Educación Sexual Integral
Educación Sexual Integral
Educación Sexual Integral
Manuel Belgrano”
Profesorado de Artes Visuales con Orientación en Producción
Educación Sexual
Integral
Profesora:
Mitchell, Teresa
Alumnas:
Cian, Aldana
Moralejo, Ileana
Nardelli, Flavia
Orellano, Candela
Pérez, Lara
Stechina, Mariana
2018
Consignas:
- Analizar y fundamentar:
1) La ESI en la escuela secundaria
2) La ESI en la escuela, la familia y la comunidad
3) La ESI en las áreas (Cs. Sociales – Lengua y literatura – Cs. Naturales)
- Elegir un taller:
o Embarazo y adolescencia
o Infecciones de transmisión sexual VIH/SIDA
o Violencia y maltrato
o Vulneración de los derechos y abuso sexual
Las instituciones educativas de nivel secundario, la Educación Sexual Integral debe constituir un espacio
sistemático de enseñanza y aprendizaje que articule contenidos de diversas áreas curriculares con los
Lineamientos de la ESI, adecuados a las edades de adolescentes y jóvenes, abordados de manera transversal
y en espacios específicos. Incluye el desarrollo de saberes y habilidades para el conocimiento y cuidado del
propio cuerpo; la valoración de las emociones y de los sentimientos en las relaciones interpersonales; el
fomento de valores y actitudes relacionados con el amor, la solidaridad, el respeto por la vida, la integridad y
las diferencias entre las personas; y el ejercicio de los derechos relacionados con la sexualidad. También
promueve el trabajo articulado con las familias, los centros de salud y las organizaciones sociales.
Con respecto al plano de la afectividad, consideramos que, desde la escuela, es posible trabajar para
desarrollar capacidades como la solidaridad, la empatía, la expresión de los sentimientos en el marco del
respeto por los y las demás y por sus diferencias.
La Ley N° 26.150 le da a la escuela un rol privilegiado como ámbito promotor y protector de derechos.
Para el desempeño de este rol, la familia, como primera educadora, constituye uno de los pilares
fundamentales a la hora de entablar vínculos, alianzas y estrategias con la escuela. Es importante que la
Educación Sexual Integral sea abordada por la escuela con el mayor grado de consenso posible, promoviendo
asociaciones significativas entre la escuela, las familias y la comunidad en general. Esto es una obligación, y
también una oportunidad para abordar integralmente la formación de los y las adolescentes.
Será propicio realizar talleres de sensibilización con las familias. La ESI puede convertirse en un puente
para acercar familias y escuelas.
En la Educación Secundaria, los contenidos de educación sexual, por lo general, son abordados en las
áreas de Ciencias Naturales, Educación para la Salud y Biología. En ellas, se trabajan temáticas relativas a los
sistemas reproductivos, el embarazo, la prevención de infecciones de transmisión sexual (ITS), distintas formas
de cuidado del cuerpo, reducidas casi siempre a algunos aspectos anatómicos y fisiológicos que ponen énfasis
en el riesgo y la prevención.
La sexualidad implica:
• Considerarla una dimensión constitutiva de las personas que no se agota en sus aspectos biológicos;
estos aspectos constituyen sólo una parte de la sexualidad. Está presente a lo largo de toda nuestra vida y se
manifiesta de manera particular en cada momento del desarrollo.
• Múltiples dimensiones interrelacionadas: biológica, psicológica (afectiva), social, jurídica, ético política
y espiritual.
El objetivo de esta primera propuesta, organizada en dos actividades, es abordar el conocimiento de los
sistemas reproductores masculinos y femeninos, las relaciones sexuales, la gestación y el embarazo,
integrados con las dimensiones afectivas, sociales, culturales, éticas y espirituales de la sexualidad. Para el
desarrollo de esta actividad consideramos conveniente generar un clima de trabajo que favorezca la
participación de las y los jóvenes, de modo tal que, en su transcurso, se sientan habilitados para poner en
juego sus saberes previos.
Para realizar esta actividad las y los jóvenes completaran un cuadro anónimo sobre afirmaciones para las
cuales deberán elegir entre tres opciones: “verdadero”, “falso”, “no sé”. El objetivo es que cada uno junto con
el o la docente pueda reconocer los saberes que tiene, valorando también positivamente la opción “no sé”.
Luego, cada equipo trabajará con las producciones de otros compañeros. Realizamos un análisis en
donde:
• Identifiquen las respuestas que consideraron verdaderas. Elaboren algunos argumentos para justificar
la veracidad de las afirmaciones.
• Identifiquen las respuestas que consideraron falsas. Elaboren algunos argumentos para justificar la
falsedad de las afirmaciones.
• Identifiquen las respuestas del tipo “No sé”. ¿A qué fuentes de información podríamos recurrir para
resolver estas dudas?
• Revisen los distintos argumentos: ¿provienen de conocimientos científicos, de tradiciones, de creencias,
de saberes cotidianos?
Invitamos a los grupos a hacer una puesta en común de lo trabajado, destacando los aspectos que
generaron coincidencias, discrepancias y aquellos en que manifestaron mayor incertidumbre. El o la docente
coordinará y guiará a las chicas y los chicos para que justifiquen y fundamenten sus respuestas.
Frente a esta situación, propondremos reelaborar, descartar, confirmar e incorporar nuevos
conocimientos que tengan como fuente al conocimiento científico y a la promoción de los derechos de los
niños, niñas y adolescentes.
Actividad:
Consignas de trabajo:
1. Individualmente (o en grupo, según la opción elegida), ordenar los distintos momentos de la secuencia
para utilizar correctamente un preservativo (Daremos al grupo la secuencia desordenada).
Secuencia para el uso correcto del preservativo:
Erección.
Sacar el preservativo del sobre.
Apretar la punta del preservativo para que quede lugar para el semen.
Colocar el preservativo.
Penetración.
Eyaculación.
Retirar el pene sosteniendo el preservativo.
Retirar el preservativo Pérdida de la erección.
Tirar el preservativo.
2. Compara tu trabajo con el que hicieron tus compañeros. Luego, entre todos, discutan, fundamenten y
registren en el pizarrón los siguientes aspectos: ¿Qué hay que verificar antes de usar el preservativo? ¿Cómo
se abre correctamente el sobre? ¿De qué tipo tienen que ser los lubricantes en caso de ser utilizados? ¿Cómo
se coloca correctamente el preservativo?¿Cómo se retira y desecha en forma correcta? Como cierre de la
actividad, sería interesante reflexionar con el grupo sobre: ¿Cómo incide el conocimiento y la información con
la que contamos, en nuestras prácticas cotidianas y en el cuidado de la salud? ¿Por qué muchas veces el saber
y el conocimiento no logran instalar en nuestra vida cotidiana formas de cuidado, entre ellas, el uso del
preservativo?
Bibliografía:
Ministerio de Educación (2010) ESI para la Educación Secundaria. Contenidos y Propuestas para
el aula.