Pensandocolectivamente
Pensandocolectivamente
Pensandocolectivamente
filosofarconchicos@gmail.com
Como cada uno de nosotros era varios, en total ya éramos muchos. Aquí hemos utilizado todo lo que
nos unía, desde lo más próximo a lo más lejano. Hemos distribuido hábiles seudónimos para que nadie sea
reconocible. ¿Por qué hemos conservado nuestros nombres? Por rutina, únicamente por rutina. Para hacernos
nosotros también irreconocibles. Para hacer imperceptible, no a nosotros, sino todo lo que nos hace actuar,
experimentar, pensar. (...) No llegar al punto de ya no decir yo, sino a ese punto en el que ya no tiene ninguna
importancia decirlo o no decirlo. Ya no somos nosotros mismos. Cada uno reconocerá los suyos. Nos han
ayudado, aspirado, multiplicado.
A través de este trabajo nos proponemos articular dos tipos de experiencias filosóficas
que venimos llevando a cabo desde hace dos años: nuestro desempeño como colectivo de
investigación y de trabajo en torno a la propuesta “filosofía con niños” y nuestras experiencias
como docentes, tanto en el marco de instituciones educativas como en diversos espacios
culturales.
Nos interesa enfocar la mirada en las diversas conexiones que se establecen entre
ambas instancias principalmente en relación a la idea de comunidad de investigación
filosófica, haciendo hincapié en los vínculos afectivos como propiciadores de un modo de
hacer filosofía en tanto experiencia compartida.
El colectivo Filosofarconchicos nace a partir de un grupo de estudiantes y docentes
interesados en conocer y discutir la propuesta “filosofía para niños” de M. Lipman. Desde el
inicio, coincidimos en que la filosofía atraviesa, motoriza, vincula, desafía existencial y
colectivamente de una manera que los ámbitos académicos, en principio, no habilitan. A
través de los encuentros y en esta búsqueda de un modo de hacer filosofía que escapara a los
cánones académicos, descubrimos una nueva forma de llevar a cabo la práctica de la
propuesta de manera horizontal y compartida. Decidimos organizarnos de manera colectiva ya
que el atomismo que habíamos experimentado en nuestros anteriores acercamientos a la
filosofía con niños no daba cuenta del modo de hacer filosofía que buscábamos. ¿Cómo un
coordinador que no puede vivenciar lo colectivo con sus pares puede construir comunidad en
1
Integrado por: Elena Aguirre – María Ángeles Bruno- Aldana Carreira – Agustina Castillo - María Laura
Colombo - Diego Di Chiara - Andrea Ebu Isaac – Victoria Soledad Heredia - Laura Macri – Ángela María
Menchón - Sebastián E. Sabatini.
1
www.filosofarconchicos.com.ar Colectivo Filosofarconchicos 2009
2
www.filosofarconchicos.com.ar Colectivo Filosofarconchicos 2009
3
www.filosofarconchicos.com.ar Colectivo Filosofarconchicos 2009
todos se apropien y disfruten del espacio del aula, que surja la posibilidad de encontrarse con
el otro, de hablar desde distintos sentidos, propiciando la curiosidad, el asombro y las ganas
de aprender y descubrir entre todos.
Es necesario que el docente trabaje para que la obligatoriedad externa de la que se
parte se convierta en responsabilidad por el otro y por la comunidad, y para que circule el
deseo teniendo en cuenta las ganas de todos. De lo que se trata es de construir conjuntamente
herramientas para lograr apropiarse colectivamente del mundo que nos rodea de manera
crítica y con sensibilidad por los otros.
La idea de llevar la filosofía a la escuela-de llevar esta filosofía a la escuela- es que la
misma habilita cuestionamientos que nos atraviesan en tanto singularidades, abriéndonos al
otro dentro y fuera de la institución.
¿Cuáles son las dificultades de llevar a cabo esta propuesta en el sistema educativo
actual? En la situación social actual en nuestro país, el imaginario colectivo sitúa a la escuela
como un lugar incontaminado de los problemas cotidianos. Sin embargo, la escuela es parte
de la sociedad y como tal, los problemas que ésta tiene se reflejan en aquella. Determinadas
características de las relaciones sociales que se dan por fuera de la escuela, como el egoísmo,
la competitividad, el individualismo, la falta de diálogo, entre otras, dificultan la
conformación de una comunidad. En este sentido, nuestra propuesta desarticula la idea de que
uno puede apropiarse de herramientas individualmente, buscando que las herramientas se
construyan colectivamente. De lo que se trata es de poner a los chicos como protagonistas, de
pensar a la escuela como un espacio de creación común donde es posible el surgimiento de
otros modos de subjetividad y de vínculos, alternativos a los propuestos por el sistema
vigente. Juguemos juegos en donde nadie gane…
Si bien nuestra experiencia como colectivo es relativamente nueva y todavía nos
quedan muchas cuestiones por definir y tenemos por delante un largo camino de construcción
y de reflexiones conjuntas, el espacio que nos dimos ha sido sumamente enriquecedor para
nuestra tarea como filósofos y como docentes en las aulas. Sostenemos que la generación de
este tipo de espacios resulta fundamental a la hora de reflexionar sobre nuestras propias
prácticas y creemos que a veces no se generan las condiciones temporales, espaciales,
personales o institucionales como para que surjan.
La intención que nos mueve a la presentación de este trabajo es dar cuenta de que este
tipo de experiencias autoorganizadas por fuera del marco institucional son posibles y
productivas. Nos gustaría además conocer y tomar contacto con las de otros ya que
consideramos que las mismas se fortalecen si están enmarcadas en una red de experiencias.
Bibliografía consultada
4
www.filosofarconchicos.com.ar Colectivo Filosofarconchicos 2009
Kohan W. y Waksman V. (2000) Filosofía con niños, Buenos Aires, Editorial Novedades
Educativas.
Lipman, M. (1998) La filosofía en el aula, Madrid, Ed. de la Torre.
-----------------∞----------------