EJE 5 - Resúmenes Ampliados
EJE 5 - Resúmenes Ampliados
EJE 5 - Resúmenes Ampliados
ANTIGUOS DILEMAS
COORDINADORES: Mara Eduarda Mirande lvaro Zambrano Mnica Rivera Mara
Soledad Blanco Mariel Silvina Quintana
Este eje es una propuesta para pensar y abrir el dilogo, en nuevos contextos histricos y
culturales, acerca de algunos temas y problemticas que ataen tanto al lenguaje como a
la literatura, y que interesan no slo a los estudios lingsticos y literarios sino tambin a
otras disciplinas (como la filosofa, la historia, la psicologa, la sociologa, entre otras) que
tienen a la lengua en uso como objeto de reflexin y/o anlisis.
Las posibilidades creativas y de representacin del lenguaje, enmarcadas en determinados
gneros discursivos y contextos, constituyen un territorio abierto a nuevas perspectivas
sobre antiguos dilemas que nos proponemos repensar:
- las nociones de realidad y ficcin con sus lmites, alcances e intersecciones;
- las mltiples relaciones entre autor y texto, autor y lector y entre lectores y lecturas;
- la relacin entre sujeto-discurso-sociedad;
- la lectura y la reescritura como herramientas de creacin y recreacin de otros discursos;
- la imaginacin y la memoria como los andamiajes que sostienen tanto al acto de leer
como al de escribir...
Los anteriores son slo algunos de los problemas que proponemos abordar desde este
eje, los que pueden ser modificados, ampliados o enfocados de mltiples modos.
Aspiramos, as, a generar un espacio de indagacin y discusin interdisciplinaria sobre la
capacidad creativa del lenguaje, que enriquezca los campos disciplinares de las ciencias
humanas y sociales en un dilogo fecundo.
Balestrino, Graciela
UNSa
gracielabalestrino@gmail.com
Ttulo: El juego del gran bonete, metateatro pardico al revs y celebracin del actor en
un disparate adrede del teatro barroco de Charcas
Resumen: El trabajo se inscribe en la ltima etapa del Proyecto CIUNSa 1975 La
metateatralidad en la dramaturgia espaola del siglo XVII. Parte II. El espejo invertido del
metateatro breve (2011-1015), continuacin del Proyecto La metateatralidad en la
dramaturgia espaola del siglo XVII (2008-2011), centrado en la comedia. La
investigacin sobre metateatro breve -que est en su etapa final- se aboc
fundamentalmente a construir una tipologa de escritura metateatral a partir del estudio
de textos que expresan modalidades metateatrales muy poco exploradas, sin obviar la
diacrona del proceso y cambios del metateatro breve en la mencionada centuria.
As como el teatro es paradojal mezcla de artificio y realidad, el metateatro,
sobreteatralizacin imbricada en la accin dramtica es artificio de artificio que reflexiona
sobre dualidades epistemolgicas y artsticas de la Temprana Modernidad:
realidad/apariencia, verdad/ficcin, mismidad/otredad, identidad del ser y del actor, entre
otras. Por consiguiente el metateatro no es un mero recurso o artificio formal aunque
muchas veces as se lo considera.
La indagacin terica y crtica acerca del metateatro (que se ha incrementado
notablemente en los ltimos aos con diversas y sustanciales aportaciones devenidas del
inaugural estudio de Abel) designa un campo conceptual dinmico con una amplia
variedad de procedimientos reflexivos, entre los cuales el ms estudiado y conocido es el
teatro dentro del teatro. Pero el arco del metateatro es muy amplio, como lo muestra la
refundicin o reescritura, entre muchas otras ingeniosas variantes y formalizaciones.
Por otra parte el teatro de los corrales de comedias como el de mbito cortesano era un
espectculo teatral mltiple con ms de tres horas de duracin que requera un pblico
avezado para disfrutar tanta diversidad. Las veladas teatrales se conformaban con una
sucesin de piezas de distinta tesitura entre las que ocupaba un papel primordial la
comedia, pero tampoco faltaban las piezas cmicas del denominado teatro breve conformado por loas, entremeses, mojigangas, bailes de fin de fiesta, jcaras , ubicadas
marijobautista7@gmail.com; facundomur@hotmail.com
Ttulo: El empleo del lenguaje publicitario en la obra potica de Nstor Groppa
Resumen: El vertiginoso avance de los medios de comunicacin ha signado la vida de las
ltimas generaciones del siglo XX y XXI. Sera ingenuo pensar que su influencia fue slo de
carcter superficial y cotidiano, y ms an si se parte del hecho de advertir que muchas
personas, hoy en da, no pueden prescindir de alguno de estos medios en todo su da,
llmese radio, televisin o, actualmente, Internet.
Nstor Groppa, observador de la vida, las gentes y sus avatares, pudo intuir la
gran atraccin que estas nuevas comunicaciones tendran en las personas y pensamos, tal
vez un poco insolentemente, que no quiso que las Letras se quedaran afuera de ese
mbito. Conociendo las potencialidades y posibilidades que la poesa ofrece, propici que
estas nuevas tendencias comunicativas, sus contenidos y formas, se hicieran argamasa
para sus escritos. Es as, que hoy leyendo entre lneas vemos en sus obras modos del
lenguaje radial, del lenguaje publicitario, del cinematogrfico, del musical y del ms
influyente de hoy: el televisivo.
La intencin de nuestra ponencia es hallar los mecanismos y dimensiones que
Groppa descubri en estos nuevos formatos para adaptarlos al mundo de lo escrito. En
esta ocasin en particular nos abocaremos al lenguaje publicitario y buscaremos revelar
qu elementos recre, cmo los estudi y reconoci profundamente, para luego aplicarlos
al lenguaje en su diversidad y as moldearlo a su antojo e inspirarse del ambiente que lo
rodeaba.
En principio, nuestra intencin no es describir las extensas teoras que existen
sobre los mecanismos que la publicidad emplea en su quehacer cotidiano, pues sobre eso
hay mucho escrito y no es nuestro campo. Lo que nos proponemos es mostrar
brevemente los lineamientos tericos bsicos que un mensaje publicitario porta. Para tal
fin, slo tomaremos aquellos conceptos o aportes que nos puedan ayudar a identificar los
elementos de la publicidad en la obra de Groppa.
La mayora de los textos consultados sugieren que la publicidad es un producto
propio de nuestro tiempo, se halla sustentada por el comercio y los medios de
comunicacin. El lenguaje que ha de utilizarse ha de ser de caractersticas estandarizadas
y con tendencias a la homogeneizacin del consumidor.
El objeto a publicitar no posee en s mismo el estatus definido de vendible, sino
que ste le es dado por la elocuencia del lenguaje propagandstico. Este lenguaje se apoya
en los parmetros valorativos que cada sociedad posee y los emplea a favor de sus
objetivos, en este caso la venta. Son ejemplo de ello la juventud, el xito, la riqueza, etc.
La publicidad, en su afn de conquistar las voluntades de los consumidores,
emplea como herramientas todo tipo de lenguajes y medios expresivos, es por eso que no
es extrao hallar en ella recursos retricos como la repeticiones, las imgenes visuales,
incorporacin de extranjerismos, registros coloquiales, tecnicismo, e incluso
transgresiones a la norma gramatical para hacer economa del lenguaje y lograr un
mensaje ms directo.
Campuzano, Betina
Universidad Nacional de Salta
betinacampuzano@gmail.com
Ttulo: Primer plano: ciudades yuxtapuestas y nuevos realismos en Ellos eran muchos
caballos de Luiz Ruffato
Resumen: En las ltimas tres dcadas, una literatura agobiada por realismos mgicos y
lectores salteados, por la autorreferencialidad y la opacidad del lenguaje, por la
experimentacin artstica, sucumbi ante el relato descarnado y urgente. As se inicia el
reinado de las crnicas urbanas junto con la garra testimonial de Pedro Lemebel, Martn
Caparrs, Juan Villoro, Cristian Alarcn y, por supuesto, el inolvidable Carlos Monsivis,
por mencionar slo algunos referentes. Presiden tambin el imperio del realismo los
testimonios que imbrican formas literarias, etnogrficas y periodsticas, cuyo auge sucede
en la dcada de los 80, a partir del Premio Casa de las Amricas. As realizan su aparicin
en el escenario latinoamericano las voces subalternas tamizadas por un letrado solidario:
pensamos entonces en Me llamo Rigoberta Mench y as naci mi conciencia de Elizabeth
Burgos Debray, en Biografa de un cimarrn de Miguel Barnet o en Si me permiten
hablar Testimonio de Domitila, una mujer de las minas de Bolivia de Moema Viezzer.
Ocupan el centro del canon literario -o las mesas de los ms vendidos en las libreras- las
novelas policiales que narran secuestros exprs o vuelven sobre episodios de la historia
reciente; la narconovela colombiana y tambin, la mexicana; las novelas histricas de las
ltimas dcadas cuyo referente se construye durante los periodos de la conquista y la
colonia; las autobiografas, los diarios ntimos, los relatos de viajes, inscriptos todos ellos
en las escrituras del yo.
El auge de esta escritura pone sobre el tapete el debate acerca del retorno del
realismo en la literatura latinoamericana contempornea. Lejos de la ingenua idea de una
imitacin de la realidad, el realismo de fines del siglo XX y principios del XXI suspende la
pregunta por la representacin y da paso a un dispositivo que procura un efecto de lo real
(Contreras, 2002). Por su parte, y a propsito de una lectura sobre la narrativa de Csar
Aira, Beatriz Sarlo advierte cmo el eje de la ficcin se traslada hacia un presente narrado
de modo documental o etnogrfico. Y ello sucede porque se han transformado las
condiciones de circulacin del discurso sobre el pasado. Mientras en los 80 se pretenda
descifrar la experiencia de la dictadura, en los ltimos aos el presente se conforma no
como una incgnita sino como un escenario a ser representado. Enrique Pezzoni sugiere
que toda obra se presenta como realista [] puesto que al exhibirse como procedimiento
la literatura revela que los mundos por ella expuestos son el resultado de una
exploracin (2009, 22). Una exploracin que se entiende como indagacin, crtica,
hallazgo, procedimiento.
No se trata entonces de un realismo como se pensaba en el siglo XIX, el fresco de
una poca que da cuenta de los aspectos bajos y turbios de lo humano y de la vida en
sociedad, de una animalidad o un salvajismo, esto es, un tipo de misrabilisme (Horne
2011, 11-12). Lejos de las escrituras slidas, la verosimilitud clsica, los narradores
omniscientes que todo lo controlan, el realismo contemporneo procura construir un
efecto de lo real pero a partir de procedimientos narrativos que se acercan, ms bien, a la
esttica vanguardista: la fotografa, la performance, la instalacin, los videoclips. Se trata
de un proyecto narrativo que pone en dilogo la literatura con la lgica del audiovisual,
con tipos de planos y movimientos de cmara, para generar de ese modo el efecto de
discontinuidad.
As, en la inscripcin a esta lgica del audiovisual, en la sucesin, la intermitencia, la
instantaneidad, la discontinuidad y tal como vemos en filmes como Relatos salvajes o en
7 cajas- la novela de Luiz Ruffato, Ellos eran muchos caballos (2001), echa mano al collage,
al montaje, a la brevedad, a la urgencia, a la yuxtaposicin. Se trata de procedimientos
que implican una ruptura, como suceda con las vanguardias histricas hispanoamericanas
o el modernismo brasileo, pero que procuran a travs de estos quiebres, ya no la
ilegibilidad y la autorreferencialidad de principios del siglo XX, sino mostrar el mundo
Para comprender el mundo literario de N. Groppa nos remitiremos a los smbolos que
en su obra se reactualizan y evocan la presencia de un ser o un momento enmarcado por
experiencias puntuales que determinan una percepcin sensible para expresar un
sentimiento, mostrar una realidad o manera de ser en el mundo. Trabajamos desde la
hermenutica y tomamos como base de trabajo los conceptos de Ricoeur sobre la
metfora, la referencia y el enunciado, consideramos importante la definicin respecto de
la creacin e interpretacin que puede realizarse sobre una obra literaria. Interpretar una
obra, es desplegar el mundo al cual ella se refiere Desde la obra intentamos acceder a la
memoria social-colectiva donde encontrar, junto a los discursos institucionales centrales,
significaciones profundas que hayan logrado permanecer en la conciencia popular, desde
los discursos mticos hasta los ms recientes pero silenciados.
En varios de sus poemas el poeta realiza una descripcin de lo perceptible que se presenta
rebelde al simple significado y a la linealidad en un solo sentido de la triada significadosignificante-referente. Para aportar mayor definicin sobre cmo acta el texto potico
convenimos que el concepto de obra literaria se relaciona con el de sentido y denotacin
de Botlog Frege, donde sentido es el significado de la palabra y denotacin es el referente.
Resulta importante dilucidar las correlaciones entre sentido y referencia, ya que nos
permite abordar la simbologa realizada por Groppa, fundamentando la vinculacin de la
obra con el contexto. Entonces, al hablar de la obra estamos actuando sobre un corpus de
textos, que se expande fuera de s mismo, por ello la relevancia de la vinculacin entre
mundo de la obra y su referente denotativo.
Entre los smbolos que tomamos como emergentes importantes de su obra seleccionamos
los de la lluvia, la luna, el otoo y los puentes los cuales son ecos que retumban en su obra
como referencias desdobladas o multiplicadas; los smbolos de la naturaleza: la luna, el
cielo, la lluvia y el otoo, los climas, pueden proyectarse segn Bachelard ms all de su
funcin, y esto sucede cuando opera desde ellos la dialctica. En sus trabajos sobre la
potica de la ensoacin y ensayos sobre la imaginacin, propone una poesa que no se
agota interpretativamente. Por lo cual, si una imagen ocasional no determina una
provisin de imgenes aberrantes, una explosin de imgenes, no hay imaginacin. Esto
equivale a decir que una imagen estable y acabada corta las alas de la imaginacin. () El
poema es esencialmente una aspiracin a imgenes nuevas.
El smbolo es un puente sensible entre dos mundos. Signo de otra realidad, y a la vez,
mediador que une mltiples espacios. As, Groppa toma, por ejemplo, para su potica el
smbolo de la lluvia, que no solo va a representar la purificacin sino tambin va a ser
smbolo de eternidad, presente en todas las historias del hombre.
Nos propone una experiencia sensorial en la poesa, una recuperacin en la produccin y
la lectura, en ser poeta y ser lector, actuar junto al cuerpo, no dejarlo fuera.
A su vez se contrapone a la observacin grosera de la naturaleza con el acto de dilucidar
detalladamente el contexto, la apropiacin del paisaje la lluvia- a partir del lenguaje, el
anlisis intelectual detenido, la descripcin minuciosa. Percibir, pensar, inteligir, sin
priorizar el orden, sino la conjuncin.
El sujeto potico es un ser percibiente que en su transitar por las calles va exponiendo sus
sentidos a partir de la escritura, en un acto esttico que es la poesa y que ingresa en esta
accin para proponer una interpretacin del mundo, que puede parecer lineal y
denotativa, pero que es metafrica por el acto mismo del lenguaje en praxis. En su
lenguaje lrico, la metfora, acrecienta las visiones del mundo, de lo real. Logra evidenciar
aristas hasta entonces imposibles de ser alcanzados por la cotidiana descripcin del
mundo. Su poesa es capaz de reinstituir la realidad, a partir de desconfigurar la funcin de
referencialidad perteneciente al discurso lineal y descriptivo; en consecuencia, expone su
aptitud para alcanzar otras formas de referencialidad, no denotativas.
Nestor Groppa tena la cualidad de poseer una mirada minuciosa, pudo retratar nuestra
cultura, con una aguda seleccin, descriptiva en los objetos y simblicas en lo semntico;
las prcticas urbanas y las rurales como una sucesin alucinante de imgenes. Los
smbolos Groppianos evocan la ciudad, las calles, el barrio, lo cotidiano, los convierte en
ecos que retumban en sus versos con semnticas diferentes, que intentan dibujar
imgenes que transmiten y plasman en varios niveles la cultura del ser jujeo.
Palabras clave: Smbolo, metfora, hermenutica, referencia, cultura
travs de los aos, que tienen que ver sobre todo con el aspecto paratextual, pero en el
fondo, el canon que dejan entrever no ha cambiado demasiado. Estos nuevos manuales al
mejor estilo "pastiche", muestran mucho, pero a la vez "dicen" muy poco. Lo que queda,
en definitiva, es una sensacin de insatisfaccin ante tanta informacin fragmentada.
Por lo tanto, otro de los objetivos es comparar y encontrar detrs del anlisis semitico
algunas pistas para debatir sobre su fragmentacin.
Quienes estamos a cargo de la enseanza de la literatura debemos indagar sobre todo lo
que est relacionado a estas cuestiones y convertirnos en crticos de la situacin. Slo a
partir de una actitud de crtica y de apertura podremos acercar a los nuevos lectores al
"texto". Nuestros objetivos: la "destruccin" del canon, una reelaboracin o reescritura a
partir de la consideracin de lo excluido, de lo proscrito, atendiendo a intereses
superadores de periodizaciones un tanto arbitrarias. En segundo lugar, criticamos la
entrada de los manuales en la escuela, su funcin y sus resultados en el proceso de lectura
de los estudiantes.
A partir del anlisis semitico, se comparan los paratextos de dos manuales para poder
describir sus semejanzas y diferencias teniendo en cuenta la ideologa que dejan entrever.
Se trata de comparar dos formas de lectura propuestas por ambos manuales,
demostrando diferencias estructurales.
Diremos acerca de la fragmentacin de las obras en los manuales, que en la mayora de
los casos resulta arbitraria, y que formara parte de otro trabajo de investigacin su
estudio, si tenemos en cuenta que para fragmentar algo juegan varios factores en la
seleccin u omisin de lo que se quiere mostrar de la totalidad de la obra. Esto tambin
indica un posicionamiento ideolgico de quien lo realiza y los riesgos de la fragmentacin
generada por la mediacin podran crear en el lector un efecto ilusorio o sinecdquico: el
hecho de tomar una parte por el todo o viceversa.
Los resultados obtenidos del anlisis ponen de manifiesto que los paratextos configuran
un espacio riqusimo para la crtica y reflexin sobre las intenciones editoriales. Los viejos
manuales parecen no haberse detenido en este aspecto del libro, en cambio, en la
actualidad, existe un despliegue nico y novedoso en las estrategias de seduccin a partir
de su paratextualidad. Hay un punto a favor en los ltimos esfuerzos editoriales, y es el
fenmeno informtico que proporciona nuevos conceptos, como el de hipertexto (El
hipertexto es una herramienta de software con estructura secuencial que permite crear,
agregar, enlazar y compartir informacin de diversas fuentes por medio de enlaces
asociativos).
En cuanto a las conclusiones:
Comparamos distintas "puestas en escena" de lo que se pretende, sea material de
estudio de la literatura en las escuelas, a lo largo de las ltimas cinco dcadas y a travs de
diferentes editoras, lo que pone de relieve, la intrincada y delicada relacin entre la
ideologa, la literatura y el Canon, para determinar posicionamientos y
conceptualizaciones frente al hecho de leer.
Palabras claves: Canon, manuales, paratexto, ideologa, literatura.
al pblico la obra que inicia seguidamente. Este artificio escnico se destaca no slo por suplir
la didascalia de salida del actor sino por instalar un juego de innovacin cuestionadora de las
estrategias de escenificacin convencionalizadas.
Un punto especial para la brevsima galera de interlocutores que desarrollan la accin, slo
tres: Panarizo y Honziguera, ladrones, ms Mendrugo, un mendigo, como arquetipos de la
ruindad y detonadores de un universo tan conflictivo, heterogneo y sub-versivo como el del
siglo XVI. Esta economa de personajes connota, igualmente, los simples tablados en los que se
escenificaban con exigua escenografa remitiendo al esencial espacio de la plaza pblica pero
tambin inscribe el mbito de lo popular recreado por el teatro breve dando cuenta de un
proceso de bsqueda por parte de Rueda para singularizar aspectos de la cultura que cumplen
un papel subalterno respecto de otros reconocidos por la cultura oficial.
Este elemento, la sub-alternidad, en efecto disea todo el mapa discursivo porque suma,
adems, la recreacin en el texto de los registros lxicos, fnicos tpicos de la germana, de
adivinanzas y frases proverbiales igualmente tpicas de lo popular organizando cabalmente el
universo semntico divergente del de la teatralidad cannica.. Este aspecto dialgico configura
la comicidad ruedesca basndose en la rapidez de las rplicas breves, en las interrogaciones y
admiraciones clsicas pero con fuerte poder condensador del nimo de las situaciones
eludiendo notas o intervenciones descriptivas o informativas, en las fallas de pronunciacin, en
clichs verbales que en definitiva muestran la singularidad, para este caso, del idiolecto propio
de las clases bajas.
Lope de Rueda, entre tradicin y anticipacin, va permitiendo la entrada en la literatura de un
mundo discursivo antes invisibilizado por impostaciones cannicas pero que ahora sube a
escena entre satirizaciones, burlas, juegos engaosos, parodias. Muchos de sus recursos sern
ms desarrollados ulteriormente pero, participando de la tradicin anterior, abre una sutil gama
de guios al espectador que, an en este momento inicial, hace germinar la marca propia del
(meta)teatro como un fuerte revelador de la condicin problemtica de la realidad.
Palabras claves: teatro breve - siglo XVI - metateatro- realidad/ficcin - artificios escnicos
- discursos subalternos.
las biografas y redes de socialidad lectora de los sujetos que incluye el acceso a la
historieta y el dominio de cdigos de lectura-. Estos factores se intersecan y combinan
dando lugar a las tipologas de lectura que no necesariamente responden a un criterio
etario o generacional. Al respecto, una hiptesis que gua nuestro trabajo indica que el
cambio parcial de posicin de Hctor Oesterheld a autor militante y desaparecido dentro
del campo de la historieta argentina, constituye un factor contextual que ha operado en
las actuales lecturas de la obra en trminos de una mayor carga niveles polticos de
interpretacin.
A partir de las hiptesis de trabajo que han orientado el estudio y de las inferencias
analtico/interpretativas posteriores, delineamos dos conclusiones centrales:
a)
Las interpretaciones de El Eternauta se caracterizan por estar mediadas por una
serie de condiciones de recepcin relacionadas con los discursos dominantes actuales
sobre Oesterheld y su obra, no slo en los jvenes lectores sino tambin en individuos de
otras generaciones que han ledo la obra en otras pocas.
b) Existe una estrecha relacin entre el proceso de canonizacin oficial y escolar de El
Eternauta y una significativa presencia, en las memorias de las lecturas de la misma, de
sentidos vinculados a ciertos valores sociales universalizables -la solidaridad, al lealtad al
grupo de pertenencia y el protagonismo colectivo- y a sentidos polticos ligados a la
memoria del pasado presente y a la contemporaneidad argentina.
Palabras clave: historietas, lectura, sentido, Oesterheld, consagracin.
Giordano, Mariana
CONICET-Universidad Nacional de Rosario
giordano.mariana@gmail.com
Ttulo: Boca de lobo de Sergio Chejfec: el realismo del fin.
Resumen: Para la presente ponencia elegimos una novela del autor que trabajamos en
nuestra investigacin doctoral: Boca de lobo de Sergio Chejfec. Las nociones de realidad
y ficcin han sido revisadas por la crtica argentina. Por un lado, la temporalidad en ciertas
ficciones queda inmersa dentro de una lgica interna. Situamos a la novela en un lmite
que implica una clausura. Nos apoyamos en la lectura de Josefina Ludmer en Aqu
Amrica Latina, para quien Boca de lobo pertenece al fin de la literatura. Por otro lado,
recuperamos el retorno al problema del realismo. Este fenmeno ha generado
controversias y consensos. Sandra Contreras, en Discusiones sobre el realismo en la
narrativa argentina contempornea, rene los debates recientes que tuvieron lugar
dentro de la crtica argentina y abre la posibilidad de nuevos realismos.
Ambos aspectos, el temporal y el realismo, se entremezclan y generan un dilogo. Esta
posibilidad de poner en contacto posiciones crticas, la continuamos desde el hallazgo de
Mariana Catalin, quien en su libro Con los ojos bien abiertos, plantea la relacin entre el
realismo y la idea de fin. Catalin detecta algo que Sarlo menciona como al pasar y que se
vuelve central en el libro de Ludmer: los obreros viven en villas miserias. Argumenta que
el realismo no desaparece como lgica explicativa y que luego del ao 2000, que tambin
es el ao de publicacin de la novela, se presenta como una categora central para pensar
la literatura del presente.
Beatriz Sarlo escribe El amargo corazn del mundo casi en simultneo a la publicacin
de la novela. All sostiene que Chejfec no apela a una representacin realista a pesar de
que la precisin conduce a recordar referentes reales. Pensar a la escritura de Chejfec en
trminos sintcticos y desprendidos de un afn realista implica un concepto de literatura
autorreferencial, que slo por una alusin indirecta seala algn tipo de contacto con lo
real. Entonces, creemos que el realismo debe ser pensado en relacin a una dimensin
temporal que en este caso estara dada por el fin. Este lmite que la crtica (Kohan,
Speranza, Dalmaroni) ha discutido en torno a los usos y abusos de la categora de Lukacs,
implica reconocer la vigencia de la nocin de realismo.
El 2000 es un ao clave en la propuesta de Josefina Ludmer. En el comienzo del siglo XXI
se vive en un presente formal eterno. Las ficciones se refieren a s mismas y a su propio
fin. Esta temporalidad global ubica a Boca de lobo como una novela sobre el fin de la
literatura de la clase obrera, tragada por la boca de lobo del tiempo.
Los sistemas literarios autnomos se agrupan por sus tiempos. El fin del mundo es el
subttulo que utiliza Ludmer para hablar de estas temporalidades globales, no
cronolgicas y apocalpticas. El fin del futuro, de la historia y de la literatura aparece en
Boca de lobo como el fin de la clase obrera y la posibilidad de ser dicha por un narrador
exterior a la misma. Este punto es trabajado por Catalin, para quien pensar nuevos lmites
para la literatura genera una estrecha relacin entre realismo y presente, al mismo tiempo
que la materia narrativa es ajena al narrador. Por esto, slo si se lee a este narrador como
omnisciente y realista se pueden entender cmo funcionan las tensiones que lo recorren:
el autoritarismo, el ansia de describir el mundo y la imposibilidad de quedar inmune.
Ahora bien, lo que nos interesa es indagar en la temporalidad de la novela de Chejfec.
Para Ludmer, en el ao 2000 existen en el sistema literario argentino las literaturas
autnomas, que se estructuran a partir de temporalidades ficcionales. Esto significa que la
realidad se corresponde con las figuras de escritores que se mueven dentro de un sistema
cerrado en s mismo. Sistema que admite todo tipo de estrategias metaficcionales:
escritura dentro de la escritura, lectores que son ledos, etc. Estos procedimientos que
remiten a una puesta en abismo del relato, refieren a s mismo y se autoproclaman como
propios de la literatura.
Este fenmeno ha sido anticipado por Roland Barthes, quien en Literatura y
metalenguaje, explica que antao los escritores ignoraban que era posible convertir a la
literatura en un objeto de estudio. Es as que al pensar a la literatura como tema de la
literatura, la escritura comienza a replegarse sobre s misma en busca de una reflexin
ontolgica: qu es literatura? De a poco ese metalenguaje se convierte en la literatura
misma, lo que Barthes denomina como un juego peligroso con su propia muerte
(Barthes: 1959, p, 128).
Sostenemos que la metaficcin admite una doble posibilidad. Primero hace consciente el
acto de escribir, asumiendo que lo que se puede estudiar es la forma en que se adopta el
punto de vista desde donde se narra, nunca del enunciado. Segundo, permite complejizar
poesa piensa y logra dar cuenta de esta realidad conflictiva y disolvente. Se trabajar
especficamente la categora bajtiniana de parodia, entendindola como el recurso
lingstico que atenta contra las jerarquas tradicionales, desacralizando sus valores por
va de la imitacin voluntaria de aquellos modelos que pretende relativizar (Bajtn
1987:16) Asimismo, trabajaremos el recurso a la irona como arma de subversin, cuya
finalidad es caracterizar entidades negando en el nivel figurativo lo que se afirma
positivamente en el nivel literal (White 42). Adems, pondremos especial atencin en los
modos de tramar satrico y trgico, propuestos por el filsofo estadounidense Hayden
White. Entendiendo por tramado la manera en que una secuencia de sucesos organizada
en un relato se revela de manera gradual como un relato de cierto tipo particular (White
18). As, el modo de tramar satrico se caracteriza por el uso de la irona, mientras que en
el modo de tramar trgico no hay ocasiones festivas ni celebratorias, sino que los
personajes estn sometidos a un destino amenazante y fatal. Por ltimo, trabajaremos
con categoras como el hipograma, tono, modelo y matriz de Riffaterre.
Palabras clave: Poesa - Lira Lihn Neoliberalismo - medios masivos de comunicacin
Herrera, Alejandra
UNSa-CIUNSa
silvyhl@hotmail.com
Ttulo: Mujeres que visten roles. Pidonas y mise en abyme en La polilla de Madrid de
Quevedo
Resumen: El presente trabajo reflexiona, en general, sobre la problemtica de los lmites
entre realidad/ficcin y los tpicos barrocos del ser y el parecer y, en particular, sobre la
metateatralidad presente tanto en la construccin especular de los personajes y sus roles
(dueas, pidonas, galanes, escuderos) como en la mise en abyme que duplica los niveles
de representacin en el tablado. Tambin se presta especial atencin a la representacin
de la mujer y los roles asumidos por ellas en escena. Con este propsito, se toma como
objeto de anlisis una pieza breve de Francisco de Quevedo y Villegas llamada La polilla de
Madrid (1624) y que tiene como personaje principal a Elena, una mujer pidona o
tomajona que vive del embuste.
Dentro del marco de las investigaciones del proyecto 1975 (CIUNSa): La metateatralidad
en la dramaturgia espaola del siglo XVII. Parte II. El espejo invertido del (meta) teatro
breve, se ha llevado adelante la sistematizacin de los diferentes fenmenos
metateatrales que develan el juego de espejos infinitos que se duplican y multiplican en el
teatro y que sitan al hombre en ese espacio apenas perceptible y de interseccin donde
el mundo es un escenario" y "la vida es sueo". Estas dos ideas, esenciales en el
imaginario de la Espaa barroca, se encuentran tambin en la base de la nocin de
metateatro, por lo tanto, no es extrao que este concepto y sus mltiples variaciones sean
fundamentales al estudiar las prcticas escnicas auriseculares. Asimismo, se entiende
que la inclusin de elementos teatrales que duplican temtica y estructuralmente a la
Lencina, Eva
Universidad Nacional de Tucumn CONICET
evalencina@live.com.ar
Ttulo: La venganza del colono: identidad escindida y discurso utpico en The Crystal Age
(1887) de W.H. Hudson
Resumen: William Henry Hudson (1841-1922) fue un escritor y naturalista anglo-argentino
que vivi signado por una identidad escindida: nacido en Argentina de padres
norteamericanos, eligi en 1874 radicarse en Inglaterra, pas que admiraba y consideraba
su patria cultural. Escribi su obra literaria y ensaystica en ingls, pero gran parte de sta
se encuentra atravesada por los paisajes pampeanos que poblaron su niez.
En 1887 public annimamente A Crystal Age, su segunda novela, que se enmarca en la
corriente de literatura utpica victoriana, junto con autores como William Morris, Samuel
Butler, Richard Jeffries, etc. La obra tiene como protagonista a Smith, tpico englishman
que despierta misteriosamente en un futuro lejano, en el que la civilizacin ha olvidado su
historia y se organiza ahora en pacficas comunidades matriarcales aisladas, devotas de la
naturaleza. Smith deber adaptarse forzosamente a esta nueva realidad, enamorado
como se encuentra desde un principio de Yoleta. El recurso novelesco de la obra estriba
en la imposibilidad de este amor, dada la ideologa de la comunidad que basa la
manutencin de la paz en la contencin de las pasiones que antao llevaran a la
humanidad a la guerra.
A Crystal Age es una de las obras de Hudson menos conocidas en Argentina,
probablemente por no tematizar directamente el pas (a diferencia de Far Away and Long
Ago, su autobiografa de 1918, o Days of Idle in Patagonia) o el territorio americano (como
Green Mansions o The Purple Land, su primera novela). Sin embargo, el proyecto utpico
del autor tiene como base su propia experiencia en la pampa. En este sentido, A Crystal
Age constituye una forma particular del gnero utpico, donde se funden la dimensin
prospectiva con la retrospectiva, especialmente si consideramos que el autor plantea
como sistema ideal de valores su mundo de recuerdos infantiles para localizarlos de
manera simblica en un futuro remoto (de manera invertida el autor, en su autobiografa,
hace un paraso perdido de su infancia pampeana, la cual localiza, esta vez, en el estricto
pasado). En trminos ideolgicos, la utopa retrospectiva de Hudson connota el
conservadurismo que se opone a los estragos del progreso de la industrializacin que
estaba sufriendo Inglaterra y Occidente en general.
Jason Wilson, en su artculo W.H. Hudson: the Colonials Revenge, considera que Smith
constituye una suerte de Hudson invertido: el autor ejerce una venganza sobre la figura
del englishman encarnado en el protagonista, motivado por su forzosa adaptacin a la
cultura anglosajona y por haber tenido que renegar de su pasado latinoamericano. En este
sentido, A Crystal Age se construye como una utopa en la que Hudson pretende infligir
una enseanza sobre la sociedad industrializada inglesa, acerca del valor de la naturaleza y
de la vida brbara que llevara en su Argentina natal. El viaje interior y el aprendizaje que
atraviesa Smith lo lleva finalmente a encontrarse con la postura del autor. As, la obra
constituye una metfora de la adaptacin cultural y de la prdida de identidad original
que funciona en dos direcciones: como una venganza por parte del colono Hudson hacia la
sociedad colonialista inglesa y como una travesa vital y positiva para el englishman Smith,
de vuelta a valores olvidados por la sociedad que se ve obligado a abandonar.
En un Prefacio aadido a la edicin de 1906, Hudson concluye paradjicamente: [] el fin
de las pasiones y las luchas es el comienzo de la decadencia. Es [] la ms cruel leccin
que se puede aprender [] despidindonos para siempre de la esperanza. Esta posterior
exgesis sobre la utopa que delineara veinte aos antes hace surgir interrogantes acerca
de las mltiples interpretaciones que puede albergar la obra, las cuales consideraremos
en nuestro trabajo. Si bien Hudson proyecta una clara dimensin utpica en la descripcin
del mundo en la edad de cristal, especialmente el que identifica con su infancia, el
experimento culminar en una tragedia amorosa con tintes distpicos.
A Crystal Age se opone a otras obras utpicas de su generacin por poner el acento en el
ambiente pastoral (mientras que las dems acentuaban las posibles consecuencias del
fenmeno de la industrializacin), alinendose con un conjunto de obras denominadas
utopas pastorales, como News from Nowhere (1891) de William Morris (obra respecto
de la cual la de Hudson es considerada precursora) y la triloga altruriana de William Dean
Howells (que comienza en 1894 con A Traveler from Altruria) y que quiz tenga su
culminacin en la pica ecolgica de Tolkien. En tanto utopa pastoral, la sociedad
imaginada por Hudson carece casi por completo de tecnologa moderna y practica la
agricultura de manera tradicional.
En este trabajo abordaremos el texto hudsoniano a travs de bibliografa crtica especfica
para estudiar su papel en el marco de la literatura utpica victoriana (as como su especial
carcter de utopa pastoral). Tambin analizaremos la representacin de lo americano
en el marco colonial, en relacin con el discurso utpico y exotista de la poca. Por otro
lado, estableceremos un sistema de relaciones connotativas entre la obra y la biografa del
autor, en especial en lo referido al tpico de la identidad escindida.
Como marco terico haremos uso de una caja de herramientas que abreva en el Anlisis
del Discurso, la Tematologa y la Imagologa Comparada (como ramas de la Literatura
Comparada), as como algunos conceptos semiolgicos de Roland Barthes (connotacin,
biografema, cdigo cultural, mthesis, etc.).
Palabras Clave: W.H. Hudson, Literatura Argentina, Literatura Inglesa, Identidad, Utopa
de nmada, en contraste con el sedentarismo de los pobladores que habitan los pueblos
ubicados en la regin desrtica.
La travesa le brinda la oportunidad a los cirqueros ir cruzando las distintas fronteras,
pudiendo as realizar el movimiento, a pesar de la existencia de un espacio exterior tan
amplio que es percibido sgnicamente por los personajes del circo como un peligro, pues,
en el camino se eterniza el silencio. Este silencio significa un espacio de tiempo
condensado, pues ah, hasta el discurrir del tiempo de pronto es frenado y queda
obstruido en medio de un crculo donde no puede avanzar y manifestarse. Se constituye
as entre ambos una disputa por figurar en el cronotopo de la novela de Mndez:
En ese espacio infinito estn abiertas siempre nuevas oportunidades de desplazamiento,
pues en el desierto el viento y arena borra todo ndice de pasajes previos o huellas del
camino. Como sucede en la descripcin que el autor hace del clebre Camino del Diablo
(jiawul himdag, en lengua de los Oodham); un lugar que, segn Radding, significa: forma
malfica, pues es el [lugar donde] Los demonios, los espritus de vaqueros que residen
en montaas vacas, seleccionan a las personas con quienes se comunican ya sea para
infligir enfermedad o transmitir poder y conocimiento a travs de los sueos (301).
Pero, los personajes del Circo haban ya escuchado las historias (ciertas o no) de otros
peregrinos que haban logrado avanzar por ese tramo y llegar hasta San Luis Ro Colorado,
en el sitio extremo del desierto para, luego de cruzar el ro del mismo nombre, arribar a la
Baja California, en los lmites con California. Atravesar tal frontera les hara llegar tambin
al lugar utpico cuya imagen se asentaba en su futuro.
Las noticias de prosperidad que llegaban hasta los lugares ms remotos del pas, volvan
inexcusable la expedicin heroica. Sin embargo. A pesar de la resistencia de los personajes
de El circo y su insistente operacin por vencer la frontera, el espacio exterior logra
penetrar el interior hasta destruirlo.
Conclusiones
En la enunciacin narrativa de El circo que se perdi en el Desierto de Sonora se unen dos
espacios: el circo y el desierto, los cuales contienen una importante riqueza semitica;
stas convergen y se animan mutuamente para convertir esta obra un texto significativo
de la literatura chicana. La relacin que establecen los personajes tanto dentro del circo
como con su entorno les lleva hacia un peregrinaje inmoderado por el interior del
desierto, con la preocupacin de encontrar una significacin a su actividad cotidiana. La
rutina y la esperanza de una vida mejor en otro lado les obliga a desafiar al Desierto de
Sonora en su tramo ms peligroso: El camino del diablo. En su intento por arribar al lugar
utpico: California como meta, perecen en el trayecto.
Palabras claves: desierto, frontera, travesa, nomadismo, camino
Resumen: Nstor Groppa (19282011) es considerado uno de los grandes poetas de Jujuy.
Logr unir en su potica con libertad notable, su inters por anotar el pulso cambiante de
la vida pueblerina, su fina irona y una permanente actitud innovadora frente a los
cnones de la tradicin. El resultado: una poesa concreta instalada entre lo heredado y lo
nuevo, que sin dejar de ser clsica es sustancialmente vanguardista. Este doble perfil
obedece- entre otras razones- a la libertad con que emplea diversos materiales tanto de la
tradicin potica oral y popular como de la tradicin lrica culta, a los que somete a un
proceso de apropiacin selectiva. Este trabajo explora los usos de las formas tradicionales
de raz hispnica en sus dos segundos poemarios: Indio de Carga (1958) y En el tiempo
Labrador (1966), con el objeto de analizar en el sentido dado por R. Williams- cmo
opera la matriz tradicional popular -en tanto fuerza activamente configurativa- en los
procesos de construccin de la identidad cultural y social del escritor y su escritura.
Si la literatura es el proceso y el resultado de la composicin formal dentro de las
propiedades formales y sociales del lenguaje, tal como lo entiende Raymond Williams, el
uso de una determinada tradicin potica implicar trabajar con materiales (gneros,
temas, estilos) que han sido previamente configurados y que responden a variables
sociohistricas. Es en este sentido que Williams entiende a la tradicin como una fuerza
activamente configurativa y no como un simple segmento histrico inerte; en este
sentido tambin es que la concibe como el medio de incorporacin prctico ms
poderoso.
Los usos selectivos de la tradicin que realiza un agente cultural o un creador pueden
obedecer a diferentes intencionalidades que, en lneas generales, resultan hegemnicas o
contrahegemnicas, con una nutrida gama de posibilidades intermedias. Por un lado,
siguiendo a Williams, el uso hegemnico de la tradicin implica un proceso
deliberadamente selectivo y conectivo que busca una ratificacin cultural e histrica de un
orden contemporneo en alianza con una predispuesta continuidad con el pasado. El
pasado actualizado sirve en estos casos para validar el presente.
Pero existen otras posiciones frente al uso selectivo de la tradicin, que si bien abrevan en
las formas que sta ofrece en cuanto a gneros, temas, estilos y convenciones varias, lo
hacen con alguna intencionalidad dialgica o subversiva que deconstruye las formas
tradicionales del pasado para reconfigurarlas con sentido renovador, crtico o pardico.
Esto permite que el orden contemporneo haga surgir sus formas emergentes mediante
usos redirigidos de las formas del pasado. stas pueden presentarse como continuaciones
aparentes o incluso supervivencias conscientes de formas muy antiguas que, sin embargo,
entraan formas nuevas. En este caso el uso puede resultar contrahegemnico, y si bien el
objetivo sigue siendo conectar versiones del pasado con el presente, la intencin no es la
de ratificar o validar el presente con la ptica del pasado, sino sacar a luz elementos de
renovacin, fractura o quiebre. El presente toma distancia del pasado configurado, a la
vez que reevala crticamente las lneas de continuidad que lo unen a l.
Por otra parte, el uso de la tradicin, cualquiera sea su propsito, implica trabajar en el
campo de las identidades en dos direcciones: en relacin a las identidades colectivas e
imaginadas que una determinada tradicin contribuye a configurar, y en relacin a la
identidad individual, cultural y social del escritor y de su escritura, en el campo literario en
noelia_ovando@hotmail.com
Ttulo: La actitud del hablante de la ciudad de Tartagal (Provincia de Salta) ante el uso de
los diminutivos
Resumen: La participacin en diferentes proyectos de investigacin, en el marco del rea
lingstica de la carrera de Letras, orient nuestro inters hacia este tema, a partir de
estos interrogantes:
Qu caractersticas presenta el uso de los diminutivos en los hablantes tartagalenses?
En qu situaciones los utilizan? Qu actitudes manifiestan estos hablantes ante el
fenmeno investigado?
El punto de partida de este trabajo lo constituye la pragmtica, en la medida que se ocupa
de la consideracin de el hablar como un hacer. La lengua es su uso, y ese uso es
siempre contextualizado.
Teniendo en cuenta lo expuesto, consideramos que para el estudio del uso de los
diminutivos en hablantes tartagalenses se debe entender por contexto no slo el
escenario fsico en que se realizan dichas expresiones, sino tambin atender el bagaje de
conocimientos que se asume como compartido entre los participantes en un encuentro
comunicativo. Precisamente es ese conocimiento compartido el que asegura el
entendimiento de los hablantes y permite poner en funcionamiento todo un juego de
presuposiciones.
Al realizar este estudio nos interesa por un lado, determinar cul es la actitud del hablante
cuando emplea diminutivos; y por otro, si el interlocutor interpreta esa actitud. En este
sentido, es que estimamos que tanto el proceso de manifestacin de actitudes como el
proceso de interpretacin exigen que los interlocutores compartan una serie de
convenciones que permitan otorgar sentido a los enunciados, sentido que va ms all del
significado gramatical de las oraciones y de la normativa.
En consonancia con lo expuesto podemos decir que los diminutivos, como recursos de
mitigacin, pertenecen a un tema ms amplio, el de la cortesa verbal. De este modo, en la
interaccin verbal se enfrentan dos imgenes: la del hablante y la del interlocutor. Cada
uno desea salvaguardar su imagen social y por eso respeta la imagen del otro. En sntesis,
hay solo dos imgenes: la negativa y la positiva y, si la imagen positiva o negativa peligra,
la cortesa debe acentuarse, a mayor peligro, mayor cantidad de recursos de cortesa.
Adems, a propsito de la eleccin del tema del presente proyecto de investigacin, es
decir el empleo de la expresin diminutiva en la ciudad de Tartagal, provincia de Salta,
resulta llamativo observar en su uso particularidades que consideramos de inters para
su estudio. En funcin de ello y del hecho de que el tema an no ha sido tratado con la
consideracin que merece, desarrollaremos en este trabajo las situaciones y actitudes del
hablante tartagalense cuando emplea diminutivos.
A partir de la lectura de material bibliogrfico y de un relevamiento exploratorio realizado
sobre el uso de diminutivos en la ciudad de Tartagal, surge un problema, que
procuraremos resolver en el presente proyecto de investigacin: Qu caractersticas
presenta el uso de los diminutivos en los hablantes tartagalenses?. A su vez la complejidad
de este problema, implica resolver otros interrogantes, que permitan un anlisis
independencia fsica y emocional; y cuando Lily est decidida a no perder sus propios
valores a travs de un matrimonio por el dinero que necesita para pagar sus deudas. Bajo
la hegemona patriarcal los hombres establecen las normas y las mujeres las aceptan. Se
respeta a las Mujeres que se benefician econmicamente mientras se sometan a los
hombres, y esto es precisamente lo que Edna y Lily no quieren para sus vidas. Los
personajes principales de El Despertar y La casa de la alegra son retratados como
oprimidos por el matrimonio, la familia y las apariencias en la alta sociedad, y por eso
estas novelas son consideradas novelas feministas.
El proceso de desafiar los valores sociales implican para Edna y Lily pasar por diferentes
pruebas que las hacen sentir culpables de pensar y sentir diferente a los dems. Este
trabajo pretende mostrar la forma en que la situacin de las mujeres en la sociedad
estadounidense a finales del siglo XIX se evala en dos novelas de costumbres modeladas
en la novela de los juicios. En ambas novelas decisiones finales de los protagonistas son el
resultado negativo de las prcticas sociales. Los juicios son tan duros que es imposible que
puedan seguir viviendo en estas sociedades. El suicidio las heronas en las novelas es, para
algunos crticos, un signo de cobarda, pero una lectura feminista de las novelas lo
interpreta de manera diferente.
Con el fin de mostrar por qu el suicidio puede ser visto como una forma de lograr la
libertad de la dominacin patriarcal, en el primer captulo voy a explicar qu se entiende
por hegemona, patriarcado y novela feminista. En el segundo captulo las dos novelas
sern colocadas en sus contextos culturales a fin de conocer las costumbres y la
desigualdad de los roles dados a los hombres ya las mujeres en las sociedades capitalistas
en Amrica. A travs de las novelas de costumbres que logramos conocer la importancia
dada a las mujeres como amas de casa, madres y esposas en las sociedades patriarcales; y
para entender cmo se ponen a prueba los valores particulares de las heronas de las
novelas, los juicios que deben afrontar son analizados en ambas novelas. En el tercer
captulo, estas novelas feministas son vistas como una condena al sistema patriarcal
capitalista y sexista. La rebelin y sufrimientos de los personajes principales en sus
sociedades, en ambas novelas, no son suficientes para hacer que sus sociedades cambian;
es por eso que se llevaron a tomar su decisin final como una forma de lograr la libertad.
Palabras clave: personajes femeninos pesimismo sistema patriarcal representaciones
femeninas valoraciones
posiciones ocupadas por los agentes) precede a los escritores, al mismo tiempo que el
poder de agencia (acciones) mantiene una relacin dialctica permanente con las
posibilidades de definicin y transformacin del campo.
En este trabajo nos introducimos en la trayectoria vital y artstica del escritor jujeo
Nstor Groppa, a fin de develar las disposiciones con las cuales participa del campo
literario en Jujuy, y las acciones que lleva a cabo en pos de la transformacin del mismo.
Atendemos tanto a las estructuras objetivas que regulan su comportamiento literario
como a la capacidad de agencia del escritor en la transformacin del campo.
Groppa naci en Laborde, pueblo caracterizado por su ruralidad. Siendo adolescente,
comenz a escribir sobre el pueblo, sus calles tranquilas. Su escritura nace en este ritmo
tranquilo que replica el ritmo de los atardeceres labordeanos. A los veinte aos, viaja a
Buenos Aires para formarse en letras y artes. Entre sus amigos ms cercanos se cuentan el
pintor Domingo Onofrio, el poeta Jos Luis Mangieri y el autor teatral Andrs Lizrraga.
Conoci all a Ral Gonzlez Tun, Jos Portogalo, Hctor Agosti, Lizardo Za, entre
muchos otros intelectuales autodefinidos (en su mayora) como de izquierda. Esta
experiencia en Buenos Aires haba roto con la afeccin al paisajismo adquirida en su
juventud. Conoci all las vanguardias artsticas y polticas, las formas disruptivas del arte.
Cuando Mangieri y Lizrraga deciden partir hacia Bariloche, Onofrio y Groppa se deciden
por el norte.
Hasta aqu, Leandro Nstor lvarez Groppa es escritor y pintor. Se encuentra en
Tucumn con un campo literario todava agitado por la aparicin, ocho aos antes, del
grupo La Carpa y el posterior surgimiento del suplemento cultural del diario La Gaceta. De
aquella primera experiencia con la literatura del noroeste, Groppa sacara dos
aprendizajes luego fundamentales en la formulacin de Tarja: por un lado, la necesidad
del debate, del intercambio de opiniones sin concesiones sobre la funcin de la literatura
y el arte; por otro lado, la eficacia del "discurso metapotico, la necesidad de los grupos
de definirse en textos programticos en los que se elabore y difunda una postura colectiva
sobre el arte y la relacin con la sociedad.
Podemos resumir en cuanto a sus disposiciones: quien llega al campo literario jujeos
de mediados del siglo XX es un poeta-pintor que rechaza las representaciones folklricas
tanto como el arte vanguardista, que cree en la ligazn del arte con su entorno, sabe de la
eficacia, para la promocin de la actividad, de llevar estos debates a textos de carcter
argumentativo, y que tiene predileccin por la literatura que refleja el entorno urbano
moderno. Con ese bagaje cultural y esas definiciones, Groppa llega a Jujuy.
En 1952 obtiene un cargo de maestro en la escuela Sarmiento de Tilcara, profesin en
la que se desempeara durante cuatro aos. Esta experiencia como docente terminar
por delinear sus principios literarios: el compromiso con el entorno debe integrarse con
una mirada lrica, distanciada, asombrada como la de los nios. En aquella escuela
tilcarea enseaban tambin el poeta Jorge Calvetti y el pintor Medardo Pantoja. Sobre
todo con este ltimo, Groppa entablar una amistad muy profunda.
En marzo de 1956, los tres se trasladan hacia San Salvador. Junto con los abogados
Andrs Fidalgo y Mario Busignani fundarn la revista Tarja. El grupo tiene clara conciencia
de formar parte de un campo en ciernes, al que hay que constituir desde posturas propias
y no forneas. De all el nombre de la revista que los instala como trabajadores, como
de una historia afectiva de San Salvador de Jujuy, como l mismo sealara en sus
Anuarios del Tiempo.
En este trabajo, efectuado en el marco del Proyecto SECTER UNJU C/0157 Obra y figura
de NstorGroppa, su proyeccin en el campo literario regional y nacional, avanzamos en
el abordaje acerca de una de las modalidades de su registro potico y que distingue al
oficio del poeta: el registro de la mirada. El anlisis de los mecanismos de esta mirada
semitica en algunos de sus poemas, nos brinda una imagen del poeta y de San Salvador,
la ciudad que l habita en sus calles y en la poesa. Guan nuestra lectura las reflexiones de
John Berger en torno a los modos de mirar, Roland Barthes y sus escritos sobre la
fotografa, los aportes de la retrica y la semitica de la imagen.
Palabras clave: Groppa, poesa, registro, mirada, imagen
fallados./ (a cunto est la hora?/ nos preguntaron cierta vez), 24 con treinta aos,
35 La casa.
El libro cuenta con cuarenta y seis textos, casi la totalidad de ellos aparecen con el
encabezado NOTAS y tienen al pie la fecha de publicacin en el Suplemento. Este dato
no es menor. Pues nos permite entender el porqu de la convivencia de textos de distinta
naturaleza en un mismo volumen y al mismo tiempo, no perder de vista que estamos ante
textos que atravesaron dos procesos de publicacin en soportes distintos: originalmente,
en las pginas de un suplemento cultural y luego, en un libro.
Los textos que generan mayor desconcierto (o incertidumbre) son las crnicas poticas. A
la hibridez propia del gnero crnica debemos sumar la relacin ntima que se tiende con
el discurso potico. El relato aparece mediado por un lenguaje trabajado, en verso y
cargado de imgenes que despiertan los otros sentidos hasta construir unas instantneas
animadas que eternizan lo transitorio, lo callejero.
Otro concepto que aparece es el de la memoria como un reservorio de instantes que
fueron significativos y por eso, conservados. Groppa necesita construir una memoria de y
para Jujuy. Una memoria que est hecha de fragmentos, de instantes; que recupera y se
construye a partir de microhistorias que radiografan el cuerpo de la sociedad jujea
dejando a la vista lo oculto, lo negado, lo ignorado. Pero detrs de esa memoria se teje
una memoria personal donde produccin literaria y vida estn en ntima relacin. En sus
textos nuestro autor registr los momentos, los espacios, los personajes que formaron de
su vida directa e indirectamente. Es como si estuviramos leyendo una autobiografa del
escritor y del hombre, donde se entretejen reflexiones, opiniones y sentimientos.
La coleccin reunida en los Anuarios es un testimonio del estar del poeta en las tierras
jujeas. Son anotaciones, apuntes, noticias donde se entraman la oralidad callejera y el
detallismo potico. En ellas no slo se puede leer el paso de un instante a otro en Jujuysiguiendo la nocin de Bachelard- sino tambin al poeta en su descubrir constante y en su
quehacer profesional.
Palabras claves: Groppa- Anuarios del tiempo- crnicas poticas- memoria personalmemoria para la sociedad
Rieszer, Carolina
UNSa
carorieszer@yahoo.fr
Ttulo: La Urbs plautina: escenario propicio para el ideal de matrona romana?
Resumen: El presente trabajo de investigacin enmarcado en el Proyecto N 2080
C.I.U.N.Sa. :"Domina Roma. La Urbs romana en los escritores de los siglos III a.C. al I d. C.:
discursos, espacios/lugares, identidades" se propone analizar el ideal de matrona en el
marco del mos mairorum reflejado por el comedigrafo Plauto en su obra Amphitruo,
ideal que se construye a travs de diversas virtudes circunscriptas particularmente al
mbito domstico, tales como la castitas [integridad de la casta, resguardada a travs de
Rubio, Milagro
UNSa
pequerubio@yahoo.com.ar
Ttulo: Ovidio Nasn: entre el foedus amoris y la stultitia. Dido en Heroidas VII
Resumen: La reina, el fugitivo y el esposo son los tres personajes que han sido invitados en
esta oportunidad. Entre ellos, a poca distancia, Amor y Venus observan los intersticios de
una historia compleja en una noble ciudad de frica: Carthago, unida por amor y odio
eternamente a Roma. La reina no es otra que Elisa o Dido, el fugitivo, el po Eneas,
prfugo del hado desde la vencida Troya, y, por ltimo, el esposo Siqueo, prncipe fenicio,
asesinado por su cuado Pigmalin y legtimo consorte de Dido. Junto a ellos, Ovidio,
poeta latino del siglo I a. C. retoma la historia de amor entre la reina y el fugitivo y
Palabras clave: Literatura nacional - literatura regional - Centenario - imaginarios sociales Federico Gauffin
Proyecto N 1975 - CIUNSa: La metateatralidad en la dramaturgia espaola del siglo XVII. Parte II. El
espejo invertido del metateatro breve.
misma aparicin de tipos sociales propios del gnero breve- o interpretarlo como un
juego en el que estn abolidas todas las convenciones del mundo real. Cabe acotar que
esta nocin de juego est en conformidad absoluta con la profunda conviccin del mundo
como teatro que implica el imaginario del hombre del Barroco.
Palabras clave: metateatro barroco entrems disparate crtica