Enfermedad Inflamatoria Pelvica
Enfermedad Inflamatoria Pelvica
Enfermedad Inflamatoria Pelvica
INTRODUCCION
• Es un síndrome clínico frecuente que engloba la patología infecciosa del tracto genital
superior. Generalmente es el resultado de una infección ascendente desde endocérvix,
pudiendo llegar a afectar en su evolución al endometrio (endometritis), miometrio
(miometritis), trompas (salpingitis), ovarios (ooforitis), parametrios (parametritis) y
peritoneo pélvico (pelviperitonitis).
• Habitualmente es una infección polimicrobiana en la que los agentes patógenos más
prevalentes son Neisseria gonorrhoeae y Chlamydia tracomatis, ambos de transmisión
sexual. Otros agentes implicados son Micoplasma hominis y genitalium, Ureaplasma
urealyticum, Streptococcus agalactiae, Gardnerella vaginalis, Haemophilus sp,
Escherichia coli y gérmenes anaerobios.
• El mecanismo de trasmisión más frecuente es vía sexual progresando en forma de
infección ascendente; también es posible una etiología iatrógenica, representada
principalmente por la colocación de un dispositivo intrauterino (DIU) o cualquier
prueba invasiva capaz de arrastrar los gérmenes de la flora vaginal al tracto genital
superior, como la histerosalpingografía (HSG) y la histeroscopia.
FACTORES DE RIESGO
CUADRO CLINICO
DIAGNOSTICO
• Iniciar tratamiento antibiótico en aquellas pacientes con dolor abdominal en las que está
presente en la exploración al menos uno de los siguientes criterios mínimos:
o Dolor a la movilización del cuello uterino.
o Dolor a la palpación anexial.
o Dolor / sensibilidad uterina.
• Para mejorar la especificidad es muy importante obtener al menos uno de los siguientes
criterios adicionales:
o Temperatura oral > 38ºC.
o Secreción mucopurulenta cervical o vaginal.
o Presencia de abundantes leucocitos en el exudado vaginal en muestra directa
con suero salino o Gram.
o Aumento de la velocidad de la eritrosedimentación y/o PCR, no son específicos
o Diagnóstico microbiológico de infección endocervical por Neisseria
gonorrhoeae o Chlamydia trachomatis. Si el resultado es negativo no descarta.
o Diagnóstico histopatológico de endometritis en biopsia de endometrio.
o Diagnóstico por imagen: ecografía transvaginal, TAC o RMN, con líquido en
trompas de Falopio que podemos encontrar asociada en algunos casos a líquido
libre peritoneal, masas tubo-ováricas o estudios Doppler que sugieren EIP
(hiperemia).
o Hallazgos en laparoscopia concordantes con EIP. Se considera el “gold standard”,
ya que sus hallazgos son definitivos.
DIAGNOSTICO DIFERENCIAL
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
• Test de gestación.
• Analítica de sangre con fórmula leucocitaria y reactantes de fase aguda (PCR y/o
velocidad de sedimentación globular [VSG]), bioquímica básica y coagulación (19).
• Sedimento de orina. Urocultivo.
• Muestras para estudio microbiológico (18,20,21):
• Exudado endocervical: es la muestra más importante. Antes de obtener la muestra es
necesario limpiar el moco cervical con una torunda o gasa estéril y descartarla.
Posteriormente, se debe comprimir suavemente el cérvix para introducir el hisopo en el
canal. Se realizarán tres tomas:
o Extensión directa (detección de leucocitos polimorfonucleares).
o Cultivo bacteriano.
o Técnica de amplificación de ácidos nucleicos (TAAN) o PCR para Neisseria
gonorrhoeae, Chlamydia trachomatis y Mycoplasma genitalium.
• Serología: virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), virus de la hepatitis B (VHB),
virus de la hepatitis C (VHC) y sífilis. Se solicitarán debido a que son ITS que comparten
factores de riesgo similares con la EIP. Siempre se deberá informar a la paciente y se
requerirá el consentimiento de la misma.
TRATAMIENTO
TRATAMINETO HOSPITALARIO
• Enfermedad grave, con afectación importante del estado general, fiebre alta y vómitos.
• Mala tolerancia al tratamiento antibiótico por vía oral.
• Absceso tubo-ovárico: por riesgo de rotura y sepsis
• Gestación: por el incremento de morbilidad materna y fetal.
• Cuando no es posible descartar patología quirúrgica urgente.
• Estados de inmunodepresión.
COMPLICACIONES
• Esterilidad y gestación ectópica: ambas por daño tubárico. A mayor gravedad y número
de episodios, mayor es la probabilidad de que aparezcan. El agente causal que con mayor
frecuencia está implicado es la Chlamydia trachomatis.
• Dolor pélvico crónico: secundario al síndrome adherencial. Es motivo frecuente de
consulta, solicitud de pruebas diagnósticas, prescripción de analgésicos e incluso baja
laboral.