Tarea - Actividades de La Guía
Tarea - Actividades de La Guía
Tarea - Actividades de La Guía
Guía - Tema 4
Elementos prosódicos: acento, entonación y la estructura silábica del español.
Ángela Alape
Ana Chavarro
César Martínez
Acento: Es el contraste que se produce entre una sílaba tónica y una átona (o unas). Se
realiza mediante rasgos prosódicos (tono, duración, intensidad). Su función primordial es
permitir distinguir las palabras en la cadena hablada.
Sílaba: Es la parte de la palabra constituida por uno o varios fonemas que se perciben y
se pronuncian como una unidad. La sílaba está compuesta por tres partes: ataque, núcleo
y coda.
Para consolidar
- Se espera que la palabra que digan (después de escuchar una) tenga el mismo número
de sílabas, entonces se trabaja la división por sílabas. Es decir que se va a trabajar
también el tema de los diptongos y los hiatos.
- Se quiere que la palabra que digan (después de escuchar una) tenga el acento en la
misma sílaba que la escuchada, por lo que deben entender en dónde recae el acento. Se
trabajan entonces las reglas de acentuación o las “regularidades” que expone Ródenas,
junto con un “par de restricciones” (Ródenas p80), y principalmente la regla que se aplica
al 90% de los nombres y adjetivos: “Si acaba en vocal, llana; si acaba en consonante,
aguda” (p81).
1
- Se trabaja también la realización del acento. En esta actividad, los estudiantes deben
utilizar el tono, la duración y la intensidad para lograr capaces de producir adecuadamente
el acento prosódico (Ródenas p75).
3. ¿Qué modificaciones o cambios le harías a las anteriores actividades para que fueran
más efectivas o se ajustaran a tu grupo de clase?
Esta primera actividad tiene un cierto nivel de dificultad, principalmente por la rapidez con
la que deben pensar las palabras, puesto que lanzar la pelota no toma mucho tiempo y
consideramos que esto puede ponerlos un poco nerviosos.
Pensamos que para algunos de los estudiantes con los que trabajamos, puede resultar un
poco difícil. Entonces proponemos una variante para los estudiantes que tengan
problemas con la actividad.
En el tablero se dibuja una tabla con cinco palabras de distintos patrones de acentuación.
Los alumnos deben copiar la tabla. El profesor lee las palabras que encabezan cada
columna. Luego, en un tiempo de 1 minuto, cada estudiante llena la tabla con el mayor
número de palabras posibles que coincidan con el patrón de acentuación de cada
columna. Al final, se leen las listas por columnas. Por ejemplo, todos leen sus palabras de
la columna 1 y se revisa si funcionan bien. El ganador será quien tenga el mayor número
de palabras correctas.
2
II. Actividad 2 (la historia del caballo en el bar)
En esta actividad se trabajan los mismos tres elementos del acento prosódico que
nombramos en la actividad 1, pero con mayor atención y profundidad. Es decir:
- la silabificación
- las reglas, regularidades y restricciones de la acentuación ((Ródenas p80-81)
- la producción oral del acento
Algunas de las reglas adquieren una especial relevancia en esta actividad, como:
- la regla sobre el presente y el acento en la penúltima sílaba (Ródenas p81), la cual
siguen la gran mayoría de los verbos del texto (entra, pide, sirve, toma, para, termina,
pregunta, contesta, paga, perdone, replica, extraña). Cabe resaltar que el verbo “estar”
no cumple la regla, se puede hacer esa aclaración con: es que no estoy acostumbrado a
ver muchos caballos…
- la regla de los adverbios ((Ródenas p82), que también es cumplida por dos de los del
chiste (cuando, cuanto). No la cumple “antes”.
- la regla que se aplica al 90% de los nombres y adjetivos: “Si acaba en vocal, llana; si acaba
en consonante, aguda” (Ródenas p81), puesto que muchas de las palabras del chiste la
cumplen (caballo, camarero, euros, asombro, rato, cara, precios… - sorprendido). Se
puede aprovechar para indicar que en plural la regla se mantiene.
Es posible emplearlo con estudiantes desde nivel B1 de lengua. Sin embargo, se debe
pensar que en este tipo de ejercicios aparecen fenómenos como la resilabificación, por
ello es importante realizarlo de forma pausada y enfocarlo únicamente en la identificación
de acentos de las palabras.
3. ¿Qué modificaciones o cambios le harías a las anteriores actividades para que fueran
más efectivas o se ajustaran a tu grupo de clase?
Esta actividad es muy entretenida y resulta particularmente interesante que sea un trabajo
de grupo. Después de una primera lectura, se puede agregar una segunda en la que, en
vez de leer simplemente a coro, lean el texto de manera cantada con la ayuda de una
melodía sencilla, mientras lo acompañan con el ligero golpe.
Las melodías son muy útiles para estas actividades. Se puede también tomar la canción
de “La cucaracha” y hacer la actividad con su letra, en la cual las sílabas tónicas
adquieren mucha relevancia al cantarla: La cucaraaacha, la cucaraaaacha (…) porque no
tieeeene porque le faaalta… Se puede proceder después a un ejercicio de creatividad en
el que creen una letra que se ajuste a la melodía de la canción. Después la cantan
marcando los acentos de algunas palabras como en la canción y marcándolos todos con
los golpecitos.
3
III. En la actividad 3 (el diálogo de una película)
Esta actividad propone un ejercicio muy lúdico donde se pone a prueba la creatividad del
estudiante, consideramos que se puede emplear en niveles intermedios y avanzados de
lengua, puesto que escribir diálogos involucra elementos gramaticales, léxicos y
discursivos.
En la actividad se trabaja intensamente la prosodia, la cual cobra vital importancia en la
producción de los diálogos, ya que es fundamental que el estudiante conozca la
entonación necesaria de acuerdo con la clase de oración que se emplea en cada una de
las intervenciones del diálogo.
Por ello, la efectividad de la actividad depende de su uso como una práctica que venga
después del estudio de los significados dela entonación anotados en el punto 1 de esta
sección.
3. ¿Qué modificaciones o cambios le harías a las anteriores actividades para que fueran
más efectivas o se ajustaran a tu grupo de clase?
Proponemos hacer las dos variantes sugeridas por el autor para evitar lo que podría pasar
si solo crean el diálogo. Si los estudiantes inventan el diálogo, estarán tentados a
interpretarlo de acuerdo a su propia forma de hablar (la de la L1), por lo que los elementos
prosódicos pueden difuminarse.
Se haría primero con una escena y su diálogo original. En ese caso, puesto que los
estudiantes conocen el diálogo, están obligados a repetirlo lo más exacto posible y, por
tanto, deberán prestar mayor atención a los elementos prosódicos del discurso. Este
procedimiento sigue las “escalas de secuenciación” sugeridas por Bengoechea (p114):
percepción, explicación, imitación.
Después, a partir de ese modelo ya se puede hacer la práctica más libre con otra escena,
en la que con más consciencia de lo esperado se podrá llegar a una producción con
mejores resultados. Con esto se sigue con las “escalas de secuenciación” sugeridas por
Bengoechea (p114), después de la “percepción, explicación, imitación” anteriormente
ejecutadas, en esta parte se llega a la producción libre.
Finalmente, una variante adicional sería cambiar los roles que interpretan los estudiantes
mediante unos papeles sacados al azar.