Cedula 9
Cedula 9
Cedula 9
Art. 2407.
La hipoteca es un derecho de prenda, constituido sobre inmuebles que no dejan por eso
de permanecer en poder del deudor.
Toda la doctrina a señalado que esta es una definición poco feliz, Somarriba
señala: “Es un derecho real que recae sobre un inmueble que permaneciendo
en poder del constituyente da derecho al acreedor para perseguirlo en
manos de quien se encuentre y de pagarse preferente con el producto de la
subasta”.
Salvo acuerdo unánime de las partes, los comuneros que durante el juicio divisorio
reciban bienes en adjudicación, por un valor que exceda del ochenta por ciento de lo
que les corresponda percibir, pagarán de contado dicho exceso. La fijación provisional
de éste se hará prudencialmente por el partidor.
Art. 662 del CPC
Podrá reemplazarse esta hipoteca por otra caución suficiente calificada por el partidor.
Art. 2414.
No podrá constituir hipoteca sobre sus bienes, sino la persona que sea capaz de
enajenarlos, y con los requisitos necesarios para su enajenación.
Podrá ser una misma la escritura pública de la hipoteca, y la del contrato a que accede.
1º. El nombre, apellido y domicilio del acreedor, y su profesión, si tuviere alguna, y las
mismas designaciones relativamente al deudor, y a los que como apoderados o
representantes legales del uno o del otro requieran la inscripción.
Las personas jurídicas serán designadas por su denominación legal o popular, y por el
lugar de su establecimiento; y se extenderá a sus personeros lo que se dice de los
apoderados o representantes legales en el inciso anterior.
2º. La fecha y la naturaleza del contrato a que accede la hipoteca, y el archivo en que
se encuentra.
3º. La situación de la finca hipotecada y sus linderos. Si la finca hipotecada fuere rural
se expresará la provincia y la comuna a que pertenezca, y si perteneciera Nº 28 a
varias, todas ellas.
Art. 2413.
La hipoteca podrá otorgarse bajo cualquiera condición, y desde o hasta cierto día.
Otorgada bajo condición suspensiva o desde día cierto, no valdrá sino desde que se
cumpla la condición o desde que llegue el día; pero cumplida la condición o llegado el
día, será su fecha la misma de la inscripción.
Podrá asimismo otorgarse en cualquier tiempo antes o después de los contratos a que
acceda, y correrá desde que se inscriba.
Artículo 2420.
La hipoteca constituida sobre bienes raíces afecta los muebles que por accesión a ellos
se reputan inmuebles según el artículo 570, pero deja de afectarlos desde que
pertenecen a terceros.
Artículo 2421.
La hipoteca se extiende a todos los aumentos y mejoras que reciba la cosa hipotecada.
Artículo 2422.
Artículo 2423.
Con respecto al dueño de inmueble, hay que distinguir dos periodos: antes
de que se ejerza la acción hipotecaria y después de que se ejerció.
Art. 2427.
El acreedor hipotecario tiene para hacerse pagar sobre las cosas hipotecadas los
mismos derechos que el acreedor prendario sobre la prenda.
Art. 2415.
Para hacer efectivo el pago de la hipoteca, cuando la finca gravada se posea por otro
que el deudor personal, se notificará previamente al poseedor, señalándole un plazo de
diez días para que pague la deuda o abandone ante el juzgado la propiedad
hipotecada.
Esta acción se someterá a las reglas del juicio ordinario o a las del ejecutivo, según sea
la calidad del título en que se funde, procediéndose contra el poseedor en los mismos
términos en que podría hacerse contra el deudor personal.
La acción del censualista sobre la finca acensuada se rige por las disposiciones del
presente Título.
El tercer poseedor de la finca hipotecada no tiene beneficio de excusión.
La hipoteca se puede extinguir por vía accesoria, el pago, esto quiere decir
que el pago lo hace un tercero la hipoteca va a subsistir, por la dación en
pago o también por la novación, decimos vía accesoria que si se extingue la
obligación principal se va a extinguir también la obligación accesoria; la
hipoteca se puede extinguir por vía principal, por vencimiento de plazo,
presolucion del derecho del constituyente, por prorroga del plazo, por la
confusión, por expropiación, por la renuncia, por la purga de la hipoteca (art.
2428).
Art. 2428.
Sin embargo, esta disposición no tendrá lugar contra el tercero que haya adquirido la
finca hipotecada en pública subasta, ordenada por el juez.
Mas para que esta excepción surta efecto a favor del tercero deberá hacerse la subasta
con citación personal, en el término de emplazamiento, de los acreedores que tengan
constituidas hipotecas sobre la misma finca; los cuales serán cubiertos sobre el precio
del remate en el orden que corresponda.
Por el contrato de empeño o prenda se entrega una cosa mueble a un acreedor para la
seguridad de su crédito.
Las obligaciones que tiene el acreedor, él no puede usar la cosa, ya que tiene
las mismas limitaciones que tiene el depósito, debe cuidar y conservar como
buen padre de familia y debe restituirla si es satisfecho el crédito.
Parte 2 cedula 9
La mujer casada, que desempeñe algún empleo o que ejerza una profesión, oficio o
industria, separados de los de su marido, se considerará separada de bienes respecto
del ejercicio de ese empleo, oficio, profesión o industria y de lo que en ellos obtenga, no
obstante cualquiera estipulación en contrario; pero si fuere menor de dieciocho años,
necesitará autorización judicial, con conocimiento de causa, para gravar y enajenar los
bienes raíces.
Incumbe a la mujer acreditar, tanto respecto del marido como de terceros, el origen y
dominio de los bienes adquiridos en conformidad a este artículo. Para este efecto podrá
servirse de todos los medios de prueba establecidos por la ley.
Los terceros que contraten con la mujer quedarán a cubierto de toda reclamación que
pudieren interponer ella o el marido, sus herederos o cesionarios, fundada en la
circunstancia de haber obrado la mujer fuera de los términos del presente artículo,
siempre que, no tratándose de bienes comprendidos en los artículos 1754 y 1755, se
haya acreditado por la mujer, mediante instrumentos públicos o privados, a los que se
hará referencia en el instrumento que se otorgue al efecto, que ejerce o ha ejercido un
empleo, oficio, profesión o industria separados de los de su marido.
Los acreedores del marido no tendrán acción sobre los bienes que la mujer administre
en virtud de este artículo, a menos que probaren que el contrato celebrado por él cedió
en utilidad de la mujer o de la familia común.
Disuelta la sociedad conyugal, los bienes a que este artículo se refiere entrarán en la
partición de los gananciales; a menos que la mujer o sus herederos renunciaren a estos
últimos, en cuyo caso el marido no responderá por las obligaciones contraídas por la
mujer en su administración separada.
Art. 1764.
Una vez que se pone termino a la Sociedad Conyugal esta se puede liquidar.
La liquidación tiene diversos pasos se debe realizar un inventario solemne de
los bienes, luego tasar los bienes, luego formarse el acervo común y el retiro
de los bienes propios, luego se liquidan las recompensas, luego se hace la
partición de los gananciales y luego se divide el pasivo. Los gananciales de la
Sociedad Conyugal se reparten en partes iguales entre el marido y la mujer,
sin embargo, la mujer puede renunciar a los gananciales ya sea al momento
de la liquidación de la Sociedad Conyugal o también en las capitulaciones
matrimoniales que se celebran antes de la celebración del matrimonio por
escritura pública. La doctrina dice que renunciar a los gananciales es un
beneficio, ya que la mujer si renuncia no va a tener que responder por las
deudas sociales bajo ninguna circunstancia, el marido también puede
renunciar a los gananciales, pero produce el efecto de no pagar las deudas
sociales, ya que el administraba la sociedad conyugal.
La renuncia de los gananciales, art. 1781.
Art. 1781.