Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Guia 1 - 9° - Etica

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 1

COLEGIO PRINCIPE DE PAZ GA- F26

MANUAL DE PROCESO MISIONAL


GESTIÓN ACADÉMICA VERSION 3.0
“Aprender Haciendo”
PAGINA FECHA
GUIA, TALLER, EVALUACION 1 de 1 2015-01-09 SC-CER 646733
PERIODICA BIMESTRAL

ÁREA/ASIGNATURA/DIMENSIÓN PROYECTO GRADO 9° PERÍODO II NOTA

NOMBRE DEL ESTUDIANTE ACTIVIDADES GUÍA x TALLER

EVALUACIÓN EVALUACIÓN TRABAJO DE EVALUACIÓN DE VALOR


DE PERIODO BIMESTRAL NIVELACIÓN NIVELACIÓN PORCENTUAL

Trazabilidad con la asignatura de ÉTICA Y VALORES

LA MORAL Y LAS BUENAS COSTUMBRES

La callada llegada del fanatismo


“No reapareció hasta pasados unos años
y entonces la furiosa oleada de
descontento lo elevó en seguida hasta lo
más alto. La inflación, el paro, las crisis
políticas y, no en menor grado, la
estupidez extranjera había soliviantado
al pueblo alemán: para el pueblo alemán
el orden ha sido siempre más importante
que la libertad y el derecho. Y quien
prometía orden (el propio Goethe dijo
que prefería una injusticia a un
desorden) desde el primer momento
podía contar con centenares de miles de seguidores. Pero todavía no nos dábamos cuenta del
peligro. Los pocos escritores que se habían tomado de veras la molestia de leer el libro de Hitler,
en vez de analizar el programa que contenía se burlaban de la ampulosidad de su prosa pedestre
y aburrida. Los grandes periódicos democráticos en vez de prevenir a sus lectores, los
tranquilizaban todos los días diciéndoles que aquel movimiento que, en efecto, a duras penas
financiaba su gigantesca actividad agitadora con el dinero de la industria pesada y un
endeudamiento temerario, se derrumbaría irremisiblemente al día siguiente o al otro[…]
Entonces se manifestó por primera vez y a gran escala la técnica cínicamente genial de Hitler.
Durante años había hecho promesas a diestro y siniestro y se había ganado importantes
prosélitos en todos los partidos, cada uno de los cuales creía poder aprovechar para sus propios
fines las fuerzas místicas de aquel «soldado desconocido». Pero la misma técnica que Hitler
empleó más adelante en política internacional, la de concertar alianzas basadas en juramentos y
en la sinceridad alemana con aquellos a los que quería aniquilar y exterminar, le valió ya su
primer triunfo. Sabía engañar tan bien a fuerza de hacer promesas a todo el mundo, que el día
en que llegó al poder la alegría se apoderó de los bandos más dispares. Los monárquicos de
Doorn creían que sería el pionero más leal del emperador, e igual de exultantes estaban los
monárquicos bávaros y de Wittelsbach en Munich; también ellos lo consideraban «su» hombre.
Los del partido nacional-alemán confiaban en que él cortaría la leña que calentaría sus fogones;
su líder, Hugenberg, se había asegurado con un pacto el puesto más importante en el gabinete
de Hitler y creía que de este modo ya tenía un pie en el estribo (naturalmente, a pesar del
acuerdo hecho bajo juramento, tuvo que salir por piernas después de las primeras semanas).
Gracias a Hitler, la industria pesada se sentía libre de la pesadilla bolchevique; por fin veía en el
poder al hombre a quien durante años había financiado a hurtadillas y, a su vez, la pequeña
burguesía depauperada, a la que Hitler había prometido en centenares de reuniones que
«pondría fin a la esclavitud de los intereses», respiraba tranquila y entusiasmada. Los pequeños
comerciantes recordaban su promesa de cerrar los grandes almacenes, sus competidores más
peligrosos.

RESPONDE:
1. ¿Por qué crees que las quemas de libros no fueron oficialmente ordenadas por el régimen
nazi hasta muy tarde?
2. ¿Cómo puede controlarse la conciencia y la voluntad de un pueblo?
3. Compara ahora lo que dice este texto con la definición de la paz del príncipe Borbón-
Parma, piensa que todavía no había estallado la guerra mundial, pero, en ese estado de
cosas, ¿podría hablarse de paz?

También podría gustarte