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Clase Psicoanalisis. AT-1

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Introducción al Psicoanálisis

Definición

Siguiendo la definición del Diccionario de Psicoanálisis de Laplanche y Pontalis1, se


describe al mismo como: “Disciplina fundada por S. Freud y en la que, con él, es posible
distinguir tres niveles:

a) Un método de investigación que consiste esencialmente en evidenciar la


significación inconsciente de las palabras, actos, sueños, fantasías de un
individuo (…)
b) Un método psicoterapéutico (…)
c) Un conjunto de teorías psicológicas y psicopatológicas (…)”.2

Sigmund Freud (1856-1939) nació en Moravia. A los cuatro años se estableció en Viena
con su familia. Allí pasó la mayor parte de su niñez y adolescencia. Estudió Biología y
Medicina, especializándose en Neurología. En 1885 viaja a París para completar sus
estudios. Allí trabaja a las órdenes de un médico bastante innovador llamado Charcot.

Charcot pensaba que algunas enfermedades mentales no tenían una causa orgánica
sino psicológica y se mostraba interesado en la utilización de la hipnosis como método
terapéutico. Freud se inicia en el estudio de la histeria y en la aplicación de la hipnosis
como terapia. La influencia de Charcot será fundamental para estimularlo a separar lo
psicológico de las ataduras de lo anatómico y la hipnosis será la puerta de entrada que
lo llevará a la postulación del Inconsciente.

Freud observa, por citar un ejemplo, a una persona a la cual, en pleno trance
hipnótico, se le ordena que lo primero que hará al salir del trance será buscar un
paraguas y salir a la calle. Efectivamente, ni bien "despierta" esto es lo que hace la
persona: toma un paraguas y se dispone a salir a la calle. Cuando se lo interroga por los
motivos de tal acto, teniendo en cuenta que se trataba de un día de pleno sol, la

1
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós
2
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós, p. 316
persona, luego de titubear unos segundos, contesta que creía haber leído en el
periódico el anuncio de posibles lluvias.

Este tipo de experiencias llevan a Freud a postular la existencia de motivaciones que


dirigen nuestros actos, pese a ser desconocidas para nosotros.

El psicoanálisis se opone a identificar lo psíquico con lo consciente. Los procesos


conscientes constituyen apenas una fracción de la vida anímica total. Freud afirma que
existe un pensamiento y una voluntad Inconscientes que ejercen efectos sobre la vida
consciente.

No es el estudio de la hipnosis el único campo a partir del cual sostiene estas


afirmaciones. Freud presta atención a otros fenómenos que nunca antes habían sido
considerados dignos de ser estudiados científicamente.

Postula que el inconsciente se manifiesta en los actos fallidos, los sueños y los
síntomas.

Sostiene que existen ideas (representaciones) inconscientes que poseen dicha cualidad
por ser incompatibles, inconciliables y conflictivas con el conjunto de ideas
conscientes.

Es a partir del mecanismo de la represión que estas ideas son desalojadas de la


conciencia y enviadas al inconsciente.

Ahora bien, lo inconsciente siempre pugna por manifestarse y hacerse lugar en la


conciencia y siempre lo logra, solo que lo hace de modo disfrazado a través de la
censura.

Los síntomas, los actos fallidos y los sueños, para Freud, dan cuenta de un conflicto
entre instancias y tienen que ver con la sexualidad infantil.

El Aparato psíquico

Este concepto se refiere a la disposición u organización interna del psiquismo. A lo


largo de toda su obra e investigación postula dos teorías del mismo.
Primera Tópica

Divide al aparato en tres sistemas o niveles. Consciente, preconsciente e Inconsciente.

La conciencia es la cualidad momentánea que caracteriza las percepciones externas e


internas dentro del conjunto de los fenómenos psíquicos. El nivel consciente, es el más
accesible del aparato psíquico, está formado por lo que se percibe. Las
representaciones conscientes son todo lo que se registra ya sea fuera del sujeto, a
través de los sentidos vista, olfato, gusto, motricidad (lo que ve, escucha, hace), como
también lo que pasa dentro del sujeto (recuerdos, deseos, sentimientos, emociones,
etc.). Por medio de la consciencia es posible conocer las cosas en forma reflexiva. El
sistema consciente se maneja con el principio de realidad, en el aquí y ahora, respeta
la temporalidad, se rige por leyes lógicas y se adapta al contexto.

CARACTERÍSTICAS Y MODOS DE FUNCIONAMIENTO DE LA CONCIENCIA:

ES TEMPORAL: Respeta las leyes lógicas y cronológicas de la temporalidad.


PREDOMINA EL PRINCIPIO DE REALIDAD: Es decir que puede adaptarse a las
circunstancias y postergar su deseo si no puede llevarse a cabo en el aquí y ahora.
Busca satisfacer el deseo pero se adaptará al medio, es decir aceptará las
prohibiciones. Esta forma de conducirse responde a un proceso secundario de mayor
madurez.
PREDOMINA LA LÓGICA DE LA REALIDAD: Se adapta al medio circundante, a los
códigos del lenguaje literal, los contenidos tienen un significado en sí mismo, sin
significados ocultos.

El nivel preconsciente, es el nivel más cercano a la conciencia, están relacionados


entre sí, ya que disponen de cierta movilidad. Es decir, que los contenidos o
representaciones que se encuentran en este nivel, ingresan fácilmente al nivel
consciente porque han sido olvidados transitoriamente. Este nivel está formado por
sentimientos, pensamientos, fantasías, vivencias, etc. que no están presentes en la
conciencias pero que pueden hacerse presentes en cualquier momento. Los
contenidos que se encuentran en este nivel, están allí porque de algún modo no
pueden entrar en la conciencia por falta de espacio.
Es el sistema situado entre el inconsciente y el consciente, separándole de aquél, la
censura
Existe un olvido voluntario, premeditado, pero cuando es sujeto necesita recordar
estos contenidos, los mismos pueden emerger a la conciencia. Algunos de ellos
producen cierta angustia pero es un dolor o displacer tolerable, por ello es que
emergen tal como son y comparten las características y modos de funcionamiento.
Este nivel funciona al igual que el consciente respondiendo al principio de realidad y a
las leyes lógicas. Cuando una persona necesita recordar algo, desde el nivel consciente
activa los mecanismos de búsqueda y el preconsciente inmediatamente permite que
esa información aflore a la consciencia.

El inconsciente, es el nivel donde se encuentran todos los contenidos, emociones,


deseos, ideas, vivencias y conflictos reprimidos que no tienen lugar en la conciencia,
debido a que la intensidad que poseen producen displacer (sufrimiento) a la persona
cuando los recuerda, por ello los reprime y permanecen ocultos en este nivel.

CARACTERÍSTICAS Y MODOS DE FUNCIONAMIENTO DEL INCONSCIENTE:

El inconsciente tiene sus propias leyes de funcionamiento:

ES ATEMPORAL: Es decir que en este nivel coexisten diferentes ideas sin importar
orden cronológico. Por ej. Deseos infantiles, junto a deseos adultos, y los mismos, se
mezclan todo el tiempo.
Hay presencia de contradicción: los deseos o sentimientos pueden coexistir sin que
resulte conflictivo.
PREDOMINA EL PRINCIPIO DE PLACER: La realidad o el deseo psíquico (interno)
predomina sobre la realidad externa. No puede esperar para satisfacer su deseo. Es la
búsqueda del placer inmediato sin ninguna censura o prohibición.

SE RIGE POR EL PROCESO PRIMARIO: El inconsciente funciona a través de dos


mecanismos, es gracias a esto, que algunos contenidos pueden emerger a la
conciencia, a través del sueño, el chiste, los actos fallidos y los síntomas neuróticos.
A través de estos mecanismos que se denominan condensación y desplazamiento, los
contenidos, ideas, deseos, conflictos que están ocultos en el inconsciente a través de la
represión, sufren transformaciones, de ese modo “engañan” al nivel consciente y salen
a la realidad.

Segunda tópica

EL ELLO
Es la instancia que alberga las pulsiones instintivas regidas por el principio de placer.
Esta instancia puja permanentemente por satisfacer deseos y tienta al yo para que los
ejecute.
El Ello es la parte primitiva, desorganizada de la personalidad, cuyo único propósito es
reducir la tensión creada por pulsiones primitivas relacionadas con el hambre, lo
sexual, la agresión y los impulsos irracionales. Representa nuestros impulsos,
necesidades y deseos más elementales. Opera de acuerdo con el principio del placer y
desconoce las demandas de la realidad. Allí existen las contradicciones, lo ilógico, al
igual que los sueños. Representa la necesidad básica del ser de cubrir sus necesidades
fisiológicas inmediatamente y sin considerar las consecuencias.

El SUPER-YO
Es la voz de la conciencia moral, producto de la internalización de las normas y valores
transmitidos por los padres a través de la educación. Su función es poner freno al ello
y convertirse a veces en amigo del yo, a través de valoraciones positivas que hace de
su conducta (es como si el súper-yo le dijera al yo: “lo has hecho bien...”).
Otras veces se transforma en un enemigo y surge en la persona el sentimiento de
culpa, son los momentos en que el yo no es visto con buenos ojos por el súper-yo
(como si el súper-yo, dijera al yo: “¡No estás a la altura de lo que deberías hacer...!”)
El Superyó es la parte que contrarresta al ello, representa los pensamientos morales y
éticos recibidos de la cultura. Consta de dos subsistemas: la conciencia moral y el ideal
del yo. La conciencia moral se refiere a la capacidad para la autoevaluación, la crítica y
el reproche, basándose en lo que está bien o mal en la cultura y sociedad en la que
vivimos. El ideal del yo es una autoimagen (imagen de uno mismo) ideal que consta de
conductas aprobadas y recompensadas.
El Superyó es una instancia que no está presente desde el principio de la vida del
sujeto, sino que surge a consecuencia de la internalización y resolución del complejo
de Edipo.
EL YO
Es la parte del aparato psíquico que reconoce la propia persona el ¿Quién soy? Se dice
que es la instancia ejecutiva de la personalidad. Es un organizador que a través de la
percepción conoce las necesidades externas e internas. Además de percibir y
discriminar los estímulos externos de los internos y decidir cuáles y como satisfacerlos,
el yo tiene otras funciones como el pensamiento, la memoria, la relación con los
demás, y fundamentalmente el “controlar” los deseos que provienen del ello. Esto lo
logra mediante el uso de herramientas que se denominan mecanismos de defensa.
(Represión, proyección, etc.)
El YO tiene una función reguladora, mediadora, entre el ELLO, el SUPER-YO y la
realidad, es decir que se encarga de organizar los impulsos de la persona, de modo tal
que estos no entren en contradicción con sus valores morales. Para ello realiza ciertas
renuncias y sacrificios que a veces la realidad le impone.

El Yo tiene como fin cumplir de manera realista los deseos y demandas del Ello con el
mundo exterior, a la vez conciliándose con las exigencias del Superyó. El Yo evoluciona
según la edad y sus distintas exigencias del Ello actuando como un intermediario
contra el mundo externo. El yo sigue al principio de realidad, satisfaciendo los impulsos
del Ello de una manera apropiada. Utiliza un razonamiento realista característico de los
procesos secundarios que se podrían originar. Como ejecutor de la personalidad, el Yo
tiene que mediar entre las tres fuerzas que le exigen: el mundo de la realidad, el Ello y
el Superyó, el yo tiene que conservar su propia autonomía por el mantenimiento de su
organización integrada. Es un sistema de funciones psíquicas tales como el examen de
realidad, defensa psíquica, funciones cognitivas e intelectuales (síntesis de la
información, memoria y similares).
No es cien por ciento consciente, en particular, los contenidos referentes a los
mecanismos yoicas de defensa son esencialmente inconscientes.

Su mecanismo de defensa principal es la represión

“...Operación por medio de la cual el sujeto intenta rechazar o mantener en el


inconsciente representaciones (pensamientos, imágenes, recuerdos) ligados a una
pulsión. La represión se produce en aquellos casos en que la satisfacción de una pulsión
ofrecería el peligro de provocar displacer en virtud de otras exigencias…”3

Relación entre las tópicas freudianas

El Yo: es CONSCIENTE PRECONCIENTE E INCONSCIENTE (los mecanismos de defensa


puestos en marcha por el Yo, como la negación, la represión, etc., son esencialmente
inconscientes).

El Superyó: es INCONSCIENTE, PRECONCIENTE y algunos contenidos pueden volverse


CONCIENTES

El Ello: es todo INCONSCIENTE. Aquí hay dos tipos de inconsciente: el que nunca fue
consciente, y el reprimido (es decir el contenido que alguna vez fue consciente y luego,
producto de la represión, se volvió inconsciente).

Sexualidad infantil

Freud se empieza a interesar por pacientes que presentan síntomas que no tienen
ningún tipo de justificación orgánica. Realizó múltiples observaciones clínicas donde

3
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós, p. 375
comprobó la importancia de factores sexuales en la causación de cuadros clínicos
donde no se registraba una causa orgánica (parálisis, etc.)

Es a partir de la observación y estudio de cuadros de neurosis histéricas que


profundizó sus investigaciones sobre el papel de la sexualidad en la causación de las
enfermedades mentales. En sus investigaciones sobre las neurosis Freud encuentra
que las tendencias reprimidas que intentan hallar satisfacción son de índole sexual (lo
mismo que le revelaban sus observaciones sobre los sueños). Todo esto conduce a
Freud al estudio de la sexualidad humana; tema que intenta abordar desde sus
orígenes. Freud indaga y descubre la sexualidad infantil.

Amplía el término de sexualidad de su época, no reduciéndola a lo que se conoce


como genitalidad.

Sexualidad: “En la experiencia y en la teoría psicoanalítica, la palabra sexualidad no


designa solamente a las actividades y el placer dependientes del funcionamiento del
aparato genital, sino toda una serie de excitaciones y de actividades, existentes desde
la infancia, que producen un placer que no puede reducirse a la satisfacción de una
necesidad fisiológica fundamental (respiración, hambre, función excretora, etc.)4

Freud sostiene que desde la infancia operan normalmente impulsos sexuales sin
necesidad de estimulación externa.

Estos impulsos son denominados Pulsiones, diferenciando las mismas del instinto.

Define a la pulsión como algo propio de los seres humanos reservando el término
instinto para el reino animal.

Pulsión:

El psicoanálisis emplea el término de pulsión (impulso que tiende a la consecución de


un fin) para el estudio del comportamiento humano. Se denomina pulsión a las fuerzas
derivadas de las tensiones somáticas en el ser humano y las necesidades del ello; en
este sentido las pulsiones se ubican entre el nivel somático y el nivel psíquico.

4
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós, p. 401
Freud distinguió a partir de 1915 diversos momentos y "dimensiones" de una pulsión:

1- La fuente que tiene su origen en lo somático y que se traduce por una tensión, una
suerte de impulso (en alemán: Drang).

2- El Drang mismo, es decir la tensión interior que se traduciría en Trieb (pulsión).

3- La meta: que es la satisfacción, la reducción de la tensión.

4- El "objeto" de la pulsión, que en lo real es un medio, un medio bastante accesorio ya


que sólo sirve para disminuir temporalmente la tensión inherente a la pulsión.

En resumen, el Empuje hace tender al organismo hacia un fin. Según Freud, una
pulsión tiene su fuente en una excitación corporal que parte de alguna zona erógena
corporal y que genera un estado de tensión; su fin es suprimir el estado de tensión a
través de un objeto (pecho, chupete, etc.). Es gracias al objeto que la pulsión puede
alcanzar su fin que es la satisfacción, o sea la reducción de la tensión.

Una de las diferencias entre pulsión e instinto tiene que ver con el objeto.

Las pulsiones no tienen un objeto determinado genéticamente para alcanzar la


satisfacción, si lo tiene el instinto. Por lo tanto el sujeto humano tendrá que realizar
una búsqueda y rodeo para encontrar algún objeto que genere satisfacción no
encontrando nunca un objeto que llegue a colmar del todo esa necesidad.

De la diferencia que se encuentra entre la satisfacción que se busca y la que se


encuentra (ya que el objeto no está determinado genéticamente y por ende nunca es
eso del todo) surge lo que el psicoanálisis llama Deseo.

Libido:

Freud define a la libido como la energía de la pulsión.


Fases del desarrollo libidinal

Cada fase tiene una zona erógena preponderante. Las fases no se superan una a la otra
sino que cada una cobra más preponderancia. Luego se produce la Amnesia infantil y
se entra en un período de latencia para que luego en la pubertad se d lugar a la Fase
genital

Fase oral (desde el nacimiento hasta los dos años aproximadamente): La boca es la
zona erógena preeminente y procura al bebé no sólo la satisfacción de alimentarse
sino sobre todo el placer de chupar. Es decir, de poner en movimiento los labios, la
lengua y el paladar en una alternancia rítmica.

Es la primera fase de la evolución de la libido. La zona erógena es la boca. El placer está


ligado a la excitación de la cavidad bucal y de los labios. Nace apuntalada en una de las
funciones corporales de la vida (nutrición) para luego independizarse (Chupeteo)

Fase anal- sádica (2 a 4 años aprox.)

Segunda fase de la evolución libidinal. Se caracteriza por una organización de la libido


bajo la primacía de la zona erógena anal. El placer está ligado a la excitación de esa
zona. Se genera una ambivalencia (evacuación-retención) y surgen los impulsos
sádicos. En esta época la fuente principal de placer y conflicto potencial son las
actividades en las que interviene el ano. Con frecuencia representa el primer intento
del niño por convertir una actividad involuntaria en voluntaria. Los niños pueden
experimentar dolor o placer ya sea al retener o al expulsar sus desechos fisiológicos.
Debemos separar aquí el placer orgánico de defecar, aliviando una necesidad corporal,
del placer sexual consistente en retener las heces y los gases para después expulsarlos
bruscamente.

Fase fálica: el órgano sexual masculino desempeña un papel dominante. En esta fase
las caricias masturbatorias y los tocamientos ritmados de las partes genitales proveen
al niño un placer autoerótico. Freud considera que el clítoris es considerado por la niña
como una forma de falo inferior.

En esta fase tienen lugar el complejo de Edipo y el de castración.


Complejo de Edipo:

Freud toma el nombre de la tragedia griega de Sófocles "Edipo Rey", personaje


mitológico que, sin saberlo, termina matando a su padre y casándose con su madre. El
complejo de Edipo es para Freud el fenómeno crucial de la sexualidad en la primera
infancia. Tanto el niño como la niña tienen como primer objeto de amor a la madre.
Para ambos, el padre es, al comienzo, un fastidioso rival.

Al comienzo de la fase fálica los niños y las niñas creen que todas las personas
poseen falo y la diferencia entre tener o no falo se percibe como una oposición por
castración. Cada uno toma rumbo diferente al entrar en lo que Freud
denomina Edipo o complejo de Edipo en el cual primero se da una identificación con la
madre en ambos casos. El niño siente deseos sexuales hacia su madre y al percibir a las
niñas como castradas abandona sus deseos por temor a que le ocurra lo mismo,
creándose en el varón la angustia de castración que lo lleva a identificarse con su
padre. La niña abandona a la madre porque la cree culpable de su castración y surge la
envidia del pene. Sin embargo, se da cuenta de que si es como su madre puede de
acceder a un pene a lo cual reacciona identificándose con ella y aparece el deseo de
engendrar un hijo de su padre.

Definición:

“Conjunto organizado de deseos amorosos y hostiles que el niño experimenta respecto


de sus padres. En su forma llamada positiva, el complejo de Edipo se presenta como en
la historia de Edipo rey: deseo de muerte del rival que es el personaje del mismo sexo
y deseo sexual hacia el personaje del sexo opuesto. En su forma negativa, se presenta
a la inversa: amor hacia el progenitor del mismo sexo y odio y celos hacia el progenitor
del sexo opuesto. Estas dos formas se encuentran, en diferentes grados, en la forma
completa del complejo de Edipo.”5

El complejo de Edipo tiene que ver con la inscripción en el aparato psíquico de una ley
(prohibición del incesto), una falta. Un ordenamiento de las relaciones entre los
sujetos que dan cuenta de que No todo es posible, que todo no se puede (castración)

55
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós, p. 61
El complejo de Edipo desempeña un papel fundamental en la estructuración de la
personalidad y en la orientación del deseo humano. Es un eje de referencia
fundamental de la psicopatología, intentando determinar, para cada tipo patológico,
las modalidades de su planteamiento y resolución.

Es decir, según como se de este complejo y como se resuelva que el sujeto devendrá
neurótico, psicótico o perverso.

Si todo ocurre relativamente bien, el complejo de Edipo (deseos incestuosos) es


reprimido, y la castración (la prohibición del incesto, la falta, “Todo no se puede”) se
inscribe en el aparato, dando lugar a la neurosis.

Esto hace que el aparato se estructure en: consciente/ preconsciente/ inconsciente y


en Ello/ Yo/Superyó.

La represión del complejo de Edipo y de castración y su sepultamiento dan lugar a las


elecciones de objeto, las identificaciones y la formación del superyó. La represión del
complejo de Edipo y castración generan la Amnesia infantil de todas las fases
anteriores

Periodo de latencia

Periodo comprendido entre la declinación de la sexualidad infantil (5-6 años) y el


comienzo de la pubertad. Representa una etapa de detención en la evolución de la
sexualidad. Se observa una disminución de las actividades sexuales, desexualizacion y
la aparición de los sentimientos de pudor, asco y moral. En este período se desarrollan
fuerzas psíquicas que inhiben el impulso sexual y reducen su dirección. Los impulsos
sexuales inaceptables son canalizados a niveles de actividad más aceptados por la
cultura. Freud le llamaba período de calma sexual. No lo consideraba una etapa, ya
que no surge nada dramáticamente nuevo.

Fase Genital:

Fase del desarrollo psicosexual caracterizada por la organización de las pulsiones bajo
la primacía de las zonas genitales. Las distintas zonas erógenas (oral, anal, etc.) se
subordinan al primado de la zona genital. Surge en la adolescencia cuando maduran
los órganos genitales. Hay un surgimiento de los deseos sexuales y agresivos. El
impulso sexual, el cual antes era autoerótico, se busca satisfacer a partir de una
interacción genuina con los demás.

Se resignifica el complejo de Edipo y se termina de definir la posición sexuada (elección


de objeto)

Es importante aclarar que la libido en su recorrido puede sufrir fijaciones y


regresiones.

El diagnóstico en Psicoanálisis

El psicoanálisis distingue tres tipos de estructuras psicopatológicas. El término


estructura hace referencia a la personalidad de cada quien, a su posición en el mundo,
al modo de relacionarse con los otros, etc.

Dichas estructuras son:

- Neurosis
- Psicosis
- Perversión

Dependiendo de cómo se den ciertas operatorias en la estructuración del aparato


psíquico es que cada sujeto devendrá neurótico, psicótico o perverso.

Las estructuras clínicas dan cuenta de la manera que tiene el sujeto de hacer algo con:

– La castración

– el Otro

– El Nombre del Padre

En otras palabras, tendrá que ver con la posición subjetiva, es decir, las relaciones de
un ser humano con su trabajo, con su semejante y, en general, con todo lo que lo
rodea.
Neurosis

Freud la define como “Afección psicógena cuyos síntomas son la expresión simbólica de
un conflicto psíquico que tiene sus raíces n la historia infantil del sujeto y constituyen
un compromiso entre el deseo y la defensa”6

Hablar de neurosis implica hablar de represión, esta es la operación que define la


neurosis. ¿Qué es la represión? Es el mecanismo o proceso psíquico del cual se sirve un
sujeto para rechazar representaciones, ideas, pensamientos, recuerdos o deseos y
mantenerlos en el inconsciente. Para que algo sea reprimido, primero tiene que haber
sido reconocido y luego reprimido. En la neurosis, La castración ha sido simbolizada,
fue afirmada y quedó inscripta aunque no puede ser reconocida y retornará por la vía
de lo reprimido.

Para Freud, la neurosis es el resultado de un conflicto entre el Yo y el Ello. Nace de la


negación del Yo de acoger una tendencia instintiva dominante del Ello. El Yo se
defiende de la misma por el mecanismo de la represión. La tendencia instintiva se
procura una descarga mediante una satisfacción sustitutiva: el síntoma.

Por todo lo dicho podemos afirmar que el neurótico es un sujeto deseante, y el


diagnóstico diferencial en las neurosis se va a establecer en base a como el sujeto
sostenga el deseo.

Dos tipos de Neurosis:

Histeria

El conflicto psíquico se simboliza en lo más diversos síntomas corporales, paroxísticos,


o duraderos. Es la neurosis cuyo mecanismo principal consiste en desplazar la carga
libidinal de la represión del conflicto original a una representación somática. Hay un
predominio de lo corporal.

6
Laplanche J. y Pontalis J., (1997), Diccionario de Psicoanálisis, Bs. As., Argentina, Ed. Paidós, p. 236
Neurosis obsesiva

En su forma más típica, el conflicto psíquico se expresa por los síntomas compulsivos:
ideas obsesivas, compulsión, lucha contra pensamientos y tendencias, ceremoniales
conjuratorios, etc. y por un tipo de pensamiento caracterizado por la rumiación, la
duda, los escrúpulos, la culpa. Los Síntomas privilegian al pensamiento como lugar de
aparición

Las Compulsiones y obsesiones: ambas con carácter forzado, impuesto al Yo contra su


voluntad. El rasgo central de la Neurosis Obsesiva es el carácter de imposición y
coerción que presentan. El sujeto reconoce que su carácter absurdo.

Perversión

Para FREUD Es la Desviación con respecto al acto sexual normal, definido como coito
dirigido a obtener un orgasmo por penetración genital, con una persona del sexo
opuesto. En la estructura perversa ha operado la castración. Sin embargo, esta ha sido
desmentida. El mecanismo de la Desmentida: expresa la afirmación y el rechazo de la
castración materna. Se conserva y a la vez se repudia. Hay un manejo de la angustia -la
habilidad para encontrar y activar en el otro los puntos que despiertan su angustia

Psicosis

La psicosis es el resultado del conflicto entre el Yo y el mundo exterior. Hay una


ruptura entre estos dos. El yo queda a expensas del Ello, desbordado por él. El
mecanismo primordial de la psicosis es la forclusión del Nombre del Padre, la no
inscripción de la castración, de la ley. ¿Que es esto? se produce el rechazo de un
ordenador fundamental, expulsado del universo simbólico del sujeto.

Lacan va a hablar de fenómenos elementales para definir los elementos diagnósticos


de la psicosis. Los fenómenos elementales son los fenómenos psicóticos que pueden
existir antes del delirio, antes del desencadenamiento de una psicosis. Pueden no
estar presentes en el paciente actualmente pero haber tenido lugar en el pasado:

• Automatismo mental: irrupción de voces, del discurso de otros, en la más


íntima esfera psíquica.
• son evidentes cuando ya se ha desencadenado la psicosis, pero
pueden estar presentes con anterioridad.

• Fenómenos que conciernen al cuerpo

• Descomposición, despedazamiento, separación, extrañeza con


relación al propio cuerpo.

Distorsión temporal, distorsión de la percepción del tiempo o dislocamiento espacial.

Certeza absoluta: El paciente puede leer signos en el mundo, signos que le están
destinados y que contienen una significación para él.

• El neologismo: es un significante indefinible, un significante absolutamente


resistente a la operatoria de la definición, ya que no se relaciona con otros
términos.

• Los fenómenos clínicos de la psicosis se caracterizan por lo que Lacan llama


inercia dialéctica y dan cuenta de un déficit en el polo metafórico del lenguaje.

• La alucinación

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