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Emocion

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1.

ACTIVIDADES CORPORALES Y DE
DESARROLLO COGNITIVO.
1. 1 Relajación.

Distintos tipos de relajación:

Tendido y relajado por otros mediante presiones de los dedos y soplos.

Sentado y el compañero de detrás relaja por contacto.

Los niños se imaginan que son globos que se hinchan y luego se pinchan y se
desinflan.

Marionetas manejadas por otro, estas están sujetas por hilos que luego se
cortan.

El maestro/a les dice a los niños que se imaginen que son muñecos de alambre
y que poco a poco se van a ir convirtiendo en muñecos de trapo.

1.2 Sensación y percepción corporal.

Sentir el peso de los brazos, de la mano, de los dedos.

Ir levantando despacito cada miembro y luego dejarlo caer, uno y luego el


otro.

Tomar contacto con distintas partes del cuerpo algunos objetos o materiales
(globos, pelotas, papeles, suelo....)

Andar por el espacio sin chocar, luego con un brazo levantado, después con
uno delante y el otro detrás.

El maestro/a propone a ver quién ocupa el mayor espacio en el suelo con su


cuerpo, después, ocupar el menor posible.

1.3 Imitación ritmo y movimiento

Captar por el tacto posturas e imitarlas (ojos tapados)

A partir de un ritmo, el maestro propone diferentes posturas alternativamente


que se irán repitiendo.

El maestro/a les dice a los alumnos/as: "Simón dice que... se queden quietos,
anden, salten, que den palmadas, que imiten a una rana...)
Por parejas un niño en frente del otro, uno de los dos hace una postura y el
otro debe imitarla.

1.4 Expresión corporal.

Los niños/as caminarán por el espacio tranquilamente y el maestro/a nombrará


una parte del cuerpo y ellos la señalarán en el compañero más cercano.

Lanzar distintos materiales hacia arriba y recogerlos con las manos en


distintas posturas.

La isla: repartir papeles por el suelo (islas) que se van haciendo mas escasas y
hay que tratar de entrar en alguna de ellas y no quedarse fuera.

Por grupos de 4 ó 5 niños/as formar estatuas, figuras geométricas, números,


letras, e

Hoy queremos compartir recursos y actividades para usar el


movimiento para trabajar las emociones. En este post
hablaremos de:
 Cuerpo y Emoción
 Cambia tu postura, cambia tu emoción. 
 Juegos Propuestos

Cuerpo y Emoción
Cuerpo y emoción están estrechamente relacionados. Cuando
sentimos estrés parece que el pecho nos oprime, la alegría en
cambio nos hace sentir ligeros, casi como si volásemos, el
miedo nos revuelve el estómago… De hecho la palabra emoción
proviene etimológicamente de  emovere es decir
movimiento; una emoción es un movimiento corporal. 
Las emociones se experimentan en el cuerpo, e identificar
esos mecanismos en nosotros suele ser un camino útil para
comenzar a conectar con nuestras emociones. 
 La Alegría. Genera un movimiento hacia arriba (expresión
facial, postura erguida , incluso podemos ” saltar de alegría”).
 Las Tristeza. Genera el movimiento contrario , es el
movimiento hacia abajo, expresión facial, los hombros etc, ”
estoy hundido”.
 La Agresividad. Genera un movimiento hacia adelante
 El Miedo. Genera un movimiento hacia atrás.

Cambia tu postura, cambia tu emoción


Paul Ekman, investigador pionero en el campo de las
emociones y su expresión facial, descubrió la relación entre los
gestos y el estado de ánimo. Cuando una persona adopta una
expresión facial negativa como la tristeza, el cerebro
interioriza esa expresión y su estado de ánimo cambia para
adaptarse a ella.
También sabemos que la sonrisa desencadena endorfinas y
dopamina, que hace a los músculos estar menos tensos,
calmar la respiración y sentirnos mejor. Sonreír mejora nuestro
estado físico e incluso nuestra salud.
Las investigaciones más recientes de la psicóloga social Amy
Cuddy sobre lenguaje no verbal también revelan que podemos
cambiar nuestra propia química simplemente cambiando
nuestra postura corporal. Te dejamos el video de la charla TED
en la que explica sus investigaciones,
 
 b   
 

Actividades Propuestas 
Actividad 1: “Conocemos nuestras emociones”
Los alumnos se sitúan por parejas. A continuación les
repartiremos una ficha  en la que aparecerá una imagen con 12
caras, cada una de las cuales expresa una emoción diferente.
Además, en la parte inferior aparecerá un cuadro en el que
aparecerán las 12
emociones. En función de los gestos que esté realizando cada
una de las caras, los alumnos deberán determinar qué emoción
se corresponde con cada una de las caras.
Actividad 2: “Me visto de emoción”
Los alumnos continúan por parejas. Uno de ellos escoge una de
las emociones anteriores, y debe representársela a su
compañero, realizando todos los gestos y movimientos que
estime pertinentes. El observador tratará de adivinar qué
emoción está intentando
representar.  Posteriormente se cambian los roles.
Actividad 3: “En busca de la emoción perdida”
La clase quedará dividida en dos grupos, de tal manera que una
mitad de los alumnos tenga una serie de emociones diferentes
para cada uno de los miembros del equipo, y la otra mitad las
mismas. Los alumnos se distribuyen por el espacio
representando la emoción que tiene asignada, intentando
buscar a un miembro del otro grupo que esté representando su
misma emoción. Una vez que la pareja se ha encontrado, antes
de desvelarse cuál era la emoción de cada uno, deben hablar de
los gestos y movimientos que han utilizado cada uno de ellos,
para finalmente poner en común la emoción y cerciorarse de
que la pareja es la adecuada. Si no fuera así, deberán volver a
seguir buscando.
Actividad 4: “Enséñame cómo te mueves y te diré qué sientes”
Los alumnos volverán a situarse por parejas. Cada uno de los
miembros de la pareja, tendrá una ficha con una serie de
acciones diferentes para cada uno de ellos, que deberán
realizar expresando la emoción que se indique. En la parte
inferior de la ficha, aparecerá un cuadro, con el que el
observador analizará la acción de su compañero, atendiendo a
las diferentes partes del cuerpo. Acciones Propuestas:
 Caminar expresando enfado ira.
 Llamar a la puerta expresando enfado.
 Abrir la puerta a alguien expresando sorpresa.
 Participar en un debate expresando soberbia.
 Presenciar un acontecimiento deportivo expresando
agitación.
 Bailar expresando alegría.

IMPORTANTE PAARA ESCUCHAR

¿Dónde guardas tu emoción?


Un juego para que tus
alumnos localicen las
distintas emociones en su
cuerpo
Por

 Haydee Mesa

 -

14/12/2015

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Para dar nombre a una emoción, lo primero que debes hacer es atender
al síntoma físico para localizar las distintas emociones del cuerpo:
localízalo en tu cuerpo y observa su desarrollo. Nos referimos a la
‘sensación’, ese cúmulo de energía que se acumula en cierta zona de
nuestro físico como respuesta a algún estímulo exterior o interior.

Distintas emociones del cuerpo

Descubre que el enfado y la tristeza no nacen en el mismo lugar ni


tienen la misma temperatura, ni ‘color’ ni trayectoria… Por ello, escucha
tu sensación; ¡Escucha a tu cuerpo! y pregúntate ¿Dónde sientes lo que
sientes?, ¿Cómo es esa sensación?,¿caliente ?, ¿fría?
Cuando sepas dónde nace cada una y cómo es habrás desarrollado gran
parte de la Inteligencia Emocional de tu alumno. Lo habrás entrenado
para escuchar el primer indicio emocional en su cuerpo.

Entonces obtendrá grandes ventajas:

1. Tendrá más tiempo de reacción para gestionar la emoción y manejarla


mejor, al identificarla ya desde el comienzo.

2. Sabrá a ciencia cierta qué le está pasando y podrá evitar la


archiconocida frase: «me encuentro mal, pero no sé lo que me pasa».

3. Al saber lo que le pasa podrá responsabilizarse de lo que le ocurre y


actuar en consecuencia.

4. Mejorará su grado de autoconocimiento observando las cosas que le


afectan y las que no.
Juega a ¿Dónde guardas tu emoción?

Os proponemos un juego ideal para todas las edades, y también para


practicarlo con toda la familia, con el que potencias también el oído y la
sensibilidad musical. Es un entrenamiento que debes practicar al menos
una vez por semana. Al principio notarás una falta de sensibilidad
generalizada, pero con la constancia lograrás que empiecen a identificar.
Vivimos en una cultura en la que el cuerpo no es mirado como lo que es,
no sólo una valiosa herramienta, sino una maravillosa fuente de
información y conocimientos.

Foto: YaiYoga

Materiales:

1. Hazte con un repertorio musical variado que abarque todos los


estados anímicos. Te propongo algunos ejemplos para empezar a
indagar. Hasta 7 años puedes trabajar con las emociones básicas. Es
importante que las piezas tengan fuerza dramática y profundidad
expresivas y que la calidad y el volumen en la emisión sean adecuados.

Alegría («Júpiter», de Holst…)
Tristeza («Claro de luna», Beethoveen),
Miedo («Réquiem por un sueño», «Drácula»…)
Enfado (B.S.O Espartaco, Stanley Kubrick)

2. Para niños de 7 años en adelante, sírvete de un emocionario. Estos


libros son ideales para diferenciar con exactitud los distintos matices
emocionales. Busca melodías que se acerquen al estado anímico que
buscas.

Pautas para los docentes/familias:

1. Diles a tus alumnos/hijos  que cierren los ojos y se tumben boca


arriba. Esto les ayudará a estar más atentos/a las sensaciones
corporales internas.

2. Anímales a que sientan la música habitando su cuerpo; busca un


equilibrio entre escucha interna (hacia tu cuerpo) y externa (hacia la
música).

3. Pídeles que observen donde nace la sensación, por imperceptible que


sea. Lo interesante no es que les digas dónde se experimenta cada una,
sino que ellos mismos lo averigüen. Una vez más, no se trata de pensar,
sino de sentir. ¡Investiga!, ¡Escucha a tu cuerpo! Continuamente te lanza
información, sólo tienes que escucharla. Así se trabaja en ciertas
terapias, como la Gestalt. Nadie te dice nada hasta que tú lo descubres
por ti mismo. Siempre hay tiempo para leer un manual.

4. ¿Cómo es esa sensación? Pídeles que imaginen un color, una


temperatura (¿caliente o fría?), una trayectoria (que observen si va
creciendo y hasta qué zona se extiende).

5. Diles que pongan nombre a esa sensación. Identifica la emoción:


tristeza, alegría, enfado, miedo…

6. Puesta en común: colocaos en círculo después de haber escuchado la


pieza para compartir cada uno su experiencia (lugar, color, trayectoria y
nombre de la emoción).
7. Acaba la actividad dando el nombre y el autor de la pieza musical para
trabajar también el aspecto cognitivo y ampliar los conocimientos
musicales de tus alumnos o de tu shijos.

8. Por último, te animo a que tú mismo participes en esta divertida y


profunda actividad con tus alumnos o hijos; nada mejor que hacerlos
vibrar con tu motivación y ejemplo y así fortalecer el vínculo con ellos.

Si no es así, y decides observarlos durante el desarrollo de la actividad,


sería bueno que les hicieras una devolución de gestos, posturas y grados
de tensión que hayan manifestado durante el ejercicio. Por ejemplo;
“durante la audición de «xxx», vi cómo cerrabas los puños y apretabas
las mandíbulas”. Esto les dará más pistas de la emoción
experimentada. Hay niños a los que por carácter y educación les cuesta
más conectar con sus sensaciones físicas. No dejes que se desanimen,
simplemente necesitan más tiempo. Persiste en el entrenamiento
animándolos con cariño y entusiasmo.

¡Sapere aude! (Atrévete a saber)

Enlaces de interés:

–Cuerpo y Terapia Gestalt

-¿En qué zona del cuerpo se manifiestan las distintas emociones del


cuerpo?
Retrato de Beethoven por  Joseph Karl Stieler, 1820

Haydée Mesa, licenciada en Arte Dramático y especialista en Técnicas


Gestálticas, con experiencia como actriz profesional y pedagoga
teatral, conjuga estas disciplinas para profundizar en el conocimiento
emocional.

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