NO TE CONTAMINES

Tito 2
11 
Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvació n a todos los hombres,
12 
enseñ á ndonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos
en este siglo sobria, justa y piadosamente,
13 
aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestació n gloriosa de nuestro
gran Dios y Salvador Jesucristo,
14 
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y
purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.

Si hablamos de que algo está contaminado inmediatamente debemos entender que su

estado original es puro o limpio.
No se puede contaminar algo que ya esta contaminado, se contamina algo que este
limpio.

Entonces Hablamos de contaminación cuando en un entorno ingresan elementos

o sustancias que normalmente no deberían estar en él y que afectan su equilibrio.
Por ejemplo: Si hablamos del medio ambiente se pueden presentar varios tipos de
contaminació n
Quiero mencionar 5 de ellos a los cuales con frecuencia nos enfrentamos o nos
hemos enfrentado en algú n momento:

 Contaminación hídrica.
Afecta a ríos, lagos y mar cuando se liberan residuos contaminantes. Este tipo de
contaminació n ambiental afecta directamente a las especies animales, vegetales y
también al ser humano ya que convierte el agua potable en un recurso no apto
para su consumo.

 Contaminación del suelo
Se da por sustancias químicas usadas en la agricultura, por las baterías de los
teléfonos celulares, las pilas o los vertederos porque liberan sustancias nocivas que
se filtran en el suelo. Afectando la calidad y productividad del suelo. Hay
pérdida de minerales y eso provoca la pérdida de vegetació n. 

 Contaminación acú stica.
Se produce con cualquier ruido excesivo Ademá s de ser muy molesto, puede
provocarnos estrés, trastornos del sueñ o, pérdida de audició n e incluso afecciones
cardiovasculares. Por ejemplo en mi casa los fines de semana toda la noche hasta
las 5am del otro dia suena mú sica de bares y discotecas cercanas, a muchos les ha
afectado situaciones como esta.
 Contaminación lumínica.
Se produce especialmente en las grandes ciudades durante la noche y hace
referencia a la iluminación artificial excesiva que emiten las poblaciones.
Hay ciudades como las vegas en EE. UU. Que nunca duermen porque sus
establecimientos funcionan 24/7 y esto produce enfermedades como las
relacionadas con la visió n, alteraciones del sueñ o y también migrañ as.

 Contaminación visual.
Hace referencia a todos los elementos que no son naturales y que nos envían
estímulos visuales. Pueden ser vallas publicitarias, torres eléctricas o minas a cielo
abierto. Todo ello perjudica a la salud de los ojos, altera la tensió n y produce
estrés.

Entonces podemos notar que la contaminació n genera Pérdida o disminució n de

recursos naturales.

No estamos en clase de biología pero quiero que haya mucha claridad en que
Así como en el medio ambiente la contaminació n altera su equilibrio natural usted
y yo como hijos de Dios también nos podemos contaminar ESPIRITUALMENTE y
sufrir serias consecuencias y quizá muchos se preguntaran: pero contaminar en
qué?

Entonces es ahí donde quiero recordar que Dios no solo creo a una naturaleza pura
y productiva sino también, creo a un hombre y a una mujer puros y sin mancha, los
creo conforme a su imagen, tan puros era que eran amigos de Dios , hablaban con
Dios , tenían una relació n cercana con Dios.
Pero tristemente el hombre y la mujer tomaron una mala decisió n, y esa mala
decisió n fue desobedecer al mandato de Dios que era no comer del fruto del á rbol
del bien y el mal.

Cuando ellos tomaron ese fruto y lo comieron inmediatamente se contaminaron de

pecado y por ende de muerte, porque el pecado trae consigo muerte.
Santiago 1:15 Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado;
y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte.

Todos conocemos la historia, adan y eva fueron desechados del huerto y perdieron
todo beneficio, perdieron todos los recursos que Dios había provisto para ellos , y
peor aun , perdieron lo mas importante, la comunió n con Dios.
Empezaron a enfermarse, a sufrir dolor, a saber que era el trabajo duro, y
conocieron también la muerte. Porque se habían contaminado de pecado.

Sin embargo Dios siempre se ha interesado por cuidar y limpiar al hombre, El

siempre ha querido que el hombre regrese a su estado original, un estado de
pureza.
  Es por eso que a través de Moisés establece para el hombre una serie de
normas de higiene con el fin de mantenerlos a salvo de las enfermedades
algunas de ellas está n en:

Levítico 15: 4-27

Deuteronomio 23:12-13
Levítico 14:8-9
Levítico 5:_2-3
Números 19:16

En ellos dice que debían bañarse y lavar sus ropa, que para hacer sus necesidades físicas
debían salir del campamento con una palita y tapar sus excrementos, si estaban enfermos
debían estar en cuarentena y muchas veces lejos del campamento para que no contaminaran a
nadie y si tocaban un cadáver también debían estar aislados. Todo esto con el fin de que no se
contaminaran ni se enfermaran.
Estos eran cuidados externos pero el Señ or también estableció leyes que llevaban
al hombre a estar en comunió n con Dios y los volvían a un estado de limpieza
espiritual, entre esas leyes estaba el que no debían mezclarse con pueblos
extranjeros.

Tristemente el pueblo de Israel siempre desobedeció a Dios y le fallo, siempre

terminaba contaminá ndose de pecado y creando una barrera entre Dios y el
hombre.

Hay muchos ejemplos en la biblia que corroboran mis palabras pero voy a
mencionar 2 historias bíblicas muy conocidas.
1: por un lado esta Sansó n (jueces 16)
Un hombre al que Dios doto de mucha fuerza, al cual le dio muchas victorias lo cual
lo hizo ser muy reconocido en su generació n. Pero este hombre no quiso escuchar
por má s que sus padres le dijeron no obedeció y se contamino uniéndose a una
mujer extranjera l cual lo engañ o, lo manipulo y lo entrego a sus enemigos, los
cuales lo torturaron y se burlaron de él hasta que se cansaron y su final fue morir
junto con sus enemigos. Todo por contaminarse de pecado al lado de una mujer
que lo hizo alejar de su creador.

2: la segunda historia es la de Salomó n (1 reyes 11) el hombre má s sabio en toda la

historia, Dios lo doto de tanta sabiduría que fue reconocido por todo el mundo,
tenía mucha riqueza, su territorio era muy extenso y logro reinar en paz por
muchos añ os, Dios lo inspiro a escribir muchos de los textos que leemos en la
biblia y ademá s dirigió la construcció n del templo. Era un gran hombre pero ya
siendo viejo se dejo contaminar de pecado, se mezcló con mujeres extranjeras las
cuales lo condujeron a adorar a otros dioses y definitivamente eso le costó su
comunió n con Dios.

Y así sucedió muchas veces con el pueblo de Israel, se contaminaban de cosas

externas y le fallaban a Dios.

Que no sea este nuestro caso, no nos contaminemos. No te contamines no le falles a

Dios.
Israel le fallo a Dios, pero Dios nos ha abierto la puerta a nosotros para que seamos
su precioso pueblo, sus hijos, su real sacerdocio, su nació n santa.

No te contamines, aunque estemos en este mundo no somos de aquí nuestra

ciudadanía es celestial, nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también
esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;
No nos arriesguemos a perder esta salvació n tan grande, má s bien seamos fieles a
Dios que el a su debido tiempo nos recompensara.

Que nos puede contaminar?

Los malos pensamientos

Por eso (Proverbios 4:23 habla la palabra de Dios que sobre toda cosa guardada,
guarda tu corazón; porque de él mana la vida)
El corazó n al que se refiere no es al ó rgano que bombea sangre; es a la mente
donde se maquinan todos los pensamientos

Las malas palabras

( efesios 4: 29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea
buena para la necesaria edificació n, a fin de dar gracia a los oyentes)
Hay palabras que no deben ser usadas por nosotros porque no lucen en nuestro
lenguaje, las palabras deshonestas, las palabras de murmuració n, las palabras de
chisme, las de maledicencia, esas palabras nos contaminan.

Las malas intenciones

(san marcos 21 
Porque de dentro, del corazó n de los hombres, salen los malos
pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,
22 
los hurtos, las avaricias, las maldades, el engañ o, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la
soberbia, la insensatez.)
Dios conoce lo que hay en nuestro interior quisa delante del hombre podamos
aparentar, pero a Dios no lo podemos engañ ar el descubre nuestro corazó n y si le
damos cabida a las malas intenciones en nuestro corazó n nos podemos contaminar
también.

Las malas amistades

Proverbios 13:20 El que anda con sabios, sabio será; mas el que se junta con necios
será quebrantado
Debemos entender que necesitamos estar rodeados de personas que nos ayuden a
crecer, que nos aporten al conocimiento.
Hay un dicho popular dime con quién andas y te diré quien eres. Aunque estamos
en el mundo, no somos del mundo y como nuestra ciudadanía es celestial, nuestro
comportamiento debe ser digno de los hijos de Dios

El doble sentido
(Proverbios 4:24 Aparta de ti la perversidad de la boca,
Y aleja de ti la iniquidad de los labios.)
Participar de las malas conversaciones o reírnos de las cosas que se dicen con
doble sentido también nos contaminan
La avaricia
(1 timoteo 6: 10 porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual
codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos
dolores. )
Muchas veces ponemos nuestra mirada en las cosas materiales solamente y
descuidamos nuestra comunió n con Dios, el corazó n del hombre se contamina y
termina estando lejos de Dios.

Iglesia del Señ or joven, niñ a, anciana, adolescente, amigo que me escuchas, No TE
CONTAMINES.

Tito 2
11 
Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvació n a TODOS NOSOTROS,
12 
ESTE EVANGELIO NOS ENSEÑ A que, renunciando a la impiedad y a los deseos
mundanos, PODEMOS VIVIR en este siglo sobria, justa y piadosamente,
13 
aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestació n gloriosa de nuestro
gran Dios y Salvador Jesucristo,
14 
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y
PURIFICARNOS PARA SI COMO un pueblo propio, CELOSO DE BUENAS OBRAS.

Yo le invito en este momento a orar, no se cuá l sea su estado, no sé si está

contaminado por algo o si hay algo en su entorno que lo quiera contaminar,

Presentémonos delante de Dios y yo no sé usted pero yo quiero estar para Dios

purificada, limpia, viviendo en comunió n con El.

Señ or Jesú s presento mi vida delante de ti, tú conoces mi levantarme y mi acostarme , cada
pensamiento de mi corazó n tú lo sabes, te pido que mi conciencia siempre este limpia
delante de ti, que cada paso que dé me acerque a ti, no quiero fallarte nunca no quiero
alejarte de mí, Señ or no quiero contaminarme de las cosas del mundo quiero vivir en
santidad para ti, honrarte con mis palabras y aun mas con mis hechos, si ves algo malo en
mi corrígeme Señ or, límpiame de toda maldad.
Ayú dame Señ or te lo pido por favor cada día guá rdame en el hueco de tu mano, nunca
quiero soltarme de allí, gracias Señ or Jesú s. Amen.