Semana Santa: Tema: 3era Palabra: "Mujer He Aquí A Tu Hijo Hijo He Aquí Tu TEXTO: S. JUAN 9: 25 - 27
Semana Santa: Tema: 3era Palabra: "Mujer He Aquí A Tu Hijo Hijo He Aquí Tu TEXTO: S. JUAN 9: 25 - 27
Semana Santa: Tema: 3era Palabra: "Mujer He Aquí A Tu Hijo Hijo He Aquí Tu TEXTO: S. JUAN 9: 25 - 27
SEMANA SANTA
TEMA: 3era PALABRA: “MUJER HE AQUÍ A TU HIJO…… HIJO HE AQUÍ TU
MADRE”
TEXTO: S. JUAN 9: 25 – 27
“¡Mujer, he ahí tu hijo! y “’He ahí tu madre! Cuando Jesús vio a Su madre de
pie cerca de la cruz con el apóstol Juan, a quien Él amaba, Él encomendó en
las manos de Juan el cuidado de Su madre. Y desde aquella hora Juan la
recibió en su propia casa (Juan 19:26-27). En este verso Jesús, siempre el Hijo
compasivo, se está asegurando de que Su madre terrenal sea cuidada
después de Su muerte.
Juan 19, 26-27
¿Quiénes son estos amigos? El versículo 25 parece incluir a María y otras tres
mujeres. Estas son probablemente las mismas mujeres que aparecen en los
evangelios sinópticos. Mateo explica: "Muchas mujeres estaban allí, mirando
desde la distancia. Habían seguido a Jesús desde Galilea para atender sus
necesidades" (Mateo 27:55; Lucas 8:3).
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Además de María, las mujeres en la cruz parecen ser: (1) María Magdalena (2)
María (la esposa) de Cleofás parece ser corresponden fácilmente a “María la
madre de Santiago el menor y de José (José)” (Marcos 15:40; Mateo 27:56).
Probablemente sea "la otra María" quien estuvo con María Magdalena en el
sepulcro el viernes por la noche y el domingo por la mañana (Mateo 27:61;
28:1). (3) La tercera mujer bien puede ser Salomé, que es la madre de
Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo. Ahora la historia se desarrolla aún más.
¿Quién es este "discípulo a quien amaba"? Vemos esta frase solo otras cuatro
veces, y solo en el Evangelio de Juan. Este discípulo está claramente
identificado como el autor del Evangelio de Juan (Juan 21:24). La tradición
eclesiástica identifica a este discípulo con Juan el Apóstol. Quizás el
evangelista no se identifica con su nombre por pudor.
Este discípulo a quien Jesús amaba, Juan, uno de los tres discípulos más
cercanos a él, es el único discípulo varón que está a los pies de la cruz
mientras Jesús está muriendo. Los demás tienen demasiado miedo de ser
identificados tan de cerca con un hombre condenado por los romanos, así
como por los líderes de su propio pueblo (Marcos 14:50; Lucas 23:49).
Primero, Jesús se dirige a su madre no como “Madre”, sino como “Madre”. pero
como "mujer" traducido apropiadamente como "querida mujer" por la NIV.
Podríamos sentir una frialdad en el término como se usa en nuestra cultura,
pero en Jesús & # 39; cultura, era perfectamente apropiado que un hombre se
dirigiera a una mujer de esta manera, pero aún así era extraño que un hijo se
dirigiera a una madre. La razón de este discurso más formal es probablemente
que Jesús tiene la intención de que Sus palabras se entiendan como una
disposición testamentaria formal bajo la ley familiar judía.
Mientras reflexiono sobre esta Tercera Palabra de la Cruz, empiezo a ver algo
sobre el alcance de Jesús' amor. Aquí está muriendo en agonía, jadeando por
cada respiración. Ve a su madre, la que lo consoló a través de todos los cortes
y moretones de la infancia. Cuando era niño, corría a casa con su madre e
instantáneamente se envolvía en su amor materno protector y consolador.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Ella es una viuda, pronto será una viuda que será conocida como la madre de
ese criminal crucificado, Jesús. . La vida no será fácil para ella.
Su familia pensó: "Está loco". y fue a hacerse cargo de él (Marcos 3:21, 31-35)
— aparentemente sus hermanos vinieron con María.
campo y las aves del cielo. Alguien le enseñó a observar con tanta atención el
patetismo y el drama de la vida del pueblo. El hijo del hombre vio la vida con
toda la sensibilidad de una mujer, y esa mujer era María. Cierto, era
plenamente Dios, pero también era plenamente hombre.
A la edad de doce años, Jesús hizo la declaración a sus padres: “En los
negocios de mi Padre debo estar”. Después de que comienza el ministerio
público de Jesús, los Evangelios mantienen a María en un segundo plano. En
las bodas de Caná de Galilea, Jesús le dijo a su madre: “Mujer, ¿qué tengo yo
que ver contigo? Mi hora no ha llegado" (Juan 2:4). Dos años después, Jesús
estaba enseñando en Cafarnaúm. Los rumores dicen que Jesús tenía un "
espíritu impuro" RV (Marcos 3:30-35). María vino a ver a su hijo y envió un
mensaje a Jesús. Los fariseos le dijeron: “Tu madre y tus hermanos están fuera
y quieren verte”.
Ahora bien, si María necesita un hijo a quien amar y cuidar, y proveer para sus
necesidades, debe mirar al discípulo Juan.
¿Quiénes son estos amigos? El versículo 25 parece incluir a María y otras tres
mujeres. Estas son probablemente las mismas mujeres que aparecen en los
evangelios sinópticos. Mateo explica: "Muchas mujeres estaban allí, mirando
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
desde la distancia. Habían seguido a Jesús desde Galilea para atender sus
necesidades" (Mateo 27:55; Lucas 8:3).
Además de María, las mujeres en la cruz parecen ser: (1) María Magdalena (2)
María (la esposa) de Cleofás parece ser corresponden fácilmente a “María la
madre de Santiago el menor y de José (José)” (Marcos 15:40; Mateo 27:56).
Probablemente sea "la otra María" quien estuvo con María Magdalena en el
sepulcro el viernes por la noche y el domingo por la mañana (Mateo 27:61;
28:1). (3) La tercera mujer bien puede ser Salomé, que es la madre de
Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo. Ahora la historia se desarrolla aún más.
¿Quién es este "discípulo a quien amaba"? Vemos esta frase solo otras cuatro
veces, y solo en el Evangelio de Juan. Este discípulo está claramente
identificado como el autor del Evangelio de Juan (Juan 21:24). La tradición
eclesiástica identifica a este discípulo con Juan el Apóstol. Quizás el
evangelista no se identifica con su nombre por pudor.
Este discípulo a quien Jesús amaba, Juan, uno de los tres discípulos más
cercanos a él, es el único discípulo varón que está a los pies de la cruz
mientras Jesús está muriendo. Los demás tienen demasiado miedo de ser
identificados tan de cerca con un hombre condenado por los romanos, así
como por los líderes de su propio pueblo (Marcos 14:50; Lucas 23:49).
Primero, Jesús se dirige a su madre no como “Madre”, sino como “Madre”. pero
como "mujer" traducido apropiadamente como "querida mujer" por la NIV.
Podríamos sentir una frialdad en el término como se usa en nuestra cultura,
pero en Jesús & # 39; cultura, era perfectamente apropiado que un hombre se
dirigiera a una mujer de esta manera, pero aún así era extraño que un hijo se
dirigiera a una madre. La razón de este discurso más formal es probablemente
que Jesús tiene la intención de que Sus palabras se entiendan como una
disposición testamentaria formal bajo la ley familiar judía.
Mientras reflexiono sobre esta Tercera Palabra de la Cruz, empiezo a ver algo
sobre el alcance de Jesús' amor. Aquí está muriendo en agonía, jadeando por
cada respiración. Ve a su madre, la que lo consoló a través de todos los cortes
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Ella es una viuda, pronto será una viuda que será conocida como la madre de
ese criminal crucificado, Jesús. . La vida no será fácil para ella.
Su familia pensó: "Está loco". y fue a hacerse cargo de él (Marcos 3:21, 31-35)
— aparentemente sus hermanos vinieron con María.
A la edad de doce años, Jesús hizo la declaración a sus padres: “En los
negocios de mi Padre debo estar”. Después de que comienza el ministerio
público de Jesús, los Evangelios mantienen a María en un segundo plano. En
las bodas de Caná de Galilea, Jesús le dijo a su madre: “Mujer, ¿qué tengo yo
que ver contigo? Mi hora no ha llegado" (Juan 2:4). Dos años después, Jesús
estaba enseñando en Cafarnaúm. Los rumores dicen que Jesús tenía un "
espíritu impuro" RV (Marcos 3:30-35). María vino a ver a su hijo y envió un
mensaje a Jesús. Los fariseos le dijeron: “Tu madre y tus hermanos están fuera
y quieren verte”.
Ahora bien, si María necesita un hijo a quien amar y cuidar, y proveer para sus
necesidades, debe mirar al discípulo Juan.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Aquellos que honran a Dios también deben honrar a sus padres. Los que
honran a los padres ya han comenzado a honrar a Dios. Nuestros padres
terrenales son, por un lado, los representantes de Dios, instruyendo y
discipulando a sus hijos en Su lugar. Por otro lado, los padres sirven para
ilustrar la forma en que Dios está obrando en la vida de sus hijos, como un
Padre. Esto se ve, por ejemplo, en los capítulos 2 y 3 de Proverbios, donde el
cuidado del padre por su hijo se compara con el cuidado paternal de Dios por
sus hijos.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Honrar a los padres era una obligación de vital importancia, señalada por su
inclusión en los Diez Mandamientos, por la pena de muerte adosada a su
flagrante violación, y por el detalle que se nos da sobre las evidencias de
honrar a los padres o su descuido.
Cuando Jesús vio a su madre y al discípulo a quien amaba de pie cerca , dijo a
su madre: Mujer, ahí tienes a tu hijo. Entonces dijo al discípulo: “¡Ahí tienes a tu
madre!”. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su propia casa.
Después de esto, Jesús, sabiendo que ya todo estaba cumplido, para que la
Escritura se cumpliera, dijo: “Tengo sed”
La tradición dice que Juan llevó a María a su casa y ella vivió con él. en
Jerusalén durante once años y murió. Otro dice que Juan la llevó con él a
Éfeso y ella vivió allí hasta que murió.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Jueves 06/04/23
SEMANA SANTA
TEMA: 5ta PALABRA “TENGO SED”
TEXTO: S. JUAN 19: 28
“Tengo sed” (Juan 19:28). Jesús está cumpliendo aquí la profecía Mesiánica
del Salmo 69:21: Y por comida me dieron hiel, y para mi sed me dieron a beber
vinagre.” Al decir que estaba sediento, los guardias romanos respondieron
dándole vinagre, que era lo acostumbrado en una crucifixión, con lo cual daba
cumplimiento a la profecía.
Juan 19:28 Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado,
dijo, para que la Escritura se cumpliese: Tengo sed.
Se ha señalado que el Señor quería un trago para calmar la sed y poder así
hacer acopio de todas sus fuerzas para los momentos previos a la muerte: a fin
de estar en disposición de encomendarse consciente y voluntariamente a su
Padre celestial y despedir de su cuerpo a su propio espíritu, después de haber
cumplido lo que se había propuesto.
Pero deberíamos reparar en que Jesús no pidió de beber, sino que se limitó a
declarar su condición.
Sabemos que uno de los hombres que estaban cerca le trajo un poco de
vinagre en una esponja y lo levantó con una vara hasta la boca del Señor; y
sabemos que Nuestro Señor aceptó el vinagre sorbiéndolo de la esponja.
La última vez que el Señor había bebido antes de aquello fue en la Pascua:
cuando en el Aposento Alto compartía la última cena con sus discípulos, la
noche en que fue entregado. Desde allí había andado hasta Getsemaní, en
donde pasó varias horas orando, preparándose para lo que implicaba la Cruz:
la copa amarga que tenía que beber.
Después de todo aquello, tuvo que recorrer las calles —llenas de asistentes a
la Pascua— hasta el lugar de la ejecución, cargando con su pesada cruz;
trayecto en el que fue finalmente ayudado por un transeúnte, obligado por los
soldados a llevar un extremo de la cruz, porque el Señor tropezaba bajo su
peso. Este fue el único gesto de ayuda que recibió durante aquellas largas
horas de tormento y de crueldad.
Llegando por fin al monte Calvario, obligaron a Jesús y a los dos delincuentes a
tenderse sobre sus cruces, mientras les enclavaban las manos y los pies;
después de lo cual las cruces fueron levantadas —con las víctimas colgadas de
ellas en angustioso dolor— y dejadas caer con violencia en los agujeros que
tenían preparados en el suelo.
Nuestro Señor Jesucristo, “que no conoció pecado”, debe de haber tenido una
sensibilidad al dolor superior a la del hombre corriente: el pecado endurece
nuestra naturaleza humana; pero Jesús no había conocido el efecto del orgullo,
del odio o de la maldad, los cuales embotan la conciencia y envilecen la
personalidad del hombre, por lo que habrá sentido la angustia del dolor y del
sufrimiento en toda su intensidad.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Cuando la obra estaba casi terminada le quedó tiempo para darse cuenta de
sus sufrimientos y exclamó: “Tengo sed”. No lo hizo derrotado, sino como un
vencedor agotado por la batalla. Juan lo expresa con estas palabras: “Después
de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba consumado, dijo, para que la
Escritura se cumpliese: Tengo sed”.
Como Dios, Jesús estaba con su Padre: “En el principio era el Verbo, y el
Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios” (Jn. 1:1). Fue su agente en la creación
del mundo: “Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha
sido hecho fue hecho” (Jn. 1:3). Como hombre, nació como un bebé de María,
creció, aprendió, habló, rio y lloró. Cristo era plenamente divino y
completamente humano.
Esas simples y claras palabras —“Tengo sed”— aportan más pruebas —si
acaso fueran necesarias— de que Jesús es ciertamente el Salvador del
mundo. Lo extraordinario acerca de la Crucifixión es que cada suceso
relacionado con ella se predice en el Antiguo Testamento y cada predicción se
cumple al pie de la letra. Juan comenta este hecho una y otra vez en su
Evangelio: “Estas cosas sucedieron para que la Escritura se cumpliese”.
Si consideramos los relatos que hacen Mateo, Lucas y Juan de este suceso en
particular, vemos que al Señor ya le habían ofrecido de beber: antes, durante y
después de la crucifixión: “Y cuando llegaron a un lugar llamado Gólgota, que
significa: Lugar de la Calavera, le dieron a beber vinagre mezclado con hiel;
pero después de haberlo probado, no quiso beberlo” (Mt. 27:33–34). El que le
ofrecieran esa extraña bebida fue un acto humanitario, ya que la misma estaba
reconocida generalmente como un narcótico, y se les daba a los reos para
reducir un poco sus sufrimientos durante la crucifixión. Pero el Señor rechazó
aquella bebida.
Durante las tres primeras horas que Jesús pasó en la Cruz, los soldados se
burlaban entre sí: probablemente el hecho de que hubiera rechazado la bebida
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
que le ofrecieron los inducía a martirizarle, y tal vez estarían bebiendo del
vinagre hasta saciarse mientras el Señor se hallaba colgado encima de sus
cabezas. “Y los soldados también le escarnecían —dice Lucas—, acercándose
y presentándole vinagre” (Lc. 23:36). Tal es la falta de humanidad del hombre
para con sus semejantes: lo atormentaban con su vino, elevándoselo casi
hasta los labios y luego retirándolo para hacer peor sus aflicciones. Pero pronto
aquellas extrañas tinieblas hicieron su aparición, frenando las burlas y
ocultando los peores sufrimientos de Cristo de la mirada desvergonzada de los
hombres. En su agonía final, Jesús exclamó: “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me
has desamparado?”.
Luego las tinieblas empezaron a remitir y muy pronto el Señor entregó su vida.
Las tres cosas siguientes que dijo se sucedieron rápidamente. Al clamar
“Tengo sed”, un soldado se le acercó —ahora sin escarnio, antes bien con
actitud sincera— y le aproximó una esponja empapada en vinagre a los labios.
Mateo indica que apretó dicha esponja una y otra vez contra los labios de
Jesús, para que este pudiera beber y beber. Ese parece haber sido el único
acto aislado de bondad que las multitudes tuvieron con el Señor Jesucristo
durante aquellas largas y dolorosas horas. Sería reconfortante pensar que
aquel soldado estaba mostrando signos de un cambio en su actitud hacia el
Señor y que la gracia actuaba así en su corazón. Puede que Jesús le haya
dicho a ese hombre: “Porque tuve sed y me diste de beber”.
Hay, sin embargo, una sed distinta de la física. A la mujer que estaba al lado
del pozo, Jesús le dijo: “Dame de beber” (Jn. 4:7). Y así fue como entabló
conversación con ella. Tal vez el Señor no bebiera de aquella agua que la
mujer sacó, pero enseguida comenzó a hablarle a ella del agua que Él ofrecía:
“Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le
pedirías, y él te daría agua viva […]. Cualquiera que bebiere de esta agua,
volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed
jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte
para vida eterna” (Jn. 4:10, 13–14). Cuando vamos a Él y recibimos de su
mano el agua de vida que Él nos brinda, entonces bebemos y vivimos, y
experimentamos esa frescura en lo profundo de nuestras almas.
La humanidad de Jesús.
El cumplimiento de las escrituras.
El abandono del Padre.
La Humanidad de Jesús
Por un lado, podemos comprender este deseo que tenía Jesús de beber como
algo que nos demuestra que él verdaderamente se hizo hombre para venir a
morir por nosotros. Luego de haber sido expuesto a un sinfín de castigos
físicos, tanto dolor y desgaste le debía estar produciendo una sed intolerable.
Además, debemos considerar como un detalle no menor que toda esta escena
se llevaba a cabo durante el mediodía y el comienzo de la tarde, y
considerando que se encontraban en el mes de abril, ya entrada la primavera,
debía hacer bastante calor. Es por eso que nuestro Señor hace esta
declaración, mostrando así una debilidad propia de un hombre semejante a
cualquiera de nosotros.
Al realzar la humanidad de Cristo de esta manera, Juan está dando testimonio
en contra de los gnósticos, que se caracterizaban por decir que el espíritu es
bueno y la materia mala. Por lo tanto, afirmaban que Jesús no había tenido un
cuerpo verdaderamente, sino que su cuerpo era más bien una ilusión, por lo
que el proceso de la crucifixión fue un trámite para él, y no sufrió en ningún
momento. Ellos llegaban al punto de decir que Jesús era una especie de
fantasma, que ni siquiera dejaba huellas en el suelo.
Pues bien, acá Juan nos da una de las tantas muestras de que nuestro Señor
verdaderamente se hizo hombre para habitar entre nosotros y, a su vez, morir
por nuestras transgresiones. No entra en nuestra mente limitada el entender
cómo Jesús se humilló a sí mismo de tal manera al punto de tomar un cuerpo
mortal y estar sujeto a las limitaciones que éste le imponía. Debe haber sido
algo humillante para él, luego de existir desde la eternidad, tener que vivir en
un cuerpo que se cansaba, que necesitaba comer y dormir. Él, que nunca
había tenido esas necesidades, vino a la tierra, se encarnó, se humilló a sí
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
mismo tomando forma de hombre, para llevar una vida perfecta y finalmente
ser hecho pecado por nosotros, para que por medio de su sacrificio, nosotros,
que estábamos muertos en nuestros pecados, pudiéramos tener vida. ¿Cómo
no postrarnos en adoración a Dios con tan inmenso y sublime sacrificio? ¡Esa
es la gracia de nuestro Dios!
Al tener sed, se nos dice que le ofrecieron a Jesús un poco de vinagre por
medio de una esponja. Esta bebida seguramente era una mezcla de agua con
vinagre llamada posca, que era usada habitualmente por los soldados durante
sus campañas y los tiempos de custodia. De hecho, si bien la Palabra no lo
indica, podemos suponer que fue un militar romano quien le alcanzó la esponja
mojada, aunque podría haber sido cualquier persona que se encontrara
alrededor. También era habitual el consumo de posca entre las clases bajas de
la sociedad romana.
La posca tenía el propósito, en muchos casos, de aliviar el dolor de aquellos
que estaban desfalleciendo en la cruz. Jesús no la tomó porque estaba
dispuesto a sufrir hasta el final por todos nosotros (Mateo 27:34, Marcos
15:23). Juan nos indica que lo tomó, aunque considerando lo indicado por los
otros evangelios, podemos concluir que sólo la probó; es decir, dio un pequeño
sorbo. ¿Por qué? Es posible que lo haya hecho porque necesitaba mojar la
boca para luego decir «Tetelestai» (que significa «Consumado es«) y
finalmente clamar a gran voz: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu».
Jesús se hizo hombre para venir a salvarnos, y estuvo sujeto a todas las
limitaciones humanas que nosotros tenemos. ¡Ese es nuestro Salvador!
Es decir, había sido profetizado que el Mesías que vendría a padecer por todos
nosotros recibiría vinagre para saciar la sed que sentía. Es por ello que Jesús,
al afirmar que tiene sed, permite que la posca le sea ofrecida, cumpliéndose así
lo que estaba escrito. Es increíble como no sólo las profecías más generales se
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
De modo que, en primer lugar y por sobre todo, se destaca que el hisopo es el
elemento usado por los israelitas para pintar el dintel y los postes de la puerta.
Por lo tanto, al utilizarse este elemento, encontramos que se nos está
señalando al cordero pascual, por medio de cuya sangre las personas serían
salvas de la ira de Dios. ¡Ese es Cristo! Nuestro cordero pascual que nos liberó
del poder del pecado y que recibió el castigo que nosotros merecíamos, siendo
nuestro sustituto y tomando nuestro lugar.
En segunda instancia, el hisopo era usado para rociar a las personas que
tenían lepra pero que habían sanado. Antes de volver a insertarlos en la
sociedad, el sacerdote realizaba con ellas una serie de ritos de purificación.
Siendo así, en este caso el hisopo señala a la santificación que nosotros
recibimos por medio de la sangre de Cristo. Al Señor hechos santos e ir siendo
transformados a la imagen de aquel que murió por nosotros, tenemos libertad
para acceder a la presencia de Dios.
En tercera y última instancia, la sangre era rociada con un hisopo para señalar
el establecimiento de un pacto. Y de la misma manera, nuestro Señor dice que
«este es el nuevo pacto en mi sangre, la cual es derramada por muchos»
(Mateo 26:28, Marcos 14:24, Lucas 22:20). Es decir, el hisopo nos remite al
nuevo pacto que Dios estaba estableciendo con la humanidad por medio de la
sangre de Cristo.
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
SEMANA SANTA
TEMA: 2DA PALABRA “HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO”
TEXTO: LUCAS 23: 39 - 43
¿Cómo pudo Jesús haber visto al ladrón en la cruz en el paraíso el mismo día
que murió y fue sepultado?
Jesús pudo decir que Él y el ladrón penitente podían estar juntos en el paraíso el
mismo día que morían (incluso cuando sus cuerpos estaban todavía en la Tierra)
porque Él estaba haciendo referencia a la cohabitación de sus almas en el
paraíso, no a la de sus cuerpos físicos. La Biblia enseña claramente que cuando la
gente muere sus almas se separan de sus cuerpos (cf. Génesis 35:18) y moran en
el hades—el “receptáculo de los espíritus incorpóreos” (Thayer, 1962, p. 11)
donde toda la gente que muere espera el regreso del Señor y el juicio
subsiguiente.
En el Día de Pentecostés, Pedro citó una parte del Salmo 16 [“No dejarás mi
alma en el Hades” (Hechos 2:27)], y aplicó este pasaje a Cristo, diciendo, “Su [de
Cristo] alma no fue dejada en el Hades” (Hechos 2:31). ¿Cuándo estuvo el alma
de Jesús en el hades? Después de Su muerte y antes de Su resurrección. ¿Quién
estuvo con Él en la parte del hades conocida como el paraíso? El ladrón en la
cruz. ¿Mintió Jesús cuando dijo al ladrón, “Hoy estarás conmigo en el paraíso”?
¡Absolutamente no!
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
nos salva y nos santifica. No importa que tan inmoral hayas sido en tu vida,
Dios puede perdonarte. Dios puede salvarte. Hoy es el momento de
arrepentirse y pedir perdón por nuestros pecados y confiar en el sacrificio de
Cristo. Calvino dice: «Si Cristo, aun no habiendo derrotado a la muerte, pudo
prometer al ladrón la vida eterna, cuanto más nos salvará a nosotros, ya
habiendo resucitado con poder al tercer día».
"Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Entonces
Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso"
(Lucas 23: 42, 43).
Hay tal vez millones de personas que creen en la ida al cielo después de la
muerte física, y esta creencia se ha infiltrado en casi la mayoría de las
religiones “cristianas” y este verso que analizaremos es una base en que
sustentan su fe, para afirmar que toda persona al morir recibe como
recompensa el cielo o paraíso. Analizaremos a la luz de la palabra de Dios para
llegar a la conclusión, ¿Que fue lo que el Señor Jesús expreso al malhechor en
la cruz?
un sepulcro nuevo, en el cual aún no había sido puesto ninguno. Allí [en
la tumba - en el sepulcro]... pusieron a Jesús” (Juan 19:41-42) después de
la resurrección los ángeles corroboraron el lugar de donde había estado el
Señor Jesucristo: “No os asustéis; buscáis a Jesús nazareno,... ha
resucitado, no está aquí; mirad, el lugar en donde le pusieron” (Marcos
16:6). ¡Allí estaba el lugar a donde Jesús había ido ese día, el sepulcro, la
tumba en el huerto cerca del sitio donde ocurrió la crucifixión! Jesús estuvo en
el sepulcro ese día, durmiendo el sueño de la muerte. ¡Él no fue al paraíso
ese día, no estuvo con el ladrón ese día, el malhechor no fue sepultado con Él
en la misma tumba! ¡Lo anterior está plenamente comprobado!
Cuando Jesús murió, la vida cesó en Él. Estuvo muerto, “Porque los que
viven saben que han de morir: mas los muertos nada saben, ni tienen
más paga; porque su memoria es puesta en olvido. También su amor, y
su odio y su envidia, feneció ya: ni tiene ya másparte en el siglo, en todo
lo que se hace debajo del sol” (Ec. 9:5-6). Y “Todo lo que te viniere á la
mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el sepulcro,
adonde tú vas, no hay obra, ni industria, ni ciencia, ni sabiduría”. (Ec.
9:10). El lugar donde Jesús estuvo ese día fue el sepulcro, donde no hay
conocimiento de nada. ¡La Escritura así lo dice!
¿COMO ES EL PARAISO?
¿Pero dónde está el paraíso? Note 2 Corintios 12:1-5. El apóstol Pablo habla
de uno a quien él conoció y que tuvo visiones maravillosas y revelaciones del
Señor. En una visión fue “arrebatado hasta el tercer cielo” ¡el trono (Reino)
de Dios! “... al paraíso, donde oyó palabras secretas que el hombre no
puede decir”. Entonces, el paraíso se encuentra en la presencia del trono de
Dios.
Continuemos con la descripción bíblica del paraíso. “El que tiene oído, oiga
lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del
árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios” (Apocalipsis
2:7). Vea también Apocalipsis 21:1-2. Estos dos versículos se refieren a “la
santa ciudad, la nueva Jerusalén... [Que descendía] del cielo, de
Dios”. En esta ciudad, que es también tipo de la Iglesia, encontramos “un rio
limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono
de Dios y del Cordero. En el medio de la calle de la ciudad, y a uno y
otro lado del río, estaba el árbol de la vida…” (Ap. 22:1-2).
¿Notó usted eso? La nueva Jerusalén es el paraíso de Dios — que baja del
cielo — la ciudad cuyo hacedor y edificador es Dios. La nueva Jerusalén
contiene el árbol de la vida. En la nueva Jerusalén está el paraíso de Dios,
una verdadera ciudad, parque o jardín tan alejado de la comprensión humana,
que es imposible describirlo. ¡Un día, en el futuro, el paraíso estará finalmente
sobre esta Tierra hecha nueva!
¡Jesús afirmó que el malhechor arrepentido estaría con Él en ese paraíso!
Pero la nueva Jerusalén no está terminada todavía. Jesús está aún
preparando un lugar para nosotros en ella (Jn. 14:2). Y la nueva Jerusalén no
estará completamente preparada sino hasta después del milenio (Ap. 20:1-5).
Hasta entonces y no antes, descenderá ésta a la Tierra ¡y hasta entonces
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
SEMANA SANTA
TEMA: 7MA PALABRA “PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI
ESPIRÍTU”
TEXTO: SAN JUAN 19: 29 - 30
Lucas 23:44–46
La historia de la muerte de Cristo es cautivante y está llena de lecciones. Así
como aprendemos lecciones penetrantes y poderosas de las palabras que
Jesús dijo durante Su perfecta vida terrenal, así aprendemos otras de las
tiernas cosas que dijo apenas pocos momentos antes de morir. En la historia
verdadera sobre Jesucristo encontramos hermosas lecciones no solo respecto
al gran significado de Su muerte, sino también acerca de la vida que podemos
tener quienes estábamos muertos en delitos y pecados, debido a la muerte del
Justo.
Las palabras finales del Salvador:
«Era ya como la hora sexta, cuando descendieron
tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena
al eclipsarse el sol. El velo del templo se rasgó en
dos. Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en
tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo
dicho esto, expiró». Lucas 23:44–46
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
y aparecieron a muchos" (Mateo 27:51-53) Lucas dice simplemente: "el velo del
Templo se rasgó por la mitad" (Lucas 23:45). En relación con la marca de un
mismo hecho, escribe: "Pero Jesús, lanzando un fuerte grito, expiró. Entonces
el velo del Templo se rasgó en dos, de arriba abajo" (Marcos 15:37-38). La
rasgadura del velo se produjo en el momento de su muerte.
Dios el Padre actuó, como cualquier padre devoto judío de pie junto a su lecho
de muerte. Este fue un gesto habitual duelo judío. Dios rasgó el velo como si
había alquilado su prenda exterior propia.
Esta ruptura del velo pasó a las 3:00 p.m., cuando los sacerdotes estaban
ocupados en el templo sacrificando el cordero pascual. Piense por un
momento si hubiera sido un sacerdote judío tendría que cortar la garganta de
la preparación de los corderos para la Pascua, que comenzará a finales de la
tarde, cuando la primera estrella apareciera en el cielo lejano. Tal vez usted
estaría lanzando incienso sobre el altar en ese preciso momento! ¿Y si hubiera
sido tu cordero de la Pascua que estaba sacrificando en ese preciso
momento? Algunos de los sacerdotes que trabajan en el templo han sido
testigos de este evento. Esta es probablemente la razón por la cual "La palabra
del Señor crecía y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en
Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe" (Hechos 6:7).
A través de la muerte de Cristo el camino hacia el santuario celestial se abrió
para toda la humanidad. Ahora todos pueden libremente entrar por la gracia
mediante la fe en Jesucristo (Hebreos 6:19; 9:3). "Así que, hermanos, tenemos
libertad para entrar en el Lugar santísimo por la sangre de Jesucristo, por el
camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne.
También tenemos un gran sacerdote sobre la casa de Dios. Acerquémonos,
pues, con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los
corazones de mala conciencia y lavados los cuerpos con agua pura" (10:19-
22). Ahora podemos experimentar una relación íntima, de amor con Cristo,
porque su muerte sacrificial ha abierto un camino para todos los creyentes a
entrar en el santuario "a través del velo" de su carne. "Acerquémonos, pues,
confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia
para el oportuno socorro" (Hebreos 4:16; Cf. Efesios 2:18-19; 3:11-12).
En ese momento el trono de la gracia se abrió para todos los que creen. El
camino a la presencia de Dios está ahora abierto para que todos puedan entrar
Jesús es el único sacrificio necesario para nosotros tener una relación correcta
con Dios. Sin embargo, sólo hay una manera de entrar y que es a través de la
sangre de Jesús (Hechos 4:12). El Templo de Jerusalén ya no era la morada
de Dios-su lugar. El templo fue profanado, y, por consiguiente abolido por el
mismo Dios, en el año 70 d.C. (después de Jesucristo) el ejército romano se
quemó. Desde el día de Pentecostés, el cuerpo de cada creyente se convirtió
en la morada de Dios (1 Cor. 3:16).
Jesús murió.
El significado de su muerte
¿Cuál fue el propósito de su muerte? El apóstol Pedro escribe, " pues ya
sabéis que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir (la cual
recibisteis de vuestros padres) no con cosas corruptibles, como oro o
plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y
sin contaminación" (1 Pedro 1:18, 19).
La sangre de Cristo es nada menos que el poder eterno de Dios. La
maravillosa verdad es que es la sangre de Jesús que nos limpia de todo
pecado y sus efectos sobre el pecador creyente. En lugar de los corderos es la
sangre de Jesús que se ofrece en el altar de nuestra redención.
La Biblia nos dice, "Porque la paga del pecado es muerte." Es el castigo del
pecado. La sangre, la muerte, del inocente cordero en el altar era una cubierta
para el pecado. Se pagó por el pecado. El pecador puso sus manos sobre la
cabeza del sacrificio y confesó sus pecados, por lo tanto por sus pecados sobre
la víctima. La muerte del sustituto fue reconocida como la muerte o el castigo
para el adorador.
La sangre fue lo que la vida entrego a la muerte para la satisfacción de la ley
de Dios, y en obediencia a su mandato. El pecado fue tan completamente
cubierto y expiado, que ya no se calcula como la del transgresor. Él fue
perdonado. Basado en el sacrificio de Jesús, el SEÑOR Dios podía declarar al
pecador creyente absuelto.
No se trata sólo de que Jesús murió, sino en que él murió como nuestro
Salvador personal. Su muerte no fue la muerte de cualquier persona. Él era el
Cordero de Dios murió por un propósito específico. Por lo tanto, su sangre es la
única limpieza.
Pero todos estos sacrificios y las ofrendas eran sólo los tipos y sombras, hasta
que el Señor Jesús vino. Su sangre fue la realidad a la que estos tipos
señalaron.
Su sangre era de un valor infinito, ya que llevaba su alma o la vida. No era
ningún particular sino el Hijo de Dios que murió. En la santa obediencia a la
voluntad del Padre, el Hijo de Dios mismo sometido a la pena de la ley
quebrantada, mediante el vertido de su vida hasta la muerte. Porque la muerte,
no sólo era la pena pagada en su totalidad, sino que la ley estaba
completamente satisfecha, y glorificó al Padre. Por lo cual Dios podría ser
"justo y el que justifica al que es de la fe de Jesús" (Romanos 3:26 b). Su
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
sangre pagó por el pecado, y así lo hizo impotente. Para ello, nos limpia de
todo pecado y la culpa (1 Juan 1: 7-10). Tiene un maravilloso poder para quitar
el pecado, y limpiarte y santificarte.
Los Evangelios cada uno nos recuerda que la muerte de Jesús fue una muerte
victoriosa. La única muerte que Jesús podía morir fue una muerte vicaria
voluntaria. Nadie podía quitarle la vida. Voluntariamente se entregó en calidad
de representante del pecador. Sólo la sangre de Jesús puede satisfacer la ley y
la justicia de Dios. Ningún pecador puede hacer eso.
Jesús murió el único tipo de muerte que fue capaz de satisfacer la justicia de
Dios y para salvar a los hombres (Juan 10:11, 15, 17-18).
Jesús no se rindió a la muerte en la debilidad. Jesús llamó a la muerte como un
carro o una limusina para servir a sus propósitos! Es significativo el escritor
inspirado no dice: "Él murió", pero "Él entregó el espíritu." NASB dice, "expiró".
Exhaló su vida, indicando claramente el carácter voluntario de la ley.
Agustín tuvo una buena comprensión de esta gran verdad. Él dijo: "Él dio su
vida, porque Él lo quiso, cuando quiso, y como él lo quiso." Ninguna otra
persona ha hecho eso. Usted y yo no tenemos ese tipo de opción sobre los
asuntos de la vida y la muerte.
La palabra traducida como "encomendar" o "compromiso" puede ser traducido
como "rendirse o recostarse." Esto significa que, " depositar con otro, a darle
cargo, o compromiso." Señaló Lucas, que la muerte de Jesús se produjo
porque Él lo quiso dio Su último respiro ((Lucas 23:46), de buena gana y
voluntariamente entregó su vida (Juan 10:15, 17-18).
Una de las cosas sorprendentes acerca de su muerte era el momento. La
muerte de Jesús fue inusualmente rápida. La mayoría de las víctimas de la
crucifixión se quedaban en la cruz durante una semana a morir una muerte
lenta y horrible de hambre, de sed, de deshidratación, de locura e infección en
el sol ardiente de Palestina. Cuando Jesús sabía que el pago fue pagado en su
totalidad Eligió a renunciar a su espíritu. Él era soberano en su propia muerte.
Murió como ningún otro hombre. Jesús escogió el tiempo de su propia muerte.
El entierro de Jesús
Los cuatro escritores de los Evangelios presentan los detalles de la muerte y
sepultura de Jesús. Su muerte y el entierro es un hecho histórico.
Cuando Jesús murió, José se dirigió inmediatamente a Pilato pidiendo
autorización para tener el cuerpo, y Nicodemo probablemente permaneció en el
Calvario para vigilar. Ellos con ternura llevaron a Jesús de la cruz, rápidamente
lo llevó al jardín, lavo el cuerpo, lo envolvió con las especias. Fue un entierro
temporal apresurado. Volverían después del sábado en el primer día de la
semana para hacer el trabajo correctamente. Cuando pusieron a Jesús en el
sepulcro nuevo, ellos cumplieron Isaías 53:9 y evitaron que los romanos tiraran
su cuerpo en el vertedero de basura en el infierno fuera de la ciudad.
Criminales condenados perdieron el derecho a la sepultura, pero Dios se
encargó de que el cuerpo de su hijo fuese enterrado con dignidad y amor.
Era importante que el cuerpo sea enterrado adecuadamente, para que Dios
resucitara a Jesús de entre los muertos. Si hubiera alguna duda acerca de su
muerte o entierro, que podría afectar el mensaje y el ministerio del Evangelio (1
Cor. 15:1-8). La resurrección de Jesús tomó a todos por sorpresa. No fue un
evento esperado. Nadie creía que Jesús cuando dijo que resucitaría de entre
los muertos. Ellos espiritualizan la profecía o simplemente no podían entender
la posibilidad. Cada uno de los discípulos se sorprendió tres días después,
cuando resucitó. Ellos pensaban que era el final, cuando Jesús murió y fue
sepultado.
SEMANA SANTA
TEMA: 1ERA PALABRA” PORQUE JESÚS DIJO. PADRE PERDÓNALOS
PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN”
TEXTO: SAN JUAN 19: 29 - 30
Por Que Jesús Dijo: Padre Perdónalos Porque No Saben Lo Que Hacen
Las palabras de Jesús Padre perdónalos porque no saben lo que hacen se
encuentran en Lucas 23:34. Jesús miró desde la cruz a una escena que debió
de ser angustiosa para Él. Los soldados romanos estaban apostando por su
vestimenta (Juan 19:23-24); uno de los criminales en la cruz de al lado de Él lo
estaban insultando (Mateo 27:44); los líderes religiosos se burlaban de Él
(Mateo 27:41-43); y la muchedumbre lo blasfemaba (Mateo 27:39). Rodeado
de este lote indigno, Jesús exclamo por ellos, al Padre; es una expresión de
inigualable misericordia y amor.
¿Por qué Jesús dijo: ¿Padre perdónalos porque no saben lo que hacen, en la
cruz?
Aun en su agonía, la preocupación de Jesús era el perdón de aquellos que se
consideraban entre sus enemigos. Él le pidió al Padre que perdonara a los
ladrones en la cruz que se burlaban de Él. Pidió al Padre que perdonara a los
soldados romanos que se habían burlado de Él, que le escupieran, le dieran
una paliza, le sacaran la barba, le azotaran, le pusieran una corona de espinas
en la cabeza y le clavaran en la cruz. Jesús pidió perdón por la muchedumbre
enfurecida que se había burlado de Él y pidió Su crucifixión (Marcos 15:29-30).
Ellos no sabían que estaban matando al Hijo de Dios (1 Corintios 2:8). La mafia
no sabía realmente a quién intentaban destruir. Los líderes judíos los habían
engañado para que creyeran que Jesús era un falso y alborotador (Hechos
3:17). Al orar "Padre, perdónalos," Jesús reveló su misericordia infinita; Él aún
los amó y los perdonaría si sólo ellos se humillaran y se arrepintieran (Mateo
18:14;2 Pedro 3:9).
En la cruz Jesús proveyó perdón para todos aquellos que quisieran creer en Él
(Mateo 20:28). Jesús pagó el castigo por los pecados que cometimos en
nuestra ignorancia, e incluso por los pecados que cometimos deliberadamente.
Cuando nacemos de nuevo, nosotros también nos convertimos en una
respuesta a la oración de Jesús:" Padre perdónalos porque no saben lo que
hacen ".
Jesús mira el interior del hombre, allí donde se encuentra el pozo de agua viva.
Él mira cuánta capacidad de amar posee y cuánta de amarse. Y descubre lo
que cada uno busca mantener secreto.
No saben lo que hacen pues para saber primero hay que conocer al otro, y
ahí anida la gran pobreza de este mundo que descarta a todos y quedándose
con poco.
Los romanos acabaron descubriendo que era quien decía, pero por desgracia,
como tantas veces en la vida, solo lo descubrieron cuando ya había muerto. De
niño nos dicen que si se tiran de un puente tú no los sigas, de adultos en
cambio nos decimos que es peor quedarse mirando mientras otros caminan. El
cristiano no solo no se tira a un puente, no se queda mirando como otros se
tiran, sino que se pone al frente y con su ejemplo inspira otro camino y otra
salvación, por si alguno, aunque sea alguno solo, se da cuenta y le alivias.
paciencia, sabiduría,
“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma,
y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo
es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mateo 22: 37-39)
Esta no constituye una Ley Nueva simple que debemos acatar, sino que nos
revela el criterio de autenticidad de nuestra fe y de nuestra manera de ser
personas comprometidas con Cristo. Por una parte nos manifiesta que estos
dos mandamientos son la base fundamental de la verdad y puede sostener
cualquier ley.
Por otro lado, nos expone ante la realidad de Dios y a la realidad de nuestro
Prójimo. Así que en el amor encontramos esa fuente de agua viva, ese
alimento que nos sustenta y que nos alienta cada día.
Gracias a ese amor que Jesús nos muestra en la cruz del calvario y que
sobrepasa todo entendimiento, podemos percatarnos de la magnitud del amor
que Cristo sentía por la humanidad, aún cuando ésta lo haya puesto en una
situación muy dolorosa y humillante. Así que Cristo nos enseña con sus
acciones que sí podemos amar al prójimo a pesar de que éste nos haga daño.
manera espiritual y no carnal, dejar morir todas las cosas que nos atan y
entregarnos a la voluntad de Dios. De esta forma, perdonaremos al prójimo de
corazón, así como Jesús lo hizo clavado en esa cruz.
En este sentido, los soldados romanos no sabían que estaban matando al Hijo
de Dios, tal como lo revela su palabra: “Mas hablamos sabiduría de Dios en
misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para
nuestra gloria, la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si
la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria” (1 Corintios
2: 7-8).
Así que la mafia no sabía en realidad a quién trataban de destruir sin razón
alguna, más que su propia maldad y ego. Los líderes judíos fueron engañados
para que pensaran que Jesucristo era solo un charlatán. Tal como su palabra lo
revela: “Mas ahora, hermanos, sé que por ignorancia lo habéis hecho, como
también vuestros gobernantes” (Hechos 3:17).
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
Sin embargo, este enfoque es algo limitado, ya que esta oración va mucho más
allá porque incluye a toda la humanidad que en su ignorancia puede caer
también en el pecado. Tal como lo revela su palabra: “Pues habiendo conocido
a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se
envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue
entenebrecido” (Romanos 1:21)
Aunque podemos encontrar evidencias acerca de la existencia de Dios y de
sus bondades, todos en algún sentido podemos rechazarlo y alejarnos de sus
mandatos, ya que somos humanos y tenemos libre albedrío. Pero quizás
éramos ignorantes de lo que estábamos haciendo cuando nos poníamos en
contra de nuestro Señor, creador del cielo y de la tierra.
Pero cuando Cristo oró por aquellos transgresores, también los hizo por
nosotros, que dentro de nuestra ignorancia, muchas veces le podemos fallar a
Dios, sin medir las consecuencias de nuestras acciones. Así que es un
FECHA: miércoles 05/04/23 Las 7 palabras ABRIL 2023
Predicación: Exp. Yazmin Villacreses Iglesia Adoración
privilegio poder conocer la palabra de Dios y saber el plan divino del sacrificio
de Cristo, ya que gracias a esto podemos apreciar la luz de la verdad, que
antes estada vedada.
Así que la situación cambió totalmente con esta hermosa oración de Nuestro
Señor Jesucristo al decir que nos perdonara por nuestra ignorancia. Por lo cual
la muerte del Hijo fue la respuesta a esta oración, ya que cuando Jesús murió,
el sacrificio le fue agradable a Dios para el perdón de nuestros pecados, de
forma que cualquier persona que crea en él para salvación y nazca de nuevo,
pueda llegar a obtener el regalo de la salvación. De esta manera que cuando
se consumó este sacrificio, se rasgó el velo que nos mantenía alejados de
Dios, y ahora podemos tener acceso a él mediante su hijo Jesucristo.