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MAR Filosofia Ministerial

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SEMINARIO AGUAS DE REPOSO

Filosofía Ministerial
 
Propósito del Curso
• Este curso tiene como propósito:
Definir, una Filosofía Ministerial, guiar al Estudiante a
la reflexión acerca de los principios de La Escritura, para
después pueda retomar conceptos de una Filosofía
Ministerial que sea pertinente al contexto en que se
encuentra y por lo tanto, modelar la Gracia del Evangelio
a otros, de formas creativas y que atiendan al poder de
Cristo.
Resumen del Contenido del Curso

• La Filosofía Ministerial está presente dentro del ministerio, pero tristemente poco
reflexionada.
 
• En este curso se llegará a una definición, análisis de sus elementos y acercarle a
un proceso de elaboración de su propia definición de diseño ministerial, dentro
del contexto de la plantación y renovación de iglesias.
 
• Iremos desde la definición hasta la elaboración detallada de una Filosofía
Ministerial seria a la manera del Espíritu Santo.
Objetivos del Curso
 
• 1. Cada estudiante definirá, reflexionará y delimitará su propia Filosofía
Ministerial.

• 2. Cada estudiante Identificará los principios bíblicos como parte integral de una
Filosofía de Ministerio local adecuada a la visión y modelo que Dios le ha dado.

• 3. El estudiante aprenderá a elaborar una Filosofía Ministerial acorde a la


comunidad y sociedad en que le toca actuar y tendrá los elementos esenciales
para enseñar a otros cómo hacerla, siguiendo el lineamiento del Señor Jesús de
hacer discípulos y no solo conversos.
1. Modalidad Presencial:

• Cada Estudiante deberá presentar su filosofía de


ministerio por escrito, y enviarlo por correo al profesor
para su evaluación antes de la segunda conferencia.
Beneficios del Curso

• Cada estudiante no solo aprenderá a reflexionar


conceptualmente sobre la Filosofía Ministerial, sino que
será capaz de elaborar su propia ayuda para cumplir con
su ministerio de manera más eficaz lo cual renovará
sustancialmente su manera de ver; potencializará
intelectualmente y enfocará espiritualmente su labor
ministerial.
Lección Uno
¿Qué es la Filosofía Ministerial?
La Filosofía Ministerial es el ADN del ministerio cristiano. Quien dirige o desarrolla un
ministerio emplea: acciones, actividades, discursos, decisiones éticas. etc. Lo que hace,
encuentra una justificación en este razonamiento filosófico. De ahí que muchas de las
distorsiones, desviaciones y hasta herejías tengan raíz en la ausencia de la Filosofía
Ministerial.
Tres definiciones importantes:
• Pbro. Víctor González , Presidente del Presbiterio del Noreste definió: “Es el conjunto de
principios y valores que guían el ministerio.”
• Rev. Rubén Responda Muñoz, Pastor de la Iglesia Metodista en los Ángeles, EE. UU., definió:
“Una filosofía bíblica de ministerio es un conjunto de principios bíblicos NO NEGOCIABLES que
guían todas las elecciones y decisiones en el ministerio.”
• Pbro. Enrique Sosa, Pastor de la Iglesia Comunitaria de Tampico afirma: “Una Filosofía de
Ministerio la componen el conjunto de valores normativos emanados de la Sagrada Escritura
que permiten regular, clasificar, alinear y administrar los datos que vamos incorporando a
nuestra reflexión, nuestra fe y nuestra acción; en el papel que desempeñamos en el servicio
para el avance del Reino de Dios.”
DEFINICIÓN

• Una Filosofía Ministerial incluye valores, principios y normas


bíblicas que dirigen, motivan y dan dirección al ministerio y por
lo tanto, no son negociables, ni intercambiables y nos permiten
planificar, supervisar y establecer claramente objetivos a corto,
mediano y largo plazo, y por lo tanto es la pauta que nos
permite evaluar el ministerio no solo con base a resultados
sino la búsqueda de dar frutos.
Importancia de Establecer Una Filosofía Ministerial.
• Debemos atender aquí dos asuntos centrales, los beneficios de su conocimiento y los
peligros de la omisión.
• BENEFICIOS
• Enfoque. En el trabajo de plantar o pastorear una nueva iglesia, hay una gran diversidad
de distractores que “desenfocan” al Pastor o Plantador de sus objetivos. Por ejemplo,
visitar a las familias de una Iglesia establecida es algo que muchas congregaciones
esperan que “haga el pastor”, ahora bien, no estoy afirmando que el Pastor no lo haga, lo
que quiero enfatizar es que, si el Pastor está debidamente enfocado, éste utilizará el
ministerio de la visitación para entrenar y habilitar a otros para que él pueda dedicar más
tiempo a otros asuntos que requieran su personal atención.
• Otro ejemplo común es que un plantador empiece a llenarse de activismo para “justificar”
el que no tenga una vida de Iglesia aún, es muy común que los plantadores se sientan
frustrados porque no predican cada domingo, o no hay aún una estructura eclesiástica
que los apoye, pero si esta adecuadamente enfocado, no, se apresurará a abrir nuevas
actividades que sólo engrosen su agenda, en vez de tomar tiempo para hacer lo que debe.
Una Filosofía Ministerial adecuadamente reflexionada ayudará a enfocarnos en lo
importante y no sólo hacer lo urgente.
Planificación.
• Una Filosofía de Ministerio una vez que ha sido bien reflexionada,
ayudará a planificar cuidadosamente los pasos a seguir, podremos
establecer objetivos a corto, a mediano y a largo plazo.
• Esto le permitirá prever fallas futuras o dar marcha y contra marcha
para ir corrigiendo errores y perfeccionar así su Filosofía Ministerial
para las nuevas generaciones que le sucedan tras su salida a otro
campo o partida.
• En lo secular y con la vista de un país, sería la Filosofía Ministerial,
como la “Política de Estado”; si fuera una empresa como el “Plan
Maestro”.
Pertinencia.
• Quiero utilizar este término para situar el contexto. El Diccionario de la Lengua
Española la define: “Cualidad de lo que es pertinente. Pertinente…Que es
adecuado u oportuno en un momento o una ocasión determinados…” Es decir,
una Filosofía Ministerial permite adecuar de modo oportuno el contexto en
donde se ministre.
• Al elaborar cuidadosamente nuestra Filosofía Ministerial aprenderemos a leer y
observar los “signos o señales de los tiempos” y entonces nuestra predicación
será pertinente.
• Cayuela, N. L. Diccionario general de la lengua española.
Evaluación.
• Evaluar es algo que siempre es difícil, sin embargo, cuando nuestra Filosofía de
Ministerio está bien definida, la evaluación irá mucho más allá de los simples
resultados y trascenderá el tiempo.
• Uno de los problemas que tanto pastores como plantadores tienen es la urgencia de
resultados inmediatos, urgencia que desde luego viene generalmente de dos fuentes:
• a) La primera es desde luego de la misma presión emocional y espiritual que el pastor
o plantador asume por los resultados, la creencia falsa en que los “números son la
prueba de Dios está respaldando tu ministerio”, no hay duda que esto es una falsa
creencia que muchas veces domina el corazón del siervo de Dios y le desvía de su
enfoque primario.
• Los resultados numéricos, no son la clave del crecimiento de la Iglesia, sino la
consolidación de cada creyente que va creciendo y madurando espiritual e
intelectualmente a la medida y a la plenitud de Cristo. Ya que el mandato del Señor
Jesús es clave y muy claro, Él ordenó que hagamos discípulos, – renacidos, y no
meramente creyentes – conversos.
• b) La segunda fuente es tan peligrosa como la primera, pero es
falsamente disfrazada de piedad, se argumenta: “No evaluamos según
resultados, sino según la fidelidad” ¡Estoy de acuerdo! el asunto central
es ¿a quién somos fieles? No hay duda que si la fidelidad está
correctamente centrada en una Filosofía Ministerial bíblica,
reflexionada y contextualmente pertinente, entonces nuestra fidelidad
a ésta, nos llevará a una evaluación seria y responsable, pero si sólo se
argumenta que somos fieles a la doctrina, podría ser un pretexto para
esconder nuestros ídolos del corazón, que puede llegar a ser el pastor
principal – el asunto es que esta fidelidad al pastor puede estar dada
inclusive si está en pecado, a justificarle y permitir que continúe
predicando, sin disciplinarse o apartarse por un tiempo del ministerio,
hasta tanto sea restaurado por sus pares, tanto como pueden ser jefes
naturales o de un Consejo pastoral de la ciudad al cual adhiere.
Peligros
• Es claro que los peligros están directamente conectados con los beneficios
descritos, es decir, si no hay una Filosofía Ministerial se corre el peligro de:
Desenfoque.
• En el proceso de plantar una Iglesia o llegar a una Iglesia establecida se cae
fácilmente en la tentación de “hacer” muchas cosas para Dios y no hacer lo
que Dios nos ha pedido que hagamos.
• Es muy fácil ver a los plantadores y pastores agotados y agobiados por tantas
cosas por hacer, pero a la vez ver la frustración por la falta de resultados, si
ellos no saben a dónde van, entonces la comunidad tampoco lo sabrá. Hacen
cosas, pero no construyen; van para adelante, pero no llegan a ningún lado;
corren a una meta inexistente; su fe es una ilusión y no una visión.
• La Filosofía Ministerial le permitirá asentar bases sólidas, trazar el rumbo,
allanar el camino y alcanzar la meta y proseguir el blanco.
Hacerlo con el Corazón – sentir.

• Se refiere desde luego a la falta de planificación que


resulta en una serie de improvisaciones que a la larga
son desastrosas para el ministerio y la familia del pastor
o plantador.
• Lamentablemente esto suele ser tan desolador para las
personas involucradas, como que explotó una bomba en
el lugar. Solo quedan ruinas, sangre, heridas y muertes.
No Ser Contextuales.
• Es obvio que el contexto se mueve continuamente a nuestro alrededor y que la iglesia
no siempre está respondiendo bíblicamente a estos cambios. Muchas Iglesias
sucumben a la tentación del contexto y en aras de parecer “a la moda” ponen en riesgo
el Evangelio.
• Esto se da porque no hay una Filosofía de Ministerio Bíblica correctamente reflexionada
y enseñada. Se debe tener cuidado porque el redactar visión, misión y valores no es lo
necesario para no caer en la tentación de la contextualización. Es decir, ser como Caín,
mirar que hace el otro, no lo que Dios quiere y ofrecer verdura o humo extraño, porque
hago lo que está de moda o me gustó cuando lo vi en una iglesia.
• Hoy los ministros y pastores laicos no visten pulcramente de saco y corbata; se visten
de elegante sport, para estar frente a Dios y ministrarle; porque dice que Dios no ve la
ropa, sin embargo Dios dijo cómo deben vestir los que le ministren, lo mas serio y
pulcro. Pero vea que notable; si van a ver a alguien importante en la tierra y le dicen
que vista saco y corbata lo hace sin protesto. Se visten serios y pulcros para un ser
humano y van así nomás, de jean, remera o descamisado, es decir, desfachatadamente
vestido a Ministrar a Dios desde el pulpito y poner frente al pueblo e hijos de Dios.
Pretextar en vez de evaluar.
• “La iglesia no es una empresa…” es una de las muchas voces que escuchamos utilizadas para
pretextar la falta de evaluación. Es cierto, la iglesia no es una empresa en sí misma, pero es el
negocio de Dios el Padre, y los pastores somos sus mayordomos principales y los ministros,
nuestros consiervos. Si de mayordomos se trata, nos indica que somos administradores. La iglesia
no es una empresa, pero se debe cuidar de ella y administrar sus recursos humanos y financieros
como si lo fuera.
• Todo ello al tener una Filosofía Ministerial no se perderá de vista que la Iglesia es el cuerpo real y
viviente de Cristo; un organismo vivo, que se mueve y se organiza bajo los estándares de La
Escritura y estos una y otra vez, nos dirigen a ser evaluados en el Evangelio. Las iglesias locales
pueden pasar años siendo ineficientes y poco relevantes a su contexto, aunque son “fieles al
mensaje doctrinal”. El problema no es la sana doctrina, el problema es no contar con una
Filosofía Ministerial adecuadamente contextualizada, que permita hacer cambios en las formas
una y otra vez, en tanto el fondo se sigue proclamando. Por la misma Biblia nos enseña que es:
“Mejor es el fin del negocio que su principio....” (Eclesiastés 7:8a)
• Muchas veces las congregaciones, los pastores y los plantadores “espiritualizan” su labor
ministerial al grado que caen en la tentación irreverente de no evaluar su actuación, ni cuestionar
las formas y metodologías que utilizan, ignorando que no están dando la gloria a Dios. Esto
ocurre porque se hacen místicos y deja de lado la verdadera espiritualidad, fruto del obrar por y
en el Espíritu Santo en la vida de la Iglesia local.
Características.
• Hemos delimitado estas a cuatro características esenciales y no dudo que, en el proceso de reflexión, los
estudiantes contribuirán y complementarán las mismas.
• Cuando hablamos de características, nos referimos a aquellas cosas únicas que hacen distintiva una
declaración ministerial, y por lo tanto, permiten que sea efectiva y eficaz.
1- Bíblica.
Una Filosofía Ministerial para que se precie de tal, debe ser bíblica, arraigada profundamente en La Escritura
como única norma de fe y conducta. Estoy seguro que esta declaración puede parecer obvia, pero no lo es en
la práctica ministerial de muchos, se sucumbe a los embates del marketing evangélico que cada día nos
presenta una serie de perspectivas como el último descubriendo o “revelación” que hará que nuestro
ministerio se revolucione.
• Una vez, la clave es ser “Una Iglesia Con Propósito”, en otra ocasión, “Grupos Pequeños De Casas”, otras “El
Gobierno de los 12 o el G12”, también: “La Predicación de la Autoayuda”, otras el “Coaching”, etc.
• Éste modus operandi hemos visto que no son las respuestas, pero después se habla de una u otra estrategia
nueva y el problema central no está precisamente en las diversas estrategias que existen, sino en que no hay
un proceso bíblico teológico que nos permite distinguir, filtrar, depurar y adaptar a nuestros valores y
prácticas ministeriales dichas estrategias.
• Tim Keller en su libro “Iglesia Centrada” hace un aporte significativo. En el capítulo 2 trataremos
abundantemente este asunto y presentaremos no sólo evidencia bíblica, sino también una estructura útil y
de modelo.
2- Contextual.
Una vez hecho el trabajo “exegético” que permita establecer cuáles son los principios bíblicos
que nos dan identidad, también y a la vez debemos estudiar nuestro contexto. Conocer a las
personas que queremos alcanzar, aprender su cultura y descubrir las maneras en la que la
presentación del Evangelio puede ser relevante para ellos, es una de las tareas que generalmente
hemos dejado a un lado.
Debemos reconocer la negligencia como iglesia al no tomar en cuenta esto. A Karl Barth, el
teólogo más sobresaliente del siglo XX, se le atribuye popularmente que afirmaba que se debe
tener la Biblia en una mano y el periódico en la otra para hablar del Evangelio.
Explicaremos en un capítulo adelante como se hace una demografía y como utilizar los datos de
la misma para encontrar oportunidades ministeriales que sean relevantes, creativas y
contextuales sin poner en riesgo la integridad del Evangelio, debemos admitir que generalmente
“espiritualizamos” la promesa de que su “Palabra nunca volverá vacía” y que nuestra
misionología se vuelve irrelevante al enviar misioneros y plantadores que con gran entusiasmo se
dedican al servicio; predican el Evangelio, pero al final de un periodo de tiempo se sienten
frustrados, fracasados, desconcertados y sin resultados evidentes gracias a una Filosofía
Ministerial que no tomó en cuenta el contexto y las habilidades del plantador para dicho
contexto.
• No se puede llevar el mismo molde a todos lados, si tenemos una Filosofía
Ministerial que enseña a tomar en cuenta el contexto y las habilidades del
plantador para dicho contexto, que enseña cómo realizar una previa evaluación
de la zona y de su gente, donde se basa en ser parte del Consejo Pastoral local,
como la estrategia única de Dios para alcanzar al mundo, es decir “para que el
mundo crea”, la cual el Señor Jesús oró al Padre, en una relación de unidad y
trabajo en equipo, no solo logrará su objetivo, sino que bendecirá al resto de las
iglesias locales, con frutos genuinos.
• Podemos decir que con una Filosofía Ministerial Bíblica, la labor de evangelizar y
formar discípulos de cada creyente, no recaerá en el vicio de muchos ministerios
nuevo, que pescan en la pecera del vecino y no en el mar, es decir, en el mundo.
“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.”
3- Reflexionada.

• Este tercer elemento es esencial para el plantador, pastor y luego para el equipo
ministerial de liderazgo. Aquí estamos hablando de revisar nuestra reflexión
bíblica y nuestros resultados del estudio del contexto a fin de tener un puente
“hermenéutico” claro, visible, que nos permita empezar a “ver el sueño de Dios”,
con lo que Dios quiere hacer a través de nosotros en el lugar determinado al que
hemos sido llamados y enviados.
• Esta reflexión es un proceso ligado profundamente al siguiente punto de poner
por escrito esa visión con responsabilidad porque es el sueño de Dios y nosotros
seremos los ejecutores físicos.
• Voy a ser más específico; Es aprender a ver la “voluntad de Dios”, aquí la oración
se vuelve fundamental, sin ella caminamos como a ciegas en un valle tenebroso,
así que se hay que esperar la guía por la obra del Espíritu Santo a través de este
medio de gracia que nos permita ver lo que Él ve.
4- Escrita.

• Esto es esencial, omitirlo es como tener un hijo, pagar la maternidad y todos los
servicios médicos, arreglar un cuarto en la casa y amueblarlo adecuadamente,
pero que este niño no tenga nombre no apellido; seria en verdad paradójico.
• Con tristeza debo reconocer que es lo que ocurre en muchas de nuestras iglesias
y en muchos proyectos de plantación que fracasan terriblemente porque no se ha
escrito o sea, detallado la visión.
• Escribir nuestra visión, misión y valores; identificar el diseño estratégico de Dios,
para entonces planificar y delimitar objetivos y metas, pondrá a nuestra Filosofía
Ministerial en el camino correcto.
• Recuerden que una visión sin dirección y oración es mera ilusión
5- Comunicada.
• Por último y no es menos importante que cada uno de los pasos anteriores es, comunicar
con anterioridad, es decir, que toda la congregación, si es una Iglesia junto con sus líderes,
entiendan correctamente todo lo que se quiere decir y hacer.
• Esto requiere creatividad y echar mano de una múltiple variedad de recursos que
actualmente casi todo mundo tiene a su disposición. Por ejemplo, cuando un plantador ha
hecho correctamente cada uno de los pasos y está reclutando a su grupo o equipo,
presentar correctamente esta Filosofía Ministerial ayudará a aquellos que son atraídos al
proyecto de plantación de iglesias a tomar una decisión pensada no en el líder, no en los
programas, no en el estilo de música o en la diversificación de ministerios, sino en una
filosofía bíblica de ministerio enfocada a un sector de personas que se quiere alcanzar.
Comunicar correctamente evitará al Pastor y Plantador, grandes dolores de cabeza
innecesarios, pero muy comunes en las iglesias y proyectos de plantación de iglesias. La
gente tóxica es atraída a nuevos proyectos y la falta de pericia del plantador generalmente
le lleva a apresurarse en su reclutamiento o a integrar a personas de este tipo en el afán de
tener resultados ya. Una Filosofía Ministerial no solo evitará esto, sino una comunicación
clara, asertiva y enfocada alejará a muchos de estos distractores.
Lección Dos
Elementos de Una Filosofía Ministerial
• 1. La Escritura Cuestionando Nuestro Marco Conceptual. El primer elemento para una
Filosofía Ministerial, como ya lo dijimos, es que sea Bíblica y, por lo tanto, debemos
cuestionar la acción, las palabras y los pensamientos con La Escritura. Este no es un
quehacer sencillo, requiere compromiso, poder de autocritica, disciplina y sobre todo
una dependencia en la obra del Espíritu Santo en nuestras propias vidas para
convencernos de cambiar, revaluar y cuestionar aquello que presuponemos como válido.
1. 1. Presuposiciones. “¿Qué es lo que Satanás está haciendo? Él ataca las presuposiciones.
¿Cuáles? Si Dios existe no está comunicando la verdad, invita a dudar de lo que Dios dijo
“olvídate lo que Dios dice” tú puedes interpretar la verdad. La razón humana es autónoma.
Tú puedes determinar lo que está bien o mal. El énfasis recae en la mente, porque se trata
de nuestras creencias y de nuestros pensamientos. Esto aplica a cada área de nuestra vida,
entonces aplica a nuestra mente. El estado caído de nuestra mente, es alcanzado también
por el Evangelio. Ser justificados implica ser justificado aún en el estado caído de la mente.
‘Gracias a que esta área de nuestra vida es justificada, ahora nos podemos esforzar por
interpretar su Palabra.’
Así que debemos identificar que nuestras presuposiciones son genuinamente arraigadas en La Escritura
y en cuáles hemos creído que no son una mentira o una media verdad, que no corresponde con la
verdad de Dios.
“Muchas veces somos influenciados por ideas equivocadas mucho más de lo imaginado y se filtran en la
manera mas sutil de ver las cosas, en la toma de decisiones”.
Primera postura:
• El conocimiento es independiente de Dios. El humanismo – secular. La mayoría de la gente supone que
para comprender al mundo debemos investigarlo con sentidos. Funciona hasta cierto punto.
• Suponemos que el sol saldrá igual que ayer y lo ha sucedido por años. Se han logrado grandes avances
en la producción de la medicina, pero decimos que funciona hasta cierto punto a lo que podemos ver
o sentir. Este enfoque supone que nosotros estamos en control de la totalidad del proceso de adquirir
conocimientos.
• Es decir, estamos en el centro del universo y podemos adquirir el conocimiento y creemos que
podemos adquirir la mayoría de conocimientos acerca de la naturaleza del universo. Podemos
describir en términos generales esta posición como un humanismo Ateo. Es ateo porque… implica que
Dios no existe y está descartado. Esta posición es humanista porque… considera al hombre como el
centro y él puede decidir qué es verdad y qué no lo es. Supone que solo la mente humana es el juez
final de lo verdadero o no. El ateo elimina el concepto de Dios, como algo irrelevante, y pone al
hombre en el centro.
• Todas estas ideas cobran fuerza en la época de la Ilustración. La Ilustración situó a la
razón y no a Dios como el centro.
¿Cuáles creen que son algunas consecuencias de estas ideas?
a) Si es que existe, Dios deja de ser relevante;
b) La razón se vuelve más importante que la Revelación;
c) La revelación es aceptada solamente mientras esté de acuerdo con la razón.
Segunda postura:
• El conocimiento es parcialmente independiente de Dios:
• Humanismo - teísta. Son teístas porque… creen que existe un Dios. Algunos se lo
pueden imaginar medio cristiano, pero otros creen en varios dioses. Son humanistas
porque… considera que el hombre es capaz de controlar su proceso de obtención de
conocimientos.
• En la medida en que el hombre posee realmente el control, es independiente de Dios. No
se ocupa a Dios para todo, porque de la naturaleza podemos obtener conocimientos, el
hombre descubre, organiza y forma una perspectiva.
• Opinan que existe un ámbito de verdad que no podemos observar de manera
directa. El humanista teísta considera que este conocimiento (por revelación)
llena huecos existentes en el conocimiento obtenido de manera natural.
• ¿Cuáles son las consecuencias de esta postura?
a) Dios es visto como un especialista que puede añadir grandes conocimientos a
los ya conocidos;  
b) Dios queda sujeto a leyes que ya conocemos. Por lo tanto, Dios no puede
decirnos algo que contradiga la razón;
c) Dicen la Biblia no aplica para la vida real;
d) Cuando separamos nuestro cristianismo de las demás cosas. Dios es irrelevante
en los negocios, la ciencia, etc.
Tercera postura.
• El conocimiento depende de Dios: El Teísmo cristiano. Cada Palabra de Dios al
hombre interpreta el significado de la realidad (Génesis 1:28-30).
• Dios habla a Adán y le explica, como es la vida en el huerto y Adán no conocía
todas las cosas. Dios le explica yo soy Dios y tu mi creación.
• ¿Cuáles son dos diferencias fundamentales con el humanismo-teísta?  
• Primero, el teísmo cristiano reconoce que aún antes de que el pecado llegara al
mundo el hombre dependía de la Palabra de Dios para interpretar las cosas
correctamente. El no podía hacerlo sin la revelación de Dios, esto no significa que
Adán era como un bebé recién nacido, por eso primero fue instruido por Dios y
luego Dios le puso para que haga su tarea en el Edén y trajo los animales para que
vea cómo se los debe llamar.
• El teísmo cristiano reconoce que Dios tenía que hablar aún antes de la caída para
que el hombre pudiera entender que estaba mal comer del árbol prohibido.
• La segunda diferencia es que el humanismo teísta supone que el proceso por el cual el
hombre obtiene conocimiento se ve afectado por el pecado. Significa que las relaciones
con Dios están rotas y esta ruptura afecta todas las demás relaciones.
• El hombre por su naturaleza pecaminosa no puede admitir que Dios es el Señor y
reinterpreta cada cosa para darle un significado a su presuposición, la mente se ha vuelto
insensata y rebelde (Romanos 1:18-25).
• Si la pecaminosidad del hombre no le permite reconocer conscientemente la verdad ¿qué
esperanzas puede haber? La Biblia nos presenta como esperanza a tal situación: el
Evangelio.
• Dios entrega una revelación especial de sí mismo y trabaja en nuestra voluntad rebelde a
través de Su Espíritu Santo, especialmente a Cristo y por lo tanto, nos convence de la
verdad de Cristo. Esta renovación no será completada hasta la venida de Cristo y habrá
lucha y tensión. “Conocemos de la manera en la que Dios las interpreta.”
• Esta tercera postura expone Jiménez, es precisamente la que se debe reconocer como
válida para una correcta lectura de La Escritura y por consecuente, dará presuposiciones
centradas en el Evangelio que permitirán evadir al legalismo o a la irreligión que
generalmente lucha por ocupar un lugar en nuestra reflexión.
• La conclusión central es, a partir de este acercamiento: Que Dios existe – que Hay
Dios, es verdadero y Él se auto-revela a nosotros y deja a nuestra disposición La
Sagrada Escritura que por su origen son divinas, inerrantes, infalibles y única
norma de fe y conducta.  
• Este Dios se revela como un Dios Trino y Uno, Solo Soberano, que establece un
plan redentor para el hombre y en Cristo Jesús cumple su promesa a nosotros y
por lo tanto, toda redención es solamente por la obra vicaria y expiatoria de Jesús
y no hay ningún otro camino a la redención.
• Él se revela como el Dios más allá de la historia y que ha preparado para nosotros
un lugar junto a Él en la eternidad, el Evangelio es la norma que nos ayuda a
encontrar respuesta a los conflictos del hombre.
Tres Ejes Centrales Del Quehacer Teológico.
• Como creyentes reformados creemos que la obra de Cristo es central en nuestra tarea de
hacer teología. Hay desde mi perspectiva tres ejes en la cosmovisión reformada, que permiten
formular con claridad una Filosofía Ministerial y en verdad, cuestione, direccione y reforme
presuposiciones falsas y nos permita filtrar adecuadamente en La Escritura, el mensaje
redentor de Cristo a fin de ser presentado en potencia y contexto.
• La Teología del Pacto. El tema del Pacto es central en la Escritura, ya que está estructurada por
medio de este concepto bíblico-teológico. El Pacto entreteje los temas tales como Dios,
Hombre, Cristología, La Iglesia, La Redención y las últimas cosas. Si el Pacto explica la relación
vertical entre Dios y el hombre, también dimensiona las relaciones horizontales que el hombre
tiene con la creación y por lo tanto, la manera en la que Cristo y la proclamación del Evangelio
deben ser expresados en medio de nuestro contexto.
• La Cristología. Toda la Escritura habla de la obra redentora de Cristo. Entender el Pacto de
Gracia, habilita definitivamente para aprender a ver a Cristo anunciado a través de todo el
Antiguo Testamento y como en el Nuevo, Él es el cumplimiento de todas las promesas. La
enseñanza bíblica del Pacto presenta a Cristo y su obra como el punto culminante de la
revelación de Dios. Así que, si pretendemos que nuestra Filosofía Ministerial sea en verdad un
reflejo de la obra de Cristo, ésta debe apuntar a la misma y desarrollar las implicaciones de su
obra en nuestro ministerio.
• La Centralidad del Evangelio. Tim Keller define el Evangelio como: “El evangelio
es: Yo soy aceptado por Dios a través de Cristo, por lo tanto, obedezco a Dios.” Es
en el Evangelio en donde la doctrina del Pacto y la Cristología encuentran el
sentido y rumbo redentor.
• . En el Evangelio la vida encuentra la conexión y las dimensiones transforma-doras
que permiten que la vida de Cristo a través de Su Iglesia sea liberada a fin de
sazonar al mundo –con sal, e iluminarlo diariamente con gracia –la luz verdadera.
• Estos tres elementos son esenciales e indispensables en nuestra reflexión bíblica-
teológica, ver como estos están desarrollados y conectados intrínseca-mente
unos con otros, nos confronta, pero a la vez nos reta a ver nuevas dimensiones
antes desapercibidas ante la falta de reflexión.
• Contexto. Aquí versa de cultura. El diccionario Hispano Americano de la Misión
define cultura como: “Es la suma total integrada de rasgos de comportamiento
aprendidos, que caracterizan a los miembros de una sociedad. Es la manera total de
la vida de un pueblo”.
• Según E.B. Taylor, la cultura está formada por un conjunto complejo que comprende
los conocimientos, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y otras
capacidades adquiridas por el individuo en cuanto a los miembros de la sociedad.
• El vocablo indica el modo particular como, en un pueblo, las personas cultivan su
relación con la naturaleza, entre sí mismos y con Dios de modo que puedan llegar a
un nivel, verdadera y plenamente humano. “Es el estilo de vida común que
caracteriza a los diversos pueblos; por ello se habla de pluralidad de culturas.”
• Cuando nos acercamos a un nuevo campo misionero o queremos revitalizar una
Iglesia, consideramos la cultura donde estamos inmersos. Uno de los grandes
errores que las iglesias establecidas cometen es “encerrarse en ellas mismas o como
colonizando”- proponer nuestra propia cultura, y no poner atención a la cultura que
se pretende alcanzar y por esto se abre un abismo entre la subcultura cristiana que
dicha comunidad practica y la comunidad que está a su alrededor.
• Lamentablemente existen iglesias que se mueve generalmente a dos extremos
equivocados; primero, puede establecerse en un movimiento hacia el fariseísmo
o moralismo religioso, ser creyentes es una lista de cosas que se hacen y no se
hacen, tal vez esto correspondió acertadamente en algún momento de su historia
a la cultura para mostrar y modelar una cultura cristiana, el riesgo es evidente
que la iglesia se convierta en una isla a la cual solo los “elegidos pueden acceder”.
La iglesia pierde su eficacia contextual, es irrelevante a la cultura y deja de ser sal
y luz de la tierra.
• Por otro lado, en segundo término, otras iglesias se mueven al lado extremo,
tratan de asimilarse tanto a la cultura que ceden en los principios de evangelio al
punto de sólo pensar en cómo “agradar o satisfacer a su comunidad” y no siendo
en verdad una propuesta cultural centrada en principios bíblicos.
• Ambas opciones rayan definitivamente en sectarismo peligroso pues cuestionan y
vulneran las verdades fundamentales del Evangelio.
Demografía.

• Este elemento es concordante con el anterior y requiere investigación de campo.


En cada país de América Latina hay instituciones encargadas de hacer encuestas y
recuperar elementos de la sociedad como educación, economía, población,
vivienda, empleo, religión, etc. Aunado a esto se debe realizar una investigación
de campo que permita verificar por nuestra cuenta algunos datos demográficos y
obtener algunos datos significativos en relación a nuestra labor espiritual, entre
ello, un mapeo del mundo espiritual.
• No elaborar una demografía nos pone en desventaja estratégica ante una
sociedad postmoderna cambiante y desafía los paradigmas de nuestra fe
reformada.
Definición de Alcance.
• Esto lo debe hacer el Plantador con su equipo evangelizador o el Pastor con su equipo
ministerial o de ancianos. Esto requiere:
• 1. Entrenamiento. Es necesario que el Pastor o Plantador “no asuma” que los miembros de
su equipo entienden como él entiende. Si hemos hecho todo el trabajo descrito en el
capítulo 1 y explicamos a detalle más adelante, se debe, por lo tanto, dedicar el tiempo
suficiente para entrenar adecuadamente a cada una de las personas dentro de nuestro
equipo ministerial a fin de que comprendiendo la visión puedan sumarse, aportar y juntos
caminar hacia una sola dirección. Para clarificar este concepto, para que sea un equipo en
todo, nuestros colaboradores deben ver la visión que hemos visto, si ellos no ven la visión,
trabajaran pero no habrá una tarea eficiente; se fastidiarán, comenzarán a llegar tarde, a
faltar y terminaran renunciando. El problema no es de ellos, sino del pastor o del Plantador,
que no supo hacer ver la visión o eligió mal a sus miembros; no esperó en que Dios le señale
las personas y por en lo primero, no pidió que el Espíritu Santo revele la visión en el corazón
de ellos.
• Insisto, este entrenamiento debe ser a las personas claves que conforman el equipo, que si
están bíblicamente convencidas, servirá de mutua ayuda para empujar y llevar la visión con
otros, materializándola; pero que si no lo están, serán las primeras en poner obstáculos y
hasta hacerle abortar en la visión que Dios le ha dado.
Planificación Estratégica.

• Es decir, se requiere de reflexión y análisis para determinar lo pretendido y cómo


expresarlo de manera que muestra alteridad, empatía y refleje el Evangelio.
• Definir objetivos a corto, mediano y largo plazo que sean sencillamente factibles,
mesurables y evaluables es una tarea que requerirá de un esfuerzo intencional
• Existen por lo menos cuatro elementos de una Filosofía Ministerial que son:
• La Escrituras
• El Contexto
• La Demografía
• La Definición de Alcance.
Lección Tres
Principios Bíblico – Teológicos
• Teología del Pacto. Hemos afirmado que el Pacto de Gracia es la "columna vertebral", por
medio de la cual sostiene toda la historia de la salvación, –soteriología, por lo tanto, su
entendimiento correcto determinará implicaciones que afectarán positiva o negativamente el
ministerio de cualquier Pastor o Plantador.
• 1. Pacto de Redención. Es esencial para el entendimiento de la doctrina de la salvación
reconocer que la misma Escritura presenta la concepción clara de que la Trinidad pacta en
favor de nuestra redención.
• El Padre predestina, selecciona y designa a algunos escogidos para determinados propósitos
• El Verbo, el Hijo de Dios, Ejecuta El Plan Redentor del Padre –Se Encarna.
• Dios el Espíritu Santo. Jesús deja muy claro que Él debe ascender y regresar al Padre, pero
promete que a su partida vendrá el Consolador quien traerá iluminación al corazón de los
creyentes; fortaleza y hará de la redención la consumación a nuestro favor para que sea
efectiva y sellada en nuestras vidas. Es el Espíritu Santo quien convence de pecado, reprende
e instruye por medio de La Escritura a los creyentes, a fin de que el Pacto sea una realidad en
la vida de los hijos por el Hijo de Dios.
• El Pacto de Redención tiene implicaciones esenciales en la elaboración de nuestra
Filosofía Ministerial, ya que nos recuerda como Plantadores o Pastores que la
obra redentora y, por lo tanto, el crecimiento y extensión de su obra depende de
Su gobierno soberano y absoluto, somos solamente instrumentos en sus manos y
que una vez finalizado, deberemos dar cuenta de todo.
• 2 Pacto de Obras. El Pacto de obras o de las obras es un eslabón que debe ser claramente
entendido pues mucho de los errores no solo teológicos, sino de práctica ministerial está en su
entendimiento correcto. El hombre quedó totalmente incapacitado no solo para querer, sino
que ni siquiera puede, pues su inhabilitación le impide acercase a Dios. El hombre al fallar en el
cumplimiento del Pacto de Obras condenó como nuestro representante federal a toda la
humanidad, la cual caída y sin esperanza se esfuerza inútilmente por tratar de agradar o
merecer algo que solo es posible en la obra y por lo méritos de Cristo.
• . La humanidad Esta Caída.
• . Solo en Cristo es Posible la Restauración.
• El Pacto de las Obras nos recuerda que Dios ha provisto un plan eterno para que la redención
sea consumada a través de Cristo y no de nosotros, ya que estamos incapacitados por tener el
pecado adámico y los pecados propios o personales, justamente por esa herencia que nos lleva
a pecar.
3. Pacto de Gracia.

Implicaciones del Pacto de Gracia en la Plantación o Renovación de Iglesias. Así hay una
serie de implicaciones bíblicas teológicas dentro de una sana Filosofía Ministerial, pues si ésta
debe tener su fundamento en la promesa de Dios al hombre de redención, debe considerar
la manera en la que Dios ha decidido tratar con el hombre.
“Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y
vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Y
también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.”(Joel
2:28-29)
• Así que en la Plantación o Renovación de iglesias debemos considerar las siguientes
implicaciones:
• El Pacto de Gracia “Garantiza”. Plantar nuevas Iglesias y renovar Iglesias es un proceso
no solo de tiempo y dinero, sino además de una correcta Filosofía Ministerial que tenga
lo más claro posible que solo el Dios del Pacto quien nos ha llamado a ser "bendición a
todas la naciones", es quien hace la obra por medio del Espíritu Santo y de Su Hijo
Jesucristo, en sus méritos, por Su único y suficiente sacrificio en la cruz.
• La garantía radica no en nuestra estrategia, estudios o capacidades, es el Dios del Pacto
que se revela, se acerca, llama, convence y cambia el corazón del hombre. (Juan 16:7-11;
Romanos 10:8-13)
• Nosotros no inventamos la Iglesia, fue establecida y formada por el Dios del Pacto,
manifestada en Pentecostés y por lo tanto, Es Dios mismo quien debe decidir lo que va a
pasar o no.
• Esto obviamente no es excluyente de planificación, estrategia y disciplina, sino
especialmente en ser direccionados por el Espíritu Santo y debe descansar en la promesa
del Pacto de que seremos “bendición a todas las naciones” y esto solo ocurre en la obra
del Espíritu Santo, como el continuador de la que hizo el Señor Jesús en la cruz.
• El mismo Señor Jesús dice que antes de construir un edificio, evaluemos las
posibilidades financieras y humanas; hagamos un plano de la cosa y elaboremos
un plan maestro, es decir una Filosofía Ministerial. (Proverbios 24:27; Lucas
14:28)
• Aunque hay que reconocer que el Pacto de Gracia unifica y ayuda a identificar
que cuando se planta una Iglesia no se hace en la mayor soledad, aunque no haya
otros cristianos a nuestro alrededor, no estamos solos, pues el mismo Dios Trino
quien Pactó nuestra redención, nos acompaña, dirige, apoya, alienta y, algo muy
interesante de destacar… nos soporta.
• No podemos afirmarnos en la fe de la doctrina del Pacto y luego decir; “estoy
solo”, porque no es así, pues siempre el Trino Dios nos acompaña y su Iglesia
respalda de la manera más poderosa, que es posible con la oración.
• Esto recuerda un sentido de comunidad corporativo que generalmente omitimos
al plantar o renovar una iglesia. (Filipenses 4:14-20)
• Cristología. El entendimiento de Pacto de Gracia anuncia y apunta a Cristo a lo largo
de todas La Escritura y es el antecedente correcto de una Cristología sana. En la
plantación o renovación de iglesias el siguiente elemento esencial es tener a Padre
Dios como el centro de nuestro argumento teológico a fin de que nuestra Filosofía
Ministerial le glorifique y le muestre al mundo como la Cabeza de Cristo, así como
Cristo es la Cabeza de la Iglesia.
• Al elaborar una Filosofía Ministerial se considera que nuestras relaciones deben estar
enfocadas y fundamentadas en la obra y la gracia de Cristo y, por lo tanto, nuestras
relaciones deben mostrar y modelar a Cristo en sus tres oficios.
• Modelar a Cristo Como Rey. El Señor Jesús es hijo de hombre, no es hijo de Adán,
solo por la genealogía que hace el evangelista Lucas 3:38, por lo tanto sin pecado
original; Jesús es un ser humano real, pero sin pecado propio; quien cumplirá el
mandamiento dado a Adán en el jardín.
•  Hijo de David, perro a la vez el que es el primero de David, (Mateo 21:9): Jesús es de
la tribu de Judá, la línea de David, en cumplimiento del pacto Davídico.(hijo de David
también está conectado con los Milagros de Jesús, Mateo 9:27; 12:23; 15:22)
• Modelar a Cristo Como Sacerdote. Kistemaker en su comentario a Hebreos 9
explica lo siguiente sobre el sacerdocio de Cristo: “Para señalar la supremacía del
sacerdocio de Cristo.
• Mostrar a Cristo Como Profeta. El oficio profético de Cristo tiene un fundamento
abundante en la Escritura, Es Cristo el es gran profeta prometido que cumple
todas y cada una de la promesas hechas a Israel. Es Cristo Rey, Sacerdote y
Profeta quien envía a su Iglesia en la Gran Comisión a alcanzar al mundo con el
mensaje del Evangelio.
• Una sana Cristología permitirá señalar, enseñar, y modelar a otros, además
evitará algunos peligros que en la plantación o renovación de iglesias son
comunes y que tiende a apuntar al plantador o pastor principal cuando la única
figura que debe ser exaltada es Cristo nuestro Rey, Sacerdote y Profeta y el
adorado debe Ser Dios el Padre
EL EVANGELIO
• ¿Qué Es el Evangelio? La palabra evangelio significa “Buenas Noticias o Buenas
Nuevas,” aunque esta palabra era utilizada en tiempos de Jesús para referirse a
diversos asuntos que representaban una cambio radical o significativo en sus vidas.
• Los cristianos de la iglesia primitiva, acuñaron esta palabra para representar el mensaje
de redención que Cristo hizo a nuestro favor en la cruz del calvario, a fin de pagar
nuestros pecados.
• Es pues, el evangelio, lo que Cristo hizo a nuestro favor para darnos vida eterna.
• Para Tim Keller el evangelio tiene tres características. Afirma: “El Evangelio son noticIas
en lugar de instrucción…El Evangelio es gracia en lugar de mérito…El Evangelio es
cambiar al débil en fuerte.”
• Evangelio es la noticia de que Cristo ha hecho lo que nosotros no podíamos hacer – por
nuestra condición de descendientes del pecado Adámico y por el pecado propio, ha
cumplido con los términos del Pacto a nuestro favor y se ha ofrecido a sí mismo como
sacrificio perfecto (Cristo Sacerdote), ha resucitado y se le ha dado toda autoridad en
el cielo y en la tierra (Cristo Rey) y en ese carácter, envía a proclamar la buenas nuevas
de salvación (Cristo Profeta).
• Las personas deben entender el Evangelio no solo racionalmente, deben verlo reflejado en
nuestras vidas, en la manera en la que hacemos, ya sean en negocios, conduciendo el
automóvil, como empleados o como tratamos a nuestra familia, es decir, un evangelismo que
modele a Cristo y el Pacto del evangelio producido en nuestra vidas, transformándolas.
• Las Relaciones Mostrarán el Evangelio. Si somos una comunidad del Pacto y Cristo es
modelado como Rey, Sacerdote y Profeta, el mensaje del Evangelio será comunicado de
manera relacional, intencional y como un estilo de vida y no sólo como un grupo de
actividades de tipo evangelista.
• El Evangelio Se Enfoca en las Personas y No en las Actividades. En medio de un mundo
postmoderno, es preponderante que el refrescante Evangelio de Cristo impacte vidas, una de
las tentaciones más comunes en el proceso de plantar o revitalizar es comenzar una serie de
actividades que no necesariamente expresan la centralidad del Evangelio y hacen que las
personas sientan otro tipo de interés y sientan ser producto y no sean tratadas sus
necesidades espirituales mas que en las materiales, económicas, sentimentales, laborales, etc.
• El Evangelio es la Gracia de Dios que cambia, transforma y restaura interiormente a las
personas; nuestro rol es ser instrumentos en Sus manos. Poor lo que no es el evangelio de la
prosperidad, ni de las ofertas; es decir predicamos al Dios Todopoderoso. No somos
milagreros ni curanderos, somos ministros del Evangelio de Jesucristo; somos instrumentos de
Dios para salvación del perdido, a quienes las señales nos siguen.
• A causa del mal marketing del evangelio, es decir el de la prosperidad o de las
ofertas; no exciten verdaderas conversiones en los creyentes; ustedes notaran
que no hay crecimiento espiritual ni intelectual entre los hermanos que van a las
iglesias; porque a ellos no se les hizo saber que eran convictor de muerte; que
estaban muertos en sus delitos y pecados, tal como se predicaba en la iglesia
primitivas y lo vemos en las cartas apostólicas y aun en los evangelios.
•  Se les predica otro evangelio, el evangelio que Dios es solucionador de sus
problemas; el Dios que les sanará y les prolongará la vida en la tierra. Eso sólo no
es el evangelio; no corresponde a la Vid Verdadera; sino a la vid falsa.
• A las personas hay que confrontarlas con su pecado y con su destino que es el
infierno. Que si no se arrepiente y reconoce al Señor Jesucristo como su Salvador
y le hace su Señor, irremediablemente se va al infierno. Pero no hay que hablarle
solamente de los beneficios terrenales del evangelio, porque vendrán por las
añadiduras y no por el reino de los cielos. Revea como hace sus folletos y anuncia
el evangelio.
• Desde luego que una vez que recibe a Jesucristo puede ser sanada, su vida
terrena puede recibir un vuelco de 180°, porque las señales de Marcos 16, fueron
y son vigentes; pero debe ser como una consecuencia, no traer a la gente como
un objetivo a alcanzar.
• Debemos pescar con redes, no con anzuelos y carnadas. El azuelo, rompe la boca
del pez y la persona se acostumbrara a comer carne; por eso las personas que
vinieron por su milagrito temporal, luego despotrican contra el evangelio; no se
afirman en la iglesia, pueden llegar hasta ser diáconos, ancianos, líderes y hasta
pastores; pero su vida siempre estará medida por resultados terrenales y no los
espirituales.
• Por todo ello es que una Filosofía Ministerial Bíblica, le ayudará a sentar bases y
verá que no tendrá hermanos ni rebeldes, desobedientes ni irresponsables.
Porque usted le predica el verdadero evangelio, el de la santidad y le hace
discípulo de Jesucristo; no ovejitas, ni miembros de su congregación local.
• La Filosofía Ministerial Bíblica, ayuda a poner en blanco y negro las cosas; a quitar
los matices que lo único que ha llevado a la iglesia del Siglo XXI, es a llenar sus
templo de gente de trueques, que cambia dinero por dinero; casas y autos por
bienestar familiar; pero que no se preparan para la vida eterna. Es decir, de gente
no santa ni salva.
• Los ministros engordan sus templos de gente; pero la gente no crece a la estatura
ni la plenitud de Cristo.
• Planificamos y Evaluamos con Centralidad. Si el Evangelio es central para nosotros
lo debe ser entonces en nuestra planificación y en nuestra evaluación, es decir,
permitir el enfoque en los aspectos fundamentales sin descuidar los aspectos
necesarios del proceso de plantación y revitalización.
• El entendimiento del Evangelio es esencial en la elaboración de una Filosofía
Ministerial que se precie de tal de ser Escritural y por lo tanto, ser parte del ADN de
la verdadera iglesia, que es la que sucede en tiempo y espacio de la primitiva y
debe ser rescatada del moralismo o la irreligión por una iglesia renovada o
revitalizada por el Poder del Evangelio de Jesucristo mediante la Persona del
Espíritu Santo.
Lección Cuatro
Contexto
• Aquí nos referimos a cultura. Es decir, el contexto en donde Dios nos ha llamado a
proclamar las buenas nuevas de salvación. Es esencial entender la cultura en la que se
predica y adaptar las formas de comunicación del mismo para no perder eficacia y no
ofender a la cultura en aras de alcanzarla.
• No hablo de ceder en el mensaje del Evangelio de Cristo céntrico y Pactual, éste siempre
será el mismo, pero de cultura en cultura hay una serie de variaciones que deben ser
tomadas en cuenta por nosotros, pues al ignorarla “se corre peligro” de perder la
oportunidad de que el Evangelio transforme a dicha cultura.
• Definiciones de Cultura
• y Contexto.
• El Diccionario Hispano-americano de la misión define cultura de la siguiente manera: “…Es la suma
total integrada de rasgos de comportamiento aprendidos, que caracterizan a los miembros de una
sociedad. Es la manera total de la vida de un pueblo.
• Según E. B. Tylor, la cultura está formada por ‘un conjunto complejo que comprende los
conocimientos, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y otras
capacidades adquiridas por el individuo en cuanto miembro de la sociedad.’
• “El vocablo indica el modo particular como, en un pueblo, las personas cultivan su
relación con la naturaleza, entre sí mismos y con Dios de modo que puedan llegar
a un nivel, verdadera y plenamente humano. Es el estilo de vida común que
caracteriza a los diversos pueblos…” La cultura lo incluye todo, educación en
casa, educación formal, creencias, clima, arte, etc. Y cada uno de nosotros está
expuesto constantemente a ésta, si se es miembros de una comunidad, se
compartirá una cultura.
Contexto.
• El Diccionario general de la lengua española define: “contexto” como conjunto de
circunstancias que rodean una situación y sin las cuales no se puede comprender
correctamente: el contexto histórico y social incide sobre los significados de la
obra literaria. Conjunto de elementos lingüísticos que incluyen, preceden o
siguen a una palabra u oración y que pueden determinar su significado o su
correcta interpretación: el verbo ‘cantar’ tiene dos significados distintos en estos
dos contextos: ‘el tenor cantó’ o ‘el detenido cantó’.
• El Contexto y la Cultura. El contexto produce cultura, ambos están intrínsecamente ligados y no
puede separarse, pero para nuestro objeto de estudio lo haremos.
• Sólo se destaca la importancia de considerar el contexto y las implicaciones culturales en la
plantación o renovación de iglesias la harán pertinentes y sensible a su función.
• Jesús y la cultura. “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria,
gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.” Juan 1:14.
• John MacArthur afirma: “…la expresión “fue hecho” confirma que Cristo adoptó la naturaleza
humana (Hechos1:1-3; 2:14-18). Esta realidad es sin duda alguna la más profunda e inescrutable
en toda la historia porque indica que el Infinito se volvió finito, el Eterno se conformó al tiempo,
el Invisible se hizo visible y el Sobrenatural se redujo a sí mismo a lo natural.
• La doctrina de la encarnación del eterno Dios, muestra claramente a Jesús entrando a un
contexto determinado, con un idioma determinado, con una política, educación, religión y
costumbres determinadas, siendo totalmente Dios que es el generador mismo de la cultura
hebrea, aunque los judíos agregaron cultura a la cultura, en ejercicio de su libre albedrio; por lo
tanto siendo totalmente hombre se hizo a la cultura determinada a fin de que el mensaje del
Padre fuera escuchado y comprendido por quienes deberían recibirlo. Sin embargo no dejó de
censurar aquellas tradiciones judaicas, no mosaicas.
• Es el Jesús encarnado el mejor ejemplo de contextualización y de un mensaje
directo, sensible y adaptado totalmente a la cultura de quienes son los receptores.
La palabra que la NVI traduce “habito” es traducida por la BTX como “tabernaculizo”
en griego “ἐσκήνωσεν” que se puede traducir “acampar, i.e. (fig.) ocupar (como una
mansión) o (espec.) residir (como Dios lo hizo en el tabernáculo de la antigüedad,
símbolo de protección y comunión): - extender su tabernáculo, habitar, morar.
• Justificación teológica: La necesidad surge para dar sentido pleno al pasaje que nos
ocupa: Kai o lógos sarx egéneto kai eskénosen en emín, cuya traducción, según las
limitaciones actuales, es: Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros.
Teológicamente, este enunciado está conectado con el concepto de la shekinah en
el AP, y sugiere que la tabernaculización (¿?) del Verbo encarnado ha de ser
considerada como una expresión que establece el hecho de Su estadía terrenal no
fue para Él sino un episodio entre Su pre y post existencia como Señor exaltado, no
sólo en relación al elemento transitorio de su paso por el Planeta, sino como la
manifestación del Eterno en la dimensión del tiempo y del espacio.
• Así podemos afirmar que en la plantación o revitalización de Iglesias el modelo
encarnacional de Jesús debería ser un paradigma indispensable para nosotros.
• Pablo y la Cultura. Una los grandes paradigmas al respecto a considerar la cultura, es
el Apóstol Pablo, ya que su labor misionera nos presenta una serie de elementos
distintivos que nos permiten asegurar que tenía una Filosofía Ministerial bien definida
y siempre consideraba el contexto cultural al que se enfrentaba a fin de comunicar
adecuadamente las verdades del Evangelio.
• Hechos 17:18-34 consigna uno de los grandes paradigmas de la contextualización que
debemos considerar. Algunos principios esenciales son:
• Estudiar la Cultura en la Que Nos Encontramos. “Mientras Pablo los esperaba en
Atenas” (Hechos 17:16ª). Es evidente que Pablo no está “esperando en Atenas” sin
hacer nada, la descripción que hace Lucas denota sin lugar a duda que Pablo ha
pasado tiempo observando todos los rasgos culturales y estudiando las maneras en
las que debe ser presentando en Evangelio a estas personas
• La alusión a los epicúreo y estoicos denota también y el dialogo que Pablo entable con
ellos, denota sin lugar a duda un estudio previo e intencional en la actividad misionera
de Pablo. Implícito está que Pablo conoce perfectamente el idioma e identifica el
lenguaje filosófico y la mentalidad de ellos pues su discurso en este pasaje lo denota.
• Identificar Necesidades Sentidas. No solo necesitamos información demográfica de la
ciudad, es necesario verificar, sentir, escuchar a la comunidad a fin de identificar las
razones por las cuales estas necesidades son auténticas.
• Debemos enseñar mediante la Filosofía Ministerial, a ganar a la gente para Cristo y no a
ganarles con nuestro conocimiento; reitero, es ganarlos, no ganarles.
• Aprender el Idioma. No solo nos referimos a idioma como tal, sino dentro de un mismo
país o región existen distintivos culturares en el habla, es que debe ser tomados en
cuenta, como expresiones idiomáticas, comunicación no verbal de la cultura a la que
entramos, etc. – sin que ello implique ser nosotros vulgares e incluso no usar el lunfardo
local, para no hacernos a ellos, sino que ellos se hagan a nosotros. Pero dentro de
nuestro juicio, reproducir aquellas palabras que no atenten con la moral, las buenas
costumbres. Lo mejor es investigar la raíz o de donde sale tal palabra o vocabulario, (
Efesios 4:29)
• Identificar Ídolos de la Ciudad o Comunidad. Es evidente que Pablo hace esto, no solo
los identifica, sino establece una estrategia que están fundamentada en su Filosofía
Ministerial, que le permite encontrar oportunidades para la presentación del Evangelio.
• También debemos hacer un mapeo espiritual para detectar lugares que enquistado el
ocultamos e identificar a los satanistas y los lugares consagrados; sitios que más
utilizan, discriminando tipo de “culto o religión,” incluyendo a los curanderos y
sectorizar, para que con un vistazo se tenga una fácil ubicación. Nombres de sus
líderes principales.
• Es interesante conocer los antecedentes espirituales desde antes de la función de la
ciudad o distrito comunal.
• Sustentar Nuestra Investigación y Verificar los Datos en la Cultura Que Se Pretende
Alcanzar. Es claro, Pablo recabó datos e información para encontrar oportunidades y,
así presentar el mensaje del Evangelio de manera pertinentes.
• Pablo dedicó tiempo para hacer compañeros de ministerio y buscó la sinagoga para
establecer relaciones y contactos nuevos dentro del judaísmo y con gentiles
conversos.
• Podríamos concluir, que en nuestra Filosofía Ministerial debemos contemplar a los
profesionales, empresarios y personalidades distinguidas de la ciudad y la región –
gente de la alta sociedad. Ya que a ellos se les debe presentar el evangelio desde su
nivel cultural y social.
• Al evangelizar a los paganos doctos, Pablo tomaba como punto de partida la
creación que es la revelación general de Dios (cp. 14:15-17). Al evangelizar a los
judíos, siempre comenzaba con el Antiguo Testamento (vv. 10-13).”
• Aspectos Que Deben Ser Considerados en Cada Cultura. La cultura es un
elemento que se puede dejar a un lado al momento de querer plantar o
revitalizar una Iglesia. Algunos de los aspectos que no se pueden dejar de ver son:
• Costumbres. “Manera habitual de obrar una persona, animal o colectividad,
establecida por un largo uso o adquirida por la repetición de actos de la misma
especie: se levanta temprano por costumbre.” Cada sociedad o colectividad tiene
una serie de costumbres con respecto a la puntualidad, la honestidad, la
apariencia, la educación, la familia, etc.
• Las costumbres deben ser observadas cuidadosamente a fin de ser pertinaces y
respetuosos de las mismas en tanto, no contradigan o pongan el peligro el
mensaje central del Evangelio, pueden ser herramientas útiles para nosotros.
Identificar las costumbres esclarecerá el panorama para entender la cultura, qué
valores afirma y la importancia entendido como identidad.
• Idioma. En Hispanoamérica donde se habla español el asunto resulta no menos importante,
pues, aunque es verdad se habla el mismo idioma, no se habla el mismo lenguaje. La polisemia se
da por las diferentes culturas.
• Cada vez que se llega a un campo misionero o se pretende revitalizar una Iglesia se debe
considerar que el lenguaje sea el apropiado al contexto.
• Identidad. Cada colectividad tiene una identidad. Generalmente está arraigada con otros factores
o una serie de factores interconectados. Esto requiere no solo de datos demográficos, sino de
caminar y sentir a la comunidad para identificar asuntos como la música de su gusto, el estilo de
vestir, el proceso a través de cual confía y abre sus emociones a otros, etc. Cada grupo en
particular tiene una serie de elementos que nos permiten distinguirla.
• Factores Socio-Económicos. Se debe considerar los factores socio-económicos que
determinar, estudios, a qué clase social pertenece y por lo tanto, donde interactúan y
cuáles son sus intereses.
• Religión. En Hispanoamérica la religión o creencia católica romana es mayoritaria, aunque
debemos notar un decrecimiento en sus cifras en los últimos 20 años, pero aún es la religión
dominante. Dependiente de la región en América Latina o España e incluso entre los hispanos en
los EEUU, el catolicismo romano puede ser solo nominal, pero hay regiones en donde es
particularmente vinculante a la vida de la comunidad que nos rodea.
• Recuerde que no nos podemos dar la libertad de elegir la clase social a la cual
impactar. El evangelio es necesario en todos los extractos de la sociedad, sus
necesidades de entorno son distintas, pero en las espirituales son exactamente las
mismas; todos necesitamos a Dios y ser libres de la carga del pecado y del peso del
castigo que está sobre la humanidad adámica.
• Frente a esta realidad es que se hace muy necesaria una Filosofía Ministerial que no
pierda de vista a la gente y que la vea de manera integral, es decir, espiritual y social.
• Distintivos Regionales. En cada país hay regionalismos distintivos que deben ser
tomados en cuenta. Tienen vinculación con algún énfasis que se pone en alguno
de los cincos aspectos anteriores y que es distintivo o enfático en dicha región,
no considerarlo podría ser fatal.
• Implicaciones de la Cultura en la Elaboración de Nuestra Filosofía Ministerial. El
estudio de la cultura a la que pretendemos alcanzar es funda-mental y debe estar en
estrecha relación con nuestra reflexión bíblica teológica a fin de que nos permita ser
efectivos en nuestra labor. Pero debemos tener en cuenta que nosotros somos luz y
sal, por lo tanto debemos ser lo distinto, sin ser extravagantes, ellos deben aprender
por nosotros a buscar a Dios y a servirle. (Deuteronomio 18:9-14)
• Por lo que algunas implicaciones son:
• Estilo de Comunicación. Aunque la esencia de lo que se comunica es el Evangelio y este no cambia,
ni debe negociarse, sin embargo podemos ser creativos y contextuales al entorno cultural. Ser
relevantes a la cultura a la que se comunica el mensaje del Evangelio lo que dará la oportunidad de
mostrar a Cristo de una manera que no hubiéramos considerado antes.
• Por ejemplo ¿Cuánto tiempo durará el culto y servicio en nuestra Iglesia?
• Las reuniones en la semana deben ser una o dos y no más en forma general y una por
departamento. –varones, jóvenes, damas, niños, evangelismo, estudios bíblicos, etc.
• Las reuniones por departamento, no deben exceder la hora y media. Hay que
procurar que las esposas estén en sus casas al regreso de su marido del trabajo y que
la familia cena junta; en caso del domingo, si la iglesia no sirve comida; que la familia
también almuerce junta.
• El pulpito no es más que para hablar de Cristo, de cómo vivir perfeccionando la
santidad para ver a Dios y crecer espiritualmente a la estatura y la plenitud del Hijo
de Dios. Pero nunca es para hablar de sí mismo, de dinero o para maltratar a los
oyentes, menoscabarlos; pero tampoco con fines mercantiles levantar su autoestima
y enseñarles a hacer trueques con Dios, como ser, si tú me das, yo te doy.
• Estilo de Adoración. Otra de las decisiones importante es determinar el estilo de nuestra
adoración, pero lo transcendental es a quien queremos agradar a la gente o a Dios. No
necesariamente debe ser pertinente y relevante a la cultura que se pretende alcanzar . Es
importante afirmar que La Escritura son nuestra norma de fe y conducta, por lo tanto
nuestra adoración en el cuto debe ser a Dios Padre.
• El asunto no es cantar alabanzas modernas o antiguas, el asunto es que si los hermanos
adoran o si simplemente están participando de una canción que toca sus sentimientos,
pero que no puede tocar su alma y elevar su espíritu. Si mueve su cuerpo o su corazón y
lo transforma a la imagen de Cristo.
• “hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y
alabando al Señor en vuestros corazones;” (Efesios 5:19)
• Si solo afecta su intelecto y su emoción, no es un himno o cantico espiritual, son
simplemente himnos y canciones pseudo cristianas. Lamentablemente siempre lo hubo,
pero en el presente siglo abundan porque son canciones marketineras.
• Estilos de Discipulado. La materia que no debe faltar en nuestra Filosofía Ministerial es la
conservación de frutos, por lo que debemos hacernos la siguiente pregunta: ¿Cómo
vamos a enseñar y a discipular a los nuevos creyentes? ¿Cómo irán progresivamente
desde creyentes iniciales a creyentes maduros y llegar a la estatura de Cristo?
Lección Cinco
Demografía
• El Diccionario General de la Lengua Española define demografía como: “Estudio
estadístico de las poblaciones humanas según su estado y distribución en un momento
determinado o según su evolución histórica. Tasa de la población humana en una región
o un país determinados.
• Realizar un estudio demográfico de la zona o ciudad en donde se pretende plantar o
renovar una Iglesia será de mucha utilidad para los efectos de dar una lectura a la zona y
seleccionar cuidadosamente el blanco o meta a conseguir.
• Elementos de Una demografía. El objetivo es obtener información socio- económica y
poblacional, por lo que, se debe incluir en nuestra investigación datos sobre la ciudad,
antecedentes relevantes que ayuden a entender la dinámica social.
• Historia y Geografía. Datos sobre la fundación y establecimiento de la ciudad,
antecedentes relevantes que ayuden a entender la dinámica social. geografía, es decir, su
extensión territorial, la cantidad de municipios o localidades que la integran,
colindancias, ciudades cercanas que sean influyentes, medios de locomoción; vías de
acceso terrestres por rutas, calles, avenidas; por aéreos, o pluviales, etc.
• Población. Datos sobre la población actual y su tasa de crecimiento o decrecimiento
en los últimos 10 a 15 años, información relevante sobre migración de la ciudad a
otras ciudades o al extranjero, así como migración interna del campo a la ciudad,
porcentaje de hombre, mujeres y niños promedios de edad, etc.
• Zonas y población de bolsones de pobreza y sus niveles – cantidad de pobres, bajo el
nivel de pobreza, indigencia, etc.
• Educación. Interesan datos sobre el porcentaje de personas educadas, grados
máximos y mínimos, deserción escolar, porcentaje de aquellos que terminan una
educación formal y de la universitaria; enfoque de las universidades, tasa de
analfabetismo, etc.
• Salud. Aquí interesa el porcentaje de la población con seguridad social o que depende
del estado; patologías mas comunes de la población y la asistencia sanitaria. Esto
permite interactuar con equipos de médicos cristianos – clínicos, odontólogos,
pediatras, ginecólogos, etc. Realizar campaña de salud durante el día y por la tarde
realizar talleres sobre temas de intereses en la zona y noche predicación del
evangelio. Etc.
• Situación conyugal. Interesa el porcentaje de matrimonios y divorcios, otros datos
que puede ser útil, es el porcentaje de familias con un solo padre o que están en
unión libre.
• Recuerde que quien tiene la información tiene el poder. Le ayudará a trabajar con la
problemática familiar y la responsabilidad de los varones en su rol de padres
responsables, coadyuvará en que no se aborte ni se abandone a los niños.
• Discapacidad. Este dato es importante determínalo pues nos dará la oportunidad de
contrastarlo con las facilidades que se ofrece a este grupo de personas, para
brindarles amor y cuidado especial; a integrarlos a los grupos y departamentos de la
iglesia local.
• Lengua Indígena. Es importante reconocer si hay etnias indígenas que han emigrado
a la ciudad y el porcentaje de quienes lo hablan. Hay lugares en América Latina en que
el dato ayudará a considerar la situación de la traducción u ofrecer servicios bilingües .
• Religión. Aunque en Hispanoamérica el porcentaje de Católicos romanos es
esencialmente abrumador es importante determinar los grupos religiosos existentes,
su influencia y ubicación, ayudará a ser estratégico al momento de evangelizar y de
llevar a cabo guerra espiritual.
• Empleo y ocupación. Determinar y comparar el crecimiento o decrecimiento de la
población económicamente activa es uno de los datos relevantes. Además se debe
determinar en qué sectores se ocupa la gente en nuestra ciudad.
• Si se cuenta con industrias – qué tipo, y si se trabaja en el campo – qué se cultiva y
fines del cultivo. Existen muchas ciudades de la denominadas, “dormitorios” son las
que la gente sale a otra ciudad a trabajar y regresa en la tarde-noche o bien que
regresan solo los fines de semana porque está a muchas horas su trabajo o que viven
en obradores, etc.  
• Estos datos le ayudará para ver cómo colaborar para que la gente no emigre ya que
podrá realizar como proyecto la iglesia el establecer cooperativas, ONG productivas,
Mi pymes, etc.
• Vivienda. Determinar quie-nes viven en casa propia, de familia o de renta; tierras
usurpadas y estado legal. Esto dará una idea del bienestar económico de la
comunidad. Estas se debe zonificar y realizar un mapa de ubicación para poder llevar
a cabo algún proyecto propio, estatal, local o del extranjero que tienda al
mejoramiento de la gente.
• Análisis de la demografía. Con los datos una vez recolectados deben ser
procesados y elaborar una breve descripción de nuestros hallazgos en cada una
de las áreas que analizamos a fin de determinar oportunidades de ministerio. De
los diez aspectos, cada número requiere una investigación más detallada para
después describirlos. Aun así, hay algunos que ocupan una descripción profunda
y un análisis particular como:
• Presencia de Grupos Evangélicos. Determinar la presencia e influencia de los
grupos evangélicos en la comunidad que podrían participar en actividades para
llegar a la gente que pretendemos alcanzar; especialmente unirse a los Consejos
Pastorales del Distrito. Es una investigación y análisis que no se puede omitir. No
podemos determinar a priori que somos los únicos que tienen la verdad y que,
por lo tanto, es a nosotros a quien la ciudad espera. La diversidad de los grupos
evangélicos hace impensable este análisis.
• Establecer la presencia de las denominaciones históricas y de las nuevas
denominaciones la forma en la que están organizadas y como se relacionan entre
sí puede ser muy útil para nosotros.
• Cuál es el Porcentaje Que Representan las Iglesias Históricas. Es relevante descubrir cuál fue la
denominación que se estableció primero en la ciudad y cuál es su historia, crecimiento e
influencia.
• Nuevas Iglesias. Aquí vamos a encontrar una gran diversidad de nuevas iglesias o nuevas
congregaciones, lo que importa es verificar las iglesias que son cristianas evangélicas en la
ciudad, es importante destacar su tamaño, influencias y desde luego su historia. Lo importante
sería que se presenten con el Pastor y se hagan conocer por cada uno de ellos, que lo verán
como un colega y no como oposición.
• También presentarse ante las autoridades del Consejo pastoral, el Intendente, la Policía y otras
autoridades locales, entre ellas, Consejo Deliberante, el Director del hospital, del servicio
penitenciario, etc., siempre hacerlo acompañado una nota de presentación de la nueva
congregación con sus datos de ubicación.
• Alianzas o Consejos. Como ya lo dijera en varios puntos, pero remarcándolo, sabemos que en
cada ciudad de América Latina, los evangélicos formamos alianzas frater-nales para tener
unidad como una sola iglesia en el Distrito y la Ciudad, conforme a la oración del Señor Jesús,
que seamos “uno para que el mundo crea,” es interesante ser parte de ellas y estudiar cómo
están organizados y cómo influyen o no, además permitirá que sea parte de esas alianzas o
Consejos Pastorales, por el principio de Juan 17.
• Análisis de la Cultura. Esto requiere de tener los datos recopilados, ordenados y
debidamente comparados para poder con esto hacer una serie de observaciones sobre
la cultura que se pretende impactar con el Evangelio.
• Aquí se debe incluir un tiempo para hablar con personas influyentes y conocimientos
de la ciudad a fin de poder verificar en la experiencia de estos líderes de opinión
nuestros datos duros.
• Hablar con pastores, sacerdotes, maestros, líderes políticos, empresariales etc. Será de
mucha utilidad para nuestro propósito final, que se redacte el resultado del análisis.
• De este análisis se considerará algunos aspectos tales como:
• El Hombre Típico. Es decir, debemos poder describir en términos generales al tipo de
persona que queremos alcanzar, nuestro blanco o meta. Es obvio que esto nos obliga a
seccionar y determinar nuestro objetivo.
• Una descripción de preferencias en el vestir, música, diversión, cultura y educación. La
economía será determinante para reconocer y determinar a quién se pretende
alcanzar.
• Determine Su Zona de Influencia. En la actualidad, no es muy usual encontrar
iglesias comunitarias, es decir iglesias en donde la mayoría de las personas vienen
de una sola zona y extracto social, especialmente si estamos en un centro
neurálgico; por eso es vital determinar a quienes queremos alcanzar y como los
vamos a alcanzar. La gran mayoría de las iglesias hoy reciben personas de muchos
lugares distintos, casi de su propio barrio no asisten y se agrupan en cierto tipo de
personas.
• Oportunidades de Ministerio. Todo este trabajo permitirá establecer
oportunidades ministeriales de acuerdo a las fortalezas y debilidades del
plantador o del pastor y la Iglesia que es revitalizada.
• Algunos principios que debe considerar aquí son:
• Testimonio. ¿Cómo seremos relevantes e influyentes en la comunidad a la que se
quiere alcanzar?, ¿Nuestra evangelización será tradicional o relacional? El
testimonio no es sólo hacer presentaciones del Evangelio, incluye desde luego,
pero también es la manera en la que la comunidad no creyente puede
identificarla y el modo en la que se puede influir en la vida de otros.
• Discipulado. ¿Cómo enseñar a otros? ¿Utilizar un modelo de escuela dominical o
de estudio bíblico en nuestra iglesia? ¿Se integrarán en grupos pequeños?
¿Haremos discipulado uno a uno? Esto determinará nuestro crecimiento y la
manera en la que otros se irán incorporando a la iglesia
• En definitiva, es un trabajo arduo pero la garantía que producirá será efectiva,
desde los elementos de una Filosofía Ministerial pertinente y bíblica.
Lección Seis
Definición de Alcance
El alcance es el enlace de una serie de aspectos descritos hasta aquí, a fin de que la
Filosofía Ministerial apunte correctamente a algo medible, factible, que logre los
objetivos, será determinar al receptor del Evangelio en potencia y cómo se pretende
alcanzar, forma parte de una Filosofía Ministerial. De tal modo, en este capítulo se
detallará una serie de principios a tomar en cuenta antes de poner por escrito dicha
filosofía y determinar el plan.
Evaluación Preliminar. Antes de redactar su Filosofía Ministerial y determinar su
diseño estratégico debe hacer una pausa en este proceso y evaluar, como nos enseña
el Señor Jesús en Lucas 14:28. Es cierto que en el proceso de plantar o revitalizar una
iglesia no siempre contamos con todos los recursos y el tiempo siempre apremia.
Solemos decir que en América Latina los recursos siempre son limitados, pero no es
verdad, los que están limitados son los corazones egoístas de los creyentes y muchas
veces de los mismos líderes. Cuando hay un corazón espacioso, sobran los recursos.
(Éxodo 36:2-7)
• Primeramente debe elaborar un esquema de los ítems que conformará su Filosofía
Ministerial, pero se hace necesario hacer una pausa y revisar si se ha cubierto
adecuadamente los elementos que la compondrán, que son pertinentes y
sincronizados, a fin de que produzcan el resultado deseado.
• Tal revisión es la siguiente:
• Principios Bíblicos. En este libro le he planteado cinco aspectos que desde mi
cosmovisión no son negociables y son preponderantes a tal grado de un dominio de
dichos conocimientos:
• 1) La centralidad de Dios Padre
• 2) La centralidad de Cristo
• 3) La centralidad del Espíritu Santo
• 4) La centralidad de la teología del Pacto de Gracia, y
• 5) La centralidad de Evangelio de Santidad.
• son esenciales para una Filosofía Ministerial Bíblica.
• También, debe ver si existen otros valores bíblicos que tienen que ser considerados
e incluidos, ya sea por una experiencia personal, cultural del entorno y las que crea
conveniente que deben formar parte integral de su Filosofía Ministerial.
• La base escritural de nuestra Filosofía Ministerial no es negociable y será considera
en algunos aspectos para añadir o pulir los conceptos ministeriales.
• Contexto. Aquí considero dos aspectos de este elemento a remarcar:
• . Si es un plantador. Si es un plantador y es enviado por su denominación a un
lugar que no conoce o en donde no había vivido antes debe buscar que la
demografía sea hecha por la denominación misma para que usted haga un trabajo
de verificación de los datos y pueda tomar tiempo suficiente para introducirse en la
nueva comunidad a la que usted llega.
• Si usted es plantador y conocer el lugar, vive ahí y ya es parte de la misma
comunidad que se pretende alcanzar, usted puede hacer la demografía, pero debe
pedir que dos de sus mentores le hagan observaciones para que no omita algo que
para usted es obvio. En ambos casos debe tomar tiempo para caminar y “sentir” la
ciudad y comunidad que desea alcanzar.
• Si es Pastor. Si usted es un pastor que desea revitalizar su Iglesia debe incluir que los
Ancianos como el cuerpo de diáconos en la Iglesia sean parte del proceso. Me refiero a
esto por en las iglesias reformadas, el gobierno reside en un consejo de Ancianos y ellos
deben determinar quién o quienes deben hacer la demografía.
• Un pastor que ha sido el titular por muchos años en una iglesia es la persona clave para
revitalizarla, sin embargo no debe quedarse con los métodos pasados, pero tampoco ser
tan moderno que deje de lado el obrar del Espíritu Santo; todo método que no es
direccionado por el Espíritu, será esfuerzo humano, y terminará por la carne.
• Por eso es muy importante el cuerpo de Ancianos con gente avezada y espiritual,
porque son la columna del ministerio local. Ojala todos los pastores vieran la
importancia y la verdadera función Bíblica de los Ancianos de la Iglesia, los pastores
descansaría de tareas seculares de la iglesia y podrían encargarse solo de la vida
espiritual de la congregación con más tiempo.
• Demografía. Esta debe hacerse con cuidado y sin prisa. Debe considerarse que aunque
no se requiere mucho entrenamiento para recopilar la información, tal vez si necesite
ayuda para acomodarla e interpretarla.
• Uno de los cambios en su Filosofía Ministerial será delegar tareas y la demografía es
una oportunidad para hacerlo.
• Pastor o Plantador: El Pastor de una iglesia que ha pasado un tiempo considerable en
ella es la persona más capaz para revitalizar dicha iglesia.
• El primer paso para que una iglesia sea renovada es que el pastor revise su Filosofía
Ministerial y considere hacer los cambios necesarios en dicha filosofía para que su
iglesia sea renovada, sin que estos sean extravagantes y teniendo dos principios
fundamentales;
• 1) La Guía del Espíritu Santo y 2) Fundamentado en la Biblia. Estos se unen a los cinco
valores no negociables que hablamos mas arriba.
• Tener claridad en su Filosofía Ministerial y determinar la estrategia que corresponda a
su ministerio es esencial en todo el proceso de plantación de una nueva iglesia, dejarlo
a un lado o posponerlo sería letal para la iglesia en potencia que puede nacer sin
identidad.
• Determinar Omisiones o Vacíos en Nuestra Investigación. La evaluación permite
determinar si se ha omitido algo o no se ha reflexionado lo suficiente en alguno de los
aspectos.
• Determinar Omisiones o Vacíos en Nuestra Investigación. La evaluación permite
determinar si se ha omitido algo o no se ha reflexionado lo suficiente en alguno de
los aspectos.
• Corregir. Una buena evaluación dará la oportunidad de corregir, revisar, recopilar y tener la
información requerida para que la reflexión sea asertiva, objetiva y determinante en nuestra
Filosofía Ministerial.
• Recuerde, no pierda la visión; la Filosofía Ministerial es Un Plan Maestro para una empresa o la
Política de Estado de un país y es esto lo que le permitirá prever posibles fallas o detectar alguna
en el transcurso del desarrollo de la tarea. El Trino Dios primeramente elaboró su Filosofía,
planificó y luego ejecutó, un ejemplo rápido que me viene a la memoria es Salmos 139:16.
• Direccionar. La revisión de la información y su procesamiento inicial permitirá direccionar todos
los elementos que se ensamblan en una Filosofía Ministerial como un todo y no solo tener una
serie de datos aislados que por sí mismos sugieren poco o nada.
• Enfocar. Una buena evaluación intermedia permitirá considerar las implicaciones de nuestra
teología, el contexto y el plantador o pastor como elementos de un todo, con la finalidad de
plantar o revitalizar una iglesia.
• El propósito de esta evaluación intermedia antes de redactar nuestra Filosofía
Ministerial es determinar si tenemos toda la información, que la hemos procesado,
analizado y reflexionado, además tiene como finalidad determinar el alcance, es
decir, hacia dónde queremos llegar como fruto de esta revisión de nuestra Filosofía
Ministerial.
• Es menester una pausa en lo siguiente: la evaluación determinará el alcance de
nuestra revitalización o de nuestra plantación, además mostrará los aspectos que
deben ser cuidados o requeridos durante el entrenamiento antes de iniciar el
proceso.
• Entrenamiento. Evaluar mostra-rá ciertos aspectos que requieren entrenamiento
adicional al ya obtenido como pastor o anciano. Hay áreas o asuntos centrales
durante este proceso y no pueden ser dejados o tenidos en menor rango, ni debe
asumir que ya los domina.
• Estudiar un entrenamiento adicional permitirá refrescar, adquirir o reforzar cualquier
conocimiento. Será de mucha relevancia al momento de trabajar en el proceso.
• Establecer Alcance. Bien, el propósito de hacer una evaluación antes de empezar a
redactar nuestra Filosofía Ministerial y de dedicar tiempo sufíciente al estudio y reflexión
es poder señalar un objetivo, no se pude pretender que la nueva iglesia o la iglesia a ser
renovada, alcanzará a una ciudad entera o un país, vamos por ellos, pero no nos
sentimos frustrados si en nuestra gestión no se logre, quizá sea en las generaciones
futuras, lo que estamos haciendo es preparar la tierra, sembrarla, seguramente que otros
cosechará lo que el crecimiento que Dios dé. Pero sentemos bases y prescindentes.
• “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el
conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también
yo me olvidaré de tus hijos.” (Oseas 4:6)
• Tome Su Tiempo. Analice la información recopilada, revise sus notas y determine según
su propia evaluación inicial. Realce lo más relevante.
• Revise con Su Mentor. Si ha decidido plantar o revitalizar una iglesia necesita desde el
inicio del proceso tener un mentor de apoyo, es decir su propio pastor; él es la persona
que puede decirle con honestidad si su evaluación y determinación de blanco es
acertada.
• Reconocimiento De Su Denominación. Es la Iglesia establecida y las diversas
formas en las que está organizada, de modo que apruebe y respalde su iniciativa
a fin de que sea en el consejo se dé la certeza de lo que hacemos.
• Así que establecer con claridad y cimentar cada sector, dará una diversidad de
oportunidades y seremos mucho más efectivos a la hora de tomar decisiones
ministeriales.
• Determinar el grupo a alcanzar, dará una visión adecuada y permitirá unir nuestro
esfuerzo.
• Una de las tentaciones en la que cae un plantador y un pastor puede ser en
distraerse en una serie de cosas que no son edificantes y no están enfocadas a
alcanzar las metas determinadas.
• El esfuerzo se centra en el enfoque a considerar. Por eso podemos hacer lo
urgente, sin dejar de hacer lo importante.
Lección Siete
El Pastor o El Plantador
• La figura del líder es esencial para que un proceso de plantación o revitalización sea llevado a cabo.
Pero cada uno de los líderes deben tener corazón de pastor, porque de lo contrarios, ellos serán
como perros, los perros atormentan a las ovejas, las muerden, las amenaza, hasta las vejan y las
terminan matando.
• “Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo.”
(Filipenses 3:2)
• Por eso en Israel, esta prohíbo apacentar las ovejas con perros, esa es una costumbre de los
pastores de occidente, no de oriente.
• ¿Cómo saber si el líder tiene corazón de pastor?
• Es muy sencillo, nunca ve lo malo en los hermanos, sino el potencial que hay en ellos, por lo tanto
no acusa a los hermanos que comenten falta, no los encubre, ni los descubre –avergüenza, pero si
los protege – los cubre; no los persigue con cargas, por el contrario, les ayudan a llevar la que
tienen; les facilita el acceso inmediato al pastor, no les obstaculiza el paso; no se hace servir por
ellos, al contrario, él les sirve.
• Es manso y se deja pisotear, porque no es víbora; acepta sin reclamo las injusticias, nunca se queja;
sufre por los hermanos, les visita sus casas y donde ellos estén. Es capaz de dar su vida si fuera
necesario, como dijo el apóstol Pablo por los de su raza.
• Se goza cada vez que puede promover a un hermano de su grupo a una terea
mayor y si éste alcanzó un nivel superior que él, se alegra más y con gozo
comenta que salió de su grupo, que él le forjó, y da toda la glorias de Dios.
• No comenta que le mató el hambre, si es que lo hizo, ni que le dio de su ropa o
prestó la cama. Gusta hospedar en su casa y prepara alimentos con sus propias
manos o compra con su dinero lo que van a comer, no se preocupa si colaboran
con algo de dinero para el gasto, confía en la provisión de Padre Dios,
• Es Dios quien usa y trabaja en nosotros, pero también sin nosotros y sobre
nosotros y no hay ninguna persona o institución que sea indispensable o más
importante para la obra de Dios que las almas por las cuales murió Cristo.
• Puntos a considerar:
• El Llamado Específico del Pastor o Plantador. Todo pastor o plantador tiene
desde intrínsecamente su propia Filosofía Ministerial y uno de los elementos
esenciales que la determina es: “sentido de llamado y como llamado, escogido.”
• No todo pastor está llamado a plantar una nueva Iglesia, pero todo plantador debe ser
o aprender la labor pastoral. Ahora bien, no todo plantador puede revitalizar una
iglesia, son tareas distintas, aunque relacionadas y el sentido de escogido, tiene
primeramente con el llamado el entrenamiento y la experiencia determinarán donde
es más apto.
• ¿Quién llama y escoge a un Pastor o Plantador?
• En el contexto de las Iglesias Presbiteriana y Reformadas lo hacen los cuerpos
eclesiásticos, debidamente organizados y establecidos, en votación meritando la
trayectoria y formación académica ministerial.
• En la mayoría de las congregaciones independientes, no es así. Por lo que acontece en
ellas el auto ungimiento o un pastor o apóstol unge a un hermano cualquier sin saber
ni tomar en cuenta su testimonio; lo hacen en forma espontánea por una supuesta
revelación, que en la mayoría son corazonadas o sentires producto del emocionalismo
del momento, pero la persona ya se siente un ministro religioso. No va a estudiar ni a
formarse como tales, porque les han dicho que estudiar es el diablo. Lo paradójico
que quien dijo eso, ¡fue el mismo Diablo!
• La biblia nos enseña que debemos estudiar y conocer profundamente la Palabra de
Dios, por eso constituyo “Pastor y Maestros”. ´por lo tanto Dios desecha aquel que
desecha el estudiar, lo vimos en Oseas 4:6, y en Eclesiastés 12:9-11, dice que cuando
más sabio – formado académicamente y lleno del Espíritu, es el predicador, enseña
hace sabio al pueblo – entendido en Dios y en Su Palabra, y la gente gusta el
aprender.
• Entiéndase que no estoy diciendo que no estén los cinco ministerios vigentes, por el
contrario, los que no creen que están vigente los cinco ministerios, son los que no
conocen la Biblia, a lo que me refiero es a que la gente busca cartel, busca credencial
y hacerse un nombre. Es decir, construir su propia ciudad y edificar su propia torre de
Babel; por lo que buscan un salón y “abren una iglesia.”
• Gente ignorante que hace gente ignorante. Un ciego o tuerto guiando a ciegos. Por
eso el evangelio está tan mal visto y no es por la obra del diablo, porque él fue
vencido en la cruz por el Señor Jesús; sino por los pseudos ministros del evangelio,
auto ungidos, sin preparación alguna, y orgullosos de confesar públicamente que no
han estudiado y dicen y enseñan atrocidades como verdades fundamentales.
• He aquí algunos ejemplos sobre las consecuencias de no estar formado académicamente como
un profesional, pero que tiene mentalidad de asalariado.
• Sabios en su propia opinión (Mateo 15:14)
• Hipócritas (Mateo 23:16)
• Legalistas (Mateo 23:24)
• El paradigma es el siguiente:
• ¿Quién Hace el llamado? Si es una Iglesia debidamente establecida es el Consistorio o Consejo
de Ancianos (presbiterio) que nombra una comisión de pulpito misma que presenta a la
Congregación tres candidatos que reúnen un perfil previamente elaborado para el ministerio.
• Tristemente el proceso de selección de un pastor no siempre está deter-minado por una
evaluación objetiva de su perfil, aunque técnicamente es trabajo de la comisión determinar
dicho perfil y solo presentar a la iglesia a aquellos que están enmarcados dentro de dicho
estándar.
• Así recomendamos que los Ancianos de la Iglesia sean asesorados cuidadosamente por el
Presbiterio correspondiente para que en la elaboración de un perfil bien reflexionado y
pensado en relación a las metas, en este caso la revitalización de la Iglesia.
• Este sistema de elección entre candidatos no es recomendable en un 100%, pues
muchas veces se elige a quien Dios no elige. Tenemos el caso de Matías en Hechos
1:23 y 26. Ellos pusieron los nombres de dos personas, salió el nombre de Matías y
lo nombraron como uno de los 12 apóstoles. Sin embargo no siempre es así, por
eso es muy riesgoso elegir entre dos o mas, porque juegan los sentimientos
humanos y el azar no es saludable.
• Lo mejor es poner a prueba por un año el trabajo de cada uno, su formación
académica, pero también su espiritua-lidad. La humildad y el testimonio, tanto de
los de afuera como de los de adentro. El quipo comisionado, dirigido por un pastor,
debe ayunar y orar, tomar tiempo con el Señor, porque quien constituye es el
mismo Señor Jesús y no los hombres.
• Todo debe sopesar a la hora de nombrar ministros, pero también con los Ancianos,
Diacono y Obreros. No permita que a sus congregantes vengan “profetas o
apóstoles,” y les “unja” como un ministro en cualquier ministerio espiritual. Es la
iglesia local que promueve sus ministros y luego de un tiempo de ayuno y oración.
• Lo m ismo sucede cuando hablamos de un plantador es el Consistorio y el Presbiterio local
junto con el Pastor quienes seleccionan sin la necesidad de una reunión congregacional ya
que el plantador será asignado a un proyecto determinado. Aun así, los criterios de
selección deben ser en general los mismos – ayuno, oración y ver entre varios candidatos.
• La Verificación Da Un Fuerte Sentido de Llamado a La Labor Específica de Encomienda.
Esto solo es posible con una serie de entrevistas y recomendaciones que son dadas a partir
de una serie investigación de la experiencia y habilidades del candidato.
• Familia. La familia del pastor y plantador no es contratada o comisionada para la labor.
Aun así, es el contexto dentro del cual el Pastor o Plantador desarrolla su ministerio y es
esencial verificar que tenga lo necesario para una vida digna, apacible y se le ofrezca todo
el apoyo financiero que requiere a fin de que el pastor o plantador pueda estar
concentrado en su labor y a la familia no les falte nada.
• Educación. La educación teológica es esencial y no negociable para uno que debe
emprender una labor tan extenuante como lo es la revitalización o plantación de una
Iglesia. Debe considerarse que por lo menos tenga un Bachiller en Estudios Teológicos
(Asociado en Teología), pero mucho mejor si fuera una Licenciatura.
• Experiencia. Idealmente que haya realizado en el pasado un proceso de
revitalización o plantación de iglesias, (cultos de avivamiento y campañas
evangelísticas en distintas ciudades e iglesias con resultados a la vista cuyos
frutos perduren, no el fuego del momento como el papel que enciende un mago).
Esto permitirá considerar que el trabajo en equipo es esencial para su labor.
• ¿Cómo Se Confirma El Llamado? Para este punto quiero aclarar que es muy
bueno aplicarlos para hermanos que provienen de otra iglesia o denominación y
puedo referenciarle que en las Iglesias Presbiterianas y Reformadas existe un
proceso que va desde la elaboración del perfil por la comisión de pulpito, la
votación de la iglesia en reunión congregacional siguiendo los patrones y reglas
que establece cada denominación reformada y la supervisión, control y
aceptación del Presbiterio en el proceso y la evaluación hecha por del pastor
asignado.
• Así que hay una serie de filtros y controles que hacen a todos responsables de la
selección. Este proceso es esencial tanto para la elección de un pastor.
• Para confirmar, y si ustedes lo consideran podrán valerse de estos.
• El Análisis de Sus Dones y Habilidades.
• Una Entrevista Inicial. Una vez determinado el perfil es necesario entrevistar al candidato en
una entrevista dirigida y amplia de todos los aspectos de carácter espiritual, moral, familiar y
testimonio personal de los de adentro de la iglesia, como de los de afuera. recomendamos que
la entrevista sea previamente planeada y participen todos los miembros de la comisión a fin de
que después juntos puedan dictaminar si es factible inicial-mente.
• Análisis de Su Currículo y Referencias. La segunda etapa requiere de un trabajo en donde se
considere lo que el propio candidato ha entregado sobre su educación –formación bíblica y
teológica, experiencia y dones (todo demostrable y palpable, no de dichos y testimonios sin
nombres de pastores y lugares – insisto, deben verificar cada cosa que dé el candidato).
• Una investigación. La Biblia dice que examinemos los espíritus y observemos sus frutos. Sé que
esto requiere de tiempo y del obvio permiso del candidato para solicitar entrevista telefónica y
de ser posible personal con miembros y ministros de la iglesia, ministerio o denominación a los
que el candidato pertenece o perteneció a fin de que sepamos y escuchemos sobre testimonio
público y privado; sus dones y habilidades.
• Una Segunda Entrevista y Un Dictamen. Si los primeros tres filtros han sido exitosos, se debe
ahora hacer una última entrevista que aclare cualquier duda o inquietud que el comité tenga.
• Su Preparación y Entrenamiento. Establecido lo anterior, como dijéramos, será ideal
que el candidato tenga una preparación teológica previa.
• Que sea “enseñable” “siempre es posible aprender” y que el hecho de que fuera un
pastor ordenado no me hacía un experto en plantación de iglesias. Ser enseñable
refleja el carácter de Cristo creciendo en nosotros, no es fácil o sencillo, pero es algo se
trabaja día a día, el fin: imitar a Cristo.
• Aquellos candidatos que no vean como importante su educación ministerial, de asistir
a talleres, seminarios y tomar cursos bíblicos o teologices porque dice que no le hace
falta que ya estudio lo suficiente y que el Espíritu Santo le enseña, descártelo es un
neófito muy cercano a ser necio, es decir, a traicionar a Cristo y a Su Iglesia.
• Por lo tanto ser enseñable implica:
• Modelar a Cristo Como Rey. 1 Pedro 2:9 presenta un modelo de lo que debe ser un
creyente centrado en Cristo, “Pero ustedes son linaje escogido,” Dios nos llama a imitar
a Cristo como Rey. Como pastores y plantadores, aprendemos que Dios nos ha llamado
a ejercer autoridad, la ejercemos con cuidado y amor en todas aquellas tareas en las
que somos responsables,
• Modelar a Cristo Como Sacerdote. “real sacerdocio”. Nuestro deber en el proceso
de plantar o revitalizar una Iglesia es de ministrar a aquellos que sufren y
necesitan la esperanza en Cristo. Una de las tareas fundamentales de un pastor o
plantador es orar, ayunar y estudiar la Biblia a diario, es decir, aprender a
depender totalmente de la gracia de Dios el Padre y en el poder del Evangelio por
medio del Espíritu Santo, pues todo lo que hacemos es una forma en la que
imitamos a Cristo como Sacerdote.
• La comunión con Dios Padre mediante la oración y el ayuno en el Nombre del
Señor Jesucristo, el estudio bíblico y teológico con la guía del Espíritu Santo es la
mejor manera de expresar al Trino Dios en nuestra dependencia total y absoluta
en Su soberana y santa voluntad.
• El orar y ayunar es tener comunión íntima con Dios Padre; nos enseña a rendir
cuentas a Dios y nos enseña a descansar en Él. Estudiar y meditar cada día en Su
Palabra, somos instruidos para ser sabios; nos alimentamos espiritual-mente,
recibimos fe y las fuerzas.
• Modelar a Cristo como Profeta. “para que proclamen las obras maravillosas de
aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.” en el proceso de plantar y
revitalizar somos llamados también a imitar a Cristo como Profeta, es decir,
hablar y proclamar las maravillas que Él hace en nuestras vidas.
• La predicación de la Palabra es esencial y crucial en el proceso de plantación de
Iglesias, para la conservación de frutos. El Plantador o Pastor debe depender
absolutamente de la Palabra de Dios y enseñarla cuidadosamente para poder
realizar la obra que Dios le encomienda.
• Tanto el temor y temblor estarán presente en el desenvolvimiento del Pastor o
Plantador, llamados por Dios y los instrumentos descritos son usados por Dios por
medio del llamado y estar equipado para la labor a la que ha sido comisionado.
• Selección del Grupo Núcleo –Equipo de Trabajo. Una asignación que el pastor o
plantador deben hacer. Así que el siguiente paso es tener el apoyo necesario y
reclutar a otros para plantar o revitalizar la obra encomendada. Hagamos
entonces dos distinciones:
• Plantando Una Iglesia. Existen desde luego varios modelos para plantar una
Iglesia y depende del modelo, será el proceso para reclutar a un núcleo, a saber:
• Proyecto Pionero. Este es un proyecto de plantación en donde el plantador llega
a una nueva ciudad en donde no existe otra iglesia de la misma denominación y
no hay la posibilidad de reclutar un equipo. El Plantador tiene que “picar piedra”.
• Es una expresión idiomática que se usa en algunas partes de México que designa
el hecho de que no hay otros creyentes de la misma filiación y por lo tanto, se
requiere la evangelización y catequización previa a la formación de un núcleo.
• Recuerde que la gran comisión consiste en predicar y hacer discípulos, no
miembros de iglesia, eso es extender el reino. El pastor orquesta, no extiende el
reino, por el contrario obstaculiza su crecimiento y expansión.
• Quienes pueden formar parte de su equipo ministerial y de servicios
• 1) La espiritualidad, la responsabilidad al cumplir su tarea, en la puntualidad al asistir a
los servicios de cultos, reuniones y obra personal.
• 2) Los que son ganadores de almas, porque siempre están trayendo gente nueva y
repartiendo tratados y folletos de solo y en todo lugar y tiempo.
• 3) los que son intercesores, porque no faltan a los servicios y reuniones de oración y
toman bastante tiempo orando y preguntan cómo se ayuna, si pueden ayunar y porqué
temas hay que ayunar, etc.
• 4) Los que son para la obra del cuidado del santuario o lugar de culto, ejemplo:
mantenimiento, anfitriones (Ujieres) para recibir a la gente, hacer cocinar, acondicionar
el salón y santuario; preparar los elementos para la cena del Señor, etc.
• 5) También podrá observar a los que son solo calientan bancos; comúnmente son los que
critican a los que hacen. Pero estos tienen su buena tarea que ayuda muy bien al
mejoramiento de todo. Ellos son los que nos dicen lo que está mal y que cosas hay que
cambiar; claro, no se le hace caso en todo, pero siempre considerar todo lo que dicen y
no desechar desde un principio.
• Todo tiene un precio que pagarse, pero al contar con una Filosofía Ministerial
Bíblica, pagará el precio justo y no demás.
• Diferencia entre Mentor y Padre (según el autor)
• Los que somos mentores o desarrolladores, hacemos crecer la congregación
física, intelectual y espiritualmente,
• Proyecto Con Una Iglesia Central Que Proporciona Un Núcleo. Cuando existe
Iglesia creciente que tiene en su ADN la plantación de Iglesias –corazón misionero
o de expansión, el enviar a un a un grupo de creyentes experimentados y que
amen abrir nuevas puertas y que sientan pasión por las almas, no que van a hacer
turismo, (aquí no sirve el calienta banco, solo trabajadores apasionados
• No es bueno que el pastor los designe, y mucho menos le imponga el equipo;
conviene que el plantador elija entre los que con él tienen mayor afinidad y la
misma visión. El asunto es que si el pastor no deja al plantador elegir su gente, el
plantador tendrá que luchar con esa gente que el pastor le impuso para que vean
la visión y mientras ello, se pierde el tiempo y desgasta mucho, al punto de
desanimar al plantador.
• Proyecto en la Que Un Presbiterio Proporciona Un Núcleo De Varias Iglesias. Algunos
Presbiterios autorizan a un Plantador para determinada área en una ciudad y región e
invitan a las Iglesias de su alrededor a considerar en la aportación de una o dos familias
a ser parten del nuevo proyecto y a ayudar en el financiamiento y al apoyo en oración
y ayuno.
• Revitalizando Una Iglesia. Aquí podríamos designar por lo menos tres opciones factibles:
• Iglesia Disminuida. Son iglesias en los que sus “días de gloria” han pasado y su
membresía ha disminuido, pero aún mantiene la posibilidad de sostén propio y
gobierno propio. Además, ha perdido la capacidad de multiplicación.
• Reunión de Liberación: Para revitalizar una iglesia se debe convocar a hermanos que
sean interce-sores en ayunos y oración, – muy importante, solo deben ser hermanos
de ayuno y oración, llenos del Espíritu Santo, reunirse dos sábados alternos – uno cada
15 días en uno o dos meses. Insistimos que deben ser verdaderamente hermanos de
ayuno y oración, no hermanos que simplemente oren. Tienen que se guerreros en la
oración, llenos del Espíritu Santo para romper y cortar maldiciones, envidias, celos y
todo lo que proviene de las tinieblas. Y luego llevar a cabo reuniones de avivamientos.
• Reuniones de Avivamiento: En segundo lugar, para revitalizar una iglesia se debe
hacer reuniones de avivamientos no se trata de campañas o cruzadas evangelísticas.
Son cultos y reuniones exclusivamente para los hermanos de la iglesia local, para que
ellos vuelvan a encenderse con el fuego del Espíritu Santo, para que sean renovados;
Estas reuniones deben ser realizadas por ejemplo por tres días seguidos, viernes,
sábados y domingos.
• Campañas y Cruzadas de Evangelización Masivas: es necesario previo a esta
actividad, formar equipos de visitadores para que vayan a las casas de las tarjetas de
decisiones, para ello hay que formar un equipo un mínimo de dos y un máximo de
tres visitadores que tengan conocimiento de la Biblia, amor y pasión por las almas.
• Esta actividad de Campañas y Cruzadas de Evangelización Masivas, debe ser bien
agresiva, se debe hacer un despliegue portentoso con el equipo local apoyado por la
iglesia central o patrocinante: Invadir plazas, escuelas, hospitales, calles, etc.,
impactando la ciudad y el barrio donde está la iglesia a revitalizar; en esa
oportunidad podrán asistir mas hermanos fuera del Núcleo como para que se vea
mucha gente y llame la atención del público.
• Se aconseja que todo no dure más allá de las dos horas treinta, luego la gente
puede recibir ministración hasta las altas horas de la noche, pero los micrófonos
se anulan, para no ser de mal testimonio para los vecinos que tienen que
descansar para ir a su trabajo. A los vecinos se los debe ganar con el orden, la
buena organización y el respeto por ellos.
• Estas campañas se realizarse los cuatro días finales de cada semana, es decir,
jueves, viernes, sábados y domingos.
• los visitadores asisten a las casas de las tarjetas de decisiones e invitarles a los
cultos normales y comprobar si recibieron milagros para que cuando asistan a los
servicio ellos puedan comentar su testimonio.
• . Iglesia Rompecabezas. Hay Pastores que deciden unir una serie de grupos en
uno sólo, a fin de restablecer o establecer una iglesia. la revitalización inicia con
un proceso de integración y lo que podría ser un núcleo puede ser muy nutritivo,
pero con aspectos inestables.
• Características de Un Núcleo. Como hemos visto determinar un núcleo o grupo
es un asunto clave y complejo, pero de vital importancia en todo el proceso de
plantar y revitalizar. Estas son algunas de las características que no negociables:
• Amar la Visión. Es claro, el Pastor o Plantador debe trabajar en una Filosofía
Ministerial que le permite reclutar a hermanos. Así, cuando se da la formación
del núcleo, se debe presentar la Filosofía Ministerial junto a todas sus
implicaciones.
• Involucrarse activamente. Plantar o revitalizar es trabajo arduo, dedicado, pero
planificado con tareas inmediatas, mediata y a largo plazo o por etapas.
• Comprometerse Económica-mente. Es implícito desde luego, pero es importante
hacerlo notar siempre durante se recluta el equipo, ya que el núcleo modelara el
ADN de la Filosofía Ministerial, ellos son ejemplo para los nuevos creyentes. Los
miembros del núcleo deben comprometerse a sostener económicamente el
proyecto y a modelar a otros sobre la importancia de dar sus diezmos, ofrendas
comunes y ofrendar liberalmente para la obra a su discreción.
Lección Ocho
Como Elaborar Una Filosofía Ministerial
• Redactar su Filosofía Ministerial ha requerido de un proceso de análisis, estudio y
reflexión en cada una de las áreas abordadas en los capítulos anteriores. Deberá
seguir la investigación, análisis y reflexión sobre las palabras adecuadas, los
términos teológicos que utiliza y el significado de ellas dentro de su contexto a fin
producir una filosofía relevante al contexto y centrada en el Evangelio.
• Una Filosofía Ministerial correcta comunicada permite anunciar el mensaje del
Evangelio de manera relevante a la cultura donde pretende llegar.
• Definición Conceptual. Se refiere que al redactarlo se debe tener un objetivo
claro ya que dicha reflexión bíblica teológica y contextual guiarán las acciones. Es
decir, es el “aterrizaje” de las ideas en conceptos concretos, medibles y
evaluables.
• Visión. ¿Qué es la visión en una Filosofía Ministerial? De modo concreto, la visión
es lo que se espera que sea nuestra iglesia, nuestra vida, y nuestro ministerio en
el futuro.
• Roberto Espinosa consultor de márquetin define la visión de la siguiente manera:
• “…La visión define las metas que pretendemos conseguir en el futuro.
Estas metas tienen que ser realistas y alcanzables, puesto que la
propuesta de visión tiene un carácter inspirador y motivador.” Espinosa
mismo ofrece una serie de preguntas que serán respondidas por nuestra
visión a fin de ser asertivos, al visualizar, “ayudará a responder a las
siguientes preguntas: ¿qué quiero lograr? ¿En dónde estaré en el futuro?
¿Para quién lo haré? ¿Ampliaré mi zona de actuación?”.
• Dichas preguntas darán un panorama claro de lo que deseamos y sea
una realidad para nuestra iglesia en revitalización o futura iglesia que se
piensa plantar.
• ¿Quiénes Somos? Una comunidad restaurada en la centralidad del
Evangelio de Cristo.
• ¿Qué Pretendemos Lograr o en Nuestro Caso Alcanzar? Delimitar
nuestra zona de influencia y ver al futuro, la extensión de lo que
pretendemos nos ayudará a la planificación estratégica.
• . ¿Dónde Quiero Estar en el Futuro? Como una Iglesia Multisitio, no es decir algo vago
o castillos en el aire; sino que adora, discípula y testifica con visión de alcanzar a toda
criatura por todo el mundo, conforme a la gran comisión.
• La revitalización o plantación de iglesias es un modelo donde la Iglesia será el
instrumento final con ciertas características. En este caso, se enumera “adoración,
discipulado y testimonio.”
• ¿Ampliaré Mi Zona de Influencia? Es obvio, si la intención de cierta Iglesia tiene
muchos sitios de expansión, es clara la intencionalidad de esparcirse por toda la ciudad
y aún más allá de la ciudad, además dice y se refieren al “mundo entero.”
• . ¿Para Quién Lo Haré? Es claro, que se hace para la gloria de Dios.
• Misión. ¿Qué es la misión en la Filosofía Ministerial? La misión es el cómo se pretende
alcanzar la visión que hemos enunciado.
• Espinosa aporta también una serie de preguntas que deben ser contestadas en el
elemento de misión, a saber: “¿qué hacemos? ¿Cuál es nuestro negocio? ¿a qué nos
dedicamos? ¿Cuál es nuestra razón de ser? ¿Quiénes son nuestro público-objetivo?
¿Cuál es nuestro ámbito geográfico de acción? ¿Cuál es nuestra ventaja competitiva?
¿qué nos diferencia de alguna competencia?”
• Expongo la misma dinámica de nuestra iglesia referida: “Restaurar familias por
medio del discipulado Cristo-céntrico, la adoración a Padre Dios, Pactual de Gracia
y el testimonio centrado en el Evangelio.”
• ¿Qué Hacemos? ¿Cuál es nuestro negocio? ¿A qué nos dedicamos? ¿cuál es
nuestra razón de ser? Son preguntas que son claramente contes-tadas: “Restaurar
familias”. Es punto es vital en el proceso de la elaboración de nuestra misión, ya
que si lo hacemos no tiene nada que ver con lo que soñamos (visión), entonces
hacemos una serie de “actividades recreativas” que no producen y dirigen hacia
ningún lado.
• Una buena declaración de misión nos enfoca claramente. Esta es la palabra clave
de la misión.
• ¿Quiénes Son Nuestro Público Objetivo? Esto en particular ya no es presentado en
ésta declaración de misión, porque ha sido incluida en la visión y es implícito
• . Hay alguna declaración de visión que en su misión secciona y enfoca
específicamente un grupo.
• Debe quedar bien enfatizado lo que hace la iglesia y alrededor, porque de ella
depende para que se tomen las decisiones en el futuro.
• ¿Cuál Es Nuestro Ámbito Geográfico de Acción? Esta es una de las preguntas que
no son respondidas por esta declaración de misión, aunque es una de las cosas
que en la visión está delimitado…”
• Es preferible delimitar una zona o sección en la ciudad si es algo que es factible
desde el análisis que se hace.
• ¿Cuál Es Nuestra Ventaja Competitiva? En esta declaración de misión se
contemplan tres ventajas distintivas: “discipulado Cristo céntrico, la adoración
Padre céntrica y del Pacto de Gracia y el testimonio centrado en el Evangelio del
poder de Dios.”
• Definitivamente hay todo un leguaje bíblico-teológico colocado con
intencionalidad. Existe la designación distintiva de un discipulado Cristo-Céntrico,
es decir, la obra y persona de Cristo con la base central y determinante de la
formación de quienes son parte y serán parte de esta iglesia en particular.
• En segundo lugar, se distingue a la adoración, a Dios Padre como el único Ser a quien rendir
culto por medio del Pacto de Gracia mediante la obra redentora de Cristo Jesús en la cruz;
• En tercer lugar, establecer una pauta interpretativa y teológica distintiva en el testimonio
que no está restringido a una serie de actividades evangelísticas, sino distingue un estilo y
actitud centrada en el Evangelio del Poder de Dios mediante el obrar del Espíritu Santo,
manifestando la vigencia actual de sus dones y frutos.
• ¿Qué Nos Diferencia de Otras Iglesias Bíblicas? El lenguaje bíblico-teológico utilizado para
respon-der a la pregunta anterior distingue definitivamente a esta iglesia como una iglesia
renovada, llena del Espíritu Santo que traza bien la Palabra de verdad.
• Nótese que es posible utilizar estos adjetivos específicamente para hacer la distinción, pero
esta iglesia decide usar un leguaje bíblico teológico y carismático no ecuménico que
implica un entrenamiento necesario de los que son parte de la iglesia.
• La visión y la misión no tienen la intención de descalificar o denostar a otros, sino de
mostrar que hemos hecho nuestra reflexión bíblica teológica contextual y estamos
conscientes de nuestras fortalezas y de nuestras debilidades. Esto es para afianzar más
nuestras fortalezas y apuntalar en nuestras debilidades para que no sucumbamos por ellas.
• Valores. Los valores son los principios distintivos, característicos y no negociables
que ayudan en la toma de decisiones para lograr que la visión sea una realidad.
• Roberto Espinosa define los valores de la siguiente manera: "Los valores, son
principios éticos sobre los que se asienta la cultura de nuestra empresa y nos
permiten crear nuestras pautas de comportamiento”.
• Los valores son el ADN que permiten tomar decisiones claves durante todo el
proceso de plantación o revitalización y permiten elegir y desechar cierto
programa, actividad, contratación o cualquier otro asunto considerado en cuanto
a tiempo y formas.
• Esto tiene que ser reflexionado por nuestra visión, misión y sobre todo nuestros
valores. En definitiva, una decisión ética y difícil de tomar. En estos casos
debemos preguntarnos a lo que deben responder a nuestros valores: “¿Es el
tiempo o el momento oportuno? ¿Contamos con los recursos humanos y los
medios financieros?”.
• Los valores de la Iglesia Presbiteriana en Durango son:
• “Somos Una Comunidad de Pacto. La doctrina del Pacto de Gracia es el eje central o
fundamental a través del cual toda la Escritura es estructurada.
• Somos Una Comunidad Cristo Céntrica. Es decir, nuestras relaciones están enfocadas en
la obra redentora de Cristo, por lo tanto, nuestras relaciones muestran a Cristo en sus
tres oficios a saber:
• Modelar a Cristo Como Rey.
• Modelar a Cristo Como Sacerdote.
• Modelar a Cristo Como Profeta. Expresar la “gracia de Cristo” a otros no puede estar
solamente encasillado a una metodología como un evangelismo explosivo (EE) o las 4
leyes espirituales. El evangelio debe ser expresado con una actitud de centralidad en el
Evangelio del Poder de Dios, donde la Persona del Espíritu Santo pueda obrar con
señales, prodigios y milagros.
• Somos Una Comunidad Centrada en el Evangelio. Recono-cemos que, como familias,
necesitamos diariamente del Evangelio. Aprender todos los días a modelar en nuestra
relación familiar el perdón, la gracia y la restauración, lo que permitirá proclamar
poderosamente la gracia salvífica de Cristo a otros.
• s necesario reconocer que no sólo los no creyentes necesitan el “evangelio”, sino
también a nosotros nos dará la oportunidad de mostrar la gracia redentora de
Cristo a otros al ver nuestras familiar reflejar a Cristo y a Dios Padre.
• Somos Una Comunidad con Enfoque en la Ciudad. Hemos sido traídos por Dios a la
ciudad de Durango y por lo tanto, en esta ciudad viviremos y prosperaremos, su
problemática será la nuestra y su dolor el nuestro.
• Somos llamados a alcanzar a toda la ciudad y a todos los estratos sociales con el
poder del Evangelio, a influir en las esferas sociales, políticas, financieras,
educativas, etc.
• . Somos Una Comunidad con Visión de Reino.
• Somos Una Comunidad Comprometida con Un Movimiento de Plantación de
Iglesias
• ¿Cómo Somos? Este Iglesia se concibe así misma como una “comunidad” con seis características
distintivas Pactual, Cristo céntrica, centrada en el Evangelio, enfocada en la ciudad de Durango,
con visión de Reino y comprometida con un movimiento de plantación de Iglesias.
• Esto define quienes son y establece las pautas para interrelacionarse con su
contexto. En general, se recomienda que los valores no sean más de seis o siete
valores, para que sea fácil de visualizar, pues muchos podrían desviar y
desenfocarla.
• ¿En Qué Creemos? Aunque el tema central no es precisamente una declaración
de fe, estos son principios bíblicos teológicos y contextuales no negociables que
norman la Filosofía Ministerial.
• Estos principios sirven para normar la toma de decisiones a fin de no perder el
enfoque en lo que hacemos y desviarnos en asuntos o actividades que en lugar
de ayudar a nuestra misión, visión y valores, la desvíen o incluso pueden
desvirtuarla.
• Observe que en nuestro ejemplo hay tres distinciones claras:
• Norma Doctrinal.
• Norma Contextual.
• Norma Misionológica.
• Desarrollo Estratégico Ministerial. Esto no es el plan aún. En el plan se aterriza
toda la Filosofía Ministerial.
• El diseño estratégico es la particularización de nuestra visión, misión y valores,
expresando los trazos ministeriales que darán enfoque, unidad con las otras
congregaciones y en el Consejo Pastoral de la ciudad y el destino final será a
nuestra Filosofía Ministerial.
• Estrategia Ministerial o Diseño Estratégico. El diseño ministerial es la estructura
filosófica que sostiene nuestra visión, misión y valores.
• Definiciones. ¿Qué debemos definir claramente al integrar nuestro diseño
ministerial o diseño estratégico? Si ha hecho el trabajo de investigación bíblica,
teológica y contextual, si ha tomado el tiempo para reflexionar e integrar cada
• El diseño estratégico es el instrumento conceptual a través del cual la planificación será
extendida y será reflejada la visión, misión y valores. Es importante en el diseño
estratégico “aterrizar” los conceptos y transfor-marlos en directrices generales que
permitan darnos direccionalidad y enfoque.
• En dicha área, la sugerencia es enfocarse en tres a cinco elementos que aterricen o
materialicen las ideas en propuestas bien definidas y den dirección a las decisiones y
planes que se elaboran.
• . Evangelio Enfoca a la Nueva Iglesia en ¿Qué y Cómo? Es vital para esta iglesia definir
que pretenden cuando citan Evangelio, su diseño ministerial afirma: “Este debe ser
comunicado a la sociedad de manera contextual y relevante a su vida cotidiana, pero
siempre reflejando la obra de Cristo y la centralidad que el Evangelio mismo produce en
nuestras vidas de manera que nos evita y recuerda siempre el peligro del aislamiento o
la asimilación.”
• Ciudad Enfocada a la Nueva Iglesia en ¿Dónde y Cómo? Es importante que cuando nos
hagamos de una Filosofía Ministerial, el enfoque será contextual. El poner la ciudad
como un concepto filosófico determina cómo se administra y se toman decisiones.
• Movimiento Enfocado a la Nueva Iglesia en ¿Hacia Dónde y Cómo?
• Planificación. Ahora estamos listos para planificar y llevar a cabo todo un diseño
estratégico que permita un enfoque adecuado al contexto. Por otro lado, considere,
no hay una Filosofía Ministerial perfecta y puede ser revisada y perfeccionada según
su propia experiencia en el día a día. Perdón por lo que le diré, pero sería una torpeza
no ser revisada periódicamente su Filosofía Ministerial, pues los tiempo y las persona
cambian; solo Dios es Veraz e Inmutable.
• los limites están en nuestra mente, no en nuestro bolsillo, pues Dios Padre siempre se
proveerá para sus propósitos, si no hay recursos para un proyecto, es porque Dios no
está en el asunto y no insistamos, vendiendo pirulines para recaudar fondos.
• Como la intención de este texto es orientar a la elaboración de su propia Filosofía
Ministerial, remarcó: cada parte del proceso es indispensable y no puede ser
desechada, menospreciada o menoscabada, pues si ha hecho el esfuerzo de trabajar
durante todo el proceso para elaborar una Filosofía Ministerial en particular, no caiga
en la tentación de reflexionar el tiempo suficiente para planificar el proceso o las
fases requeridas.
• El reto de ahora en más, es trabajar para elaborar su propia Filosofía Ministerial.
Es un proceso que requiere paciencia, dedicación, estudio, reflexión, análisis,
investigación, recopilación y vuelta a la reflexión.
• Aunque trabajamos en el Reino y su establecimiento, rara vez tomamos el tiempo
necesario para hacer todo el proceso.
• Este proceso es continuo y permanente, pero debe producir un documento que
nos guie y nos permita ser asertivos y pertinentes a nuestra propia generación
con el Evangelio de la Gracia.
 
• ¡A Él sea la gloria!

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