Raluca Ciortea

Destinos intelectuales en el espacio español: Alexandru Busuioceanu, Vintilă Horia y George Uscătescu es un modesto intento de sacar de entre las “caries secas”, del polvo del eterno olvido a tres escritores rumanos que, debido a factores extrínsecos a ellos, tuvieron que buscar otro lugar para vivir y expresarse en libertad. La escritura, por tanto, se convierte en “pequeño pueblo ante la soledad”, en la forma prima de mantenerse en contacto con el pueblo, la cultura y las raíces que los definían. Escriben en español haciendo uso de todos los elementos culturales que aparecían inscritos en el ADN cultural rumano. En este libro se aproxima el tema del exiliado y del exilio mediante las teorías del habitus de Pierre Bourdieu o el simulacro de Roland Barthes.

El libro Campos de la memoria: el testimonio de Primo Levi y Max Aub trata sobre todos aquellos que han sido reducidos al silencio por la deshumanización, el dolor y la muerte. Se trata de una obligación moral no dejar que la sinvoz de estos se pierda en el olvido. En Campos de la memoria, la autora indaga en el mundo de los campos de concentración y pone en evidencia el ruidoso silencio de aquellos que allí han encontrado su fin. Es un periplo por el laborioso camino de zanjar entre las trincheras de la memoria, colectiva e individual, y redarlos a la vida histórica y social, de expresar el dolor y el trauma que supuso haber estado preso en las garras del infierno concentracionario. Sola analiza de manera contrastiva la narrativa testimonial de Primo Levi y Max Aub, ambos testigos del doloroso ejercicio de silenciar la palabra y del vivir en el inframundo de los campos de concentración. Para tanto, divide su libro en dos partes fundamentales y, a la vez, complementarias. En la primera parte, la autora se decanta por analizar una serie de conceptos de real importancia para la comprensión de la narrativa memorialística y testimonial de los autores mencionados, y para lo cual se basa en una serie de autores como Tzvetan Todorov, Paul Ricoeur, Joël Candau, Jaume Peri Blanes, Eloísa Nos Aldás, Jorge Semprún, Esther Cohen o Manuel Reyes Mate, entre otros. Allí se tocan nociones tales como memoria, testigo, y testimonio, aunque sea el de desmemoria el que adquiera un mayor protagonismo. Este es, en las Caligrama,

La retórica del cuerpo impuso como imperativa la plurivalencia del discurso y de la mirada que cuestiona y pone en tela de juicio los estereotipos y los prejuicios que han contribuido de manera continua a la creación de la imaginería del cuerpo y, aún más, del cuerpo de la mujer. El corpus literario escogido para el análisis hermenéutico no fue constituido al azar, sino que se inscribe en el indeleble eje Este-Oeste, aunque, en mi opinión la verdadera esencia del tema no reside en el discurso geográfico mencionado antes, sino en el problema delineado por la dialéctica entre centro-periferia. La observación distraída y la aún vigente hegemonía falocentrista imponen una nueva perspectiva sobre la importancia del cuerpo de la mujer tal como este se ve reflejado tanto en la literatura como en las artes visuales, y especialmente en la pintura modernista sobre la cual se desea insistir en este artículo. Los autores escogidos son el escritor portugués José Saramago con el libro Ensayo sobre la ceguera y los autores Bohumil Hrabal 1 con Una soledad demasiado ruidosa y Milorad Pavić 2 con El último amor en Constantinopla porque los tres, 1 Bohumil Hrabal (1914-1997) fue un escritor checo cuya narrativa destaca por lo novedoso y lírico. Sus personajes son muy atrevidos y creativos, caracterizados por el interés por los detalles mínimos que definen el cotidiano. 2 Milorad Pavić (1929-2009) fue un escritor de origen serbio, exponente de la narrativa hipertextual, que se aleja de la noción literaria de principio-fin lineal. En sus obras de mezcla el mito y la historia.