Las Revoluciones Se Ganan en La Calle
Las Revoluciones Se Ganan en La Calle
Las Revoluciones Se Ganan en La Calle
medios de comunicacin tan esenciales para obtener la victoria frente al tirano?, o es la voluntad de
un pueblo unido la que finalmente logra derriban las estatuas de los mismos e instaurar regmenes
ms justos?.
Este es precisamente el tema tratado en este artculo de Isaac Rosa, clebre periodista y escritor del
peridico digital generalista y de mbito estatal Pblico, adems de un reconocido escritor cuya
obra literaria le ha valido varios premios de importancia a nivel nacional. Este, a consecuencia de la
intencin comunicativa, utiliza la estructura de los textos expositivo argumentativa, en la que se
exponen una serie de hechos objetivos para luego desarrollar una tesis en torno a l (apoyada por
argumentos de distinta ndole).
Se puede deducir que se trata de un artculo perteneciente al subgnero periodstico de opinin, ya
que se mantienen en l sus caractersticas principales, tales como la presencia de la firma nominal
del autor, junto al uso de un lenguaje claro con un evidente fin divulgativo, con el fin de que llegue
el mensaje al mayor nmero de personas posible y as lograr en ellos una actitud reflexiva acerca
del papel de Internet en las actuales revoluciones sociales, un tema de candente actualidad debido
al conflicto que contina en Ucrania y que enfrenta a proeuropeos y prorusos en una lucha sin
cuartel que ya se ha cobrado varias decenas de muertos, situacin anloga a la de Venezuela, pero
cambiando los bandos enfrentados.
As, el autor, defiende que, lejos de lo que se cree, las revoluciones, tales como la que aconteci en
Siria, se ganan con la accin directa y reivindicativa. El autor se sirve de argumentos, que sern los
cimientos sobre los que construya su planteamiento con el fin de orientar la opinin de los lectores,
entre ellos destaca un gran nmero de argumentos de hecho (87% responda afirmativamente),
apoyado en una deixis temporal que provoca que el lector confe en la veracidad de dicha
informacin, (Google y Twitter han habilitado un servicio), argumentos de verdades
evidentes/lgicos (tambin cort las carreteras, y nadie habla de revolucin automovilstica),
argumento social confiamos en que todo cambiar con un clic, entre otros.
Las funciones del lenguaje predominantes son la apelativa, en el uso de preguntas retricas, en este
caso indirectas (me gustara saber qu responderan los egipcios a esa misma encuesta) al igual
que en el plural asociativo, con intencin inclusiva cuanto ms libres nos sentimos, ms
controlados estamos, hace al lector partcipe de lo que expone, todo esto con el fin de llamar la
atencin del lector y provocar en una actitud reflexiva acerca del tema tratado, adems de la
funcin expresiva, a travs de la modalizacin, que nos permite conocer la posicin del autor en el
tema tratado, ya sea a travs del uso de la primera persona junto con verbos de percepcin y deseo
(me gustara, no me extraa), o de lxico valorativo manipulables, muertos. Cabe destacar la
influencia de la funcin referencial, pues de forma recurrente dada la naturaleza objetiva de las
informaciones expuestas, y en el uso de la tercera persona gramatical (preguntaba ayer..).
El ttulo, las revoluciones todava se ganan en las calles, resume en pocas palabras el contenido y
la propia tesis defendida por el autor, recurso que proporciona unidad al texto y refleja la intencin,
por parte del autor, de que los receptores capten con propsito fundamental del artculo y dirijan
su atencin hacia ese foco.
A modo de resumen del artculo, el autor hace referencia a que, lejos de la concepcin popular,
medios como el Internet y las redes sociales no son medios efectivos en cuanto al desarrollo de
revoluciones se refiere, estas se vencen en la calle.
La estructura que se sigue en este texto es la inductiva, puesto que en ella se introduce el artculo
con un argumento de hecho para despus desarrollar su planteamiento en el cuerpo argumentativo
(apoyado de argumentos) para luego terminar enunciando la tesis a modo de conclusin. Por tanto,
el autor ordena su discurso en tres partes que responden a la organizacin textual ms frecuente
en los textos expositivo-argumentativos y que favorecen la progresin temtica (dichas partes no
coinciden con la disposicin formal del texto, que se compone de cinco prrafos), se mantiene el
orden clsico interno, pero no externo.
En consonancia con el tipo de texto, el lxico utilizado es claro y conciso, falto de vocabulario
especfico por su ya expuesto fin divulgativo. El uso de modalizadores se aprecia sobre todo en el
empleo de la 1 persona del singular, y no tanto en el de adjetivos valorativos, dado que casi no se
cuenta con ejemplos en el artculo, tal vez en la bsqueda de aparente objetividad por parte del
autor. Los sustantivos utilizados son fundamentalmente concretos, y cabe destacar el uso de
anglicanismos como consecuencia del tema tratado, (clic, Google, Twitter). Con el fin de
aportar cohesin y coherencia al artculo, el autor utiliza un gran nmero de conectores, entre ellos
destacan los conectores de contraste (Ahora bien), conectores de causa (de hecho), de
rectificacin (no dudo que), de adicin (tambin). Por otra parte, se mantiene la recurrencia
semntica en palabras como Mubarak, Internet, que, junto con los campos semnticos,
configuran el tema y dan unidad y sentido al texto, dentro de las comunicaciones,destacan
anglicanismos como clic, Google, Twitter, Facebook, redes sociales, dentro de l se diferencia el
hipernimo de redes sociales, formado por hipnimos como (Twitter y Facebook) y el de control
(vigilables y manipulables).
Los tiempos verbales predominantes son el pasado, para enunciar una serie de hechos objetivos
importantes a la hora de defender la tesis (cort las carreteras, pero), pero sobre todo del tiempo
presente, pues hace referencia a un tema de actualidad.
Al igual que en todo artculo periodstico, las oraciones utilizadas son compuestas, para expresar
pensamientos e ideas complejas, a estas ideas se le aaden argumentos a travs de oraciones
coordinadas copulativas (y con muertos nada virtuales, y nadie habla), o bien se refutan ideas
extendidas en la sociedad (pero lo que estamos comprobando, pero dudo que lo de Egipto).
CONTRAARGUMENTOS: el autor se plantea el rigor de estas opiniones y ofrece varios argumentos
que las refutan y que hacen tambalear la tesis a la que se enfrenta (asimismo, estos
contraargumentos avalan la tesis del autor).
ARGUMENTO CONCESIVO: Concede cierta relevancia a la tesis que se intenta refutar
PAUTAS COMENTARIO CRTICO
1. Comienzo original
2. Autor y peridico 3. Caractersticas subgnero periodstico de opinin 4. Funciones del lenguaje
5. Tesis y argumentos
6. Titulo 7. Resumen 8. Estructura del texto
9. Lxico 10. Sintaxis 11. Tiempo verbal
12. Figuras literarias
13. Argumentacin