Psicología Clínica

PSICOLOGÍA CLÍNICA
1.1 Enfoques en psicología clínica - Perspectivas de última generación
Los modelos en el campo de la Psicología clínica tienen en común, la acción de ofrecer
un énfasis al análisis del desenvolvimiento de la conducta, tomando la flexibilidad como
criterio de un medio adaptativo ante los diversos problemas. Aun así, en el momento de
ponerlos en práctica se diferencian en su forma de aplicar y sus mismas dinámicas. En los
últimos años, dentro de la terapia de conducta, han aparecido una serie de terapias, que
representan la tercera generación o tercera ola.
En este grupo se incluyen la Terapia de Aceptación y Compromiso:
 ACT
 Psicoterapia Analítico Funcional: FAP
 Terapia de Activación Conductual: BA
1.2 Terapia de aceptación y de compromiso (ACT)
Es una de las terapias más utilizadas y flexibles, ya que se engloba dentro de las
denominadas terapias de tercera generación, que surgieron en la décadas de los años 80
y 90 en Estados Unidos, este tipo de terapias ponen énfasis en el diálogo y el contexto
funcional, a diferencia de las terapias de primera y segunda generación se centraban y
(centran) en combatir los pensamientos automáticos o causantes de malestar y
sustituirlos por otros supuestamente más adaptativos, las terapias de tercera generación
ponen énfasis en el diálogo y el contexto funcional y buscan la aceptación y la actitud no
enjuiciadora como manera de encontrar el bienestar. (García – Allen 2021).
El objetivo central de ACT es el de crear una vida rica y significativa, aceptando el
dolor que inevitablemente viene con ella. Implica aprender a caer y a levantarse, es decir,
elegir nuevamente actuar hacia valores con los eventos privados que sobrevengan por la
recaída.
Por ejemplo, un paciente puede decir que se siente acomplejado y que tiene
mucha vergüenza cuando tiene que hablar en público. Lo importante no es saber si siente
vergüenza o está acomplejado, el objetivo es saber si esta manera de pensar le está
haciendo bien o si le perjudica.
Síntomas en los que se aplica:
• Sintomatología psicótica
• Estrés laboral
• Trastornos obsesivos – compulsivos
• Trastornos de ansiedad
• Adicción a las drogas y tabaco
• Preocupaciones y angustias.
• Intentos de autoeliminación.
1.3 La terapia analítico funcional (FAP)
Según Kohlenberg (2005), nos dice que la psicoterapia analítico-funcional (PAF)
es una forma de terapia de conducta que enfatiza el uso de la relación terapeuta-cliente a
objeto de utilizar con toda su intensidad las oportunidades de aprendizaje que surgen en
la sesión terapéutica (por ejemplo, intervención in vivo). Basada en el conductismo radical
de B. F. Skinner, este produce el cambio a través de contingencias de reforzamiento
naturales y curativas que suceden dentro de una relación terapeuta-cliente emocional,
cercana y con un alto grado de implicación.

El análisis funcional de cada una de las conductas presentes diagnóstico funcional
de la conducta, es en el fácil establecer la importancia y la utilidad de la psicoterapia
Analítico Funcional (PAF). Se observa claramente la línea de trabajo terapéutico, objetivo
que se va a lograr con nuestro paciente, del cual podemos medir y cuantificar los
resultados en una línea base de tratamiento y una línea de salida, nos permitirá elegir las
estrategias terapéuticas para cada conducta concreta que deseamos modificar
(Aumentar, disminuir, fortalecer y/o habilitar) y nos permitirá establecer un cambio a partir
de contingencias del reforzamiento natural.
Durante la psicoterapia analítico funcional, la actuación del terapeuta es de gran
importancia y un pilar básico para el buen funcionamiento terapéutico.
En este tipo de terapia el profesional ha de atender a las conductas clínicamente
relevantes que se produzcan durante la sesión, así como trabajar por construir con el
paciente una relación terapéutica positiva que permita en primer lugar que se expresen
las conductas problema e incluso provocarlas deliberadamente en consulta.
Ha de ser capaz de ver a través del análisis de las conductas y expresiones qué es
lo que refuerza las conductas desadaptativas y la función que estas tienen para el
paciente, así como qué conductas resultan positivas para producir una mejora. Asimismo
ha de motivar y favorecer que aparezcan conductas que produzcan una mejoría en dichas
conductas.
Por último, resulta fundamental generar en el paciente la capacidad de analizar su
propia conducta y visualizar la equivalencia entre sus conductas dentro y fuera de terapia.
1.4 Mindfulness
Santachita y Vargas (2015) nos dicen lo siguiente:
El Midfulness (Mf) es un tipo de psicoterapia basada en el budismo y que tiene un
uso creciente en trastornos de ansiedad, afectivos y por dolor. Una de sus
principales técnicas es la focalización de la atención en el momento presente. Al
tener una fundamentación explícita en las prácticas espirituales budistas, y al
proceder de un entorno cultural oriental, su aplicación clínica debe buscar
mecanismos para facilitar su encaje. (p. 541)
El mindfulness es un procedimiento que inicia sus raíces en la meditación de
tradición budista Zen. Por tanto, desde una perspectiva filosófica-religiosa, no sería tanto
una técnica que se lleva a cabo en un particular, sino una actitud que abarcaría momento
todo el tiempo y que se correspondería con una forma de estar y de contemplar el mundo.
La práctica de Mindfulness permite profundizar la aceptación de si mismo, que
lleva a un mayor sentido de bienestar mental y emocional en el terapeuta, aprendiendo a
reducir y manejar su nivel de estrés. Permite también profundizar cualidades esenciales
de la presencia terapéutica como la empatía y la ecuanimidad.
Vásquez-Dextre (2016), nos dice lo siguientes puntos:
 Atención al momento presente: Centrarse en el momento presente en lugar de
estar pendiente del pasado (rumiaciones) o del futuro (expectativas, deseos y
temores).
 Apertura a la experiencia: Capacidad de observar la experiencia sin interponer el
filtro de las propias creencias.
 Aceptación: Se puede definir aceptación como, experimentar los eventos
plenamente y sin defensas, tal y como son. También como el no oponer
resistencia al fluir de la vida.

 Dejar pasar: Consiste en desprenderse, desapegarse de algo a lo que nos
aferrábamos. Una de las características de nuestro yo es procurar atesorar cosas,
relaciones, poder, dinero. Se cree erróneamente, que cuanto más posea, cuanto
más se controle, cuanto más se consiga, más feliz se será.
 Intención: Es lo que cada persona persigue cuando practica mindfulness. Esto
podría sonar contradictorio con una de las actitudes del mindfulness que es el no
esforzarse por conseguir ningún propósito.
Figura 1
Elementos del Mindfulness
Nota; Imagen recuperada de Ellen Lima (2021). CURSO ONLINE DE MINDFULNESS Y
COMPASIÓN PARA LA SALUD.

Referencias:
García – Allen (2021). Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT): principios y
características. https://psicologiaymente.com/clinica/terapia-aceptacion-
compromiso
Kohlenberg, Robert J., & Tsai, Mavis, & Ferro García, Rafael, & Valero Aguayo, Luis, &
Fernández Parra, Antonio, & Virués-Ortega, Javier (2005). Psicoterapia Analítico-
Funcional y Terapia de Aceptación y Compromiso: teoría, aplicaciones y
continuidad con el análisis del comportamiento. Revista Internacional de
Psicología Clínica y de la Salud, 5 (2), 349-371. [Fecha de Consulta 28 de Octubre
de 2021]. ISSN: 1697-2600. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?
id=33750209
Santachita, Antonio, & Vargas, Martín L.. (2015). Mindfulness en perspectiva. Revista de
la Asociación Española de Neuropsiquiatría, 35(127), 541-
553. https://dx.doi.org/10.4321/S0211-57352015000300007
Vásquez-Dextre, Edgar R. (2016). Mindfulness: Conceptos generales, psicoterapia y
aplicaciones clínicas. Revista de Neuro-Psiquiatría, 79(1), 42-51. Recuperado en
28 de octubre de 2021, de http://www.scielo.org.pe/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S0034-85972016000100006&lng=es&tlng=es.

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1.1 Enfoques en psicología clínica - Perspectivas de última generación

Los modelos en el campo de la Psicología clínica tienen en común, la acción de ofrecer

un énfasis al análisis del desenvolvimiento de la conducta, tomando la flexibilidad como

ponerlos en práctica se diferencian en su forma de aplicar y sus mismas dinámicas. En los

representan la tercera generación o tercera ola.

En este grupo se incluyen la Terapia de Aceptación y Compromiso:

 Psicoterapia Analítico Funcional: FAP

 Terapia de Activación Conductual: BA

1.2 Terapia de aceptación y de compromiso (ACT)

denominadas terapias de tercera generación, que surgieron en la décadas de los años 80

y 90 en Estados Unidos, este tipo de terapias ponen énfasis en el diálogo y el contexto

funcional, a diferencia de las terapias de primera y segunda generación se centraban y

(centran) en combatir los pensamientos automáticos o causantes de malestar y

ponen énfasis en el diálogo y el contexto funcional y buscan la aceptación y la actitud no

enjuiciadora como manera de encontrar el bienestar. (García – Allen 2021).

El objetivo central de ACT es el de crear una vida rica y significativa, aceptando el

vergüenza o está acomplejado, el objetivo es saber si esta manera de pensar le está

haciendo bien o si le perjudica.

Síntomas en los que se aplica:

• Trastornos obsesivos – compulsivos

• Adicción a las drogas y tabaco

1.3 La terapia analítico funcional (FAP)

Según Kohlenberg (2005), nos dice que la psicoterapia analítico-funcional (PAF)

es una forma de terapia de conducta que enfatiza el uso de la relación terapeuta-cliente a

la sesión terapéutica (por ejemplo, intervención in vivo). Basada en el conductismo radical

de B. F. Skinner, este produce el cambio a través de contingencias de reforzamiento

naturales y curativas que suceden dentro de una relación terapeuta-cliente emocional,

cercana y con un alto grado de implicación.

de la conducta, es en el fácil establecer la importancia y la utilidad de la psicoterapia

Analítico Funcional (PAF). Se observa claramente la línea de trabajo terapéutico, objetivo

estrategias terapéuticas para cada conducta concreta que deseamos modificar

de contingencias del reforzamiento natural.

Durante la psicoterapia analítico funcional, la actuación del terapeuta es de gran

importancia y un pilar básico para el buen funcionamiento terapéutico.

En este tipo de terapia el profesional ha de atender a las conductas clínicamente

las conductas problema e incluso provocarlas deliberadamente en consulta.

Por último, resulta fundamental generar en el paciente la capacidad de analizar su

El Midfulness (Mf) es un tipo de psicoterapia basada en el budismo y que tiene un

uso creciente en trastornos de ansiedad, afectivos y por dolor. Una de sus

principales técnicas es la focalización de la atención en el momento presente. Al

tener una fundamentación explícita en las prácticas espirituales budistas, y al

proceder de un entorno cultural oriental, su aplicación clínica debe buscar

mecanismos para facilitar su encaje. (p. 541)

El mindfulness es un procedimiento que inicia sus raíces en la meditación de

La práctica de Mindfulness permite profundizar la aceptación de si mismo, que

lleva a un mayor sentido de bienestar mental y emocional en el terapeuta, aprendiendo a

reducir y manejar su nivel de estrés. Permite también profundizar cualidades esenciales

de la presencia terapéutica como la empatía y la ecuanimidad.

Vásquez-Dextre (2016), nos dice lo siguientes puntos:

 Atención al momento presente: Centrarse en el momento presente en lugar de

estar pendiente del pasado (rumiaciones) o del futuro (expectativas, deseos y

 Apertura a la experiencia: Capacidad de observar la experiencia sin interponer el

filtro de las propias creencias.

 Aceptación: Se puede definir aceptación como, experimentar los eventos

plenamente y sin defensas, tal y como son. También como el no oponer

resistencia al fluir de la vida.

aferrábamos. Una de las características de nuestro yo es procurar atesorar cosas,

más se controle, cuanto más se consiga, más feliz se será.