Interamerican Journal of Psychology 0034-9690: Issn: Rip@
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ISSN: 0034-9690
rip@ufrgs.br
Sociedad Interamericana de Psicología
Organismo Internacional
Compendio
Resulta apropiado señalar la existencia de una tradición española en la aplicación de los con
psicológicos a la prevención de conductas que entrañan riesgo desde la década de los años
protagonistas de la historia fueron, primero, los psicotécnicos en Centros públicos, y luego los ps
Centros privados, la selección ha sido el hilo conector de lo que ha dado en llamarse el Modelo
Evaluación Preventiva. El desarrollo del modelo coincide en una gran parte con el boom de la Ciencia
española. La actual regulación de la acreditación de la aptitud psicofísica necesaria para tener y u
para prestar servicios de seguridad privada obliga a todos los candidatos a acudir a Centros Privados ho
para ser sometidos a una exploración psicológica y física.. Se describe el fundamento del modelo, sus
características y dimensiones, así como una descripción de los instrumentos homologados para llev
la evaluación.
Palabras clave: Evaluación psicológica; armas de fuego.
Abstract
Ever since the 1920s, Spain has traditionally applied psychological knowledge to the prevention of ris
In fact, one of its dimensions – professional driver selection- defined the first legally regulated profe
of psychological intervention in Spain, which became a formal practice before an actual epistemi
even existed in the psychological scene. The story first featured psycho-technicians in public centr
psychologists working in the private sector, selection being the connection all along in the so-calle
Model’ of Preventive Assessment. To a great extent, the development of the model coincides with
Psychological Science in Spain. Current regulations on psycho-physical condition accreditation
possession and use or for private security guards oblige all candidates to go to approved Private
their psychological and physical check-up. The paper describes the basics of the model, its main f
dimensions, as well as the instruments accredited for assessment.
Keywords: Psychological evaluation; firearms.
118 Seguridad, obligando a cualquier aspirante a la tenencia de desarrollados. Sin contar con el se
armas a superar una exploración psicológica de sus prestaciones y utilidades (¡ incluso estét
ARTICULOS
aptitudes psicofísicas. Para estos nuevos exámenes de a sus poseedores hace que también sea
aptitud se recurrió, en función de la historia inmediata de la vida personal y social de los ciuda
(Tortosa & Montoro, 2001; Montoro, Tortosa, Sanmartín, lleguen a ser símbolos de su calidad d
Alonso, & Toledo, 2001), a la psicología experimental El contrapunto económico no es me
sensorial, que utiliza instrumentos de medida que evalúan tenemos en cuenta todos los efectos de
funciones sensoriales, y a través de ellas el estado de erróneo uso de las armas de fuego: ba
funciones psíquicas superiores (enfoque diferencial- laborales, absentismo, pérdida de produ
psicofísico) y de ciertos factores personales (enfoque sanitaria, tramitaciones, peritajes, o ate
diferencial-psicométrico). de secuelas (pensiones por invalidez, orf
Esa faceta del rol profesional del psicólogo se ha unido a etc.). Y ello sin hacer mención de o
otras ya regladas de la (hoy) llamada Psicología de la Seguridad todavía más indeseables derivados del d
(Hoyos, 1992), ayudando a conformar el hoy denominado de las armas: asesinatos, asaltos, viola
Modelo Español de Prevención de Comportamientos violencia, suicidios ... Pero, además, y f
Arriesgados. Una de sus dimensiones, la selección de es un problema personal y familiar de m
conductores profesionales (R.D. 772/97 de 30 de mayo; Ley por su costo psicológico y físico para m
19/2001 de 19 de diciembre), define un rol profesional de Según estima el Instituto Nacional de
intervención psicológica legalmente regulado en España los españoles se accidentan más en el ám
desde hace 70 años (Código de la Circulación de 25/IX/ en el laboral. En el ámbito laboral, en
1934), un modelo de evaluación preventiva que se ha 1.606.999 accidentes, en los que fallecier
desarrollado espectacularmente en los últimos años mientras tanto hubo 1.830.279 accide
(Montoro, Carbonell, Sanmartín, & Tortosa, 1995; Tortosa, vinculados a actividades de ocio y depo
Barjonet, Civera, & Montoro, 2003). vida a 2.072 personas. Estos datos sitúan
El punto de partida de la extensión del modelo fue el R.D. laborales, entre ellos los debidos al mal uso
2272/1985, “por el que se determinan las aptitudes psicofísicas como un problema social realmente impor
que deben poseer los conductores de vehículos y por el que se se ve agudizado si tenemos en cuanto que v
regulan los Centros de reconocimiento destinados a de 300 personas encuentran la muerte me
verificarlas”. Amplía la exploración psico-médica a todos los de armas de fuego cada año.
tipos de permisos de conducir, de carácter profesional o Hablamos de un mal común que aco
particular. Un día después de la publicación del trascendental países, pero que se intenta atajar o, al m
Real Decreto, se publicaba otro no menos relevante R.D., el maneras muy distintas. En la Unión Euro
2283/1985, “por el que se regula la emisión de los informes cifras tan espectaculares como las de EE
de aptitud necesarios para la obtención de licencias, permisos iberoamericanos, africanos o asiáticos, pe
y tarjetas de armas”. cada vez más de manifiesto la importanc
Luego, en cascada, se fueron regulando otros ámbitos: Las relacionada con las armas. A modo ilustra
condiciones para el ejercicio de las funciones del personal de cuenta el indicador de número de Años d
vuelo y pilotos de las aeronaves civiles; las condiciones Perdidos (APVP), las muertes por arma d
psicofísicas requeridas para obtener o renovar las titulaciones tienen un impacto mayor que categorías
para el gobierno de embarcaciones de recreo; las condiciones como enfermedades de la sangre y órgano
psicofísicas para la Tenencia de Animales clasificados como complicaciones del embarazo, parto y puer
LA PSICOLOGÍA APLICADA A LA SELECCIÓN DE ASPIRANTES A LA TENENCIA Y USO DE ARMAS DE
particular para defensa personal; Tipo C: Personal de vigilancia seguido por los grupos de 40-44 y
y seguridad; Tipo D: Arma larga rayada para caza mayor; Tipo casos anteriores, si lo que se toma en
E: Arma de fuego rayada, tipo deportivo, escopetas y demás población cambian los resultados, aho
armas largas de fuego y de ánima lisa, accionadas por aire u el que presenta mayor mortalidad. En v
otro gas comprimido (caza menor); y Tipo F: Armas de tipo en el número de defunciones para
deportivo) supera los tres millones. Obviamente no se dispone conjunto, se puede concluir que los j
de datos sobre armas de Tipo A (Ejercito y FF.AA., policía y años son los que presenta un mayor n
personal de aduanas). El promedio de armas de fuego por cabeza en cifras absolutas, seguidos por los
se aproxima a 0.1 y la tasa de muertos por 100.000 personas años de edad. En cambio, si tenemos e
es de 1 (Chisvert & Monteagudo, 2001; Montoro, Tortosa, & en conjunto son los adultos entre 40 y 54
Sanmartín, 1998). la tasa mayor de mortalidad, seguidos
Si atendemos a las causas de muerte por arma de fuego los jóvenes entre 20 y 24 años.
(según la clasificación de causas de muerte CIE establecida
por la OMS, 2000), la CIE-9 contempla tres categorías Planteamiento de un Problema
principales de causa de muerte por arma de fuego: (1) CIE-9 = A mediados de los años 80 el Bole
922 Muerte por accidente con arma de fuego; (2) CIE-9 = perfilaba un nuevo campo de actu
955 Muerte por suicidio con arma de fuego; (3) CIE-9 = 965 carácter preventivo. Aparecía el R.D
Muerte por homicidio con arma de fuego. Se contemplan otras se regulaba la emisión de los in
dos causas de defunción relacionadas con arma de fuego pero necesarios para la obtención de li
que no consideraremos por su escasa o casi nula incidencia en tarjetas de armas. El Anexo I esta
España: (1) La lesión por intervención legal con arma de fuego denegación, entre ellas algunas qu
(CIE-9 = 970), dentro de la cual durante el periodo de estudio podría denominarse Estado Mental –
se contempla un total de 10 defunciones (3 varones en 1992, (fundamentalmente psicopatolog
2 varones en 1994, y un varón en los años 1990, 1993, 1995, establecía otras de orden aptitudinal,
1996 y 1997). (2) La lesión por arma de fuego en la que se el profesional del Centro podría d
ignora si fue accidental o intencionalmente infligida (CIE-9 = permiso de armas, en aquellos cas
985.0 a 985.4) de las cuales solo encontramos 6 (un varón en indicios de cualquier enfermedad, l
1991, otro en 1993, y 4 en 1997). aún no estando incluida entre las enunc
Así, durante el periodo 1990-1997, más de 3.000 personas por su gravedad, evolución o pronóst
han perdido la vida en España, accidental o intencionadamente, de validez, lo hiciera aconsejable.
por lesiones infligidas por armas de fuego; alrededor de 400 La ambigüedad propia de la redac
personas/año (INE, 2000). Existe un absoluto predominio de (1985), referente a la intervención
los hombres sobre mujeres en las tres categorías de causas de eliminada por desarrollos normativ
muerte con arma de fuego (CIE-9), sobre todo en las de 137/1993 por el que se aprobaba el r
accidente y suicidio, algo menos en la de homicidios, y ello y R.D. 2364/1994 que hacía lo prop
pese a que la población española es mayoritariamente femenina. de Seguridad Privada). Esa ambigüe
La categoría más relevante es la de suicidio, y no sólo de un modelo previo llevó a que se ad
actualmente sino en el último medio siglo, categoría en la que sin investigación propia, al evoluciona
singularmente el uso de armas de fuego es muy destacado de conductores (Montoro, Carbone
(Agudo, 1990; Cabrera, 1986; Gutierrez, 1995; Chisvert & Serra & Tortosa, 2003; Tortosa, Ca
FRANCISCO TOLEDO, LUIS MONTORO & CRISTINA CIVERA
120 Psicología de la Universidad de Valencia bajo la dirección del o, lo que es lo mismo, que existen fac
profesor Tortosa, el Proyecto Determinación de las variables que favorecen o incitan a hacer daño a
ARTICULOS
y criterios psicológicos para la obtención del permiso de uno mismo. También aparecía explíc
armas, con el objetivo de evaluarlo posteriormente y, en su exploración preventiva, mediante instru
caso, legislar a partir de sus resultados. El proyecto se llevó a de aspirantes a utilizar instrumentos pe
acabo entre 1993 y 1996, fue evaluado en 1997, y propició un Ocupaban lugar relevante entre las v
importante cambio normativo en 1998 (R.D. 2487/1998 de los aspectos aptitudinales (intelig
20 de Noviembre, que regula la acreditación de la aptitud perceptomotrices, tiempo de reacción
psicofísica necesaria para tener y usar armas y para prestar general), junto a otros de personalidad
servicios de seguridad privada). los propiamente cognitivos (Tortosa, Ch
1994). Son dimensiones fuertemente
Afrontamiento del Problema medida en que suponen aproximacione
La normativa ponía de manifiesto la necesidad de evaluar al problema decisional respecto al uso/n
aspectos normales y patológicos de funcionamiento psíquico. La aproximación tradicional ha trata
Por ello, la determinación de las variables clave, los diferencias en el nivel intelectual ge
instrumentos de evaluación y los criterios conformaron el aptitudes para explicar y predecir la to
objetivo a lograr. Se buscó precisar cuáles eran las dimensiones mientras aproximaciones más actua
psicológicas que podían facilitar la comisión de interacción de procesos que deben ser
comportamientos peligrosos con armas, partiendo de una forma más compleja, siendo ejemplo p
definición de riesgo basada en el perfil de peligro (Pollatsek de Decisiones (Alonso & Esteban, 1998
& Tversky, 1970; Slovic, 1987, 1992). Yates, 1990), un proceso en el que la
El objetivo señalado se articuló en tres fases: (1) Actualizar sesgos (Yates & Stone, 1992), la evaluac
la información sobre variables psicológicas y disposición de riesgos eran elementos clave (Hale
de armas mediante una amplia búsqueda documental, Zimolong, 1988; Pidgeon, 1988, 1991;
obtener la información relevante y llevar a cabo un análisis
Proceso Experimental
documental; (2) Determinar un conjunto de variables y
Determinación de las Categorías de
criterios que optimizasen el proceso de evaluación de los
Se definieron, a partir de los acuer
aspirantes a la obtención o renovación del permiso de
en el análisis de la literatura especializad
armas; y (3) Plantear sugerencias y desarrollos técnicos
de diagnóstico. Cada una incluía caracte
que pudiesen mejorar la exploración psicológica. El
psicológicas individuales que podían fa
ambicioso programa de investigación fue produciendo
malos usos de las armas, puesto que est
informes (Tortosa, Carbonell, Chóliz, Civera, & Bañuls,
relacionadas con la aparición de conduc
1993-1996), y comunicaciones públicas (Tortosa, 1996,
lesivas. El acceso a armas podía actu
1997, 2000; e. g., Tortosa, Chóliz, & Carbonell, 1994,
potente catalizador, con las consiguien
1997; Tortosa & Durán, 1996).
negativas. La primera categoría de varia
síntomas (e. g. conductas, estados de ánim
Resultados del Análisis Documental recurrentes) asociados a comportamie
Existía abundante corpus bibliográfico sobre aspectos que, aún en ausencia de un trastorno,
psicológicos relacionados con la explicación del comisión de acciones peligrosas
comportamiento, la prevención ó, en su caso, la intervención premórbida). Las dimensiones básicas
en temas relacionados con tenencia y uso/mal uso de armas de
LA PSICOLOGÍA APLICADA A LA SELECCIÓN DE ASPIRANTES A LA TENENCIA Y USO DE ARMAS DE
122 en la literatura psicodiagnóstica; (7) baremos recientes en Atendiendo a los resultados obtenido
ecuación canónica de predicción que clasif
ARTICULOS
Existe una compartida consideración del arma de fuego El manejo de armas es una de estas s
como una importante fuente de riesgo (directa e la evaluación aptitudinal para la concesión d
indirectamente) para la Salud. No sólo es que las armas pueden debe prestar atención a ciertos perfiles, ra
causar lesiones o muerte a uno mismo o a otro/s (o ambos), personalidad, que aunque no definen ning
también está bien documentado eso que puede llamarse efecto ni configuran un patrón estable de ano
violencia, un rubro que identifica el valor de armas u objetos constituir factores de riesgo para la segu
que pueden causar daño o que sugieren la violencia, como normativa, pues, en los modelos dimensi
propiciadoras de comportamientos agresivos, especialmente dentro de un enfoque disposicional de la p
en quienes ya presentan una constelación de disposiciones que eso, el Reglamento subraya la necesidad
pueden favorecer este tipo de conductas (López-González, de personalidad tales como neuroti
1992). Esa preocupación prácticamente delimita un campo de agitación, fuerza del yo, y complementar
acción ideológica, axiológica, económica y vivencialmente e hipocondría. De este modo, con ind
muy cargado, en el que confluyen profesionales e instancias evaluación clínica de la personalidad, la reg
diversas. de armas exige además una evaluación ps
Como cualquier problema de esta índole, no bastan las centrada en ciertos rasgos o factores norma
medidas interventivas posteriores a un inadecuado uso de las estructura factorial de personalida
armas. Son básicas las acciones preventivas, el crear una cultura potencialmente asociados a situaciones d
de seguridad (Montoro, 2000; Pidgeon, 1998; Montoro, La otra categoría novedosa de variabl
Tortosa, Sanmartín, Alonso, Molina, Pastor, Civera, & Esteban, los procesos psicológicos que por acción
2000; Tortosa, 2000). Entre ellas la evaluación psico-médica facilitar la comisión de conductas lesivas
de quienes aspiran a obtener o renovar sus licencias. La estos aparecen como relevantes las prop
legislación específica las enfermedades, deficiencias y toma de decisiones, que se ha enfocado de
trastornos incompatibles con la tenencia y manejo de armas.
relacionada con las decisiones inseguras
Y lo hace apoyándose en sugerencias procedentes de la
con la tendencia excesiva a aceptar riesgos.
investigación. Esta ha mostrado que, además de las propias
de decisiones como variable a evaluar,
condiciones situacionales, incluso de las transitorias, parecen
deficiencias, un avance en la profundizac
existir numerosas variables relacionadas con la aparición
reconocimiento. Planteó inicialmente un p
ocasional de comportamientos peligrosos. Entre estas destacan
la práctica inexistencia de pruebas de
unas más aptitudinales, pero que permiten obtener información
adecuada capacidad decisional, basándos
sobre las estrategias y niveles de procesamiento de la
aspectos parciales, que aunque tienen imp
información, junto a otros de personalidad/psicopatología, y
no explican la totalidad del proceso. Situació
las propiamente cognitivas. Las novedades frente a otros
el desarrollo de nuevos instrumentos (e. g.
ámbitos reglados de exploración, los marcadores de riesgo
1998-1999; Montoro, Tortosa, Sanmartí
asociados a la personalidad y el proceso decisional.
Los Trastornos de la personalidad están contemplados Pastor, Civera, & Esteban, 1999; Tortosa
como un subapartado de los denominados Trastornos mentales & Civera, 1996-1997).
y de conducta, junto a otras nueve categorías de trastornos La nueva situación ha continuado pote
psicológicos, si excluimos los trastornos por uso de sustancias. los Centros de Reconocimiento como
En su caso, el diagnóstico requiere de una exploración previa preventivas, ya que anualmente chequean
de tres millones de españols que aspiran a
LA PSICOLOGÍA APLICADA A LA SELECCIÓN DE ASPIRANTES A LA TENENCIA Y USO DE ARMAS DE
recibido había sido muy correcto; (5) Nueve de cada diez Referencias
usuarios manifestaba que el reconocimiento contribuye
Agudo, E. (1990). Estudio epidemiológico del s
significativamente a la Seguridad. En todos los casos sin periodos 1931-1950 y 1961-1980. Psiquis, 30
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las mujeres tendían a ser más críticas, y las personas de mayor vehículos y el manejo de armas. In L. Monto
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edad tendían a valorar más la contribución del reconocimiento reconocimiento de conductores y permiso de
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mortalidad por armas de fuego en España. In
formación el radical interés por la comprensión y explicación Sanmartín (Eds.), Curso de psicología par
de los comportamientos y las experiencias subjetivas, sobre reconocimiento de conductores y pe
prodúzcanse éstos en el contexto en que se produzcan, o, como Valencia, España: Intras.
Chisvert, M., & Monteagudo, M. J. (2001). Es
en el caso que nos ocupa, se muestren como desadaptativos e mortalidad por armas de fuego en España.
incluso anormales, llegando a adoptar cualquiera de las varias Sanmartín, F. Alonso, & F. Toledo (Eds.), M
formas patológicas que han sido descritas y ordenadas por los y seguridad (pp. 7-20). Valencia, España: In
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161, 1-23.
acreditadas. Con ello se pretende más que predecir el mayor o Hoyos, K., & Zimolong, B. (1988). Occupa
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establecer (o prever) el nivel de deterioro, o de posible Instituto Nacional de Consumo, (2000). Estudios
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No se puede perder de vista que el objetivo de la legislación, Kahneman, D., Slovic, P., & Tversky, A. (Ed
y el de quienes la implementan, no es impedir el acceso a las uncertainty: Heuristic and biases. New York,
armas, sino conseguir que quienes lo alcancen, las mantengan Press.
Ley 19/2001 de 19 de Diciembre. Boletín Oficia
y utilicen con responsabilidad y control. Una posibilidad que
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