Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

El Poder de La Alabanza

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 4

Martes, 13 de Abril de 2004

Estudio:
EL PODER DE LA ALABANZA

“Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo; porque ésta es la
voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”
(1 Tesalonicenses 5:16-18)

Muchos de nosotros usamos las frases ¡”alabado sea Dios”! y ¡”Gracias a


Dios”! Con tanta soltura que llega a perder su significado,

ALABAR.- (según el diccionario) Ensalzar, celebrar, elogiar, aclamar expresando


también aprobación. Alabar entonces significa que aceptamos o que estamos de
acuerdo con lo que aprobamos (Si aceptamos a Dios entonces debemos de alabar
y de dar gracias por todo lo que provenga de Él incluyendo una situación difícil,
una enfermedad, significa que aceptamos o aprobamos por que esto es parte del
plan de Dios para nuestra vida).

No podemos alabar a Dios sin estar agradecidos por aquello por lo cual le
estamos alabando. Y, realmente no podemos estar agradecidos sin sentirnos
gozosos por todo aquello por lo que le damos gracias. La alabanza entonces
comprende la gratitud y el gozo.

Alabamos a Dios por que aceptamos el hecho de que es responsable de lo que


sucede, si no, no tendría objeto darle gracias.

Alabando a Dios se experimenta:


 Un cambio de actitud de constante gratitud y gozo
 Se fortalece la Fe
 Se establece un modo de vida cristiano
 Se conoce cual es la voluntad de Dios
 Se conoce verdaderamente a Dios
 Se calla la duda

Nuestro entendimiento es un tropezadero en nuestra relación con Dios


porque alabamos cuando nosotros pensamos que están bien las circunstancias
que nos rodean, pero cuando permitimos que Dios quite el tropezadero, entonces
el resultado es una Alabanza limpia y sincera.

NO SE TRATA DE FORZAR NUESTRO ENTENDIMIENTO FUERA DE


LUGAR Y DECIR: “NO LO COMPRENDO, PERO ALABARÉ A DIOS AUNQUE ME
RESULTE DIFÍCIL SI ESTE ES EL ÚNICO MEDIO PARA SALIR DEL
PROBLEMA”
Esto NO es Alabar sino tratar de manipular a Dios; alabándolo a El dejamos
que haga su voluntad y se manifieste su poder (Ensalzar, Celebrar, Elogiar,
Aprobar).

Tratamos se comprender el ¿porqué? y ¿cómo? Permite Dios


circunstancias, pero Él quiere que aceptemos en nuestro entendimiento que Él
hace las cosas es la base de nuestra alabanza.

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien”
(Romanos 8:28)

Alabémos a Dios por lo que Él ha puesto en nuestras vidas, hagámoslo


espontáneamente y con entendimiento.

“Por que Dios es el Rey de toda la Tierra, cantad con inteligencia”


Salmo 47:7

TESTIMONIO:
Un matrimonio durante muchos meses había sufrido a causa del estado físico de su hija, a
la que habían tenido que internar en una institución para enfermos mentales pues el diagnóstico
era una enfermedad incurable. Se pidió a grupos de oración que intercedieran por ella y los padres
oraban de rodillas a fin de que su hija fuera sana pero su condición seguía invariable.
Cuando se les anunció del reto de alabar a Dios por el estado físico de su hija se
quedaron turbados y tristes -sería una blasfemia dar gracias a Dios por algo tan obviamente malo-
¿No significa que le estamos acusando de haber hecho daño a nuestra hija?, esto no cabe en mi
mente, en mi concepto del Dios de amor, argumentaba la esposa.
-no parece razonable- confirmó el marido, pero que sabemos de Dios, somos tan
pequeños y Él es tan grande. Se arrodillaron juntos diciendo: “...Te damos las gracia por la
enfermedad de nuestra hija, gracias por que ella está en el hospital, gracias por los médicos que no
han hallado un remedio para ayudarla. Te Alabamos oh Dios por su sabiduría y tu amor para con
nosotros...”
Dos semanas después salía del hospital, un años mas tarde contraía matrimonio, y meses
después esperaba un bebé.

Es muy común dar gracias a Dios por lo bueno y condenar al Diablo por
todo lo malo, pero sin embargo pregunta el siervo Job en medio del dolor dijo:

“Dios dió, Dios quitó sea el nombre de Jehová bendito” (Job 1:20-21)
“...¿Qué ¿recibiremos de Dios el bien y el mal no lo recibiremos?...” (Job
2:10)

De momento no comprendemos que es lo que Dios está haciendo y


decimos que confiamos en su voluntad, pero en tanto no le demos gracias a
Dios por lo que acontece, no estamos confiando plenamente en Él.

Alabar a Dios no es una medicina o una formula mágica por un resultado sino por
una situación tal y como es. Si alabamos a Dios por el mero interés “...Te alabaré
a fin de que puedas bendecirme, oh Señor” estamos perdiendo el tiempo.
Alabar a Dios es deleitarnos en Él
“Deléitate así mismo en Jehová, y el te concederá las peticiones de tu
corazón” (Salmo 37:4)

El orden de importancia de este texto primero es buscar su presencia, su


reino y su justicia y después lo que el dé conforme a su voluntad (añadidura)

Una cosa es el resultado de la alabanza y otra cosa es el motivo de la


alabanza

Debemos alabar mas a Dios por nuestra situación, y no clamar mas porque
nos la quite ...”todas las cosas vienen por añadidura”...

Dios tiene un plan perfecto para nuestra vidas pero no nos puede
impulsar a dar el próximo paso hasta que aceptemos gozosamente nuestra
situación presente como parte de ese plan lo que ocurra después es cosa de
Dios no nuestra.

La alabanza a Dios en actitud de gratitud y gozo, y permite que Dios obre por que
sabe Él que nos estamos olvidando de todo el peso que nos asedia

Cualquier forma de oración sincera abre las puertas del poder de Dios en
nuestra vidas pero la oración de alabanza que reconoce el gran poder de Dios y
la gratitud hacia Él limpia totalmente cualquier impedimento en nosotros para que
el se manifieste como Él quiera.

“Pero tu eres Santo, tu habitas entre las alabanzas de Israel”


Salmo 22:3

“Por que en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene
contra nosotros; no sabemos que hacer, y a ti volvemos nuestros ojos”
2 Crónicas 20:12

No es que seamos ciegos a las amenazas reales y los problemas reales en


nuestras vidas pero por la magnitud del problema sabemos que Dios es mucho
más grande que todos esos problemas juntos y que es una batalla que por
derecho le corresponde a Él. Dios dijo a Josafat:

“No temaís ni os amedrenteís de esta multitud tan grande, por que no es


nuestra guerra sino de Dios”
2 Crónicas 20:15

La culminación de este mensaje enfatiza textualmente el poder de la


alabanza
“Puso a algunos que cantasen y alabasen a Jehová, vestidos de ornamentos
sagrados, mientras salía la gente armada y que dijesen: Glorificar a Jehová
por que su misericordia es para siempre”
2 Crónicas 20:21

Es aquí donde nuestro pensamiento se resiste, esto nos parece ridículo


pero Dios tenía planes diferentes

“Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza a Jehová, Jehová puso


contra los hijos de Amón de Moab y del monte de Seir las emboscadas de
ellos mismos que venían contra Judá y se mataron los unos a los otros...”

(2 Crónicas 20:22-23)

¿Qué hubiera ocurrido si Josafat hubiera ordenado a sus hombres que luchasen?

¿Qué ha ocurrido cuando nosotros hemos querido hacer las cosas sin dar la
alabanza primeramente a Dios?

Todos cantamos que Josué libró batalla en Jericó y los muros se


derrumbaron pero debemos de observar que para que cayeran los muros tenían
que dar primeramente alabanza a Dios a son de bocina.

¿Cómo eran los muros de Jericó?


R= Altos y bien fortificados

¿Cómo son nuestros problemas?

Ejemplos de Jesús con problemas difíciles:

 En la alimentación de los 5,000 solo tenia 5 panes y 2 pececillos

¿Cómo oró Jesús?


R= ...”Mirando al cielo dio gracias y partió los panes”...
Marcos 6:41 y 43

 En la resurrección de Lázaro que llevaba enterrado 3 días

¿Cómo oró Jesús?


R= Padre, Gracias te doy por haberme oído, luego ordeno a Lázaro que
saliese fuera
Juan 11: 41

¡ ES CIERTO, LA ALABANZA A DIOS CAMBIA LAS COSAS ¡

También podría gustarte