CORONAVIRUS
CORONAVIRUS
CORONAVIRUS
1. ¿Qué es un coronavirus?
Los coronavirus son una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en
animales como en humanos. En los humanos, se sabe que varios coronavirus causan
infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más
graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio
agudo severo (SRAS). El coronavirus que se ha descubierto más recientemente causa la
enfermedad por coronavirus COVID-19.
¿Qué es la COVID-19?
La COVID-19 es la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha
descubierto más recientemente. Tanto este nuevo virus como la enfermedad que provoca
eran desconocidos antes de que estallara el brote en Wuhan (China) en diciembre de 2019.
Actualmente la COVID-19 es una pandemia que afecta a muchos países de todo el mundo.
Busque inmediatamente atención médica si tiene dificultad para respirar o siente dolor o
presión en el pecho. Si es posible, llame a su dispensador de atención de la salud con
antelación para que pueda dirigirlo hacia el centro de salud adecuado.
La OMS está estudiando las investigaciones en curso sobre las formas de propagación de la
COVID-19 y seguirá informando sobre las conclusiones que se vayan obteniendo.
Según algunas informaciones, las personas sin síntomas pueden transmitir el virus. Aún no
se sabe con qué frecuencia ocurre. La OMS está estudiando las investigaciones en curso
sobre esta cuestión y seguirá informando sobre las conclusiones que se vayan obteniendo.
Cuando sea posible, mantenga al menos un metro de distancia entre usted y los demás. Esto
es especialmente importante si está al lado de alguien que esté tosiendo o estornudando.
Dado que es posible que algunas personas infectadas aún no presenten síntomas o que sus
síntomas sean leves, conviene que mantenga una distancia física con todas las personas si
se encuentra en una zona donde circule el virus de la COVID-19.
Contacto estrecho significa vivir con alguien que tiene la enfermedad o haber estado a
menos de un metro de distancia de alguien que tiene la enfermedad. En estos casos, es
mejor quedarse en casa.
Sin embargo, si usted vive en una zona con paludismo (malaria) o dengue, es importante
que no ignore la fiebre. Busque ayuda médica. Cuando acuda al centro de salud lleve
mascarilla si es posible, manténgase al menos a un metro de distancia de las demás
personas y no toque las superficies con las manos. En caso de que el enfermo sea un niño,
ayúdelo a seguir este consejo.
Si no vive en una zona con paludismo (malaria) o dengue, por favor haga lo siguiente:
Si enferma, incluso con síntomas muy leves como fiebre y dolores leves, debe
aislarse en su casa.
Incluso si no cree haber estado expuesto a la COVID-19 pero desarrolla estos
síntomas, aíslese y controle su estado.
Es más probable que infecte a otros en las primeras etapas de la enfermedad cuando
solo tiene síntomas leves, por lo que el aislamiento temprano es muy importante.
Si no tiene síntomas pero ha estado expuesto a una persona infectada, póngase en
cuarentena durante 14 días.
Si no vive en una zona con paludismo (malaria) o dengue, por favor haga lo siguiente:
Ocupe una habitación individual amplia y bien ventilada con retrete y lavabo.
Si esto no es posible, coloque las camas al menos a un metro de distancia.
Manténgase al menos a un metro de distancia de los demás, incluso de los
miembros de su familia.
Controle sus síntomas diariamente.
Aíslese durante 14 días, incluso si se siente bien.
Si tiene dificultades para respirar, póngase en contacto inmediatamente con su
dispensador de atención de salud. Llame por teléfono primero si es posible.
Permanezca positivo y con energía manteniendo el contacto con sus seres queridos
por teléfono o internet y haciendo ejercicio en casa.
En este caso:
Ocupe una habitación individual amplia y bien ventilada con retrete y lavabo.
Si esto no es posible, coloque las camas al menos a un metro de distancia.
Manténgase al menos a un metro de distancia de los demás, incluso de los
miembros de su familia.
Controle sus síntomas diariamente.
Permanezca en cuarentena durante 14 días, incluso si se siente bien.
Si tiene dificultades para respirar, póngase en contacto inmediatamente con su
dispensador de atención de salud. Llame por teléfono primero si es posible.
Permanezca positivo y con energía manteniendo el contacto con sus seres queridos
por teléfono o internet y haciendo ejercicio en casa.
Sin embargo, si vive en una zona con paludismo (malaria) o dengue, es importante que no
ignore la fiebre. Busque ayuda médica. Cuando acuda al centro de salud use una mascarilla
si es posible, manténgase al menos a un metro de distancia de las demás personas y no
toque las superficies con las manos. En caso de que el enfermo sea un niño, ayúdelo a
seguir este consejo.
Las pruebas hasta la fecha sugieren que los niños y los adultos jóvenes tienen menos
probabilidades de desarrollar una enfermedad grave, pero con todo se pueden dar casos
graves en estos grupos de edad.
Los niños y los adultos deben seguir las mismas pautas de cuarentena y aislamiento si
existe el riesgo de que hayan estado expuestos o si presentan síntomas. Es particularmente
importante que los niños eviten el contacto con personas mayores y con otras personas que
corran el riesgo de contraer una enfermedad más grave.
7. ¿Qué puedo hacer para protegerme y prevenir la
propagación de la enfermedad?
Manténgase al día de la información más reciente sobre el brote de COVID-19, a la que
puede acceder en el sitio web de la OMS y a través de las autoridades de salud pública a
nivel nacional y local. Se han registrado casos en la mayoría de los países del mundo, y en
muchos de ellos se han producido brotes. Las autoridades de algunos países han conseguido
ralentizar el avance de los brotes, pero la situación es impredecible y es necesario
comprobar con regularidad las noticias más recientes.
Hay varias precauciones que se pueden adoptar para reducir la probabilidad de contraer o
propagar la COVID-19:
¿Por qué? Lavarse las manos con agua y jabón o con un desinfectante a base de alcohol
mata los virus que pueda haber en sus manos.
¿Por qué? Cuando alguien tose, estornuda o habla despide por la nariz o la boca unas
gotículas de líquido que pueden contener el virus. Si la persona que tose, estornuda o habla
tiene la enfermedad y usted está demasiado cerca de ella, puede respirar las gotículas y con
ellas el virus de la COVID-19.
¿Por qué? Cuando hay aglomeraciones, hay más probabilidades de que entre en contacto
estrecho con alguien que tenga COVID-19 y es más difícil mantener una distancia física de
un metro.
¿Por qué? Las manos tocan muchas superficies y pueden recoger virus. Una vez
contaminadas, las manos pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca. Desde allí,
el virus puede entrar en su cuerpo y causarle la enfermedad.
Tanto usted como las personas que lo rodean deben asegurarse de mantener una
buena higiene respiratoria. Eso significa cubrirse la boca y la nariz con el codo
flexionado o con un pañuelo al toser o estornudar. Deseche de inmediato el pañuelo
usado y lávese las manos.
¿Por qué? Los virus se propagan a través de las gotículas. Al mantener una buena higiene
respiratoria protege a las personas que lo rodean de virus como los del resfriado, la gripe y
la COVID-19.
Permanezca en casa y aíslese incluso si presenta síntomas leves como tos, dolor de
cabeza y fiebre ligera hasta que se recupere. Pida a alguien que le traiga las
provisiones. Si tiene que salir de casa, póngase una mascarilla para no infectar a
otras personas.
¿Por qué? Evitar el contacto con otras personas las protegerá de posibles infecciones por el
virus de la COVID-19 u otros.
Si tiene fiebre, tos y dificultad para respirar, busque atención médica, pero en la
medida de lo posible llame por teléfono con antelación y siga las indicaciones de la
autoridad sanitaria local.
Manténgase informado sobre las últimas novedades a partir de fuentes fiables, como
la OMS o las autoridades sanitarias locales y nacionales.
¿Por qué? Las autoridades locales y nacionales son los interlocutores más indicados para
dar consejos sobre lo que deben hacer las personas de su zona para protegerse.
Las formas más eficaces de protegerse a uno mismo y a los demás frente a la COVID-19
son:
Trabajadores sanitarios
¿Por qué? Las mascarillas médicas y respiradores del tipo N95, FFP2 o equivalentes se
recomiendan y deben reservarse para los trabajadores sanitarios que están atendiendo a
pacientes. El contacto cercano con personas con infección probable o confirmada por el
virus de la COVID-19 y su entorno es la principal vía de transmisión, lo que significa que
los trabajadores sanitarios son los más expuestos.
¿Por qué? Cualquier persona que esté enferma y presente síntomas leves, como dolores
musculares, tos leve, dolor de garganta o cansancio, debe aislarse en su casa y usar una
mascarilla médica de conformidad con la recomendación de la OMS sobre el cuidado en el
hogar de los pacientes con posible infección por el virus de la COVID-19. Al toser,
estornudar o hablar se pueden generar gotículas que causan la propagación de la infección.
Estas gotículas pueden llegar a la cara de otras personas cercanas y caer en el entorno
circundante. El hecho de que una persona infectada que tose, estornuda o habla lleve una
mascarilla médica puede ayudar a proteger de la infección a quienes están cerca.
Si una persona enferma necesita ir a un centro de salud, debe llevar una máscara médica.
¿Por qué? Quienes cuidan de enfermos de COVID-19 deben usar una mascarilla médica
para protegerse. Una vez más, el contacto cercano, frecuente y prolongado con alguien con
COVID-19 pone a los cuidadores en una situación de alto riesgo.
Los responsables de la toma de decisiones a nivel nacional también pueden optar por
recomendar el uso de mascarillas médicas por ciertas personas adoptando un enfoque
basado en los riesgos. Este enfoque toma en consideración el propósito de la mascarilla, el
riesgo de exposición y la vulnerabilidad del portador de la mascarilla, el entorno, la
viabilidad de su uso y los tipos de mascarillas.
Tenga en cuenta que hay una escasez mundial de mascarillas médicas (tanto de mascarillas
quirúrgicas como de mascarillas N95), por lo que estas deberían reservarse en la medida de
lo posible para los trabajadores sanitarios.
Recuerde que las mascarillas no sustituyen otras formas más eficaces de protegerse a sí
mismo y a los demás contra la COVID-19, como lavarse las manos con frecuencia, cubrirse
la boca con el codo flexionado o con un pañuelo y mantener una distancia de al menos
un metro con los demás. Consulte las medidas de protección básicas contra el nuevo
coronavirus para obtener más información.
Como siempre, lávese las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
Evite tocarse los ojos, la boca o la nariz.