periencias descritas más arriba demuestran que el evento define cada vez más el
trasfondo de nuestra existencia como espectadores. La experiencia del público
está hoy marcada por la estacionalidad y por la ocasión más que por las películas
que vemos. Esto no solo se percibe en el tipo de proyecciones participativas y
catárticas examinadas arriba, sino, ante todo, en las nuevas formas de recepción
ocasional que se organizan en salas privadas y centros culturales que, como Ci-
neteca (Madrid), Tabakalera (San Sebastián), La Caixa Forum (Madrid y Barce-
lona) y Filmotecas, se han convertido en espacios anfitriones de festivales, ciclos
y pases únicos. El evento connota al visionado de elementos que lo hacen único
y especial, pero también connota a los espectadores como miembros de la au-
diencia que han escogido estar ahí en lugar de asistir a una película «en cartel».
Si bien el cine-evento se ha convertido en una práctica normalizada den-
tro de la exhibición cinematográfica nacional, podemos concluir que este fe-
nómeno se está construyendo sobre una retórica de anhelo cultural por una
dimensión social del cine que, de acuerdo con buena parte de sus promotores,
nos está siendo arrebatada por los nuevos modelos de consumo que se gestan
en torno a los servicios de distribución de cine a demanda. En este sentido, las
declaraciones de los organizadores aquí examinadas demuestran que el énfasis
en torno a la necesidad de estas proyecciones-experiencia se sostiene sobre la
idea postiza de que buena parte de los consumidores de cine ansían experien-
cias vicarias que mitiguen la sensación de pérdida generada por la dispersión
de los espectadores en el ciberespacio. Como hemos podido comprobar, este
discurso no solo se nutre de un feroz anacronismo, sino que descubre toda una
serie de dogmas acerca del espectador actual que remite a la artificial división
del público entre espectadores activos/competentes (aquéllos capaces de reco-
nocer experiencias cinematográficas vicarias en las que reside la especificidad
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 51
del cine) y espectadores pasivos/complacientes (los que se conforman con for-
mas más «convencionales» de visionado).
Presentando el cine-evento como un espectáculo cinematográfico que nace
en oposición a formas no-comunitarias de ver cine (y sus tecnologías asocia-
das), sus promotores vinculan estas proyecciones a gustos e identidades sub-
culturales que buscan espacios de exclusividad (y de exclusión) dentro de una
industria que se sabe comercial y que busca establecerse como marca dentro
de la programación cultural de ciudades como Barcelona y Madrid. Con todo,
no deja de ser llamativo que la manera en la que estas sesiones se desvinculan
de los modos de ser del «cine vigente» (su estética, su moral, sus protocolos
de visionado) sea a través de títulos cuyo público ha descubierto en el contexto
doméstico de la programación televisiva, el VHS y el DVD. Es esto lo que nos
lleva a vincular el fenómeno del cine-evento en España con una cierta nostal-
gia generacional que reverencia y ritualiza la mirada fascinada hacia la cultura
popular de los ochenta y los noventa.
En último término, consideramos que el llamado cine-evento, al igual que
los festivales cinematográficos y otras fórmulas que eventualizan la experiencia fíl-
mica en el espacio urbano, ejemplifican una tendencia cultural que se basa en crear
relaciones de exclusividad entre el cine y el público como condición de acceso a cier-
tos productos fílmicos. En otras palabras, nos encontramos ante un fenómeno
que, en su forma de concebir espacios nicho y de distinción cultural en la esfera
pública, se ubica en ese espacio fronterizo que une y, a la vez, distingue el culto
y la cultura (una forma de presentar el consumo y la producción cultural en la
que se ha especializado la cultura masiva).
Abriendo una veda a investigaciones futuras, sería de gran interés llevar
a cabo un estudio etnográfico del público de este tipo de sesiones con el fin
de tener una mayor comprensión del atractivo que estas sesiones tienen para
sus asistentes. Creemos que esta investigación debe empezar por una mejor
conceptualización del cine de culto y de las devociones rutinarias que este tipo
de cine suscita en nuestra sociedad. Como reflexión final, consideramos que el
éxito que estos eventos están teniendo en España pone en evidencia la necesi-
dad de empezar a prestar más atención a los espacios en los que se consumen
películas de forma colectiva en un momento en el que el cine ha dejado de ser
una actividad exclusiva del espectador y empieza a ser dominio del usuario.
FUENTES PRIMARIAS
BIBLIOGRAFÍA
Rosana Vivar Navas Las fiestas del cine: nostalgia, exclusividad y ocasión en el cine… 53
Turner, Graeme, Film as Social Practice (Londres; Nueva York, Routledge, 1999).
Van Extergem, Dirk, «A Report on the Brussels International Festival of Fantastic Film»,
en Ernest Mathijs y Xavier Mendik (eds.), Alternative Europe: Eurotrash and Ex-
ploitation Cinema Since 1945 (Londres, Wallflower Press, 2004), pp. 216-27.
Vivar, Rosana. «Never Seen a Shot Like That Before! Playfulness and Participatory Audi
ences in San Sebastian Horror and Fantasy Film Festival », en Sarah Atkinson y
Helen Kennedy (eds.), Live Cinema: Cultures, Economics, Aesthetics (Londres,
Bloomsbury, 2017).
RESUMEN
Durante más de cien años, la industria de la ópera ha utilizado la atracción que los divos han provocado en
el cine y los medios de comunicación para ampliar sus audiencias. Tras la digitalización, el mercado global
de las retransmisiones de ópera en los cines ha replanteado la función que para este género musical tienen
tanto los medios digitales como su star system en el proceso de atracción de audiencias masivas. En este
artículo analizamos cuál ha sido la imagen global de los cantantes de ópera ofrecida por el cine y la televisión
durante el siglo xx para identificar los principales cambios que las retransmisiones de ópera en los cines han
ocasionado en el star system operístico durante el siglo xxi. Las proyecciones vía streaming parecen haber
configurado una imagen del cantante mainstream más global, humana y comprometida, capaz de actualizar
la idea que de este arte tiene la sociedad.
Palabras clave: Opera, divos, cine, medios audiovisuales, audiencias, imagen
ABSTRACT
For a hundred years, the opera industry has used the attraction that its singers have provoked in film and
media to expand the audiences. After the digitization age, the global market for opera retransmissions in
theaters has rethought the role of digital media and its star system in the process of attracting new audiences.
In this article we analyze what has been the global image of the opera singers offered by the cinema and tele-
vision during the xx century, to identify the main changes that the opera retransmissions in the theaters have
promoted in the operatic system in xxi century. The streaming projections seem to have configured an image
of the mainstream singer, more global, human and committed, able to update the social conception of this art.
Keywords: Opera, divos, film, Audiovisual Media, audiences, image
[a] Isabel Villanueva Benito es Doctora en Comunicación; Licenciada en Comunicación Audiovisual y Publicidad y Relaciones Públicas y
Graduada superior en Música (especialidades de canto y composición). Trabaja como Profesora Contratada Doctor de la Universitat Interna-
cional de Catalunya (UIC) y Visiting Researcher en la University of California, Los Ángeles. Ha sido Posdoctoral Scholar en la convocatoria
de 2017 del programa Fulbright de intercambio académico entre España y Estados Unidos y Vicedecana de la Facultad de Ciencias de la
Comunicación de la UIC durante los años 2011-2016. E-mail: ivillanueva@uic.es
[b] Iván Lacasa Mas es Profesor Titular de Teoría de la Comunicación en la Universitat Internacional de Catalunya. Es Doctor por la Univer-
sitat Autònoma de Barcelona (Departament de Periodisme i Ciències de la Comunicació), Máster en estadística aplicada por la Universidad
Rey Juan Carlos y Licenciado en Filosofía por la Universitat de Barcelona. Trabaja como Visiting Scholar en la University of Texas at Austin,
donde forma parte del «Center for Media Engagement» y del «Digital Media Research Project». También es Investigador Principal del grupo
«Comunicació, Mitjans i Societat» (AGAUR) y miembro del proyecto de investigación «Usos y preferencias informativas en el nuevo mapa de
medios en España» (Ministerio de Economía y Competitividad). E-mail: lacasa@uic.es
[c] Jaume Radigales es Doctor en Historia del Arte por la Universitat de Barcelona y Profesor Contratado Doctor en la Facultat de Comu-
nicació i Relacions Internacionals Blanquerna de la Universitat Ramon Llull, donde es profesor de Estética y de Narrativa de Géneros Au-
diovisuales. Es asimismo profesor del máster «La música como arte interdisciplinar» en la Universitat de Barcelona. Ha publicado distintos
libros sobre las relaciones entre la música y el audiovisual, especialmente centrados en la ópera y el cine, y ha sido Investigador Principal de
dos I+D sobre las relaciones entre la música y el cine en España. Colabora asiduamente en la emisora radiofónica Catalunya Música, donde
realiza y presenta el programa «Una tarda a l’òpera». Es corresponsal en Barcelona de la revista Ritmo (Madrid) y ejerce la crítica musical en
La Vanguardia y en Ópera actual. E-mail: JaumeRB@blanquerna.url.edu
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 57
1. Introducción [1] De acuerdo con Schroeder
(David Schroeder, Cinema´s
Illusions, Opera´s Allure. [New
Lejos de olvidar las vinculaciones históricas que la ópera había establecido con York, The Continuum Interna-
tional Publishing Group, 2002]
los medios de comunicación durante el siglo xx1, en el siglo xxi las retrans-
p.1) en los inicios del cine, reali-
misiones de ópera en los cines han contribuido a actualizar y engrandecer la zadores como Cecile B. DeMille
imagen de este arte entre las audiencias globales2. Gracias a estas retransmi- o Charles Chaplin utilizaron
argumentos operísticos en sus
siones, conocidas como Live in HD, Digital Broadcast Cinema (DBC) u Opera películas para obtener el reclamo
in Theatres, la ópera ha sido capaz de explorar nuevos mercados comerciales3. de nuevos públicos. Posterior-
mente, con la llegada del cine so-
Hoy, el Live in HD constituye un negocio mundial consolidado y se ha erigido noro, se recurrió a la ópera como
como el espectáculo escénico pionero en sacar, vía streaming, la producción en excusa ambiental en la que situar
la acción dramática de las pelícu-
directo fuera de los teatros mediante su grabación, retransmisión y comercia-
las. Autores como Marcia Citron
lización a través de las pantallas, con sistemas que potencian la transmisión en (Opera on Screen [London, Yale
directo, como el webcast y el cinecast4. Precisamente, estos contenidos audio- University Press, 2000], pp.
4-19) reconocen también la pro-
visuales, considerados alternativos al discurso cinematográfico, son los que, en liferación de biopics sobre los di-
los últimos diez años, han logrado que en Europa el número de espectadores vos o la ópera grabada como do-
cumento de archivo. Pero ha sido
en las salas de cine haya aumentado5. En España, Cinesa, Yelmo y Kinepolis, la denominada ópera filmada el
principales ofertantes de estos nuevos servicios, señalan que las temáticas pre- producto más estable, aceptado
y prolífico que ha existido desde
feridas por estas nuevas audiencias, no especialmente cinéfilas, son la ópera, el
los años treinta del pasado siglo
fútbol y los conciertos musicales, los cuales triunfan sobre el ballet, el circo en hasta nuestros días. Son este tipo
vivo, los musicales de Broadway u otros eventos deportivos como el baloncesto de películas las que lograron ob-
tener cierto reconocimiento au-
y el rugby, que tienen mayor aceptación en otros países de Europa6. diovisual, gracias a la aportación
Desde el punto de vista de las audiencias, la posibilidad de apreciar el es- cinematográfica de realizadores
como Ingmar Bergman, Joseph
pectáculo en los cines vía streaming, sin la necesidad de acudir a los teatros, Losey o Hans Jürgen Syberberg,
no solo ha contribuido a la descentralización de un arte considerado elitista entre otros.
[3] Isabel Villanueva-Benito, Mediatización audiovisual de la ópera como proceso de apertura a nuevos públicos; el caso de la obra Don
Giovanni de W. A. Mozart, (tesis doctoral, Barcelona, Universitat Internacional de Catalunya, 2014), pp. 621.
[4] Según Sergi Sánchez («La ópera en pantalla grande. Entrevista a José Batlle» [Opera Actual, vol. 116, 2008], pp. 36-37.), en España, este
nuevo tipo de retransmisión en los cines ha ofrecido significativos episodios desde su aparición en 2006. Cabe citar como ejemplos el éxito de
asistencia que logró la retransmisión 3D de un concierto de Alejandro Sanz en las salas Kinépolis de Madrid, en octubre de 2010; la ya tradi-
cional retransmisión del «clásico» futbolístico Barcelona vs. Real Madrid, que comenzara con la experiencia en pantalla gigante ofrecida en el
Cinestadium, inventado por Yelmo y Mediapro el pasado 2010; o la retransmisión en 3D del inicio de la FIFA World Cup, en la primavera de
ese mismo año. De hecho, España es el país en el que se iniciaron las primeras pruebas piloto de retransmisiones de contenidos específicos de
ópera, en el año 2004, de la mano de Cinesa y el Gran Teatre del Liceu de Barcelona.
[5] De acuerdo con José María Álvarez Monzoncillo, Cine: riesgos y oportunidades se equilibran ante el cambio digital. Hacia un nuevo
sistema mundial de comunicación. Las industrias culturales en la era digital (Madrid, Gedisa, 2003), y Fernando Huertas, «El futuro digital
del cine» (Telos, Vol. 51, 2002), pp. 78-89, entre los principales factores del gran cambio de paradigma en la exhibición cinematográfica se
cuentan las modificaciones de los hábitos de ocio de los consumidores, la consolidación del uso de tecnología digital, la alteración de las ven-
tanas de exhibición o la oferta de nuevos tipos de contenidos audiovisuales. De todos ellos, es precisamente este último factor el que plantea
mayores oportunidades de negocio, al atraer a nuevos consumidores.
[6] José María Ávarez Monzoncillo, Cine: riesgos y oportunidades se equilibran ante el cambio digital. Hacia un nuevo sistema mundial de
comunicación. Las industrias culturales en la era digital, pp. 85-110. Jessica Izquierdo, «El impacto de la tecnología en la exhibición cinema-
tográfica: el lento camino a la sala digital» (Revista Latina de Comunicación Social, vol. 12, no 64, 2009).
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 59
2. Objetivos y metodología
2.1. Objetivos
Para entender la relevancia estratégica del star system lírico actual en los pro-
cesos mediáticos de diálogo con las audiencias, es importante estudiar la evo-
lución que la imagen de las estrellas líricas ha sufrido desde los inicios del cine
hasta nuestros días. En consecuencia, hemos desgranado nuestro propósito
central en tres más específicos: 1) estudiar la imagen global de los cantantes de
ópera ofrecida por el cine y la televisión desde sus orígenes, para 2) identificar
los principales cambios que las retransmisiones de ópera en los cines han pro-
movido en el star system operístico, a fin de 3) entender si esos cambios están
contribuyendo a una actualización social del arte operístico.
2.2 Metodología
Para alcanzar los objetivos que nos hemos marcado, hemos dividido el análisis
histórico en dos periodos: el primer periodo de estudio va desde los orígenes del
cine hasta la aparición del Live in HD, en el año 2006; el segundo periodo que
hemos estudiado corresponde a la década transcurrida desde ese año hasta la
actualidad. En la estructura del trabajo nos referiremos a esas dos etapas como
siglo xx y siglo xxi. A pesar de que hemos seguido un criterio temporal en nues-
tro recorrido, atendiendo a los objetivos específicos que nos hemos marcado,
los subapartados han quedado organizados según un criterio sistemático.
Tal como hemos recogido a lo largo de todo el artículo y en la bibliografía
final, nuestro trabajo se ha apoyado en la consulta de una notable cantidad de
fuentes bibliográficas. También hemos consultado numerosas fuentes publica-
das por los teatros y organismos culturales desde el año 2012 hasta el año 2016
—tales como Opera Europa, Opera America, The Metropolitan Opera House de
Nueva York o empresas intermediarias como Rising Alternative—13.
Con respecto al estudio de las estrategias de márquetin de los divos de la
ópera en los cines, durante los años 2013 y 2014 efectuamos el seguimiento de
[13] Pueden consultarse los si-
los canales de YouTube y las redes sociales de quince de los teatros más repre- tios web oficiales de las institu-
sentativos en el contexto internacional, como The English National Opera, Los ciones: <http://www.opera-eu-
ropa.org/es>; <https://www.
Ángeles Opera, Chicago Opera, Teatro Alla Scalla de Milan, The Sydney Opera operaamerica.org>; <https://
o el Teatro Real de Madrid. www.metopera.org>; <http://
www.risingalternative.com>.
Asimismo, durante el verano de 2017 realizamos entrevistas personales a
Último acceso el 19 de marzo
los responsables de comunicación de algunos de estos teatros; las mantenidas de 2018.
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 61
de El Anillo del Nibelungo (Der Ring des Nibelungen), de Wagner, estrenada
por Fritz Lang en 1924 (Los nibelungos, Die Nibelungen), o El Caballero de la
Rosa (Der Rosenkavalier, Op. 59) llevada a la gran pantalla por Robert Wiene
en 1925. Esas tres versiones muestran cómo el cine estaba colaborando, de ma-
nera más o menos consciente, en la construcción y magnificación de la imagen
social de los cantantes de ópera20.
Durante la primera mitad del siglo xx, diversos divos iniciaron carreras
estelares en la gran pantalla. Se les utilizaba como reclamo comercial de mu-
chos títulos de cine, cuyo estreno se acompañaba con su actuación en directo21.
Citamos como ejemplos: la versión de Carmen que Cecil B. de Mille estrenó
en 1916, con la colaboración de Geraldine Farrar, cantante ya consolidada en
teatros como el Metropolitan Opera House de Nueva York (Met); el Don Qui-
jote de G.W. Pabst (Adventures of Don Quixote) que, en el año 1933, contó con
el cantante bajo ruso Fiodor Chaliapin; o la producción, en el año 1932, de La
novia vendida (Prodaná nevěsta), de Smetana, una reinterpretación realizada
por el creador Max Ophüls (Die verkaufte Braut) en la que brillaba Jarmila
Novotná, quien años más tarde intervendría en El gran Caruso (The Great
Caruso, Richard Thorpe,1951) con Mario Lanza22.
La lista de cantantes que multiplicaron su fama y fortuna en la época del
cine mudo creció significativamente con la llegada de la versión sonora. Algu-
nos de los nombres más destacados fueron Lina Cavalieri, Anna Case, Enrico
Caruso, Andrés de Segurola, Lawrence Tibbet, Lotte Lehmann, Mary Costa o
Jan Kiepura.
En todas estas primeras películas, el movimiento estereotipado y el gesto
afectado de sus actores y actrices tenía mucho que ver con la puesta en esce-
na operística y otorgaba mayor valor al componente músico-teatral que al es-
trictamente cinematográfico23. Sin embargo, la evolución natural del lenguaje
fílmico provocó un distanciamiento cada vez mayor entre la representación
teatral y la audiovisual. Mientras el cine iba construyendo su propio modo de
representación institucional, la ópera seguía queriendo satisfacer a sus públi-
cos tradicionales. Como afirma Schroeder24, el hecho de contratar a un can- [20] Richard Fawkes, Op-
era on Film, (London, Gerald
tante para asumir un rol no cantado fue resultando inusual y forzoso, ya que Duckworth & Co, 2000).
muy pocos divos reunían toda la combinación de cualidades exigidas frente a la
[21] Jaume Radigales, «La
cámara: habilidad dramática para conseguir telegenia sin perder la flexibilidad ópera y el cine: afinidades elec-
gestual propia del canto, personalidad fascinante, apariencia física y populari- tivas», pp. 59-84.
ser contratados como actores. En las últimas décadas del siglo xx, probaron [23] Jaume Radigales, Isabel
suerte, con más o menos fortuna, Ruggero Raimondi, Plácido Domingo o José Villanueva, «Le rôle de l’opéra
dans le cinéma primitif: Étude
Van Dam. des cas».
Tanto las directrices escénicas e interpretativas de estas primeras pe-
[24] David Schroeder, Ci
lículas, orientadas a satisfacer los gustos de un género musical considerado nema’s Illusions, Opera’s Al-
entonces en declive, como la incapacidad que presentaban sus artistas para lure, p. 296.
Fig. 1. Capturas de la filmación de Medea (Pier Paolo Pasolini, 1969) con María Callas como protago-
nista de la película.
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 63
hermanos Marx, dirigidos por Sam Wood, protagonizaron en Una noche en [27] David Schroeder,
Cinema´s Illusions, Opera´s
la ópera (A Night at the Opera), en el año 1935; o en la producción de Fitzca- Allure.
rraldo, dirigida por Werner Herzog en 1982. En estas y otras muchas películas
[28] Véase Jeremy Tambling,
la tendencia ha sido la de otorgar a las estrellas líricas roles de cierto glamur y Opera, Ideology and Film.
grandiosidad, pero también de cierta simplicidad psicológica y falta de huma- Youssef Ishaghpour, Opéra et
nismo: con el fin de ponerles en situación de éxito, normalmente solo se les ha théâtre dans le cinéma d´au-
jourd´hui.
permitido mostrar su faceta más virtuosística: el canto27.
Múltiples factores parecen explicar esa recreación distorsionada, sofisticada [29] Christopher Morris,
«Digital Diva: Opera on video»
y grotesca que el cine ha ofrecido de la ópera. La mayoría de ellos pueden quedar (Opera Quarterly, 26, 2010),
recogidos en tres tendencias de grabación que, durante la segunda mitad del pp. 96-119.
siglo xx, contribuyeron a alejar la realidad operística de la idea que de ella se [30] Robert Donington, «Close
construían los públicos: 1) el respeto por la tradición teatral, 2) los procesos de Ups v. Opera», (The Musical
Times, vol. 129, 1988) p. 281.
filmación específicos de este género musical y 3) la proliferación del biopic lírico.
En primer lugar, las filmaciones de ópera durante el siglo xx quedaron [31] Xavier Bové, «Entrevis-
inscritas dentro de la tradición de los teatros de ópera; muchas veces, el es- ta realizada por los autores al
departamento audiovisual y de
pacio físico donde se producía la representación también formaba parte de la documentación del Gran Teatre
película, de forma que el uso de planos de la orquesta o el director ayudaban a del Liceu», (Barcelona, mayo
de 2011).
crear una estilización no natural del hecho filmado. Separaban al espectador
de la narración y le acercaban al pathos musical. Las óperas documentadas, [32] Paul Heyer, «Live from
the Met: Digital Broadcast Cin-
por ejemplo, difícilmente pudieron ser entendidas por un público que desco- ema, Medium Theory, and Op-
noce la tradición del espectáculo presencial28. era for the Masses», (Canadian
Journal of Communication,
En segundo lugar, los propios procesos de filmación de las óperas han ge- vol. 33, 2008), pp. 591-60.
nerado cierta falta de verosimilitud artística, sobre todo en lo que se refiere a
la filmación del canto29. Desde el punto de vista estético, la utilización de los
primeros planos en una interpretación solista se consi-
dera desagradable y, para los públicos más operófilos,
intrusivo, al permitir recrearse en el gesto forzado del
cantante e interferir en la narración musical30. El pri-
mer plano resulta más forzado todavía en las películas
operísticas propiamente narrativas, como las de tipo
television opera u ópera filmada31. En ellas se prescin-
de de la grabación en el propio teatro y, por lo tanto,
se pierde la alusión al espectáculo presencial y la con-
secuente capacidad de aceptación del artificio gestual
dentro de las convenciones del arte32.
En estos productos se ha recurrido con frecuencia
al playback de actores y cantantes, con el fin de con-
seguir mayor verosimilitud interpretativa cuando se
escenificaban en espacios abiertos las arias y los con-
juntos vocales. Apuntamos tres ejemplos: la versión
cinematográfica de Parsifal de Wagner que Hans-Jür-
gen Syberberg dirigió en 1982, La Traviata de Verdi
dirigida el mismo año por Franco Zeffirelli, con estre- Fig. 2. Fotogramas de las películas Fitzcarraldo (Werner
Herzog, 1982) y Sí, Giorgio (Yes, Giorgio, Fraklin J.
llas como Teresa Stratas y Plácido Domingo, o la inter- Schaffner, 1982).
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 65
[36] Ann Laenen, Why Opera
impedido al espectador conocer facetas humanas de la vida del cantante me- Education? a RESEO research
diante las que hubiera podido sentirse identificado y, sobre todo, mediante las report (RESEO, 2003).
que hubiera podido sentir el deseo de aprender y compartir el arte operístico. [37] Véase Umberto Eco, Obra
abierta, (Barcelona, Planeta-De
Agostini, 1985); Janice Smith,
4. Recorrido histórico por el siglo xxi: hacia la creación del cantante «Opera as an Interdisciplinary
mainstream Art» (Music Educators Jour-
nal, Vol. 79, 1992), pp. 21-61.
El recorrido por el siglo xx muestra que la ópera entró en el siglo xxi con un [38] Bárbara Berini, «Entre-
vista realizada por los autores al
problema de actualización mediática. A ojos de muchos públicos representa
departamento audiovisual y de
un género musical desconocido, lejano y propio de otra época36 no solo por- documentación del Gran Teatre
que, debido a su tradición, la ópera haya sido considerada un arte inmovilista, del Liceu» (Barcelona, mayo de
2011).
sino porque, además, necesita que los públicos deseen aprender la complejidad
que, en tanto que síntesis de artes, posee37. [39] Véase Guilles Lipovets-
ky, Jean Serroy, La pantalla
A partir del año 2000, conscientes de esa realidad y afectados por las trans- global. Cultura mediática y
formaciones que la digitalización ha provocado en las economías culturales, los cine en la era hipermoderna.
(Barcelona, Anagrama, 2009);
teatros han promovido un cambio aperturista hacia la creación y fidelización Martin Cuadrado, «La gestión
de nuevas audiencias38. Replantean sus estrategias de comunicación teniendo de marketing en las entida-
des escénicas. Una evidencia
ahora en cuenta múltiples fenómenos como: la naturaleza mediática del con-
empírica» (DYO, vol. 25, 2001),
sumo de ocio de los jóvenes, la pantallización global que ha invadido las vidas pp. 80-87.
públicas y privadas, el uso de tecnología digital capaz de retransmitir la ópera
[40] Véase Roger Silverstone,
en calidad óptima fuera de los escenarios o la incorporación, en los procesos de Television and Everyday Life,
producción, de estrategias publicitarias propias del márquetin en las artes39. (New York, Routledge, 1994);
Jose Alberto García-Avilés, «La
Afectada por tales tendencias sociológicas, es hoy cuando la ópera centra comunicación ante la conver-
de nuevo sus estrategias comunicativas en el cine y los medios digitales. Per- gencia digital» (Signo y Pen-
samiento, vol. 54, 2009), pp.
sigue cambiar la imagen distante que los públicos, en especial los jóvenes, han 102-113.
construido de ella40. Así, en el siglo xxi la industria de la ópera está avanzando
[41] Véase Antonio De Diego,
en la difusión global de su espectáculo en formato audiovisual: se consolida el
«Nuevas estrategias comunica-
negocio de la ópera en los cines; surgen nuevas plataformas de consumo en la tivas en ópera por la inclusión
red, tales como el vídeo a la carta o las retransmisiones vía streaming; se co- del “making of” en los DVDs.
International Workshop on
mercializan versiones para operófilos coleccionistas en DVD; o se crean media- Opera y Video» (Universidad
tecas virtuales de consulta de vídeos y aplicaciones para dispositivos móviles41. Politécnica de Valencia/Ins-
titut Valencià de la Música,
En los últimos diez años, muchos de los productos y servicios audiovisua- 2010); Julie Annie Carroll,
les de la lírica se han consolidado como nuevas ventanas de explotación co- Marcus Foth & Barbara Ad-
kins, «Traversing urban social
mercial. Todos ellos se generan a partir de (y dependen de) la grabación del spaces: how online research
espectáculo original en el teatro42. Resulta lógico, por tanto, que los procesos helps unveil offline practice»,
en International handbook of
de producción de la ópera en escena se adapten paulatinamente a las nuevas
internet research (New York,
exigencias provocadas por los nuevos mercados, en especial por las retransmi- Springer Netherlands, 2009),
siones en los cines43. pp. 147-158.
[42] Véase Christopher Morris, «Digital Diva: Opera on video» (Opera Quarterly, 26, 2010), pp. 96-119; Jennifer Barnes, Television Opera:
The fall of Opera commissioned for Television. (Woodbridge, The Boybell Press, 2003).
[43] Se entiende que las retransmisiones de ópera no solo están modificando los procesos y los equipos digitales en las salas de cine y teatros,
sino también la aportación de los diseñadores y directores de escena, así como la colaboración de los agentes artísticos. El Live in HD también
modifica la ideación de los públicos, ahora más compleja y compuesta por una audiencia presencial en el teatro y una audiencia cinematográfica
de escala mundial.
Fig. 3. Fotografías del descanso de una representación en el muelle de Santa Mónica Beach de Los Ángeles Ópera en agosto de 2017.
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 67
4.2. Patrocinio y product placement de las marcas de lujo con
los divos
Otro de los factores que han influido en la creación de esta imagen institu-
cionalizada de los divos es la relación que ahora establecen con los inversores
publicitarios mundiales. La alianza comercial entre los cantantes y las marcas
tradicionalmente ha permitido que los atributos del mundo de la ópera se aso-
cien directamente a bienes de lujo como joyas, relojes, perfumes o coches de
alta gama. Desde los años noventa del pasado siglo, el patrocinio de cantantes
líricos ha logrado generar una imagen de exclusividad de estas marcas en sus
mercados objetivo y, adicionalmente, atraer a públicos cinéfilos interesados en
la cultura del arte. En aquellos años, el patrocinio publicitario se materializa-
ba en las campañas de una forma explícita, como bien puede apreciarse en la
figura 4.
Veinte años después, la constante presencia audiovisual de la ópera en
los medios no ha hecho sino aumentar el interés de las marcas de lujo por el
patrocinio de las estrellas líricas como medida de penetración en audiencias
cinematográficas. En los últimos años, ha resultado muy común presenciar a
los divos en estrategias comerciales que acompañan a las temporadas de los
teatros, como pueden ser las campañas publicitarias mundiales de los cines o
las representaciones corporativas en actos públicos relacionados con la indus-
tria del entretenimiento. Apuntamos, como ejemplo, la alianza inseparable de
la imagen de Reneé Fleming con el Metropolitan Opera House de Nueva York
y la discográfica Decca, tras firmar un contrato millonario a principios de si-
glo. A fin de conseguir una mayor penetración en el mercado global, ahora las
marcas de lujo parecen apostar por estrategias publicitarias como el product
placement, algo más discretas que el patrocinio explícito de los primeros años.
Sin renunciar a la exclusividad que supone el mundo glamuroso de la ópera
para estas marcas, las campañas más actuales recurren al emplazamiento de
los productos de lujo en las películas, óperas filmadas, biopics o documentales
en los que colaboran las grandes voces del canto. El product placement alrede-
dor de la vida privada y pública de las estrellas también constituye una práctica
comercial heredada de las industrias del cine y de la música pop. Permite que
las marcas se asocien de una manera natural a los mundos afectivos de estos
cantantes, generalmente relacionados con valores ya citados como el glamur,
el exotismo, la fama y el lujo.
Precisamente, gracias al boom de la audiovisualización operística, el inte-
rés de marcas como Cartier, Rolex, Channel, Mercedes Benz o Ferrari ha au-
mentado. En el sistema comercial en el que se desarrollan hoy las actividades
de los teatros, los contratos de las estrellas incorporan cláusulas de grabación
y derechos de emisión que hace diez años no existían46. Las retransmisiones de
la ópera del Met Live in HD para los cines han hecho que el star system ope-
rístico no constituya un fenómeno aislado desde un punto de vista publicitario,
sino que hoy quede también integrado dentro de la estrategia comercial de los
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 69
Fig. 5. Imágenes de la campaña de product placement protagonizada por el tenor Vitorio Griggolo para la marca Harley Davidson y de
Anna Netrebko para la marca Swarovski.
los divos otorgan a las redes un uso mucho más personalizado. Responden a
las inquietudes de los fans y cuelgan opiniones musicales sobre su trabajo en
los teatros. A través de un acto tan sencillo como es participar activamente en
las redes, la ópera está encontrando la manera de crear comunidades virtuales
capaces de intercambiar conocimientos, relaciones, deseos o recuerdos aso-
ciados ahora a la nueva versión que los medios ofrecen de las estrellas líricas.
Gracias a internet los divos proyectan una imagen más actual, humanizada y
social de sí mismos y, en consecuencia, también de la ópera, lo cual provoca
un visible interés compartido y contribuye a multiplicar el número de segui-
dores. La imagen cercana que los divos muestran en las redes compensa la
magnificación de sus figuras en la gran pantalla. Se acercan a los mundos afec-
tivos de los públicos, se convierten en referentes y se muestran conectados y
comprometidos con las inquietudes más humanas. Así, siguiendo estrategias
análogas a las que la industria del cine pone en práctica en internet y en las
redes sociales con sus propias estrellas, los divos están consiguiendo no solo
transformar su propia imagen, ahora más terrenal, sino actualizar el mundo
de la ópera, suscitar el interés de los públicos y, por extensión, el de los inver-
sores publicitarios.
5. Conclusiones
Tal como muestra el recorrido en dos grandes etapas que hemos realizado, a
lo largo de su historia la ópera ha aprovechado la fascinación por el canto para
apoyar sus modos de representación —basados en tradiciones decimonónicas
ligadas al teatro— en el tejido de un star system lírico, algo que le ha aportado
multitud de seguidores. En parte gracias a sus divos, la ópera ha consolidado
nuevas vías de difusión de su espectáculo fuera de los escenarios. Desde los ini-
cios del cine hasta nuestros días, el arte operístico ha utilizado la gran pantalla
como vía de comunicación de sus convenciones con la sociedad.
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 71
en las carreras de estas estrellas, a fin de que permita a estas últimas aumentar
su número de seguidores y facilitar el encuentro con las grandes marcas.
Este márquetin comienza en los teatros y se extiende a las miles de panta-
llas que hoy habitan los cines multisala. Pero no se limita solo a ellas. Gracias
al desarrollo de estrategias comerciales más discretas, como el product pla-
cement o el branded content, vinculadas a las retransmisiones en los cines, el
star system está adquiriendo un aire más actual, urbano y cercano a la realidad
de los espectadores. Por lo tanto, puede decirse que la ópera consigue, en parte
gracias a los divos, actualizar su imagen.
La dimensión más cercana y terrenal de los divos se cultiva también en las
redes sociales. En ellas, los cantantes se muestran comprometidos con temas
de actualidad, expresan sus opiniones y publican vídeos personales. También
aprovechan las comunidades virtuales para dialogar con los jóvenes y para
estimular el intercambio natural de sus deseos e inquietudes. A través de un
mayor impulso de estas estrategias lideradas por sus estrellas, la ópera podría
suscitar auténticas implicaciones personales de las audiencias con su mundo y
despertar en ellas el deseo de aprender su arte.
Por todo lo expuesto en este trabajo, puede decirse que, apoyándose en
el Live in HD, la ópera, con sus divos, crea referentes capaces de mostrarse
conectados y comprometidos con las inquietudes más humanas. El aumento
de la presencia audiovisual de los divos, favorecida por el nuevo modelo insti-
tucional, está eliminando gradualmente los aspectos elitistas propios de otro
siglo. Instaura un nuevo tipo de figuras de referencia que, ahora sí, además de
ser atractivas e incluso exclusivas, están conectadas con la actualidad y ale-
jadas del exclusivismo social que ostentaban en el pasado. El divo en la gran
pantalla está consiguiendo, en definitiva, que la ópera conecte con audiencias
no operísticas, pero culturalmente activas, a las que en no pocas ocasiones lo-
gra atraer hasta el espectáculo en vivo.
FUENTES PRIMARIAS
BIBLIOGRAFÍA
I. Villanueva, I. Lacasa y J. Radigales Los divos de ópera en el cine: las retransmisiones Live… 73
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(tesis doctoral, Barcelona, Universitat Internacional de Catalunya, 2014), pp. 621.
Ana Kuntzelmana
Universidad Rey Juan Carlos
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/secuencias2018.47.001
RESUMEN
ABSTRACT
This article aims to underline the artistic emergencies stemming from docu-
mentation and filmic versions of the original choreographic work Rosas danst
Rosas following the project´s different manifestations up to the interaction
proposition RE:Rosas!, in order to show how these different materialities open
up new spaces for creative dialogue and an opening unto fields of reception
that go beyond the reduced circle of avant-garde contemporary dance.
[a] Ana Kuntzelman es Doctora en Comunicación por la Universidad Rey Juan Carlos, donde ha presentado
la tesis doctoral «La danza tras la revolución: un punto de vista privilegiado sobre el panorama post-digital»
(2017). Su trabajo se ha desarrollado principalmente en el ámbito creativo, entre las artes escénicas y la
realización audiovisual. Ha trabajado como guionista de ficción en proyectos de diversas productoras (Plural
Ent., TVE, LaSexta, etc.), como creadora audiovisual freelance en instituciones culturales (Goethe Institut,
Museo Reina Sofía, editorial Klett, etc.), como profesora de danza y, desde 2013, es directora artística de la
compañía Snomians. Actualmente compagina su trabajo profesional con la docencia como Profesora Asocia-
da en la Universidad Rey Juan Carlos.
[3] La película dura 54 minutos, mientras que la coreografía llega casi a las dos horas.
[4] El vídeoclip puede verse en YouTube con los contenidos originales. Véase «Beyoncé-Countdown» <https://www.youtube.com/
watch?v=2XY3AvVgDns> (10/10/2015).
[5] Los detalles de la reacción de De Keersmaeker se pueden leer en la página de The Performance Club, donde se dio cuenta del proceso: Clau-
dia La Rocco, «Anne Teresa De Keersmaeker responds to Beyonce video». <http://theperformanceclub.org/2011/10/anne-teresa-de-keersmae-
ker-responds-to-beyonce-video/> (03/07/2015).
[6] El vídeo puede verse en: «Split Screen: Beyonce “Countdown” vs Anne Teresa de Keersmaeker»; <https://www.youtube.com/
watch?v=PDT0m514TMw> (04/07/2015). También se observa en él las similitudes entre Achterland y la pieza de Beyoncé.
[9] «La mayor parte de los movimientos están relacionados con o se derivan de acciones y gestos cotidianos: caminar, sentarse, saludar, girar,
tumbarse en el suelo». Anne Teresa De Keersmaeker & Bojana Cvejić. A Choreographer´s Score: Fase, Rosas danst Rosas, Elena´s Aria, Bar-
tók., p.84. (La traducción es nuestra).
del mismo que permite un discurso complejo y autoconsciente, pero sin de- [13] Véase André Lepecki,
jarse reducir por él. De Keersmaeker utiliza el dispositivo precisamente como «Choreography as apparatus of
capture.»
herramienta para señalar todo lo que desborda el intento de ordenación de lo
visible14. Al organizar los movimientos en secuencias de repetición continua [14] Al explicar el trabajo de
transmisión de la pieza a una
evidencia, precisamente, la imposibilidad de esta repetición: la estrategia hace nueva generación de intérpre-
visible la diferencia entre intérpretes y entre el mismo movimiento realizado tes, De Keersmaeker habla de la
necesidad de explicar físicamen-
por la misma intérprete en momentos distintos de la pieza. A pesar de ello, De
te «la frontera entre la precisión
Keersmaeker señala claramente que lo perdurable del trabajo se apoya siem- rigurosa y un sentido anárquico:
pre en la escritura: «Me ciño a la propia escritura, la soberanía de la estruc- cómo soltar y estar en control a
la misma vez». Anne Teresa De
tura que persiste, independientemente de los intérpretes particulares»15. Lo Keersmaeker & Bojana Cvejić; A
que debemos preguntarnos entonces es, en primer lugar, de qué manera esta Choreographer´s Score: Fase,
Rosas danst Rosas, Elena´s
escritura se traduce a un medio distinto y cómo se configura esta nueva mate- Aria, Bartók., p.115. (La traduc-
rialidad16; y, en segundo lugar, si la escritura es lo que asegura la permanencia ción es nuestra).
[15] Anne Teresa De Keersmaeker & Bojana Cvejić. A Choreographer´s Score: Fase, Rosas danst Rosas, Elena´s Aria, Bartók., p.115. (La
traducción es nuestra).
[16] El concepto de materialidad en este caso está tomado del marco teórico que propone Katja Kwastek, donde se define la materialidad del
evento interactivo, que se configura con cada realización individual de la propuesta de interacción, para poder incluirlo dentro de una concep-
ción estética y realizar una interpretación del mismo. Véase: Katja Kwastek, Aesthetics of Interaction in Digital Art. (Cambridge, Massachu-
setts, The MIT Press, 2015). Lo utilizaremos para referirnos tanto a la coregrafía de De Keersmaeker como a su versión filmada y a las distintas
emergencias posteriores en relación a estos trabajos, tanto en el caso de las apropiaciones de Beyoncé como de las respuestas particulares a la
propuesta de interacción del proyecto Re:Rosas!.
[19] Los archivos y las distintas publicaciones pueden consultarse en: <http://artesescenicas.uclm.es/index.php> (04/07/2018) .
[20] La revista Efímera es una publicación online y los contenidos están abiertos: <http://www.efimerarevista.es/efimerarevista/index.php/
efimera/index> (07/07/2018).
señalaba Kraut, como una mera excusa de autocelebración para una compañía [54] El esfuerzo de traducción
en su trigésimo aniversario o como reclamo autoritario de una propiedad crea- del movimiento a una serie
de datos de las creaciones de
tiva por parte de la autora original. Estas son, efectivamente, lecturas posibles
danza por parte de distintos
del proyecto, pero es importante señalar que, al entrar en relación con lo que se autores no es un proceso nue-
propone —el proceso coreográfico detallado—, se abre también al receptor una vo. Proyectos como Improvisa-
tion Technologies, de William
posibilidad de autoconocimiento y de reflexión sobre lo que supone la cons- Forsythe, o el grupo de trabajo
trucción coreográfica y el trabajo del cuerpo en relación a ella que va más allá Motionbank (<http://motion-
bank.org/>) —por citar algunos
de la réplica del meme, porque no tiene como objetivo principal la repetición de los más conocidos— son re-
y contiene una información más detallada por parte de la creadora, lo cual flexiones acerca de lo coreográ-
fico en su traducción a valores
favorece un diálogo más extenso e, incluso, la posibilidad de crítica54. Con su numéricos que permiten traba-
propuesta De Keersmaeker trata de abrir la posibilidad a cualquiera de reinter- jar en otros medios. Lo que es
distinto en el caso del proyec-
pretar su coreografía, al igual que ha hecho Beyoncé, pero a la vez fractura este
to RE:ROSAS!! es la voluntad
marco de referencia de lo viral, porque, al hacer accesible la lógica creativa a de comunicación directa, el
cualquiera que esté interesado, lo que está poniendo de manifiesto es que no es puente que se establece entre
la reflexión en profundidad y la
la repetición, sino la interacción con las reglas propuestas, lo que configura la transmisión abierta del tutorial.
clave del proyecto. En el centro de lo que se propone no está la viralidad, sino
[55] Véase Claudia Kappen-
el diálogo y la reflexión. berg, «The Logic of the Copy,
Claudia Kappenberg, comentando las ideas de Walter Benjamin y en una from Appropriation to Choreo-
graphy».
línea cercana a la expuesta por Brannigan, habla de la posibilidad de una ex-
periencia aurática a partir de la copia en circulación. Siguiendo las ideas de [56] Véase Katja Kwastek,
Aesthetics of Interaction in Di-
la antropóloga Nadia Seremetakis, Kappenberg comenta la relación entre el
gital Art.
flujo continuo de información y la posibilidad de una suspensión momentá-
nea de los modos de representación habituales como forma de dar espacio a [57] La lógica del tutorial no
es la del maestro que tiene el
la experiencia individual para que esta pueda articularse55. Una idea similar conocimiento como propiedad,
es la que propone Katja Kwastek cuando define la obra de arte interactiva sino la de un igual que compar-
te datos parciales o modos de
como proceso que habilita una distancia epistémica y, con ello, la distingue hacer con otros iguales. No es
de las propuestas interactivas comerciales o los videojuegos de inmersión56. la misma De Keersmaeker la
que explica la coreografía com-
El tutorial reclama una autoridad (la que imparte él mismo), pero es siempre pleta en el proyecto con Bojana
una autoridad transitoria57. Hay un ejercicio de control en el hecho de querer Cvejić que la que imparte el tu-
torial, y no porque esta segunda
conducir la manera en la que se disemina/explica la propia obra, indudable-
sea condescendiente, sino por-
mente, pero también hay una consideración del otro como interlocutor viable, que está abriendo la posibilidad
como autor de su propia interpretación que es capaz y que, a partir del cono- de un diálogo plural.
BIBLIOGRAFÍA
FUENTES ELECTRÓNICAS
ABC News. «Beyonce Accused of Stealing Dance Moves; Superstar Responds, Saying She
Was “Inspired”». (2011). <https://www.youtube.com/watch?v=V1LCYoH3GwQ>
(06/06/2015).
[beyonceVEVO]. «Beyoncé-Single Ladies (Put a Ring on it) (Video Version)». (2009).
<https://www.youtube.com/watch?v=4m1EFMoRFvY> (10/03/2018).
[beyonceVEVO]. «Beyoncé-Countdown». (2009). <https://www.youtube.com/
watch?v=2XY3AvVgDns> (10/10/2015).
[Fundifferent1]. «Split Screen: Beyonce “Countdown” vs Anne Teresa de Keersmaeker».
<https://www.youtube.com/watch?v=PDT0m514TMw> (04/07/2015).
Libros 95
performativo expuesto en las teorías de Judith ta, convertida en el género teen en la reina del
Butler. Indica que Butler dejó abierta la pregunta baile del instituto. Fue interpretado por Molly
de género de la adolescencia y que, al igual que su Ringwald en La chica de rosa (Pretty in Pink,
teorización, es una construcción que nunca está Howard Deutch, 1986), reconstruido a finales de
terminada. la década de 1990 en la película Alguien como tú
Smith evidencia esa evolución en el tercer capí- (She’s All That, Robert Iscove, 1999) y dibujado
tulo del libro, «Acting Up: Performing Masculine de nuevo según los patrones del nuevo milenio en
Delinquency in the Teen Movie», en el que transi- Chicas malas (Mean Girls, Mark Waters, 2004)
ta la primera de las muchas máscaras que el cine por Lindsay Lohan (de nuevo, una actriz adoles-
comercial le puso a la adolescencia masculina: la cente que cumplió el destino de ficción que mar-
del delincuente juvenil. Fue encarnada en la dé- caba el título de su mayor éxito). Las tres prota-
cada de 1950 (el primer momento de la historia gonistas construyen en la pantalla una identidad
en el que los adolescentes americanos pudieron adolescente de estatus triunfante partiendo de la
permitirse serlo al no tener una guerra en la que marginalidad, ya sea desde la diferencia de clase
batallar) por James Dean, que cumplió el destino social (La chica de rosa), el underground artís-
nihilista de la rebeldía con su repentina muerte. tico de las subculturas y performances políticas
Desde entonces, es imposible disociar al actor de (Alguien como tú) o la inocencia infantil (Chicas
los personajes a los que interpretó, evidenciando malas). En las tres películas se repite el mismo
la huella que los mecanismos de Hollywood pue- ritual, al estilo Pigmalión, de cambio de armario
den tener en la construcción de las identidades. y maquillaje que les permite entrar en el estándar
La performación del delincuente juvenil adqui- de femineidad que las convierte en objetos desea-
rió holgura a través de los mecanismos del pas- bles. La legitimización de esa nueva identidad se
tiche posmoderno cuando lo interpretó Travolta produce desde la mirada del otro, que no siempre
en Grease (Randal Kleiser, 1978) y terminó por es la masculina. En el caso de Chicas malas, es
romper la convención con Christian Slater con- una consecuencia de la aceptación por el grupo
vertido en asesino adolescente de humor negro de abejas reinas del instituto; es la cultura del ca-
en Escuela de jóvenes asesinos (Heathers, Mi- pitalismo del Girl World, relacionado en su con-
chael Lehmann, 1990). A pesar de las décadas y cepción con una agresión que termina por des-
contextos que diferencian esas representaciones truir el concepto teórico postfeminista.
del delincuente juvenil, los tres personajes mues- En el quinto capítulo, «Looking Back: Nostalgia,
tran el mismo énfasis en la rebelión como base Postfeminism, and the Teen Movie», la autora
diferenciadora de la construcción de la identidad, mira hacia atrás a través del revisionismo nos-
al mismo tiempo que también esa rebeldía es una tálgico de Dirty Dancing (Emile Ardolino, 1988).
muestra de la ansiedad que provoca la fragmen- El film otorga el protagonismo a un personaje al
tación y el fallo en la identificación del género al que todos llaman Baby, pero que, a lo largo de la
tratar de construir una heteronormatividad al trama, toma conciencia de la identidad disociada
uso. de la familia y la sociedad a través del baile y la
El modelo de la construcción de la femineidad decisión de transgredir la norma (algo que, en los
adolescente dentro de los valores convencio- códigos del cine teen, siempre se representa por
nalmente aceptados por la sociedad utiliza un el enfrentamiento a los padres) y sexualizar su
discurso diferente que la autora desarrolla en cuerpo, en una línea cercana al postporno, para
el cuarto capítulo, «Making Over: Gender and incorporarlo a su identidad, discurso proaborto
Class at the High School Prom». Smith analiza mediante. No es casualidad que esa expresión
el relato en torno al cuento clásico de Cenicien- postfeminista llegue desde el contexto de la nos-
Libros 97
A Companion to American Indie Film ensayo) como por la actividad discursiva de sus
Geoff King (ed.) diferentes agentes (lo que la prensa, la crítica, el
Oxford público y los festivales establecen que es el indie).
John Wiley & Sons, 2017 Dice el editor, Geoff King, en la introducción que
544 páginas uno de los objetivos de esta colección de ensayos
168,11 € era indagar en la formación, establecimiento y
crecimiento de ese terreno cultural que es el cine
indie estadounidense contemporáneo. El libro,
por tanto, sopesa la amplitud del campo como
una fuente de riqueza y variedad y considera la
impureza como parte fundamental del indie. Al
mismo tiempo, se considera a Hollywood y el
mainstream como referentes fundamentales para
hablar del indie. Abandonado el binarismo de la
modernidad, y con el fin de los grandes relatos,
no tiene sentido estudiar el cine independiente en
exclusión o aislamiento ni aceptar sin cuestionar
conceptos como autenticidad u originalidad. En
su lugar, lo que el compendio propone, haciendo
especial hincapié en la flexibilidad del nuevo mi-
lenio, es que el cine indie y el mainstream están
en continuo diálogo.
Cine indie como signo de distinción. Cine indie A Companion to American Indie Film se divide
como práctica industrial. Cine indie como alter- en ocho secciones. La primera, «Indie Culture»,
nativa, como ética, como estética, como etiqueta. comienza por asentar el panorama cultural del
Definir y esclarecer «indie» e «independiente» cine independiente. En el capítulo uno, Michael
es una tarea ardua cuando se sopesan las varia- Z. Newman establece la autenticidad, la auto-
bles históricas y socioculturales que han ido mol- nomía y la oposición como valores de la cultura
deando la industria cinematográfica, tanto en lo independiente a la vez que cuestiona su valor
que respecta a fuentes de financiación como a performativo y recalca su continua reevaluación
corrientes artísticas y su correspondiente recep- y cuestionamiento. En el capítulo dos, Sherry B.
ción. Si bien es fácil establecer una clasificación Otner incorpora el trabajo de Bourdieu y el con-
de acuerdo a parámetros industriales, los ele- cepto de aparato cultural para comprender el sur-
mentos formales y socioculturales escapan a una gimiento de la escena indie y la interpelación de
rígida categorización. Dada la cantidad de ele- ciertos directores como autores. Geof King cierra
mentos discursivos que entran en juego, lo que la sección con su aportación «Indie as Organic»,
propone A Companion to American Indie Film es en la que desarrolla la teoría del habitus trazando
considerar el concepto de indie como un campo paralelismos con la comida orgánica, metáfora
de producción cultural. Siguiendo la aportación que se extiende a las raíces, o la calidad del terre-
teórica de Pierre Bourdieu, esto significa que el no u origen, la materia, o la narrativa episódica
indie se define tanto por lo que es como por lo que que diferencia el producto de Hollywood, el re-
no es (Hollywood), tanto por el capital simbóli- parto, que vendría a ser la distribución y exhibi-
co que lo caracteriza como producción artística ción, y, por último, el efecto. Con la comparación
(la distinción del indie como producto de arte y del cine indie con el consumo de verduras orgá-
Libros 99
estudio con el fin de reconciliar la libertad creativa Por su énfasis en lo contemporáneo, A Compa-
indie con el neoliberalismo del marco industrial nion to American Indie Film es una buena con-
de los grandes estudios. Destaca en esta sección la tinuación del American Indie Cinema de Geoff
contribución de Stella Bruzzi, sobre el estilo/fon- King (2005). La cohesión de las contribuciones es
do y la masculinidad de Reservoir Dogs, por ser palpable y dota a la colección de un sentido uni-
la única aportación que presta atención a asun- tario que posiciona al cine indie como un impor-
tos de género. El editor menciona esta ausencia tante campo discursivo en el contexto estadouni-
y otras en la introducción argumentando la falta dense. Por su énfasis en lo híbrido, en la continua
de espacio y situando la existencia de estos con- fluctuación de lo independiente y lo mainstream
tenidos en sus respectivas disciplinas académicas. y la reevaluación de la autenticidad, A Compa-
El problema de hacer una categoría de mujeres, nion to American Indie Film establece una com-
personas racializadas y LGTBQ como «contextos pleja base para analizar el campo discursivo del
socioculturales específicos» (p. 20) es que el volu- cine independiente.
men refuerza tácitamente la idea de cultura indie
como un estándar de autoría masculina blanca. Elisa Padilla
Libros 101
(Parte I) que presenta un panorama de los tra- El libro sigue con un ejercicio de construcción del
bajos que se han aproximado al estudio de los marco teórico, que Hanich afronta a partir de una
efectos en el público. Le siguen un plano largo tipología del visionado colectivo. Con el fin de
(Parte II), en el que el autor arma su marco teó- definir los marcos de referencia emocional en la
rico a partir de una doble tipología del visionado sala que a posteriori le permitan desarrollar sus
colectivo, y un plano medio (Parte III), donde se casos, se distinguen dos formas de visionado en
hace la propuesta metodológica. El libro progresa las que la academia ha dividido la historia de la
a un close-up o plano corto (Parte IV), donde el recepción colectiva: quiet-attentive viewing (vi-
autor realiza el análisis de los tres casos de estu- sionado atento-silencioso) y expressive-diverted
dio mencionados (la risa, el llanto y la ira), para viewing (visionado expresivo-distraído). Si el
cerrar con una coda a modo de fade-out. En esta primero vendría a describir los estados emocio-
última parte, Hanich vuelve a abrir el plano para nales que predominan bajo las condiciones —más
proponer una posible deriva de su estudio hacia convencionales— de ver un filme en silencio en la
contextos de visionado colectivo enmarcados en oscuridad de la sala, el segundo se corresponde
la era digital. con formas de visionado asociadas a proyeccio-
Hagamos un breve repaso a lo que ofrece cada nes participativas en las que lo propio es interve-
sección. En primer lugar, el libro abre con un nir a través del comentario, la risa e, incluso, de
valioso ejercicio de arqueología en el que se re- actividades físicas como el baile y el canto. Estas
cuperan algunas de las aportaciones que autores proyecciones, reguladas por una inversión de las
canónicos como Bazin, Odin o Benjamin han normas implícitas en la sala, se vienen celebran-
hecho al estudio de la experiencia espectatorial. do en torno a películas de culto en la línea de pro-
El mayor logro de esta sección es la estimulante yecciones como The Rocky Horror Picture Show
lectura alternativa que el autor hace de la historia (Jim Sharman, 1975), quote-a-longs o los más
de la teoría del cine. A lo largo de los dos prime- recientes sing-a-longs. La filosofía es aquí el ám-
ros capítulos del libro, Hanich no solo evidencia bito desde el que más abiertamente se abordan
la ya sabida escasez de referencias a la situación las implicaciones fenomenológicas de «ver en
cinemática del espectador, sino que extrae del conjunto» (view jointly), una acción que según
olvido tímidas especulaciones sobre el público el autor es propia de ambas formas de visionado
que, por no haber sido sistematizadas teórica- y que describiría toda asistencia al cine como un
mente por sus autores, han terminado por excluir «nosotros» intencional (we-intention). En otras
la cuestión de la dimensión social del espectácu- palabras, todo contexto de visionado colectivo en
lo cinematográfico de la teoría del cine. Un caso una sala se rige por la disposición consciente de
digno de mención es la referencia que Hanich realizar una actividad en común, y por lo tanto,
hace al trabajo de Walter Benjamin y su reflexión de implicar (a distintos niveles) a los demás en
en torno a la risa y a la «experiencia simultánea nuestra experiencia individual. Si con este juego
colectiva» en el cine, que toman cierta preponde- conceptual Hanich logra justificar la imposibili-
rancia en su discusión en torno al valor de culto dad de desvincularse de la intersubjetividad en el
en La obra de arte en la era de la reproductibili- estudio de las emociones del público cinemato-
dad técnica. Hanich organiza esta arqueología a gráfico, a su vez, elude la problemática implícita
partir de un repaso a la obra de Odin, Barthes y en todo estudio que se adentre en el resbaladizo
Morin, autores a quienes asigna cierta responsa- territorio de los públicos: la de pensar en la au-
bilidad a la hora de describir el contexto de recep- diencia como un grupo heterogéneo de indivi-
ción cinematográfica como un espacio social que duos cuyas motivaciones, emociones y acciones
cumple una serie de funciones sagrado-rituales. se encuentran sujetas a una serie de variables
Libros 103
como se ha dicho ya, la ausencia total de casos cia del otro y su presencia en la sala a través de la
que comprometan en el análisis la opinión del introducción de dispositivos móviles y «segundas
público (algo, que podría resolverse con entrevis- pantallas» en el auditorio.
tas), sino que las películas quedan en numerosas Por último, se agradece la inclusión de un glo-
ocasiones fuera de plano, distanciándose el tra- sario final de términos que dan coherencia y es-
bajo casi por completo de la importancia del texto tructura a un volumen que a menudo es en exce-
fílmico como fuente del proceso emocional en la so taxonómico. Al hilo de este glosario, hay que
sala. Esto lleva al autor a caer en el artificio que reconocerle a Hanich su claridad conceptual y su
él mismo insiste en querer soslayar al comienzo constante pedagogía a la hora de aproximar la
de este volumen: el de generar un trabajo más fenomenología a un lector no especializado. Pa-
que idealice la experiencia social de la sala como radójicamente, a pesar de su afán pedagógico, el
esencia de la especificidad fílmica. El libro trata libro no logra conciliar esta rama de la filosofía
de resolver este dilema con un cierre que adopta con los estudios de cine, dejando en evidencia la
la forma y el nombre de transición o de fundido ineficacia de la fenomenología como herramien-
a negro (fade-out) en el que se reflexiona sobre ta que ofrezca nuevas soluciones a algunos de los
cómo la fenomenología debe servir al análisis de dilemas que acompañan al estudio cualitativo de
otras formas colectivas de visionado (por ejem- los públicos.
plo, el apenas tratado home cinema con amigos)
o sobre la misma transformación de la experien- Rosana Vivar
Libros 105
tancia de los estudios transnacionales para acer- viesa varios países de la región, toma Qué tan
carse a películas que son complejas en estos tér- lejos (Tania Hermida, 2006) para exponer una
minos (tanto si atendemos a su dimensión finan- mirada-turista dentro del género o Iracema.
ciera como si dirigimos la mirada a las historias). Uma transa Amazônia (Jorge Bodanzky y Or-
Además, destaca su interés por las implicaciones lando Senna, 1975) como una historia que su-
éticas y políticas de unas soluciones narrativas u cede en el interior de un único país, ampliando
otras dentro del género (p. 49) y la ágil forma en también con este título el marco temporal de su
que incorpora esta perspectiva textual en sus aná- estudio. En este sentido, es reseñable el esfuerzo
lisis. Por otro lado, y considerando la road movie para buscar casos más allá de los habituales (y
un género testigo de su época y de la crisis de ésta frecuentemente citados en los estudios dedicados
(p. 20), Lie problematiza la dimensión espacial de al cine latinoamericano de las dos o tres últimas
las películas tomando como punto de partida el décadas): pienso, por ejemplo, en Los tres entie-
trabajo de otros autores. Así, la heterotopía fou- rros de Melquiades estrada (Tommy Lee Jones y
caultiana, los no-lugares de Marc Augé y la pa- Guillermo Arriaga, 2005) y El chico que miente
ratopía de Dominique Maingueneau son sus he- (Marité Ugas, 2010). Además de ello, en cada ca-
rramientas para estudiar relaciones tan diversas pítulo la aproximación se adecúa a las películas,
como la de Gunnar Dinesen con la Patagonia en lo que permite sacarles provecho más allá de su
Jauja (Lisandro Alonso, 2014) o la de Andrés con condición de road movies. Los análisis son mi-
la frontera México-US en Norteado (Rigoberto nuciosos y destacan elementos, circunstancias y
Perezcano, 2009). La autora se ocupa también de detalles que otros autores antes habían pasado
la modernidad referida en el título del libro, cuya por alto, al mismo tiempo que se apoyan en una
relación con la road movie considera ambivalente amplia bibliografía específica. Son un buen ejem-
al interpretar que este género es al mismo tiempo plo las páginas dedicadas a Y tu mamá también
una expresión y una meditación crítica de la mo- (Alfonso Cuarón, 2001), donde al poner el acento
dernidad (p. 21). En este caso, toma como refe- en la palabra «charolastra», utilizada por los per-
rencia la «modernidad cruel» de Jean Franco y va sonajes, Lie lleva a un primer plano la condición
más allá al proponer una «modernidad indiferen- política y económico-social de los protagonistas,
te» para pensar la road movie latinoamericana y, subrayando una cuestión que quizá había sido
en particular, las películas que se ocupan de des- poco explorada en esta película hasta ahora.
plazamientos dentro de las fronteras de cada país. Con todo lo anterior, The Latin American (Coun-
Otro valor del libro tiene que ver con la selección ter-) Road Movie and Ambivalent Modernity
de ejemplos, con cómo son analizados y la ma- está llamada a ser una publicación de referencia,
nera en que dialogan unos con otros. A lo largo especialmente considerando la cantidad de pelí-
de los ya citados capítulos, la autora desarrolla culas del género producidas en los últimos años
una aproximación transversal a la cinematogra- en América Latina y la atención que están susci-
fía latinoamericana sin discriminar los títulos tando en el ámbito académico. El esfuerzo teórico
por sus años de producción ni por los países que del libro y su capacidad para ocuparse de manera
participan en ellos como (co)productores mayo- transversal de las cinematografías diversas de la
ritarios. El criterio para seleccionar las películas región son, además de un logro notable, un valio-
es que sean paradigmáticas de las seis categorías so punto de partida para futuros estudios.
propuestas. Así, Lie escoge El viaje (Fernando
Solanas, 1992) como una road movie que atra- Minerva Campos
Libros 107
cuestión que no me parece accesoria: el estudio se puede hablar, al hilo de análisis de Garnemark,
general sobre el funcionamiento de la censura en de una auténtica apropiación de algunas de las
el cine español parece haberse estancado en refe- películas más importantes del director sueco a
rentes bibliográficos de hace décadas y no ha sido los intereses del nacionalcatolicismo. Este era
objeto de reconsideración por las generaciones un tema ya sabido, pero es precisamente gracias
más jóvenes de historiadores, más allá de algunos al minucioso estudio de la autora y a su registro
estudios de caso. Frente a esta situación, traba- exhaustivo de las supresiones, las adiciones o las
jos como los que abordamos aquí ofrecen nuevas meras alteraciones de sentido, donde podemos
perspectivas desde un ámbito que podríamos de- entender con claridad el papel ideológico de la
nominar tangencial, pero, precisamente por ello, práctica censuradora. Un ejemplo particularmen-
particularmente fecundo y dinámico para aproxi- te revelador es el de Carlos Staehlin y su papel en
marnos al tema de manera diferente. En España, la reconducción de los irresueltos planteamientos
por ejemplo, Rosario Garnemark resalta el tra- religiosos y existenciales tratados por Bergman en
bajo del grupo de traductores TRACE, que reúne El séptimo sello (Det sjunde inseglet, 1956) a la
investigadores de las Universidades de León y del ortodoxia católica. La obtención del Premio Espe-
País Vasco y que ha llevado a cabo algunos estu- cial del Jurado en Cannes en 1957 la había con-
dios importantes en el funcionamiento de la cen- vertido en un referente ineludible en el ámbito del
sura tanto literaria como cinematográfica. pensamiento cinematográfico. Cuando se estrenó
Hay que tener en cuenta, como se podrá despren- en España dentro del marco de la V Semana del
der de lo dicho hasta ahora, que el planteamiento cine de Valladolid en 1960 (denominada exacta-
de ambos libros no se centra en el limitado estu- mente en aquél momento Semana internacional
dio filológico y terminológico o en la mera cata- de cine religioso y de valores humanos), venía
logación de las alteraciones de sentido. Más bien precedida por un debate en la prensa internacio-
ocupados en el estudio de los textos en relación nal que subrayaba su ambigüedad sobre el asunto
con sus contextos, estos investigadores entienden religioso y el modo al que apuntaba hacia un vacío
la traducción como un espacio de mediación cul- vinculado a las premisas del existencialismo tan
tural, social y política que debe ser leída desde los en boga en aquellos años. Garnemark describe
contextos históricos. Partiendo de estas premisas, minuciosamente las veladas intervenciones, so-
se hace necesario un bagaje conceptual y meto- bre todo a través de la sistemática alteración de
dológico que incluya tanto una argumentación diálogos, que sirvieron para redefinir la caracte-
teórica (en este caso alimentada por los referentes rización de los personajes y para transformar un
habituales de los llamados estudios culturales, así filme sobre la ausencia de Dios en un mundo en
como de la teoría de la traducción) como el traba- decadencia por una lectura definida por la espe-
jo minucioso de archivo. La teoría de los polisiste- ranza vinculada a la redención divina. En breve:
mas de Itamar Even-Zohar es uno de los referen- una inversión del sentido del filme que contrade-
tes principales en ambos autores para abordar la cía completamente sus planteamientos originales.
complejidad del diálogo de los textos con los di- El séptimo sello fue el disparador de una práctica
versos niveles del entorno cultural. Así mismo, los intervencionista en la que los ideólogos de la cen-
autores inciden en la valoración de los procesos sura orientaron hacia su marco de pensamiento el
de traducción como reescritura adaptada a un de- sentido de las películas del cineasta sueco. Obvia-
terminado marco ideológico, el de la constreñida mente, no solo se agotó en las cuestiones religio-
sociedad española bajo el franquismo. sas, sino que se extendió a otros asuntos como el
Ingmar Bergman supone un ejemplo paradigmá- tratamiento del erotismo o de temas que podrían
tico de esas prácticas de reescritura. En este caso considerarse «escabrosos», sobre todo de índole
Libros 109
Pero lo que resulta particularmente interesante dulce (Irma la Douce), realizada ese mismo año
de nuevo, como ocurría en el libro sobre Berg- de 1963, tardaría aún seis años en ser aprobada
man, es observar la maleabilidad de las fronte- para su proyección pública y con las consabidas
ras de la censura a través de una perspectiva intervenciones.
histórica. En esas estrategias de negociación de Los dos libros muestran una reflexión sobre la
lo tolerable, la documentación aportada por Van- censura tan conflictiva como útil para entender su
daele señala los cambios de criterio bastante elo- función a lo largo del franquismo. Es cierto tam-
cuentes sobre lo que puede no ser admitido en bién que ambos textos arrastran, en mi opinión,
un determinado contexto y sí en otro. Y resulta algunos elementos discutibles. Por un lado, su
particularmente relevante un momento histórico clara estructura académica conduce a repeticio-
concreto: la instauración del código de censura nes y a desequilibrios vinculados a la utilización
en 1963, nuevamente a rebufo de las iniciativas de un patrón fijo en películas con un valor histó-
de García Escudero y la mesurada apertura del rico y documentación muy desigual. La investiga-
régimen franquista de aquellos años. El apar- ción queda, además, por la propia estructura, algo
tamento había sido prohibida fulminantemente deslavazada en llamadas que llevan de un lado a
cuando se presentó a la censura en 1961 (el expe- otro en el recorrido del libro. Otro elemento pro-
diente de este rechazo, nos dice Vandaele, se ha blemático tiene que ver con la dimensión herme-
perdido). Sin embargo, gracias a este nuevo con- néutica e interpretativa de los propios filmes, en
texto, sería estrenada en diciembre de 1963 adap- los que a menudo se sale del esquema del pensa-
tada a las nuevas regulaciones. Apenas dos meses miento histórico para dar rienda suelta a lecturas
antes, también se había estrenado en Madrid Con más o menos ajustadas (dependiendo del punto
faldas y a lo loco (Some Like it Hot, 1959) y, en de vista) provenientes del ámbito de los estudios
1964, La tentación vive arriba (The Seven Year culturales. El recorrido que hace Garnemark de
Itch, 1955) y Traidor en el infierno. Una casca- la mano de Marilyn Johns Blackwell para enten-
da de obras maestras del director estrenadas con der a Bergman desde una clave feminista puede
unos meses de diferencia que explican su impacto servir de ejemplo. Pero este problema también
fulminante y también su inmediata instalación en se hace ver en las descripciones de los contextos
el panteón de los cineastas para una generación históricos (de la mano de Preston en el caso de
de jóvenes cinéfilos en aquellos años. El código Vandaele) o de la situación de la propia industria
de censura permitió, de este modo, un cambio cinematográfica española durante el franquismo.
de estrategia en la recepción de Wilder. En este También algunas valoraciones generales, en la
sentido, el ejemplo de Ariane (1957) es signifi- parte final del texto de Vandaele, sobre el carác-
cativo para entender estos procesos. Inaceptable ter «subversivo» de la ficción o del humor pare-
para ciertos sectores de la censura en el año de cen constituir materiales para otro tipo de libro.
su producción, Vandaele reconstruye a través En cualquier caso, estas posibles divergencias no
de documentación (la copia doblada de 1957 se empañan el innegable valor de los estudios que
ha perdido) las numerosas transformaciones en aquí tratamos para entender el funcionamiento
el doblaje que permitieron finalmente su llega- interno de la censura franquista ante cineastas
da a las pantallas. La intervención de la censu- consagrados como Bergman y Wilder, una apor-
ra todavía se mostraba omnipotente y asertiva a tación que debería estimular nuevos estudios de
mediados de la década de 1950. A partir de 1963, fondo sobre el tema.
la estrategia será, en general, más sibilina, inteli-
gente y, por lo tanto, eficaz. No obstante, Irma la Vicente J. Benet
Libros 111
que la ficción, refutando que sea un «premio de desde los orígenes hasta el siglo XXI, es un libro
consolación» en las trayectorias audiovisuales de consistente y reflexivo, Miradas de mujer adole-
las cineastas. En total, casi cien mujeres directo- ce de falta perspectiva y reposo llegando, en oca-
ras son nombradas a lo largo de las trescientas siones, a denotar cierta premura o inmadurez en
páginas que componen el libro. los análisis de la filmografía de las directoras.
Mediante el análisis de la obra de las directoras Por ello, Miradas de mujer resulta un volumen
españolas, la publicación pretende estudiar el desigual al que se podría reclamar una mayor
desarrollo profesional de las mujeres en la in- coherencia sobre los aspectos a analizar de cada
dustria cinematográfica, observar el engranaje directora. Existen algunos temas comunes que se
intergeneracional y romper con el estereotipo repiten en varios de los capítulos, como la trans-
que homogeneiza el cine hecho por mujeres den- nacionalidad de las obras o la búsqueda de una
tro de un mismo género cinematográfico «para mirada femenina (a pesar de que este concepto
mujeres». Por el contrario, muestra la existencia no está explicado o teorizado a nivel general), lo
de una gran variedad de temas, estilos y formas. que demuestra un interés general acerca de es-
Como sus títulos indican, ambos volúmenes se tos aspectos dentro de la intersección entre los
centran en el proceso de construcción de «una estudios fílmicos y audiovisuales y los estudios
mirada propia» por parte de las directoras a tra- de género, donde se sitúa la obra. Asimismo, se
vés de la experiencia individual, las vivencias y percibe una cierta ansiedad por parte de las in-
las referencias precedentes. vestigadoras e investigadores por reivindicar la
Para los lectores comprometidos con la causa que voz autoral de las directoras. El problema es que
defiende el libro, se agradece la claridad y sinceri- este esfuerzo parece limitarse a la búsqueda de
dad de su editor y de muchas autoras y autores en elementos temáticos comunes o repetidos entre
su abierta crítica a la industria audiovisual mayo- sus cortas filmografías, más que a un análisis for-
ritariamente masculina, a la ausencia de medidas mal, estilístico o poético con cierto desarrollo.
realmente útiles para compensar este desequili- También, se percibe una cierta necesidad de al-
brio por parte de los entes públicos y a la dificul- gunos autores por encontrar elementos feminis-
tad para encontrar datos claros y contrastables tas en la obra de las directoras que confirmen la
sobre la industria. militancia de estas y su implicación en la búsque-
A pesar de no ambicionar convertirse en una base da de la igualdad mediante su trabajo, juzgando
de datos, este libro resulta útil como herramien- su presencia (o ausencia) en bases muy endebles
ta de consulta o como una suerte de enciclopedia y superficiales como por ejemplo el protagonismo
de las cineastas del siglo XXI. Sin embargo, su de personajes femeninos independientes y «em-
propio concepto editorial se enfrenta con la pa- poderados». En este sentido, el libro requeriría
radoja inevitable de estar desactualizado desde de un posicionamiento teórico inicial sobre con-
el mismo momento de su publicación y de sufrir ceptos tan complejos e inestables como el de «mi-
las limitaciones del papel frente al medio digital. rada femenina», «cine feminista» y «cine hecho
El principal problema a nivel práctico es que se por mujeres» (o gynocine, tomando el término
sitúa a medio camino entre un diccionario y un popularizado por Bárbara Zecchi). Sin embargo,
volumen analítico que permita estudiar en pro- estos términos no llegan a ser debatidos y su uso
fundidad desde parámetros estéticos, técnicos y queda a criterio de cada investigador, lo que re-
teóricos las principales obras dirigidas por muje- sulta en un empobrecimiento discursivo y una re-
res en este siglo. Asimismo, la falta de distancia ducción del alcance teórico que una publicación
con el objeto de estudio influye en la calidad del de estas características podría tener.
volumen. Mientras que el primero, que abarca El volumen sigue una tradición genealógica de
Libros 113
Celebrity and the Feminist desentraña las relaciones entre el feminismo y
Blockbuster las celebrities poniendo el foco en 8 autoras que
Anthea Taylor escribieron libros que fueron éxitos de venta. El
Londres principal requisito para entrar en esta lista fue
Palgrave MacMillan, 2016 que su fama residiese en ser feministas, exclu-
306 páginas yendo así a quien llegó al movimiento después de
83, 29 € alcanzar la fama. A pesar de que el llamado «fe-
minismo mainstream» es un fenómeno reciente,
Taylor se remonta a los años 60 para analizar
personalidades que ya encarnaban este tipo de
rol. El libro sigue una línea temporal y se divide
en dos partes, coincidiendo con las llamadas
segunda y tercera ola del feminismo, las cuales
responden a realidades diferentes con factores
propios a analizar.
En la primera parte nos habla de Gurley Brown,
Betty Friedan y Germaine Greer, así como los li-
bros por los que son conocidas: Sex and the Sin-
gle Girl (1962), The Feminine Mystique (1963)
y The Female Eunuch (1970), respectivamente.
Aquí, desde el prisma de los Celebrity Studies, la
autora nos empieza a dar claves para el análisis
Afirmar que el feminismo es un fenómeno de de estos casos de estudio. Como repite en varias
masas hubiera sido impensable solo hace unos ocasiones a lo largo del texto, el papel crítico que
años. El termino feminista ha sido denostado y desempeñaron fue de intermediarias culturales.
vilipendiado como represalia a ser un movimien- Tras ser conocidas por el gran público, argumenta
to reaccionario contra la cultura hegemónica. Sin Taylor, poseen el capital intangible de la celebri-
embargo, últimamente hemos visto como el dis- ty. Su nuevo estatus legitima automáticamente
curso feminista ha empezado a incorporarse a la sus discursos (en este caso de carácter feminista)
cultura de masas y han surgido, dentro del con- a ojos de una gran parte de la sociedad. Examina
texto capitalista y neoliberal, voces públicas que de cerca y por separado cada una de las perso-
validan el alegato feminista. Así, la intersección nalidades, que ya forman parte de la historia del
entre feminismo y cultura mainstream, ha sido movimiento, para destilar sus especificidades,
encarnada con figuras como Beyoncé o Emma pero también para encontrar el denominador co-
Watson, que han contribuido enormemente a que mún en este fenómeno. Todas escriben libros de
la palabra «feminista» deje de estar demonizada. no ficción, basándose en mayor o menor medida
Estos espacios de representación están siendo en experiencias personales. La imagen que pro-
abordados por numerosas voces desde dentro de yecta la obra es irremediablemente la misma que
la academia y desde diferentes campos de estudio proyectan ellas, y la línea entre autora y libro des-
para definir las lógicas de poder que los rigen. aparece. Tal y como expone Anthea Taylor llegan
En este contexto surge Celebrity and the feminist a convertirse ellas mismas en la materialización
Blockbuster escrito por Anthea Taylor, profeso- de sus bestsellers y, en lo que respecta a publici-
ra del departamento de Género y Estudios Cul- dad, promoción y construcción de su identidad,
turales en la Universidad de Sidney. La autora se convierten en la marca que venden.
Libros 115
abrir la conexión entre ellas y su público: la pla- do el gran público las percibe como la encarna-
taforma YouTube y las newsletters; nuevas vías ción del mismo. Efectivamente, ellas ejercen un
digitales que ya forman parte de la industria del gran poder frente a la opinión pública y pueden
entretenimiento y que sustentan el éxito comer- centrar debates urgentes. Taylor no olvida las li-
cial de sus libros a través de estrategias promo- mitaciones que tienen estas personalidades que,
cionales constantes, pero que al mismo tiempo dentro del feminismo, funcionan como lobbies de
también se usan para difundir valores feministas. diferentes causas, pero no dejan de estar dentro
En definitiva, las voces analizadas, junto a otras de un contexto capitalista, uno de los grandes
de igual fama, han jugado un papel fundamen- enemigos de gran parte del movimiento.
tal a la hora de la expansión del feminismo, pero Por último, el análisis que acompaña a la segunda
quedarnos solo ahí es ignorar el arduo trabajo parte del libro, diseccionando los medios digita-
de cientos de activistas y teóricas en esta lucha les para examinar quién participa y en qué tér-
histórica. Es fácil dejarse arrastrar a un examen minos, adelanta muchos de los debates que están
maniqueo de la situación donde se contraponen pendientes dentro del feminismo. Mantener un
las feministas de verdad con las que no lo son. enfoque diversificado, entre varias áreas de estu-
El punto fuerte del libro, además de su lectura dio, seguirá siendo necesario en un contexto en
amena y atractiva, es ofrecer argumentos que se que las relaciones entre cultura contemporánea y
alejan de un binomio simplista. Cada una de es- feminismo no hacen más que intensificarse.
tas figuras tiene que negociar su posición propia
dentro del feminismo, pero el peligro surge cuan- Laura López Casado
Libros 117
interpelados y, en una continua adaptación que y de que los difusores y productores tengan una
traslade a los estudiantes estas tendencias y el estrategia bien clara que permita la captación de
establecimiento de nuevos perfiles profesionales, nuevas audiencias y su monetización en forma de
buscan contenidos y materiales para las nuevas publicidad (en la audiencia como consumidora) o
o adaptadas asignaturas. Para cubrir estas nece- en nuevos socios de los diferentes servicios (en la
sidades, la colección de Manuales de la Editorial audiencia como cliente). En un espacio con dife-
UOC (perteneciente a la Universidad Oberta de rentes «arcos de influencia» de la actividad en re-
Catalunya con sede principal en Barcelona) está des sociales de las audiencias, estas actúan como
generando de manera sistemática referencias seguidoras de un producto, como difusoras e,
como las dos que aquí nos ocupan. incluso, como cocreadoras del contenido a través
Elena Neira, autora de La Otra Pantalla, ha pu- del UGC (contenido generado por los usuarios).
blicado varios libros sobre el espectador social o Finalmente, en la segunda parte del libro, la au-
el uso de redes sociales para la promoción cine- tora explicita las estrategias concretas de la na-
matográfica nutridos con reflexiones y experien- rración en redes que se deben manejar desde la
cias que actualiza de manera regular en su blog producción y cómo analizar ese nuevo rating
(http://laotrapantalla.com). En la obra aquí rese- para monetizar a las audiencias en la doble di-
ñada focaliza su atención en el concepto de «se- mensión del marketing de los medios, el juego en
gunda pantalla», es decir, en cómo la actividad en el mercado publicitario y en la conceptualización
redes sociales de productores/difusores y espec- del producto. En definitiva, es un interesante ma-
tadores genera una emisión secundaria (también nual en el que se puede echar en falta una mirada
llamada backchannel) que puede marcar tanto más crítica que, por ejemplo, presente el rol de
las estrategias de marketing de los productos los servicios públicos en este escenario, cómo las
como al desarrollo de los mismos. Destacando la audiencias presentan resistencias a través del ac-
dimensión social del espectador actual frente al tivismo o referencias a autores actuales que traen
espectador pasivo predigital (pasividad que po- al presente las reflexiones de Dallas Smythe sobre
dríamos discutir desde un punto de vista teóri- la explotación de las audiencias en el nuevo esce-
co a partir de las teorías de relación y recepción nario digital.
con base en Stuart Hall), Neira profundiza en los El Big Data forma parte del libro de Neira y es
diferentes impactos que tiene la actividad de los el eje de la otra obra que nos ocupa en esta re-
diferentes actores en el marco de lo que la autora seña, con varios puntos en común. Eva Patricia
denomina como la «nueva televisión». Y es que Fernández coordina Big Data. Eje Estratégico en
la actividad de las audiencias en las redes socia- la industria audiovisual, donde varios autores
les en su segunda pantalla y en su relación con y autoras dibujan un buen acercamiento a este
las propias plataformas desde sus televisiones concepto y a cómo está alterando la industria au-
conectadas (que a partir del streaming ofrecen diovisual y los medios de comunicación. El texto
una información más que valiosa a los propie- se presenta en dos partes fundamentales. Por un
tarios de este tipo de servicios —desde Movistar lado, trata de hacer entender la complejidad del
Plus a Netflix—) está siendo estudiada de manera concepto de Big Data desde un marco general,
sistemática, aunque la autora reclama una actua- con su impacto en las empresas de todos los sec-
lización y mejor sistematización de la medición tores de la economía, para ir derivando hasta su
de audiencias. uso específico en medios y haciendo hincapié en
Esta actividad marca, según Neira, la eficien- los nuevos perfiles profesionales que se generan
cia a partir de un buen uso del Big Data (o los desde la elección y almacenaje de la información,
macrodatos, siguiendo la acepción de Fundéu) por la analítica y la inteligencia de negocio, hasta
Libros 119
DVD y Plataformas de Internet
Filmoteca Española en la red matográficos europeos. El centenario de la Gran
Guerra sirvió para proporcionar acceso a más de
setecientas horas de material a través del portal
del proyecto y de Europeana, la gran biblioteca
digital continental. Filmoteca Española contribu-
yó con cincuenta y seis títulos datados entre 1914
y 1920. Varios forman parte de la conocida como
Colección Tramullas, aunque también pueden
encontrarse noticiarios y reportajes o películas de
animación. Los vídeos se encuentran alojados en
Vimeo, una red social dedicada al alojamiento de
archivos audiovisuales digitales. Por defecto, los
archivos se abren a una resolución horizontal de
Durante la última década las instituciones dedi- 540x400 píxeles, algo por debajo de la resolución
cadas al patrimonio cinematográfico han ido in- SD estándar, pero permite el visionado a pantalla
corporando sus fondos al acceso digital. Este vi- completa.
raje hacia la disposición en abierto de contenidos Filmoteca Española participó también en 2016
de archivo no está exento de polémica dentro de en el Proyecto Forward, una iniciativa europea
la comunidad de las filmotecas. Quizás el punto para identificar las obras huérfanas y libres de
más visible de este debate interno fuera la publi- derechos. El trabajo de catalogación condujo a la
cación, en 2008, de Film Curatorship. Archives, creación de un registro europeo común de obras
Museums, and the Digital Marketplace por el huérfanas conservadas en los archivos. El objeti-
Österreichisches Filmmuseum (Viena). En forma vo era garantizar la actuación de los archivos en
de diálogo entre cuatro expertos, esta publicación su obligación de digitalizar y ofrecer a la ciuda-
pasó revista a los retos planteados por el «para- danía el visionado del patrimonio audiovisual.
digma digital» y al proceso de transformación El BFI (British Film Institute) ya hace posible el
tecnológica y conceptual que supone para archi- acceso a estas obras desde su plataforma de visio-
vos y usuarios el poder disponer de los fondos fíl nado BFI Player y con una lista de reproducción
micos mediante internet. en YouTube denominada Orphan Works. Por
En el panorama español, esta discusión parece ahora, este proyecto no se ha materializado en
haber quedado únicamente en el fuero interno de acceso general o libre a ningún tipo de contenido
los archivos, ya que poco ha trascendido. Aun así, en Filmoteca Española debido, sobre todo, a las
de forma poco sistemática y algo desorganizada, dificultades que entraña el proceso de consulta
algunos fondos patrimoniales han ido aparecien- en las entidades de gestión previstas en la Ley de
do a través de la red. Nos ocupamos de lo que en Propiedad Intelectual, toda vez que Egeda, por
este sentido está llevando a cabo Filmoteca Es- ejemplo, cobra un canon por consulta unitaria
pañola. al tiempo que es parte interesada en el registro
Algunas iniciativas en el ámbito de la Unión Eu- de obras a las que pueda atribuirse el estatuto de
ropea han ayudado a desarrollar plataformas huérfanas.
en red para acceder a contenidos. El proyec- La popularidad de YouTube lo ha convertido en
to EFG1914 [http://europeanfilmgateway.eu/ un escaparate para la difusión por parte de los
about_efg/contributing_archives] supuso un archivos. Aunque algunas instituciones han op-
paso importante a la hora de estandarizar la di- tado por alojar sus vídeos de acceso público en
gitalización y catalogación de los archivos cine- servidores propios o en otras plataformas en las
Secuencias. Revista de Historia del Cine (ISSN 1134-6795 y e-ISSN 2529-9913) es una publicación
auspiciada por la Universidad Autónoma de Madrid, editada de forma ininterrumpida desde 1994
y publica dos números al año. Las bases de datos en las que está incluida Secuencias son: Directory of
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Artículos
Las plataformas y la creación de contenidos
mainstream: Una aproximación a las nuevas
«ficciones convergentes»
Laura Pousa